Partida Rol por web

El camino al Laberinto no tiene nada de misterioso. Se encuentra en la Planta -3 de la Academia, la cual curiosamente no se encuentra bajo la tierra ni nada: Solo está por debajo del piso principal de la entrada y más o menos a la altura del campo de flores, bosque interno y el lago.

Una bonita puerta de piedra da pie a la entrada del Laberinto. Muchos alumnos están conglomerados allí, buscando entrar. Un grupo de chicas se ha interpuesto frente a algunos, dificultando el acceso y asegurando de que la entrada debía ser de "Neko-san". Afortunadamente, algún alumno particularmente bueno en la magia de viento las ha lanzado volando por ahí y todos han podido entrar, aunque sea de uno a uno.

Para los nuevos alumnos quizás fue más difícil bajar que para los viejos. Sí, el Laberinto cambia de forma casi todos los días, sí, hay monstruos... Pero más peligroso que encontrarse con una de esas babosas verdes o esas Sombras es ver a un grupo de alumnos de otro Taller o grupo que quieren recoger la misma gema que tu o el mismo mineral que miras.

El Laberinto tiene una gran cantidad de materiales del Velo, un plano que se encuentra entre el mundo de donde se cree que viene la magia y el mundo donde habitan todos. Pero realmente hay más capas para el Laberinto, la rama principal no es más que una serie de corredores y escaleras hacia abajo que cambian constantemente de forma y tamaño. Se podría entender entonces que el Laberinto es el velo que conecta con los velos que separan el velo del Velo.

El objetivo es la Rama de la Biblioteca, una de las entradas suele aparecer en la planta -5 pero esto no siempre es seguro que esté allí.

En cuanto pudieron entrar gracias a sus fans Agdayne condujo a Ami y a Velvet a un pasillo poco concurrido, no sin guiñarles el ojo y dedicarles una sonrisa a sus sacrificadas admiradoras. Había que contentar a las aliadas a fin de cuentas...

-Trés bien, escuchadme. Tengo un plan, pero voy a necesitar vuestra colaboración, ¿oui?- Dice Agdayne mirando a ambas, intentando volver a la seriedad de la prueba. -En primer lugar, voy a pediros que me sigáis. No es bueno decirlo, pero soy un especialista en esto. Evitar trampas et pasar por un lugar diseñado para evitar encontrar el camino... Je, será trés facile.- Esboza una sonrisa confiada a su vez que saca un lápiz y abre un cuaderno que parece que ha llevado para la prueba. -En segundo lugar necesitaré que os encarguéis de las criaturas. Voy a ir dibujando nuestro recorrido en este cuaderno para evitar pasar por los mismos sitios.- Cierra los ojos y luego sonríe de oreja a oreja, como si tramara algo totalmente malicioso. -Pero ese no es el motivo, non, non. La idea es que debéis evitar que gaste energía. ¿Porquoi? Simple. He estado aprendiendo sobre la magia de transportación. Y si conocemos el camino puedo enviar a nuestros oponentes al punto del laberinto que hayamos visitado. Así no nos molestarán.-  Su sonrisa entre dientes se torna en una risa divertida. -¡Jajaja! No tendrán nada que hacer contra nosotros, non, non.

-No obstante, mademoiselle Velvet, aquí entra en juego lo que te he dado. Cuando estemos en una situación problemática en la que tengamos que deshacernos de alguien por el laberinto... Tendrás que echarme eso por encima. Mi magia tiene una activación trés... rudimentaria.- Dice asintiendo suavemente con la cabeza, revoleando la mirada.

-Así pues, ¿nos ponemos en camino?- Lo primero que hace Agdayne es dar suaves golpecitos a los muros para comprobar si hay un camino detrás de los mismos. A partir de ahí, hace un cabeceo a ambas para que le sigan, mientras dibuja el recorrido. ¡Maldito gato, lo tenía todo planeado!

En cuanto pudimos eché a correr sin esperar a nadie. Tenía que encontrar los mejores ingredientes y no dejar que me eliminaran por el camino. Llegué a la puerta, que era muy bonita pero no estaba para contemplar bellezas, tenía una competición que ganar. 

