Partida Rol por web

-Bueno, siendo así, tienes una cita mañana a las nueve.

Escribió con su bolígrafo de metal una nota -tenía una letra muy bonita, pero sencilla- con la dirección: CSB, piso 38, oficina 6. Torre Majunga, la Defénse, 9 A.M.

Y se lo entregó a Leah diciendo:

-Identifícate y te recibirán. El sitio no tiene pérdida.

Bebió el último sorbo de café.

-Y apura la semana de hotel, está pagada por la administración. Ah, creo que por lo menos te dupilcarán el sueldo, más extras por traslado y dietas... así que disfruta de la buena vida en París.

Y cuando ella terminó su taza y el pastel, dio por concluída la reunión. Se notaba que sus vacaciones habían acabado justo en ese momento.

-Ahora vamos al hotel y embalamos. Hemos acumulado por lo menos dos maletas de papeleo y no quiero que me pierdan nada en el avión. Así que... conduciré hasta Niza. Hace un buen día y para la noche le daré a Corine la noticia.

Luego de terminar de comer, Leah pidio un pedazo para llevar.

- Por favor dale a Corine de mi parte, y dile que la extrañare.

Ella guarde el papel con la direccion y continuo muy callada hasta el hotel. Se dio un baño luego de despedir el comisario y trato de relajarse, pero no pude asi que salio a trotar por las calles de Paris pensando en las nuevas asignaciones.

Escucho a la mujer con interés moderado. Supongo que es lo menos que puedo hacer.
La comida esta bien. Demasiado pagada de si misma pero sabrosa.
Lo mejor es el vino. Incluso acepto mi sugerencia de ese Laffite tan peculiar que sirven en botellas pequeñas.
Pero aunque la charla es agradable y también la velada, no se levanta la sensacion de falsa apariencia en la que nos movemos ambas partes. Hay cosas que quisiéramos decir las dos partes que están ahí agazapadas en la niebla y que ni siquiera el embotamiento del alcohol desinhibe.
Dano, si no quieres seguir la mentira, se cortes pero se sincero.
Dejo reposar la ultima copa de vino en una pausa lo suficiente larga para remarcar su silencio.
Con tranquilidad dejo la servilleta sobre la boca del cristal. Me desentumezco sutil pero visiblemente y con los codos apoyados en la mesa y las manos entrelazadas me incorporo hacia ella de forma acusada.
Intento que mi gesto, mi voz no tengas ecos de otra cosa que la de una confidencia sincera. Para evitar malentendidos gracias a Dios atino a escoger el ingles para mis palabras.
Me ha halagado, madam Galvadá, con todo este trato. - comento señalando los vestigios de la cena en la mesa - la verdad es que todo ha estado bien, agradable y disfrutable. El lugar,la comida y la conversación...
Si en eso ultimo,Umm.. desea un conocimiento en mas profundidad, algo que asentara sus esfuerzos, me gustaría ayudarle. Aun tengo algunos contactos en la Frontera. - comento - Si quiere ver como funciona el sistema - Como es el sistema es el deje real de mi tono - podría llamarlos para que usted o quien crea mas conveniente echen una ojeada.
Por lo demás - me encojo de hombros - se esta haciendo tarde y mañana he de levantarme temprano y a ser posible... - señalo sardónico con los pulgares a la ultima botella - ... despejado.

-¿Cómo de temprano?-Dijo la mujer con un tono... diferente.-Porque puedo hacer algo al respecto. Hincó sus codos sobre la mesa, juntó las manos y apoyó su mentón sobre ellas.

Había cambiado algo.

-Bueno, he de disculparme por mi... intrusión en su... vida privada.

Abrió su bolso y sacó una identificación. Era Directora de Operaciones de Campo una agencia el Estado que Daniel no conocía, CSB: Cuerpo de Seguridad Bilateral.

