Partida Rol por web

Ya de pequeña Meire había sentido muchas veces una presencia superior que la guiaba a obrar haciendo el bien. En sus sueños podía conversar con una mujer, cuyo aspecto jamás recordó.

Una mujer... 

Son muchos los dioses protectores, pero es extraño que sean mujeres. De todos ellos el más conocido era Cario, que defiende a la familia y los allegados, pero, ¿por qué tan limitado? Meire sentía esa presencia guiándola en cualquier dirección, ayudando a cualquier necesitado.

Durante mucho tiempo se sintió perdida.

¿Cual es mi dios? 

 La busqueda jamás llegaría a su fin, pero si que encontró otros caminos que le permitían sentirse en su lugar. 

La orden Routhuiense está compuesta por aquella gente que persigue la «Iluminación Divina», aquella guía de los dioses sin nombre que inspira el bien en todas direcciones, a cambio de nada, sin discriminaciones extrañas y las manías que acostumbran a tener los dioses.

¿A quiénes adoran?

No se sabe a quienes adoran las personas de la orden Routhiense «Probablemente cada una de sus personas comulga con diferentes entidades sagradas, o con muchas de ellas a la vez. Lo que está claro es que esas divinidades tienen armonía en salvaguardar la vida y proteger las almas puras de las corrompidas» dijo Christabel, la «Alta Procuradora» de Ceres, capital de Abeil, quién lleva la región norte del país bajo el mandato directo del líder de la orden.

_{Christabel*⁰}

Christabel es una guerrera hábil de 50 años llegada del sur de Abeil de la ciudad de Biraroy que asumió el cargo al destapar una trama de corrupción dentro de la orden e impartir justicia restaurando el honor de la orden antes de que algo grave pasara.

Sus máximos apoyos en la orden eran tres guerreros avezados:

_{David Duclos*¹ - Gabriel Robitaille - Arlette Plourde}

Los tres guerreros de entre 38 y 36 años son conocidos como «Las armaduras negras», pues los jovenes han cambiado de tendencia recientemente tratando de vestir armaduras de apariencia sagrada y brillante en lugar de éste tipo de armaduras tan puramente funcionales. Todos ellos tenían una manera de hacer ejemplar y estaban muy unidos trabajando de lado a lado constantemente y cumpliendo con eficiencia todos los encargos de Christabel, la «Alta Procuradora».

Hablamos en pasado porque esos tiempos pasaron, se trata de los tiempos de Ceres, la capital de Abeil, donde Meire se unió a la Orden Routhiense, donde conoció a Tearlach Paradis, el único chico de la orden que tenía una edad parecida a la suya.

Meire había dejado atrás la etapa en pos de hacerse profesian. Una vez tuvo la sensación de que la CPP tenía la misma forma de obrar que la orden en la mayoría de las ocasiones, y fue tal la iluminación que sintió que tuvo que enfrentarse a Christabel para conseguir el permiso. A Christabel no le gustaba la CPP, ni a ella ni a la mayoría de la Orden Routhiense. Alguna vez había hablado con Arlette acerca del tema, quién le restaba importancia diciendo que lo que de verdad importaba era actuar, y que ella siempre tenía como hacerlo ya que siempre estaba explorando y encontrando tanto necesitados como formas de ayudarlos.

Arlette no trataba de animar a Meire a alistarse a las pruebas profesian, pero Meire lo tomó de ese modo, pues al no ser tan imaginativa para actuar creyó que la CPP sería una buena forma de actuar sin cesar. Así es como Meire marchó a Kendra, donde sabía que había algún compañero desperdigado buscando la misma meta por su lado.

Estamos rememorando el pasado de Meire porque es la primera vez que tiene noticias de Christabel desde que Meire abandonó Abeil, Ceres, y la diócesi de Christabel. A primera hora de la mañana, Meire recibía una carta de Christabel.

Querida novicia Meire Linchester,

Hemos estado siguiendo las pruebas profesian éste año por primera vez, quién lo diría. Estábamos todos en los dormitorios de la Catedral Paradis te manda recuerdos mil veces más que los demás y dice que puedes llegar mucho más lejos si te esfuerzas.

