Partida Rol por web

La escena entre la pareja de enanos le resultó bastante cómica a Him. Tus cuidados serán bienvenidos amigo enano. dijo dirijiéndose a Twin. Después se giró hacia Galmor: Aunque actualmente siento una aversión máxima hacia la raza orca en general, entender su idioma resulta más útil de lo que parece. Puedes escuchar las discusiones entre ellos para aprender de la jerarquía del grupo y buscar sus puntos débiles. A veces, sólo con retar al objetivo adecuado, los demás huyen o se rinden sin más. Cosa muy útil si te superan en número... Además sacar información a un cadáver suele dar peores resultados que sacarla al objetivo vivo. Him notaba cómo se recuperaba poco a poco. Ya podía hablar sin que la cabeza le diera vueltas. Si no es inoportuno preguntar, ¿vosotros a dónde os dirigíais? ¿De dónde venís? ¿Cómo se formó este variopinto grupo? dijo mirando a los dos enanos, a la elfa y al mediano.

baaaaah, eso con bovadas... El punto débil de los orcos está muy claro... cualquier parte del cuerpo que sangre... y para saber cual es el líder también es sencillo... El más grande , con las mejores armas y armadura y que se queda en segunda linea esperando a que sus secuaces desgasten a los enemigos para asegurarse así su supervivencia... Sigo pensando que el mejor idioma para comunicarse con los orcos es el del metal

No me resultaba demasiado entretenida aquella situacion. Los enanos parecian absortos en su labor de hacer el ridiculo, mientras que la elfa, al igual que yo, parecia esperar algo de mas utilidad o interes. El ataque que sufrio el humano marcaba un ligero contrapunto en aquella tediosa situacion. -¿Y si te recuperases de tus heridas y fuesemos a ver a esas arañas y esas amenazas de las que hablas?-Pregunté distraido mientras esperaba la respuesta del posadero a mi pregunta anterior.-Asi podriamos investigar la zona y de paso hacer algo de ejercicio. En ese instante, una de mis dagas salio de su funda y empece a juguetear con ella sin demasiado interes.

La elfa escucha atenta los imprevistos que había tenido el humano. Arañas gigantes emboscando a su presa no es nada raro, pero esa presencia que dice haber notado... se queda un momento callada como buscando las palabras adecuadas sería interesante saber si fué su imaginación o si es algo real.

Luego se pierde en sus pensamientos y sólo oye de pasada cómo los dos enanos intercambian impresiones, hasta que un gruñido grave a su izquierda hace que preste atención a lo que pasa. Galmor y Twim han intercambiado algo más que impresiones y Blaid se ha puesto alerta, su mano se posa en la cabeza del animal y éste al instante calla dándole un lametón en ella.

La conversación se desvía hacia "mil y una formas de acabar con un orco" hasta que Benen propone ir al lugar de los hechos cuando el hombre se haya recuperado. La lluvia habrá borrardo los rastros, mejor salir cuando amaine y hayamos descansado, yo quiero echar un vistazo a la zona.

Entonces el hombre se interesa por ellos y su relación, Amra mira hacia sus compañeros de viaje. Nos encontramos en el camino y como todos íbamos a Cataratas de la Daga, un encogimiento de hombros pues vamos juntos.

Tras escuchar las propuestas de los allí presentes y dejando de lado las técnicas usadas por los enanos para acabar con los orcos. Him contesta: Me parece buena idea, no puedo dejar que esas arañas vaguen por los alrededores del bosque tan cerca de campesinos inocentes a los que puedan causar daños. Suspiro un momento y continuó:Pero he de reconocer que no estoy en mi mejor momento, estoy de acuerdo contigo -dijo dirigiéndose a Amra. - Mañana por la mañana podríamos ir e investigar un poco más ese bosque.

Bueno, a mí dejarme tranquilo hasta mañana. Lo único que quierpo ahora es quitarme este asqueroso polvo de encima. Luego subiré a  comer, beber y fumar  como si no hubiera un mañana. Tengo que recuperar tantos días de viaje sin poder disfrutar de una buena cena bajo techo.

Jovencita, ( dirigiéndose a la mesonera semielfa), este señor ya etá recuperado. Ahora ves preparándome un barreño de agua bien caliente y el mejor de tus estropajos, que toda esta roña acumulada no saldrá así como así.