-Acabamos de estrenar las oficinas. Investigamos casos sensibles que pueden afectar a las relaciones bilaterales, con delicadeza, pero sin impunidad. Me he tomado la libertad de conocerle un poco antes de proponerle un trabajo. Y cuando digo un trabajo, me refiero a un caso en concreto. Creo que es usted el agente adecuado.

Bebió el último sorbo del Laffite.

Contemplo absorto la credencial entre la sorpresa y cierta satisfacción.
Bueno, si había algo que olía a quemado pero...¡Chango!...¿Es incienso o chamusquina?
Intento pilotar mis reacciones antes de volverla a mirar a los ojos.
Me levanto a las seis mas o menos, si eso es importante - comento mecánicamente - me gusta darle un poco al cardio. Madrugo lo justo para estar medio hora antes del horario en la oficina.
Me siento de nuevo con la espalda recta en el respaldo.
¿Seguridad Bilateral,huh? - repito retoricamente mientras digiero su explicación. Son solo unos segundos para absorber las trazas de seriedad entre lineas - Hableme del caso - le apremio mientras pido un expreso doble a palo seco.

-Disculpe por no darle detalles concretos. Pero nuestra razón de ser es la discreción. Un compatriota suyo que ocupa un cargo importante ha desaparecido en París. Tenemos razones para creer que su desaparición puede estar relacionada con el asesinato de una activista implicada en la protección de menores en situación desfavorecida.

Si acepta es un trabajo por comisión. Cuando acabe el caso acaba nuestro trato. Mañana a las nueve tendría que estar en mi despacho.

Miró a Daniel, otra vez con una mirada desafiante, pero infantil.

-Ahora no puedo contarle más.

Asiento comprensivo. Delicadeza.
Apuro el café. Agito los músculos y me levanto con tranquilidad.
¿Tiene una tarjeta?. Nos vemos mañana. Supongo que los suyos arreglan el papeleo.
Le tiendo la mano esperando su aprobación.

Ahora que se había ido el comisario daba la impresión de estar sola en una megaciudad de más de dos millones de personas. Bien entrada la noche hubo noticia de Corine, que mandó un mensaje agradeciendo el pastel y mostrándose muy ilusionada con el próximo viaje a París. A esas horas su padre todavía no había vuelto del trabajo.

El jueves amaneció tan despejado como el día anterior y en un cielo tan vacío la arquitectura de La Defénse se levantaba intimidante. Allí las personas se veían insignificantes como hormigas. El edificio Majunga era tan nuevo que no salía en muchas guías. Su arquitectura era moderna incluso para ese sitio.

La luz de la mañana hacía destellos en algunos cristales de una mole que se había erigido como una estatua, o más bien como un tótem. El hall era inmenso y allí le tomaron una primera nota del nombre, pero no le pidieron identificación.

Un ascensor de acero y vidrio la llevó en un tiempo récord a la planta 38.

La entrada a la Oficina 6 la custodiaba una recepción con un par de sillones y un escritorio en el que trabajaba una secretaria de aspecto serio y elegante. Un discreto emblema de la CSB grabado en vidrio era lo único que identificaba el sitio como una oficina del gobierno.

Cuando su nueva directora de operaciones le había afirmado, dándole su tarjeta, que la ratio de burócratas por agente era más que de sobra como para que no se tuviera que preocupar por el papeleo, se habría podido imaginar algo así.

En el piso 38, bloque de oficinas 6 a la manera aséptica de la muchedumbre de agencias de seguridad americanas, o de las oficinas de inteligencia de La City londinense, entre lobbys y multinacionales se mimetizaba el Cuerpo de Seguridad Bilateral. Y esa nueva criatura del estado francés tenía que vestir un traje de cristal y acero.

Tras pasar un pequeño filtro en un hall ostentosamente vacío y subir en tiempo récord treinta y ocho pisos, una secretaria de aspecto formal y ropa elegante le pidió la identificación. Eran las nueve de la mañana de un jueves despejado.

