Partida Rol por web

Al parecer el líder era el responsable de todo, y detenerlo era importante, no sabía nada de ese lugar, pero las maldades debían ser frenadas. Tomar más agua del horizonte no era necesario, palmeó sus manos y se agachó alzándose de golpe, el agua encharcada era un bien que se debía reaprovechar. Le golpearía con ella en un movimiento ascendente, guardando su distancia.

Tras la pequeña revuelta el monje fuego desaparece entre tantos maestros atacandolo y defendiendolo. Pues al parecer algunos maestros han comprado la ideologia de este.

Por otro lado La maestra agua y sus amigos intentan ayudar a los no maestros que puenden mientra buscan una de las puertas, teniendo a Kayah el fuego no seria un problema y en caso de que asi fuera Eydan o miran podrian facilitar las cosas.

Kayah, hay mas de esos maestros fuego tapando la puerta. tenemos que derribarlos. — le dijo Eydan a su amiga.

Y en efecto 5 maestros fuego se interponian entre ellos y la salida sur del anfiteatro. Todos estos lanzan rafagas de fuego aprovechando el fuego que bloquea la puerta para potenciarlo.

—¡Esquivadlo! —dijo ella mientras rodaba por el suelo para evitar uno de los chorros de llamas. 

Sin embargo, Eydan no pareció tener tiempo. Como pudo, trató de crear un muro de piedra entre él y las llamas. Mirah fue más ágil, como ella. Entre las dos, trataros de apoyar a su amigo. Ella usando su maestría del agua para rebajar las llamas. Mirah contraatacando el fuego con fuego. Mientras tanto, Eydan decidió cubrirlas con sus paredes de tierra. 

El maestro fuego y el maestro agua aprovecharon la intervencion de las fuerzas policiales para hacer una acometida final contra el Onibenner. Entre los dos maestros abasayaron con sus ataques al guerro que vestia armadura samurai. sin embargo solo los ataques del maestro agua lograron impactar. pero aun asi el guerro se mantuvo en pie el tiempo suficiente para desaparecer entre la multitud de soldados.

Ahora con la entrada del anfiteatro controlada solo quedaba el sacar a las personas del teatro, puesto los criminales los habian tomado pricioneros.

Uno de los agentes de Metal control se acerco para felicitarlos. Pero que debian de dejarle el resto a ellos. que descansaran y que se atendieran con los maestros agua Medicos que llegarian en pocos munutos.

Me detengo por un momento y me doy cuenta de qué pasa.

Quisiste hacer el bien con tu fuerza y no pudiste. ¿Es esto una derrota?

Me quedo inmóvil e ignoro a los que me hablan. Estoy dentro de mí ahora.

¿Pero...no puedo encauzar mi ifa así?, si me convierto un pilar de la defensa me lograré desenvolver lo suficiente como para controlar mi futuro posible desenlace.

Sonrío por primera vez durante mucho tiempo. Parece que he logrado encontrar un camino que recorrer por ahora.

La frustración me agobia, aunque también la gratitud con el joven maestro agua a mi lado.

Buen trabajo, creo que lo hicimos bien-digo ameno y sin mi normal tono azul.

Nou hizo un saludo informal a los guardias, y suspiró.

- no me gusta mucho luchar, pero a veces es necesario, buen trabajo - respondió, aunque en vez de solo irse, estaría atento por si acaso, esa no era la cálida y pacífica visita que esperaba tener ¿estaría muy lejos el avatar?

Las rafagas de fuego que viajaban hacia el grupo de maestros fueron, repelidas o esquivadas de gran manera. Salvo por el maestro Tierra que no fue lo suficientemente rapido y recibio el impacto de una de las rafagas. Sin embargo el joven era mas recio de lo que su complexion dejaba ver. y no tardo en ponerse de pie y junto a su grupo devolverles la Hostilidad a los maestros fuego.

Al ver cómo sucedía todo, Shio perdió la paciencia un momento y tomó a Dil del cuello.