Galmor se dirije a sus aposentos bajotierra mientras le dice al mediano: Y tú, si quieres estar  con nosotros nada de bromas ni cancioncitas. Quiero una noche tranquila.

Twim, supongo que querrás acompañar a esta gente al bosque ese a por la arañas...... No preferirás quedarte aquí unos días en las habitaciones subterraneas respirando humedad y escuchando el silencio unos días... Descansando... comiendo... fumando... durmiendo... comiendo... fumando.... durmiendo......... Sería tan feliz...

Galmor fue cerrando los ojos imaginándose en una habitación de piedra, tumbado en un camastro, llenando el ambiente de humo con su pipa. Una ligera sonrisa se adivinó bajo su espesa y blaca barba...

Mientras los recién llegados hablan, el tabernero y la camarera (Aghaza) escuchaban con algo de interés y curiosidad, era evidente que sabían que era un orco, pero a juzgar por su lenguaje corporal, jamás habían visto uno y más de uno apostaría un dedo a que ninguno de los dos había salido jamás de Hondonada de Anathar.

Pero ellos dos no eran los únicos en la posada...

El Semielfo que había estado en un rincón haciendo lo suyo, había escuchado atento toda la conversación y justo cuando el Enano iba a dirigirse a sus aposentos, el hombre se levanta de su silla y cierra de un solo movimiento el pequeño libro que había estado leyendo.

Se levanta y se dirige a los recién llegados, es un Semielfo de mediana edad, alto incluso entre los humanos, cabello negro y corto y ojos del mismo color que penetran con la mirada, viste una túnica de terciopelo con una capa de seda ajustada con un broche de oro con un simbolo extraño pero reluciente al igual que los anillos que portaba en cada uno de los dedos de la mano.

Con una voz seca y sin emitir expresión alguna habla repentinamente. -Sean Bienvenidos a Hondonada de Anathar, mi nombre es Haladar Bosquelado -Hace una ligera reverencia como gesto de educación (quizá los Enanos no entiendan mucho de eso..... bueno, tampoco un mediano ladronzuelo, una Elfa salvaje ni un monje casi hermitaño) -Disculparán mi intromisión, pero no he podido evitar escuchar su conversación.

Se dirige hacía el Monje -¿Tú vienes del monasterio de Ilmater?, ¿me refiero al monasterio de los quebrantados? ¿Acaso los orcos han traspasado sus murallas y ahora lo habitan? -La afirmación con la cabeza del Monje le aclaraba de inmediato las dudas, la inexpresiva cara del semielfo de repente cambia a un gesto de preocupación, reforzado con la mano derecha llevada a la barbilla.

-Que mala cosa... - Dijo más para si mismo que para alguien en especial. -No es una buena idea que se internen en ese bosque, señor mediano y señora elfa, el bosque de las arañas está maldito y las arañas que abundan en cada rincón del bosque, son la menor amenaza que mora en sus entrañas, la verdad me ha sorprendido que este hombre haya logrado pasarlo y haya vivido para contarlo, ya no recuerdo la última vez que escuché de alguien que haya hecho esa misma proeza, pero fueron muchos años atrás.

-Suspiró y tomó un poco de aire -Si quieren algo de ejercicio, puedo proponerles un ejercicio, maese Mediano y así ganan algo de dinero extra: El día de ayer envié un carromato cargado de provisiones al Monasterio, entre esas provisiones había un libro importante para mí, la intención era que los monjes hicieran un par de copias de dicho libro, pero con esta noticia este libro caerá en una de las hogueras que calientan a esos sucios orcos. ofrezco pagarles 50 monedas de oro a cada uno (bastante dinero para traer un simple libro) por que me traigan ese libro de vuelta sano y salvo. Si parten al alba mañana, seguro alcanzarán el carromato antes de que llegue a las montañas!

Una oferta bastante tentadora para aquellos que piensan en el dinero como recompensa ¿Cumplirán el encargo del Semielfo? o ¿que se lo meta por el culo, lo degollan y le roban las monedas?..... Es su turno

Es bien sabido que el bosque de  las arañas es habitado con, precisamente, arañas.

