Partida Rol por web

Creo que te esta dando largas. - Te susurra tu musa al oído, casi como si temiera que Sammy pudiera oirla

Estas puertas tienen sistemas de emergencia. Por si hay que abrirlas en caso de fuerza mayor, incendio o vete a saber que. Si pudieras simular sobre la puerta una falsa alarma ...

Mientras aún rebusca entre la información que encontró antes en busca de algo útil aparece su musa con la petición de furia sobre la puerta. Inmediatamente susan activa sus protocolos habituales de hackeo localizando un subrutina de emergencia que simula un incendio para usarla con la puerta mientras consigue la ID y empieza a hackear la puerta a la vez que se aleja despacio un par de pasos hacía la sombras del pasillo para evitar que la vean.

En las pantallas de sus compañeros, y en la cutre ipad de Diaz reciben un mensaje:
[Susan: Entretenerlo para que pueda abrir la puerta y si conseguís entrar mejor que mejor.]

Sonrío mirando a la cámara, en un gesto más similar al de un depredador que a una sonrisa de diversión.

- ¿De verdad quieres hablar de ésto aquí fuera? - pregunto. - No tengo los 50000, pero sí te puedo ofrecer algo que vale más que eso. El Cartel de la Noche te está buscando. ¿Cuánto pagarían por saber dónde estás? ¿Cuánto valoras tu vida, Sammy? - Me callo por un momento, dejando que piense en lo que estoy diciendo. - Podemos protegerte. Hemos hecho negocios antes y sabes cómo trabajo. Ya hay ocho miembros menos del Cartel que te están buscando y si no quieres que el resto te localice, vas a tener que colaborar, chico. Me temo que nos necesitas tanto como nosotros a Nia Zheng.

Pronuncio el nombre en voz alta, esperando que se ponga nervioso por que alguien pueda oírnos. Si se está escondiendo del Cartel, no creo que le interese que nadie escuche todo lo que estamos diciendo.

Sammy aparta la vista, pensativo. De nuevo se toma unos buenos segundos eligiendo su respuesta, para acabar siendo bastante breve. - ¿ Que queréis de Nia ?

Me acerco a la cámara y hablo en voz baja. Ahora tampoco me interesa a mi que se escuche lo que tengo que decir más allá del grupo que me rodea.

- Dos cosas. La primera encontrar a una conocida suya. Tara Yu - añado después de dudarlo un momento. - La segunda, cerrar un negocio que teníamos pendiente y que me trajo a Locus.

Contesto con sinceridad pero de alguna forma estoy empezando a perder la paciencia. Esperaba tener que negociar, no se puede resolver todo a tiros o golpes, pero hacerlo de un lado a otro de una puerta no me parece una buena idea. No sé si hay alguien con Sammy y, pese a que él está encerrado en un pasillo, esto también es una ratonera si alguien decide venir a por nosotros.

Nia nunca me hablo de ti ni de Tara Yu. - Sammy parece sorprendido y algo incrédulo, pero tras un chasquido con la lengua, acepta visitaros cara a cara. - Pasad ...

A través de la pantalla veis que se aleja flotando de la puerta hacia el interior de su habiatat, en el mismo momento que se escuchan un par de pitidos de la puerta. Sammy se da la vuelta, parece molesto por algo.

- Maldita puerta de los cojones. Ábrete joder.

De nuevo se oyen dos pitidos en la puerta, pero esta vez se abre.

...

Al otro lado de la puerta hay un corto pasillo sirve de distribuidor. Si entráis, a vuestra derecha y por encima de vuestras cabezas hay un par de compuertas que deben de llevar a otras habitaciones.
Pero Sammy se va hacia el fondo, donde se encuentra una especie de salón comedor. Es una estancia de poco mas de una docena de metros cúbicos, con 4 ventanas de cristal que permiten ver algunas estrellas, parte de los Barros y por los que ahora mismo entra parcialmente la luz lejana del sol(*).

Suponiendo que le seguís, Sammy se sitúa junto una de las ventanas, con la mirada hacia el exterior.

