-Fro...Foilán, gracias a Dios. Agua...agua, por misericordia- pide fray Tomás.
Llegamos a la casa de Flora donde encontramos a su padre. El joven Arturo nos presenta et asiento con la cabeza. No es natural en mi hablar con las gentes pues soy mujer de campo et non me gusta mucho entablar conversación mas de lo estrictamente necesario
.si la buena de Orosia quiere añadir algo más, bienvenido sea.
niego con la cabeza levemente para dejar claro que nada mas he de añadir a lo dicho por Arturo et espero la respuesta del padre de Flora. Acompaño a Flora por la casa para ver si necesita de mi ayuda para acomodarse ella o para asistir al suyo padre.
Me voy finjando en la humilde morada et sin llamar mucho la atención me fijo en el fuego, el tipo de madera que estan quemando, si la casa esta ordenada o no y se veo algo fuera de lugar para una casa de campo.
Tirada oculta
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 43-
Resultado: 96 (Fracaso)
Dejo hecha una tirada de descubrir por si hubiese algo fuera de los normal en la casa
Aquella respuesta pilló a la joven con el pie cambiado et no supo reaccionar. Lo que achacaba a un mal sueño resultó en que el ferido agonizaba. Sin saber por qué, decidió auxiliarle et tornó en dirección a las escaleras. Con suerte en la cocina tenía en una de las vasijas agua.
Martín Nabero, que se había incorporado se vuelve a recostar en silencio. Creyendo que le pide algo, Flora inclina su cabeza para escuchar mientras le toca con la palma la mejilla. Pero frunce el ceño desconcertada. Tras otro silencio, Martín vuelve a hablar despacio.. - Vermudo había un grande temor de una sombra de aquestos bosques...- tose- ...Dexía que había un ánima tuerta que vagaba entre las sombras de los pinos, al alba o al anochecer...- tose otra vez-... et como yo también vila. preguntele si mandaba aquesta espíritu los lobos...Dixo que non sabía, e que primo había de subir a la cueva donde el lago... e que hasta que la dama non desapareció, non se vio sombra alguna en aquesta montañas..- La tos le vuelve a interrumpir, y ya no puede continuar. Flora le da agua. Os habéis acercado y notáis un olor más fuerte.
Tirad por Sanar o por Medicina.
Ví que al omne costabale hablar, mas non sabía cómo ayudarle.
-¿Do esta esa cueva?Quizás si allí llegasemos podríamos dar fin al origen del mal.-Miré a Orosia para ver su opinión. No creia mucho en los tales espíritus. Pero después de lo visto en la cabaña empezaba a creer.
Motivo: sanar
Tirada: 1d100
Dificultad: 17-
Resultado: 54 (Fracaso)
Volvéis a casa de Tegidria. Por el camino, oís correteos por los patios traseros y el canto de alguna lechuza, pero no véis nada vivo. Tegidria pregunta quien vive tras la puerta, pero abre tan pronto os oye. Una breve mirada desconfiada oscurece su afabilidad cuando ve a don Tancredo, pero sale a abrir las puertas de la cuadra, para que pongáis a resguardo a los caballos. -Noble caballero.. non haygo más camas hoy que las que había ayer. Si aquí queredeis hospedaros, habréis de facerme compañía en el suelo de la cocina e vos aconsejo coger paja de aquí para fazer un lecho, ca el suelo es bien frio.- No parece que la vieja se niegue esta vez a dar cobijo al caballero, aunque pareciera que la sugerencia de la paja iba más bien dirigida al escudero.
Recordad también que Benvido guardaba su carreta en el terreno de al lado.
Tegidria ha salido, y no hay nadie. Pero en una de los cántaros, hay agua fresca que subes al saltador en un cuenco de barro. Está en la esquina más oscura del piso exterior y no te sorprende que te haya confundido. Pero al ofrecerle el cuenco, sigue tomándote por Froilán. Delira, y una vez bebida el agua, sigue hablando. -Froilán, ¿dónde paramos?... Guardad bien el ungüento... para la ordalía... es un ungüento secreto... Froilán, ¿llegamos a Soria? Bien fazemos... escapar de Valencia..- cada vez habla más despacio, pero tienes la sensación de que, aún en su delirio, necesita conservar. Tiembla.
En el piso de abajo se oye una conversación.
¿Pablo ha ido con vosotros?
No, se fué a comer y a dormir donde la Tregidia.
-hermano Tomás, Ucero llámase aqueste lugar. - Le respondió Amelia antes de levantarse. Entonces tornó sus ya despiertas orejas a lo que abajo acaecía.
