3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
05:00 Hrs.
Mientras lo Lores de la ciudad se reunían en la isla flotante del Concejo, en la ciudad las cosa iban de mal en peor, tanto así que los problemas se extendían incluso a la villa de Tooj-Reh, donde un numeroso ejercito de Hombres-Lagarto se acercaba dispuestos a tomar por las armas la pequeña comunidad, cuya única esperanza es que un par de solitarios aventureros logren convencer a la incrédula guardia del peligro que les acecha.
Mientras tanto en el templo de Noremac el numeroso grupo de guardias de la ciudad que resguarda la entrada parece haber perdido el impetú para luchar y se limita a deambular por su derruido interior dejando abandonada la búsqueda que ellos mismos se habían impuesto. En tanto, en las profundidades del templo los aventureros descubrían escondido un templo a Dremoth, el cual no parece ser parte de la antigua ciudad, sino por el contrario, una construcción relativamente nueva.
Al mismo tiempo en las afueras de la ciudad lo que fuera un numeroso grupo de aventureros a visto reducido su numero a apenas dos valientes, los cuales se han topado con algo mucho mas grande de lo esperado al intentar rescatar al hijo de un noble, convirtiendo la misión de rescate en un pequeño golpe de suerte que les podía volver ricos... Si lograban salir de allí con vida...
Cerca de allí, en las ruinas de uno de los templos de la arcaica civilización de dragones que habitaba la ciudad, un grupo de aventureros y guardias de la ciudad se enfrentan a una de las pruebas mas difíciles dejada por la desaparecida civilización, un juego que servía tanto para entretener como para resguardar uno de sus mas preciados tesoros, el "Grimorio de la Magia", guarida actualmente de una de las sociedades secretas mas poderosas de la ciudad...
3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
06:00 Hrs.
El amanecer se perfila sobre la mágica oscuridad que cubre la ciudad y la situación en la ciudad se acercaba a su punto culminante, los aventureros internados en el Templo de Noremac han dado por fin con el paradero de la sacerdotisa quien al parecer se encuentra atrapada en las catacumbas del templo, donde también han descubierto un templo secreto dedicado a adorar a Dremoth. Mientras tanto los aventureros que se han adentrado en las ruinas del Templo de los Dragones pronto descubrirán que ha sido fácil entrar pero que quizá no sea tan fácil salir, sin embargo dentro de aquel lugar descansa un secreto capaz de salvar a la urbe de su destrucción.
3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
07:00 Hrs.
La tormenta mengua con la llegada de un nuevo día y se convierte en apenas una pequeña llovizna, la ciudad permanece a oscuras pero al menos los terribles truenos han desaparecido, la población comienza a asomarse al exterior de tanto en tanto e incluso algunos comercios comienzan a funcionar nuevamente, la situación parece volver a una tensa normalidad, sin embargo con la partida de la tormenta los ejercitos de no muertos retoman las calles, ante el rechazo de la población, sin embargo...
Súbitamente el cielo se estremece ante un nuevo tronido, por un instante parece que la tormenta regresará sin embargo no es así, por el contrario, las negras nubes que llenaban de oscuridad la ciudad se arremolinan en un hipnótico torbellino que las succiona lenta pero inexorablemente, dejando entrar los brillantes y cálidos rayos del sol, los cuales en poco tiempo dominarán nuevamente sobre la ciudad...
3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
08:00 Hrs.
Los jóvenes rayos de luz del amanecer, en su máximo esplendor, dominan la ciudad abrazando con su luz los inmortales cuerpos del ejercito de no-muertos, durante los primeros minutos de la sorpresiva aparición de la luz del día el desconcierto fue mayúsculo entre el ejercito, los oficiales, en su mayoría vampiros, se consumían hasta desaparecer en la nada, en medio de sus propios gritos de agonía.
La traición era evidente, seguramente el Archimago Veoden había temido que el poder de Lord Drerker creciera demasiado y ahora le daba la espalda destruyendo a sus sirvientes, eso era al menos lo que pensaba el propio generalísimo del ejercito de no muertos, la otra alternativa era tan inverosímil que rayaba en lo ridículo, la única que podía retirar aquellas nubes, además del Archimago, era Zaramir, la Sacerdotiza de Noremac, la cual si bien estaba en contra de Lord Drerker, había jurado a su padre, Sir Vargesh el puro, ayudar en la creación de la tormentosa nube oscura que protegería a los vampiros a su arribo a Neihblam.
