Partida Rol por web

Thanes de Carrera Blanca

3. Buscando un Refugio para un Vampiro.

Cargando editor
01/05/2014, 10:50
Narrador

Uthgerd se había mantenido en un obstinado silencio tras las confesiones de Suro. Su semblante se mantuvo torvo, pero pareció reflexionar sobre lo que el explorador le había dicho. A pesar del rencor que parecía guardar a los Compañeros, también les guardaba respeto. La herida que había reabierto Suro nunca había cicatrizado del todo, y tal vez Uthgerd hablara de ello más tarde con el batidor.

Pero llegó el momento de que os separárais. Khaled tenía asuntos que resolver en Cauce Boscoso, y Uthgerd se ofreció a acompañarlo. Os despedísteis de él, y tratasteis de buscar un refugio seguro para Aerin antes de que llegara inexorable el amanecer. Pero no resultaba fácil encontrar un lugar a cubierto en la inmensa llanura al sur de Carrera Blanca. Cuando Suro se temía que íbais a tener que cabalgar más de la cuenta, y bordear Cauce Boscoso para buscar algún refugio por el Sur, Karin os ofreció una solución.

La poetisa había tenido acceso a la imponente colección de tratados del Colegio de Bardos de Soledad, y sus estudios de geografía habían sido bastante concienzudos. Recordaba la localización aproximada de unas antiguas minas de hierro al noroeste de Cauce Boscoso, conocidas como La Sangrera. El hierro se había agotado hacía años, y el Jarl tenía que enviar guardias a despejar las minas de proscritos y malhechores de tanto en cuanto.

Faltaba sólo una hora para que despuntara el alba cuando escuchásteis el ladrido de un perro en la lejanía. Procedía de los alrerdedores de una pequeña cabaña de troncos y tejado de paja. De modo que se os abría una nueva posibilidad: podíais solicitar la hospitalidad de quien quiera que habitara en esa casita o podíais probar suerte con la Mina de la Sangrera y sus bandidos.

Por acelerar las cosas he asumido que Karin tomaba 10 en su tirada de Saber (Geografía) para localizar las Minas de la Sangrera. Son de cosecha propia, no las busquéis en el mapa.

La he elegido a ella porque era la que tenía más bonificador :P.

Cargando editor
01/05/2014, 11:37
Suro

- Si queréis, puedo ir a ver si la mina está ocupada o ha vuelto a quedar libre. Si no, podemos pedir refugio en la cabaña... 

Cargando editor
01/05/2014, 11:47
Volshyene

—No me gusta la idea de pernoctar con otras personas, mientras llevemos con nosotros a Aerin —dijo Volshyene, un poco cansada. Había sido una noche larga—. Además, nos falta un miembro, de modo que somos más débiles ante una emergencia. Ese Khaled... al menos podía haber dicho a qué se marchaba.

La maga reflexionó un momento antes de decidirse:

—Yo opto por las minas. Pero antes... deberíamos averiguar quiénes habitan esa cabaña, por si acaso. Van a estar muy cerca de nosotros, después de todo. Podrías echar un vistazo, Suro... o podría echar yo una ojeada por medios mágicos. Como queráis. Ve a preguntar si quieres, y si no se saca nada en limpio siempre podría cotillar yo un poco.

Cargando editor
01/05/2014, 12:09
Suro

Notas de juego

Máster ¿Distancias? ¿Tiempos? ¿Me da para acercarme a ambos lados y ver lo que hay?

Cargando editor
01/05/2014, 12:12
Karin

- A mí tampoco me gusta mucho acercarnos a gente inocente con un vampiro en el petate. Pero en la mina... - Karin sonrió con malignidad. Podrían lanzar a Aerin como a un perro de ataque en caso de emergencia. Luego pensó en Suro y añadió: - olvidadlo, es una estupidez

Pero tampoco le gustaba seguir restando compañía al grupo. Con Khaled y Uthgerd fuera, perdían gran parte de su capacidad para ejercer el tipo de violencia que podrían necesitar con un vampiro y unos bandidos. Además, si Suro se iba a la mina y Aerin tenía...problemas de adaptación, otro tendría que mandarle a mejor vida, y eso no sería bueno para nadie.

