Partida Rol por web

El oro y el acero

Escena Tomás "Caracortada"

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04/01/2022, 16:17
Narrador

Salí a la calle y me dirigí pensativo a...

Notas de juego

Sección 44

Haz una prueba de Callejeo.

Si sacas la tirada por más de la mitad, pasa a la sección 239.

Si sacas la mitad o menos de su valor, pasa a la sección 312.

Si no sacas la tirada, pasa a la sección 324.


Excelente narración Eyra, de verdad. ¡Da gusto leerte! Siento que la narración del librojuego sea tan parca, pero es como la ha hecho Ricard Ibáñez y quiero ser fiel a su trabajo.

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04/01/2022, 19:33
Tomás "Caracortada"

Tras la impresión que habíame llevado al ver el estado en el que habían dejado a mi hermano, salí de allí más blanco que la cera que ardía en honor de los santos, sin despedirme del cura ni dejar algunos dineros de esos que dicen que ayudan a los pobres pero que, en cambio, solo engordaban a los ensotanados, ya fueran de púrpura o de negro que lo mismo daba.

No recuperé el color hasta que no me vi bajo los cielos de la imperial y coronada y, tras respirar el aire para recuperar calma y sentido, decidime por fin callejear un poco a ver si encontrábame con alguien que me pudiera dar noticias sobre lo acontecido con mi hermano.

Y en ello estaba pensando, quizás con demasiado empeño, que o bien no encontraba a ninguno que me diera razón de lo que buscaba o simplemente aquel no era mi día de suerte.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Paso a sección 324.

Se agradecen tus palabras; siempre motiva que alguien disfruta con lo que se escribe. Y no te preocupes por la narración que así está bien. Ni oses tocar una sola palabra de lo que Ricard escriba XDDD -Esto último por supuesto es broma-.

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05/01/2022, 18:42
Narrador

Me fue la suerte esquiva, que no solamente no encontré quien del negocio me dijera ni media palabra, sino que tropecé con un bravonel conocido como Méndez el Lobero. Habíamos sido compañeros en Flandes y se tuvo que tragar que lo afrentara como cobarde y aún que le metiera una mojada en el costado cuando quiso que retirara mis palabras. Por desgracia, era hueso duro de roer y se salió con bien de la herida, y desde entonces me andaba buscando para equilibrar la cuenta.

Notas de juego

Sección 324

Haz una prueba de Buena fortuna.

Si sacas la tirada, pasa a la sección 281.

Si no sacas la tirada, pasa a la sección 90.

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07/01/2022, 10:10
Tomás "Caracortada"

Aquel tenía que ser por fuerza uno de esos días en los que era mejor no levantarse del catre, que por incómodo que éste fuera aún era peor lo que esperaba fuera. Pues apenas había callejeado lo suficiente, sin encontrar nadie que diérame razón de lo acaecido, cuando confirmose mi sospecha de que la suerte no iba a caminar conmigo ese día.

Que allí ante mí tuve la desgracia de encontrarme al Lobero; un tipo que desde que habíale dado mi opinión sobre él buscaba con denuedo devolverme el favor. Y no eran precisamente de esos favores que uno quisiera recibir, que el tal Méndez de puro rencor buscaba restituir su honor perdido a costa del mío.

Bufé de pura frustración pues tal como mirábame la diosa Fortuna esa mañana, tan mal como hacíalo el Lobero, a bien seguro que acabaría yendo de visita al matasanos. Eso con suerte que bien podía yo hacerle compañía a Álvaro en su reposo.

- Tiradas (1)
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08/01/2022, 12:59
Narrador

El Lobero alzó entonces los ojos, me reconoció al instante y sonrió mostrando sus dientes torcidos. Se levantó al punto de su silla, echando mano a su acero gritando algo, no recuerdo qué. Algo sobre desmirlarme al punto o darme duecientas mojadas. Lo cierto es que no le presté mucha atención, que cuando se pelea, no se habla.

Notas de juego

Sección 90

Si el personaje lleva pistola y quieres usarla, ve a la sección 210.

Si por el contrario prefieres que resuelva el negocio con arma blanca, para andar parejo con el Lobero, ve entonces a la sección 320.

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10/01/2022, 11:18
Tomás "Caracortada"

Y allí estaba el Lobero, mirándome con el fuego en los ojos y gritando cualquier estupidez que yo ni entendí ni quise entender, que para el duelo que se avecinaba de poco servía la dialéctica y sí el acero.