Aunque hemos estado en contacto, ésta vez te escribo para informarte de que vamos a formar un monasterio en Kender, hemos conseguido los permisos y han viajado hacia el lugar los que van a ser tus compañeros. Cada vez son más los novicios que pretenden formar parte de la orden y los profesian a la vez, tal vez debería tomar más en serio vuestra señal, lo pensaré detenidamente. Tus compañeros se encuentran reunidos en la calle séis del distrito 4 de la ciudad, están viviendo juntos y algunos han venido de otras partes del mundo.

Ten mucha suerte, espero que os llevéis muy bien. Pronto enviaremos a un Procurador para que os guie.

Meilin abre la carta y la lee detenidamente y se le escapa una pequeña risa. jijiji 

- Hemos estado siguiendo las pruebas profesian éste año por primera vez,

Imagina como Christabel y el resto se sientan en el salón para poder seguir las pruebas, eso la llena de energía y ganas de seguir, teniendo en cuenta la última y fatídica prueba. 

ésta vez te escribo para informarte de que vamos a formar un monasterio en Kender, hemos conseguido los permisos y han viajado hacia el lugar los que van a ser tus compañeros. Cada vez son más los novicios que pretenden formar parte de la orden y los profesian a la vez, tal vez debería tomar más en serio vuestra señal,

y un sentimiento de orgullo y satisfación le recorre el cuerpo, le gusta tener razón y haber decidido venir finalmente. Se alegra que por fin Cristabel se haya dado cuenta que los valores y los objetivos que tenemos son los mismos. 

Meilin saca el móvil y busca la dirección en el mapa "calle seis del distrito 4 de la ciudad" - repite.

- Qué bien! Nuevos compañeros!!-  Quizàs haya venido Tearlach, seguro que le caería bien a Anissa. - piensa mientras se dirige en marcha hacia el punto del mapa. 

Meire pone los datos de la calle en el gps del dispositivo movil y no tarda en aparecer la ubicación, la calle seis está muy bien ubicada entre las más cercanas al distrito primero de la ciudad, con lo que está cerca del punto neurálgico de la política y el poder profesian, de hecho, está más cerca de la CPP que la mismísima Catedral Magna.

Una vez en la zona, las calles limpias enseguida resultan acogedoras. De entre ellas, la séis es especialmente amplia en comparación a otras. Meire llega al bloque de pisos, que tiene varias plantas, se oye el murmullo de los habitantes del bloque de pisos y aunque todavía no es hora de comer ya huele delicioso. Meire toca el timbre, de repente se oyen pasos ajetreados y ruidos arriba del todo. Después de una carrera escaleras abajo la puerta se abre de par en par.

^{La muchacha que abre la puerta sonríe a Meire con el pintalabios a medio remover,}

^{y un pijama invernal de color rojo resplandeciente y blanco}

 ¡Hola! —dice muy energética probablemente sin darse cuenta de que tiene el maquillaje totalmente estropeado—. Mis hermanas no están pero te cojo el recado por ellas —explica sin estar al día de tu llegada, creyendo que eres una recadera. Se queda mirando tus cabellos mientras sonríe esperando a ver qué tienes que entregarle.

A juzgar por su aspecto jovial y su maquillaje dirias que es menor, además la diferencia de estatura es notable pues le debes sacar unos 20 cm.

Meire toca el timbre, de repente se oyen pasos ajetreados y ruidos arriba del todo. Después de una carrera escaleras abajo la puerta se abre de par en par.

seguro que no tiene escaleras- contempla el bloque alto de pisos. - así haré piernas!

¡Hola! —dice muy energética probablemente sin darse cuenta de que tiene el maquillaje totalmente estropeado—. Mis hermanas no están pero te cojo el recado por ellas —explica sin estar al día de tu llegada, creyendo que eres una recadera. Se queda mirando tus cabellos mientras sonríe esperando a ver qué tienes que entregarle.

A meilin se le escapa una risilla simpática - perdona, es que tienes el pintalabios mal puesto, justo aquí - le dice señalando con su dedo en su propia cara indicando en qué parte se le había corrido el maquillaje. - Me llamo Meire pero todos me llaman Meilin - le alarga la mano para poder presentarse -  No soy ninguna recadera, . Vengo de Ceres a ver mis compañeros de Orden - le saludo apretando su mano con firmeza, haciendo resaltar lo contenta que estoy. - ¿Cómo te llamas? Me alegra que al final hayan decidido hacer una sede aquí.