- ¿Qué demonios hacen esas pavas ahí? - gruñí mirando a las tipas que bloqueaban la entrada - ¿y quien demonios es Neko-san? - me escabullí hasta donde estaban el grupo de tontas chicas y las miré fieramente. Mi vena competitiva estaba en su máximo - quitaros de en medio, mentecatas, u os lanzo a Roth - el pequeño zorro se puso en versión asesina, lo cual significaba que parecía un peluche gruñendo porque le quitaban su comida.

Y entonces, me di cuenta de que Neko-san era uno de mis aliados, así que sonreí a las chicas - buen trabajo, chicas, seguid así.

En cuanto entramos, Agdayne nos contó su plan, que escuché con atención. En cuanto terminó, le hice el gesto de ok - entendido, por mi genial, estaremos preparados para lo que sea.

Mientras prestaba atención a la conversación, agudicé los sentidos para ver si oía algo o percibía algún peligro cercano.

Velvet siguió a Agdayne entre la multitud hasta llegar a la entrada del laberinto. Ami también se unió en la búsqueda por el laberinto y llegó corriendo hasta donde se encontraba Velvet cuando se toparon con el grupo de fanáticas en la puerta. Al ver a Agdayne se pusieron a gritar como locas y, mientras, Ami las maldecía. Velvet miraba la escena sin acabar de entender el estúpido comportamiento de esas chicas. Mientras pasaban hacia el interior del laberinto, Velvet dedicó una mirada gélida cargada de compasión a las escandalosas muchachas.

Una vez dentro, Agdayne les contó su plan. - Está bien, si eres bueno en esto confiaré en ti - dice cuando el chico explica que se le da bien moverse por estos sitios. Cuando termina de contarlo todo, Velvet asiente. -De acuerdo, Ami y yo te cubriremos las espaldas. - Parece que empieza lo bueno.

Velvet examina el entorno a su alrededor, nunca había estado en un sitio como aquel... Pero no hay tiempo para encantarse, los demás no tardarán en entrar. Los tres se ponen en marcha y Velvet se empieza a concentrar, intentando estar atenta a cualquier ruido, sombra o movimiento.

Con una vaga idea ya formada en su mente el taller de Roland finalmente puso rumbo hacia el laberinto junto a otros de sus compañeros que habian decidido unirse a ellos al menos para la competicion, tan pronto como llegaron a la entrada del laberinto quedo mas que claro que una porcion bastante grande de los alumnos habian elegido aquel lugar como su primer objetivo por lo que la tension era palpable mientras los diferentes grupos comenzaban a adentrarse en el mismo.

Viendo que con aquella cantidad de gente el conflicto no tardaria en estallar por algun recurso Roland penso que quizas lo mejor seria que apuraran el paso antes de que se encontraran atrapados en medio de alguna pelea-quizas seria una buena idea hacer un descenso considerable antes de comenzar a explorar el laberinto en busca de materiales no creen?,con la cantidad de grupos que hay aqui los primero niveles no tardaran en vaciarse de recursos y las cosas podrian ponerse feas con mucha facilidad-finalizo esperando a escuchar si alguien tenia alguna sugerencia o conocia alguna ubicacion especifica donde pudieran obtener un material para su proyecto.

Parece que Agdayne y su grupo se han marchado sin dejar rastro. Por su grupo, hablamos de los miembros de su taller, Velvet y Ami.

¡El trío de señoritas compañeros avanza por el laberinto! Cada vez que parecía que iban a llegar a una zona peligrosa, Agdayne los hacía girar por un pasadizo oculto entre las sombras o caminar a través de una pared ilusoria. No es que Agdayne sepa pro donde va, es que todo eso de las trampas y los engaños típicos de laberintos se lo sabe muy bien.

Se ve venir las trampas a años luz de distancia y las circula con facilidad~ Afortunadamente el grupo de fans no ocasionó muchos problemas y les dio algo de tiempo extra. Entre las fans y la dirección de Agdayne, evitaron todo encuentro con otros alumnos y monstruos.

