Partida Rol por web

Afortunadamente, Alia había logrado controlarse y rechazar la oscura proposición. Sabía que había tenido que costarla mucho pues su caracter, aunque temperamental era noble y la tentación de salvarnos era demasiado grande. Además, estaba el esfuerzo de controlar su sangre. Sin embargo y aunque Alia había logrado contenerse, Lyna y Arion no parecían hacer lo propio. Mientras que la primera trataba de retener al chico con la fuerza, Arion fue más imprudente y corrió en pos del sith.

¡ARION NO! PUEDE SER UNA TRAMPA -advertí a a mi compañero alzando la voz. Seguramente el sith quería que le persiguieramso para llevarnos a una emboscada.

Tratando de calmar los nervios cerré los ojos y traté de percibir alguna señal del futuro para actuar lo más rapidamente posible en consecuencia. Si era una emboscada no me pillaría por sorpresa.

Todo ocurrió bastante deprisa, y casi a la vez. Lyna trató de empujar al aprendiz de Sith, mientras Arion le seguía con rapidez y Mowar alertaba del peligro. Alia también gruñó y se lanzó a la carrera tras el muchacho vestido de negro...

Sin embargo, y sin duda haciendo uso de la Fuerza, el chico que se llamaba Darth Phiras corrió a toda velocidad escabulléndose por el pasillo del que había venido. Arion lo siguió y descubrió que no había ni rastro de él. Sólo podía ver el pozo a la derecha, silencioso... y más allá la sala en la que se apilaban las cajas de suministros.

No obstante se dio cuenta de algo. Algunas de las cajas que antes habían estado bien colocadas, ahora estaban por los suelos, abiertas y vacías, con su contenido desparramado por el piso de piedra. ¿Tal vez el Sith había chocado con ellas al pasar? ¿O simplemente las había derribado con la Fuerza para dejar una pista falsa...?

Aunque muy nerviosa por todo lo que estaba pasando, Mowar se obligó a cerrar los ojos y concentrarse una vez más.

La neblina del Lado Oscuro no le dejaba ver con claridad, pero sí pudo distinguir la silueta de Arion y su sable láser azul, abriéndose camino por la sala del almacén, en dirección a una puerta abierta.

Luego, la visión ya nebulosa de por sí, acabó disipándose...

Saliendo del trace en el que me habíasumido salí lo más rapido que pude tras mis compañeros, tratando de estar atenta a los estimulos de la fuerza que pudiesen indicarme que aquello se trataba de una trampa.

La advertencia de Mowar hizo que el joven padawan se detuviese lentamente, paso a paso. Una arruga de preocupación frunció la frente del muchacho, que observó el desaguisado de la sala con evidente disgusto...

"Si que es habil... Su dominio y control de la Fuerza es muy buena... No me gustaría tener que batirme con el y su habilidad con el sable de luz..."

El trote tranquilizador de sus compañeras al llegar a su lado, surtió un efecto revulsivo en Arion, que desconecto con rápidez su espada laser y se puso en cuclillas.

"Muy bien, joven aprendiz" -Musitó para sí, mientras deslizaba la punta de los dedos por el suelo, moviendose lentamente por entre los trastos desparramado por el suelo- "¿Estas jugando con nosotros... O has salido huyendo?"

La escena que se abría ante los ojos del aprendiz estaba llena de destrucción, mas o menos aleatoria... "¿Puede que halla huido... o puede que este utilizando sus poderes para ocultar su presencia, ofuscando nuestros sentidos...?"

Arion levantó la vista y entrecerró los ojos, mientras recorría la habitación con una mirada inquisitiva, expandiendo sus sentidos en busca de evidencias del uso de habilidades de la Fuerza...

Arion se concentró todo lo que pudo, tratando de evadirse de las preocupaciones y la tensión, para dejarse llevar por la percepción de la Fuerza. Después de unos segundos, fue como si las cajas le hablaran. En efecto, habían sido derribadas con violencia hacía pocos segundos. ¿Cómo era que no habían oído nada...?

Sin embargo, no había ni rastro del Sith. ¿Por dónde podían ir ahora?

Alia sudaba profusamente, con el ceño fruncido y los dientes apretados.

- ¡Maldita sea! -exclamó con frustración-. No podemos quedarnos aquí como tontos... ¡separémonos y aplastémosle!

Sin embargo, no se movió. Miró a sus compañeros, esperando que secundaran su rudimentario plan. Había dos caminos, y si todos iban por uno, quizá no encontraran al enemigo...

No será necesario - Dije, corriendo con el sable encendido por la puerta- Sólo ha podido ir por ahí, no siendo que se haya esfumado. -Miro a mis compañeros y añado- ¡no os quedéis ahí parados, venga! ¡Tenemos que sacar a nuestros compañeros!

Lyna. Ten cuidado- respondo a la chica-Razona. Si nosotros estabamos a un nivel y vosotros a otro, Theen y Nop no estarán aquí. Además yo confío en ellos. Estoy segura que han salido...¿O crees que los maestros dejarían ir a padawans que no fuesen capaces de abrir una puerta como insiuaba ese chico?

