Partida Rol por web

Corsarios de Belfalas

La Calavera de los Mares 2 - Los Dos Cofres

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13/05/2012, 13:20
Director

Yazân tiró firmemente del cabo para hacer reaccionar a Elhediel. La pelirroja pareció percatarse, y se aferró al cabo con todas sus fuerzas mientras con un firme pero suave tirón alguien la sacaba del agua.  En condiciones normales no habría supuesto ningún problema para un hombre como Yazân subir un peso como el de Elhediel hasta la cubierta, pero las condiciones atmosféricas eran terribles y la carga era demasiado preciada. Con el peligro extra de que él mismo podía caer por la borda.

Mas de repente, como materializándose de la oscuridad, aparece Yuma -el fornido negro mano derecha de Roncillo-, que con sus poderosos brazos ayuda al haradan, y entre los dos alzáis a Elhediel como si fuera un cesto de plumas. Después te sonríe, una línea blanca y brillante asoma entre la oscuridad de su rostro y la negrura reinante. La mocosa está viva, mas sus ojos muestran agonía y está tiritando.

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15/05/2012, 02:57
Capitán Cyryatan

Al ver aquella penosa escena suceder a escasos metros de su posición, el taciturno capitán Cyryatan se acercó para comprobar más de cerca el estado de la muchacha que casi había muerto devorada por las turbias aguas. La pelirroja no se veía para nada bien, estaba más que claro para el númenóreano que la batalla había terminado para ella.

- Teniente, llévela a un lugar seguro y haga que el galeno  la revise y cuide de ella. Yuma, negro canalla, será mejor que vuelvas a tu puesto antes de que Roncillo te arranque los ojos por desertar de su mando...

Lo cierto era que el libertinaje o desorden mental del corpulento marinero de ébano había sido más que oportuno para ahorrarle a Elhediel un mayor sufrimiento colgando de aquél cabo a merced del despiadado Belegaer.

Finalmente el corsario suspiró algo más aliviado. Sus hombres hacían todo lo humanamente posible para poner el barco a la capa como lo había ordenado, y sus cuerpos parecían estar encendidos por el deseo de vivir. Deseaba creer Cyryatan que con un poco de suerte no sería tan absurdo sortear aquella cruda tormenta después de todo...

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15/05/2012, 21:46
Yazân

Notas de juego

Siento no poder postear, pero estoy de vomiteras todo el dia.

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16/05/2012, 00:03
Director

Notas de juego

te has hecho el test de embarazo?


PD: estos detalles en la escena Introducción general, please ^^

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20/05/2012, 23:27
Elenna

Elenn dejó el sollado de los galeotes con órdenes de que dieran descanso a los hombres, aunque tendrían que ser gente de hígados para poder cerrar los ojos con esta tormenta. Y acabada allí su labor, porque poco más podía hacerse tras las órdenes del capitán fue, o mejor dicho se tambaleó, en busca del galeno. Si aquel carnicero no podía recomponerle las costillas, al menos podría darle algo para que dejaran de dolerle.

Pero parecía que esta vez el galeno tenía ya bastante sobre lo que poner las manos, porque no era la única que estaba allí. Había marineros con cortes que suturar, golpes y parecía que incluso algún hueso roto, o quizás algún miembro aplastado, por la forma en la que gritaba el tipo al que estaba atendiendo. Por otra parte, puede que estuviera gritando de esa manera por los propios cuidados del galeno, que a veces parecía más temible que los propios soldados gondorianos.

Se sentó en el suelo, apoyada la espalda en el mamparo de popa, sin demasiadas ganas de quedarse allí, pero demasiado agotada para seguir moviéndose por el barco. Y a pesar de los gritos y gemidos de los heridos, debió de acabar por quedarse dormida. Abrió los ojos con unos pasos a su espalda, y vio llegar al teniente con Elhediel a cuestas, empapada y tiritando como una rata mojada.

-Parece que la pelirroja ha estado a punto de cenar con los peces. Aunque está visto que tienes suerte. Y quién vele por tí.

Notas de juego

Siento no haber escrito antes. Hace ya varios días que tengo pendiente escribir en esta partida. Siempre me digo "luego lo hago", y después se me olvida.

