Partida Rol por web

Carnival

Capítulo III: El abogado de Adolf Von Hausen

Cargando editor
25/10/2011, 15:49
Leonard Archer
Sólo para el director

El terror invadió la mente de Leonard, no gritó, no porque no quisiera hacerlo, sino porque su cuerpo y su mente se habían paralizado por completo. Reconoció a quién le hablaba pero fue incapaz de gesticular palabra alguna. Sus ojos se llenaron de un brillo vidrioso y una arcada sacudió su abdomen y pecho. Giró la cabeza atontado buscando desesperado algo de información sobre el lugar. No sabía si lo habían desarmado, si se hallaba atado o en libertad, si continuaba o no alucinando. Necesitaba aclarar su mente, tranquilizarse para luego poder pensar. Había algo en su cabeza, algo extraído de la última vez que fue Gouchet pero no lograría hacerlo presente hasta que no se calmara.

- Tiradas (1)

Notas de juego

bueno, ya me dirás cuando el miedo pase. Pobre Leonard. Si haber acertado esto me dejó en una posición muuuucho mejor que no haberlo hecho ni quiero imaginar cómo sería la otra :P

Cargando editor
25/10/2011, 18:20
Ian Brown

Ian sonrió ante el descaro de la última frase de Susan, pensando para sus adentros que aquella chica bonita era realmente mordaz.

Poniéndose la mano en los bolsillos, dijo a manera de chiste:

- Christopher y yo somos amigos, señorita... ¿Fox, no?..., pero de ahí a que intuya qué es lo que lleva a Adolf Von Hausen hacer ciertas cosas, ya es pedir demasiado. Me confieso ignorante del por qué el señor Sneider se encuentra aquí en vez de mi amigo, pero, ya sabe como dicen, entre familia es mejor no hacer negocios. Me parece que nuestro "jefe" y su hermano no hay una cordial amistad. 

Cargando editor
25/10/2011, 18:25
Director

Mientras que Ian iba respondiendo aquello, se empezó a vislumbrar lo que parecían ser tablas puestas sobre caballetes. Cuando ambos estuvieron más cerca del destino que Susan quería alcanzar, vieron que aquellas maderas tenían los clásicos dibujos de torsos humanos en negro, como los que se podían encontrar en una Academia de Policía.

Cerca, en una mesa, habían varios tipos de armas. Nueve milímetros, escopetas, armas pesadas; en fin, un arsenal variopinto, que denotaba que cuando Adolf Von Hausen quería algo lo obtenía.

Una leve brisa se levantaba alrededor de la pareja mientras se acercaban. El sol brillaba sobre sus cabezas, dándole a aquel ambiente cierto tono pacífico, como si metros más allá un niño llamado Peter Von Hausen no estuviera esperando rescate.

Notas de juego

Susan, tienes marcada un arma en tu ficha, modelo que se encuentra entre ese arsenal. Susan sólo sabe manejar armas pequeñas, que se ajusten a su mano, así que no te emociones xD

Cargando editor
25/10/2011, 18:32
Director

Leonard, lleno de pavor, paseó sus ojos con rapidez por todos aquellos cuerpos, sintiéndose enfermo al ver como los insectos hacían de aquellos sus moradas mientras un olor putrefacto le llegaba hasta la nariz. Observó con horror, asímismo, que los pocos cadáveres que no habían pasado por el proceso de descomposición tenían profundas incisiones al lado de sus cuerpos, como si les hubieran clavado un objeto punzante bastante largo.

Pero si aquello había sido horroroso, lo que viera a continuación lo dejaría fuera de sí. A poca distancia de donde su cuerpo había ido a parar, estaba el cadáver de una joven rubia, con las mismas laceraciones en los costados de su ser; una muchacha que Leonard no tuvo problema en reconocer inmediatamente.

Se trataba de Helena...

- Tiradas (2)

Notas de juego

Cuando fallas una tirada de Ego, como buena máster que son (y malvada), y por reglas, se lanza un d20 para ver cuánto equilibrio mental pierdes. Teniendo -5 actualmente, te quedaría en -15, que, para las funciones de miedo, no es tan grave.

El miedo te dura 5 min.

Cita:

Si haber acertado esto me dejó en una posición muuuucho mejor que no haberlo hecho ni quiero imaginar cómo sería la otra :P

Ni te lo imaginas xD

Cargando editor
25/10/2011, 18:43
Helena Salisbury

Y entonces de repente, mientras sus ojos trataban de acostubrarse a todo aquel horror, Leonard vio la figura de aquella mujer que le hablara momentos antes erguirse imperiosa. Su boca se abrió ligeramente al ver que aquella era Helena. ¡Pero si estaba muerta!