- ¡¿Quiénes son ellos?! ¡Habla, si quieres vivir! - mientras tanto, Shio se dedicó a examinar su alrededor. Quería analizar sus opciones más cercanas para salir y el número de maestros fuego a su alrededor. Sus tatuajes y su traje la delataban, pero no era momento de pensar de más. Al fin y al cabo, ella provenía de una familia de maestros fuego.

yo yo no lo se, a mi solo me pidieron que robara aqui - el chico estaba apunto de llorar sobrepasado por toda aquella situacion descabellada donde los maestros fuegos y lo que parece un nomaba del aire tomaban a todos los presentes como rehenes, y durante la lucha de maestros fuego opresores y los maestros que se encontraban en el anfiteatro el chico te sugirio salir de aque lugar haciendo uso de su aire control.

Tras la aparicion de los maestros metal y la fuerza policial de Ciudad Republica los maestros revolucionarios comenzaron a retirase no sin antes lanzar un amenz hacia los no mestros que controlaban el Gobierno actual. Y un invitcion a los maetros a que siguieran el verdadero camino hacia la paz y ese era el seguirlos a ellos hacia un mañana brillante. Los dos maestros pudieron ver al extraño vestido como un monje de la tribu del Aire el cual parecia ser el lider de aquellos sujetos. Todos huyeron con la ayuda de unos automobiles que se encontraban Cerca del anfiteatro  

A Nou no le hacía mucha gracia esa retirada, eso quería decir que aquellos delincuentes volverían a aparecer, Nou decidió revisar el anfiteatro con calma, por si alguien pudiera necesitar ayuda...

Convencido por un camino de redención me decido a proteger a la gente. Ahora tengo esperanzas en dormir tranquilo al cuidar de los demás.

Observo al joven Maestro Agua y le sigo:

Yo te cubro.-digo quedándome atrás.

Los Dos maestros se encaminaron hacia en anfiteatro, y tal como habian imaginado ahi habia gente que nesesitaba de ayuda Civiles y Maestros heridos por lo que parecio un enfrentaiento contra maestros fuego, ya que muchas areas del mismo estaban chamuscadas.

Entre la multitud algunos maestros agua intentaban curar a los heridos pero eran demaciado pocos. pot otro lado algunos maestros aire intentaba trasladar a los heridos mas graves a algun centro medico.

Se apresuró a salpicar las áreas que pudieran llegar a prender, curar no era su fuerte, pero aun así también fue algo que intentó, dando preferencia a los que peor veía, no comprendía por que alguien dañaría así a gente inocente, nadie merecía sufrir tanto tan gratuitamente...

Y mientras Nou atendia a los heridos que podia usando su agua contro, Tao localizo lo que podrian ser algunas pistas sobre quienes eran aquellos extraños maestros, ya que un collar de cuentas y un trozo de tela muy parerecido al que usaban los monjes del aire, pero en colores distintos y con un bordado que no reconocia, se encontraba cerca de una de las entras al auditoria, la que mas dañada estaba por el fuego.

Tomo lo que veo y lo mantengo en mis manos.

Observo a la gente herida y me siento impotente.

El fuego sólo destruye.-me susurro.

Pero yo trataré de construir...-susurré mientras me acercaba a Nou.

¿Qué puedo hacer para ayudar?-digo en tono firme y estoico.

Nou reunió agua en cuencos o barreños que pudiera encontrar, había visto utilizar fuego a Tao - agua caliente - dijo - la gente agradecerá poder limpiarse con una temperatura agradable, o vapor para quienes hayan inhalado mucho humo para limpiar su cuerpo por dentro...

Nou no era médico, pero había ayudado bastantes veces al protector del pantano, y esos detalles sencillos eran muy terapéuticos y agradables. Disponer de fuego podía resultar muy útil al mundo...

Recojo todos los recipientes y los coloco en filas, entonces me posiciono enfrente de una y arrojo un pilar de fuego horizontal que apenas toca la superficie del agua con mi pie.

Repito esto con cada fila repetidas veces hasta que el agua se caliente lo suficiente.

Mi nombre es Tao. Soy un...usuario del fuego-digo titubeando.

Una vez que me domine es que seré un verdadero maestro.-pienso con firmeza.