Cuando vio aquella mirada de terror en los ojos del piloto, Sonia supo que la iba a perseguir en sus sueños por mucho tiempo. Puede que hasta mientras estuviera despierta. Aún así, había hecho lo que tenía que hacer. Si se distraían por un momento o la Pegasus aterrizaba alejada,podían perder a los dos responsables del taladro y lo último que podían permitirse era que los bichos los cogieran. Había sido de las decisiones más duras de su vida... pero había que hacerlo.
- Haced lo que sea para volar el dichoso taladro, pero no nos arriesguemos a perder nuestro transporte también, así que usaremos la bomba nuclear como última opción - ordenó, mortalmente seria, en lo que se volvía a los cuerpos del mecánico y el piloto y trataba de levantar al primero tras quitarles las placas identificativas -. Que alguien me ayude a meterlos dentro del taladro. No quedará rastro de ellos y será un funeral infinitamente más dignos que dejarles aquí con los sesos desparramados. Daos prisa.
Con la voz entre quejosa, quebrada y balbuceante, tirado en la nieve, con algunos trapos sucios de sangre taponando las heridas, James cantaba algunas viejas canciones irlandesas. ¡En gaélico!
Go n-éirí an bóthar leat.
Go raibh an chóir ghaoithe i gcónaí leat.
Go dtaitní an ghrian go bog bláth ar do chlár éadain,
go gcuire an bháisteach go bog mín ar do ghoirt.
Agus go gcasfar le chéile sinn arís,
go gcoinní Dia i mbosa a láimhe thú. *
En su sueño, brindaba con una jarra de cerveza en un extraño antro que era una mezcla de taberna irlandesa y cueva de bichos. Varios de los muertos estaban ahí presentes, así como algunos warriors (uno tenía sangre suya manchando sus espolones), algunos tankers, el sargento Wimger, Speedy (que parecía bastante más contento de lo que nunca había estado en esa misión), Mckeyn, Evans y, en la oscuridad de la barra, un enorme engendro medio visible medio oculto -que también cantaba al estilo irlandes, con su jarra de cerveza entre los quelíferos- que no podía ser otra que Su Majestad. Todos cantaban a varias voces y alzaban sus jarras.
*Que el camino vaya a tu encuentro. Que el viento esté siempre a tu espalda. Que el brillo de sol caliente tu cara, y la lluvia caiga suave sobre tus campos. Y hasta que nos encontremos de nuevo, que Dios te tenga en la palma de su mano.
Bockman golpeó el suelo, aquel infante se había ido y no había vuelta atrás. - Wimger ha muerto. - Con esas palabras el artillero se levantó dejando el cadáver sobre el frío suelo y ya miró al rededor. Todos sus compañeros ya estaban en el lugar del taladro y comenzaban a buscar opciones para hacerlo explotar. - Sargento, permiso para meter el cadáver de Wimger en el taladro, ya que no lo podemos llevar en la lanzadera que al menos no lo dejemos para que los bichos se lo coman. - Era más de lo que habían podido hacer para el resto de muertos, pero al menos si se pudiera hacer para uno sería bueno para la moral. Ya tras el momento comenzó a preocuparse por sí mismo, estaba herido, mucho y sin duda necesitaría asistencia médica de importancia. Pero no quería dar más trabajo al médico pues había infantes en peor situación. Agarró la morita y se sentó en el suelo esperando órdenes. No iba a estar en vigilancia pues no podía con su cuerpo, necesitaba agarrar aliento por si necesitaban volver a moverse.
Veo que James está estable y entonces escucho las indicaciones que han dado, por lo que intervengo en el momento:
- "Usen las cargas nucleares. Así si atraemos algún bicho en nuestra huida, lo volaremos con el taladro. Lo accionaremos cuando ya nos hayamos largado."
Luego escucho las palabras de Bockman, a las que me niego con severidad:
- "Negativo. Nos llevamos el cuerpo. Merece una sepultura más digna que este lugar. Si no quieres hacerlo tú, encontraré a quien lo haga o lo haré yo mismo."
Wimger murió porque su maltrecho cuerpo no resistió el intenso frío del planeta. Aun así, su familia merece saber que los restos de su ser querido descansan con los honores de un caído en batalla y no nos deshicimos de su cuerpo con presura e indignidad solo por correr más rápido.
El explorador se mantuvo a la espera, vigilando el horizonte, esperando algo que en su opinión ya estaba tardando mucho en llegar: una violenta venganza de los bichos por la muerte de su reina.
"Pero la muy hija de puta intentó llevarme con ella..." pensó el explorador con rencor. Pero al igual que sobrevivió en el fuerte a la llamarada de un bicho tanque, y a la locura después, había sobrevivido a aquel asalto mental a la desesperada.
"No me vais a matar, hijos de puta... No podéis matarme."