Observó al suelo, donde la figura muerta de Helena yacía allí, a segundos de ser abono para la tierra, y luego a aquella mujer que se erguía ante él. Aquella también era Helena.

- ¡Oh, veo que ya lo viste! Este disfraz no me sirve de nada.

Cargando editor
25/10/2011, 18:47
Juliette

Y entonces Helena se empezó a transformar, tomando primero una presencia grotesca, llena de malformaciones y otros horrores, hasta volver a aparecer como una mujer, la chica que hubiese visto en los recuerdos de Gouchet, aquella que lo hubiese rescatado por primera vez de la criatura de las cadenas.

- Así mejor, ¿no? ¿De qué me sirve ser Helena Salisbury si ella ya está muerta? - Su boca se torció en una maligna sonrisa, que prometía dolor y sufrimiento. - ¡Oh, vaya! Pero si tienes miedo. Pobre de mi querido Leonard. El valiente policía se conmociona por un par de cadáveres.

La mujer se acercó, con su cabello negro bailando detrás de ella como si tuviera vida propia. Sus ojos azules brillaban con maldad, claramente emocionada por lo que veía.

- Déjame ayudarte - agregó, extendiendo su mano hacia Leonard.

Cargando editor
25/10/2011, 20:28
Leonard Archer
Sólo para el director

Verla a Helena muerta lo afectó todavía más, comprender que se había acostado con aquella criatura lo intrigó. ¿Cuales eran las motivaciones de Juliett? ¿Era realmente ella o era otro disfraz?
Sin saber exactamente por qué, Leonard tendió la mano a la mujer y aún sumido en aquel terror preguntó.
-¿Por qué? ¿Qué es lo que ganas con todo esto? ¿Qué es lo que ganas matando a Helena y haciéndote pasar por ella?-

Cargando editor
25/10/2011, 21:42
Juliette

Juliette agarró firmemente la mano de Leonard y lo ayudó a ponerse en pie, haciendo que el proceso se acercara a él. La mujer sonrió y palpó su frente, en aquel momento caliente por la fiebre. La mano de la muchacha eran terriblemente frías, pero Archer se sintió aliviado ante el contacto de ella con su cara, como si dentro de aquel horror fuera ciertamente un bálsamo.

- Yo no maté a Helena. Lo hizo mi padre y por muy buenas causas; y bueno, además de divertirme - ¡porque fue muy divertido engañarte! -, lo hago por mi papá me lo pidió, porque quería conocerte - respondió la muchacha a las preguntas del policía. - Pero, ¿por qué te preocupas por eso? Estás muy enfermo. No pensé que las pesadillas te hicieran tanto mal... yo lo consideraría más bien un beneficio.

Cargando editor
25/10/2011, 22:09
Leonard Archer
Sólo para el director

-Podrías haberme engañado sin matar a nadie. Hubiese sido un poco más... Civilizado- respondió Leonard algo asqueado con aquella situación. -Quien sabe, incluso sin haberme engañado puede que pudieras haberte divertido aún más- poco a poco volvía a dominarse a si mismo y quizás, si tenía suerte, podría llegar a dominar la situación. -y el resto- dijo señalando los cuerpos con la cabeza -¿Quienes son?-

Cargando editor
25/10/2011, 23:24
Juliette

La mujer sonrió coqueta antes de responder.

- Pero, cariño, si no hay nada más divertido que jugar con la muerte, ser una especie de Dios y decidir cuándo y cómo morirá alguien; e igualmente no hay diversión sin el peligro. ¿Cómo podría divertirme si no jugaba un poco contigo? Eras mi víctima e iba a disfrutarte.

Juliette hablaba con morboso placer, remomorando los pasos que la habían llevado a ella, como Helena Salisbury, y a Leonard a cruzar sus destinos, con resultados conocidos por ambos.

Cuando el policía formuló su última pregunta, la muchacha paseó su mirada por el lugar, elevando los hombros.

- No sé quiénes son los demás. Alimentos para mi hermana, así los llamó yo. Sólo tuvieron la suerte de cruzarse con mi padre en el momento en que él más lo necesitaba.

Cargando editor
26/10/2011, 06:53
Susan Fox

Finalmente llegaron al lugar que Adolf Von Hausen había dispuesto para las prácticas de tiro. Verlo hacía dudar de su palabra, cuando dijo que no tenía un lugar preparado para dicho propósito. Quienes debieron prepararlo en tan poco tiempo hicieron un trabajo magnífico.