3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
09:00 Hrs.
Aquello de que la tormenta precede a la calma parece ser una realidad para Neihblaum, súbitamente la ciudad se había desecho de aquella horrible nube que mantenía la ciudad en tinieblas y del ejercito de no-muertos que amenazaba con ser capaz de tomar la ciudad. El sol se alza majestuoso en el horizonte y los habitantes se entretienen en recoger las cenizas en que se han convertido los vampiros que comandaban el ejercito de no-muertos, algunos hablan de que incluso Lord Drerker ha perecido y el rumor de inmediato cobra fuerza e inunda las calles.
Pese a todo quienes tienen la oportunidad de encontrarse a Sir Vargesh y Vander Saint, les observan terriblemente preocupados, es evidente que aquello no estaba planeado y que ninguno de los dos Lores de la ciudad saben que es lo que sucede. Ambos ordenan a sus subordinados ayudar al ejercito de no-muertos, es evidente que temen que ante la perdida de sus lideres las salvajes y malévolas criaturas que integran la armada se olviden de que están allí para proteger la ciudad.
3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
10:00 Hrs.
El caos en la ciudad era total, los no-muertos, libres del control ejercido por los vampiros, se abalanzaban sobre todo aquello que tuviese vida, la guardia de la ciudad era insuficiente para controlar aquel gran ejercito desbocado e incluso la ayuda de los aventureros apostados en la ciudad resultaba inútil. Muchos habían muerto ya en medio del caos y la destrucción provocados por el ejercito que se suponía debía proteger la ciudad, en las calles se podían observar centenares de cuerpos de todas las razas, edades y géneros, todos mutilados salvajemente, la mayoría por los no-muertos, muchos asesinados por otras razones...
Hasta la guardia llegan las terribles noticias, Skurtgel- El Barbaro, Capitán de la Guardia había caído en combate, dejando la guarnición sumergida en el caos y el descontrol, apenas algunos tenientes de renombre se esforzaban en retomar el control de la situación, sin embargo sus esfuerzos eran cual pequeños guijarros para el mar.
Los Lores de la ciudad Sir Vargesh, Lord Drerker e incluso Vandeir Saint, brillaban por su ausencia, lo que solo contribuía a acrecentar el terror que se propagaba por la ciudad, si sus Señores habían huido ya, ¿Que podían esperar aquellos que estaban bajo su manto protector?...
Pero aquello no era todo, Zaramir, la poderosa y amada sacerdotisa de Noremac se presumía muerta, los rumores de un nuevo ataque al templo de Noremac habían corrido como pólvora por la ciudad, su perdida estremecía a la población mas que ninguna otra, ella sola representaba la esperanza y bondad de un bien superior.
A las perdidas había que sumar la de el Poderoso Voluntad Indomable, líder de los centauros del Bosque de las Brumas, poco se sabia de su muerte, pero los rumores llevados por algunos centauros llegados a la ciudad, hablaban de un intenso combate librado entre su tribu y los hombres lagartos que dominaban sobre el Bosque Negro al noroeste de la ciudad, con un final contrario a los valientes centauros.
Con ellos habían caído muchos mas, algunos en valientes combates, otros en tontas rencillas, muchos en grandes empresas, algunos pocos en problemas egoístas, los muertos se contaban por miles, aventureros novatos y experimentados se confundían por igual en las pilas de cadáveres que comenzaban a formarse en todas las calles de la ciudad, la muerte se apoderaba rápidamente de Neihblam, la muerte y algo aún mas temido... EL CAOS...
Bueno, esperemos que el ultimo gran corte ayude a agilizar nuevamente la partida, claro, y que sea el ultimo "gran corte". La partida alcanza su clímax y es importante que todos sigamos el mismo ritmo para no detener los acontecimientos, esperemos que todos tengan su parte de diversión y que no terminen muertos en algun oscuro calabozo sin que nadie conozca sus hazañas. XD
3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
11:00 Hrs.