- Estoy con Vol. Sigamos juntos - concluyó con un gesto tan tranquilizador como pudo

Cargando editor
01/05/2014, 15:25
Elynea

No sé vosotros pero yo no tengo tanta cara como para pedirle al primer propietario que veamos por ahí que le de alojo a ocho personas—gruñó Elynea formando una linea recta con las cejas—. La mina nos va a ahorrar bastantes explicaciones al amanecer. Si está vacía, mejor. Y si no lo está, mejor para la comarca: Menos bandidos en ella cuando acabemos de limpiarla. Aunque sí aconsejaría esperar a Khaled antes de entrar.

Eso suponiendo que apareciese antes del alba, ¿qué estaba haciendo aquél idiota que tardaba tanto? Tan solo esperaba que no tuviese que ver con cervezas y camareras.

Miró a Suro.

—Aunque les puedes ir a preguntar si últimamente han visto grupos cerca, eso sí sería de ayuda.

«Ahora solo falta que los bandidos fuesen los de la caseta» añadió mentalmente con un inusual humor negro.

Cargando editor
01/05/2014, 15:56
Suro

Suro esbozó una sonrisa, su rostro se transformaba completamente en los pocos momentos que sonreía.

Si hay que hacer preguntas amables, mejor Karin.

Cargando editor
02/05/2014, 15:27
Karin

Karin sonrió, complacida de que se reconocieran sus habilidades, hizo un gesto afirmativo a Suro.

- Bien. Me puede acompañar Thadeus, disfrazado, por ejemplo, para inspirar más compasión, ¿Qué tal llevas tus ojitos de niña triste preocupada por los bandidos? - preguntó con un guiño

Luego, con la información y quizá con un poco de sopa caliente, podrían pensar mejor y realizar adivinaciones. Seguro que Vol podría ver algo. La señorita Ojo Invisible tenía que hacer honor a la canción que le había compuesto...Se preguntó si Elynea también sería capaz de predecir, aunque seguro que sí que era capaz de hacer algo daédrico y que se saldaría con muertos y heridos. Entre eso, Suro, las habilidades de Thadeus y su propia persona, podrían manejar los bandidos que hiciera falta, esperaba...

Cargando editor
03/05/2014, 14:03
Thadeus Allectus

Thadeus frunció el ceño ante el contratiempo; Khaled desaparecido y el grupo dividido, y a él le tocaba la parte del vampiro. Genial. 

-Tendremos que acercarnos a la cabaña para conseguir algo de información, y mis ojitos de niña preocupada por los vampiros... digo por los bandidos - el mago sin utilizar magia alguna puso cara llorosa e infantil, sabiendo que quedaría extraño en ese momento, pero una vez utilizada magia para disfrazarse quedaría perfecta.

Después cambió a una expresión serena, afirmando que se apuntaba a lo de preguntar por la cabaña.

-Tantos huéspedes en una cabaña yo tampoco lo veo factible, así que tendremos que informarnos bien sobre las minas. Ah, y lo mismo podría intentar convencer a alguno de los bandidos para que sea nuestro mayordomo, o una ayuda a la nutrición de Aerin; después de todo son bandidos, ¿qué mas da utilizar magia de control sobre ellos?

Thadeus lo decía con toda naturalidad, sobre todo para ver las reacciones de los presentes; prefería intentar que aquel contratiempo supusiera incluso una comodidad en su estancia, puesto que la magia de encantamiento podía lograr que todo aquello acabase de manera mucho más sencilla. Además, era una forma de hacer "amigos"...