Aunque sólo sea para decir que sigo viva.

Espero que a Ameyal no le importe que la meta en la escena, si no, cambio el post y listo ;)

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21/05/2012, 20:22
Director

El corsario al que la roca había aplastado las piernas yacía lívido sobre un jergón en el suelo; se había ido vaciando de sangre por la herida. Muy feo de ver, aún ahora que ya no se movía (los gritos debían ser suyos). Akaûr, que así se llamaba vuestro desafortunado compañero, apestaba a alcohol, así que supusiste que al menos, el galeno -incapaz de hacer nada por él- había tenido la deferencia de atiborrarlo de grog para que sufriera lo menos posible. Había algún marinero más con alguna contusión, mas cuando Rûmus se acercaba a ellos, le decían -con mucho aspaviento y sofoco- que ya se encontraban mucho mejor. Que gracias por nada. En realidad, Rûmus no era tan mal médico, lo que pasaba es que se había ganado mala fama, por ser un poco gafe y pusilánime.

Apresuradamente, el galeno se acercó a Elenna, echándole un vistazo general y parándose en los moratones. Afortunadamente, Rûmus no era ningún sobón, y se comportaba bastante bien con las mujeres. Si el galeno hubiera sido Roncillo -que ni siquiera era de los peores-, tendría que haber acabado dándole coces para que no se la follara.

-No es grave, Elenna -te sonríe torpemente-. De momento, bastará si no te mueves mucho. Y yo de ti no saldría a cubierta, salvo que desees gloria, porque estos vaivenes no auguran nada bueno...


Entonces, apresuradamente, y con un portazo, entra Yazân. Azorado el semblante y empapado hasta los huesos. Y una fría corriente se cuela con él en la estancia llenando a los presentes el corazón de escarcha. Trae en brazos a una Elhediel más blanca que el cadáver de Akaûr.  Aunque por lo que tirita la muchacha, al menos está viva.

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21/05/2012, 20:43
Director

[En cubierta]

Por fin, tras una hora que se había hecho eterna, conseguisteis dejar el foque de capa y el mayor con todos los rizos tomados. En cuanto al mesana, se había cazado a tachón en el escudo de popa. Mas todo tenía su precio en esta vida y en la maniobra perdisteis a otro marinero. Al pobre Orejas, como todos lo apodabais; feo pero entrañable marinero que sin duda, sobre todo en los tiempos de ocio y risas, echaríais de menos. La mar se lo llevó y ahí quedó para siempre, en ese cementerio particular de tantos marinos.

Había llegado ese momento en el que todos a bordo empezaban a rezar y se persignaban al modo que hacían los haradrim, o se encomendaban a Eru, a Uinen y a Ulmo, y hacían promesas piadosas que luego, una vez a salvo y en tierra, casi siempre se guardaban mucho de cumplir.

Los marineros que habían abandonado la cubierta lo tenían un poco mejor. Pero así iban también, todos zarandeados bajo cubierta con el paternoster y el alabadauinen en la boca.

Uinen

Era inquietante ver a la marinería diseminada por todos lados, apoyada en rincones o agarrada a mástiles y cabos, susurrando rezos por lo bajini, con cara de absoluto espanto. El haradaico, con su potente sonoridad, sus sílabas abiertas y sembradas de aes y rotundas emes, era aún más apropiado que el adûnaico para el tono solemne y épico. Mas los rezos sonaban por doquier en ambas lenguas por todos los rincones del barco.

Aia Uinen quanta Eruanno
i Héru as elye
aistana elye imíca maiar
ar aistana i yáve mónalyo
Aire Uinen Eruo Hini
á hyame rámen úcarindor
sí ar lúmesse ya firuvamme
Násie 

Notas de juego

Transcripción libre del Alabada Uinen ^^

Salve Uinen llena de gracia
el Señor está contigo.
bendita eres entre los maiar
y bendito es el fruto de tu seno
Santa Uninen hija de Eru,
ruega por nosotros pecadores
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.

