Partida Rol por web

Un nuevo Camino

Capítulo 2: La verdad no siempre es cierta

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13/06/2014, 01:47
Dalits

Dalits frunció el ceño y apretó los dientes ante la acusación de la elfo. Normalmente, el enano hace oídos sordos a casi todos los comentarios provocadores que le hacen. Pero que lo tachen de mentiroso es algo que se escapa a su autocontrol. Hace mucho tiempo la mentira y la confabulación trastocó la vida de Dalits. Por lo que cualquier alusión a la falsedad crispan los nervios del enano.

No obstante, era consciente de la situación en la que encontraban y el posible devenir de los acontecimientos tras los arriesgados comentarios de sus compañeros. La violencia no era una opción, pero el enano tenía que liberar tensión de alguna manera. -No confunda la mentira con la prudencia.- Dijo al fin dando unos pasos hacia adelante con un tono de voz grave y vehemente. -Es norma de cualquier viajero vigilar por donde anda. Pero ya conocen nuestros motivos para cruzar este camino. Así que es su turno para hablar. ¿Van a dejarnos continuar o tendremos que cruzar nuestros aceros para seguir con nuestro viaje?- El desafió quedó implícito en sus palabras, pues los ademanes de Dalits no expresaban ninguna hostilidad evidente. Pero el enano ya se estaba cansando de esta interrupción por lo que decidió llegar al grano del asunto lo antes posible... ya sea para bien o para mal.

Notas de juego

Sé que Dalits es callado, pero no sé que me da escribir tan solo impresiones y pensamientos todo el rato XDD

Aunque es verdad que la acusación a tocado la fibra sensible del enano :P

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13/06/2014, 02:24
Kyras Quinray

La situación estaba tornando un cariz peligroso, a pesar de que las palabras que habíamos pronunciado no eran una mentira en sí, tampoco decían toda la verdad. Tal vez fuese la infancia criado por exploradores semielfos, o simplemente un apego nada racional a la vida lo que me impulsó a decir -¡Un poco de calma! Señora, no somos sino aventureros en busca de una aventura. No sabemos si Winterhaven está poblada de rebeldes, pero ciertamente lo sospechábamos. Nuestra intención es simple, queremos saber qué tienen que contarnos, ya que recibimos una invitación. Ya que vos sabéis muchas cosas, tal vez podríais decirnos qué o quién nos espera en Winterhaven. -Que no habíamos mentido, ya lo habían dicho mis compañeros. Que había sido más susceptible de lo necesario, lo indicaban nuestras actitudes. Esperaba que aquello no terminase en un alfiletero, pero si había que luchar, venderíamos caras nuestras pieles.

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14/06/2014, 22:46
Lianna

La elfa se quedó unos segundos que os parecieron eternos pensando, sin mirar a ningún lado en concreto pero con la mirada perdida.

- Lo lamento si mis palabras os han ofendido aventureros. Pero decir una verdad a medias es mentir. Y no es a mi juicio, pues Boccop me ha iluminado con ese don sin yo quererlo, el don de la adivinación.

Las esferas brillaron ahora aun con más fuerza y eso provocó una siniestra sonrisa en Lianna.

- Por mi parte no hay rencor, pese a vuestras palabras nada amables hacia mi, pero os insisto en que dejéis las armas aquí. Después podréis continuar el viaje.

Tras acabar de hablar los soldados de nuevo volvieron a cargar sus arcos dispuestos a dispararlos a la señal de la elfa.

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14/06/2014, 22:50
?????

Las cuerdas de los arcos se tensaron a la vez lo que provocó que pudiesen oirse sin problema al rozar con las plumas de las flechas. Los soldados con armaduras agarraban sus espadas sin desenfundarlas con fuerza dispuestos a todo...

- ¡Alto, parad ya!

Un hombre encapuchado salió acompañado de una mujer... era la extraña pareja de la taberna.

- No es así como debes de intervenir con los viajeros que llamamos a nuestro pueblo, Lianna.

La voz del hombre sonaba severa y enfadada aunque había algo en su voz que no hacía ganarse el respeto total de la joven elfa pues ella sonreía.

- Disculparla, no sé que ve en hacer todo esto pero siempre termina haciendo algo parecido.

