Partida Rol por web

El goblin asintió

- Como siempre. ¿Y ustedes? No les había visto antes por aquí

-Tranquila moza, y respira, que causas furor. -Dijo guiñándole un ojo y haciendo un movimiento circular con la cabeza tratando de abarcar a la gente del derredor. Sonriéndole le ofreció la carta y continuó.- Dime, ¿Qué me recomiendas? ¿Tienes algún favoritismo aquí? -Y qué sería aquel paquete... je... Pensó para sus adentros.

Nervioso.

Aquella palabra reflejaba perfectamente cómo se sentía en aquel momento, nervioso y alerta.  Aquel lugar no le gustaba para nada, si no fuera por la necesidad de ganar aquel combate jamás hubiese accedido a ir allí.

-Negocios- respondió -Simples negocios.  Ya sabes, lo típico- luego continuó avanzando como si no hubiese más que hacer allí

Miro con curiosidad y una pizca de nerviosismo al goblin, sin embargo, no es aquella clase de nerviosismo que se siente cuando se ha hecho algo malo, sino aquel por ver algo que no me termina de agradar, no confió mucho en este lugar, y menos en sus habitantes, si bien es cierto esconde muchas cosas no estoy dispuesta a correr riesgos innecesarios, por ende no dejaría las puertas de este lugar cerradas, sino que volvería solo si fuese necesario.

-Como ahora... - Pienso mientras escucho las respuesta de mis compañeros y me limito a dar mi respuesta - Yo vengo de compañía. 

- Como no -respondió el goblin encogiéndose de hombros- Muy bien, como veo que es su primera vez aquí, les explicaré las reglas. El mercado es territorio neutral; nada de enfrentamientos, peleas, duelos o derramamientos de sangre. El que incumpla esta norma será expulsado del mercado y no se le volverá a permitir la entrada, de por vida. Pueden tratar de obtener un trato "ventajoso" con los mercaderes, pero nada de robarles o atacarles. Los que incumplan esta norma quedarán a disposición de la sentencia que dicte el consejo de mercaderes del Port del Drac, y la guardia no se hace responsable de las consecuencias de dichas sentencias. Y una vez cerrado un trato, debe cumplirse y respetarse. Puede solicitar su renegociación con la otra parte del trato, pero eso no exime de su cumplimiento; los que incumplan esta norma... bueno... que se atengan a las consecuencias que ellos mismos firmaron. ¿Está claro?

Laura se sentó en la mesa, sin ni siquiera echarle un vistazo a la carta

- Mi favorita es la argentina; lleva chimichurri y cebolla caramelizada.

-Más que claro- respondió Hieronymus quien no tenía la más mínima intención de buscarse problemas.  -¿Alguna recomendación más que quieras hacernos?-

- Si: no compren nada cuyo precio no puedan pagar. Se que parece una obviedad pero... ya lo entenderán.

-Gracias por explicarnos las reglas - Digo mirando al guardia - Y gracias por la recomendación - Me pregunto como serán los precios de las cosas en este mercado, naturalmente no creo que usen alguna moneda de nuestro mundo... ¿serán favores o encargos? - Miro a Hieronymous y me pregunto que le pedirán a cambio por lo que necesita para el duelo - Lo tendremos en cuenta - Digo aun mirando a mi compañero changeling. 

-Uhhhhhhh, qué segura vienes, no? ¿Qué tal ha ido? ¿Está bueno el chimichurri de aquí? Igual cojo esa misma para probarla, que ahora tengo curiosidad por ver qué te gusta a ti. -Exclamé feliz de que hubiese llegado.

- Pues en marcha; ¿que estabais buscando exáctamente? Conozco a unos cuantos mercaderes de la zona -comentó Natalia mientras se echaba el rifle al hombro y atravesaba el umbral del mercado

- Aquí todo está bueno, pero la argentina me gusta especialmente, por la carne que utilizan. Traída de la Pampa argentina; se lo toman muy en serio.

-Bueno, me gusta probar cosas nuevas y no sé qué es la Pampa argentina, así que creo que ya está claro -Contestó con voz jovial, y bromeando siguió con voz vehemente y rostro serio-, seguiré tus pasos, pues. -Volviendo al tono jovial de antes insistió en la pregunta que había hecho antes fijándose en el color de sus ojos en ese momento:- Bueh, ¿Cómo ha ido por la tienda? Me crucé con un tipo que creo había visto antes, en la rave quizá, pero no tengo ni idea de quien es. Iba con una chica de... blanco.

-Bueno, es difícil responder a tu pregunta- le dijo a Nat, si, podría llamarla Nat luego de acostarse con ella, sus ojos se desviaron y se regocijaron con la figura de la mujer, luego se obligó a concentrarse en lo que debía. -Decía que es difícil porque en realidad no lo sé.  Verás, tengo un duelo onírico pronto y busco algo que me de ventaja sobre mi adversario.  Sé que si el duelo fuese real no haría falta más que mi persona, pero creo que él está mejor preparado para esto que yo.  ¿Sabes de algo que reúna estas características?-

- Un duelo onírico, ¿eh? Supongo que podrías dirigirte a aquel barco de allí -dijo señalando al que parecía una fragata- Son "piratas de sueños"; saquean sueños y luego los venden en el mercado. Pero te advierto que son unos negociantes un poco... hostiles.

- Oh, nada en particular; tenían un mensaje de Lily. Supongo que le pedirían algo de información y ella les mandase a hacer el recado a cambio.

Al oir el nombre de Lily Theo abrió los ojos sorprendido. Súbiamente animado exclamó:

-¡OH! !¿Lily?! !¿¿Y qué te cuenta??! -Después calló en la cuenta de todo el embrollo que había destrás y se corrigió.- Oh, perdon... Quizá no debería preguntar... ¿Qué... qué vas a tomar de beber? .-Dijo tratando de cambiar de tema pero con la esperanza de que Laura le dejara caer algo más.
 

-Piratas de sueños- pensó y se encogió de hombros -Si es con quienes hay que tratar...- dijo y sin concluir la frase se puso en camino. -¿Me acompañan?- agregó dirigiéndose a Mar y Natalia

- Claro -respondió Natalia, encogiéndose de hombros

Laura esbozó una sonrisa algo incómoda

- Bueno es... personal.