Partida Rol por web

-No te negare que los humanos se llevan matando desde hace siglos, te recuerdo que yo soy mas viejo que tu Lucius. Yo lo he vivido. Pero no somos quienes como para juzgar a la humanidad. Tu y yo hemos cometido pecados peores que todos ellos juntos.

Sigo comiendo aunque ya queda poco en el plato.

-No te sentias solo Lucius? solo de andar matando a todo el mundo? Yo si.....De una forma se nos dio lo mismo. Tu en un sarcofago, yo en un espejo. Aprovecha esta segunda vida Lucius. Este mundo es extraño....pero no es malo.
 

Mientras mataba tenia compañía. A veces eran los muertos, a veces eran los vivos. Si estaba saciado dejaba a algunos vivos para que contasen lo sucedido. Era parte de la diversión. Suspiro una vez mas y atravieso con el dedo una y otra vez la comida de la jefa. Viruuus, toma virus jefa...

En esta época solo hay hipócritas. Si la jefa supiera lo que su familia ha echo a lo largo de su historia para tener y conservar lo que posee. Que hayan matado menos que yo y con menos crueldad no quita que sean asesinos y crueles. Ahora, después de una generación se permiten dar sermones y lecciones a los demás. Como si su misma sangre no cargase con el peso de cientos de muertes.

-Puede ser cierto Lucius, es posible que la sangre de este templo este manchada, quizas me atreveria a decir que es mas negra que la nuestra. Pero en el tiempo en que nosotros dormiamos ellos han aprendido. Dales una oportunidad de enseñar. Quizas ese mismo peso les ha enseñado cuando a nosotros no nos a hecho nada, menos que nada. No se a ti, pero yo no cargo con ninguna de esas muertes y no me produjeron ninguna satisfaccion.

Si obtuvieras un cuerpo solido.....que harias?

Me encojo de hombros ante las afirmaciones de Ogami. Es solo algo temporal y ambos lo sabemos. Dales un par de generaciones, a ver que pasa. Si esto sigue así volverá la ley del mas fuerte y lo sabes. Es algo cíclico.

Me callo un momento mientras pienso la pregunta de Ogami. Te refieres a Mi cuerpo físico o a un cuerpo físico que no estuviese maldito.

Que diferencia habria entre los dos?

Me levanto y comienzo a recoger la mesa, siempre con mi trapo humedo en las manos, aunque no me gustara el tacto por ahora debia aguantarlo

Me dejo flotar en el aire por la habitación y tomo una postura tumbada con las manos detrás de la cabeza. Bueno...supongo que una bastante grande. Si tuviera mi cuerpo real, seria algo así como Gozzila a lo bestia otra vez y supongo que desataría otro armageddon. Esta vez mayor , dado que mi cuerpo lleva 400 años acumulando vapor casi sin soltarlo.

Pienso un poco mas. El cuerpo seria humano?, sin poder espiritual?.

El poder supongo que es solo para ver si podrias causar mayor destruccion. Si ahi suerte no lo tendras.

Vuelvo a tirar el trapo que ya estaba sacando humo a la fregadera y le doy al agua.

Entonces si volvieras a un cuerpo. Cometerias los mismos actos y si es posible...peor. Vale que has estado aguantandote durante muchos años. Pero solo conseguiras que te vuelvan a encerrar.

Esbozó una calmada sonrisa escuchando sus palabras, mientras asentía de vez en cuando. - Si todo va bien... quizás pueda asegurarme de que lo que nos ocurrió no vuelva a ocurrir jamás, Yuuki, es mi mayor prioridad. - le dijo, levantándose y cerrando el libro un segundo, asegurándose de dejar el marcapáginas donde había parado de leer. No era mentira, al fin y al cabo. Se inclinó sobre la mesa y le robó un beso de la comisura de los labios, apenas rozándolos - Un café estaría bien, cariño. Y muchas gracias por la cena... estaba deliciosa. -

Volviendo a la silla, Ed abrió el libro otra vez pero sin quitarle el ojo a su youkai. Realmente era muy dulce y no recordaba que nadie le provocara aquella extraña sensación de paz. Alguna vez pensó en dejar todos sus planes para vivir en otro lugar junto a ella, sin preocupaciones y sin problemas. Sin embargo, no podría dejar atrás todo lo que había estado consiguiendo aquellos años.

No tienes toda la información Ogami, te pasa como a la jefa y su familia. Han olvidado mas de lo que saben. Y a que no adivinas lo mas curioso?. Hace 8 generaciones que ninguno de ellos me pregunta nada. Llego un momento en el que se les metió en la cabeza que su tarea era mantenerme encerrado y castigarme por mis pecados y se quedaron tan conformes. Para ellos no hay nada mas. Solo una máxima. Lucius Rhade es diabólico y ha de pagar por ello por siempre. Callo unos segundos mientras miro el techo en silencio. Me pregunto que harán cuando les estalle todo en la cara.

