Partida Rol por web

Ese sueño, al principio fue un sueño mas, un sueño en cierta forma raro pero nada más, nunca le diste mucha importancia a ese sueño, a fin de cuentas ni tú mismo lo entendías, pero ya hacía dos semanas que se repetía todas las noches, el mismo sueño, nunca habías hablado con nadie de ese sueño y no sabias si significaba algo. Los primeros días te llamo la atención, pero según fueron pasando los días fuiste buscando alguna solución, tal vez pastillas para dormir, tal vez acostarte pensando en mil cosa, al principio parecía funcionar, pero siempre a mitad de la noche tenias el mismo sueño, un sueño que te inquietaba, que te hacía sentir extraño, pero siempre el mismo

Un espacio vacío, un lugar totalmente blanco en donde no hay nada ni nadie, se escucha como unas puertas se abren y por ellas penetra una gran cantidad de luz, las puertas se abren poco a poco cuando una figura aparece, se trata de una persona pero a la que no se le pueden distinguir los rostros, esta persona abre lentamente las dos puertas por las que entra cada vez mas y mas luz lo que hace que no se le pueda ver más que su contorno, la persona camina con tranquilidad hasta que una gran cantidad de luz ciega al soñador

Una vez la intensidad de la luz desciende puede verse un perro bastante grande sentado, el animal parece tranquilo mientras está siendo acariciado con delicadeza y tranquilidad por una persona, no se llega a ver demasiado de la persona, pero se ve que tiene la piel muy pálida y unas manos pequeñas y con las uñas pintadas, además de un adorno con forma de mariposa en una de sus uñas, el animal lleva un collar de varios colores mientras que la persona que le acaricia pausadamente parce vestir ropas rojas y claras. Parece que ambos están sentados en unas escaleras.

El animal se pone de pie y puede verse en toda su extensión, además del lugar en el que se encuentran, unas escaleras destacan al fondo, además de unas oscuras escaleras mecánicas en un lugar realmente solitario y de colores fríos pero donde la luz del sol se refleja tanto en el suelo como en sus paredes, sin embargo, la persona que momentos antes estaba acariciando al animal ahora no está. El animal comienza a caminar para terminar corriendo hacia las escaleras y subirla a grandes zancadas, cuando desaparece una nueva escena parece que se desarrolla

Varias personas de pie rodean a una chica que está sentada en el suelo, en total son 8 personas siendo cada uno de ellos uno de los soñadores*, todos observan a la chica que esta cabizbaja y no pueden verle el rostro, en un cierto momento parece que la chica les mira, pero ninguno de ellos es capaz de verle la cara, como si su propio cabello le tapase la cara para que no puedan verlo. Es entonces cuando una de las personas que la rodean se acerca a la chica.

Esta persona, uno de los soñadores, pero que no saben realmente quien es ofrece su mano a la chica, la cual al principio desconfía, pero finalmente agarra la mano, en ese momento aparece un arma en la mano del soñador que la clava en el cuerpo de la chica que en esos momentos se estaba levantando, la chica da un paso para atrás y el agresor se aleja, así uno tras otro los soñadores se acercan a la chica que está en el suelo sangrando y le clavan un arma cada uno diferente, un sable, una katana, un puñal, una cimitarra, una alabarda, una lanza, un hacha y un florete.

Con cada puñalada podían sentir el dolor de la chica la cual parecía que decía algo y lloraba pero no eran capaces de escucharla solo podían ver sus caras con una sonrisa de satisfacción, es entonces cuando el cuerpo de la chica empieza a temblar hasta que ven como desciende en la oscuridad como si hubiera sido lanzada a lo más profundo del océano, en ese instante despiertan, pero lo más extraño es que todas las noches despiertan con una cicatriz como si hubieran recibido una puñalada en el lugar donde apuñalaron a la chica en el sueño

Me desperté de golpe y miré mi hombro derecho. Ahí estaba de nuevo. Ese hombro tenía una gran cicatriz por la operación, pero ahora tenía una nueva cicatriz que lo surcaba en perpendicular a ella. Seguía ahí, y esa no era una cicatriz que tuviera por el accidente, esas las conocía bien. No lo entendía bien, pero no era momento de eso. Demasiadas cosas sin sentido, demasiadas preguntas sin respuesta para ser tan pronto a la mañana.