Porque no iba a tener yo la buena suerte de zafarme de aquel enfrentamiento y tampoco era yo de los que dan media vuelta para evitarlo. Que si al Lobero habíale llamado cobarde en su momento no iba a ser yo ahora quien le diera excusa para devolvérmela de esa forma. Mejor cruzar aceros y dejarse de zarandajas y así terminar de una vez con aquella historia.

Desenvainé pues la espada en una mano y en la otra cogí la daga, que una cosa era tener seguridad en lo que uno hacía y otra lanzarse a lo loco.

Notas de juego

Paso a sección 320

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10/01/2022, 21:49
Narrador

El Lobero, al ver que desenvainas los aceros, se encaró contigo y blandió su acero.

Notas de juego

Sección 320

Haz una prueba de Esgrima.

Si sacas la tirada, pasa a la sección 379.

Si no sacas la tirada, pasa a la sección 175.

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10/01/2022, 23:03
Tomás "Caracortada"

Sin mediar más palabras pues de nada servía a esas alturas en las que la confrontación estaba decidida, había llegado el tiempo de que fueran los aceros quienes hablaran.

Mirando al Lobero con cara de pocos amigos dispúseme a demostrarle, una vez más, quién tenía la razón. Pues bien sabía que lo que habíale dicho tiempo atrás era bien cierto. Aquel desgraciado era un cobarde y sobre todo un fanfarrón.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Siento el post tan cortito :/

Paso a la sección 379

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11/01/2022, 16:20
Narrador

Paré el torpe ataque del bravonel y le entré limpiamente por los pechos, metiéndole en el cuerpo un buen palmo de acero. Me miró boquiabierto, sorprendido sin duda de lo rápido que había ido el lance, y cayó como un fardo. Miré desafiante a mi alrededor, por si alguno chistaba, limpié la hoja en el cuerpo del caído y me fui a grandes zancadas, con la cabeza bien alta. Aún me quedaban preguntas por hacer. Por suerte, sabía yo de alguien que a buen seguro me las contestaría.

Notas de juego

Sección 379

Pasa a la sección 147.


Siento el post tan cortito.

No te preocupes, no pasa nada.

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11/01/2022, 16:22
Narrador

Si tienes preguntas, has de ir a quien tiene todas las respuestas. Y bien sabía yo que el que tal era en la Villa no era otro que un viento llamado Rodrigo, más conocido por el mal nombre de el Rijoso. Lo del mote le viene por un chirlo o cicatriz que naciéndole en el lado izquierdo de la boca le muere a media mejilla, dándole el aspecto de alguien que está siempre sonriendo de través. Nada más lejos de la realidad, que no es el Rijoso amigo de risas ni bromas, que es natural en él lucir ceño fruncido. Y no estaba ese día del mejor de sus humores, cuando lo encontré en el figón de maese Viruelas, sentado en mesa apartada, masticando un condumio grasiento y mal cocinado, tapándose la boca con una mano mientras se lleva el bocado al morro con los dedos de la otra.

Notas de juego

Sección 147

Si el personaje huyó del combate con el Lobero o ganó disparando su pistola ve a 315.

Si por el contrario ganó al bravonel con limpieza ve a 206.

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11/01/2022, 16:23
Narrador

El Rijoso no me decepcionó, que es hombre con muchos y buenos contactos, que no se mata un piojo en la Villa sin que él se entere. Normalmente cobra, y no poco, por dar información, pero de cuando en cuando la da a cambio de nada a los que sabemos usar como corresponde la toledana, que no es mal cosa sembrar si luego se quiere recoger la cosecha. Bien sabía yo que había media docena de espadas en el tugurio que saldrían de sus vainas a defenderle si alguien trataba de ponerse violento con él, y no porque les pagase, sino porque les convenía hacer tal.

Me dijo el Rijoso que se tenía por cosa cierta que a mi hermano lo habían matado por orden de don César Madrazo, marqués de Villascusa. Al parecer el amo de mi hermano, el conde de Peñaranda, andaba en pleitos y litigios con el tal don César, que no era tal cosa muy buena para la salud, y para muestra dello, solamente había que hacer memoria: Otros litigios que había tenido el Marqués, en los que se tenía por cierto que perdería, se habían saldado con un desafortunado accidente por parte del litigador, que en esta Villa y Corte una frase dicha a destiempo por un desconocido equivalía a desnudar presto el acero, y no era mal truco, muy usado por los matachines, para forzar así una pelea con la que despachar por la posta al que se nos había encargado eliminar. Si los pleiteantes eran viejos, mujeres, o gentes que carecieran de cuajo para meter mano al acero, tenía costumbre el marqués de amedrentar a la servidumbre y a la familia del amo, que no hay como golpear donde más duela para que se sienta más. Así que, resumió el viento, no sería la primera vez que el tal marquesito despachara por la posta a un criado, si así le convenía para mandar aviso al amo.