 Ah... jejeje... —se ríe un poco mientras adelanta su mano presentándose— lo siento, es que soy tonta... me llamo Eïa, soy novicia, Paladín y sanadora de le diócesis de Kender —dice con algo de timidez, probablemente no se tiene muy creído su rango todavía—. Encantada. ¿Eres la primera visita de Ceres? —se confunde otra vez, creyendo que formas parte de Ceres todavía— Pues sí, es una suerte, gracias a eso tenemos la oportunidad de unirnos a la CPP y obrar más.

Cuando se da cuenta de que vienes a instaurarte en la diócesis de Kender le cambia la cara, parece presionada por algo.

 Ah...jejeje...—se ve algo apurada—. Un segundo porfi. Ahora vengo.

Eïa casi cierra la puerta delante de los morros de Meilin, si no fuera por un mecanismo que evita los portazos le hubiera dado en la cara y todo antes de correr escaleras arriba con rapidez. ¿Qué pasa con Eïa? Enseguida baja de nuevo y abre la puerta, todavía tiene el pintalabios mal.

 Vamos, te enseño los apartamentos. Son compartidos, cuidado con las escaleras que resbalan —asegura, a pesar de que ella ha estado corriendo por ellas todo el rato. Se nota que quiere presentarte el lugar tal cual lo hicieron con ella.

Pasáis dos apartamentos y en el ultimo piso Eïa abre la puerta con llave y te hace pasar. Cierra con un portazo nuevamente, se encoge arrepentida por no prestar atención a esos recurrentes portazos «Upss...»

 Éste será tu apartamento, ahora era sólo de «Luce», es la mayor del grupo —dice sin dudar que te saca como mínimo unos cuantos años—. Rezaré por ti, es un poco broncas... lo mejor será que empieces con buen pie o estarás perdida, como yo. De esto ni mu eh, o estoy muerta —sonríe algo más tímida, quizá no debería estar hablando así—, ya que te toca con ella quiero que sobrevivas, digo... —cada vez peor, claramente no quiere atacar a Luce sino protegerte de ella—. O sea, no es mala persona, —duda—, supongo, tan sólo es estricta y broncas. Bueno, dejémoslo —ve que cada vez arregla menos el tema—. Ahora está ocupando todo el apartamento pero te harás tu hueco. 

El apartamento está bien ordenado, aunque está totalmente al estilo de Luce, con fotografías de amigos suyos, rincones decorativos y enseguida te llama la atención ver un escudo de la Ordre Routhiense en forma de lágrima del que sobresale el arma de algún arma, y una armadura de placas. Todo ha sido utilizado.

Bajáis algunas escaleras y llegáis a la primera planta, donde Eïa abre una vez más con llave.

 Aquí vivimos Kari y yo, y bueno... —el lugar estaba ordenado, pero Eïa ha estado probablemente en el sofá, porque hay pipas y rastros de pizza como el envoltorio y tal. Además tiene un buen montón de ropa lavada sin tender y en definitiva estaba dejándolo todo hasta el ultimo momento antes de que llegara su compañera—. Tengo que ordenar —aclara, viendo que el plan que había se palpa en el ambiente.

Eïa corre a esconder unas braguitas totalmente roja, enseguida cambia de tema para desviar la atención.

 ¡Vosotras también tenéis balcón! ¿por qué no vas a dejar tus cosas mientras preparo algo de comer? si acabas de llegar estarás cansadísima...

Pasáis dos apartamentos y en el ultimo piso Eïa abre la puerta con llave y te hace pasar. Cierra con un portazo nuevamente, se encoge arrepentida por no prestar atención a esos recurrentes portazos 

Meilin no espera el portazo y se sobresalta un poco. - Madre mia, que chica más ruidosa,  Con ellà y su ruido me puedo entrenar los actos reflejos y de ésta manera no tomarme desprevenida. -  piensa.

 este será tu apartamento, ahora era sólo de «Luce», es la mayor del grupo —dice sin dudar que te saca como mínimo unos cuantos años—. Rezaré por ti, es un poco broncas... lo mejor será que empieces con buen pie o estarás perdida, como yo. 

- Vaya, así que es aquí donde voy a dormir. - Meilin contempla la habitación y observa todo debidamente ordenado. - Bueno, puede ser una broncas pero seguro nos llevaremos bien, veo que le gusta el orden. 

Meire deja la maleta de ruedas 360º en una esquina de la habitación. Prefiere preguntarle donde quiera que duerma para presentar respeto, ya que ella había llegado antes y también es mayor que Meilin. Además, siempre una persona educada tiene más probabilidad de poder caer bien a la gente.

