Partida Rol por web

El Capitel Esmeralda

03. La mano del Maestro Gris

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15/10/2016, 11:22
DM

Cenariel y Dynah salieron del Templo para dirigirse hacia El Blasón de Juliver. Las últimas semanas de Neth estaban siendo bastante duras, y en aquella latitud de Avistan no era de extrañar que ya hubieran caído las primeras nevadas. El día se levantó gélido, de esos que es mejor pasarlo en una buena taberna junto a un cuenco de caldo o cerveza caliente, pero la Altísima Madre de la Llave Dorada les había encomendado reunir al grupo. 

Para Dynah, aquello formaba parte de algo rutinario y formal, pues ya había marchado junto a los Druul, Abroshtor y Drabeorn, y aunque solía ser una mujer poco expresiva y en cierto momentos muy dada a mantener las formas, comenzaba a sentir aprecio y apego hacia ese trío de intrépidos exploradores. Para Cenariel en cambio, aquello suponía una nueva oportunidad de hallar a sus mentores Jharun y Tiawask, los magos pertenecientes a La Orden del Fuego Dorado, acompañada de un grupo que hasta el momento se había mostrado resuelto en las mazmorras asesinas del Capitel y que además la habían rescatado de una muerte agónica y segura.

Las muchachas abrieron las puertas batientes del Blasón de Juliver. A esas horas de la mañana, no era tan frecuente encontrar el lugar completamente abarrotado como solía suceder en las horas más vespertinas, pero a pesar de eso, siempre era fácil encontrar a algunos mercaderes, mozos y labriegos tomando un cuenco de leche con licor acompañado de tocino y migas. 

Tanto la oráculo como la elfa otearon hasta dar con la mesa que habitualmente solían ocupar el gnomo alquimista, el brujo semiorco y el bárbaro de gran espada. Druul y Drabeorn escuchaban atentamente al pequeño Abroshtor que repartía los beneficios conseguidos hasta el momento en varios montoncitos, mientras montaba sus albaranes en los que recogía las ganancias y cada una de las compras comunitarias realizadas. Aquella mañana, el pequeño oriundo de Los siete Arcos (Sevenarches), se había levantado especialmente contento, pues el erudito Royst, le había hecho entrega de una paga adicional por haber entregado los planos del primer nivel subterráneo. Aquello marchaba viento en popa...   

Notas de juego

NOTA DM: Partida en juego.

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15/10/2016, 12:44
Dynah Mullen

Dynah no esperó a su acompañante y acudió en línea recta a la mesa donde estaban sus compañeros, como era su estilo.

Buenos días, amigos. La Altísima Madre nos ha urgido a continuar con nuestra misión. Creo que ha pasado ya suficiente tiempo y que estamos lo suficientemente recuperados. Contamos con el cinturón mágico y la poción y con fuerzas renovadas creo que deberíamos poder completar otro nivel de esa condenada torre hasta que encontremos a los magos o pruebas sobre lo que se esconde tras esa calavera coronada.

Dynah se sentó y se cruzó de brazos.

¿Qué os parece? ¿Cuando podríamos ponernos en marcha? Ah,sí, por cierto, esta es Cenariel, la Altísima la ha asignado a la misión para ayudarnos. Ella tiene sus propias razones para arriesgar la vida junto a nosotros pero podeis confiar en ella tanto como en mí misma.

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15/10/2016, 14:26
Cenariel "tiernaflor"

La elfa parecía haber conseguido algo de equipo, no sabían exactamente de donde y les miraba desde una distancia prudencial. Resopló descruzando los brazos y siguió a la oraculo. Se quedó de pie junto a Dynah hasta que esta la presentó ante los demás.

'Nas, que sepais que vengo por que me salvasteis el pellejo, no por lo que diga la vieja.

Se sentó en el taburete, aunque la postura era más bien parecida a la de alguien tumbado, con los pies en la mesa. ¡Tche!, ¡una jarra de cerveza chica!

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15/10/2016, 23:07
Druul

Druul sonríe al ver a los recién llegados. Me alegro que te hayas recuperado tan bien, Cenariel.

Si los demás se hubieran fijado, verían que una nueva cicatriz adorna el cuello del semiorco. Sin embargo, ninguno ha estudiado nunca el desagradable rostro del brujo, y una marca más pasa desapercibida en el mar de cicatrices que le cubren.

