Partida Rol por web

Cornago

V. El reclamo de Cornago

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26/04/2016, 12:09
Director

Salístes entonces los tres sin dudarlo, empujando a los criados que allí se había agolpado alrededor de la joven sirvienta y levantando el mobiliario caído. Tras bajar unas escalerillas, tomásteis un pasillo y enseguida llegásteis a la alcoba de la señora de Luna, dueña aún de Cornago.

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26/04/2016, 12:10
Director

En esos momentos llegaron a la alcoba de doña María Manuel, Uloxio y el pequeño Dámaso. La escena que vieron era dantesca: la puerta forzada en sus visagras, y ya en el interior María de Luna se encontraba como abrazada a Xilda, mientras Fadrique empuñaba su espada y permanecía de pie junto a un cuerpo tendido boca arriba en el suelo, todo él impregnado de sangre (al igual que el suelo y los muebles contiguos, como la cama y alguna silla). La terrible escena hacía presagiar lo peor, pero parecía que la de Luna estaba intacta.
 

Notas de juego

Podéis ya postear para todos.

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26/04/2016, 12:25
Manuel de Fonseca

¿Qué ha pasado?-pregunté temiendo un ataque sobre la señora. Después me agaché sobre el cadáver e intenté identificarlo, no esperaba conocerlo, pero me hacía sentirme mejor y que estaba haciendo algo. Era sorprendente lo que había familiarizado con la muerte, hace años esto habría sido un hallazgo terrible, ahora solo se trataba de una muerte más.
 

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26/04/2016, 12:28
Fadrique

Fadrique miró a los que entraban con aire casi soñador. Se dejaba ver que salía del trance de la lucha, donde el tiempo transcurre de manera diferente. Pero acertó a dar una explicación racional. Trobamos a iste atacando a la sinyora y, bueno... tenió un chicot accident. Se trepuzó con os nuestros fierros.

Notas de juego

Encontramos a este atacando a la señora y, bueno... tuvo un pequeño accidente. Se tropezó con nuestros hierros.

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26/04/2016, 15:11
Uloxio Arrugas

Uloxio se aproxima hecho una furia sobre el cuerpo del agresor y le atiza varias patadas en el abdomen antes de mirarle a la cara para tratar de identificarlo. Dios no quiera que fuera el reclamador de Cornago.

¡Hideputa! ¡asi te lleven los infiernos! grita tras ver la faz del susodicho y tratar de reconducir su ira hacia otros menesteres.

¿Os encontrais bien Maria? ¿conoceis a esta persona? ¿¿no teniais escolta??

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26/04/2016, 20:06
Xilda

Xilda se gira a Uloxio. Con calma deja de agarrar a la mujer aprovechando que va recuperando la compostura, pues sabe que pasado el momento, María de Luna no querría que le viesen abrazada a otra mujer, mostrando debilidad. Al menos, Xilda no querría verse en su caso.

-Semella ser un deos frades del monasterio donde deixamos o corpo de don Juan de Luna mais lo que no sé, es que interés poderían ter na muerte de Dona María.

Aunque...

La mujer intentaba ignorar que había algo extraño en la muerte de Juan de Luna  y más que en su muerte, lo que vino después. Recordó lo acontecido la primera noche que velaron el cadáver y lo acontecido en el mismo monasterio. Algo que probablemente había sido advertido por los que allí moraban.

 

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27/04/2016, 10:26
María de Luna

Así es -dijo doña María entre lagrimas de susto, apoyando las palabras de Xilda-. Es uno de los frailes del monasterior, el hermano Roberto... Ha intentado... Gracias a... a... -no le salían muy bien las palabras de la impresión, pero miraba a Fadrique y a Xilda, los salvadores de su vida-.

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27/04/2016, 10:29
Director
Sólo para el director

Un terrible frío os heló el cuerpo a todos. Era como si en un momento la temperatura de la estancia bajara. Las pocas velas que habían en la habitanción de doña María se apagaron un instante, como sopladas por tal frío... y al momento volvieron a encenderse. Acto seguido, fruto de las voces los criados vinieron a atender a la señora de Cornago. Algunos de los criados estuvieron retirando el cuerpo mientras que las doncellas estuvieron limpiando la sangre. Algunas de ellas llevaron a doña María a otra habitación para hacerla descansar en una de las alcobas. Entonces apareció allí Pedro Sáez, el cual había visto el cadáver del hermano Roberto mientras se lo llevaban.

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27/04/2016, 10:32
Pedro Sáez

¡Hideputa malnacido! -susurró en estando al suyo lado, cuando lo retiraban-. Luego entró en la alcoba de María, donde estábais aún. Me lo han contado los siervos... Ese desgraciado... -resoplaba, pensando qué hacer-. He de pediros algo: id al monasterio y registradlo... Contad allí las intenciones del fraile y tendréis vía libre para ello. Quiero saber las intenciones viles para con la señora... aún puede estar en peligro. Yo... yo vigilaré a ese Tomás que habéis traido... -no le hacía gracia que el de Fornás y el escribano se alojaran allí-.

Notas de juego

Si alguien no quiere obedecer, puede quedarse en el castillo.

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27/04/2016, 15:41
Fadrique

Vos cosiratz a ixe Tomas, sinyor, yo lo feré con a mía sinyora, si ella no s'oposa, que dos brazos pueden estar pocos ta isto. Y no creigo que sía difuera de periglo porque haigamos feito un eixemplo d'iste desgraciau.