Cargando editor
03/05/2014, 18:51
Lothar

Os acercásteis a la cabaña mientras el perro seguía ladrando. Se trataba de una casita sencilla, rodeada de un pequeño huerto y un corral con un par de gallinas. De su interior salió un anciano, demasiado despabilado como para acabar de levantarse. Llevaba una túnica de lana azul ceñida a la cintura con sencillo cabo de soga. Desde luego no era el tipo de hombre que pudiera vivir en las cercanías de una guarida de bandidos y vivir para contarlo.

—Tranquilo, chico —dijo en anciano, y el perro abandonó la actitud hostil de inmediato y volvió junto a su amo. Esbozó una afable sonrisa y salió a vuestro encuentro —. Saludos, viajeros. Aún no he desayunado, y podría compartirlo con vosotros junto a mi fuego si gustáis.

Cargando editor
03/05/2014, 18:58
Lothar

Del interior de la cabaña surgió un anciano. Llevaba una túnica de lana azul ceñida a la cintura con sencillo cabo de soga. Desde luego no era el tipo de hombre que pudiera vivir en las cercanías de una guarida de bandidos y vivir para contarlo.

El perro dejó de ladrar y se puso junto a su amo. El anciano saludó a vuestros compañeros y empezó a hablar con ellos.

Cargando editor
03/05/2014, 19:30
Karin

Karin sonrió. Sonrió de verdad. Había descubierto a lo largo de sus andanzas que había pocas cosas mejores que la hospitalidad de unos granjeros. Tenían poco y lo compartían con sonrisas, y sonrisas tenían muchas. ¿Cómo no iba a amar al pueblo de Skyrim cuando era el único en cuya gente se podía confiar para tales cosas?

La bardo saludó desde el caballo, inclinándose todo lo posible para que el anciano no tuviera que alzar tanto el cuello para mirarla, una posición muy incómoda para alguien de su edad, sin duda.

- Bienhallado - dijo con simpatía -. Nada nos agradaría más que compartir tu hospitalidad, amigo, pero me temo que seríamos una carga excesiva, pues somos seis en realidad

Pensó en cómo abordar el tema sin parecer grosera. Si decía que Aerin estaba herido, seguro, seguro, seguro que aquel hombre los invitaba a entrar y se ofrecía a cuidar de él. Cosa que bajo ningún concepto iba a permitir Karin. Era curioso cómo había casi bromeado con el vampirismo hacía pocos minutos y entonces, al pensar en exponer a una persona inocente a las atenciones de un vampiro se le revolvía el estómago.

- Nuestro plan es descansar durante el día en la Sangrera para poder continuar al amparo de la noche - alzó las manos con gesto inocente, sabía lo que podían parecer esas palabras -. No somos ladrones, te doy mi palabra, pero viajamos intentando no ser vistos porque nos han dicho que hay bandidos en los alrededores y no queremos problemas

"Bueno, es casi, casi, casi verdad"

 

Cargando editor
03/05/2014, 20:50
Lothar

—Así que no sois ladrones. Dime, muchacha, si vais armados y os escondéis de los bandidos, ¿qué sois entonces? —dijo Lothar, mientras la palabra "cobardes" flotaba en el aire. El anciano se encogió de hombros—. Si le tenéis tanto miedo a los forajidos, la Mina de la Sangrera no es vuestra mejor opción. Estaréis más seguros bajo mi techo.

Cargando editor
03/05/2014, 23:36
Thadeus Allectus

El mago previamente utilizó un conjuro con el que cambiar su aspecto: esta vez al de una niña pequeña, de unos 6 o 7 años con ropa de viaje y mochila, y con una daga que le quedaba enfundada en el cinturón como si de una espada larga se tratase para un adulto. 

Cuando se acercaron a la cabaña, Karin llevó la voz cantante; no podía ser de otra manera, por lo que el mago puso una carita inocente y preocupada para mirar a Karin:

-¿Nos podemos quedar? Mi gatita tiene hambre y se me ha acabado el queso -dijo con cara inocente-. Aunque no sé qué opinará el Primo Martin. ¿Le decimos que este hombre tiene sitio para todos?

