Partida Rol por web

- Mejor que los capturemos ahora, un par de cazas no vienen mal y podemos sacar información de esos dos, puede que incluso sepan algo que nos haga ganar más dinero.

Ya había dicho lo que pensaba, ahora ya le tocaba al resto del grupo, no era plan perder el tiempo, pero ahora tenían una buena oportunidad, pillar dos cazas TIE les podría dar libertad de movimientos dentro del espacio imperial, o como mínimo volver a venderlos y sacar beneficios.

- ¿Y tener que arreglarlos en medio del espacio para poder utilizarlos? no cuentes conmigo. Los remolcamos al volver y lo que saquemos por la chatarra un extra se nuestros beneficios... el 50%

Kimbria hizo una pausa, como si pensara algo.

- Y los engancharemos al volver. Los TIE me parecen un lugar tan bueno como cualquier otro para tenerlos encerrados y si tardamos más de 5 horas... esperemos que no vinieran desde muy lejos.

 Miré a Kimbria molesto por lo que sus palabras implicaban:

 - Dejarlos aquí podría ser el equivalente a un asesinato. Además de ser una muerte lenta y horrible. Yo voto por rescatarlos y tratar de obtener información de ellos. Luego podemos encerrarlos hasta dejarlos en algún lugar civilizado o, si son buscados, entregarlos a las autoridades para que paguen por sus crímenes. - Agregué con tono de decepción. - Seguro que si hubiera recompensas por ellos, no estarías tan reticentes a ir a por ellos.

"Yo también apoyo la idea de atrapar a estos tios, y no os preocupéis por si dan problemas" enseño la pistola blaster pesados bothan, "Siempre la tengo en modo aturdidor, así que no os preocupéis, aparte no nos viene mal pillar un par de cazas extra y con las mejoras para que tendrán para su autonomía extra, harán que cueste una fortuna, y no sera una mala idea un poco de fondos extra"

Se sorprendió cuando Kimbria se desentendió de los prisioneros... en esos momentos le habría pegado un puñetazo. Pero no podía, en primer lugar porqué era noble, y eso le acaerraría problemas si le hacían un juicio los tribunales militares de la rebelión, y en segundo lugar porqué pese a todo apreciaba a la tripulación, ella incluida.

Pero no por ello estaba a gusto con lo que acababa de decir.

Dejarlos aquí podría ser el equivalente a un asesinato. Además de ser una muerte lenta y horrible. Yo voto por rescatarlos y tratar de obtener información de ellos. Luego podemos encerrarlos hasta dejarlos en algún lugar civilizado o, si son buscados, entregarlos a las autoridades para que paguen por sus crímenes. - Agregué con tono de decepción. - Seguro que si hubiera recompensas por ellos, no estarías tan reticentes a ir a por ellos.

-Lamento decepcionaros, princesa -dijo a Kimbria que era noble, pero que él supiera nada de princesa. Con un tono un poco más áspero de lo que habría querido- pero estoy de acuerdo con el Jedi. Me uní a la rebelión para escapar de esas prácticas propias del Imperio... y no pienso volver a eso. Tenemos trajes espaciales, iremos a rescatarlos; dudo mucho que se resistan porqué se condenarían a si mismos. Y nos los quedaremos.

Se dió cuenta que su tono no era de propuesta, sino de que "eso era lo que iba a pasar". Sus principios no eran negociables, y todo aquel que se opusiera a ellos, se estaría oponiendo a lo que Ray era a día de hoy. Sin embargo, le supo mal hablar de esa manera, así que para suavizarlo añadió:

-Además, tened en cuenta que esos prisioneros podrían darnos información sobre nuestra competencia. Y quizás podamos evitarnos más problemas con esa información.

Luego hablaron sobre la nave y Ray, cuando hubieron dicho la suya, dijo lo que tenía en mente:

-No creo que sea prudente venderla, cualquiera podría preguntar que nave las arrastró y crearnos problemas. Por otra parte, si las logramos reparar, y estoy seguro de que podremos, serían un añadido interesante para la rebelión tener dos cazas imperiales. Las posibilidades són enormes. Podriamos incluso avisar a mi hija, para saber si hay alguna nave para remolcar esas chatarras y llevarlas a alguna base para su reincoporación a la causa.

-Voy a acercar la nave-dijo Ayuz por el comunicador- Dacen, irás con otra persona a por ellos. Solo una oportunidad, si cualquiera de esos dos cretinos nos ponen en peligro los tiro de la nave-advirtió- no pienso dejar que dos piratas pongan en peligro la misión. Y espero que no nos crucemos con el tal Geelo por su bien...-dijo mientras comenzaba la maniobra.

-Ray, contacta con tu hija y preguntale si necesita esas dos chatarras. Si no nos da una solucion las hacemos desaparecer. Me gusta el dinero, pero lo que me faltaba ahora es que los imperiales piensen que les hemos robado unos cazas y nos persigan.