Con todo, algo raro había en el negocio, que me confesó el Rijoso que no era ése pleito uno de los que se ignora quien puede ganar o perder. Las cosas estaban tan claras a favor del marqués que muy astuto tenía que ser el legüeyo que le quitara la razón de las zarpas, que ya podía estar disfrutando de las propiedades en litigio si le pluguía. No tenía, pues, que forzar a su contrincante a abandonar el litigio, e incluso me insinuó que quizá fuera algo más personal, un aviso de que no se metiera donde no le llamaran, más que otra cosa. Sea como fuere, el negocio había parido un cadáver, y mis preguntas no habían terminado. Hora era, sin duda, de ir a indagar a los barrios altos, del mismo modo que acababa de hacerlo en los bajos...

Subí dos dedos al ala de mi sombrero, a manera de saludo, y me dispuse a irme, cuando el Rijoso dijo, como al descuido:

-Por cierto... ¿Anda vuesa merced escaso de fondos? Negocio tengo del que podría sacar buena tajada, y bien sencillo es de solventar... no ha de haber sangre, o muy poca. Voacé decide...

Notas de juego

Sección 206

Si decides que el personaje rechace el trabajo y prosiga la venganza contra el asesino de su hermano, ve a la sección 362.

Si por el contrario piensas que algunos reales con los que llenar tu menguada bolsa no serían mala cosa, ve a la sección 79.

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12/01/2022, 12:19
Tomás "Caracortada"

No esperábame otra cosa que darle fin a aquel ridículo cruce de aceros de manera rápida y fácil. El Lobero ni lo vio venir, que el pobre ni era ducho con la espada ni tenía el temple necesario para hacerme frente. Cayó sin decir palabra y con los ojos desorbidatos, pudiera ser de incredulidad o quizás porque al final de sus días habíase dado cuenta de lo estúpido que había sido.

Fuera lo que fuera salí de allí victorioso, con la cabeza alta y la espada limpia de sangre envainada, que nadie habíase atrevido a rechistar, mas si cabe porque todos los presentes habíanse dado cuenta que el provocador no había sido otro que el mismo muerto.

Encamineme directo a quien sabía que daríame información si es que la había, que no en vano el Rijoso era conocido por conocer hasta el más mínimo detalle de lo que acontecía en la villa y corte. Si él no podíame dar razón de lo acaecido a mi hermano nadie entonces lo haría.

Y buena información me dio. Una que más que al pobre Álvaro atañía a señoritos, de esos que prefieren que los pobres paguen las culpas de sus dueños y señores. La tarea para mí complicábase en exceso pues ahora veíame en la tesitura de tener que rascar información por los barrios más pudientes. Y allí no es que me moviera yo tan bien como lo hacía por los bajos.

Asunto feo a fe mía... Pero lo más sorprendente de todo era que el Rijoso no habíame pedido nada a cambio de esa información. Al menos por el momento.

Agredecile su buen hacer y dispúseme a buscar otro tipo de información a la que Rodrigo habíame dicho cuando detúvome la voz del susodicho. No deberíame haber sentido sorprendido, pues tarde o temprano sabía que tendría que pagarle el favor, pero no esperaba que esperase hasta el último minuto antes de que me fuera para hacerme una proposición que, de eso estaba yo bien seguro, no sería tan fácil como él la pintaba.

Pero necesitaba los dineros, que uno tiene también que vivir y si no puede hacerlo a cuerpo de rey al menos había que intentarlo.

Volví la cabeza y mirelo con los ojos achinados, que de él poco me fiaba y no tenía porqué ocultarlo.

A fe mía que debería rechazar la propuesta... —dije cauteloso—. Que a buen seguro el trabajo no será tan fácil como me lo pintáis. Pero —y ahí venía el golpe de cruda realidad— los dineros no me vendrían nada mal. Decídme pues qué queréis que haga.

Notas de juego

Paso a la sección 79.

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13/01/2022, 11:49
Narrador

-Hay una damita extranjera que gusta de la compañía de un viejo tullido, en lugar de frecuentar la de jóvenes que la harían más feliz. Me dijo el Rijoso. El negocio consiste en espantar al lisiado para que deje el campo libre al que me ha encargado tal trabajo. A cambio voacé podrá elegir entre cobrar veinte reales, acuñados en moneda buena, o en recibir un traje de pisaverde, que no hace ni un día afanó un descuidero de dedos ligeros. Que si os vais a mover en ciertos ambientes, mal podréis hacerlo con las ropas de valentón que soléis llevar. ¿Os hace?