Paris resulto se una ciudad intimidamente. Acostumbrada a las amplias calles y espacio abiertos de Niza, aun no me acostumbrubaba a caminar por el distrito empresarial y esperaba poder volver a ver los campos eliseos en la tarde.

Aun asi llegue temprano a la entrevista y tome unos minutos para apreciar la arquitectura del edificio.

Hermoso.

Aunque yo no sabia nada de eso, era impresionante.

Finalmente ya en el piso 38, entre por la puerta y camine hasta la secretaria o recepcionista que estaba en la entrada.

- Bueno dias, soy Leah Bethany Tautou, ag... tengo una entrevista a las 9 am.

Pense en anunciarme como agente de la Gendarmeria pero al no estar clara del funcionamiento del CSB preferi callar. Si habia sido escogida como dijo el comisario, entonces ya debian estar esperandome. Normalmente no era mi estilo pero no queria dar una mala impresion, asi que me vesti sobria, como para una entrevista de trabajo.

-Buenos días, es un placer.

La mujer se levantó ofreciendo su mano a Leah, era alta y delgada, y su acento parecía de Europa del Este, pero su francés era muy bueno.

 -Me llamo Chana Zhychuk, seré la secretaria de su equipo el tiempo que dure la investigación.

Mostró el guardarropa, ayudándo con la chaqueta. Después echó a andar con Leah hacia una sala que tenía una ventana con unas vistas espectaculares de parís. La invitó a sentarse.

-Si quiere té, café o pastas, sírvase usted misma.

Y señáló una pequeña barra de madera, con unas tarteras, un microondas y una máquina de café.

- En cuanto venga su compañero empezamos. Luego se nos unirá la Directora de Operaciones.

- Gracias Chana, un placer.

Asi que voy a tener un compañero. Al menos alguien sabia de que iba todo esto.

- Eh, Chana espera, tu sabes de que va la investigacion? Puedes informarme de algo?

Tal vez no lo sabia o no tenia autorizacion pero si iba a esperar bien podia irme adelantando algo, no?

Mientras me servía cafe de la barra y tome una o dos galletitas, mas por acompañar el cafe que por hambre.

-Lo siento Leah. Estoy obligada a seguir un protocolo. Hay unos contratos con cláusulas de confidencialidad que os tengo que leer estando ambos presentes. Luego, con todo firmado, os pondré al tanto de la investigación previa. La documentación está preparada en el que será vuestro despacho. También os daremos en custodia vuestra arma reglamentaria. Y desde hoy mismo podréis empezar a trabajar.

Abrió un cajón y repuso las monodosis del café Blue Mountain.

-¡Se nota cuál es mi favorito! Te lo recomiendo.

Y marchó hacia recepción, dejando a Leah con el intringulis.

-Buenos días, bienvenido al CSB.

La secretaria era alta y delgada, y su acento parecía de alguna república de la antigua Unión Soviética.

 -Me llamo Chana Zhychuk. Seré vuestro ayudante con la documentación, la burocracia cualquier cosa que os pueda distraer de la investigación de campo. Nos espera su futura compañera.

Le pidió la chaqueta y le indicó el guardarropa. Luego, con una carpeta, le guió hacia una sala con la puerta de cristal.