Me duché, me preparé y me hice algo rapido para desayunar: unas tostadas con mermelada de fresa y un café serían suficientes. Cogió el obento preparado que había comprado el día anterior en el supermercado y se preparó para salir de casa dirección al colegio. Cogió el móvil y la cartera junto a los papeles y salió de casa para el colegio.

 Noto como la afilada hoja de la katana atraviesa mi cuerpo, como el dolor se expande por mi adbomen. Me despierto sobresaltado y me miro. Aún puedo ver parte de la hoja del arma clavada en mi. Asustado, grito. Grito con fuerza y el dolor desaparece, junto al metal que estaba incrustado en mi cuerpo, dejando nuevamente la cicatriz del lugar exacto donde clavé mi arma en el cuerpo de aquella mujer.

Aun sudoroso por aquel sueño, o pesadilla, me fuí a la ducha. No quise darle más importancia que la que realmente parecía tener, salvo por la cicatriz... nunca me corté en ese lugar, ni me operaron... y al poco de iniciar esta locura de sueño, me percaté de que estaba ahí. Miré la hora. Aún tenía tiempo de sobra para desayunar ligero e ir a la clase de yoga y meditación, la cual iniciaba hoy. Fue la alternativa que me dió mi hermano Miguel frente al consumo de pastillas para dormir. Ya sabía lo que era una adicción, no quería repetir, y menos aún ahora.

Salí de la ducha y me puse un chandal con unas deportivas, me tomé un café y salí a correr dirección al gimnasio. En una pequeña mochilita llevaba todo lo que necesitaba para la clase y además, regresaría corriendo a casa antes de ir a trabajar. Así que no necesitaba ir cargado.

La clase no estuvo mal, fué bastante didactica y entretenida... salvo cuando el monitor de yoga nos hizo relajarnos, cerrar los ojos y respirar lentamente... El sueño repetitivo regresó a mi cabeza, esta vez como si fuesen flashes. Mi mano sostenía el arma y atravesaba a aquella mujer, sintiendo su dolor a la par que placer. Luego, me venían las ímagenes del resto de acompañantes de aquel círculo, sonrientes, disfrutando de aquella locura..

Otra vez ese sueño, y sin poderlo evitar, la chica se sujetaba el hombro drecho, justo entre el hombro y la clavícula. Se estiraba en la cama con pereza y se acurrucaba acto seguido como si fuera un ovillo, pensando el motivo por el que tenía ese cruel sueño. Se incorporaba lenta sobre sus antebrazos, asomando los pies por el límite de la cama y sabiendo que no serviría de nada intentar dormir de nuevo, se sentaba. A veces creyendo que tenía suerte por su costumbre de estudiar mucho y dormir poco, se levantaba con calma, sabiendo que de no ser por eso parecería un zombie el resto del día.

Dirigiéndose al baño, se miró en el espejo, y tal como suponía, entre la clavícula y el hombro izquierdo le adornaba una pequeña cicatriz. Como si la herida de aquella persona se reflejara en si misma. Parecía tan absurdo que se negaba a aceptarlo, incluso había buscado el origen de aquello pero solo se le ocurría que pudiera ser algún tipo de autosugestión.

Sentía mientras se duchaba y acariciaba la cicatriz que desearía poder ayudar a esa persona, pero entonces, ¿por que su sueño la hería? ¿Valía la pena desear ayudar a alguien a quien ni podía tocar? Un sueño era tan solo un cúmulo de neuronas reorganizando ideas, y todo tenía una explicación, pero no le molestaría entender el motivo de un sueño tan recurrente. Ningún paciente había sufrido daño alguno por su parte, y las prácticas medicas eran escasas; tampoco había operado todavía a nadie como para sentir algún remordimiento o culpa, pero, entonces,...

Se preparaba para otro día de universidad, y mientras acababa de vestirse inclinaba el cuello para besar la cicatriz antes de taparla, una curiosa costumbre que buscaba una sanación pronta y rápida, un "sana sanita culito de rana, si no sanas hoy sanarás mañana" quizás algo infantil, que le permitía sonreír mientras salía por la puerta de su casa.

Llamada fugaz por el móvil mientras salía, para informar a una compañera que le esperaba en la cafetería de la universidad antes de que las clases empezaran, para dejarle constatar los apuntes de las clases del día anterior, para asegurar que ninguna d las dos se había dormido en los laureles mientras tomaban apuntes, y útil recordatorio para reafirmar los conocimientos expuestos.

