Partida Rol por web

Al oir al Vorkadung advertir que tienen compañía, Argörath se acerca a la parte delantera de la carreta para echar un vistazo.

Ante la contestación de Arbar, el mostali de plata no puede mas que asentir - Bien pensado camarada Arbar. Si no son muy estupidos pasaran de largo; no sería buena idea atacar a Mostalis en estas tierras -

Ni en estas tierras ni en ninguna, camarada... dice con sorna, pero al instante vuelve la seria compostura que un momento así requiere...

Thorkegar había estado ausente durante estos días, se limitaba a escuchar las conversaciones y apenas participaba. Cuando oyó el aviso de sus compañeros, su corazón empezó a bombear con más fuerza, empezó a inquietarse y preocuparse. Todavía no había olvidado el enfrentamiento con los elfos y su mala experiencia con el combate, recordó como cayó herido y entonces su corazón bombeo con más fuerza todavía. Miró nervioso alrededor de la carreta, miró por fuera, asomándose por detrás de la carreta para ver el tipo de suelo por el que transitaban, lo más normal es que fuera tierra, pero quería asegurarse. Si tengo que invocar al elemento quiero estar seguro que puedo hacerlo.
- A lo mejor tenemos suerte y son los humanos que vienen a recoger sus provisiones dijo a sus compañeros del interior de la carreta.

El enano de hierro abre la caja en la que guarda su mosquete y lo saca cuidadosamente, preparándolo para disparar. Se queda oculto en el carro, entreabriendo la lona lo justo para observar el camino por donde llegarán los jinetes.

- Si tienen algo contra nosotros, lo lamentarán.

A medida que se acercaban los jinetes notaba como apretaba más la mandíbula... no sabía que iba a pasar pues los mostalis no tienen muchas dotes para el teatro ni para disimular...

A ver, hablar lo mínimo, somos comerciantes de paso... adiós... sí, con eso bastará, espero que no me hagan preguntas raras, pues les puedo soltar un buen moco y no quiero problemas...

Bueno, ahí están, la suerte está echada, dijo por lo bajini cuando el encuentro parece que iba a ser inminente...

Vorkadung guia la carreta hacia el lado derecho del camino, dejando el lado izquierdo para que se crucen los jinetes que vienen de frente. Así, si su compañero tuviera que entablar conversación estaría más cerca, y si él tuviera que desenfundar con disimulo, sería más fácil ocultar la pistola detrás de su pierna.

- Si. Con suerte, a lo mejor ni nos hacen señas y pasan de largo sin decir nada. -responde mientras trata de contar los jinetes conforme se acercan.

Conforme los jinetes se van aproximando, pueden comprobar que son dos... y uno monta un bisonte. Los mostalis se tranquilizan y dejan de lado sus armas, pero se extrañan de ver de nuevo a sus compañeros volver por dónde habían venido.

Por Mostal, son los humanos compañeros nuestros... ¿Habrán perdido el rastro? ¿Habrán sido derrotados?

- Ja!!! Lo sabía, a éstos les puede el hambre, han venido a recoger sus provisiones. Esperemos que por venir a coger su comida no pierdan el rastro dijo Thorkegar más aliviado de saber que no iban a entablar combate que por la posibilidad que pudieran perder el rastro.

- ¿Alguno de vosotros ve al que llaman "el roto"? - Pregunta extrañado el mostali de plata - No lo distingo encima de las monturas... -

Levantando la mano en señal de saludo a los mostalis de la carreta, Hal se acerca al trote hacia ellos. Antes de llegar a su altura ya esta dando explicaciones.
- ¡Saludos, amigos!. Traemos malas noticias, confundí el rastro en esta zona pues el paso de carros es habitual y estaba lleno de surcos en varias direcciones. Fuimos hacia el sur hasta llegar a la aldea del clan Kochgeran, donde fuimos bien acogidos y recibimos hospitalidad del noble Lodregast y su pueblo. Nos informaron, ya anocheciendo, de que ninguna carreta como la que buscabamos ha pasado por sus tierras. Hemos pasado allí la noche y al alba buscamos huellas por las tierras del clan, no vimos nada, asi que, hemos vuelto. Creemos que solo queda una opción, el camino del este, al Paso de Kartolin - les va poniendo al día con un tono de frustración en la voz e impaciencia en el espíritu.
- Tendré que buscar el rastro alejandonos de la encrucijada hacia el este para estar seguro de que es el correcto. Siento este retraso, es totalmente mi culpa - y en ese instante recuerda las advertencias de los orlanthis - Capitán Krunk, los hombres del clan nos alertaron de la presencia por estos lugares de incursores Telmori. Podrían darnos problemas aunque, por otro lado, "los-que-corren-con-lobos" pueden haber visto la carreta del hechicero.