Llegamos a la casa sin problemas, parecía que los lobos no acechaban al pueblo esta noche. Veo la carreta de Benvido justo en el solar del al lado y aunque recuerdo que el tabernero dijo que había ido al bosque pienso que puedo acercarme a ver si ha conseguido regresar, pero antes me parece correcto saludar y ver si Froilán consiguió encontrar a Pere y Godosteo.
- Buena noche señora Tegiria - saludo cortésmente en la puerta aun mirando a la carreta - ¿Sabe vostede si el carretero volvió?, ¿et los salutadores están todos en la casa? –
¿No venia Pablo con nosotros también?
—Fray Tomás anda pidiendo agua, ca sufre grandes fiebres e delirios. Mandó el conde de Ucero llamar a los salutadores, pues al parecer también saben de curas, cuando tornó aquel que llamaren ‘El Buitre’ ferido de los bosques.. e para el castillo marcharonse Froilán e Godesteo. Non ví a Pere más desde que dejó el pueblo ayer...-
Tegidria sacude la cabeza y murmura. -Non es de xente de bien fazerse llamar como un pájaro que come despojos..El Vermudo, partió a los bosques esta mañana e non le ví... hasta que oí a los bueyes mugir aquesta noche. Asomé la cabeza por la ventana, e oí como gemían de dolor, pregunté quién iba, e Vermudo contestóme que él.. Pero sólo oí su voz.
Pablo está con vosotros, pero no lo he incluído para que Dryo no se entere de lo que pasa.
-Froilán... el ungüento aquesta que trajo el omne.. el obispo de Osma mandánoslo... que buenos dineros diésemos si fazemos la ordalía.. nada hay que temer... un buen cristiano, piadoso e sabio el obispo de Osma es... que hasta en Valencia conocen... Verdadera luz dicen... Vera lucís...
Abajo oyes hablar a Nuño. Tus compañeros han regresado.
-Quería bajar a falar con el Conde el domingo.. E también quería dar algo al herrero...- Tose y ya no es capaz de decir más. Está muy débil.
Yo se lo daré si lo cree menester et fablaré yo con el Conde. Non se si creerá palabra alguna de lo que diga, mas hay que intentarlo. Descanse. Ya non le molestaremos más.-
Dejo al convaleciente tranquilo et me dirijo a Flora-¿Sabedes vos do está la cueva que ha dicho el tuyo padre? Non puedo pedirte que nos acompañes estando el tuyo padre como está. Pero si hay algo que puedas decirnos sobre aquesta cueva bienvenido sea.
Quedo mirándola fijamente esperando una respuesta y añado-Et si hay algo que pueda fazer por vos o el vuestro padre decirlo, por favor.
No sabía qué pensar de aquello ni qué hacer cuando de pronto se dio cuenta que finalmente había llegado compañía.
-Maravilloso, al menos no estaré sola con este pobre moribundo que me da un poco de grima... -. Decidió y sin dudar mucho se marchó discretamente escaleras abajo.
Flora se limpia la mejilla con la manga
-Padre está peor... Nadie sabe de curas ya aquí... Tan sólo el Vermudo había...¿Acaso vuesa merced conoce de alguien que faga sanaciones?.. Non hablemos de que pagar...
Se vuelve a enjuagar otra lágrima.
-Padre fala de la cueva del lago, donde nace el río... e donde está la iglesia antigua. Todos saben de ella más nadie osa subir con los lobos...
-Zacarías irá?
Amelia desciende las escaleras y os volvéis a encontrar todos. Asumo que Orosia y Arturo también vuelven a casa de Tegidria. En caso de que vuestros personajes decidan hacer algo más durante la noche, postead sólo para mi, y ya os contesto. Voy a cerrar la escena mañana. Y reparto PAp..
Si queréis hacer o preguntar algo más en casa de Martín Nabero y Flora, podéis postear, aunque cierre la escena. Si decidís hacer alguna otra cosa, decidme y seguimos roleando en esta escena en paralelo a la nueva.
Limpio la lágrima de la mejilla de Flora con mi dedo, enternecido pero sin poder fazer nada más-Non conozco a nadie que sepa de tales cosas. Espero de todo corazón que el vuestro padre mejore. -Miro a Orosia a ver si me echa una mano et después vuelvo a mirar a Flora.- Gracias Flora por....todo. -Después hablo por Zacarías, aunque non muy seguro-Vendrá, eso espero.
Después despidome et marcho do l Tregidia, allí espero aclarar las ideas et descansar.
Por mi concluida la escena;)