- Hablando de ... ¿Luce, era no? ¿Sabes a que hora suele volver? 

Aquí vivimos Kari y yo, y bueno... —el lugar estaba ordenado, pero Eïa ha estado probablemente en el sofá, porque hay pipas y rastros de pizza como el envoltorio y tal. Además tiene un buen montón de ropa lavada sin tender y en definitiva estaba dejándolo todo hasta el ultimo momento antes de que llegara su compañera—. Tengo que ordenar —aclara, viendo que el plan que había se palpa en el ambiente.

Meilin echa un vistazo al apartamento, se alegra de que le tocara Luce en vez de Eïa ya que prefiera el orden en su vida, hace que su rendimiento sea mayor. Pero Meilin sabía que era de mala educación hacer comentarios acerca de la vivienda de alguien, a no ser que sean positivos. - Wow, son bastante grandes éstos apartamentos, no? Me encanta la luz, mira ese súper balcón!!. - se dirige hacia allí para contemplar las vistas.

Vosotras también tenéis balcón! ¿por qué no vas a dejar tus cosas mientras preparo algo de comer? si acabas de llegar estarás cansadísima...

 - Oh! ¿también tengo balcón? - Que bien! me tomaré el café cada día allí. - Prefiero acompañarte si es posible, no voy a deshacer la maleta hasta que esté mi compañera de piso, además, tampoco llevo tantas cosas. 

Vaya, así que es aquí donde voy a dormir. - Meilin contempla la habitación y observa todo debidamente ordenado. - Bueno, puede ser una broncas pero seguro nos llevaremos bien, veo que le gusta el orden. 

A Eïa le cambia la cara cuando oye tal cosa ¿será que puede llegar a tener dos broncas en vez de una? 

 Sí — dice con más tensión al pensar en dos Luces—, tiene... un horario muy variable. Puede que Kari sepa algo, ahora se lo pregunto... 

Eïa parece algo cohibida en comparación, solamente cuando se olvida vuelve a hacer bromas o hacer comentarios despreocupadamente. Es bastante irregular en sus manifestaciones...

 Ehm, ¿okay...? pues... espera —termina en un santiamén de hacer espacio llevándose toda la ropa limpia de una sola vez a su habitación— ¡Siéntate comodamente! ¿Vas a hacer el traslado ya ésta noche?

Eïa vuelve enviando el mensaje con el movil antes de continuar ordenando, tampoco tiene mucho más por corregir antes de ponerse a mirar qué puede cocinar. 

 Puedo hacer ensalada —dice seria al ver sus otras posibilidades—. ¿Tienes mucha hambre?

Repentinamente Eïa se gira para ver a Meilin mientras come. 

 ¿Sabes quién será procurador para Kender? —Puedes leer sus pensamientos como si fuera un libro abierto, se le acaba de ocurrir que tal vez eres tu.

 Dice Kari que Luce viene hoy a casa~

El tiempo ha pasado sin que os deis cuenta  y no tarda en oírse la puerta de la planta baja.

 Debe ser Kari —sale al balcón a ver, pero ya ha entrado. Efectivamente se oyen unos pasos subiendo hacia arriba, con lo que Eïa corre a recibirla.

Ambas se reúnen en la puerta, se dan un abrazo y comentan como ha ido la llegada de Meilin brevemente con bastante conformidad de Kari que le sonríe y le da palmaditas amistosas en el culo dando por finalizada la reunión. Ambas parecen muy unidas.

 Kari Bélanger, sacerdotisa.  ¿«Meilin»? —Eïa le ha dicho tu sobrenombre pero quiere asegurarse que todo está bien, probablemente para confirmar la pronuncia—, encantada. Luce llegará muy tarde hoy, dice que te ayudemos a instalarte si quieres.

  Ehm, ¿okay...? pues... espera —termina en un santiamén de hacer espacio llevándose toda la ropa limpia de una sola vez a su habitación— ¡Siéntate cómodamente! ¿Vas a hacer el traslado ya ésta noche?

- Si, esta noche voy a pasarla aquí, lo cierto es que estoy un poco cansada de las pruebas, la verdad.  

Meilin acepta la ensala de Eïa. - Tiene muy buena pinta, gracias! - recuerda que en realidad lleva unas horas sin comer así que la encuentra súper deliciosa. 

