Partida Rol por web

Construido como una gran pirámide, el templo está rematado con una gran cúpula rodeada por torres de cristal. Una gran torre de conco pisos, erigida en mármol color azul pálido, domina la fachada oriental de la pirámide. De noche, toda la estructura brilla con incontables llamas y un enorme símbolo reluciente de Boccob rota lentamente sobre la cúpula central.

Vaya...

Los magos siempre han sido rebuscados y extravagantes, no debería sorprenderle que los sacerdotes de la magia también lo fueran. Durante su viaje no había oído hablar a nadie sobre ninguna torre de magia, o gremio de hechiceros en la ciudad, así que tal vez lo mejor para empezar sería hablar con los sacerdotes.

Subió con agilidad las escaleras de piedra hasta llegar a la puerta. Seguro que un mago se habría hecho lucir abriéndola con su mente en lugar de sus manos, pero ese no era el caso.

Empujó las pesadas puertas y tras un rápido vistazo localizó a alguien que pareciera trabajar allí y se acercó.

Hola. Dijo en voz baja.

...

De repente se quedó mudo. No podía hablar de las Montañas Brumosas, ni del libro, ni... Ya era tarde, si inventaba alguna mentira su mente sería un libro abierto para los sacerdotes.

Mi nombre es Phenios. Es aquí donde se reúnen los magos de esta ciudad? Vengo de otras tierras y no conozco vuestras costumbres, pero mi mente es despierta, mis manos ágiles y mis piernas rápidas. Deseo aprender a llevar mas allá mis poderes arcanos.

- Bienvenido a la casa de Boccob. Por tu pregunta te diré que has llegado al lugar indicado, no es concretamente este el lugar pero yo puedo indicarte como llegar al Gremio de Magos.

Es tan simple como visitar la torre azul de este mismo complejo. Continúa por medio del pasadizo de piedra y podrás acceder a él.

Está abierto a todo el mundo, a cualquiera que sea miembro de cualquier religión. Algunos dicen que resulta algo embarazoso, pero no tiene porqué.

Como puedes comprobar este templo cumple varias funciones en la ciudad, y algunas más que aún desconoces. Por favor, sigue el pasadizo que te indiqué y ahí llegarás a la torre.

Así lo haré, gracias.

Phenios continuó por el pasillo que le indicaron, sin mostrar interés en nada mas de lo que vio hasta llegar a las puertas del gremio.

Llamó a las puertas de la torre y las abrió con sus propias manos.

No es bueno cambiar de táctica ahora...

A sabiendas que lo que encontraría allí sería mas caótico y mágico que en las estancias anteriores, Phenios fue con determinación a hablar con alguien que pareciese importante.

Disculpe, ¿podría indicarme donde encontrar a algún responsable del gremio?

Una sorprendente escena se abre ante ti cuando abres las puertas que te indicaron.
Un hombre ya algo maduro está lanzando tres rayos electrizantes contra dos jovencitos y una muchacha poco agraciada.
Uno de los mucachos logra esquivar el rayo volviéndose invisible por unos instantes y este no acierta a dar.
El otro recibe el rayo pero parece rebotar contra algún tipo de armadura invisible del joven.
En cambio la muchacha logra parar el rayo única y exclusivamente con su fuerza telecinética.
Los tres rayos golpean y dan al techo y las paredes, y uno de ellos por poco se choca contra ti.

hmmm... tal vez este sitio sea demasiado para lo que yo buscaba. No importa, aquí no puedo acobardarme.

cuando los relámpagos cesan, me aclaro la voz insistentemente, tratando de captar la atención del brujo que lanzaba los rayos.

Disculpad que interrumpa vuestro entrenamiento. Mi nombre es Phenios. Vengo de río arriba con la intención de ponerme a vuestro servicio.

Tengo una mente despierta y la magia fluye por mis venas desde hace generaciones. Estoy seguro que podría aprender y seros de utilidad.

Vaya, vaya, así que aquí tenemos un nuevo miembro para el gremio.

Está bien, encantado, mi nombre el Mylor Orvid, soy el mago mayor de todo Tormentos Cristalinos, además del maestro gremial de los magos.
Veo que ahora sois cuatro, así que es un buen momento para que echéis un combate. Por qué no empiezas tú y nos demuestras de lo que eres capaz.
Katlen y tú iréis juntos, vosotros dos, ya sabéis lo que hacer.
Entonces Mylor se marcha de allí por una de las puertas de la dependencia y os deja allí solos a los cuatro.

Phenios se encuentra en un apreito, no conoce de nada a aquellos tipos, ni sabe que es lo que se espera de él, pero ve como se van cerniendo, cerrando el círculo, y como echan mano de sus bolsas de componentes de conjuro.

A su lado, la chica a la que han identificado como Katlen hace lo mismo, así que él prepara su arco.

Al ver que uno de ellos hace un movimiento brusco, los movimientos de Phenios se aceleran, como un autómata que reproduce una técnica perfecta y bien ensayada.

Tensa el arco y apunta a su rival mas cercano, el de la izquierda, con los dos ojos clavados en su presa. Ojo, mano y flecha se alinéan para coincidir en su enemigo. Pronuncia unas palabras arcanas mientras sus ojos y la punta de la flecha se incendian en un brillo carmesí justo antes de salir disparada para clavarse en el pobre desgraciado que está delante.

Tu arco se te escapa de tus manos y tus flechas también. Ambas salen flotando por el aire y tu carcaj también pero parece que lo tienes bien enganchado a tu espalda. 

Ves como el arco que está flotando sale disparado contra la pared y se rompe, la flecha lleva el mismo camino.