Ah, dice recostándose en la silla tras escuchar a Dynah, la pregunta es, por qué hemos tardado tanto? Estoy dispuesto para partir cuando queráis. Esos magos podrían estar como Cenariel cuando les encontremos.

Notas de juego

Opinad en el offtopic sobre lo de comprar la varita anda :)

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15/10/2016, 23:20
Drabeorn

El recio hombretón observaba, divertido, como el compañero hacía montoncitos con las monedas sobre la mesa al tiempo que llevaba el recuento en voz baja con un murmullo apagado.
En más de una ocasión, entre risas, Drabeorn había soltado números al azar para descontar a Abroshtor y éste, enfadado, se había visto obligado a comenzar de nuevo el cálculo.

Apuraba una jarra de fría cerveza y conversaba afablemente con Druul.
Desde la última incursión, había tenido tiempo de sobra para descansar y reponerse y ya se encontraba de nuevo totalmente lleno de energía. De modo inconsciente, de vez en cuando llevaba la mano hacia el mandoble que descansaba apoyado a su lado, sólo para comprobar que seguía ahí.

En un momento dado, Dynah entró acompañada de una muchacha a la que en un principio no reconoció.
- ¡Hola! - dijo con alegría, levantándose y dándole un fuerte abrazo.
- Pues no lo sé. Por mí, nos podemos ir en cuanto terminemos de desayunar - dijo, respondiendo a la pregunta de Dynah. En ese momento, la elfa tomó asiento y llamó la atención de la posadera; momento que Drabeorn no dejó escapar: - ¡Otra por aquí! ¡Y pan! ¡Y queso!

- La verdad es que sí - continuó hablando en relación al comentario de la compañera - Este tiempo nos ha venido de perlas para renovar fuerzas.
Vio a lo lejos que la mesonera se aproximaba con lo que habían pedido y alzó la mano para que le viera al mismo tiempo que señalaba una mesa contigua: - ¡Y un poquito de tocino como el de ese hombre!

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16/10/2016, 14:06
Abroshtor

Cinco montoncitos de monedas descansaban sobre la mesa, la paga de cada uno de ellos. Dio un largo sorbo de su jarra de cerveza negra y se recostó en la silla, con una sonrisa de oreja a oreja, triunfal por el trabajo bien hecho y la recompensa justa. -Para ya de pedir cerveza Drabeorn!- O te gastarás tu parte en un día. Acto seguido se dio cuenta de que su jarra estaba casi vacía. -Pídeme otra ¿Quieres?- Dijo como si no le hubiera amonestado hace unos segundos.

-Me alegro de que estés bien! Encantado Cenariel.- Habían sacado a la elfa en un estado lamentable y no esperaba una recuperación tan rápida, pero se alegró igualmente. La orden de Dynah había hecho maravillas en la salud de la Elfa.

-Yo estoy listo.- Añadió. -Empezaba a aburrirme por aquí.- Llevaba varios días intentando fabricar un arco como los que llevaban los malditos goblins, estudiando e investigando nuevas fórmulas alquímicas, mejorando sus extractos, su mutágeno y sus bombas. Le encantaba el trabajo de estudio e investigación, pero le había cogido el gustillo a hacer arder cosas.
 

Notas de juego

 

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16/10/2016, 22:17
DM

Pan, cerveza, tocino y queso llenaron con premura la mesa de los aventureros. Debían coger fuerzas para adentrarse nuevamente en el Capitel Esmeralda, y Drabeorn no iba a perder la oportunidad de saciar su famélica hambruna matinal. Los Cañizales trabajaban a destajo para cumplir las comandas que no cesaban de salir de aquella mesa que parecida ocupada por una vorágine de lobos, mientras Abroshtor se encargaba de mostrar a sus compañeros que había hecho los deberes como tesorero.

Había dividido los beneficios en cinco montones bien ordenados y había entregado el dinero para adquirir una nueva varita de curación para las necesidades del grupo. Druul se encargó de comprarla yendo al Templo del Silencio, un lugar santo dedicado a la adoración de Pharasma, regentado por un sacerdote ustalavita conocido como Hermano Dimeru.