 ¿Sabes quién será procurador para Kender?

- !Ostras! pues la verdad es que no lo había pensado... supongo..  que será alguien cercano a Christabel, no?

 Kari Bélanger, sacerdotisa.  ¿«Meilin»? —Eïa le ha dicho tu sobrenombre pero quiere asegurarse que todo está bien, probablemente para confirmar la pronuncia—, encantada. Luce llegará muy tarde hoy, dice que te ayudemos a instalarte si quieres.

 - Meilin devuelve el saludo - Encantada Kari. Entonces, vamos a instalarnos? llevo solo una maleta la verdad.

- Kari, tu sabrias decirme en que cama duerme Luce? Está todo tan ordenado que no se diferenciar que habitación suele usar. Así puedo deshacer la maleta en la que esté libre. 

 Claro, vamos.

Ambas subís al apartamento de Luce dejando a Eïa con su movil super conectada. El apartamento es igualito al de Kari y Eïa, ésta vez os adentráis un poco más y empiezas a llevarte sorpresas. En primer lugar te fijas en los cuadros, que antes no lo habías hecho, se trata de una colección de cuatro cuadros hyper realistas de hombres musculosos. En la nevera hay una fotografía recortada de dos culturistas recortada a mano.

Es posible que esto no fuera exactamente lo que Meire había imaginado, pero todavía podría ser peor en el momento en que Kari la guia a su aposento.

 Es aquí —explica brevemente—. Es provisional, cuando esté el procurador y consiga nuestro santuario nos mudaremos de nuevo.

La habitación es compartida también, como mínimo tiene camas separadas. En el respaldo de ambas hay un estante de construcción que sirve de pie de cama, con decenas de fotografías de hombres-macho. Empiezas a darte cuenta de todo lo que te rodea...Kari mira los dibujos con una gotita en la frente... 

meilin entra decidida a lo que es su nueva habitación.

- Vaya, había entendido que compartía piso pero no habitación. - Meire echa un ojo alrededor hasta toparse con los cuadros un poco desesperantes de los cuerpos casi desnudos y mega culturistas que tiene su futura compañera colgador por toda la habitación y salita. - Chicas... Luce es amante de la halterofilia? Viendo éstas fotos una de dos, o ella le gusta hacer musculación y son cuadros motivadores o por otra parte... es que le va los tíos así? - Vuelve a visualizar la habitación y se acerca al super escudo que hay apoyado en una pared. -  Así que también es tanque. - sonríe, le hace agrada la idea de ser dos soportadoras de daño. Coge el escudo con una mano para ver su peso y así hacerse una idea de lo fuerte que puede ser Luce.

- Bueno, tenemos cosas en común y otras no tanto - vuelve a mirar los cuadros, sobretodo el de la sailor mega cuadrada.

- Si os parece deshago la maleta y me doy una ducha rápida. - Meilin abre la maleta y empieza a organizar su ropa, usando el mueble que queda cerca de su cama y está vacío. Seguidamente coloca el escuda al lado de la cama para que también reluzca en la habitación. al terminar de ducharse se une a sus compañeras. - ¿y ahora dónde vamos? 

Pasáis por el lado del escudo que está en el salón principal y levantas el escudo de Luce. Es un escudo bastante pesado, demasiado para tu gusto. Sin duda Luce está en forma si usa ese escudo al combatir.

Así que también es tanque.

 Sí. Te llevo a la habitación *¹

Es Kari la única que está presente cuando Meilin pregunta acerca de los gustos de Luce.

 Pues creo que un poco de cada —no continúa mucho la conversación a pesar de ser amable—. Instálate sin problemas, avisaré al resto de que ha llegado Meire ¿Conoces a alguien de la nueva diócesis?, si te sientes mal sola ven a cenar también, no creo que llegue hoy Luce. Saldré a comprar por ahora.

 ¿Conoces a alguien de la nueva diócesis?, si te sientes mal sola ven a cenar también, no creo que llegue hoy Luce. Saldré a comprar por ahora

- Pues no se si Tearlach ha venido hasta la central de las pruebas professian la verdad. Todo ésto me ha pillado un poco desprevenida ya que cuando me fuí de Ceres no veían todavía con muy buenos ojos la unión de la Orden con la CPP. Aunque me alegro que finalmente hayan entrado en razón.