Aspira con fuerza una bocanada de aire mientras se semi-incorpora en la cama con rapidez. Aún dolorida, lleva la mano a la nuca donde roza con sus dedos la cicatriz alargada que allí se encuentra.

Suspira mientras retira la mano del cuello, antes de pasarse ambas por la cara y echarse el pelo hacia atrás, con gesto cansado. Un vistazo rápido al despertador que está en la mesita de noche le revela que son las 5 de la mañana. Aún quedan dos horas antes de que suene la alarma, pero sabe que tardará al menos una en conseguir volver a dormirse.

Titubea unos instantes mirando la cama antes de tomar la decisión de volver a tumbarse e intentar dormir. Pero su nerviosismo la lleva a no parar de dar vueltas sobre el colchón.

Las pesadillas no son una novedad en su vida, lleva tantos años durmiendo mal que lo extraño suele ser cuando no las tiene. Pero desde los 7 años nunca había tenido un sueño recurrente que la persiguiera tanto. Además, ¿cuándo ha podido hacerse una herida ahí? No tiene recuerdos de ningún golpe en esa zona. Sumida en sus pensamientos, ve pasar minuto tras minuto, incapaz de conciliar el sueño de nuevo.

Hastiada, gira el despertador para no seguir viendo pasar el tiempo. Al menos mañana no estará cansada, está acostumbrada a dormir poco y mal. Las peores pesadillas suele tenerlas fuera de los sueños.

Que oscuros y profundos son los despertares aquí, en Kaldbak. Un día tras otro la misma negrura del alba. Me encanta ducharme con agua caliente, me reconforta, hace que mi cuerpo permanezca en un estado de confort. Es una extensión de la placidez de la cama. Pero no me regodeo, el último minuto de ducha se convierte en una lluvia de cristales ya que abro el agua helada para que toda la sangre de mi cuerpo comience a circular a una buena velocidad y haga que mis sentidos se despierten.

Salgo de la ducha y con la palma de mi mano aparto el vaho del espejo. Y ahí la tengo, la misma cicatriz en el mismo sitio, en el centro de mi cuádriceps derecho. La observo detenidamente cada dia para comprobar si es la misma, y, efectivamente, lo es. El mismo sueño que se repite todos los días. Me inquieta, ciertamente. Me desasosiega el significado que puede tener. Nunca me he caracterizado por ser una persona supersticiosa pero en esta ocasión estoy empezando a preocuparme. Tengo una herida que esta provocada por un sueño, muy normal no es. Son ya 2 semanas seguidas, sin descanso, sin alardes. Es un mensaje? De quien? Que puede significar? Una advertencia? Premonicion?

Hace años que ya no intimamos Inga y yo. No sabria como explicarle esta cicatriz. Esta cicatriz que hace 2 semanas no tenia. Esta cicatriz que parece que lleva años conmigo. No sabria como explicarle de donde ha salido. Mejor asi ,creo yo. Inga, donde dejamos de mirarnos, en que parte del camino comenzamos a buscar destinos diferentes?

Remuevo el café con mi mano izquierda y miro como el liquido se mueve en un remolino. Habitualmente intento visualizar como sera cada nuevo dia pero desde hace una semana no puedo dejar de pensar en ese sueño que no para de repetirse. Tengo que hacer algo, he de saber que me esta pasando. Es real o estoy enfermando? Creo que esta tarde me pasare por la biblioteca municipal para ver si encuentro algun libro sobre el significado de los sueños o algo asi. Necesito informacion. Empezare por aqui.

Me despierto agitado, otra vez ese maldito sueño... no se si es el sindrome de abstinencia o que mierda es pero en mi pecho a la altura del corazón tengo esa molesta cicatriz.  Me visto rápidamente ya que no quiero que los medicos de este maldito lugar crea que me estoy autoinflingiendo heridas o algo similar... 

Otra vez ése maldito sueño... En ésta ocasión ni siquiera abrió los ojos. Simplemente palpó su costado izquierdo, bajo la última costilla para asegurarse de que la cicatriz seguía allí.

-Hoy ha sido un florete. Es la primera vez que he empuñado uno- pensaba mientras hacía memoria de los fatídicos últimos segundos del sueño.