Cuando por fin todos ingirieron sus respectivos desayunos -algunos más copiosos que otros- se levantaron para marchar en dirección al complejo. El gnomo se acercó hasta el patriarca mediano de la familia que regentaba el lugar, Doliver Cañizal y le hizo entrega del montón de monedas que pertenecía a Alyssa, la paladín que hasta el momento les había acompañado. Desde hacía varios días, nadie había visto a la muchacha, pero nadie creía que le pudiera haber sucedido algo malo.

Se encaminaron a la puerta y entonces una patrulla de Cabelleros Infernales de la Orden de las Picas irrumpió en la posada. Se trataba de seis caballeros perfectamente uniformados, que se colocaron a ambos lados de la puerta creando un pasillo. Acto seguido, una mujer veterana, de piel pálida ojos oscuros y pelo color azabache hizo entrada. Estaba ataviada con la armadura de la orden, pero no portaba yelmo. Su mueca era seria y severa. En cuanto entró, las dos hileras de caballeros infernales se llevaron el puño al pecho, realizando un sonoro saludo al chocar los guanteletes contra los metálicos pectorales...

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16/10/2016, 22:36
Lord-Comandante Drovust

La mujer miró fijamente al grupo que tenía ante ella. Dejó descansar su mano enguantada sobre el pomo de su ornamentada espada bastarda. Finalmente, tras unos segundos que parecieron ser horas, se dirigió a ellos:

- Creo que ustedes deben ser los expedicionarios que se aventuran en los niveles subterráneos del Capitel Esmeralda... ¡¿no es así?!- la pregunta directa quedó en el aire, a la espera de confirmación. 

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17/10/2016, 09:21
Druul

Al ver llegar a los caballeros infernales, Druul se había situado estratégicamente al final del grupo, para que hubiera muchas cabezas en medio de la línea de visión de los guardias, así como para empezar a pensar cómo salir de ésta si venían a por él.

Al escuchar las palabras de la mujer que lideraba la patrulla, sin embargo, se da cuenta que su miedo es infundado. Aunque haga tiempo y aunque le dieran la libertad, un ex esclavo siempre tiene el temor de que las cosas vuelvan a torcerse. Suelta el aire que tenía retenido, lentamente. Deja que otros hablen por el grupo, manteniendo un perfil bajo.

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17/10/2016, 09:40
Cenariel "tiernaflor"

En un principio la elfa intentó ignorar la escena que se representaba delante de ella, incluso tras la pregunta directa, como si no fuera con ella. Entonces recordó que tecnicamente sí, ella era ahora parte de esa expedición.

Seh, ¿Quiere algo con nosotros... Miró el extraño comportamiento de los caballeros y añadió. ...jefa?

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17/10/2016, 11:04
Dynah Mullen

Dynah se puso inmediatamente muy recta al ver a los caballeros. Para la oraculo, la ley era muy importante y la autoridad que desprendia la figura de la armadura era innegable. Se pregunto, sin embargo, el por que del interes de los caballeros infernales en sus pesquisas.

-Si, señora. Somos nosotros. Hemos limpiado los niveles superiores de bandidos trasgoides y nos preparabamos para continuar con nuestra exploracion. Estamos buscando a unas personas desaparecidas.

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17/10/2016, 15:17
Drabeorn

Una patrulla de Caballeros Infernales hizo acto de presencia con su acostumbrada demostración de poderío militar. Semejante ostentación, a Drabeorn no le gustaba ni un pelo; resultaba ridículo.
Si un hombre tiene que manifestar su fuerza a través del boato, es que no posee tanta firmeza como cree.

El hombretón guardó silencio mientras sus compañeros daban las pertinentes explicaciones. Él simplemente no sabía cómo tratar con aquellos que poseían la autoridad que ellos mismos se habían adjudicado.

Las chicas tomaron la palabra y dialogaron con la líder del pelotón.
- ¿Qué diablos les importará a estos lo que nosotros hagamos? - se preguntó Drabeorn ante el interés mostrado por la interlocutora.

