Partida Rol por web

Me acerco a los compañeros, diciendo.

-Mirad que lastima de barcos, en uno de esos conocí a una  geisha era maestra en masajes y en palabras. Paseaba con ella mientras el barco nos hacía una romantica travesía, pero ahora esta todo destruido no queda nada y me pregunto que habrá sido de esa chica. - Por cierto este hombre que nos ha aparecido nos esta llevando hacía una parte oculta del puerto, no se si fiarme o dejarme llevar. El dice que hay un muelle pero no se si fiarme. No veo llegar a los elegidos por el momento. 

Ya veo ¿De que clan sois, donde estan los elegidos y que nuevo problema se supone que hay?

Despues de un largo paseo, que se hace bastante corto debido a la prisa con la que avanzamos llegamos al muelle acompañados por un samurai, que se nos unió en una de las últimas casas por las que pasamos de camino al muelle. Este samurai se presentó comentando que sabia todo el tema del anciano por su hija, la elección de la gente para salvar la raza humana...... no se, cosas que se supone que nadie debería haber sabido. De repente una gran duda me invade - ¿hemos hecho bien en confiar en la hija del gobernador? -

Ante tal duda y sin saber exactamente en quien confiar, voy a tomar la opción de confiar en la única criatura que nunca me falla. Disimuladamente suelto a la pequeña Naya interponiendola entre el samurai y yo (para que no pueda ver lo que hago) y abro la pequeña bolsita en la que tengo guardada a Radar, la saco disimuladamente y la miro a los ojos - Radar, busca el muelle 66 y comprueba que efectivamente hay allí un barco y si hay o no alguien esperando -

El camino hacia el puerto no dejó de ser menos inquietante que todo lo sucedido hasta el momento: los barcos ardían formando llamas que alcanzaban gran altura, los ruidos del asedio se incrementaban a cada instante que pasaba y.. un hombre de aspecto mundano traía noticias del barco en el que iban a embarcar.. algo que supuestamente nadie debía saber. Hayashi contempló a ese hombre mientras realizaba la exagerada inclinación y se fijó en el resto del grupo.. por los gestos que hacían dedujo que no era el único que sospechaba del recién llegado. Así pues, poco a poco mientras avanzaban al supuesto muelle 66 se fue separando y perdiéndose entre las casa de forma sigilosa. Mientras andaba solitariamente a escasos metros de ellos no perdía de vista al grupo dispuesto a entrar en acción si algo fuera de lo normal llegaba a ocurrir.

Se queda sorprendido por la pregunta y tras llenar los pulmones y contar hasta tres te responde.

-Sheng Zhou- Me parece que en estos momentos tan dramáticos no es momento de presentación de clanes, pero soy del municipio portuario, me encargaba del mantenimiento del Faro. estan esperando detrás, al lado del muelle 66 no interesa que sepan los demás lo que pasa. Habría un botín y todo el mundo intentaría escapar sin control.

No te preocuper tu ratoncito sale corriendo hacía el lugar y ves que vuelve otra vez a los minutos te dice que hay un barco y gente joven, pero no te puede decir más

Asi estan las cosas entonces.Esta bien vayamos para alla ,somos 9 despues de todo-digo al resto

Hayashi observa sigilosamente los movimientos del grupo sabiendo que nadie se ha percatado de su desaparición. La mano derecha la tiene apoyada en la empuñadura. Sus sentidos se agudizan y su concentración aumenta a cada instante. Está totalmente preparado para entrar en acción si observa cualquier movimiento fuera de lo normal que realice el extraño.

Hayashi escucha ruidos entre los arbustos.. Desvía un momento su atención hacia allí a la par que  observa como empieza a moverse algo. "Deben ser los animales" piensa. Acto seguido se coloca en una situación más estratégica donde tenga controlado tanto a los arbustos como al grupo y espera atento a cualquier novedad, la situación parece tranquila.. pero nunca se puede estar seguro de lo que puede ocurrir.. y menos cuando acertar o fallar supone la diferencia entre vivir o morir.

Radar sale escopeteada hacia donde le he indicado y vuelve en pocos minutos indicandome que efectivamente hay un barco con gente joven esperando. La expresión de mi rostro se vuelve un poco más serena y con un pequeño gesto del dedo pulgar alzado, indico a mis compañeros que por ahora todo va bien, aunque sigo sin fiarme del samurai que nos acompaña desde hace poco.