Se giró hacia la elfa y de nuevo hacia vosotros:

- Debéis depositar lar armas. Las gentes de Winterhaven son demasiado desconfiadas como para ver a gente armada que no seamos nosotros. Las portaremos y se os devolverán en la posada donde descanséis, si es que queréis hacerlo. Pero por favor, no las mostréis en público.

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16/06/2014, 20:57
Helmuth Von Kerceus

La extraña pareja hace de nuevo su aparición y la mayor parte de los misterios se disipan. Lianna y los suyos son rebeldes. Con esta información puedo explayarme a gusto. Ahora tengo más claro lo que puedo y lo que no puedo decir. Voy a quedarme a gusto.

-Disculpada queda pero no olvidado.-digo al anciano como el que no quiere la cosa. Después me dirijo a la elfa y me pongo a lo mío.- Una verdad a medias es una verdad a medias. No uséis la retórica conmigo. Moralmente estará más o menos feo. Pero no es mentir. Vamos, sobretodo cuando tu misma eres "una verdad a medias". Y en nuestro caso teniendo en cuenta que tus amigos están apuntándonos otra vez, cosa que creo que ya he dicho que me desagrada bastante, creo que tenemos sobrados motivos para ser cautos. Es más, si tienes el don de la adivinación, sabías de nuestra intenciones y tu misma podías haber sido menos "verdad a medias". Así que antes de exigirnos nada, replantéate esos principios.

Adoro desahogarme con alguien que podría matarme, pero hay otra persona que lo evitará. Siente uno una paz interior maravillosa. Una vez dicho todo, vuelvo a dirigirme a la conocida pareja, con un tono mucho más amable y mi sonrisa conciliadora.

-Tenemos un carromato, creo que podemos llevar nuestras armas en él y nadie las verá. No creo que eso supongo un problema.

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16/06/2014, 21:22
Caerwyn la Hermosa

Caerwyn sonrió en la profundas sombras de su capucha. Helmuth había dicho con palabras más educadas lo que ella habría dicho bruscamente y con mucha menos consideración. Pero el fondo era el mismo. La elfa era una hipócrita de cuidado.

—No entregaría mi arco ni al mismísimo Lindelot el Terrible, así que ya os podéis ir olvidando de ello —añadió —. Pero estoy de acuerdo en guardarlo en el carromato de mi compañero para no alarmar a nadie.

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17/06/2014, 00:36
Kyras Quinray

La irrupción de la pareja que vimos en la posada es un alivio, el hombre interviene, parece que pone algo de paz, giro mi cabeza en dirección a Helmuth que es quien suele lidiar con estas situaciones; aunque la petición de no mostrarse abiertamente armado me parecía en parte razonable, quedarme desnudo, sin algo con lo que defenderme, no era una idea que me sedujese en lo más mínimo. Frunzo el ceño al escuchar las palabras de Helmuth y Caerwyn, me apetecía conocer algo más a los elfos y no quería estropear la oportunidad de conocerles algo más de cerca, pero no puedo sino estar en parte de acuerdo con dejar las armas en nuestro carromato, estaríamos igual de indefensos pero conoceríamos en todo momento su paradero.

Con cuidado de no hacer movimientos bruscos para no convertirme en un alfiletero, voy reuniendo las armas que porto encima, la bisarma, el arco y el carcaj, la cachiporra, el martillo de guerra y un par de dagas -Vaya, no pensaba que llevase tantas cosas encima... ¿entonces en nuestro carromato? Estará mejor ordenado...  -comento a la espera de que alguien diga o haga algo, para ir dejando las cosas dentro de él en cuanto esté claro que esa es la opción aceptada.

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17/06/2014, 01:40
?????

La elfa ante las palabras parecía que quería volver a hablar pero una tajante mirada del hombre encapuchado hizo que cesase en el intento y diese media vuelta. Cuando lo hizo los arqueros y los demás de su grupo hicieron lo mismo y se alejaron en la noche dirección al bosque quedando vosotros con la extraña pareja a solas.

El hombre se acercó al carromato y vio que no había nada sospechoso en él. Volvió hacia vosotros mientras la atenta mirada de la arquera no dejaba de mirar a todos los lados para no perderse un detalle, casi parecía que intentaba recordar todo lo que veía con mirarlo una sola vez.