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22/05/2012, 14:31
Capitán Cyryatan

Sólo los más temerarios marineros permanecían activos en la cubierta del incursor corsario. La inquietante figura de Cyryatan destacaba entre la cruel borrasca. Había perdido ya todo vestigio de decencia, empapado de pies a cabeza como estaba, su ropas manchadas con la sangre de su propio brazo herido por una astilla, y una oscura faz perturbadora coronada por su habitual mirada de tigre acorralado. Aquella efigie miserable y sombría seguía siendo a pesar de todo el capitán del barco. Y seguía empuñando el orgullo en su corazón como un leal e hiriente alfanje.

- Son sumamente afortunados de servir bajo mi insignia... - Comentó en voz alta a sus restantes subordinados, casi con solemnidad en su entonación, erguido y con cierto desdén desde su lugar en el puente de mando.

- Ni siquiera el Gran Mar se atreve a probar bocado de esta carne. Abandonen sus plegarias si no tienen nada mejor que hacer. Huyan de cubierta como el resto. Y si aún desean rezarle a algo, eleven sus inmundas oraciones hacia mi. Soy lo más sagrado que verán entre este mar y el oscuro firmamento...

Lo del númenóreano era un humor bastante siniestro, y a esas alturas hubiera sido difícil determinar hasta donde se trataba de una burla y cuanto de convicción había en sus lacerantes palabras. Tampoco era el momento de reflexionar demasiado acerca de ello. El clamor seguía siendo la furia del Belegaer desatada implacablemente contra la insignificante embarcación de Umbar. Ese era el único y descorazonador paisaje que podía vislumbrarse ya.

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22/05/2012, 19:32
Elhediel

No se dio cuenta cuando algo o alguien la haló, pensó que había sido una nueva ola golpeando contra su cuerpo con furia, demasiado confundida estaba como para echar siquiera los brazos en el cuello del hombre que la trasladaba desde cubierta hasta donde estaba el galeno. Se sentía temblar como una hoja, su mente que desvariaba pedía a Eru que la salvara y a sus otros dioses que la llevaran pero era una rezo que nadie más que ella podía escuchar y eso era decir, se mezclaba con los gritos que escuchaba alrededor. Creyó reconocer una voz, una voz amiga, no, quizás no tan amiga pero hasta ese aire despectivo se le hizo cálido.

-Padre, gracias...

Musitó antes de que su cuerpo se viera envuelto en un nuevo temblor que no podía controlar. No estaba segura de salir avanti de aquello pero si lo conseguía, seguramente vería la vida de otra manera o quizás no, al final de cuentas un pirata siempre es un pirata. Le habría gustado apartarse de los fuertes brazos que la sostenían y decir que estaba bien, soltar alguna ironía para Elenna pero era inútil, su cuerpo le había respondido lo suficiente y ya no podía.

Cerró los ojos imaginando un mar calmo, el mar que ella conoció de mano de su padre y al que nunca tuvo miedo aunque si mucho respeto; el mismo mar que le había arrebatado al único hombre de su vida, el único que la había amado de verdad porque del capitán, era mejor ni pensarlo. El aire le traía los olores de un barco, el primero que piso en su tierna infancia, las palabras de su padre gritando órdenes y caminando de proa a popa enseñándole cosas a su pequeño marinero. Quizás incluso se le dibujaría una sonrisa en ese momento a aquel cuerpo que parecía un fantasma tembloroso.

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22/05/2012, 19:56
Director

Algunos marineros miraban a Cyryatan con recelo, e incluso desprecio. Mas su semblante era insoslayable, y terrible, ahora que la lluvia cruzaba su pelo por la cara y los relámpagos zigzageaban tras sus espaldas. Y todos acaban volviendo a sus tareas cotidianas. O no tan cotidianas, como ahora. Pero nadie les impedía pensar. Ya veremos si mantiene ese carácter cuando chorree su sangre sobre la cubierta, o se lo trague una ola. O si no contara con ese viejo agorero, Kreontas. O con Azrûbel, que lo desprecia tanto como nosotros pero que lo sirve y lo respeta como a un amigo. Como si alguien como el capitán pudiera tener amigos...

