Partida Rol por web

Historia de Luz y Sombra

Calles Teñidas de Rojo

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24/05/2017, 12:22
Saphia

Saphia terminó por suspirar.

Ishtar, dame paciencia, pensó elevando los ojos. Se giró hacia los reos y habló por ella.

- Así que enrolarte en un barco de pescadores y desaparecer una temporada. Me parece justo - aceptó mirando detenidamente al bárbaro para luego mirar al resto, esperando sus reacciones, apoyos o negativas -. Pero recuerda, trisio, que si te vemos por aquí o nos enteramos que no has cumplido tu palabra... nos encargaremos de que termines navegando en el puerto. Sin barco ni tripulación - le avisó -. Desaparece y bajo ningún concepto retornes a Morven o sus empleadores. De lo contrario morirás... a sus manos - sentenció antes de tornarse hacia la hechicera.

- Y tú... aparte de tu madre, ¿Que otra familia mantienes? Tengas la que tengas deberías evacuarla de inmediato. Carros de mercancías salen a diario hacia Esnar. Es un buena opción - sugirió con firmeza -. ¿Dices que tu madre, enferma, no sobrevivirá a un viaje largo? Bien. ¿Y a uno corto? ¿Sobrevivirá a un viaje hasta el templo de Derthelas? Si es así, llévala allí también de inmediato. Di que vas de parte de la "sanadora fracasada" y atenderán las dolencias de tu madre, lo suficiente como para que pueda viajar posteriormente.

A excepción de la decrepitud, claro está.

- Wismerhill, enviarlos a prisión sería lo mismo que enviarlos a Morven o Sodderheim - le aclaró.

- Tiradas (1)
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24/05/2017, 13:03
Ulthor Wyrmslayer

-Escuchad: El trisio se va -indicó con el dedo al enorme mercenario, por fin convencido (aunque fuera a regañadientes) de irse de la ciudad- y la hechicera se queda. Le convertiremos a ella en el trisio e iremos a cobrar la recompensa por acabar con nosotros. Tú -señaló a la mercenaria- nos ayudarás a vencer a Morven. Si tenemos éxito no estarás obligada a nada más y te daremos lo que te iban a pagar por acabar con nosotros. Creo que es justo.

Con esto zanjaba el guardia elfo la cuestión. Ninguno de los dos irían a la cárcel y, probablemente, sobrevivieran ambos a la situación. Con la hechicera, tan necesitada de dinero, podían contar para este trabajo. Lo que le ofrecía Ulthor era como una segunda oportunidad y seguramente no la desperdiciaría. Además, le habían lanzado contra un grupo como el nuestro, mucho más potente de lo que podían manejar, y ahora ese mismo grupo iba a ayudarla a completar la misión encomendada. No era mal negocio. Faltaba, eso sí, que el resto del grupo aceptara sus palabras, cosa, al parecer, nada sencilla. Allí cada cual tenía su opinión y no dudaba en exhibirla como la bandera de un nuevo noble.

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24/05/2017, 13:56
Faicán

No se estaba poniendo digno, estaba siendo digno después de lo que consideraba que era un error impropio de un centauro. Una de las cosas que más le mortificaba de su acto es que hubiera sido cometido frente a humanos, los mismos que actuaban con sorpresa cuando lo veían por la calle. Nunca antes habían visto a alguien de su especie y la única referencia, el único ejemplo que podían tener para hacerse una idea de cómo eran los suyos, era a través de Faicán y lo que hacía, y lo que había hecho decía muy poco de él y los suyos.

Frunció el ceño cuando la mujer de los cabellos como la corteza del álamo blanco le reprochó ese cambio, que él consideraba correcto, en su actitud. Pero el mohín de enojo no tardó en desaparecer tan pronto confirmó que ella compartía su opinión y que todo había formado parte de una de esas tretas y mentiras a la que los pieles rosa eran tan aficionados. No obstante antes debía dejar una cosa muy clara a la bardo.

- Yo no tengo otra cara- dijo serio y encogiéndose de hombros añadió: -Yo soy así. Yo soy Faicán.

Él era quien era y no deseaba ser otro, algo que no parecían compartir las hembras humanas. Dos de las que formaban su grupo estaban dispuestas a hacerse pasar por quien no eran, y aunque comprendía las razones para ello -mentir y engañar para sacar un beneficio-, no compartía su gusto por ese tipo de métodos. Pero él era un extraño entre extraños y no estaba allí para cambiar sus costumbres, así que quedaba apechugar y aceptar lo que fuera que se decidiera en el seno del grupo del que el destino le había hecho formar parte.

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24/05/2017, 19:28
Wismerhill

- Wismerhill, enviarlos a prisión sería lo mismo que enviarlos a Morven o Sodderheim - le aclaró.

Puede que fuera así, pero aquello empezaba a dar igual a Wismerhill. Eran asesinos y no recibirían más que la recompensa por una vida segando vidas a sueldo. No los mataría a sangre fría, no, pero dentro de sus prioridades estaba lejos el preocuparse por su destino final.

La bardesa empezaba a creer que aquello se había extendido demasiado y que Morven, Imeya, y el mismísimo Asesino de la Escorbutera acabarían por personarse en aquel lugar en un momento dado.

Hizo un gesto de camaradería hacia Faicán, y después escuchó la propuesta de Ulthor.