No es que me apeteciera darle un espanto a un pobre tullido, pero los dineros y la necesidad son una cosa, y los escrúpulos, un lujo para quien pueda permitírselos. De todos modos, me tomé un tiempo en decidir.

Notas de juego

Sección 79

Si quieres que el personaje lleve a cabo el trabajo, pasa a la sección 277.

Si prefieres que no haga tal cosa (pues la venganza de su hermano no se merece tal demora) ve a la sección 362.

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14/01/2022, 13:12
Tomás "Caracortada"

Algo darale el tullido que no pueda darle cualquier jovenzuelo —dije con cierta sorna, pues bien sabido era que a muchas mujeres movíale más el dinero que cualquier apariencia.

Aquel trabajo no me hacía demasiada gracia, que andar asustando a pobres desgraciados no lo consideraba yo demasiado «honorable», pero tampoco podía hacerle ascos al encargo que de dineros no andaba yo muy abundante precisamente.

La resignación, al igual que la necesidad, decidieron por mí y apresteme a aceptar el encargo. El pago que recibiría ya era otro cantar que si bien necesitaba con urgencia las monedas lo que el Rijoso decíame no estaba carente de verdad. Que moverme por esos barrios refinados con las ropas que yo llevaba no iba a reportarme demasiada información.

Pero un traje de pisaverde... Eso eran palabras mayores que aunque uno no fuera muy mirada dependiendo para qué cosas, ir de petrimetre por la vida no me complacía en exceso. Eso sin contar con mi talante un tanto arisco y taciturno y ponerle aire afeminado no sabía yo si sería capaz.

Todo fuera por descubrir algo más sobre el asunto de mi hermano.

Está bien. Haré el trabajo y me quedaré con el traje a cambio —acepté el ofrecimiento pensando que, a una malas, siempre podría malvender los ropajes.

Notas de juego

Paso a la sección 277 y que el Altísimo me proteja.

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16/01/2022, 19:35
Narrador

Y así fue como me encontré rondando la fuente del Acero, que para los que no conozcan los alrededores de la Villa les diré que está pasado el Manzanares, al otro lado del puente de Segovia. Son sus aguas muy saludables, o eso dicen, y a ella acostumbran a ir las damas, la mayor de las veces para, con la excusa de mirar por su salud, dejarse querer por sus galanes y por los pisaverdes que tal lugar frecuentan. Andaba bien avisado el Rijoso, que me había dicho que sobre esa hora aparecería una joven italiana muy hermosa, que reconocería por ir vestida de blanco, acompañada por el tullido al que había de amenazar. Mi paciencia se vio por fin recompensada cuando la vi llegar en carroza abierta acompañada de un extraño personaje, un hombre de pelo y barba blancos con una extraña máscara de plata tapándole el medio rostro izquierdo. Los observé a distancia y se me cayó el alma a los pies al ver que el hombre era tullido tanto del brazo como de la pierna izquierdos, que había de apoyarse con no poco trabajo en un bastón para arrastrar la pierna mala y su mano falsa era una pieza mecánica de metal. Se me revolvieron las entrañas, pues si verdad era que el trabajo era fácil, escaso es el honor que comportaba

Notas de juego

Sección 277

Si decides que el personaje lleve a cabo el encargo después de todo, ve a la sección 234.

En caso de que el personaje sepa el nombre del amo de su hermano y optes porque rechace el trabajo, ve a la sección 362.

También puedes optar por una solución intermedia, haciendo que el personaje le dé un aviso al tullido sin usar la violencia. En tal caso ve a la sección  119.

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17/01/2022, 12:21
Tomás "Caracortada"

Allegueme al lugar que el Rijoso habíame dicho, uno que no estaba yo muy acostumbrado a frecuentar pues nada había en él que me llamara la atención. Que las damas con las que alternaba poca finura se gastaban y los hombres, más bravucones que remilgados, no gustaban de perfumes ni de pasear su afeminamiento por las calles.

Poco tuve que esperar hasta que vi, llegados en carruaje descubierto, a los que andaba buscando y, al ver al pobre hombre, un arrepentimiento de haber aceptado aquel encargo carcomiome por dentro. Necesitaba los dineros, o el traje en este caso, pero asustar a un pobre viejo tullido y maltrecho, quizás por alguna batalla o fatal accidente, no parecíame ni moral ni noble.

Que a saber qué contubernio mantenían aquellos dos y si de mutuo acuerdo ayudábanse entre ellos. Ella cubriéndose de halagos, regalos y joyas y él siendo atendido con un cariño que poco encontraría en otra mujer. Pero había dado mi palabra y tendría que cumplirla, que no era yo dado a faltar de ella porque era lo único de valor que me quedaba.