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17/10/2016, 16:16
Lord-Comandante Drovust

- ¡Ya veo!...- dijo mientras daba unos lentos pasos y sus ojos estudiaban a cada uno de ellos - Fuerte Inevitable les da las gracias por hacerse cargo de la plaga trasgoide pero...- tomó unos instantes para darle suspense a sus próximas palabras - ... creo que no han pasado por las arcas de la Ciudadela para hacer efectivo el pago del tanto por ciento que le pertenece a las autoridades de esta ciudad... ¡¿o me equivoco?- dijo mientras sonreía livianamente. - Según se destaca en la Ley de Impuestos de esta ciudad, todo grupo que se introduzca bajo su responsabilidad en el Capitel Esmeralda con el fin de explotar los botines y tesoros que puedan hallarse en su interior, deben realizar la contratación de un permiso anual por la cantidad establecida de cincuenta monedas de oro y posteriormente entregar un treinta por ciento de lo encontrado en dichas ruinas... ¡¿No es así?!- preguntó al tiempo que la sonrisa desaparecía de su cara y su gesto tomaba un cariz amedrantador.

Notas de juego

NOTA DM: Antes de que reaccionéis y le metáis la bola que se os pase por la cabeza, debo informaros de que lo que dice es correcto. Todo eso está detallado en el contrato entregado por la Altísima Madre Dramagne a Dynah.

XD

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17/10/2016, 18:55
Dynah Mullen

Dynah abrió los ojos como platos. ¿Cómo era posible que ella no hubiera leido el contrato? contrariada, lo sacó de la mochila y lo repasó en ese momento.

-Todo lo que dice es verdad. Lo siento, ha sido culpa mía por no haber estudiado bien el contrato. Me temo que habrá que renunciar a esa varita que queríamos comprar. Os pido personalmente disculpas, Lord-Comandante. Si nos concedeis la gracia, me encargaré personalmente de pagar la deuda de inmediato.

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17/10/2016, 19:48
Drabeorn

Drabeorn se aproximó a Dynah y le susurró al oído: - ¿Es cierto? ¿En ese papel pone que tienen derecho a sablearnos después de haber arriesgado nuestro pellejo? Pues no me parece justo...

Al muchacho le parecía una barbaridad lo que estaba diciendo aquella zorra. Estaba al tanto de la política de impuestos, ¡Pero aquello era demasiado!
El rostro de la mujer se había tornado duro y poco cordial: les estaba amenazando y eso no le hacía ninguna gracia.
El robusto hombre devolvió la mirada a los fríos ojos que le escrutaban y una temeraria idea cruzó por su mente: - No son demasiados y derrochan confianza, no esperarán un ataque...

Pero pronto desechó semejante locura. No le daban ningún miedo, y lucharía hasta desfallecer por lo que consideraba justo; no obstante, las suaves palabras que Dynah pronunció le hicieron comprender que ella no deseaba un enfrentamiento. Únicamente el respeto que le profesaba, fue el causante de que el acero no quedase desnudo.

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17/10/2016, 20:11
Abroshtor

-Y una m...- Consiguió morderse la lengua entre una disimulada sonrisa. Su jovial humor se disipó en un abrir y cerrar de ojos. -Hasta tienen regulado el oficio de Aventurero.- Dijo. -Parece que arriesgar la vida aquí es un 30% más caro.- Como si eso fuera posible. -Sea pues. Regula nuestra situación Dynah.- Enfrentarse con la autoridad no era una opción, y menos con los Caballeros Infernales, que tenían sus dedos extendidos sobre medio mundo.

Notas de juego

Bueno... Nos mudamos a ThornKeep?? :D

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17/10/2016, 23:11
Lord-Comandante Drovust

La mujer mantuvo la mirada de rabia de Drabeorn. Durante unos instantes eternos, el silencio se hizo en la posada, pero la mujer no deseaba matar a aquel bárbaro. Había algo en aquellos ojos de furia que la estimulaban... que la excitaban. Acto seguido surgieron las palabras de Dynah, y su rostro aunque serio, se relajó dejando emerger esa media sonrisa que ya mostrara en su entrada al Blasón de Juliver.

- No, no, no... ¡¡No hará falta!!- dijo Drovust negando con su mano enguantada, al tiempo que sus escoltas apartaban la mano de su fieras espadas. - No hará falta que devuelvan esa varita o el dinero que hayan conseguido... Tómenlo como un acto de buena fe...- dijo la guerrera mientras daba media vuelta y se ponía de espaldas al grupo. Permaneció unos lacónicos instantes callada y volvió a girarse para mirar al grupo.