- Los términos de Ulthor son aceptables para mí. Me parece una buena idea dejar al trisio embarcado y a Vesta a la vista. - La mujer sonrió tontamente por un momento ante el juego de palabras.

- Aunque alguien debería echarle un ojo. Yo tengo sus componentes, pero hay magias que no los necesitan. ¿Te verías capaz de hacerlo Lucrecia? Parece que entiendes algo de magia. -

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25/05/2017, 09:06
Ser Talisker

- Yo le echare un vistazo, dice el caballero. Si la decision esta ya tomada, ea, partamos a toda velocidad porque este tumulto seguro que ha traido muchas miradas no deseadas.

Ahora la velocidad debe de ser nuestra arma, vayamos a la Taberna concluye serio Ser Talisker

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26/05/2017, 00:20
Lucrecia

El verdadero truco no está en las ilusiones, replicó a la bardesa, sino en no dar motivos para la duda. Si tienen que comprobar que eres quien dices ser, estás colgando de los dedos en el borde de un desfiladero.

Y si pretendemos no levantar sospechas, hemos empezado con mal pie. Era perfectamente posible que Morven ya estuviera al tanto de todo lo que había sucedido. Si no tiene mejores informantes que mi querido hermanito, me comeré un puñado de pimienta.

No temas, estaré atenta por si conjura algo. Lucrecia le guiñó un ojo. Aunque no va a hacerlo. Si pudiera hacerse invisible o escaparse por una puerta dimensional, o tuviera motivos para hacerlo, ya estaría lejos de aquí.

No por primera vez, tuvo que morderse la lengua para no dar voz a las lagunas del plan. Seguir la recomendación del trisio era mucho más sencillo. Lo que fuera a salir mal, y estaba tan convencida de que todo iba a salir muy mal como de que podía improvisar un éxito de la amenaza de fracaso, lo haría de igual forma.

¿Podríais contarme por el camino en qué me he metido exactamente? pidió a los demás. Saphia ya sabe qué hago aquí. La explicación breve, y creo que evidente, es que es que tenemos objetivos comunes.

Mientras hablaba, extendía hilos inmateriales hacia las mentes de los aventureros. La maestra podía sentir las psiques. Ella necesitaba servirse de la vista, o del oído, o al menos saber dónde tenía que apuntar. Pero el entrenamiento recibido era suficiente para comunicarse telepáticamente.

¡Hola a todos! el saludo llegó directamente a las cinco mentes, con la voz de Lucrecia, para que no hubiera dudas del origen. No os asustéis. Es completamente inofensivo. No creo que nos esté escuchando nadie, pero prefiero ser cautelosa.

Las noticias tienen la mala costumbre de desafiar a la razón, y se las arreglan para correr más raudas que las personas. Incluso las que tienen cuatro patas, un pensamiento que guardó para sí, echando una mirada fugaz a Faicán. Sea cual fuere el plan para que nos acerquemos a ese, o esa Morven, esperad una celada y preparaos para ella. Me llevaré una pequeña alegría si estoy equivocada, incluso os invitaré a una cerveza.

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26/05/2017, 01:06
Saphia

Saphia se llevó los dedos pulgar e índice y presionó el puente de su nariz. Aquello se estaba complicando más de lo debido y sentía que no se estaba llegando a nada concluyente empleando a los mercenarios para sus propios propósitos.

La voz en su mente de Lucrecia y los silencios causados por Wishmerhill hacían la comunicación fácil sin que el trisio y la hechicera se enteraran de gran cosa.

- Tal vez me expliqué mal. Cuando quise quitarlos de en medio no estaba pensando en su integridad, únicamente, si no en evitar que fueran con el cuento a Morven, Sodderheim y el resto de "peces gordos". Cuanto menos supieran de nosotros, mejor - aclaró ante los diversos comentarios sobre empleo, uso y disfrute de los reos -. Dada la corrupción en la guardia, al minuto de su encierro, los empleadores serían avisados y obtendrían la información igualmente, por eso la cárcel no es una opción. No, lo mejor es tenerlos lejos de aquí... o matarlos - dijo mirando de nuevo a los dos matones que los miraban con aire confundido al ver como movían los labios pero no se les escuchaba nada.

- Pero soy de esas personas que creen que algunos individuos, dependiendo de sus crímenes, merecen una segunda oportunidad - aclaró a sus compañeros -. Por eso he abogado por una última oportunidad para ambos. Pero lejos de nosotros. Dudo que vayan a reportarnos ningún beneficio rondando alrededor. Todo lo contrario y por eso insisto en que desaparezcan: por su bien y por el nuestro - añadió.

- Que Vesta venga con nosotros o no, lo mismo da ya que no puede mostrarnos nada que no sepamos. Ella es tan ignorante de Morven como nosotros. El trisio sería mucho más útil pero no se puede confiar en él - adujo con una mirada fría al bárbaro -. Es por ello que creo que deberíamos meter a uno en un barco y a la otra en un carro con su familia. Y si esta no quiere viajar debido a su madre, que se refugie y oculte con ella en el templo de Derthelas, hasta que sane y pueda seguir a los suyos. Y ocuparnos de esa escoria oligárquica nosotros mismos - expuso con claridad sus pensamientos.

- Mas hágase lo que propongáis la mayoría - terminó encogiéndose levemente de hombros al observar que muchos tenían ganas de entrar en esa dichosa taberna, con Vesta por delante.