Vorkadung se gira en el asiento mirando a la izquierda, al este.- ¿Porr el camino que vimos ayerr porr la tarrde? -y resopla por la nariz contrariado.- Pues sí que es un contrratiempo. Habrrá que dar la vuelta a la carreta. -dice en el idioma comercial. Luego se gira hacia atrás para mirar al interior de la carreta y habla en mostali.- Diria que no se han ganado la comida, capitán. Si no fuera porque Swot va con ellos... -y se dispone a buscar un sitio adecuado para dar la vuelta a la carreta.- ¿Quienes son esos Telmorri que andan con lobos? -lanza al aire, de nuevo en el idioma comercial, mientras se afana por manejar a las bestias para que den la vuelta.

Vorkadung se gira en el asiento mirando a la izquierda, al este.- ¿Porr el camino que vimos ayerr porr la tarrde? -y resopla por la nariz contrariado.- Pues sí que es un contrratiempo. Habrrá que dar la vuelta a la carreta. -dice en el idioma comercial. Luego se gira hacia atrás para mirar al interior de la carreta y habla en mostali.- Jeg vil si at de ikke har gjort seg fortjent til mat, kaptein. Hvis det ikke var SWOT gar med dem... -y se dispone a buscar un sitio adecuado para dar la vuelta a la carreta.- ¿Quienes son esos Telmorri que andan con lobos? -lanza al aire, de nuevo en el idioma comercial, mientras se afana por manejar a las bestias para que den la vuelta.

- Estoy aquí, amigos -dice el diminuto enano asomando por detrás de Obendiya.

Se baja de Michabo dando un salto desde la grupa, que para él es como tirarse por una ventana, para caer en la blanda nieve con estruendo del metal de su armadura. Extiende sus miembros entumecidos y se frota el culo vigorosamente.

- Por mis pelos de la nariz, ir montado en eso me está matando... ¿quién ha preguntado por los telmori?, ah Tres Tubos... pues, me corregirán Hal y Obendiya si me equivoco, puesto que yo nunca los he visto y solo repito lo que me han contado otros, pero tengo entendido que son tribus de hombres salvajes que viven como lobos. Y más aún, todas las semanas, en el día salvaje, se transforman en hombres-lobo al caer la noche y corren en forma de lobo como bestias salvajes hasta el amanecer... ay quien se cruce con ellos entonces, pues al parecer pierden el entendimiento cuando se transforman y pueden atacar a cualquiera.

- ¿Hombrres-lobo? ¿Humanos que se trransforrman en lobos? Qué cosas... -dice con asombro y arqueando las cejas- Bueno, me enseñarron que no existe crriatura en el mundo a la que no se la pueda herrir con una buena hoja de hierro bién afilada. ¿No es así Krunk? -pregunta elevando la voz al veterano capitán para confirmar lo que le han enseñado en su aprendizaje.

¿Que se ha equivocado? ¿que no ha hecho bien su faena? No estoy sorprendido, de los humanos nunca puede uno fiarse, siempre te decepcionan.

Maldission, volver atrras y rastrear, ¡ha nevado! nos va a retrrasar mucho, Se le veía visiblemente enfadado...

- Vamos camarradas - interviene Argörath en lenguaje que todos los presentes puedan entender - demos vuelta a carreta y seguirremos charlando porr camino. Interresante eso que cuentas swot... Salvajes que trransformarse en hombrres Lobo. Habrrá que tomarr prrecauciones durrante noche - dice pensativo y con cierta preocupación.

- Y hablando de la carreta... ¿no cabrá otro enano ahí dentro, uno pequeñito? Creo que mi herrumbroso culo ha tenido suficiente cabalgata, y sinceramente, creo que se apañarán perfectamente Hal y Obendiya sin tener que cargar conmigo.

Esperaba que Krunk diera el vistobueno a su propuesta...

Arbar le hace un gesto con el cuello al Roto para que suba... a fin de cuentas Mostal lo hizo así... por algo sería...

Y comienza a hacer la maniobra para girar la carreta.

Háloric se mueve nervioso sobre Negraluna, en parte inquieto pensando en que aún no saben donde se encuentran los ladrones, en parte avergonzado por su error que desea reparar cuanto antes.
- Entiendo que quieras quedarte en la carreta Swot, la vida a lomos de una montura es bastante dura. Si alguno quiere tomar el lugar de Swot que se decida rápido pues Obendiya y yo nos volvemos a separar de vosotros en un momento, intentaremos acortar camino hacia la ruta del Este por alguna zona que nuestras monturas puedan recorrer aunque vosotros tengais que volver con el carro por lo llano. Si no adelantamos algo no veo que podamos alcanzarlos nunca - unas últimas palabras que dice Hal casi hablando para si mismo.
Un suspiro más tarde mira a su compañero nómada e intenta elevar los ánimos - ¿Que te parece Oben?, ¿hacemos correr un poco a Michabo y Negraluna?, por lo menos hasta llegar al camino del Este, ya descansarán mientras rastreamos esa carreta.