Todo habría salido perfecto de no ser porque Velvet pisó un huevo de algo cuando estaban cerca de las escaleras que bajaban hasta la 4ta planta del laberinto. Repentinamente, algo agarró su pie, ¡reteniendola en el lugar!

Un bicho baboso empezó a surgir de debajo de su suela, envolviendola hasta el tobillo de ese pie. Es viscoso y asqueroso: ¡Es una babosa verde! ¡El enemigo número uno de los aventureros novatos! Detrás de los goblins, por supuesto.

Otras más empiezan a salir de las paredes... Parecen ser tres. No deberían dar muchos problemas, pero son el tipo de criaturas que se resisten mucho a ser matadas, precisamente por eso de ser gelatinosas y tal.

¡Parece que van todas hacia Velvet! Dos de ellas están algo lejos, pero se van acercando. Una está literalmente junto a Velvet.

¡La pobre Velvet casi no puede moverse de donde está! La criatura procura agarrarse más a ella, parece muy enojada por lo que le pasó a su pobre huevo. Velvet no consigue quitársela de encima pero evita que la criatura la retenga más que antes, permitiéndole actuar, defenderse o atacar incluso. Moverse ya no tanto.

-Vaya... Sí que van rápido todos.-, dijo ella, cruzándose de brazos.

Nadie se digna a responderle a Roland, todos van a lo suyo, ¡Es una competencia!

-... Hm... En cualquier lugar de las primeras plantas podremos encontrar cosas útiles para encantamientos básicos...

-Podemos buscar la entrada al Ala del Laberinto. Pero como se nos están adelantando los demás... Puede que tengamos que pelear un poco contra otros alumnos para conseguir las mejores cosas...

-Cielos. Y yo que pensaba que este año sería tranquilo.

En eso, llega Baxter y una chica de las nuevas.

-Tsk... Parece que ya han entrado muchos... Bueno, ¡Ya me dirás cómo quieres que procedamos! ¿Vamos a lo loco, a ver si alcanzamos a los que van a la delantera? ¿O mejor buscamos algún material más chustero por el camino y sudamos de todo el evento? Yo con tal de no suspender...

-De todos modos estaré atenta a trampas y tal.

Allí están Roland y una chica, planeando cómo proceder también.

¿Tú crees que Wen nos dejará vivir en paz si el tiene que enfrentarse a Zak y compañía por unas cuantas escamas de dracorín y se entera de que ni lo hemos intentado? Mal empezaba la cosa cuando ni siquiera habíamos empezado y ya estaba poniendo escusas. Anna hay que centrarse, si el resto ha empezado antes solo quiere decir que se han comido todos los primeros monstruos y trampas.

Agarro a Anna por la mano y entro con paso decidido, no intento otras acciones hasta tener fuera de vista al alumno que hay en la puerta. Una vez pasados un par de esquinas. A ver si podemos tomar un atajo. Susurro: "Paso terrestre" Con la intención de hacer que Anna y yo pasemos por el suelo hasta el siguiente nivel con la esperanza de no caer directamente en una trampa o junto alguna criatura.

Cuando vi surgir la cosa babosa aquella a los pies de Velvet no la envidié para nada.

- Iiigh - dije con cara de asco mientras me alejaba un poco - ¡Iiiih! - exclamé cuanto más de aquellas cosas repugnantes salieron de las paredes. No es que los bichos me dieran asco o miedo, pero es que aquellos eran especialmente repelentes. Me acerqué a Agdayne, como queriendo usarlo de escudo para que no me alcanzaran.

Al ver que iban a hacia mi compañera, saqué valor de mi flaqueza - tu puedes, Ami, no pienses en que tienes que tocarlas, tienes que ayudar a Velvet. Con un gesto más convencido, me separé del chico gato y di un gran salto para intentar saltar sobre la babosa más cercana a la pelirroja.