Cyryatan a veces creía oír esos pensamientos. Sus pensamientos [de la marinería ^^], como prolongados y siseantes cuchicheos a sus espaldas. Hasta podía sentir cómo lo despreciaban. Mas sólo eran sus perturbados delirios e insanas elucubraciones, y sólo Eru sabía cuán cerca estaban de la realidad. El capitán, debido a su azarosa vida, y sobre todo a este último periplo, sabía que cada vez contaba con menos cordura. ¡Ah, valiosa cordura! Pero también sabía que la mayor parte de la marinería lo admiraba o lo temía. Y más en momentos como estos. Lo tenían por afortunado y temerario unos, por valiente y avezado otros. Amores y odios a partes iguales. Igual le pasaba con las féminas del barco, pues así era Cyryatan, para bien o para mal. Y al menos hasta ahora había tenido suerte. Aunque las cosas nunca habían pintado tan feas...

 

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23/05/2012, 20:31
corsarios

Yazân deja a una Elhediel aterida de frío en manos del galeno, que se acerca a la muchacha pidiendo caldo caliente y mantas.

-Rápido, Elenna, quítale la ropa y envuélvela en estas mantas-espeta casi por instinto a la cómitre, poniendo mostaza en las narices de esta, que apenas se da por aludida ante el mandato. Por fin, razona que nadie mejor que una mujer para desnudar a otra mujer, y de mala gana mueve el culo. Un grumete que ayuda a Rûmus, trae presto unas mantas -que permanecían calientes en un brasero puesto a tal efecto- y se las ofrece a Elenna.

-Y cuidado con su ritmo cardíaco, no queremos que pierda el conocimiento-apostilla el galeno cuando ve que la cómitre se mueve por fin. Tras lo que suspira aliviado. Sin la tensión del momento, jamás se hubiera atrevido a hablar así a la cómitre. Elenna lo sabe, pero odia comprobar cómo  todos parecen transformarse cuando es el culito de la pelirroja el que peligra. Cuando ella -pese a ser más hosca-, es mil veces más mujer y más valiosa.

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23/05/2012, 22:46
Yazân

Avisadme cuando este mejor, ahora la dejo en sus manos.- Le dijo al galeno.

Le hubiera gustado quedarse, pero esto no era precisamante la hora de descanso, había mucho por hacer y si bien la situación había reducido el nivel de stress de los hombres, la cosa pronto volvería a recrudecerse.

salió del camarote sintiendo más que nunca la presencia del barco bajo sus pies, el mismo se movía, bamboleandose a un lado y a otro, recordandole donde estaba y los frágiles que eran los hombres frente a los elementos..

Yazân subió ls estrechas escaleras de madera hasta llegar a cubierta, una vez allí se acercó hasta el capitán.

Señor debemos hablar, en privado de poder ser

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23/05/2012, 23:15
Capitán Cyryatan

Cyryatan recibió al salvador de Elhediel sin demasiado entusiasmo, concentrado al parecer en algo que escapaba a la percepción de cualquiera que lo acompañaba entonces en el puente de mando. Ni siquiera giró su rostro al oír la voz del leal Yazân, limitándose simplemente a responder con cierta demora y algo de misticismo.

- No hay intimidad en el ojo de la tormenta, teniente. Pero hable raudo, el viento y la marea se encargarán de enmascarar sus palabras de oídos impertinentes.

El taciturno corsario se llevó entonces una mano a la cabeza para echar hacia atrás su azabache cabellera, detalle que mejoró notablemente su desaliñado aspecto. Sus inquietantes ojos también agradecieron aquel simple gesto.

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24/05/2012, 00:09
Elenna

Sería posible que tuviera que tocarle a ella cuidar a la cría. Empezó a desnudar a Elhediel. No con demasiado cuidado, todo sea dicho, pero nunca nadie había considerado a Elenna como alguien demasiado delicada, y las labores de enfermera no eran algo con lo que fuese especialmente hábil. En todo caso, la pelirroja quedó sin ropa, que era se lo que se trataba, y sin ninguna contusión más que añadir a la lista, y la comitre empezó a frotarle los miembros para hacerle recuperar la circulación y el calor.