Tu cara es un poema, apenas tenías armas y cuando ves lo que ocurre te quedas demasiado impactado.

Entonces una voz, idéntica a la de Mylor se escucha retumbar por todas las paredes.

Esto es un gremio de magos y tu estancia aquí será para que aprendas a conocer tus dotes arcanas. Aquí no hay armas que no sea el poder de nuestra sangre, cabeza o inteligencia. Sólo podrás seguir aquí si estás dispuesto a atenerte a las normas. 

El combate será única y exclusivamente mágico, así que prepara lo que se supone que sepas hacer. Si veo que eres un miembro digno, te regalaré más tarde, un arco mejor que el que estás llevando ahora.

Phenios notó como la rabia le corría por las venas y se le enfurecían los ojos. Ese arco era mucho mas que una simple arma.

A punto está de dejarlo todo y volverse por donde ha venido, pero eso tampoco le serviría de nada.

-Parece que los magos sois iguales en todas partes, dice con los puños apretados, cobardes.

da unos pasos hasta ponerse alineado con su oponente y extiende su mano para lanzar un pequeño chorro de ácido mágico.

Un chorro de ácido brota de tu mano y sale directo contra tu oponente que parece rebotar en alguna extraña armadura invisible que posee. 
Entonces tu compañera toma tu misma idea y lanza un potente chorro de ácido contra el otro enemigo que parece volverse invisible para esquivarlo, pero la mujer hace un gesto con sus manos y el chorro vuelve por el mismo camino y estalla contra el supuesto invisible.

Ahora es el turno de tus enemigos, ambos se unen de la mano y te apuntan con el brazo que les queda libre. De pronto murmuran unas palabras y una extraña perla sale de su dedo y tras un pequeño "Bang!"disparan una especie de proyectil que va directamente a tu cabeza, entonces de nuevo tu compañera hace un gesto y desvía los dos proyectiles. Te sonríe y te guiña un ojo y te murmura.

Es de nuevo tu turno, muchacho, sorprendenos.

Phenios decide cambiar un poco le técnica. Sus habilidades mágicas nuca han sido muy especiales, así que tiene que recurrir a otro de sus trucos menores.

esta vez, conjura mas rápido mientras canaliza un soplo de aire frío de sus pulmones. Lo concentra en su man y...

Algo sale mal. El aire frío y el hielo no se canalizan bien y acaban en una explosión en su mano, que la deja dolorida, con el frío metido hasta los huesos y solo notando un hormigueo, con algunos cortes por el hielo mientras unas gotas de sangre caen por su antebrazo hasta el codo.

Viéndose rodeado por aquellos aprendices que claramente le superan no es capaz de pensar en otra cosa que no sea.

Mierda...Podré volver a usar el arco? No, ya no tengo arco.

Fin del entrenamiento, muchacho.

Has hecho lo que has podido y ahora vete a casa, si quieres mañana puedes volver a pasarte por aquí y veremos que podemos hacer para enseñarte algún truco mejor que este, pero está claro que hoy es mejor que descanses. 

No te preocupes, mañana serás bien recibido y si demuestras tu habilidad volverás a tener un arco, aunque tal y como se te ha quedado la mano...

Enfadado y con la mano dolorida, se marcha sin decir nada. Solo un gesto amable a la chica que le había ayudado.
Una vez fuera del templo, se sentó en las escaleras y se examino la mano, viendo como pasaba la gente por la calle. Se sacó las esquirlas de hielo medio derretido y trató de vendarla con un paño.

Confuso, empezó a pensar sobre que hacer en adelante. Necesitaría que alguien le curara la mano, un nuevo arco, y un sitio donde dormir. No tenía suficientes monedas para todas las cosas, así que tendría que priorizar.

Tras un rato, decide levantarse e ir al templo de Pelor. Le pareció ver unas indicaciones hacia el norte de la ciudad, y así de paso, podría buscar alguna posada donde dormir esa noche.

Construido como una gran pirámide, el templo está rematado con una gran cúpula rodeada por torres de cristal. Una gran torre de conco pisos, erigida en mármol color azul pálido, domina la fachada oriental de la pirámide. De noche, toda la estructura brilla con incontables llamas y un enorme símbolo reluciente de Boccob rota lentamente sobre la cúpula central.

Urk entra con cara seria, no presta demasiada antencion a la aquitectura del local y luego, sin demasiados rodeos se acerca al primero que encuentra que tenga pinta de trabajar ahi.

- ¿Tu trabajar aqui? Urk buscar a un lanzador de conjuros bonitos concreto ¿Quien poder ayudar a Urk?

- Bienvenido a la casa de Boccob. Por tu pregunta te diré que has llegado al lugar indicado, no es concretamente este el lugar pero yo puedo indicarte como llegar al Gremio de Magos.

Es tan simple como visitar la torre azul de este mismo complejo. Continúa por medio del pasadizo de piedra y podrás acceder a él.

Está abierto a todo el mundo, a cualquiera que sea miembro de cualquier religión. Algunos dicen que resulta algo embarazoso, pero no tiene porqué.

Como puedes comprobar este templo cumple varias funciones en la ciudad, y algunas más que aún desconoces. Si sigues el pasadizo que te indiqué, llegarás a la torre. Aunque mejor pásate mañana hoy ya está anocheciendo y no hay nadie aquí ya. Lo mejor que puedes hacer es descansar, buscar algún sitio dónde hospedarte y pasar por aquí mañana por la mañana.

- Estar bien -dice Urk- Urk estar agradecido, mañana volver aqui, ahora ir a... ¿Donde haber una posada?