Lamentablemente poco tiempo pudo admirar Susan todo eso, pues pronto vio una mesa repleta de armas. Al verlas sintió que las piernas le fallaban, pero consiguió mantenerse en pie. Aún así, sentía que le faltaban las fuerzas y sentía frío a la vez que transpiraba.

Ella solo sabía manejar armas pequeñas, y no tardó en encontrar una muy parecida a la que tenía en su casa guardada. Desvió la mirada, no quería distraerse con los recuerdos que ese arma le traía, prefería elegir otra. Casi sin pensarlo, extendió su mano hacia una 9mm.

- Tiradas (1)
Cargando editor
26/10/2011, 14:56
Leonard Archer
Sólo para el director

Intuía que hablaba de su gemela y también que podría existir cierto odio hacia Samantha.
-Oh ¿Así que la preferida de papi, Sam, gusta alimentarse de cadáveres? La recuerdo como una niña muy buena y dulce. Cómo una de esas personas que ilumina un lugar con sólo hacerse presente en el, no imaginaba esta otra faceta. Pero bueno, después de todo no sé si debería fiarme de estos sentimientos. Después de todo no son míos sino de Alexander.- Aguardó un segundo a una posible réplica y agregó -y dime ¿Por qué yo y no Adolf o quizás Christofer?-

Cargando editor
26/10/2011, 18:28
Director

Susan intentó agarrar el arma, pero ni siquiera sus dedos habían rozado el metal de ésta cuando sintió como un frío espantoso se apoderaba de su cuerpo. Haciendo acopio de sus fuerzas, agarró la 9 mm., pero inmediatamente como ésto sucedió, sintió un peso extraño sobre su mano.

Sus ojos se nublaron mientras el arma se deslizaba hacia el suelo. Sintió su cuerpo pesado mientras el miedo se apoderaba de su ser con espantosa rapidez. Dio unos pasos para atrás, y minutos después se encontró a sí misma en el césped, demasiado cansada para sostener el peso de sus culpas.

Mientras que Ian la intentaba sostener, los ojos de Susan se cerraron como se cierra el velo de un teatro. Al volverlos a abrir se encontró en una sala rodeada de espejos. Su mirada paseo temerosa por ellos mientras aquéllos empezaban a brillar con luz propia. De repente en sus transpariencias se habían dibujado las paredes de su antigua casa, la estructura de una habitación que ella conocía muy bien. Era aquella dónde había muerto su padre, donde ella le había matado.

Sintió un peso repentino en su mano. Un arma se había depositado en ella casi por arte del milagro. Se vio a sí misma apuntándola al infinito, como aquel fatídico 22 de diciembre. Uno de sus dedos apretaba ligeramente el gatillo mientras a sus oídos llegaba las voces de súplica de su madre. ¡Todo como aquel día! Con una lágrima bajaba por su mejilla, disparó, viendo como cerca de ella la figura de su padre resbalaba, dejando un hilillo de sangre en la pared.

¡Oh, dolorosos recuerdos! ¡Susan recordaba aquello como si hubiese sido ayer! Pero en sus recuerdos no estaban las sirenas de la policía, como en ese momento, ni el murmullo de voces que se acercaban a ella. De repente se vio rodeada por un grupo de gente, entre ellos vecinos, personas que no conocía, los agentes de la ley, entre otros. Allí estaban sus hermanos, mirándola acusadoramente. También estaba Miguel, que le sonreía maligno. Igualmente se hallaba Antoniette, que la miraba con una mezcla de recriminación y asco. Pero lo que más sorprendió a la joven fue la presencia de un niño, un nene que ella sabía su hijo. ¡Se parecía tanto a su padre! ¡Su pequeño Jonathan la veía con una mezcla de tristeza y vergüenza, con sus mejillas bañadas en lágrimas!

Quizó acercársele, pero entonces de los ojos del niño empezaron a salir lágrimas negras. Se asustó; y aún más cuando no sólo él, sino todos los presentes lloraban aquel color, bañando sus rostros de un aspecto tétrico. De repente los rostros se pusieron blancos, de un tono cadáverico, empezaron a cambiar, optando formas grotescas, con las cuales Susan apenas pudo reprimir un grito. Aquellas figuras se le acercaban con sus manos asquerosas, llenas de malformaciones, hasta ella, deseando arrastrarla hasta el Infierno del que nunca había debido escapar...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Susan ha entrado en estado catatónico, del que le será difícil salir (más o menos saldrá entre ocho y diez minutos), y cuando lo haga, estará muy nerviosa. Confio en que lo sepas rolear.

Cuando se falla una tirada de terror (Ego), se lanza un 1d20 para ver cuánto desequilibrio mental pierde el personaje. Haz perdido -10, con lo que te quedarías en -20.