- Parecen constituir un buen grupo de exploración, con lo que me debo en la obligación de encargarles una misión de vital importancia para la Ciudadela- comentó con voz sosegada - Y quizás podamos mejorar las condiciones económicas de su contrato de explotación... ¿Qué les parece?- añadió la mujer con inteligencia, buscando llamar la atención de los aventureros - Ese 30% se podría convertirse en un 10%, con posibilidades de que el día de mañana fuera un irrisorio 5%...- apuntilló sus propias palabras con una interesante oferta. 

Notas de juego

Que no me entere que el culito del bárbaro pasa hambre...

XD

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17/10/2016, 23:44
Dynah Mullen

Aquello si que no le hizo mucha gracia a Dynah. Primero, las reglas son las reglas y no le gustaba que se "doblaran" así. Segundo, si estaba dispuesta a hacer eso es que deseaba mucho lo que fuera que buscaba en aquella condenada torre.

-Es una oferta muy generosa, mi señora... pero me atrevo a pediros que nos conteis en qué consiste esa misión. Me extraña que, siendo algo importante, no mandeis a vuestros propios hombres. 

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18/10/2016, 00:01
Drabeorn

La mujer fue capaz de sostenerle la mirada como nadie había hecho antes (nadie que siguiera con vida).
Drabeorn se sorprendió ante semejante muestra de arrojo, claro que se lo podía permitir, yendo como iba escoltada por media docena de soldados fuertemente armados.

Luego, con una sonrisa que pretendía ser amable, les propuso abaratar la cuota de su pago.
- ¿Qué es lo que pretende? ¿A qué juega?

Dynah, que se había erigido como portavoz, seguía utilizando un tono sosegado y cordial y el enfado que el hombre comenzaba a sentir de nuevo, quedó diluido en parte.
La compañera le lanzó una pregunta y todos aguardaron la respuesta de la extraña moza.

Parecía muy segura de sí misma por el tono autoritario que utilizaba; incluso se permitía cierta "familiaridad" en el trato que les estaba dispensando. Parecía fuerte y enérgica, y el bárbaro pensó que no le importaría cruzar espadas con esa mujer.

Notas de juego

Esta nos la lía. Ya verás como nos pedirá algo chungo...

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18/10/2016, 12:10
Lord-Comandante Drovust

La mujer sonrió nuevamente. Dio unos pasos hasta sentarse en una de las mesas del local. Hizo un gesto con la mano, y su escolta se encargó de desalojar a los pocos lugareños que ocupaban el Blasón a esas horas de la mañana. Una vez despejado el local, uno de sus caballeros, abrió un pequeño bolsillo de cuero rubro y le entregó varias piezas de oro a Duliver Cañizal por las molestias acontecidas. 

Una vez a solas, la mujer instó a que los aventureros volvieran a sentarse. Tras unos segundos comenzó a hablar: 

- Como sabrán, últimamente estamos enfrascados en una cruzada contra el bandidaje de la zona- tomó aire antes de proseguir - Seguramente no les suene desconocido de que el criminal que parece dominar la zona es un tal Tarrin Dars. Nadie sabe nada de él. La mayoría de los hombres que hemos capturado de su banda, prefieren pudrirse colgados de una soga a revelarnos cosas sobre su líder, pero esto ha cambiado recientemente...-  Nuevamente una media sonrisa cruzó el rostro de la veterana mujer. - Según hemos averiguado en los últimos interrogatorios, ese criminal está expandiendo sus tentáculos por  Bastión Espinoso y en última medida por Fuerte Inevitable... ¡¿Qué quiere decir eso?!... Que quizás en esta ciudad, haya espías que pertenezcan a su banda y por eso sea tan difícil cazarlo... - miró fijamente a cada uno de los integrantes del grupo, pasando más rato en el fornido bárbaro -Tras usar poderosas alternativas mágicas, conseguimos averiguar, que Tarriny su banda conocida como Los Astillas, ocupan el tercer nivel del Capitel...- su rostro volvió a la severidad habitual - Si envío a mis hombres, podrían averiguarlo gracias a sus confidentes infiltrados y huir de su guarida, pero si van ustedes, serán como unos cándidos aventureros que caerán en la trampa de esos taimados bandidos... Nada más lejos de la realidad...- aguardó respuesta por parte del grupo