Pero no solo eso, en él viven espiritus y muertos vivientes que rondan por el bosque en las noches, donde una bruma se forma por la humedad que hospeda el bosque.

Un bosque peligroso, donde los más temerarios se atreven, pero también un bosque donde hay varios puestos de avanzada Enanos del antiguo imperio, puestos que pueden albergar reliquias de incalculable valor.

Galmor se paró mientras se  imaginaba disfrutando de su pipa tumbado en su catre con una rica cerveza en ristre. El sueño se fue difuminando conforme el elfo hablaba, hasta que desapareció de golpe y por completo cuando escuhó el ofrecimiento del semielfo.

Sabía que Twin aceptaría. Lo haría hasta por una moneda de cobre y dudaba  hasta si su protegido sería capaz de pagar por ir a recuperar el libro... Galmor se llevó la mano a la frente tapándose los ojos apesadumbrado y dijo: Por quéeeeeee..., porqueeeee....,

Y cabizbajo se dirigió hacia  las escaleras con el objetivo claro de ponerse a remojo en agua caliente. Necesitaba al menos un momento de tranquilidad. A pesar del descontento del enano, en el fondo quería ir a encontrarse con esos orcos y enseñarle al monje lo bien que sabe comunicarse con ellos. Pagarán toda la rabia que supone no poder quedarse unos días disfrutando de un aposento de piedra.

Him escuchó la oferta del semielfo y dijo: Personalmente no tengo gran interés por las riquezas terrenales. Pero pensó que si quería reconstruir el templo una vez limpio, necesitaría algo de dinero para pagar materiales y mano de obra... Entonces prosiguió: Pero ese oro me vendría bien para poder recomponer el templo algún día. Además, no puedo permitir que las personas que se encaminan hacia el monasterio padezcan el sufrimiento que les causarían los orcos si se topasen con ellos. Hizo un amago de acercarse al semielfo con intención de estrecharle la mano para simbolizar que podía contar con él, pero su cuerpo magullado le recordó que necesitaba descanso. Mañana por la mañana partiré a ayudar a esa gente. Tranquilo, dijo mirando al semielfo, también buscaré tu libro. Mirando al grupo que había salvado la vida recientemente, continuó: Yo iré con o sin vuestra compañía, mi fe me obliga. Pero cualquier mano amiga será bienvenida. y les lanzó lo que intentó ser una sonrisa pero se quedo en una mueca de dolor. Dirigiéndose al posadero le preguntó: ¿Me podrías indicar cuál es mi habitación?

 Al escuchar las palabras de ayuda del semielfo, Twim sintió una llamada dentro de su pecho, tenía que ayudarlo como fuera necesario, no podía ignorar el grito de socorro de un pobre desvalido que quería recuperar una pertenencia muy querida para él, simplemente tenía que ayudar a aquel hombre.

 Cuando el monje dijo que partiría hacia el monasterio para limpiarlo de los orcos que lo profanaban y, también, buscar el libro del semielfo, se acercó a él, puso su mano en el hombro del monje, aún un poco adolorido y con gran entusiasmo le miró a la cara mientras le decía... - ¡Cuenta conmigo joven! Yo te ayudaré a acabar con esos asquerosos orcos, vengaremos a todos tus compañeros, limpiaremos el monasterio y le traeremos a este hombre su libro en perfecto estado. Y Galmor también se apunta, espero que los demás también lo hagáis.

Cuando acaba de hablar vuelve a sumirse en sus pensamientos, hay algo que se me escapa referente al bosque...

Parece que ya han acabado de hablar y van a retirarse a sus habitaciones, cuando un semielfo se levanta de su sitio en una mesa del rincón y, con unos modales de capital, se dirige a ellos. "El bosque de las arañas está maldito" esa frase hace que su cerebro por fin reaccione, ya sé de qué me sonaba ese bosque.

Por último les propone que recuperen un libro valioso para él que va camino del monasterio atacado, de inmediato tanto el humano como Twim se prestan a ir, a la vez que se puede ver como Galmor se tapa la cara y menea la cabeza antes de hundir los hombros e irse a su habitación a descansar.

