Partida Rol por web

Torre en brumas

Iaobahl

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31/12/2014, 18:43
Iseo de Candelero

Cuando llegó a la altura de la elfa, la miró a los ojos y le preguntó sin más dilación:

—¿Quién es Iaobahl?

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31/12/2014, 21:14
Trixa

En cuanto Iseo comentó de ir a la barra, Trixa se dejó llevar. Un momento. ¿Iseo la había llamado amiga? Cómo cambiaban las cosas. Pero no para mal, decidió. Iseo podría ser sin ningún problema su amiga. 

Y se dirigió a la barra. En realidad sí tenía sed. Todavía no sabía si la cerveza le gustaba o no. Era bebida de aventureros y tenía que estar buena... pero en realidad... en fin. Desde la barra podría vigilar que nada le pasaba a Zz'pora.

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31/12/2014, 21:17
Trixa

—Eso, en el nombre de Tymora— a Trixa le gustaba esa expresión— ¿Qué es Ioubul?

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02/01/2015, 11:40
Zz'pora

Zz'pora se cruzó de brazos y meditó lo que le había dicho el bardo durante unos instantes. Así que ese era el motivo por el que le había desaparecido el monedero. ¿Tanto poder tenían en ese mundo los juramentos?

—No voy a dejar a un amigo en la estacada —respondió el Caballero de Chelimber—. Cuéntame qué has averiguado.

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02/01/2015, 18:35
Aleera

Aleera había esperado tener un momento de respiro para organizar el caos que tenía en la cabeza en aquel momento pero al parecer no iba a gozar de él. Por otra parte, sintió que tampoco podía culpar a la gente... era a ella a la que se le daba francamente trabajar con otras personas, siempre iba a sola a todos con la única compañía de su lobo.

La repugnante sanguijuela de ciénaga a la que voy a arrancar la cabeza, echar sal en la herida  y patear contra un muro hasta que hacer un agujero. Suponiendo que me sienta misericordiosa—gruñó acodándose sobre la barra, mirando un nudo de la superficie con gesto ceñudo como si se hubiese enfadado con él o algo así. En ese momento se dio cuenta de que no había dado lo que se dice una respuesta así que carraspeó y añadió a regañadientes:—. Es el... amante de Nikander.

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02/01/2015, 21:42
Evaryan "Palabras Melosas"

El bardo suspiró aliviado y asintió.

—No demasiado, pero suficiente para seguir buscando. En este pueblo vive uno de los "informantes" que nos dijo la falsa ubicación de Nikander. Viene a esta taberna de vez en cuando, cada dos o tres días. Quizá trabaje para el brujo, pero si fue hechizado o engañado podría ayudarnos a demostrar que Nikander estuvo detrás.

Se encogió de hombros y trató de recordar otros detalles.

—También sé que los dolientes provenían de la gran capital, Euforia. Tienen familia y amigos ahí. Quizá sea un lugar poco hospitalario para nosotros, pero tendríamos que dar la cara tarde o temprano. Tal vez podamos conseguir que nos crean. Como mínimo, les debemos una explicación.

El tema era tan doloroso para Evaryan como lo era para Zz´pora. Sin duda, el bardo tenía un recuerdo completo de todo lo que había pasado. Tan solo parecían variar detalles y ubicaciones, como si todo en efecto hubiera transcurrido en este mundo que él llamaba Iaobahl.

—Eso es todo lo que se me ocurre. Ojalá tuviéramos a Sadiki aquí— por la forma en que le miraba, el hombre lagarto era lo más parecido a un líder para el bardo en ausencia del paladín calishita. —¿Qué piensas?

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03/01/2015, 01:06
Iseo de Candelero

A diferencia de Trixa y Zz'pora, el odio de Aleera no caía sobre Nikander, sino sobre el hombre que compartía nombre con aquel mundo. El mago al que todos conocían, sospechaba, no era para la elfa más que un paso intermedio para alcanzar a ese hombre.

—Me he sentido así alguna vez —reconoció, mirando a Aleera a los ojos. A pesar de su escasa experiencia como cuestionadora, había conocido a personas que habían hundido sus zarpas en la corrupción tan profundamente que incluso el castigo definitivo parecía clemente. La persona que tenía en mente, sin embargo, por mucho que le doliera reconocerlo, era su propio hermano. Sus pecados personales no eran imperdonables; los que había posibilitado su actitud eran horripilantes. Y sobre todo, la razón por la que había deseado golpearle con sus propias manos hasta no poder más, era la traición—. Aunque nunca he podido comprobar qué se sentiría.

Suspiró, dejando que los pensamientos del pasado se disolvieran para dejar espacio a lo que era importante en aquel momento.

Así que su amante. Ni siquiera conocía ese lado de Nikander.

Apoyó una mano en la barra y dejó caer su peso sobre él. A pesar de haber pasado dos días y sus noches a la intemperie, todavía tenía las puntas de los dedos manchadas de tinta.