¿ y bien ... ? Has mencionado algo de hacer negocios, ¿ a caso propones algún trato que pueda igualar los 50.000 ?

(*) = Estáis mucho mas lejos del sol de lo que esta la tierra. Por lo que su tamaño aparente es menor y menos resplandeciente.

Miro a mi alrededor, desconfiando ligeramente de las puertas cerradas. Finalmente tomo impulso para salir flotando detrás de Sammy y me sujeto a una de las paredes próximas a él. Aunque la habitación es pequeña, poder anclar las cosas a sus distintas superficies hace que se aproveche bastante mejor el espacio.

- ¿Nunca te habló de nosotros? - pregunto. "Espero que la información que encontró Díaz fuera verídica", pienso antes de continuar. - Bueno, entonces puedes acceder a sus recuerdos, ¿o estoy muy equivocado? - Digo sin más rodeos.

- El Cartel de la Noche te está buscando, Sammy. Y, dado que nosotros te hemos localizado, no creo que ellos tarden demasiado en hacerlo. Ya hemos tenido un par de encuentros interesantes solo por conocerte y algo me dice que vas a necesitar protección. Puede que no tengamos el dinero, pero como protección de alquiler - hago un gesto en dirección a Díaz, por mi aspecto y reputación ya debería saber que yo he trabajado de guardaespaldas en más de una ocasión - no tenemos precio.

Me impulso al otro lado de la habitación, para tener una mejor visibilidad de la entrada.

- 50000 créditos. Dime Sammy, cuando los hombres del Cartel de la Noche vengan a buscarte, ¿en cuanto valorarás tu vida? Esta misma mañana dispararon las pilas corticales de sus propios agentes cuando no consiguieron apresarme. Dado que de ti lo que quieren es información, lo más probable es que la extraigan de tu pila antes de borrarla para siempre.

Espero su respuesta. La oferta está hecha. Protección por información. Si la acepta tendremos que sacarle de aquí. Si no, bueno, habrá que buscar otro modo de hacerle hablar. Pero está escapando de algo, o buscando algo, por eso necesita un nuevo morfo y un egocast. Sea como sea, podemos ayudarle a conseguir los objetivos si él nos ayuda con los nuestros.

Entro junto al resto cuando Sammy, con cierta dificultad, abre la puerta. Echo un rápido vistazo a mi alrededor con cierta desconfianza pero no me recreo demasiado. Supongo que Sammy no esperaba visita y no creo que hubiera preparado trampas. Además somos cuatro. Podría cazar a uno, tal vez a dos, ¿pero cuatro?...Poco probable. Así que termino avanzando hacia una de las paredes y me apoyo en ella mientra sme enciendo un cigarro. La escasa gravedad lo dificulta todo.

- En eso tiene razón.- aporto desde mi sitio con una sonrisa siniestra cuando Furia menciona lo del cartel de la noche. La verdad es que no tiene pinta de ser el diplomático del grupo, pero me gusta ver como negocia este tio.- No hace mucho que nos hemos cargado a unos cuantos capullos que tenían mucho interés en ti. Y no es que fueran unos patanes...-añado con cierto misticismo dejando el resto de la frase en el aire. A veces genera mayor efecto el omitir datos que otra cosa.- Yo aceptaría la oferta.- añado dando una larga calada a mi cigarro y sonriendo después de ello.

Sammy permanece junto las ventanas, quedando su silueta recortada por el fondo estrellado, por el que esporádicamente se ven pasar algunas naves en maniobra de atraque. Os observa con el ceño fruncido y los brazos cruzados. No se esfuerza en ocultar como le desagrada y desprecia vuestra presencia dentro de su casa.
A parte de eso, se mantiene en todo momento distante, confiado y parco en palabras.

Cita:

Niega con la cabeza. - La conozco bien. ¿ Porque ?

Cita:

Asiente con la cabeza, como si no le importase mucho y fuese un dato que ya conocía. - Pero no me encontrarán. Y espero que Furia, Díaz, Susana y Zeita no lo esptropeen. Seria una pena tener que pataear ese culo - Responde con demasiada convicción en si mismo y refiréndose a Susan.