Abrió los ojos y se sentó en la cama, mirando por la ventana de su habitación el sol naciente. -No sé que me preocupa más, si tener éste sueño macabro una y otra vez, o que cada vez me importe menos...- sonrió sin alegría. -Y lo más importante, ¿quienes son ésas personas que cada noche sueñan conmigo?-.

Se levantó de la cama y se desperezó. Ya lo pensaría después de una buena ducha.

Al despertarme sobresaltado sobre la sabana de la cama toda arremolinada, me recojo el cabello  hacia atrás pasando los dedos de mis manos suavemente por él para serenarme y recobrar  poco a poco el control...-Otra vez el mismo sueño, ya no sé que hacer para deshacerme de él. Ya esto pasa los límites de lo normal, incluso para alguien como yo.-

Me llevo la mano derecha hasta la zona delantera de mi cuerpo entre el hombro y la axila, para notar que permanece ahí lo que en un principio pensé que sería alguna picadura de  insecto pero que cada día me convenzo más de que no lo es, a no ser claro que el bicho tuviera por aguijón un sable ... -Esta especie de cicatriz me ha salido en el mismo lugar donde la chica del sueño es apuñalada una y otra vez- ... reflexiono, para luego darle un vistazo al reloj  de la pared a la derecha de la cama.

-A esta hora creo que ya no podré pegar el ojo, por lo que luego que me haya lavado la cara-... En un pequeño baño que se encuentra dentro del cuarto ...-debería sentarme en el ordenador personal  y  buscar información en el internet referente a sucesos o anécdotas de personas las cuales hayan tenido este tipo de sueños, además creo que hay algunos elementos del sueño que pudieran tener algún tipo de significado como en el caso de las puertas que se abren y dejan pasar una luz cegadora o el perro que me guía, en este caso hasta la chica que es apuñalada por varias personas, incluido yo, además creo muy interesante el símbolo de la mariposa en el anillo de la chica junto al perro.-

-Bueno veré que encuentro en la red de redes- me digo a mí mismo en voz baja, ya habían pasado dos semanas y era momento de dejar de ver este sueño como un sueño casual, en algún momento llegué a pensar que la silueta de la persona que aparece cuando las puertas se abren pudiera pertenecer a mi madre, aunque ya no recuerde mucho su contorno, pues pocas fotos quedan de ella en la casa.

La mañana empezó como todas, las calles estaban ya llenas de los alumnos más madrugadores que se dirigían hacia sus respectivas escuelas y algunos trabajadores, como siempre en la ciudad todo estaba muy animado y el día parecía que podría deparar realmente cualquier cosa, algo que a Takeshi le había enseñado su día a día que era cierto, nunca se sabía que podría pasar un minuto después. La puerta del colegio estaba abierta y algunos alumnos iban entrando, todos le saludaban con una inclinación de cabeza cuando entraban y le veían pasar, varios de sus compañeros también le saludaban, fue la profesora Atsuko, la encargada de la coordinación de los clubes deportivos que se acerco

- Buenos días Kamakura-sensei, me alegra verle temprano, me gustaría preguntarle sobre los chicos de su club, parece que se acercan los campeonatos regionales no?

La mujer era muy buena en su trabajo y tenía cierta confianza con Takehsi, si no fuera porque estaba saliendo con un sicólogo de un hospital cercano todos pensarían que quería algo con el ya que era bastante animada y cercana a él aunque siempre profesional sobretodo delante de los alumnos, aunque era la encargada de los deportes en el instituto, ella era profesora de literatura

Henry siente como alguien le agarra del brazo y siente un pequeño zarandeo que le saca del sueño que estaba teniendo de nuevo, cuando se da cuenta tiene delante suya al profesor de yoga que por su mirada estaba un poco extrañado, el resto de alumnos de la clase apenas 5 mas ya que eran clases para grupos reducidos además que eran las primeras clases de la mañana y esas siempre estaban medio vacías, le miraban un poco extrañado.

El monitor con un tono de voz algo preocupado habla:

- Henry, te encuentras bien? te has puesto pálido por unos momentos, parecía que habías tenido una bajada de azúcar o algo así, como si te hubieras... no sé, ido durante unos momentos, ha sido un poco raro... tal vez te vendría bien tomar algo con azucares, estas cansado o estresado por algún motivo?