-Despierta, pelirroja, no me vayas a decir que te vas a ir a reunirte con tu padre sólo con eso

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24/05/2012, 00:32
Director

Notas de juego

ja, ja, Elhediel no sé si entrará en calor, pero lo que es el resto del camarote se ha puesto a 1000! xDD

PD: sí, sí, Elhediel no está tan grave. No va a morir por mal que lo hagáis. Pero aún así es recomendable que tratéis su hipotermia, que además, la pobre ha pasado un mal trago (y nunca mejor dicho ^^).

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25/05/2012, 17:35
Yazân

Capitán es algo personal. Necesito hablar con usted en privado -Yazân Se hizo oir por encima del sonido del viento 

Notas de juego

Yazân después de hablar con el capitán ira a ver a Elhediel y la calentará :-p

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25/05/2012, 20:11
Director

Notas de juego

Capitán es algo personal. Necesito hablar con usted en privado -Yazân Se hizo oir por encima del sonido del viento

Si dejáis el puente de mando en un momento como este, os mando ahorcar. y lo digo en serio. bueno, ya tendría que ser IMPORTANTE. además, de sobra sabéis que en un barco no hay secretos, y como dice Cyryatan, con el ruido reinante no se oiría hablar de ninguna manera.

Y bueno, si habláis, que sea rápido, que tengo que continuar....

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25/05/2012, 21:05
Capitán Cyryatan

El capitán corsario no estaba de humor para confidencias, tampoco le hacia mucha gracia que sus subornados le sugirieran siquiera las más leves condiciones a la hora de comunicar o hacer algo por él. El joven Yazán había tenido su oportunidad de hablar, pero por desgracia la paciencia de Cyryatan ya se había desvanecido por completo.

- Regrese a su puesto, teniente. ¿O acaso preferiría compartir sus misterios con el Gran Mar?

Los ojos del cabecilla númenóreano miraron de soslayo al oficial haradan amenazantes y con cierto desprecio. El afamado marinero no creyó necesario hacer mayor énfasis en su advertencia. Allí donde se encontraba parado era poco menos que un dios. Si su autoridad era cuestionada con impertinencia, no habría piedad para nadie.

Notas de juego

Tranquilo, master. Con eso de mandarnos a ahorcar no nos ayuda mucho xD.

Seguramente Yazân comprenderá la situación y esperará a un mejor momento para hablar.

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25/05/2012, 21:45
Elenna

La muchacha seguía pálida como un cadaver y no dejó de tiritar incluso envuelta en las mantas, y descansando tan seca y confortable como se podía estar en un barco en medio de una tormenta, aunque había que reconocer que eso no era mucho. Algunos intentaron robar algún atisbo del cuerpo de la muchacha mientras fingían preocuparse por alguno de sus compañeros heridos. Y algunos de los que estaban heridos de verdad también. Estaba visto que hacía tiempo que no pasaban por puerto, pero al menos eso demostraba que tampoco había que preocuparse demasiado por su salud. Así que después de que mandase a algunos a por más mantas, y a otros a revisar que el barco aguantase sin brechas y a asegurar todo aquello que estuviese suelto y que pudiese causar problemas con el movimiento, los demás parecieron parecer bastante interés en el asunto, probablemente sin demasiadas ganas de que les cayese alguna nueva tarea. Al menos así pudo dedicarse con tranquilidad a intentar revivirla un poco bajo lo que había decidido considerar que eran indicaciones, y no órdenes de Rûmus.

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26/05/2012, 12:28
Director

Elenna seguía las indicaciones del galeno, un tipo nervioso, cetrino, que mantenía el tipo más de lo que hubiera pensado para una situación así. Así, una vez que se Elhediel se había comenzado a calentar, le empezó a mover las extremidades. Y cuando la corsaria dio señales de recuperación, se tomó el caldo caliente que la cómitre le ofrecía. Desde luego, no eran los sortilegios de Kreontas, que actúan de inmediato, pero era lo único que había.

Notas de juego

En cuanto a los marineros, tiradme suerte (1D20). Con un 1 tratarán de violaros y con un 20 ni siquiera os mirarán por respeto; 2-5 tendrán tentaciones de tomaros por la fuerza, mas no lo harán. Y de 6-19 pues eso, pese al miedo y a la situación estarán más brutos que un dragón del Brezal Marchito en la época de apareamiento.