- Tenéis la piel muy fina. Nadie ha hablado de abandonarlos ni dejarlos morir. He hablado de prioridades y de no crearnos más problemas - custodiar a unos prisioneros mientras exploramos la nave. Rescatémoslos a nuestra vuelta. ¿Qué información creéis que van a tener que nos interese ahora mismo? A mí no me compensan los problemas que nos van a generar si los rescatamos ahora.

Y añadió, incrédula

- ¡Y claro que creo que arreglar esos cazas puede ser una gran idea! Lo que me parece una estupidez es hacerlo ahora, antes de hacer lo que hemos venido a hacer. ¿Cómo sabemos que no hay más grupos en camino y que pueden sorprendernos reparando?

-Información del tipo, cuantos más están merodeando y de que dispositivos disponen. No creo que sea baladí sacar algunas respuestas.

Al parecer, la noble estaba un poco acelerada, así que la dejó desahogarse y luego dijo llanamente:

-Bueno, creo que nadie dijo de repararlas ahora, milady. Y respondiendo a vuestra pregunta, quizás lo sepamos si interrogarmos a los prisioneros. Podéis tranquilizaros, no darán problemas, tengo las herramientas necesarias para dejarlos tranquilos.

Luego se dirigió a la sala de comunicaciones, tras sonreir hacia Ayu, que al parecer estaba de acuerdo con él. Le alegró un poco, aunque pudiera parecer una tontería que la joven fuera... más joven anímicamente que el resto.

-Iniciando enlace de transmisiones. ¿Aquí "Libertad", me reciben?

Esperaba que por su parte, Ayu iniciara el proceso de recuperación.

- Adelante, iré ensayando el "os lo advertí". Desde luego lo que no debemos hacer es seguir perdiendo el tiempo. Proceded a rescatarlos y masajearlos lo que consideréis oportuno y me avisáis cuando estéis preparados para la verdadera misión.

Y tranquilamente se dirigió a los pilotos

- Cuando los cazas estén amarrados ¿podríamos poner rumbo a la nave y comenzar el escáner? Despacio, no se mareen los prisioneros.

- Kimbria no hace falta enfadarse tanto, estamos asegurando nuestro avance, al cogerlos podemos saber si el otro crucero tiene más cazas o de que clase es, eso si merece la pena, aparte de obtener algunos créditos extra que no vienen mal y recuerda que no somos los malos aquí, no matamos por matar, en el mundo de los contrabandistas nunca sabes quien puede ser tu amigo mañana.

Aunque en algo tenían razón, estaban perdiendo un tiempo preciosos en que otra gente podría estar dirigiéndose a su posición y quitarles el botín, no vendría mal darse algo de prisa.

- De todas maneras, cuantos antes tengamos a esos desgraciados a bordo mejor, así nos podemos ir derechos a lo nuestro.

A pesar de la disconformidad de Kimbria, la mayoría de vosotros opta por capturar los TIE y por eso no tardáis en dividiros, con Ayuz'bepa encargándose de pilotar la nave, con Ray dirigiéndose a la sala de reuniones y con el resto dirigiéndose a la cubierta inferior y a las esclusas que comunican con las naves acopladas.

Empleando la identificación de la última comunicación de tu hija y asegurándote que la conexión sea segura, te comunicas con ella.

-Aquí “Sabueso Corelliano”*… -responde una voz que te es más que conocida aunque luego de un breve silencio vuelve a hablar- Momento ¿papá? ¿Qué sucede?

Tras explicarle la situación actual a Seku, la joven twi’lek te pide unos minutos para hablar con vuestro oficial superior y también para comunicárselo con los ingenieros ya que su evaluación determinará la utilidad y el coste de reparar y mantener esos TIE operativos. Luego de un tiempo en silencio, tu hija te responde.

-Por el momento, esos TIE no nos servirán de mucho pero también podríamos quedárnoslos por las dudas y así ahorrarnos tener que capturar uno cuando sea necesario -comenta Seku- En otras palabras, el comandante Caran os da libertad de acción. Si queréis, podéis venderlos y usar los créditos para seguir operativos pero también podéis entregárselos a la Rebelión y tras pasarnos las coordenadas enviaremos a alguien en su búsqueda. Eso sí, como estamos cortos de fondos no podremos pagaros en metálico aunque gracias a nuestros contactos podríamos conseguiros ciertos objetos o mejoras para vuestra nave como compensación.

Tras intercambiar un par de palabras más con tu hija, te despides de ella y luego de cortar la comunicación te reúnes con tus compañeros.

Con cuidado ya que los TIE no soportarían otro golpe, Ayuz'bepa acerca lentamente vuestra nave a los cazas y los engancha de a uno empleando las abrazaderas de acoplamiento. De inmediato, os dirigís a las esclusas de la cubierta inferior y armas en mano tomáis posiciones. Una vez que Nina consigue piratear la entrada de la cabina del primer TIE, esta se abre y veis de inmediato que en su interior hay un hombre de aspecto marcial con una fea cicatriz a causa de una quemadura en su mejilla derecha, quien rápidamente os apunta con una pistola blaster.