Cargando editor
26/10/2011, 19:06
Juliette

Juliette se mostró seriamente molesta cuando Leonard se refirió a Samantha, y le lanzó sin más, denotando su rabia:

- ¡Tú no sabes lo que le ha pasado a Samantha para que estés hablando, así que cuidado con lo que dices, porque te va a salir bien cara la jugarreta!

Mientras hablaba, sus ojos habían adquirido aún más brillo, haciéndola notar realmente hermosa, pero también peligrosa. Quizá Leonard estuviera cometiendo la imprudencia de alterar a aquel demonio, con consecuencias que pudieran ser trágicas para él.

- Y si te elegimos, querido, fue porque sabíamos que ibas a venir para acá a hacerte el héroe. ¡¿Y no nos equivocamos, verdad?! ¿Y ahora sabes lo que te va a pasar por ser tan buen policía?

Juliette sonrió, mostrando unos dientes tan blancos que parecían irreales. Su sonrisa era maligna, así como el gesto que hizo a continuación. Tronó los dedos y segundos después Leonard se sintió aprisionado. Un par de cuerpos putrefactos lo sostenían con una fuerza inusitada. Por más fortaleza que el policía le imprimiera a sus músculos, era difícil salirse de aquel agarre, y pronto se dio por vencido en aquella tarea.

- Si no te importa - continuó Juliette - te vamos a conducir a una fiestecita mientras vienen tus otros amigos. Seguro nos vamos a divertir mucho.

Cargando editor
26/10/2011, 19:24
Scarlett Blake

- ¡No tan rápido! - gritó de repente una voz.

Ante los ojos impresionados de Juliette y Leonard, una joven muy hermosa, de cabellos rojizos y mirada feroz, apareció en escena portando un arma, disparó hacia la mujer de cabello negro, produciéndole un leve rasguño, que ésta no sintió.

- Tiradas (3)

Notas de juego

1 - Juliette; 2 - Cuerpo muerto (a elección de mí, porque no lance un d3).

Cargando editor
26/10/2011, 19:31
Director

Juliette bufó como lo hubiera podido hacer un gato y deslizó una cadena por sus manos, que Leonard no había tiempo de admirar en todo aquel tiempo. Impulsando ésta al aire, salió de allí con una rapidez inusitada, mientras los cuerpos muertos que sostenían al policía, sin dueña que los manejara, se habían desplomado una vez más, liberando al policía de sus horribles presencias.

Cargando editor
26/10/2011, 19:55
Leonard Archer
Sólo para el director

Leonard estaba confiado, no creía que todo fuese a terminar para él, al menos no todavía. Juliette había dicho que Gouchet lo quería así que todavía disponía de algo de tiempo. Intentaría jugar con las mociones de Juliette, seguramente sería arriesgado pero no tenía otra opción por el momento.
Estaba a punto de hablar cuando una voz distrajo su atención y la de Julliette, luego el conocido sonido de un arma abriendo fuego llenó sus oídos y acto seguido Juiliett desapareció con un rápido movimiento.
Todavía algo aturdido Leonard habló

-Gracias- fue todo lo que pudo decir

Cargando editor
26/10/2011, 21:48
Scarlett Blake

La mujer asintió con la cabeza ante el agradecimiento de Leonard mientras se guardaba el arma en el cinto. Ésta se acercó hasta el policía y le dijo con tono que no admitía réplica:

- Debemos salir de aquí. Conozco el camino. Por tu bien, acompañáme.

Cargando editor
26/10/2011, 22:02
Leonard Archer
Sólo para el director

-¿Donde es aquí? ¿Estamos en el circo?- preguntó Leonard intuyendo la respuesta. -Si es así no puedo marcharme. Tengo que buscar a Peter- dijo mientras seguía a la mujer. Mientras tanto palpó su pistolera y se tranquilizó al comprobar que el arma se hallaba allí, luego buscó su teléfono celular, todavía lo conservaba. Instintivamente revisó la antena y comprobó que no tenía señal. Luego se lo extendió a la mujer. -Toma, cuando salgas de aquí llama a Tottle, Jesson Lestrade y Minerva e informales donde estoy. Antes que nos separemos ¿Qué haces tu aquí?-

Cargando editor
26/10/2011, 22:19
Scarlett Blake

La mujer frunció su rostro en un gesto de furia y dijo con voz amarga:

- Estamos en el circo, sí, ¡pero debajo de él! Yo también he venido aquí buscando a Gouchet, y te recomiendo que me sigas, porque el camino es largo y es fácil perderse. ¡Así que muévete y deja de decir idioteces!