Thadeus puso una voz tierna, para parecer realmente una niña pequeña, y hablaba acariciando a Medea con poco cuidado como si el manejo de sus manitas fuera aun precario.

- Tiradas (1)
Cargando editor
04/05/2014, 09:34
Karin

Karin maldijo por lo bajo ante la "ayuda" de Thadeus. Estaba jugando su papel de niña a la perfección, incordio incluido. ¡No podían meter a Aerin en la granja de una persona inocente! Punto. Pero había habido algo que había hecho daño a su corazón nórdico...cobardes.

- Como puedes ver, amigo, no sólo viajamos luchadores en mi compañía - dijo señalando a Thadeus la niña -. Viajo con gente a la que no quiero exponer a los peligros del camino

Mantuvo el gesto, pero estaba algo ofendida.

- No quiero ser desconsiderada, señor, pero no querría abusar de la hospitalidad de un buen hombre sin poder darle nada a cambio. Nos arriesgaremos en la Sangrera, ¿Hay bandidos entonces? ¿Qué se sabe de ellos? 

Cargando editor
04/05/2014, 09:52
Lothar

El disfraz de Thadeus era convincente. Su voz, no.

—Ya veo que aparte de luchadores también tenéis magos —dijo el anciano, sin dejarse engañar por la ilusión—. No sé mucho de esos bandidos, aparte de que su líder es un nórdico sanguinario llamado Sigvatr por el que se ofrece una recompensa en Cauce Boscoso. Se cree una especie de Elegido de Mehrunes Dagon.

Resopló.

—Esos forajidos vinieron a mi casa hace unas semanas pensando que podrían robarme lo que quisieran. No se esperaban a un Maestro de la Voz. Ni qué decir tiene que me dejaron en paz en cuanto sufrieron en sus carnes el Arte Nórdico Verdadero. No han vuelto a aparecer por aquí.

Karin, eligiendo 10 en Saber (Historia), es consciente de que es rarísimo que un Maestro de la Voz no sea un Barba Gris. Y que es aún más raro que un Barba Gris no esté en Alto Hrothgar. Podéis hacer tiradas adicionales de Saberes a vuestro criterio para conocer más acerca de los Barbas Grises.
 

Cargando editor
04/05/2014, 13:58
Thadeus Allectus

El mago, aun teniendo el disfraz de niña, decidió utilizar su voz más varonil para la siguiente respuesta:

-Quería probar mis dotes interpretativas, pero veo que la próxima vez debería confiar en la magia para que me cambie la voz. En fin, no sabíamos qué nos íbamos a encontrar señor, si una voz amable con la que conversar o alguien que se mostrase hostil -carrspeó adaptándose a su propia voz-. Y como bien dice mi amiga, no queremos abusar de la hospitalidad, y puede que tengamos medios para despachar a esos malechores. ¿Sabe si disponen de magia? Sería interesante para prepararnos ante el enfrentamiento.

Desde luego que aquel no parecía mal hombre, y no quería molestarlo con la visita de un vampiro a su casa. Además, era alguien capaz de despachar a unos bandidos para que no se volvieran a acercar a él; quizá debieran proteger a Aerin del propio anciano.

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

¿Tiro algun saber historia? Por si acaso lo tiro a ver si saco algo.

Cargando editor
04/05/2014, 14:35
Narrador

Los Barbas Grises son una orden antigua y honorable de monjes que viven en silencio en el antiguo monasterio de Alto Hrothgar, cerca de la cumbre de la garganta del mundo. Son los lenguas (o maestros de la voz) más famosos. Siguen las enseñanzas de Jurgen Llamador del Viento, que creía que la voz era un medio para alcanzar la iluminación. Jurgen llamó a su nueva filosofía “el camino de la voz” y predicó un estilo de vida meditativo y de estudio de la voz que los Barbas Grises han llevado hasta nuestros días.