Cita:

-Negocios ... siempre hay un precio para las cosas ¿ eh ?. Y vosotros, ¿ en cuanto valoráis lo que sea que necesitéis de mi ?.-

Observas la casa de Sammy y te parece triste, pobre en mobiliario, demasiado vacia. Como si Sammy no poseyera muchas cosas.

Susan entra dentro del cuarto y rápidamente empieza a inspeccionar el lugar. Un barrido de izquierda a derecha a ida y vuelta para luego girar 90º y hacer lo mismo otra vez. Su musa se encarga de hacer una copia digital de la habitación rápidamente mientras Susan continúa con lo que estaba haciendo con la puerta y repasando los datos que le llegan del apartamento. La mención de su nombre tan solo sirve para que sonría tímidamente antes de bajar la vista al suelo e inspeccionar después a sammy otra vez más.

Usando la interfaz envía un mensaje a la red privada que usan diaz, furia, zeita y ella misma.
¿Deberíamos decirle directamente que nos envía el profesor magnus para buscar a Tara Yu?

Susan ... - Tu musa aparece a un costado, de pie, evidenciando que ella no sufre los efectos de la gravedad cero - La malla esta algo ruidosa por aquí. Voy a tratar de investigarlo un poco.

respondiendo a susan:

no me parece prudente que lo hagamos, ni necesario, a menos que el este tambien involucrado con algo de los Titans, pero eso no lo sabemos y no podemos ir divulgando eso.

mirando a Sammy fijamente sin dejar su posicion

esto no es un asunto complicado, al contrario es tan simple como esta conversacion, necesitamos dar con el paradero de Tara Yu, saber en que condiciones esta, ¿en cuanto valorarias hablar como personas civilizadas? dinos lo que queremos saber y te ahorras mil problemas que podrian venir de nuestro lado, incluso te ayudamos con lo que necesites, esto es algo que no podrias cuantificar, ¿si Tara esta en problemas no crees que esperaria que tu la ayudaras, no crees que te devolvería el favor?.

¿valoras tu pellejo? apuesto que Tara también valora el suyo, suponiendo que sigue por ahí y si lo que quiere es esconderse tan solo dile que de una señal de vida a sus amigos y ni el mismo diablo dará con ella, te lo aseguro eso incluso va para ti.

si hay alguna manera de negociar mas alla del dinero Zeita esperaba que esta fuera, un lugar donde esconderse, una posible solucion al problema que lo aqueja seguramente le sea atractivo a alguien que como el tiene enemigos que no le daran respiro. Bueno al menos ella que ha estado en situaciones similares ha sabido agradecer esta clase de ayudas, ¿porque el seria obstinado y no se dejaria ayudar? pensaba ella. 

Abro y cierro la mano, tratando de calmarme cuando Sammy amenaza a Susan con patearle el culo. "Será mejor que ni siquiera lo intente". Zeita aprovecha el momento para hablar, pero no creo que su "piquito de oro" le vaya a ser de mucha ayuda aquí.

- ¿Por qué? - repito la pregunta de Sammy. - Porque según nuestros datos Nia Zheng se cambió de morfo y consiguió una identidad falsa. De un tal Sammy Li, ¿te suena? - Las cartas sobre la mesa, aunque siempre se me ha dado bien guardarme algún as. "A ver qué tal reacciona a esto. Espero que la información de Díaz sea fiable."

- ¿Crees que la información que necesitamos vale nuestra protección? Si no es así, seguro que Marchel·lo se muestra algo menos reacio a negociar. Dado que fue él quien se quedó con el territorio de los Khans, es posible que sepa dónde está Tara Yu. Pero ninguno de los cinco queremos llegar a eso. - Apoyo la pierna en la pared, como si pretendiese contrarrestar un momento que me haría girar de otra forma, pero preparándome para impulsarme hacia Sammy si intenta alguna tontería.

La malla esta ruidosa aquí... - comenta susan en el chat privado que tienen entre ellos.