El Capitán llega por la mañana acompañado de sus marineros.
Terminan de cargar la carga que traen los estibadores portuarios y comienzan a prepararlo todo para zarpar.
- "Buenos días." - Dice el Capitán, mirando a Varnias: - "¿Están listos para zarpar?" -
Vladymir, acostumbrado a las campañas de la Guardia, ya se encontraba despierto para cuando el capitán y sus hombres llegaron. El día anterior ya había dado a Intius los 50 tronos, quedándose con el resto de lo que había en su cuenta, pues no sabía cuanto necesitarían. Asintió al capitán.
-Cuanto antes mejor, seguro que mis compañeros están de acuerdo.
La noche había transcurrido tranquila y habían custodiado el barco con éxito. A la llegada del Capitán y sus hombres Intius se acercó y le saludó.
-Buenos días Capitán. Como ve hemos mantenido su barco a salvo. Echó una mano al bolsillo y sacó los 150 tronos que faltaban del pago. Aquí tiene el resto del dinero, así que todo está listo por nuestra parte, puede zarpar cuando quiera.
Dicho esto volvió al lugar donde había pasado la noche con sus compañeros y esperó que el viaje no resultara demasiado agitado, aunque viendo el aspecto del mar parecía que lo sería.
Itsua permaneció en su habitual mutismo ante la redundante pregunta del dueño del barco y de sus 300 tronos. Estaban listos desde la víspera, como cualquiera medianamente despierto mentalmente hubiera deducido. Pero no era inteligencia lo que reclamaba de aquel individuo sino pericia y competencia. Aun así, miró a los marineros y a la carga que traían. La embarcación se dirigía a una zona asediada. No era difícil comprender que el material transportado y que creía recordar se trataba de pescado en salazón, podría reportar buenos beneficios a costa de elevados precios, algo en lo cual se había revelado como un verdadero artista. Pero si, además, los alimentos servían de tapadera para alguna forma de contrabando aún más provechoso constituía un pequeño enigma.
-Tercio, ¿crees que tan solo es comida? -dijo en un susurro y con un leve cabeceo hacia la carga.
- "De acuerdo pues, pónganse cómodos. Zarpamos de inmediato." -
El Capitán recoge el dinero y lo lleva a su camarote, después ocupa su puesto y da orden de soltar amarras.
La travesía a tierra firme dura unas seis horas, durante las que no se puede hacer mucho más que alternar entre agacharse o erguirse en abarrotadas cubiertas o lóibregas bodega de carga junto a varias docenas de otros pasajeros.
El mar, que al comienzo del día estaba calmo, acaba estando bastante agitado y la embarcación se zarandea alarmantemente de un lado para otro durante la travesía.
TIRADA:
- Resistencia +20, para evitar marearse y vomitar.
292.810M41.
HORA LOCAL: PASADO EL MEDIODIA.
Motivo: Resistencia +20
Tirada: 1d100
Dificultad: 52-
Resultado: 46 (Exito)
- Tercio se siente algo mareado y en un momento dado se pone levemente pálido, pero mantiene bastante bien la compostura y logra no vomitar.
Tirada oculta
Motivo: Resistencia
Tirada: 1d100
Dificultad: 62-
Resultado: 64 (Fracaso)
- Vladymir, que no está acostumbrado a los viajes por alta mar, se pone primero pálido y luego verde y termina vomitando por la borda hasta la primera papilla.
Tirada oculta
Motivo: Resistencia
Tirada: 1d100
Dificultad: 61-
Resultado: 4 (Exito)
- Intius está demasiado concentrado pensando en la misión como para concederse ni tan sólo un segundo en perder el tiempo mareándose. Se siente como una rosa y los vaivenes de la barcaza no le afectan en lo más mínimo.
Motivo: Mareo
Tirada: 1d100
Dificultad: 55-
Resultado: 27 (Exito)
- Itsua Cadian ni se inmuta por el movimiento del barco, él ha vislumbrado a la Disformidad, que es mucho peor que cualquier mar embravecido.
Motivo: Resistencia +20
Tirada: 1d100
Dificultad: 52-
Resultado: 97 (Fracaso)
Cuac!!
- Titus ha montado su rifle de francotirador, es en esencia un rifle de caza mayor con mira telescópica y silenciador, sin duda una buena arma.
- Durante el viaje se junta con Vladymir y parece que compite con él a ver quien es capaz de vomitar más por la borda...
Tirada oculta
Motivo: Tirada de REsistencia +20.
Tirada: 1d100
Dificultad: 55-
Resultado: 10 (Exito)
Ahora mismo posteo. Si acierto supongo que estoy tan preocupado por las pastillas que ni pienso en el mareo y si fallo puede considerarse que la preocupación por si tengo o no suficientes pastillas me ha afectado el estómago y no hago más que vomitar.
Cuando Arlan le preguntó si tenía pastillas suficientes no supo qué responderle. Tenía muchas todavía, cosa que comprobó contándolas una a una varias veces desde que fue formulada la maldita pregunta; pero eso no significaba que fueran suficientes para el lugar al que iban. Por ello estando de guardia no paró de pensar en cómo aquellos que no tomaron las pastillas estaban muertos, pensamiento que se prolongó durante sus escasas horas de sueño y en el que siguió pensando durante todo el viaje.
Durante ese tiempo no fueron pocas las ocasiones en las que la preocupación hizo que cogiese una pastilla para llevársela a la boca y esa misma preocupación le obligó a quedarse a medio camino al caer en la cuenta de que cada pastilla que se tomase era una pastilla menos.
- Xerxes no para de palparse el bolsillo del abrigo donde guarda su caja de pastillas, intranquilo.
- Ni siquiera parece darse mucha cuenta de que está viajando a bordo de un barco que navega dando tumbos por alta mar en medio de un mar embravecido y agitado.