Disfruto su abrazo, su aroma, su cariño. Mi niña, mi estrella, mi luz en la noche.-Nunca dejaría que te hiciera daño. Ni él ni nadie. Mi niña.- Le digo en un susurro mientras nos abrazamos. Sonrió ante esta felicidad. Y rio junto a ella con el comentario de Ogami.- Si, volvamos. Tendremos que llevarnos también a Lucius. Es fuerte y será útil.- Además es mejor tenerlo cerca y vigilado.- El ejercicio le sentara bien. Y tenerle alimentado tal vez ayude a que se mantenga tranquilo.- La miro mientras nos movemos, observo su rostro joven, sus facciones y su figura, su manera de andar. Ella es diferente y a la vez sigue siendo igual. Sonrió sin poder evitarlo y le acaricio la frente para apartarle un mechón.

Por la puerta pueden ver a Hotaru y a Yami aparecer, vienen juntos, caminando uno al lado del otro, Hotaru viene con la mirada en frente, sus ojos fijos ne la primera figura que ve dentro del comedor, Lucius, aunque se ve tranquila, instantes antes, estaba más bien preocupada por Ogami, porque él aun no controlaba su poder, pero al parecer estaba conversando con Lucius aunque eso tampoco era del todo bueno.

Hotaru entró sin dirigir la palabra a alguno de los dos presentes pero ve que han recogido todo de la mesa, suspira, y se vuelve a molestar, pero no dice nada, simplemente se va a la cocina, para limpiar las cosas que estaban sucias, y guardar la comida, no quedaba de otra, se había arruinado la cena completamente. La chica luego de terminar, se iría a dormir, estaba cansada, atrás había quedado la idea de ir a investigar la escuela,  no estaba de humor.

Floto tal y como estoy, alejándome de la jefa y de los dos onis con los que la muchacha mata el tiempo. De todas formas, ya no dan nada interesante en la tele. Ahora solo charlan sobre los deportes. Nada de la verdadera diversión como las noticias.

De todas formas me acerco cuando hablan de que Inglaterra se ha logrado clasificar para el mundial este año. A ver si esta vez lo hacen mejor. En esta época indolente tienen tanto tiempo para divertirse...

Noto la frustracion de Hotaru, ya no estaba de humor. Su alegria se habia desvanecido. Y todo por Lucius. estaba callada recogiendo la cocina. Almenos habia conseguido que Yami volviera.

(suspiro)

Entró a la cocina y de inmediato se puso con la cena. Mas temprano había dejado los ingredientes preparados. Todo cortado, pelado y lo que debía estar en remojo ya lo estaba desde el mediodía. Sakura era realmente muy buena cocinando todo tipo de platillos y, además, le agradaba mucho cocinar para otras personas, por lo que siempre estaba horneando algo. En cuanto empezaron con la cocina, contó a Natsuki lo que pasó en el hospital cuando fue de visita. Le contó como cuando llegó él no la recordaba y tampoco recordaba que tanto le gustaban los Dorayakis de Castañas, le contó como empezaron a hablar y como cuando ella se puso triste, él se levantó para abrazarla y sentarla a su lado en la cama.

Y entonces él... empezó a besarme. Primero en el cuello y luego por todo el rostro, hasta que nos besamos en los labios. ¡Nunca había besado a un chico a los labios! Bueno... en realidad, nunca había besado a mas nadie que a ti, Natsuki. Luego de eso estuvimos un buen rato besándonos. Comenzó a reír de los nervios que le causaba rememorar todo cuanto había pasado. No sé porque pero le gusta sentarme sobre él, todo el tiempo me sentaba sobre sus piernas, me abrazaba bien fuerte contra él y me seguía besando. Colorada y mientras preparaban juntas la cena, describió como ambos se besaron entre palabras hasta que él le contó que venía de un lugar oscuro, que estaba solo y tenía miedo de todo lo que significaba volver a ese mundo. Le contó el miedo que Siro sentía de que ella le abandonara en cuanto se enterara de que no era Oreki.

No podía dejarlo solo, Natsu. Esta asustado, no conoce a nadie, ni nada. ¿Como iba a darle la espalda a alguien que el mundo entero dejó abandonado? Ambas habían sufrido el abandono, de distintos modos. En el caso de Sakura, ella siempre había sido invisible para sus padres y superiores. Sin importar cuanto se esforzaba, siempre estaba sola hasta que la Kitsune llegó a su vida, invadiéndola de felicidad y alegría. Y... el rubor, que ya era fuerte, se intensifico. El contacto de nuestros cuerpos hizo que él... hizo un gesto con el dedo índice moviéndolo repetidamente hacia arriba. Se excitaba... y me pegaba mas a él. ¡Y no entiende lo que estaba haciendo! Los calores de Sakura eran evidentes. No sé que hacer con eso... tendrás que enseñarme, Natsu. Tu sabes mas de chicos que yo.