- Está bien, podéis guardarlo en el carro si queréis, pero os escoltaremos. Y espero que depositar mi confianza en vosotros no sea en vano y dejéis hasta el cuchillo para el pan dentro de él.

Las palabras del hombre sonaban muy serias pero sin ningún atisbo de amenaza. Se colocó al lado de Helmuth y revisó que cada uno dejase su equipo en el carromato.

- Si he de ser sincero, tus palabras no fueron del todo acertadas. Aunque Lianna sea impulsiva y poco ortodoxa en sus acciones ella os contó más verdad sobre su persona que vosotros sobre las vuestras.

Las palabras de él no parecían querer provocar una nueva disputa, sino más bien que no se crease un silencio incómodo.

- Y os recomiendo que perdonéis y olvidéis, Helmuth Von Kerceus, Lianna es una persona difícil pero cuando consigues ganarte su fidelidad es una aliada y amiga muy beneficiosa. Y si no lo conseguís, si os posicionáis en el bando contrario al suyo, hacerme caso que tenéis todos las de perder, incluido yo y cualquiera que la conozca.

El hombre se ajustó la capucha y se apoyó en su bastón.

 

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17/06/2014, 05:11
Dalits

Dalits relajó su postura visiblemente al ver aparecer al hombre con el que se habían encontrado en la taberna, pero no así su expresión. El enano continuaba con el ceño fruncido ante la acusación de la elfa, pero su genio se había calmado notablemente después de la intervención.

Así que, después de oír la aprobación del hombre, Dalits dejó su hacha, su ballesta y su daga en la carreta. Curiosamente, el guerrero notó la falta del peso al que estaba acostumbrado y se quedó unos segundos mirando hacia sus recién abandonadas pertenencias para asimilar que estaba completamente desarmado. "No me gusta." Pensó con cierto desagrado por la situación en la que se encontraba a causa de las exigencias de unos desconocidos. Pero la promesa de averiguar lo que se estaba fraguando en aquel pueblo llamado Winterhaven mantenía dentro de sus cabales al enano, pues en ningún otro caso habría cedido tan fácilmente a dejar de lado sus armas. Por lo que, tras chasquear la lengua como señal de disgusto, Dalits se dirigió hacia Romo a la espera de que reanudasen por fin la marcha. 

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17/06/2014, 11:40
Caerwyn la Hermosa

—Sus palabras fueron acertadísimas —dijo Caerwyn, cada vez más molesta por la testarudez de toda aquella gente—. No somos traidores a la corona. No aún. Escucharemos lo que tengáis que decirnos, pero decidiremos por nosotros mismos. También está por ver si estáis a la altura del ideal de libertad que representáis. Por ahora lo que he visto hasta ahora ha sido bastante...

Miró en dirección a la elfa que se marchaba. Buscó una palabra educada. No la encontró.

—Decepcionante. Criticáis que escondamos información cuando vos mismo sois deliberadamente enigmático. Apuntáis primero y preguntáis después. Exigís en vez de pedir. Y nosotros somos malos, ¡ja!

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17/06/2014, 12:49
?????

El hombre con mirada severa se acerco a Caerwyn.

- ¿Quién ha dicho que nosotros seamos rebeldes? ¿Quién habla de ofreceros libertad? Nadie os ha puesto una etiqueta de que seáis malos o buenos, señorita. Y yo me abriré en su debido tiempo pues no es ni momento ni lugar. Pero si es verdad que juego con ventaja, pues yo lo sé todo sobre vosotros. Y sobre vuestro pasado, Caerwyn.

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17/06/2014, 12:59
Caerwyn la Hermosa

Caerwyn soltó una risita.

—¡Me abriré en su debido tiempo pues no es ni momento ni lugar! —le dijo al mundo—, que excusa más buena. La recordaré la próxima vez que alguien me acuse de no contar la verdad sobre mi persona.

A la arquera le estaba dando la impresión de estando dándose de golpes contra un muro. ¿De verdad no entendían aquellos dos la doble moral que estaban utilizando? ¿Eran incapaces de ver que se juzgaban a si mismos por otro rasero del que estaban utilizando con ellos?