-Mierda… -murmura al veros y rápidamente os arroja su arma y levanta las manos.

Tras ordenarle que salga de la cabina, este lo hace y sin perder tiempo le ponéis las esposas que lleva Kimbria para luego aseguraros de que no lleva oculta ninguna otra arma. Una vez que el prisionero está asegurado, lo ponéis de rodillas y dejando que Trasher lo vigile, vais en busca del segundo piloto.

Repitiendo el mismo proceso que antes, la entrada de la cabina del segundo TIE se abre y descubrís que su ocupante es un muchacho que apenas cumplió la mayoría de edad y que a diferencia del anterior, tiene más aspecto de granjero que de piloto o de soldado. El joven levanta las manos de inmediato y tras sacarlo de la cabina, lo registráis sacándole el blaster que lleva, le ponéis unas esposas que os pasa Raalo y lo lleváis junto con el otro prisionero.

Luego de que Ayuz y Ray se reúnen con vosotros, este último tras contactar con su hija, os disponéis a interrogar a los prisioneros pero el neimoidiano se os adelanta.

-Así que vosotros sois los exploradores de Geelo -les dice Raalo- Bonitas naves os ha dado.

-Si… -responde cabizbajo el muchacho.

-Así es, trabajamos para ese engreído rodiano, y esas naves son unos cacharros -responde el piloto de la cicatriz con un tono que demuestra el poco aprecio por su jefe- ¿Y quiénes son todos estos? ¿tus guardias?

-No, no son mis guardias sino una especie de socios -responde el neimoidiano- ¿Dónde está tu jefe?

-Jefe y un cuerno, solo es mi empleador y espero que sea temporal -dice el piloto con su mal carácter- No lo se pero lo más probable es que el capullo esté en Tatooine comiendo y bebiendo mientras espera nuestro informe.

Ayuz negó con la cabeza, no le gustaban los saqueadores pero desde luego no parecían peligrosos.

-Ray, asegurate de que no hagan ninguna tonteria-le dijo- Si hay algo interesante comunicadmelo, me vuelvo a la cabina-dijo la twi'lek saliendo de la sala. Demasiada gente para interrogar a dos payasos que no sabían ni donde se metían.

Vaya pandilla mas rara el veterano si tiene pinta de saber lo que hace, pero el muchacho bastante tiene con no haberse meado encima delante de la gente.

- Bueno podéis ser buenos chicos y decirnos que nave tiene aquí vuestro jefe, y si tiene más cazas para incordiarnos - luego mirando al joven con una gran sonrisa - y de donde has salido tu chaval? No creo que encajes en la vida de pirata.

Nina ya deja que los demás hablen, al menos un rato antes de ir a por la carga.

 Miré interesado a ambos prisioneros, tratando de deducir de donde era cada uno. Finalmente me dirigí al muchacho en primer lugar:

 - ¿Este es tu primer trabajo?. No tienes aspecto de pirata veterano. - Le pregunté con amabilidad. - ¿Como te llamas y de donde eres?.

-¿Piratas? Ja, somos carroñeros, capullos. Si fuéramos piratas por lo menos ganaríamos una parte del botín conseguido pero no, somos empleados de un carroñero que nos tira migajas mientras él se queda con la mayor parte -interviene el de la cicatriz- Y respondiendo a vuestra pregunta ya que por lo visto sois duros de oídos, os lo repito: aquí no hay ninguna nave más, nosotros somos los exploradores y Geelo debe estar esperándonos en Tatooine.

-Soy Vert Fargen, de Tatooine -responde el muchacho tras levantar la cabeza- Y si, es mi primer trabajo aunque no soy pirata, solo piloto.

-En realidad es su segundo trabajo, el muchacho era un granjero de humedad o mejor dicho, uno de los tantos hijos de un granjero -interviene el hombre- Ya sabéis como es la historia, un chaval ignorante que está cansado de romperse la espalda trabajando y que quiere ver mundo sin saber que la realidad es peor que la de su granja…

-¿Es que no sabes mantener la boca cerrada, idiota? -dice enojado el joven.

-¡Bah! -se limita a responder el de la cicatriz mientras mueve los hombros.

 A continuación miré al otro hombre, mientras me cruzaba de brazos y le miraba con interés:

 - ¿Y cual es tu historia, soldado?. ¿Separatista o República?. No eres un vulgar matón, todo en ti rezuma a alguien que a estado en el frente y a recibido instrucción militar.

- Venga vamos, todos os creéis que han llegado hasta aquí con dos TIE? Si que sois fáciles de convencer, ha estos los han traído aquí en otra nave y el tipo duro no quiere soltar prenda, pero bueno seguid preguntando cosas inútiles, así no conseguimos nada...

Estoy segura de que hay otra nave ahí fuera, y nos puede pillar por sorpresa como no andemos con cuidado.