Aunque este bastante relajado después de haberle dado de buena mañana un buena tunda al saco y tomado después una ducha fría, no puedo decir que las tenga todas conmigo.
He repasado de arriba a abajo el edificio como a un sospechoso antes de entrar en la sede del Cuerpo de Seguridad Bilateral como bien anuncia junto a unos cuantos logos mas.
Sonrío irónicamente. Si no fuera por que me instinto me dice que vengo a otra cosa, creería que me han llamado para resolver mas de dos o tres de mis viejos casos, picoteando piso arriba y piso abajo en los despachos de algunas de estas firmas.
¡Chango! No caerá esa breva. Aunque ¿Quizás...?
Eso dijo la la vie.. um...la Directora - mascullo entre dientes mientras mis dedos juegan con la tarjeta. Me río para mi mismo recordando por un momento que llegue a creer que me estaba tirando los tejos.
Directora de Operaciones de Campo. Un buen titulo. Uno de los que, en mi perspectiva de como deben ser las cosas, se deben ganar valiéndolo. - Umm... - me vuelvo a quejar para mis adentros.
Aunque en la madrugada antes de caer dormido, antes de volver a triunfar por otra noche en no marcar o textear ese numero de todas las noches, ya lo estuve pensando, en el ascensor vuelvo a sentir la incomodidad del que se encuentra ante un paso interesante.
Hacia el piso veintidós guardo la tarjeta junto a la petaca, el bloc de notas y empiezo a silbar "Dirty Old Town" con las manos en los bolsillos de la chaqueta sport. La maldita maquina sin corazón, no me deja llegar ni a la segunda estrofa.
La recepcionista que me encuentro es maja y funcional. Le muestro mis credenciales cuando me las requiere y con seriedad le comento por que estoy aquí.

Un placer conocerla...¿Chana...?¿Señorita Zhychuk...? - le respondo con tono profesional mientras con habilidad me quito la chaqueta, no sin antes sacar la petaca y meterla en el bolsillo trasero de los vaqueros y quedarme en la zurda con mi viejo bloc. Antes de deshacerme de la prenda le ofrezco la mano. - Podemos hablar del papeleo mas tarde. Anoche ya deje varios mensajes a mis superiores al mando. Por cierto puede llamarme Daniel. ¿Compañera...Um?

Después de pensarlo un segundo dijo:

-Llámeme Chana.

Le dio la mano y le mostró dónde estaba el guardarropa.

-Me temo que el papeleo tenemos que iniciarlo ya. Antes de ir más lejos necesito su firma en una cláusula de confidencialidad. Por favor, venga conmigo y le presento al resto del equipo.

La secretaria abrió la puerta de una sala acristalada de espectaculares vistas. A un lado había una barra con una máquina de café y pastas.

En una mesa de reuniones blanca con cómodas sillas de diseño esperaba Leah sentada tomando su café. Tras Chana entró Daniel.

-Daniel Mallutz, le presento a Leah Tautou. Si pasan la dura prueba del papeleo -incluso sonriendo se notaba que era seria- formaremos un equipo de operaciones.

Si me disculpan, en unos minutos estoy con ustedes y empezamos.

Sin dar tiempo a más, desapareció por donde había entrado.

¿Tautou? Suena a galo. Francés antes que ingles entonces.
Me aclaro la voz y doy pasos firmes hacia la mujer sentada y como a Chana le tiendo la mano.
Encantado de conocerla...agente Tautou - trato de sonar lo mas cortes y seguro en este idioma del demonio que aun no domino - Soy el agente Mallutz. Daniel Mallutz como nos ha presentado la ...agente Zhychuk. Pertenezco a la Interpol. Departamento de Grandes Delitos Financieros.

Le extiendo la mano con la seriedad del caso.

- Mucho gusto agente, soy Tautou de la Gendarmeria en Niza, y al parecer el CSB esta trayendo gente multidisciplinaria.

Tomo cafe de mi taza agradeciendo el gusto de Chana, no tenía idea de que ella era agente tambien, pensaba que solo era una secretaria o recepcionista. Al menos tiene buen gusto.

- Asi que Interpol..., grandes delitos..., ya veo.

No sabia que habia pequeños tambien, de seguro son titulos rimbombantes de la ultima administracion.

- Primera vez en Francia? digo por el acento. Seguro estas tan perdido como yo. Hacia años que no venia a Paris.

- Pero tu acento no me dice de donde eres, de donde eres?

Trato de sonar agradable mientras me hago una idea del caracter del que puede ser mi nuevo compañero. Si mi vida dependera de el.

Dios esto debe valer la pena