Natsu ayudaba tranquilamente a la chica, y escuchó todo lo que tenía que contarle. No sentía celos. Era muy vieja para dejarse afectar por ese sentimiento, y además, ella y Yami-san tenían que ser fuertes y no dejarse embaucar por esas sensaciones. Era un espíritu protector y del bien, y su deber era enseñar a Sakura a distinguir lo que estaba bien de lo que estaba mal. Acaricia a la humana con sus colas (sabía que le gustaba), y la atrae hacia ella.
- Tsss, ya está, mi amor. Te entiendo perfectamente. Sabes, yo me sentí más o menos igual cuando tu familia empezó a ignorarte. Pero no me deje llevar por la tristeza ni la preocupación y espere paciente hasta que encontraste el pergamino de invocación ¿Te acuerdas como te sentiste cuándo aparecí? Ahora tienes la oportunidad de sentir eso de nuevo ^^- le besa los labios tiernamente, acaricia su cabello color fuego y sonríe divertida ante la petición de ayuda con los chicos - Bueno... Lo primero que tienes que saber de los hombres es que son muy inoportunos, créeme, cielo. Hasta el más caballero de todos. Y... supongo que sabes lo que tienen... abajo- señala su entrepierna con una mirada elocuente. - Bueno, pues eso es otro detalle... Se excitan muy rápido. Sobre todo con chicas como tú ;3- y, traviesa, aprieta los pechos debe Sakura y la besa en la mejilla, tras lo cual, sigue cocinando.

La conversación en la cocina no se extendió demasiado, un poco interrumpida por que la comida ya estaba lista y otro poco interrumpida por las acciones de Natsuki y Sakura en privado. Poco a poco llenaron la mesa de comida, decenas de pequeños platos con mucha variedad de alimentos tradicionales japoneses, para que Siro-kun pudiera probar pequeñas cantidades de distintas comidas y así descubra cuales eran las que mas le gustaban. Sakura pensaba que por mas que no fuera Riki, probablemente aún le seguirían gustando las mismas cosas, así que intentó recordar que cosas le gustaban a su amigo de la infancia y preparó aquellas exquisitas combinaciones.

Con la mesa lista y todo preparado, le llamó para que bajara a cenar. ¡Siro-kun! ¡La cena ya esta servida!

Ayudo a Hotaru a limpiar para que pueda ir a descansar. Tendré que ser yo quien lidie con el esta noche. Antes de que ella se vaya Yami le besa la frente.- Descansa bien mi niña.- Le sonríe y se dirige al salón donde el oni entro flotando.

Con paso calmado me acero y me siento, espero unos minutos antes de decidiré a hablar.- Dime Lucis ¿Por qué?- La pregunta es bien sencilla, pero  no sé si el mismo sepa el significado.-¿Por qué? Después de siglos de encierro, no aprendiste nada. O ¿Algo te impulsa a ser así?- De verdad quiero comprender al espíritu que tengo ante mí.

Al ver que Yami quiere ir serio con Lucius, quizas es una conversacion que ni yo o Hotaru debamos escuchar. Deberian de arreglar sus diferencias de una vez por todas.

-Hotaru. llamo a la joven. Vamos?

No se si Yami me lo agradeceria, no se si queria que Hotaru estuviera presente. Ahi demasiadas cosas que no sabia pero quizas por instinto no debian ver lo que queria decirle.

Le alargo la mano a la joven.

Todos, no importa en donde estuviesen, pudieron sentir una flecha en el corazón. Era esa sensación que solo se sentía cuando un youkai o un espíritu estaba cerca, usando sus poderes fuera de su territorio¹. Eran dos, y estaban usando sus poderes ampliamente. Podían sentir en ustedes, ya sean humanos o Youkais, como la realidad era modificada por la presencia de estos dos seres, que se movían por la ciudad haciendo quien sabe que clase de alborotos. Ambos se movían por la parte céntrica de la ciudad, la cual, siendo viernes, debía de estar repleta de personas dispuestas a disfrutar el inicio del fin de semana. Sin embargo, no estaban juntas. Una se encontraba en la parte Norte y otra en la parte Este².
Los Youkai no pudieron más que sentirse amenazados y hambrientos, como cada vez que un bocadillo así aparecía en la ciudad. Los Invocadores, sabían que había que detenerlos, o la ciudad podría llegar a ser un caos la mañana siguiente....