El tiempo pasaba inexorable y la situación en la ciudad no mejoraba en lo mas mínimo, al contrario, el caos en que se había sumergido la ciudad amenazaba con terminar con la gran metrópoli, si aquello seguía por aquel rumbo la ciudad terminaría reducida a ruinas. Los asustados ciudadanos no podían controlar todo aquello, ni aún los mas experimentados aventureros tenían asegurado salir con vida de la ciudad, lo peor era que los lideres no aparecían por ningún lado, incluso Kregcog, la líder del la Daga de Morfeo, había desaparecido.
para colmo de males los ciudadanos que tenian el valor para encontrarse en las calles y aquellos aventureros y guardias que intentaban detener el caos de la ciudad, observaron atónitos como a la distancia se formaba un haz de luz que poco a poco aumentaba de tamaño e intensidad, el fenómeno se registraba a varios kilómetros de la ciudad, sin embargo no podía significar nada bueno, la intensidad del haz de luz era tan fuerte que incluso a esa distancia era necesario cubrirse los ojos para no lastimaros, segundos después el rayo desapareció, pero en su lugar surgió una enorme columna de humo que delataba que el Bosque de las Brumas o al menos un lugar cercano a él, se encontraba en llamas.
Incluso los dioses, usualmente reacios a participar directamente de las acciones del plano material por otro medio que por sus clérigos, comenzaban a tomar acción ante el terrible mal que se cernía sobre la metrópoli, ideologías usualmente encontradas en constante batalla, ahora se unian para combatir a un enemigo comun, ninguno quería que se repitiera algo como lo acontecido durante la Guerra de los Planos, sin embargo, como aquella vez, el cause de la historia descansaba en los habitantes del plano material y no en las suyas....
Cita:
12:00 Hrs.
En las profundidades del templo que se escondía debajo de la viaja Abadía, un pequeño grupo de aventureros encontró el fin de su historia, apenas el pequeño goblin había logrado escapar con vida y ciertamente no por suerte, ya que en su huida se había encontrado con la mala fortuna de aparecer ante un grupo de guardias de la ciudad y el desmembrado cuerpo de una dulce doncella, aquello había sido un brutal homicidio y al parecer los guardias pretendían que el pequeño pagara, lo dicho, mala suerte...
El hábil y escurridizo mago del Gato Domado se había encontrado con un asunto que definitivamente no entraba en sus planes, aquel pequeño problema se había convertido en un verdadero dolor de cabeza, sobre todo, por que no había forma de solucionarlo, definitivamente en la ciudad se tejían historias que quizá poco tenían que ver con el caos desatado en la urbe, pero cuyas consecuencias terminarían por tener un impacto mas allá del esperado para los involucrados.
Por su parte aquellos que seguían la pista de los asalta tumbas, apenas y habían podido flanquear el primer obstáculo de aquel terrible lugar, lo que fuese que se escondía en aquella mazmorra tenia que ser muy importante en vista de los terribles peligros con que había sido protegida, las vidas de dos de sus compañeros habían sido perdidas sin que el grupo hubiese encontrado nada aún que pudiese valer tanto como aquellos dos valientes.
Mientras tanto el joven Argust IV había caído victima de los terribles peligros que asolaban la ciudad, joven como era no había sido capaz de defenderse de los no-muertos, quienes destruían todo a su paso. Los truhanes de la ciudad habían aprovechado al situación para hacer de las suyas y varios tenientes de la guardia habían caído investigando el Mercado Negro, siguiendo la pista de algunos tratantes de esclavos que parecían involucrados en los acontecimientos recientes, ciertamente las muertes eran muchas, Dreklin Hardstone, hermano por juramento del teniente Freins, había muerto también defendiendo la ciudad.
Mientras tanto, en el templo de Noremac, un grupo de los mas poderosos aventureros de la ciudad había descubierto el oscuro secreto que se ocultaba tras la desaparición de la oscura protección que cubría a la ciudad, sin embargo a costa de la vida de una de sus compañeras.
3 de Acinorev del año de las Mulas Tercas
13:00 Hrs.
En las calles de la ciudad los muertos vivientes detenían súbitamente sus ataques sin control y comenzaban a reunirse en torno del centro de la ciudad como si un poder ineludible les obligase a ello. Lentamente las criaturas iban abandonando las calles de la periferia destruyendo aún así todo cuanto podían a su paso, el terror dominaba las calles y ya ni siquiera los mal vivientes se atrevían a salir, tan solo los curtidos aventureros tenían las agallas y el poder para continuar deambulando por la ciudad. Mientras tanto los lideres de la ciudad seguían sin dar señales de vida y no pocos se temían lo peor, sobre todo ahora que el ejercito de muertos vivientes se reagrupaba bajo las ordenes de un desconocido amo...