Mas lo que tenía en mente no era hacer daño al caballero que bastante ya tenía el pobre encima para que yo le añadiera nuevos males.

Acerqueme hasta ellos una vez detenido el carruaje mientras pensaba qué decir para prevenirlos de lo que sucedía sin montar escándalo ni que alguien saliera herido o perjudicado. Quizás simplemente el que había hecho el encargo.

Notas de juego

Paso a la sección 119.

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18/01/2022, 17:17
Narrador

Resolví darle aviso en un aparte al tullido, más para que andara precavido que para insultarle. La cuestión estaba en si sabría hacer tal cosa, que soy yo hombre más de hechos que de palabras, y al igual tratando de arreglar la cosa se estropeaba aún más.

Notas de juego

Sección 119

Haz una prueba de Cortesía.

Si sacas la tirada, pasa a la sección 285.

Si no sacas la tirada, pasa a la sección 168.

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20/01/2022, 12:12
Tomás "Caracortada"

Mientras caminaba hacia el carruaje, sacudí el polvo de mi coleto después de estirarlo y  coloqueme bien el sombrero, que si quería que el tullido hiciérame caso un poco de buena presencia no estaría de más. Estrujábame la cabeza pensando qué podía decirle al pobre desgraciado para que se alejara de la moza, que por cierto hermosa era un buen cacho, porque yo de palabras andaba más bien excaso y mis galanteos iban más dirigidos a rameras y jóvenes sin oficio ni beneficio y no con damiselas de piel delicada y perfumes caros. O mis amenazas, que eran simples y dedicadas a hombres rudos y no pobres tullidos enamorados.

Incliné la cabeza llevándome la mano al ala del sombrero como saludo a la dama y me dirigí directo a hablar al caballero.

Discúlpeme vuesa señoría y escuchadme con atención. No pretendo dañarlos ni causarles mal alguno. Mas al contrario —dijo, tras un carraspeo que me ayudó a aclararme la voz y hacerla más firme—. Vengo a avisarle que en los mentideros se cuenta que alguien quiere su mal caballero. Algunos no soportan la bella compañía con la que se pasea y han jurado quitarlo a usted de en medio para despejar el camino.

Cerré la boca esperando que aquel pobre hombre me hiciera caso y saliera por patas de allí. Así habría cumplido mi encargo, ganado mi recompensa y nadie habría salido herido, aparte del orgullo del tullido y la bolsa de la damisela.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Paso a la sección 285.

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20/01/2022, 16:41
Narrador

Me fijé en que el pobre tullido trataba torpemente de llenar un jarrillo de agua del manantial para que su dama bebiera, y me planté a su lado en dos zancadas, agarrando su hombro y diciendo en alta voz:

-Dejad que os ayude caballero, que bien veo que os esforzáis en empresas que os vienen bien grandes. Dejadlas para otros más enteros...

Rieron los necios, cogiendo al punto mi soez ironía, y yo aproveché para susurrarle al oído al gentilhombre:

-Discúlpeme vuesa señoría y escuchadme con atención, que soy hombre alquilado. No pretendo dañarlos ni causarles mal alguno. Más al contrario. Dijo, tras un carraspeo que me ayudó a aclararme la voz y hacerla más firme. Vengo a avisarle que en los mentideros se cuenta que alguien quiere su mal caballero. Algunos no soportan la bella compañía con la que se pasea y han jurado quitarlo a usted de en medio para despejar el camino. El mío es el primero de los avisos. Cuidaos y recelad.

Me miró con rabia un segundo, aferrando con tal fuerza el bastón que creí que me golpearía con él. Luego la comprensión inundó su ojo bueno, hizo apenas un gesto de asentimiento con la cabeza, señal de que se daba por bien enterado y me susurró a su vez con voz queda:

-El vizconde de Medardo os está agradecido...

Sin transición se soltó con gesto brusco de mi brazo y se alejó con toda la dignidad de la que era capaz, que a fe mía que no era poca, que he visto gentes con sangre de reyes en las venas mostrar bastante menos. Yo a mi vez me alejé de allí, que ya estaba hecho el negocio, y solamente me faltaba cobrar por él.

Notas de juego

Sección 285

Pasa a la sección 228.

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20/01/2022, 16:47
Narrador

...

Notas de juego

Sección 228

Si el personaje hizo el trabajo en busca de información, pasa a la sección 230.

Si se le encargó a cambio de un pago, pasa a la sección 211.