Seguimos caminando y delante nuestra comienzan a aparecer unos arbustos. En la lejanía y procedentes de dichos arbustos, comienzan a llegar ruidos que parecen ser de animales, en voz baja digo - Hay que tener cuidado, pueden ser animales que vayan en estampida por el ataque de los Yeti-Lan y provocar un gran problema. ¡Lo que espero es que no sean los Yeti-Lan! - La duda me invade profundamente y decido nuevamente utilizar a mi compañera Radar para que me informe de lo que hay tras esos arbustos. Me situo detrás de algun compañero para que el samurai no se percate del pequeño espía que tenemos, la saco de la bolsita, la miro fijamente y la dejo que vaya a investigar - Preciosa, ten cuidado, a la más mínima sensación de peligro, ven y no dejes que te vean - Seguidamente y sin prisa pero sin pausa, agarro el arco y saco una flecha de mi carcaj colocándola en la madera del arco para solamente tener que tensar, apuntar y disparar.

Volverias a tirar y se volvería a acomular tu tirada de sigilo.

Te puedo decir que ningun Nija Jamas a podido ser tan silencioso como tu lo esta siendo hasta la fecha.

estas cerca de el pero, es que no te ve ni por casualidad, te ignora por completo.

Te das cuenta que su espada de samurai en realidad esta en una vaina y por el peso parece en verdad que esta rota, por lo que la lleva de adorno, en cambio le has visto un cinto de estrellas ninja arrojadizas debajo del kimono ( es que son malos tiempos para ir con una Katana rota, hay que estar armado de alguna manera).

Por lo que: si hubiese algún conflicto has de tener este hecho en cuenta.

Hayashi observa atentamente al extraño: sus rasgos, sus modales, su forma de moverse.. nada se asemeja al prototipo de samurái. Durante unos instante pasa su atención al arma que porta, la vaina demuestra que pertenece a una katana de calidad exquisita, sin embargo.. hay algo que le llama la atención.. Hayashi observa que la katana presenta algunas fisuras y se mueve de forma extraña dentro de la vaina. "Mmm parece que está rota.. ¿por qué la llevará encima?" De repente se fija en algo más.. de su cintura penden varias estrellas ninjas. Este nuevo dato le hace sospechar más aún "Algo falla.. ¿un samurái con una katana rota y con estrellas ninjas? Se trata de un impostor. Si tengo que entrar en acción aprovecharé que solo puede atacar a distancia.. a no ser que tenga oculto otro arma más." De repente vuelve a escuchar ruidos entre los arbustos. Deja por un instante de observar al "samurái" y centra parte de su atención hacia las plantas a la par que observa como una especie de rata se dirige hacia allí de forma ágil.

A la vez que ando solitariamente con el grupo reflexiono si podemos fiarnos del samurai, al cual intento mantener cerca por si intenta alguna treta. Nos estamos dirigiendo hacia unos arbustos, desde los que se escuchan ciertos ruidos extraños y voces.

Podría ser una emboscada, pero no tenemos muchas más opciones.

Entrecierro los ojos un poco por unos segundos, mirando al samurai. Necesito alguna respuesta.

-¿Dónde dices que está la hija del anciano? ¿Y por qué no estás luchando? Perdona mi memoria, pero no me suena tu cara.

Mientras andamos y espero la respuesta del misterioso tipo intento prestar atención conforme nos vamos acercando a la vegetación, para discernir cualquier sonido que revele lo que hay detrás, o captar alguna conversación. Mi mano se desliza inconscientemente a la empuñadura de mi espada. No me gusta esto.

Estaba en el muelle con los demás compañeros… y viendo que los demás barcos estaban destrozados no sé como llegaremos al muelle 66, escuchaba algunos que iban a lanzar un radar para que nos guiara y llegar al barco… Otros se preguntaban ¡donde estaba la hija del Anciano?, mire de un lado hacia otro pero no lograba buscarla...

Solo sé que me puse manos a la obra y avanzar con los demás compañeros. Fuimos a la parte delante de un muelle. Avanzo poco a poco de tras de los demás y veo que vamos caminando por el medio del bosque. Se notaba como el bosque no estaba tranquilo, los animales que se escuchaban de fondo. Estaban nerviosos por lo que podría suceder... Seguía avanzando porque no me preocupaba lo que pasaba ya que venía de una isla, y antes de que pasara todo esto se respiraba tranquilidad y armonía en los bosques.

Mientras que avanzamos iba con cuidado para no tropezar e ir muy sigilosa para que no escucharan nada raro. Mientras avanzo digo. -Esperemos que vayamos por el buen camino y no tengamos que dar la vuelta... No podemos perder el tiempo y encontrar el muelle 66. Donde se habrá metido la hija del Anciano, cuando más la necesitamos es cuando desaparece... Pero ten fe Nagisa, confía en tu interior que todo saldrá con calma... Me decía una vocecita de mi interior para mantener la calma con todos y seguir caminando por el bosque.