- Si necesitas ayuda con la compra os puedo acompañar, supongo que estaremos aquí una temporada hasta tener la Sede oficial, así que tengo que ir a por provisiones.... y algo para el mareo. No quiero volver a repetir la escena de las pruebas, la verdad.

Meilin se siente bien atendida, realmente son muy agradables las nuevas compañeras de bloque. Que bien, con la sede cerca de la cuidad, ya no hace falta que busque ninguna pensión u hostal.

Al hablar de la cena a Meire ya le suenan los intestinos, la ensalada que ha comido hace unas horas debe de haberse evaporado ya. La verdad es que por la envergadura y la fuerza de Meire, necesita comer bastante. 

- Voy a comprarme un buen bistec, para recuperar energía.- veis como le saliva la boca sólo de imaginarlo. 

 Pues no se si Tearlach ha venido hasta la central de las pruebas professian la verdad. 

  Pues creo que no...Almenos aquí no ha llegado.

 Si necesitas ayuda con la compra os puedo acompañar, supongo que estaremos aquí una temporada hasta tener la Sede oficial, así que tengo que ir a por provisiones...

  Bueno, claro. Veré a ver si viene alguien más.

Kari se concentra en el movil por un rato y le cambia la expresión, parece que le gusta lo que lee. A pesar de lo amable que es no ha sido hasta ahora que Meilin ha tenido la ocasión de ver a Kari sonreir con naturalidad por primera vez, y tiene una sonrisa tan bonita como sus ojos.

 Me van a pasar una lista de la compra, cenaremos todos juntos para darte la bienvenida —explica a Meire mientras guarda el movil en su bolsillo—. ¿Segura que quieres bistec? Uno de los chicos cocina muy bien, hará la cena.

Ambas pasáis a despediros de Eïa antes de ir a comprar y os dirigis al supermercado, durante todo el rato Kari apenas abre la boca y no sabes si es tímida, reservada o si está en babia.

Por el camino va tomando los ingredientes empujando el carrito donde las dos vais poniendo todo ( para la cena y tus provisiones de recién llegada ).

 Carne picada, contramuslos de pollo picados, longanizas , tocino, piñones, pan de hogaza en rebanadas, huevos, pollo de corral troceado, dientes de ajo laminados, almendras picadas, tomate concentrado, hojas de laurel, vino blanco, unas hebras de azafrán, coñac, caldo de pollo, zumo de limón, pimienta negra molica, patatas peladas y chascadas, aceite de oliva virgen extra y perejil fresco. ¿Eres alérgica a algo?

 Me van a pasar una lista de la compra, cenaremos todos juntos para darte la bienvenida —explica a Meire mientras guarda el móvil en su bolsillo—. ¿Segura que quieres bistec? Uno de los chicos cocina muy bien, hará la cena.

- woh, muchas gracias - se sorprende Meilin-  Así tendré tiempo de conocer a las compañeras! Además, no voy a decir que no a una cocina casera, sois muy amables. - hace una pusa para pensar que realmente todo esta yendo muy bien - vamos a ser una muy buena sede, lo presiento. - añade con una sonrisa. 

 Carne picada, contramuslos de pollo picados, longanizas , tocino, piñones, pan de hogaza en rebanadas, huevos, pollo de corral troceado, dientes de ajo laminados, almendras picadas, tomate concentrado, hojas de laurel, vino blanco, unas hebras de azafrán, coñac, caldo de pollo, zumo de limón, pimienta negra molica, patatas peladas y chascadas, aceite de oliva virgen extra y perejil fresco. ¿Eres alérgica a algo?

- Pues alérgica no, pero no soporto la sardina. - Cuando pasan por delante de los licores Meilin se para un momento - os invito a unos chupitos después de comer- A ver, algo que vaya bien para bajar la cena.... -  Éste, es dulce y no tiene mucho alcohol, - selecciona un licor de hierbas que va bien para hacer la digestión - Lleva un toque de anís. Ah! y no podía faltar un buen brindis - añade una botella de cava rosado.

Viendo la cantidad de cosas que va añadiendo al carro, Meilin de prepara las bolsas para ir colocando todo y ayudarla a llevar la compra, la verdad es que cabe todo en apenas 3 bolsas y ella se coloca una en una mano y dos en otra, sin dejar ninguna a su compañera, realmente con la fuerza que tiene no pesa nada. - Bueno , te sigo - die al salir del super dejándose llevar por su compañera. 

Meilin saca la idea de los brindis pero no parece convencer a Kari, que no parece especialmente ilusionada con la idea.