Poco listo había de ser quien sospechara que Fadrique no tenía confianza en la seguridad de su señora, ya que era poco dado a disimulos pero, en fin: ¿cómo había entrado tan confianzudo este monje aquí? Si tenía algo contra la señora, ¿no sería el primero de otros intentos? No fiaba de tener tan pocos ojos.

Notas de juego

Vos vigilad a ese Tomas, señor, yo lo haré con mi señora, si ella no se opone, que dos brazos pueden ser pocos para esto. Y no creo que esté fuera de peligro porque hayamos hecho un ejemplo de este desgraciado.

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27/04/2016, 15:48
Dámaso Montalvo

-Yo iré a buscar cualesquiera objetos que el monje oculte y a quienes tuviera consigo en su empresa. Puedo ser pequeño, pero por eso no se me escaparán los menores recovecos. -Dije con orgullo de ayudar a mi señora.

-No se nos escaparán los culpables.

Un escalofrío me recorrió la espalda al recordar las apariciones, pero me mantuve firme en mi corta estatura.

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27/04/2016, 16:06
Xilda

-Co vueso permiso, yo iré también ao mosteiro-Añadió Xilda inclinando respetuosamente la cabeza ante doña María de Luna-sabiendo que quedades en boas manos.

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27/04/2016, 19:43
Uloxio Arrugas

Al monasterio pues... este asunto se complica cada vez mas... dice Uloxio mientras mira Xilda contento de que la mujer le acompañe. Vale mas que muchos hombres que conoce.

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29/04/2016, 14:49
Director

Notas de juego

Pedro Saez accede a que Fadrique vigile a doña María.

Fadrique: vigilará a doña María.
Dámaso, Xilda y Uloxio: van al monasterio a indagar.
Manuel: en cuanto nos comente, actualizo.

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30/04/2016, 07:40
Manuel de Fonseca

¡Al monasterio! Decidí acompañar a mis compañeros e intentar averiguar que había pasado con aquel monje para que atacase a la señora.

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30/04/2016, 17:41
Director

Sin pensarlo demasiado, en entrando ya el día bien de mañana, partísteis hacia el exterior. El portón del castillo se abrió y bajásteis el camino hasta llegar al mismo Campolapuente. Allí, os dirigísteis hacia el convento franciscano, que se encontraba al otro lado del río Linares. Recordábais que se hallaba regido por el hermano Bernardo entre todos los frailes. Una vez tocásteis a su puerta, un monje os abrió. Tras explicarle que debíais entrar en nombre de doña María de Luna, éste se mostró un poco reacio a dejar entrar a cuatro tipos (uno mujer et otro de tal estatura), pues al fin y al cabo el convento de clausura es lo que era. Finalmente, os llevó hacia la capilla principal, donde se encontraba en la hora de la oración el hermano Bernardo. Tras esperar cinco minutos, éste os recibió. Aún no había trascendido la noticia del intento de asesinato de María de Luan (tarde o temprano todo Campolapuente lo sabría).

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30/04/2016, 17:49
Fray Bernardo

¿Qué desea doña María en tan temprana hora? -dijo solemnemente, entre educado (por guardar las formas) y molesto (por vuestra repentina irrupción)-.

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30/04/2016, 17:50
María de Luna

Te quedaste en el castillo mientras que tus compañeros su hubieron ya marchado. Los criados acompañaron a la dueña de Cornago hasta otra habitación más grande que habían dispuesto (no a la suya, que habrían de limpiarla). Tu fuiste tras ello, y tras presentarte como acompañante durante un rato, ésta no dijo nada, sino que una vez dentro de la nueva alcoba, clavó sus ojos en el suelo. La mujer estaba sentada en la cama, inmóvil, pensativa y asustada. En estado de trance, de colapso*.

Notas de juego

*De shock.

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01/05/2016, 08:47
Manuel de Fonseca

Me santigüe al entrar al monasterio, estaba claro que necesitaba una confesión por mis repentinos pecados, pero no era ahora el momento. Nos encontrábamos frente al hermano Bernardo y sin mas preámbulos le solté lo que había pasado-Buenos días. Han intentado asesinar a Doña María...uno de vuestros frailes era el que lo intentó. Buscamos información que nos pueda resultar de utilidad. ¿Cuál de vuestros hermanos falta?¿quién era?¿qué le pudo llevar a intentar hacer semejante tropelía? -Me quedé mirando a fray Bernardo fijamente esperando respuestas.

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01/05/2016, 18:41
Fadrique
Sólo para el director

Fadrique se encontraba muy incómodo. Cambiaba la el peso del cuerpo de una pierna a otra. Dejaba vagar la mirada por la habitación, veía evolucionar las moscas de aquí para allá. Mira que había hecho guardias, mira que se había pasado horas y horas sin mover un músculo, acechando peligros tras cada obstáculo que hubiera en derredor. Mas nunca con una persona tan turbada como ahora estaba su señora. Mas no sabía qué hacer: si ofrecer consuelo, si callar de una vez por todas et ir a su trabajo, que era hacer el plantón...

Cuando ya el silencio se le hacía asaz difícil, se decidió por hablar:

Mi señora, ¿cómo fue que entró ese monje a sus habitaciones?