Parece que todo va como la seda. Siguiendo a Agdayne parece que van sorteando todas las trampas y trucos del laberinto. Justo cuando habían encontrado las escaleras para seguir bajando, Velvet pareció escuchar un ruido algo lejano. Fue su error girar la cabeza para mirar atrás, ya que no vio el huevo que tenía justo delante. Ese pequeño despiste la llevó a cometer un gran error: pisó el huevo de una especie de criatura. - Oh no...- Pensó la chica cuando uno de los bichos la agarró por el pie.

Velvet miró con expresión fría aquella masa viscosa que la tenía cogida por la pierna. Pronto salieron más criaturas de aspecto baboso de todas partes; todas dirigiéndose hacia Velvet. -Babosas... Uugh -Exclamó Velvet. Había leído algo de ellas en uno de los libros que le había prestado el profesor.

No tenía tiempo que perder, así que rápidamente apareció Faceless a su lado. Velvet se concentró y su criatura blanca empezó a arremeter contra aquellas babosas que la retenían, aplastándolas. Mientras, Ami parecía que también iba en su ayuda.

Agdayne estaba caminando con el cuaderno bastante tranquilo hasta el momento en el que oyó a Velvet romper algo con el pie. Eriza las orejas y se tensa al sentir más presencias, cosa que le hace bufar de forma divertida. -Sacrébleu... aquí vienen, primer problema.- Cierra su cuaderno y lo guarda. Solo son tres y él no tiene oportunidad para lanzar un hechizo en esos momentos. No obstante, el gato es un maestro de la improvisación, y aunque no sea él el que tiene que huir de esas pequeñas cosas babosas, el éxito de la misión depende del tiempo que tarden en salir de este entuerto.

Agdayne se acerca a un ladrillo o roca caída y lo levanta con ambas manos y algo de esfuerzo. Las tareas físicas no se le dan en absoluto bien al felino. -¡Grrr! Trés bien... Vamos a aplastar insectos... Un, deux...- Levanta el pedrusco apretando los dientes y lo deja caer con fuerza sobre uno de los seres babosos. -¡TROIS!- ¿Qué mejor manera de detectar un punto débil que aplastando todo gracias al poder de la gravedad? Porque su poder físico no es que sea lo mejor del mundo.

Cuando avanzan un poco por el Laberinto y encuentran un punto donde nadie les mira, Baxter ejecuta su hechizo. ¡Funciona, sí! El problema es que consigue ver que el espacio abajo parece estar inundado de un agua algo verdosa. No huele a nada realmente, pero parece que el punto que escogió para bajar no será útil.

-Oye, eso ha sido ingenioso. Hm... A ver... Uh. Creo que ese agua de ahí es parte de una trampa del piso de abajo.-

Se arrodilla, mirando. -Podría intentar activarla desde aquí si me tiro adentro. Con algo de suerte cae sobre alguien y desde ahí podemos tomar otro atajo. A ver...-, lanzó una pequeña piedra al líquido. Se hunde sin problemas. -No parece ácido ni nada. Aunque... Uh, si bajamos después de que active la trampa, que supongo que drenará esa sala... Si no encontramos cómo seguír desde ahí, tendrás que usar tu magia para ayudarnos a subir de nuevo a esta planta y habremos perdido mucho tiempo.

¡Ami ataca con fiereza a la babosa criatura! Saltó sobre la babosa (que por cierto, es más o menos de la altura de Ami) y le dio un puñetazo. El problema es que la criatura reaccionó como gelatina y el ataque de la pobre Ami, si bien exitoso, tan solo consiguió desplazarla un poco de lugar. Y dejarle la mano gelatinosa, claro.

Al menos esa cosa cambió de objetivo, mirando ahora a Ami. ¡Se lanza sobre ella! La chica-zorro es, sin embargo, demasiado rápida como para poder ser derrotada con tan simple táctica. Es rozada por la criatura, sí, pero acompaña la dirección del ataque de forma tal que en vez de golpearla, tan solo la empuja. Parece que tanto Ami como las babosas son demasiado débiles físicamente como para dañar al otro sin un golpe perfectamente dado...