 Te gustan éstas bebidas ¿eh? —es un hecho que le hace algo de gracia, aunque no se ve feliz como cuando le han pasado la lista de la compra—. Vamos a por todo, o cenaremos a las tantas.

Kari deja a elección de Meilin si hace la compra de las bebidas o no, el caso es que están un buen rato en el supermercado tratando de elegir los productos más artesanales siempre con sus distintivos ecológicos de la CPP. La factura suma muy alto por culpa de eso, en la diócesis de Ceres no miraban las etiquetas alimentarias, y eso que ya comían de forma responsable.

Cuando llegáis al bloque de pisos váis a la planta baja en vez de subir las escaleras, allí Kari pica a la puerta.

Abre un chico aparentemente de Kadosia o tal vez Yanovku* que enseguida se sobresalta emocionado.

 ¡HUAAA eres altísima —dice a pesar de medir cerca de 180 cm—, bienvenida a la diócesis profesian, soy Sun Hye, él es Gerson —dice mostrando al que se encuentra de lado cortando alimentos para la cena.

 Encantado, pase por favor —a pesar de estar cocinando sus piernas están recubiertas por una armadura de placa que puedes ver debajo del delantal—. Siento no poder recibirla enseguida

Se oye un gran estruendo arribay unos tacones bajan por las escaleras a toda velocidad. 

 Tacháaaan —dice Eïa asomándose, arregladísima claro, ya vas viendo que es una dinámica suya—. ¿Qué cenamos?

 Guiso de pava con pelota, y la pava eres tú —Kari señala a Eïa amenazante—. ¿Podrás ayudar a Gerson con esos tacones?

 ¡Claro que sí! Ger ya voooy~

 Ten cuidado no le tires la olla por encima

Cuando Gerson tiene un momento enseguida se te acerca para pedir tu mano e inclinarse hacia ella.

^{Gerson Casares, Eïa Gousse, Kari Bélagnger, Sun Hye
Tus compañeros de Diócesi (Falta Luce, que está ausente)}

Meilin la acompaña a la compra, para ayudarla a llevar las bolsas y visto que el brindis no ha tenido mucha gracia solo coge un par de botella de vino dulce frizzante, para celebrar la unión del nuevo piso, por lo menos. Al pagar puede ver que la cuenta es bastante grande. - Al brindis invito - busca su billetera y saca un billete, se lo muestra a la compañera y se lo da, también con la intención de colaborar algo más a parte de las bebidas. 

Al llegar al piso está todo muy animado, ya hay gente cocinando y parece que algunas se han puesto de mil botones. Al entrar, Meilin saluda.

- Buenas! - Levanta la mano en forma de saludo y observa a su alrededor. Hay algunas personas que no conoce así que se presenta. - Soy Meire Linchestein pero podéis llamarme Meilin.  He traído unas botellas para hacer brindis, las pongo en el congelador de mientras. - Se dirige a la concina donde Gerson corta la comida y al regresar no se espera que se incline frente suyo y le pida la mano. Vale que ella es de buena família y ha tratado con otros cavalleros, pero ella se considera una de igual rango. - Melin le coge la mano que le ha tendido y le hace un gesto ayudándolo a levantar- por favor Gerson, no hace falta, aunque es todo un detalle; Que tal un apretón de manos? y le extiende su mano con una sonrisa, irradiando calma y serenidad. - Encantada. 

La cena empieza cuando los comensales están en la mesa, a falta de Luce que está fuera por no conocer de la llegada de Meilin.

El ambiente es tranquilo al principio, cada uno se presenta formalmente, son más educados y formales que en la diócesis de Ceres pero no es la única diferencia que hay: Gerson Casares es el más adulto de todos los integrantes de la diócesis y apenas le saca algún año a Meilin, tiene 27 años.

^{Gerson Casares, representante actual de la diócesis.}

La edad media en Ceres tal vez rondaba por encima de los 30 años y los más ejemplares hermanos y hermanas tenían más de 35 años y aún así la sensación de formalidad es bien intensa al principio, pero eso termina por cambiar al son de un tapón del mismo Gerson.

 Brindemos. Eïa trae las bebidas para el festejo.