Son los mayores expertos en La Voz o Thu'um, una forma de magia antigua en forma de Gritos que se manifiesta como el aliento de un dragon.

Cargando editor
05/05/2014, 08:18
Karin

Karin entrecerró un poco los ojos. ¿Qué, en nombre de todo, era aquel anciano? ¿Un fanfarrón? ¿Una trampa? ¡Y para colmo Thadeus no había sabido aguantar ni dos segundos a que se les ocurriera una mentira convincente! "Verá señor, es que a mi amigo le persiguen los Thalmor, a los que seguro odia porque es nórdico, le rogamos que no haga más preguntas y nos ayude un poco". No, si al final iban a tener que hablar de Aerin...

- ¿Un Maestro de la Voz tan lejos de Alto Hrothgar? ¡Eso si que es una historia! - sonrió Karin, decidida a alejar la atención de su grupo y a recabar información mientras su cabeza funcionaba a toda potencia -. Mi nombre es Karin Voz de Kyne, Bardo educada en Soledad, me honra conocer a un Maestro del Arte Antiguo, sin duda eres la razón por la que ésos buitres bandidos se ocultan en las lomas y no atacan más abajo

- Tiradas (2)

Notas de juego

No sé si puedo tirar bardo para algo como lo de los Barbas Grises ^^U tiro historia de momento, tiro Persuasión por si acaso :D

Cargando editor
05/05/2014, 10:07
Narrador

Los Barbas Grises son una orden antigua y honorable de monjes que viven en silencio en el antiguo monasterio de Alto Hrothgar, cerca de la cumbre de la garganta del mundo. Son los lenguas (o maestros de la voz) más famosos. Siguen las enseñanzas de Jurgen Llamador del Viento, que creía que la voz era un medio para alcanzar la iluminación. Jurgen llamó a su nueva filosofía “el camino de la voz” y predicó un estilo de vida meditativo, pacifista y de estudio de la voz que los Barbas Grises han llevado hasta nuestros días. Pese a que los Barbas Grises aceptan casi todos los que muestran talento para la voz, pocos pueden seguir su exigente estilo de vida; figuras de renombre como Balgruuf y Ulfric Capa de la tormenta se han visto incapaces de dominar el camino de la voz o de llevar el estilo de vida monástico que se espera de los Barbas Grises.

Debido a su estilo de vida meditativo, suelen vivir muchos años. Siempre han sido un grupo pequeño y no tienen ningún poder real en la estructura política de Skyrim. Sin embargo, son muy respetados por todos nórdicos, y en las raras ocasiones en que dan bendiciones, asesoramiento o consejo suelen ser escuchados. Incluso los Thalmor los respetan, pese a ser conocidos por despreciar a toda la humanidad.

La voz combinada de los Barbas Grises es una fuerza imparable. Se dice que su grito combinado redujo a Ysmir Wulfharth a cenizas. Según otra leyenda, Tiber Septim lideró la invasión de Viejo Hroldan y utilizó por primera vez el poder de la voz para recuperarlo de los brujos de Roca alta. Se produjeron tormentas cuando, a lo lejos, los Barbas Grises hablaron convocando a Tiber a Alto Hrothgar. Cuando los Barbas Grises dijeron el nombre de Talos se dice que el mundo entero se sacudió. Lo llamaron Ysmir (Dragón del norte) y le dijeron que gobernaría todo Tamriel, pero que para ello necesitaba dirigirse hacia el sur, a Cyrodiil.

No se sabe exactamente en qué momento de la primera era se formaron los Barbas Grises, ya que no se conoce el momento exacto de los siete años de meditación de Jurgen Llamador del Viento. Lo único que se sabe es que ocurrió después de la derrota de los nórdicos en montaña roja alrededor de 1E 700. Sin embargo, los nórdicos ya habían sido expulsados de Morrowind siglos antes, alrededor de 1E 416 y en los cinco cantares del rey Wulfharth se sugiere que los Barbas Grises ya existian antes de la muerte de Wulfharth en 1E 533.