—Llegados a este punto me da igual lo que sepas de mi y cómo lo sepas. O lo que sepa esa elfa adivina por gracia de Boccob. Conocer y entender son dos cosas muy distintas.

Le dio la espalda al hombre, dando la conversación por terminada. De creciente mal humor, dejó su arco, su espada y hasta su cuchillo de caza en el cofre de Helmuth.

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17/06/2014, 15:06
Helmuth Von Kerceus

La discusión empieza a parecerme una conversación de besugos. Está claro que no van a reconocer que se han equivocado en su manera de proceder. Seguramente yo tampoco lo haría. Pero es me permite dedicarme a pensar en los detalles. Poco, como mijitas de pan, van dejando algo de información. Lianna tiene algún don de Boccob, como siervo suyo este hecho me resulta muy interesante. Es una pena que la elfa haya sido tan irritante. Quizás en un futuro.

También ponen en duda el hecho de ser rebeldes y afirman saberlo todo de nosotros y nuestro pasado. En mi cabeza empiezan a aparecer las preguntas ¿Qué significa todo esto? ¿Quién es esta gente? ¿Hay alguna relación con Boccob, o es simplemente coincidencia? ¿Qué relación guarda esto con la guerra? ¿Está todo relacionado? ¿Es esto el dato que a mi me faltaba en mi análisis? ¡Diablos! ¿En qué nos hemos metido?

Da igual, está claro que no puedo responder a estas preguntas. Pero ya me aseguraré de que el viejo me las dé. Sobretodo si quiere que le ayudemos. Escucho la última frase de Caerwyn y veo como se dirige a mi carro.

-Bueno Princesa, el cómo sí es importante. ¿Te imaginas a este anciano observandote mientras te bañas? Sería un poco siniestro.-finjo como si tuviera un escalofrío.-Lo que sí que está claro, es que para saber tanto sobre nosotros no habéis tenido ni idea de como usar esa información. Y el hecho de que me hayan amenazado en dos ocasiones en dejarme como un alfiletero cuando ya sabían mis respuestas, no ayuda. Para nada.

Dicho esto me dirijo también hacia el carromato a guardar todas mis armas mientras añado.

-Ahora pongámonos en marcha, quiero llegar a ese momento y lugar en el que este anciano se abrirá ante nosotros.

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17/06/2014, 23:34
Tifon

De muy mala gana dejo mis armas en la carreta.

-Esto es ridiculo, estar desarmado es humillante- Digo con cierto enfado- ¡Espero que nada falte cuando volvamos!- Le digo a quien quiera que se quede vigilando. Despues de dejar mis armas le dedico una amplia sonrisa al anciano.

Si habia algo que que detesto son las sorpresas que ponen en juego mi vida y la de mis compañeros, pero especialmente la mia.

-Al menos espero que nadie nos cene...- Digo en voz baja mientras miro a la "presunta" bruja canibal de los bosques.

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17/06/2014, 23:42
Tifon
Sólo para el director

Aquello empezaba a ponerse demasiado raro para mi, nunca he creido en adivinos ya que siempre los considere meros charlatanes en busca del dinero de los paletos y los nobles con demasiado dinero y curiosidad, pero ahora este hombre afirmaba conocer nuestros pasados ¡Ja!

Si este anciano conociera lo que fui y lo que soy y aun asi deseara de mi ayuda o de mis servicios es que tiene el corazon mas negro que la mas oscura de las noches, o muy pocos escrupulos para conseguir un fin. Ya nadie queda que pudiera conocer mi oscuro pasado, no al menos la parte mas oscura, eso quedo oculto por el tiempo.

Quizas simplemente sea un charlatan como otros tantos aliado con una bruja canibal que preside un aquelarre en estos profundos bosques, si esto fuera asi quizas mi unica baza sea correr mas que mis compañeros, lo cual en el caso del enano no seria demasiado dificil.

Sin duda alguna nada bueno podria salir de esto.