Debería haberlo sabido antes de usar el pergamino; ahora es tarde. Incluso de haber esperado, no estaba segura de que el conjuro le hubiera permitido encontrar la relación entre Iaobahl y el resto de los apuntes de aquel año, o sobre aquel mundo en el que se encontraban, que compartía su nombre. Si no daban pronto con el mago, tenía que encontrar un modo de abrir el cuaderno con seguridad.

A falta de más datos, y la reacción de Aleera evidenciaba que tenía mucho que contar, la revelación no era suficciente para profundizar en lo que sabía. Estaba tan confusa que no se atrevía a esbozar el principio de una hipótesis, por temor a forzar una asociación de ideas donde solo había indicios, y encauzar sus pensamientos en una dirección errónea de la que le resultara complicado desprenderse.

—Será mejor que sigamos hablando de esto cuando estemos todos reunidos de nuevo —dijo, en tono apaciguador—. Podemos permitirnos unos momentos de ocio y descanso.

Dejó el sombrero sobre la barra y levantó una mano para llamar la atención del posadero.

—Buenos días tengas, señor. Ponme dos vasos de vino —pidió—, para mí y para el hombretón de la puerta. ¿Vosotras qué queréis?

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03/01/2015, 02:07
Tabernero

El distraído dueño de la taberna tardó en darse cuenta siquiera de que había clientes en la barra, pero cuando lo hizó no pudo evitar clavar la mirada en Aleera. No sería de extrañar que no hubiera visto una elfa en su vida, y todavía no sabía si tenía delante a la mujer más guapa que había visto o a un monstruo de leyenda. Recordando las historias de ninfas, dríadas y demás criaturas, el hombre difícilmente se concentró para responder.

—Eh... Sí. Vino.

Tomó una botella y la abrió sin separar la mirada de la druida. Todavía no había decidido si quería alejarse de esa mujer o todo lo contrario. Zz´pora estaba sentado de espaldas al tabernero, afortunadamente, pues de lo contrario probablemente hubiera optado por huir gritando.

Puso dos vasos de madera en la barra y sirvió la bebida, haciendo un esfuerzo por poner su atención en las otras dos mujeres.

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03/01/2015, 02:41
Trixa

—¡El amante de Nikander!— dijo Trixa sorprendida para luego bajar la voz.  

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04/01/2015, 16:45
Trixa

Se había sentido de forma parecida a lo que decía Aleera... con el propio Nikander. Pero antes siempre había querido respuestas, ahora se llevó la mano a la boca a tapársela al haber elevado la voz.

—Sí, claro... estooooo— dijo ya más bajo. ¿Cómo era posible que una persona tuviera el mismo nombre que un país o lugar... —¡Claro!— dijo en voz alta un momento para volver a taparse la boca con la mano.

Quizás era que el tal Iobul había mentido a la hora de dar su nombre y había dado el nombre del lugar. 

—Yo querría cerveza— comentó. —¡La bebida de los aventureros!— dijo con una sonrisa al tabernero. 

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04/01/2015, 17:02
Aleera

Aleera inspiró hondo y enterró el rostro en una mano. Trixa era demasiado ruidosa para lo que la druida estaba acostumbrada pero tampoco es que tuviese mucho sentido reprendérselo; Iseo sin embargo parecía ser todo lo contrario.

—No sé cuántos momentos de descanso podemos permitirnos cuando perseguimos a un mago... —suspiró volviendo a apartar la mano—. Aunque si hay que pararse, preferiría que no fuese aquí.

Se sentía fuera de lugar en un pueblo. Además, si Nikander había huído de la manada de lobas es que había empleado magia, y no quería que lo volviese a hacer. Ya de por sí estaba en el límite de la percepción de Kra y por nada del mundo estaba dispuesta a que se le volviese a escapar. Simplemente era incapaz de permitir tal cosa ahora que estaba tan cerca.

—No quiero nada... —murmuró cuando la invitaron a algo.

Solo cuando levantó la vista de la barra se fijó en cómo la miraba el tabernero, aunque no tenía claro si lo que detectaba era miedo o fascinación. No sabía qué rayos pasaba con aquella gente pero ella se limitó a ladear la cabeza. Seguía necesitando averiguar si podía darle algunas indicaciones.

—Disculpe, ¿puedo preguntarle algo?

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04/01/2015, 19:19
Tabernero

El tabernero, ya intimidado por la elfa, quedó estupefacto al recibir su atención.

—Ah...

Fiándose de su lengua menos que de ningún monstruo, el hombre acabó asintiendo con la cabeza para no hacer esperar a su clienta.

—¿Sssí?

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04/01/2015, 19:41
Zz'pora

Zz'pora ladeó la cabeza y observó a su compañero con un único ojo reptiliano. ¿Le preguntaba a él qué debían hacer? ¡Si había sido el último en ingresar en los Siete Honorables, y ni siquiera debía estar allí!