Había escuchado los disparos desde la distancia, junto a Wallace. Ahora veo los cuerpos tendidos y me cuestiono algunas cosas sobre la manera en que hacemos las cosas, no somos nada para nuestros superiores, inmediatos o lejanos. Recuerdo al Teniente, ejecutado de la misma manera.
Mientras montan el dispositivo me ocupo de echar un ojo a los heridos. Sólo O'Flaggerty parece de cierta gravedad así que me avoco a la tarea de limpiar las heridas y asegurarme de sellar bien el traje para que no me suceda lo mismo que con Wimger.
El escuadrón Fox estaba de nuevo reunido, o al menos lo que quedaba de él, habían perdido ya a 4 hombres, y los cadáveres de tres de ellos habían quedado en las profundidades de Galdonia VI y quizá nunca mas volverían a ser encontrados. Solo los restos de Wimger podrían tener un merecido descanso; aunque solo si lograban ser rescatados.
El enemigo ya no daba señales de vida y los alrededores se mantenían de cierto modo en calma. Una calma que solo era perturbada por la presencia de los cuerpos de los tripulantes de los taladros quienes eran arrojados al fuego con ciertas dificultades por la sargento Ramírez. Con ello, tal como se esperaba, una vez destruido el taladro, no quedaría nada.
El crujir del metal al quemarse también perturbaba el silencio en el que se encontraban ahora, aunque en la realidad le daba un toque melancólico a la escena. Allí estaban ellos de pie en la nieve que se acumulaba sobre la superficie de aquella roca helada esperando por ser rescatados. Frente a ellos, el inmenso taladro, a vísperas de ser demolido, se incendiaba lentamente, casi como si se tratase de una pira mortuoria. El final de su misión había llegado prácticamente a su fin, y sin duda alguna, era el final mas exitoso y menos agradable de todas sus aventuras juntos.
Todos: Disculpen la tardanza, estoy tendiendo mucho trabajo últimamente.
Wallace: La primera tirada realmente debería ser de Demoliciones o de conocimiento tecnológico, incluso de física. La segunda está bien. Te tomaré la primera tirada como conocimiento tecnológico pues me parece es lo que mas se acerca a la habilidad con la que tiraste.
Bockman y Burnette: He estado revisando mis notas y me doy cuenta que he estado equivocado. Bockman solo tiene ya dos granadas HE, solo eso. Burnette por su parte solo tiene 5 de fragmentación y una HE. En total, ustedes dos juntan 5 de fragmentación y 3 HE. El detalle probablemente está en que se han estado pasando granadas durante todo la misión. Sus compañeros tienen algunas granadas mas dispersas que curiosamente no usaron en medio del intenso combate.
Burnette: Las granadas M-902 son justamente granadas de fragmentación.
Todos: Si van actuar para destruir el taladro, tienen que darse prisa, se supone los que vienen por ustedes no saben nada al respecto.
Todos: Si siguen la ordenes del sargento mayor (que deberían hacer), hay que meter la carga de demolición dentro del taladro y allí armarla rápidamente para no quemarse vivos. La tarea es difícil por el calor, los que trabajen en ello deben tirar concentración con una DC 18 (el fallo confiere penalizadores), y luego, para montar la carga, al igual que siempre hay que usar demoliciones, la DC será también de 18.
Knowledge (Technology): Consideras que hacer explotar el núcleo podría producir una explosión demasiado letal para ustedes.
Technical Structural: Consideras que con una granada HE bien colocada, sería suficiente para desestabilizar y hacer estallar el núcleo del taladro en pocos segundos.
Nota: Tu personaje es consiente de que necesiten un sistema de detonación para poder alejarse.
-Atención escuadrón Fox, les tenemos información. La Pegasus ya está en camino; llegará a su ubicación en 10min-. Sentenció la voz detrás de las comunicaciones, si querían volar el taladro, era mejor darse prisa.
Respondo al Mando de la Flota:
- "Enterado, Central. Las órdenes han sido cumplidas a rajatabla. Misión cumplida. Gawain fuera." -
Intento ocultar en mi voz el profundo desagrado que siento debido a lo que ha sido obligado hacer. Después le comunico al Sargento Mayor Focker:
- "Señor, confirmada extracción. La Pegasus está en camino. Llegada en diez minutos, Señor." -
Y justo en esa maldita situación está Sonny ausente. Vendría bien que estuviese de vuelta a la realidad, pero allí están ellos... presenciando el incendio del talado, tratando de encontrar un plan para hacer estallar ese maldito trasto y poniendo su vida en peligro una vez más.
Intenta concentrarse en lo que tiene delante.
-Bien... con una HE bien colocada tendremos suficiente, pero hay que montar un sistema de detonación a distancia o nos volaremos todos.
Piensa en que tienen 10 minutos de margen para hacerla estallar... en realidad menos porque si la explosión coge al transporte, están acabados.
-Hay que ir rápidos.