Realmente el chico parecía extrañado y preocupado

Cuando Luna llego a la facultad se dirigió rápidamente a la cafetería, como siempre y donde había quedado con Eva, su compañera de clase, la cafetería estaba como siempre, con varios alumnos desayunando, pero la mayoría tenían cafés bastante cargados y cara de sueño, era todo un clásico en la universidad, un buen café cargado antes de las clases, algunos incluso estaban tomando Cola Cao pero al igual que el café muy cargado, sin duda preparando las baterías para las largas y en algunas ocasiones tediosas clases que les quedaban por delante. En una mesa un pequeño grupo de profesores del departamento de Cardio estaban hablando mientras animadamente tomaban sus desayunos, una de las limpiadoras llegaba con una bandeja con varios cafés mientras hablaba animadamente con el camarero contándole que hoy le había tocado a ella llevar los vasos sucios del desayuno de las limpiadoras, todos sabían que el cuarto  de estas era realmente su "cuartel" en donde tomaban café, desayunaban, e incluso hacían fiestas.

Eva estaba sentada y al ver a Luna le saluda con la mano, ella estaba tomando un café con leche y sacaría como siempre, además estaba terminando de comerse media tostada con mantequilla

- Buenos días Luna, que tal? ufff tía no veas las clases que nos esperan hoy... pero bueno, oye, por cierto, tienes mala cara te ha pasado algo?

Aileen no pudo descansar mucho mas, por fortuna no se hizo demasiada larga la espera y el despertador sonó indicándole que el día iba a comenzar, era lunes y era un día normal, un día rutinario, no tenía nada especial que hacer ese día al menos por la tarde. Podía ver como el sol calentaba lo justo para que fuera un día agradable, ante ella tenía todo un día para hacer lo que debía y lo que quería, un día tras el cual llegaría la noche y tal vez esa noche no tendría ese sueño o tal vez volvería a tenerlo, la chica realmente no lo sabia

Como prácticamente todas las mañanas esta empezaba tranquila, no había nada especialmente llamativo para el hombre, distraídamente observaba la televisión, las noticias mientras desayunaba, eran un poco las de siempre, política, el estado del tiempo, como el mundo poco a poco iba yéndose al garete, nada que llamase la atención del hombre, sin embargo, un anuncio sí que le llamo la atención, era una noticia en la sección del final de las noticias en donde siempre metían noticias menos importantes y algunas veces para rellenar.

-  Recientemente estudios de la universidad de Berlín ha revelado que existe la posibilidad de introducir mensajes en los sueños de las personas según estas investigaciones, es posible mediante la emisión de unas determinadas ondas que han de ser llevadas ante la persona que se encuentra en la fase Rem del sueño esta persona tenga un sueño sugestionado por esas ondas y en cierta medida poder hacer que alguien sueñe lo que otro desea... significara esto que dentro de unos años ni en nuestros propios sueños podremos librarnos de la publicidad y el marketing?

Pocos segundos después de que termine de vestirse la puerta suena y se abre, es la enfermera Beth que todas las mañanas llegaba para en cierta forma despertar y dar los buenos días a los pacientes, la chica era simpática y agradable, siempre educada y muy empática con todo el mundo. Por lo que sabía de ella era pareja de un bombero de la ciudad y sabia defensa personal ya que un día pudo verla como reducía a uno de los enfermos, al ver a Brian dice:

- Buenos días, como has dormido hoy?... ummm te veo un poco pálido... a ver no comparado conmigo que lo estas, sino algo más de lo normal

La ducha fue perfectamente normal, todo parecía normal en el día del chico, su vida no había cambiado en las dos últimas semanas, solamente esos sueños que estaba teniendo y de los que al menos hasta ahora no había hablado con nadie, ni siquiera en sus ratos jugando

Tras un rato mirando por internet encuentra una gran cantidad de información de cómo interpretar sueños, todas de una gran índole, depende de la "mitología" que tomen como base, en las páginas que parecen ser mas científicas coinciden en su mayoría con que los sueños son una representación del subconsciente que quiere decirnos algo, hablan también de la posibilidad de interpretación de los sueños mediante personal especializado, pero que nunca podrá hacerse con una eficacia del 100%.

En una de las paginas, concretamente en una que le llevo a un enlace de una publicación de un equipo de trabajo de la universidad de medicina de Berlín puede leer como la manipulación del sueño es posible si se encuentra en la fase Rem y se emiten unas determinadas ondas, el estudio entra en unos términos realmente complejos que él no es capaz de entender, pero que parece que son realmente complejos y se han estudiado.