El caso es que en la diócesis de Kendra les gusta presentarse como es debido y beber como es debido también. Gerson ha elaborado manualmente un buen surtido de bebidas alchoolicas durante todo el año que superan con creces el producto de supermercado de Meilin. Enseguida todos están tocados y la noche se vuelve de lo más amena, Eïa que se ha pasado un poco explica todas sus intimidades más graciosas con los chicos que ha salido y termina por quedar tumbada, en cambio los demás se relajan un poco y continúan la velada adaptándose a su estado para mentenerse siempre decentes.

Meilin que no está acostumbrada a bebidas artesanales tiene dificultades para ¿despertar? Cuando Meilin se despierta apenas recuerda nada de la noche anterior, simplemente fue todo muy agradable y Eïa muy divertida. El grupo tiene buena sintonía y son gente como Meilin, de valores progresistas y paz. En el techo hay un hombre musculoso que no había visto en su habitación hasta estar tendida en la cama. ¿Alguien la llevó allí?

nmmnmnña - Meilin musita algo entre dientes no entendible. Se está tan a gusto... deja pasar unos minutos hasta que abre un poco los ojos.-  Joder! - cuanta luz de golpe. - Se gira y mira hacia el techo. - Y ésto...? hasta en el techo? jaja- le hace gracia, le recuerda al don musculitos ese del libro. Se incorpora.

- Alguien debe de haberme llevado a la habitación. - se pone la mano en la frente intentando recordar. - Uff el licor de Gerson. - Meilin se siente bien después de todo, tiene recuerdos de habérselo pasado en grande. - realmente es estar como en família, ha sido tan genial que por una noche he dejado de pensar en el deber y en el trabajo y me he divertido a lo grande! - pero ahora necesito un vaso de agua... o una jarra mejor dicho. - Sale de la habitación para dirigirse a la cocina y al salir por la puerta contempla el salón. - uff ahora va a tocar limpiar..... - observa dónde están sus compañeros y compañeras y empieza a organizar la cocina sin hacer mucho ruido. 

Se oye un tintineo de alarma y un gran alboroto de carreras por cada planta del edificio.

 No se si sabían que estabamos en camino, pero está claro que lo saben ahora. Voy a llamar.

 Llamar, claro —dice una segunda voz preparada para embestir la puerta— Iba a derribar la puerta —ríe avergonzada—. Pensaréis que soy una bruta...es que, sentía el ambiente de una batalla...

 No hombre no, nisiquiera saben de parte de quién venimos —dice la primera voz y llama a la puerta con un par de golpes contundentes— Buenos días, abran porfavor. Somos la CPP —se aparta de la puerta con cautela.

KNOCK, KNOCK —suena la puerta. 

 Meire vienen extraños, ¡prepárate!

 Okay —se oye desde fuera

 Haaai —dice una segunda voz mucho más animada y con un acento extrangero.

 ¡¿Están todos listos?!

 ¡Todavía no! —grita Eïa bien energética desde la lejanía—. ¿Están aquí ya?

 Sí 

 Sois unos motivados —dice una segunda voz femenina sin alterarse—, vamos a estar bien.

 ¡Ya voooy! —de nuevo la primera voz.

Cuando Meilin baja a las escaleras se encuentra todos sus compañeros preparados para una posible batalla, Gerson lleva la armadura y todo y van armados hasta los dientes.

 ¿¡LA CPP!? —grita Eïa con sorpresa, y hay un gran barullo. 

 Eh oye ¿Qué haces? — dice Gerson en apuros.

CLONK

La puerta se abre rapidamente golpeando a alguien a su paso y se asoma una rubia jovencísima a medio maquillar*

^{La muchacha que abre la puerta sonríe a los profesian con el pintalabios a medio remover}

^{y un pijama invernal de color rojo resplandeciente y blanco. Es claramente más joven que todos los demás presentes.}

En el suelo tirado en las escaleras y con armadura completa el chico que ha sido derribado todavía se resiente del golpe, otro chico lo ayuda a levantarse.

Y más arriba hay dos chicas más que observan.

Al otro lado de la puerta están quienes se han presentado como profesian. Ambos grupos son jóvenes, y la mayoría parecen incluso de la misma edad.

En primer lugar hay una chica que está fumando con los auriculares medio puestos mientras mira con confianza a Gerson, casi riéndose de su accidente. Parece ser quien ha llamado a la puerta.

Un poco más atrás hay un chico y una chica 

La situación es un poco extraña y aparte de la adolescente que asoma la cabeza por la puerta todos están quietos esperando a que pase algo.