En su regreso con el grupo, Dimrod hizo una parada ante Elacar para preguntarle sobre los turnos de guardia durante la noche, que después expuso hacia estos.- ... los turnos de noche estarán dispuestos por tres guardias en cuatro turnos de dos horas.- ¿Alguien se ofrece voluntario(y en que turno)?-
Aunque al principio no me interesaban mucho los relatos del medio-elfo y al permanecer no muy lejos de la dama, pues como entretenimiento no lo hacía nada mal el Tahúr…
Luego Dimrod se dirigió a nosotros pidiendo voluntarios para las guardias – Yo me ofrezco voluntario, el último turno estaría bien para mí… a no ser que esté completo…
Después de ver como se marchan los enanos y el hobbit a dar el paseo acabo de escuchar la historia del medioelfo. Se le da bien captar la atención del a gente, un punto a su favor cuando está jugando a las cartas. Cuando Dimrod nos cuenta lo de las guardias me ofrezco voluntario para realizar una de ellas.
-A mi no me importará realizar al primera o la segunda guardia.
- Yo preferiria la primera, ya que estoy despierto aprovecho - dice Vârkim
Me siento en una ronda de gente, y veo que todos están muy animados, cosa que me pone sereno, distiende la tensión que venía acumulando en el primer tramo del viaje.
Al escuchar la pregunta formulada por Dimrod pienso que me gustaría hacer una guardia, por mi inutilidad hasta hoy en los distintos accidentes, pero sé que en caso de lucha yo sería más impedimento que ayuda, y tras pensar y repensar las posibilidades, decido, armandome de un valor que no conocía decir:
Yo no sería útil como guardia armado, pero soy bueno observando y ocultandome, si es de utilidad, me ofrezco a alejarme un poco del grupo, esconderme y observar, para poder dar la alerta a los guardias en caso de necesidad, hay buenos lugares para esconderse entre los árboles y más en la oscuridad de la noche, - propongo tímida, aunque fuertemente y añado - en el turno que mejor les parezca
- Yo podria hacer guardia tambien, incluso toda la noche si luego se me permite dormir durante el dia en una de las carretas, no tengo problema - miro a Dimrod para intentar saber que opina al respecto. - Si no creeis necesario el estar todos alerta durante el viaje, podria pasar la noche en vigia, esta y quizas las restantes - añado para intentar convencer a Dimrod y al resto del grupo.
Despues espero que se tome una decision. Tras el ataque a Melyanna, sé que si quiero que las cosas salgan bien, debo hacerlas yo mismo, como decia mi difunto padre.
- Bueno, creo que con vosotros ya será más que suficiente. Los demás puestos los cubrirán los hombres de Elacar.- dijo hacia el grupo.
- Entonces las guardias quedan así...-
Vârkim, Lunadan y Yuma cubrirán ellos solos el primer turno.
Nagredog lo hará desde el segundo al cuarto, y en este ultimo estará acompañado de Emyr.
escucho atentamente las dispociciones de la guardias, y luego, dirigiendome a Varkim pregunto
Señor Vârkim ¿le parece si me alejo un poco, y hago guardia escondido? ante cualquier movimiento extraño, vendria sigilosamente a avisarle a usted y al señor Lunadan, asì estarìamos precabidos-
Si la respuesta es afirmativa, me alejo lenta y sigilosamente hacia unos arbustos no a màs de 200m, me escondo y comienzo a vigilar a la distancia, (me alejo en la direccion a la que vamos, no de la que venimos)
Si es negativa, ya veremos
- Esta bien pero no te alejes mucho Yuma podrian sorprenderte de todas maneras y tener problemas, quedate justo al limite de la luz de la hoguera, fuera del circulo de las caravanas.
Alraim, que estaba un poco alejado del grupo ensimismado en sus pensamientos, se acerca para añadir
Si os parece bien acompañaré a Nagredog durante el segundo turno.
- No hace falta, habra días de sobras para que todos hagamos guardias. Además, no vamos a hacer todo el trabajo de los hombres de Elacar.-
En el tiempo, este mensaje y el de Alraim iban antes que el vuestro(Yuma, Varkim)
Tuvisteis éxito en la tirada para la enfermedad.
Al siguiente día- ¡Parad la caravana. Paradla. Por favor!- gritó mientras unas pocas lágrimas recorrían sus mejillas.
- Alto.- Paro la caravana Elacar. Se acercó a la carreta pertinente y preguntó.- ¿Qué ocurre?-
-..y se ha desmayado.- dijo con angustia Melyanna.
Se giró hacia uno de sus hombres y le ordenó.- Ves a buscar a Zôri.-
Mientras volvían, Elacar intentó calmar a la dama.- No te preocupes. Zôri es un buen curandero, él podrá ayudar a tu amiga.-
Un hombre se acercó de forma apresurada a la escena. Hincó sus rodillas en las tablas de la carreta, cerca de la posición de Matha, mirándole las constantes vitales y si tenía fiebre.
- ¿Ha sufrido algún síntoma antes de desmayarse?-
-Sí, se ha encontrado mareada y ha vomitado unas cuantas veces. Pero creíamos que se trataba del traqueteo que sufre la carreta por cruzar este terreno agreste.-
- Vale.- Se levanto y dio su diagnostico.- No me cabe duda, se trata de la Gripe Roja. Se debió de contagiar cuando curó a los refugiados de ayer.-
- Llevadla a mi carreta, ahí podré atenderla mejor.-
-¿Se pondrá bien?- preguntó intranquila.