—Tengo razones para pensar que Nikander pasó por Iaobahl hace poco. ¿Crees que ha podido contactar con su antiguo informante? ¿Controlas sus idas y venidas?

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04/01/2015, 19:36
Aleera

Aleera le dio la descripción de Nikander.

—¿Ha visto pasar por aquí a un hombre así? Un mago—dijo. Luego añadió recordando la dirección en la que el Familiar parecía empeñado:—. ¿Y sabría decirme si hay algo destacable al norte de aquí? Otro pueblo, algún lugar relevante...

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04/01/2015, 20:11
Iseo de Candelero

Iseo se acercó los dos vasos de vino. Antes de llevarle el suyo a Xander, esperó a escuchar lo que tenía que decir el tabernero al respecto de la descripción de Aleera. El pobre hombre observaba a la elfa como si fuera la primera vez queq veía a alguien como ella. Afortunadamente, Zz'Pora llevaba una armadura de factura humana, y su cabeza, de espaldas, podía pasar por un casco extravagante.

—No te olvides de su cerveza —le recordó, señalando a Trixa con un movimiento de la cabeza.

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05/01/2015, 00:44
Tabernero

El hombre pareció preocupado por lo que Aleera le preguntó, hasta el punto de superar su fascinación. Miró la taberna, comprobando la discreción del lugar, antes de hablar.

—El hombre de túnica roja, sí. Esta mañana, a primera hora, todos mis clientes hablaban de él. Tenía una piedra que brillaba. Se marchó hacia el norte, o noroeste. Si era un mago, no podíamos saberlo. Nadie le ayudó y yo no hablé con él—  negó con la cabeza y levantó las palmas de las manos defensivamente, como dejando claro que no tenía nada que ver con ningún brujo.

No era sorprendente que ese mundo fuese intolerante también con los practicantes de magia. El tabernero reaccionaba como si estuviera siendo interrogado y cualquier mención a un mago pudiera meterle en problemas.

—Al norte está el camino Oeste hacia la capital, por supuesto. También hay un campamento de golems, dicen. Y los grandes pantanos. ¿De dónde son ustedes? No parecen trabajar para el Archimago. No queremos nada que ver con extranjeros buscando brujos. 

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05/01/2015, 01:08
Evaryan "Palabras Melosas"

Evaryan miró a Zz´pora durante un largo momento.

—Me temo que no sé nada de Nikander. Es peligroso ir preguntando por brujos por ahí, y aunque lo encontrara, ¿qué podría hacer yo solo contra él? Espero que los golems, o quien sea, le hayan dado su merecido.

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05/01/2015, 01:11
Aleera

Aleera parpadeó primero con un anecdótico gesto inocente ante la velocidad con la que el hombre había contestado, recordando que podía haber parecido demasiado seria hablando o que a veces miraba demasiado fijamente a los ojos. Era una costumbre que se había inculcado desde pequeña; en el reino animal, mirar a los ojos tenia un valor muy concreto.

Quizá por lo asustado que parecía el hombre ante una pregunta tan simple o porque al menos había recibido algo de información de Nikander, se permitió relajar la expresión y sonrió con suavidad.

—No se preocupe, no queremos causarle problemas a nadie—dijo levantando también las palmas, solo que en su caso era más bien un gesto apaciguador—. Es usted de gran ayuda. Gracias.

Así que una piedra brillante.... algun artefacto mágico seguramente. Si Nikander no buscaba el camino para ir a la capital, tan solo esperaba que aquel cacharro no tuviera nada que ver con los golems.

Por otra parte, parecían haber aterrizado en el tipico lugar que le tenía pánico a cualquier cosa remotamente mágica. ¿Sabrían lo que era un druida? Si le decía que vivía en el bosque y era capaz de convocar las fuerzas de la naturaleza igual le dab aun infarto.

—Sí, somos de... una tierra lejana—respondió a la pregunta cuando los identificó como extranjeros, añadiendo para sus adentros que de hecho no sabía ni lo "lejana" que era en aquel momento—. Sólo pregunto para orientarme un poco. ¿Quién es el Archimago que ha mencionado?

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05/01/2015, 17:15
Iseo de Candelero

—Además, solo estamos de paso —añadió al comentario apaciguador de Aleera.

Nikander había pasado por allí, causando un revuelo no muy diferente al que probablemente estaba provocando el quinteto. Si ya no se encontraba en el pueblo, marcharse cuanto antes sería lo más prudente.

—Si no hablaste con él, ¿quién lo hizo?

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06/01/2015, 08:31
Trixa

Trixa se sentía un poco deprimida, la gente de aquella tierra era muy supersticiosa... quizá de allí venían todos los magos malvados, los que hacían las cosas horribles que ella conocía. 

Se quedó esperando a ver las respuestas que daba a Iseo, si fuera por ella le susurraría. Habla conmigo o iré por todos los pueblos diciendo que en tu taberna haces aquellarres con brujos y vampiros. O algo así. Para que se pusiera blanco y hablara. Pero aquello sin duda estaría maaaal. En fin.