Partida Rol por web

-¡Parrad!¿Qué hacéis imbéciles?¡Jurrro que os arranqué la piel si los espantáis!

Kanlil se para al escuchar la voz de Beros. Había confiado en poder irse sin que los bárbaros los viesen. Kanlil mira a su maestro con cara de circunstancia.
¿Qué hacemos maestro? Volvemos a nuestros puestos de vigilancia, para seguirles la corriente… o echamos a correr?

Beros, creo que el peludo puede habernos despistado y haber vuelto s donde lo vi antes, es hábil para hacer ese tipo de cosas, deberias seguirnos.

-¡NO! Todas las salidas de están cubierrrtas, no tienen escapatorrria. No sirrve de nada irrr de un lado a otrrro y dejarr esta salida sin vigggilarr. ¡Volved a vuestrrro sitio ahorra mismo!

De acuerdo, hicimos lo que vosotros digisteis

Malditos barbaros estupidos

Beros no responde desde su escondite.

Vaya… ¿Así como vamos a ir a buscar a Forad?
Kanlil echa una mirada, buscando una vía por donde poder irse sin ser vistos.

Vamos a escondernos en la parte trasera de la casa que esta detras del tipi de los barbaros

Ankor sigue a Sortien aunque por su cara parece que empieza a estar cansado de dar vueltas de un lado para otro. Al haberse alejado lo suficiente masculla entre dientes dirigiendose a Sortien.

Viejo, tienes algún plan o vamos a estar dando vueltas toda la noche. Deberíamos pensar algo porque para cuando esto se ponga feo entre los clanes lo mismo ya es demasiado tarde para pensar nada.

Kanlil sigue a su maestro a esconderse, esperando que los bárbaros se crean que lo hacen para esconderse de Forad, como ellos. En cambio espera poder irse por atrás sin que estos los vean.
¿Maestro, nos marcharemos por atrás cuando estemos fuera de su alcance visual?

Con rapidez os ocultáis tras la zapatería que se levanta junto al pebetero. Allí dialogáis entre susurros qué hacer a continuación.

Los tres compañeros se esconden tras el edificio, quedando fuera del alcance visual de los barbaros.
Bien, ahora que no nos ven, podríamos intentar escabullirnos por atrás, y buscar a Forad.
Kanlil se acerca a la parte trasera del edificio, y asoma la cabeza buscando un camino por el que poder irse sin ser vistos.

Desde luego que a Kanlil no le parece complicado alejarse de allí sin ser visto corriendo por entre las chozas de madera de los peones de la obra del mausoleo. Luego sólo habría que encararse colina abajo y caminar un par de minutos para llegar de nuevo a la avenida de los candeleros, donde Sortien vio por última vez a Forad.

Pues claro Kanlil, ¿por que otro motivo nos ibamos a esconder aqui... vamos ve tu marcando el paso

Kanlil se dispone a encabezar la marcha como le pide su maestro, escabulléndose por la parte trasera del edificio en el que se esconden. Ha decidido la ruta de escape, entre las chozas, e intenta andar sin meter demasiado ruido. Aunque los bárbaros no les vean, tal vez puedan escucharles desde donde están.

Quizás sea mejor que Ankor se quede aqui.....