Cada vez estaba más convencida de que ese chico trataba de hacernos caer en una trampa. Nosotros teniamos que salir de allí y, siempre y cuando fuese posible, encontrar a los otros chicos y a nuestros maestros...

Arion gruñó, visiblemente molesto ante la perspectiva que se abría ante él y sus compañeros... "Estan jugando con nosotros... y puede que estemos siendo victimas de algún perfido truco mental sith... Pero tenemos que ponernos en marcha... El tiempo corre en nuestra contra y nuestros camaradas pueden estar en peligro, por muy habiles que sean."

Se levantó y movió el cuello, arrancando un crujido a sus tensas vertebras... "Separados somos más vulnerables, Alia. Si seguimos juntos, les será más dificil derrotarnos... Y el camino que propone Lyna es tan bueno como cualquier otro." Diciendo esto, el joven aprendiz se acercó a su compañera Gungan a grandes zancadas... "Entiendo tú postura, padawan Nin y estoy deacuerdo contigo. Nuestros compañeros son más que capaces de salir de una celda y probablemente nuestro visitante quiere guiarnos hacia una trampa..." Arion sonrió abiertamente a su camarada... "Y, como la sabemos, podemos darle una sorpresa... Haciendola saltar en sus narices..."

Se alejo un paso y giro la cabeza buscando la aprobación de todo el grupo.

"¿Nos ponemos en marcha?" Con un habil molinete, el padawan afianzo su sable de luz y lo encendió, iluminado el pasillo con una suave luz azulada.

Sonrío ante la actitud de Arion, y le doy una palmadita en la espalda - Venga, Mowar... Por una vez que parece que tengo razón... ¡Déjame disfrutarlo! . Adelanto mi paso hasta la vanguardia del grupo y avanzo convencida con mi sable láser listo. en cuanto a a las aptitudes de mis compañeros... No sé, pero yo les ví más verdes que Kashyyk. Bueno, seguro que han podido salir de la celda.

Alia torció un segundo el gesto, contrariada. Si el Sith les había tendido una celada y había ido por el otro sitio, no podrían encontrarlo y darle su merecido... Pero quizá sus compañeros tuvieran razón, y fuera preferible permanecer unidos.

- Bien, de acuerdo -concedió de mala gana.

Aún mantenía los dientes apretados de furia, y deseaba más que nada encontrarse cuanto antes con aquél muchacho vestido de negro para darle una lección. Pero de momento, se centró en seguir a sus compañeros por el camino de la puerta.

Los cuatro jóvenes aprendices se dirigieron a la puerta. No habían explorado aún esa parte del complejo laberinto de roca... por lo que sabían que tenían que estar preparados y juntos.

Estaban a punto de llegar a la puerta, para abrirla con la Fuerza como las anteriores, cuando de pronto escucharon un grito proveniente del pasillo que seguramente habría detrás de ella.

- ¡¡Eeeeeeh!! ¡Chicos, estamos aquí!

Se pararon en seco al oírlo. No cabía duda, ¡era la voz de Nop, su compañero zabrak!

Sonrío algo divertida ante la situación... Una habilidad deslumrante, ¿eh, Mowar? - Dije por lo bajo - Aguantad, ahora mismo os sacamos de ahí. -Hago un gesto con la mano e intento mover la pesada puerta.

Lyna alzó sin demasiado esfuerzo la puerta metálica, que respondió al instante como habían hecho las anteriores. Lo que vio frente a sí fue un largo pasillo, con un par de puertas a la izquierda. De la primera puerta, que estaba entreabierta, asomaba la cabeza y medio cuerpo de Nop Rish, el zabrak.

Cuando les vio, les hizo un gesto con la mano, mientras una sonrisa adornaba su rostro. Estaba claro que se alegraba de verles.

El padawan humano sonrió ampliamente al descubrir que su menudo compañero zabrak estaba sano y salvo. Con una palmada en la espalda de Lyna, para felicitarla por el esfuerzo, se adelantó en pos de Nop Rish.

"¿Todo bien, amigo? Tenemos que encontrar a Thee y salir de aqui... Hay un muchacho malhumorado que se ha  enamorado de Alia y puede que nos de problemas" Añadió en tono de chanza...

Dijo estamos aquí..Thee debería estar con él...además...hay algo raro...

Abrid la puerta con la Fuerza y continuemos- indiqué no si recelo. Aunque no parecía haber ningún peligro, prefería que fuesen ellos los que saliesen por sus propios medios y se acercasen. Me parecía extremadamente raro que no hubiesen salido y temía que fuese algún truco mental de nuestro captor. Tanto Theen como Nop parecían lo suficientemente diestros como para salir de esa prisión

Yo... Estoy de acuerdo, Mowar. - Dije, mirándola con el ceño fruncido- Aquí hay algo raro... -Sonreía a Nop y a Theen y dije, sonriendo: ¡Chicos! ¡Venid por aquí, hemos descubierto una posible salida! -Comprobemos si son de verdad...