Amra duda entre ir con ellos o seguir su camino, pero al final decide ayudarlos, Cataratas no se va a ir a ninguna parte y puede que averigüemos algo de importancia, de todas formas sólo será un día o dos de retraso. Estoy con mis compañeros Haladar Bosquelado, mañana iremos a por su libro y sin añadir nada más se da la vuelta para ir a descansar. Buenas noches.

Busca con la mirada a la camarera y le hace una seña para que la preceda y le indique cuál es su habitación, Blaid se levanta y la sigue en silencio y con la lengua colgando por un lateral de su dentada boca entreabierta.

Las palabras y el oro acariciaban mis oidos, lamentablemente la experiencia me había enseñado que, muchas veces, un pago grande por algo pequeño encierra alguna que otra sorpresa desagradable.

-¿Y bien?-Pregunto sonriendo.-Me parece un pago muy generoso por un libro... ¿Algo quedó en el tintero?

Mientras se retira cabizbajo, Galmo dice con resignación:   Claro que me apunto twin. No te voy a dejar ir solo a por esos orcos. Por una vez tengo  otra razón a parte de la de ir a salvarte el trasero. Si hay orcos de por medio contar con  mi martillo.

Ah y... ( dirigiéndose al elfo). la apreciación del mediano tiene mucho sentido. Yo no quiero sorpresas ni malos entendidos con el trato. Para mí está muy claro... Si traemos el libro, 50 po  a cada uno. Si se queda algo en el tintero, pues allí se quedará para siempre.

Al ver que sus compañeros sólo piensan en la recompensa Twim empieza a sentirse furioso, su cara se vuelve roja de la rabia, por su nariz juraríais que sale humo al expulsar aire, su cara de rabia se va haciendo cada vez más y más clara, hasta que con su hacha en la mano mete un golpe sobre una mesa, con el mango para no romperla.

 - ¡Pero bueno, ¿qué os habéis creído?! El hombre está pidiendo ayuda, ¡no seáis codiciosos malditos bastardos! No hay razón para dudar de su palabra, y en el caso de que no la cumpliera seré yo el primero en cortarle las manos por mentirme. ¡Así que a trabajar!

Galmor estaba a punto de bajar las escaleras hacia sus aposentos, pero cuando Twin estalló,  detuvo su avance. Volvió la vista atrás y se acercó a su compañero. Se puso frente a él y le dijo: Lo ves Twin, lo ves!!!!!  Llevas demasiado tiempo lejos de los nuestros y estás perdiendo los modales. Lo mejor será que volvamos a nuestros clanes cuanto antes. Si no, llegaremos a parecernos tanto a los humanos que  se nos caerá la barba y hasta creceremos un poco…  Y guarda tu maldita Hacha!! Al final vas a lastimar a alguien… como siempre!!!!

 Twim, indignado miró a Galmor, odiaba que siempre que pudiese intentara echarle en cara el más mínimo detalle para hacerle volver con su clan. - ¡Cierra el pico maldito enano de mantequilla! No pienso volver con mi clan, ¡jamás! Tu si quieres vete y dile a mi padre que has fracasado en tu intento de hacerme volver.... - Coge una bocanada grande de aire, se puede apreciar como el pecho se le infla - ¡Y COMO VUELVAS A DECIRME QUE GUARDE EL HACHA TE LA CLAVO ENTRE LOS OJOS!

 Tras esto Twim enfurecido se dispone a bajar las escaleras, apartando a Galmor de un empujón y dirigiéndose hacia su habitación.

Galmor enfureció cuando Twin lo apartó bruscamente. Se repuso del empujón al instante y salió tras su protegido gritando: Si piensas que me voy a ir sin ti… Ni en el mejor de tus sueños!!! Porque un Yunquedorado nunca fracasa!!Lo que le diré a tu padre cuando lo vea es que tiene a un majadero por hijo. No me extraña que pocos en tu clan quieran saber de ti. Y para clavarme el hacha entre los ojos primero tendrás que aprender a utilizarla!!! Que casi te cortas la mano dándole a la mesa!!!!

-Relajaos, compañeros.-Dijo el joven mediano viendo como se habian interpretado sus palabras.-No digo que nos engañe ni que nos espere una muerte segura, simplemente pregunto el motivo de tanta generosidad.