Faceless se forma junto a Velvet cual ilusoria aparición. Inmediatamente se lanza a golpear con violencia a la criatura, soltando algunos chillidos de rabia. La babosa intenta apartarse pero es arremetida, siendo lanzada contra la pared más cercana tras eso. Velvet está libre ahora. No parece del todo derrotada pero ha quedado aturdida, incapaz de atacar esta ronda.

Es en eso que la tercera babosa se acercaba vilmente por la espalda de Velvet, ¡Está a punto de atacar! Y luego se escucha un splorch. Un gran ladrillo de piedra ha aplastado completamente a la criatura.

Queda una en buen estado y otra que con soplarle lo suficientemente fuerte se desintegra.

Creo que deberiamos evitar los enfrentamientos de momento,no creo que tengamos la ventaja numerica o tactica-observo el viendo que la competicion iba a ser reñida-creo que lo mejor seria buscar el ala del laberinto y buscar en la zona mas profunda,estoy seguro que los grupos no habran tenido aun demasiado tiempo y podremos encontrar materiales alli sin demasiada resistencia-finalizo mientras esperaba que Kyra lo guiara dado que ella tenia mas conocimientos que el sobre aquel lugar y su geografia.

No había elegido el lugar correctamente, hemos terminado en una especie de estanque con algún líquido extraño. Anna cree que forma parte de alguna trampa.

Si es una trampa no creo que bañarse en ella vaya a suponer un resultado positivo. Pero si crees que el peso de un cuerpo puede activarla yo puedo ayudar con eso. Espero unos momentos para darle tiempo a corregirme, ya he usado energía e iba a utilizar más y ni siquiera nos habíamos cruzado en combate con ninguna criatura. Golem pétreo. Esta vez me centro más en crear un único golem fuerte y duradero en lugar de varios prescindibles.

Tan solo esperaba que el agua no fuese algún tipo de activador para los que nos podía esperar ahí abajo. Tal vez destruir el suelo para que se drenase en el peor de los casos. Ahora solo me quedaba observar las consecuencias de mis actos y esperar que no fuesen tan poco productivas como me temía. Si crees que aparte del peso hay algo que pueda hacer el golem para facilitar la activación soy todo oídos. En caso de que haga sugerencias las sigo al pie de la letra.

La babosa era un adversario temible, ninguno de los dos dábamos el brazo a torcer. Nuestros golpes estaban igualados, pero yo era más rápida, seguro. Lo miré con gesto de pocos amigos.

- Puede que seas fuerte, amigo, pero no podrás con la gran Ami - le desafié. Entonces, noté que algo me falta a mi lado. Eché la cabeza atrás y vi a Roth escondido detrás de una liana - vamos, Roth, no seas cobarde. Si yo puedo enfrentar estas cosas gelatinosas tu también.

El pequeño zorrito salió de su escondite poco convencido, pero atacó, saltando encima de la babosa y casi revotando en la blanda superficie de la babosa. Yo también lancé otro ataque, con algo más de concentración que la primera vez.

Agdayne deja esa piedra ahí. No le apetece demasiado levantarla y ver el espectáculo mucoso que ha causado ese impacto bruto contra el suelo. ¡Quién iba a decir que la fuerza bruta sería efectiva! Bueno, realmente la gravedad ha hecho gran parte del trabajo...

-¡Uno menos por aquí, mademoiselles, seguid así!- Masculla a la vez que se dirige hacia la babosa a la que Amy no golpea, la que le queda menos de un soplido. Por el camino agarra otra roca y se dispone a realizar el mismo procedimiento. ¡Si es útil, usarlo dos veces no será mala idea!

Kyra asintió a Roland, mirándole.

-Bien. Vamos a ello.-

Ella se orienta bastante bien. Parece que tiene idea de cómo navegar el Laberinto, incluso si realmente no conoce los caminos es capaz de reconocer patrones y aprovecharlos.

Encuentra varias trampas y guía a Roland por unos senderos hasta que llegan a unas escaleras. Tras bajarlas, se encuentran en el segundo subsuelo sin ningún problema. Cuando finalmente están por el tercero, mientras siguen por el pasillo...