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17/06/2014, 23:54
Kyras Quinray

Subo al carromato ágilmente sin realizar movimientos bruscos, el repicar de las armas suena mientras abro el arcón donde guardo el resto de mis pertenencias, cuando no hay tantas miradas en mi retiro las dos dagas que llevo escondidas en mis botas y las dejo en el interior -Si saben todo de nosotros, mejor no probar su magia... ¡Magia! ¿Sabrán algo de mis padres y mi tía? ¿Podrán saber lo que pienso? - Si sabían lo que pensaba, todo eso sería inútil, sabían que llevaba dagas escondidas y que las estaba guardando, pero tal vez la magia no le permitiese verlo absolutamente todo, o simplemente era el hecho de realizar las cosas de ese modo lo que me tranquilizaba un poco más. Una vez dejadas mis armas me siento... desnudo; no tener la bisarma a mano es algo... raro, al igual que no sentir el peso de la maderaoscura y su tacto, la última vez no fue hace tanto, pero entonces las tenía mucho más a mano y era por realizar unos rituales con el pueblo bárbaro.

Noto la suspicacia de mis compañeros, no puedo evitar sentirme un poco como ellos, pero tampoco puedo evitar pensar que algo más grande se está gestando, y mi preocupación por mi familia crece. Quiero conocer qué es lo que le depara al futuro del reino y poder prevenirles si entraña peligro.

-Caramba, yo no soy capaz de imaginarnos desarmados teniendo estas afiladas lenguas -comento medio en broma, medio en serio, con una sonrisa en la cara y cierta preocupación en los ojos, sigo los pasos de nuestros 'anfitriones' en cuanto se pongan en marcha

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18/06/2014, 17:45
Dalits

Dalits esperaba de pie junto a su caballo con los brazos cruzados. En su rostro todavía se denotaba la incomodidad y el enfado por el trato que estaban recibiendo. Sin duda comprendía tanta precaución a pesar de estar acompañada de tanta charlatanería y de vacíos legales sobre la información que se cuenta o se deja de contar. Pero aun así, el enano no gustaba de tener demasiado lejos su hacha.

Desde su posición observó cómo sus compañeros también dejaban sus armas en el carromato, pero no sin dejar de expresar su desacuerdo con el giro que ha tomado la situación. "Helmuth no pierde oportunidad de soltar alguno de sus afilados discursos." Piensa el guerrero con cierta diversión al contemplar las constantes réplicas de su compañero.

Finalmente, tras someterse completamente ante las peticiones de sus 'anfitriones', todo el grupo se puso en marcha. -Después de todo, no sé que podíamos esperar de alguien que deja una nota de un flechazo mientras huye de la guardia...- Comenta el enano con disgusto para que los oigan sus compañeros, aportando su granito de arena a la sensación de descontento general.

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19/06/2014, 12:00

Notas de juego

Durante el día de hoy os actualizo, que ayer no estuve en el pc.

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19/06/2014, 17:59
Narrador

El viaje transcurre con normalidad. El viaje se os hace un poco pesado por el ritmo ya que a cada rato la pareja se para mira a los alrededores y reanudan su marcha. Tras el viaje divisáis una muralla con un portalón de madera abierto. Unos guardias están atravesándolo y tras veros y un gesto del hombre os dejan pasar.

Delante de vosotros descansa un pueblo casi a oscuras, sólo iluminado por las luces de las antorchas y alguna que otra luz de lo que parece una posada y unas pocas casas.

- Esta es la posada El Equino. Podéis descansar aquí. El precio es algo caro y no es la más cómoda del mundo, pero supongo que será mejor que a en la calle, suele hacer frío por aquí. 

El hombre os hablaba sin mucha gana pues parecía cansado.

- Si queréis dejar vuestros caballos en las cuadra y no sueltos son 2 piezas de cobre por animal. Dejad el carro con los animales, lo escoltaremos hasta un lugar donde no se os pueda sustraer nada. Confiad en mi.

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19/06/2014, 18:09
?????

El hombre se acercó a ti y susurrando pero disimulando te dijo:

- Lo llevaremos por la parte trasera y podréis recogerlo al despertaros. Tranquilos, estará todo ahí, pero no es bueno entrar a la posada con ellas, la gente como dije es demasiado paranoica. Os dejaremos hasta las doce del medio día para descansar y os explicaremos porqué estáis aquí. Y por favor, hacer lo que os digo, no quiero más absurdas discursiones.