Abro los ojos, confuso, con la respiración y el pulso acelerados. Miro al profesor mientras trato de recuperar la calma.

Ess... estrés.. supongo. Me llevo la mano derecha a los ojos y los froto uno poco. Últimanente tengo... problemas de sueño y me recomendaron hacer yoga, para relajarme y bueno... ya sabe... usted es el profesor. Le sonrio demostrando simpatía, pero mi voz suena cansada. Pero.. estoy bien.. miro al resto de personas.  No se preocupen, aunque supongo que esta no va a ser la solución para dormir bien. Salvo que quiera sacar más detalles al sueño.

Me incorporo, yo... lamento el susto. De haberlo sabido... creo que no hubiese venido. río. ¿Acabamos la clase?

Al terminar, recogí mis cosas y salí a la calle. Respiré hondo y comencé mi carrera a casa. Corría visiblemente preocupado por lo ocurrido en la clase de yoga. Aquel sueño me estaba afectando ya demasiado a mi vida personal. Llegué a casa, me di una buena ducha fresca, con la toalla en la cintura, fui a la cocina y me tomé otro café, esta vez con unas galletas. Regresé a mi cuarto y elegí uno de mis trajes favoritos. Después de vestirme y me acicalé frente al espejo y me di una charla para levantarme un poco él ánimo. Cogí las llaves y demás y salí de mi piso rumbo al trabajo. Tengo una funeraria que dirigir.

Con la idea de que tenía que olvidar el sueño cogió su bolsa y se marchó a su aburrido trabajo como ayudante del analista jefe en una empresa telecomunicaciones de tres al cuarto.

Esperó en la parada del autobús como cada día. Se sentó en los asientos finales, como cada mañana y sacó su lectura como siempre. Esta vez se trataba de un viejo manual de D&D que le había prestado un compañero.

- Qué vida tan frenética, ¿eh, Benji?- se dijo mientras ojeaba el libro. - Cualquier día, quien sabe, ¡quizás encuentres unas monedas en el asiento!-. La ironía le ayudaba en cierto modo a soportar el tedio de su rutina.

Pensando en estás y otras cosas llegó a su parada, situada frente a su lugar de trabajo y se bajó del autobus. Durante un momento, frente al enorme edificio de oficinas, pensó en salir corriendo. Huir en cualquier dirección, pero, ¿a dónde?.

-En fin...- suspiró -Vamos allá...-.

Enciendo la televisión como cada mañana a la misma hora. Me gusta observar tranquilamente las noticias en este formato matinal tan ligero. Cuando profundizan demasiado pierdo el interés. Me bebo el café a pequeños sorbos y le doy un enorme bocado a la tostada de mantequilla y mermelada de arándanos. Espero pacientemente a que comience la información meteorológica para ver qué jornada nos depararan los dioses. Bueno, parece ser que el día no será demasiado duro. Aunque ya sabemos que la tortilla se puede girar cuando menos te los esperas, es caprichoso el mar en sus formas de manifestarse. Voy a acabarme la tostada de un bocado y beberme el último sorbo de café cuando la palabra “sueño” llama mi atención. Subo el volumen de la televisión para poder escuchar nítidamente esta noticia al final del informativo:

-  Recientemente estudios de la universidad de Berlín ha revelado que existe la posibilidad de introducir mensajes en los sueños de las personas. Según estas investigaciones, es posible mediante la emisión de unas determinadas ondas que han de ser llevadas ante la persona que se encuentra en la fase Rem del sueño para que esta persona tenga un sueño sugestionado por esas ondas y en cierta medida poder hacer que alguien sueñe lo que otro desea... significará esto que dentro de unos años ni en nuestros propios sueños podremos librarnos de la publicidad y el marketing?

Como? Han dicho que alguien puede conseguir que sueñes lo que quieren? A través de ondas dicen. Pero eso no explica la cicatriz. Aunque esto es una primera hipótesis científica de lo que me puede estar pasando, sin duda. Podría ser la explicación? He de recopilar más información sobre este estudio, creo que ha dicho la universidad de Berlín. Intentare averiguar algo mas esta tarde en el ordenador de la biblioteca, tienen Internet y allí podre buscar algo más inmediato.

Esto le está pasando a todo el mundo? Son unas ondas que afectan a toda la población o solo a mí? He de hablar con Ulrik. Le preguntare sutilmente sobre este asunto. A lo mejor a el tambien le pasa, que se yo.