Motivo: Tactics
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+5)=24
Motivo: Concentración
Tirada: 1d20
Dificultad: 18+
Resultado: 11(+2)=13 (Fracaso)
Motivo: demolition
Tirada: 1d20
Dificultad: 18+
Resultado: 10(+10)=20 (Exito)
Motivo: Concentracion accion
Tirada: 1d6
Resultado: 4
A ver que tal la concentración...
Además lanzo tactics para saber donde colocar la granada... (creo que era esa la que me dijiste la última vez...)
Burnette observaba cómo Billy intentaba encontrar la mejor manera de volar aquella cosa, y tras hacer inventario con Hightower de sus granadas, mostró a su compañera de lo que disponía.
- A no ser que el Sargento Mayor tenga otra idea, Bockman y yo podemos bombardearlo desde lejos con nuestros TripleGL, eso provocaría la detonación, ¿no?
La verdad era que todo lo que lanzaba el artillero eran conjeturas, ya que si bien había demostrado ser letal contra los bichos, las demoliciones planificadas le resultaban algo confusas.
No era nada agradable el tener que mover los cuerpos muertos del mecánico y del piloto, especialmente si eras la persona que les había volado la cabeza. Pero Ramírez le echó huevos y lo hizo sin rechistar ni decir nada, simplemente cumpliendo con su deber. Una vez hecho, se dio la vuelta, notando y escuchando cómo el taladro ardía y crepitaba.
- Ponte con la carga entonces, Billy - ordenó, ya mosqueada -. Ya oísteis al sargento mayor, quiere que la usemos. Sonny, ayúdale. La Pegasus estará aquí en 10 minutos, ya lo habéis oído. A moverse, ¡venga!
"A ver si podemos salir de una puta vez de aquí ya."
-Si usamos la carga nuclear, la detonación será tan potente que nos podremos en peligro innecesariamente. No recomiendo que la usemos. El taladro ya dispone de su núcleo de energía nuclear...
Está segura al 100% que usar la carga puede suponer el desastre total para todos ellos y más teniendo heridos. No quiere contradecir las órdenes, pero si puede dar su opinión sobre el asunto.
-Si tengo que usarla, la usaré... pero tened en cuenta eso.
Miro a Billy y me acerco a ella para hablarle:
- "Quiero que uses la carga nuclear y detonaremos cuando ya estemos bien alejados pues no podemos permitirnos que quede lo suficiente del taladro, debe desaparecer completamente y no lograremos eso con granadas. ¿Puedes poner la carga y que no se detone antes de lo que deseamos?"
Preparo el agua que tengo para rociarlo sobre la técnico y hacer así que el calor no le afecte tanto al momento de trabajar.
- "Eso, o que se active ante una determinada cantidad de vibraciones, una trampa explosiva, de ese modo acabaremos con cualesquiera bichos que puedan acudir al taladro y estaremos a salvo un tiempo más, hasta que llegue nuestro transporte." -
Tras dar las granadas HE que le quedaban al artillero, a Brunete, Bockman suspiró se echó la morita a la espalda y recogió los cargadores y granadas que tenía Wimger. Aún no habían terminado y cualquier cosa podría ser útil en el último momento. - No hará falta sargento, terminaré lo que empecé y lo llevaré hasta la nave. Tampoco es que pudiera luchar mucho en su condición, parecía que una ráfaga de viento pudiera matarlo. se posicionó al lado esperando a que llegara la nave, no quería tener que cargar demasiado tiempo pues no podía apostar en que sus fuerzas fueran a aguantar hasta el final.
Escuchó las ideas de sus compañeros, no le gustaba la idea de la trampa de Gawain pues si fallaba el taladro sería de los bichos y la misión habría fracasado en parte. Arriesgarse a que dispararan las granadas desde lejos sería difícil y el sargento quería usar cañones láser para matar moscas. Pero él no podía decir nada pues no sabía cual era la mejor solución, para eso estaba Billy que ya estaba con ellos entera.
James tuvo un ligero instante de consciencia, al notar que las manipulaciones sobre su cuerpo habían acabado. Tenía menos frío, pero eso dolía. Alrededor, en cambio, el movimiento se notaba frenético, y las palabras que escuchaba por el casco estaban cargadas de tensión. Sombras confusas pasaban por su línea de visión. Todo le daba igual, quedó tirado donde estaba, mirando solamente el pálido cielo de Galdonia.
Me mantengo atento y listo para asistir a los infantes que ingresen a colocar el artefacto dentro del taladro. Es posible que sufran desconpensaciones por el calor y hasta quemaduras.
Mkoll seguía a la espera de que hicieran algo con el taladro. Estaba deseando largarse de allí. Su dolor de cabeza no iba a menos, y le estaba empezando a preocupar mucho. ¿Y si aquella maldita reina le había hecho algo en la cabeza y él no era consciente de ello? Le entraban escalofríos sólo de pensar en las cosas que podría tener dentro, desde heridas, a algún impulso raro.
"Sólo 10 minutos más... En 10 minutos estará el transporte y volverás a territorio seguro..."