Partida Rol por web

Lujos y sangre. Serian más útiles sí te dieran tranquilidad.

 ¿Quién eres?

 ¿Quién pretendes ser?,

¿a quién pretendes engañar?

Esas son las preguntas que te haces cuando estás frente al espejo. Esta noche ha sido convulsionada desde el inicio, sentiste escuchar a los espíritus cantar y burlarse de ti toda la noche.

¿Quién carajos se creen en no dejarte dormir?

¿Por qué te persiguen?

¡Malditos!.. seguro planean algo en contra tuya, estas casi seguro de ello.

Todos están en tu contra, lo sabes, todos quieren destruirte. Pero tú eres más inteligente, tu sabes más y puedes acabarlos a todos.

Justo esa noche te sientes realmente molesto, hace unos días te sentías realmente deprimido, pero hoy estas distinto. Es como si tu energía se concentrara en ti. Sientes que piensas rápido, y que eres el ser más afortunado y mejor del universo. Tú lo puedes todo. Los demás te temen, “ja, pobres inútiles”, eres capaz de hacer  lo que gustes.

A las 5 de la tarde cuando aún era de día escuchaste a la malkavian hablar con ellos y decirles que te atormentaran.

¡ y tu no  dejarás que eso ocurra!

 Sigues mirando tu rostro en el espejo, una sonrisa tenue se ve en tu rostro.

Apretando los puños con fuerza, contempla la grandeza de su persona. Todos los tormentos acaban, y parece que éste llega a su fin. Evita ante todo hacer memoria del tiempo pasado.

Por supuesto... No puedo olvidarlo. No tropezaré de nuevo con la misma piedra

Pero no quiere sentir de nuevo el dolor. De ello se encargan aquellos espíritus que no hacen más que recordar su desdicha. Contempla también la sonrisa naciente en su rostro, esa que no ve aparecer desde hace ¿cuanto? No puede recordarlo.

Despierta de esos pensamientos al escuchar los pasos de Noah, su ghould, lanza una mirada de soslayo hacia donde cree que está.

Tranquilízate, Andrew... En él puedes confiar, nunca te ha fallado.

- ¿Noah?... - le llama en susurro para comprobar su presencia - ¿Que nuevas trae esta noche?

Buenas noches señor. Digo entrando de manera educada arrastrando una mesilla, sólo con mirarlo sé que esta pasando por uno de "sus malos dias". Le traigo su correo y el New York Times, como de costumbre, así como su desayuno señor.  Para mi señor la sangre debe ser exclusiva como todo lo que toma.

Llamó, el señor Moriatto para confirmar la cita de negocios del día de hoy, le dije que le devolvería la llamada en cuanto me comunicara con usted, a menos qué el señor decida llamarle en persona. Hago una venia.

¿necesita algo especial, hoy?

- Necesito...

... volver hacia atrás...

- ... el teléfono. Lo llamaré yo mismo. - dice con voz cansada.

Por fin se aparta del espejo para encararse con Noah. Tal vez aquella negociación lo apartara de tan turbios pensamientos, y pudiera por fin poner la vista en el futuro. Comienza a ojear el correo, dejando para después el periódico. El mundo podía esperar durante unos momentos.

- Gracias, Noah - comenta sin levantar la vista

Cuando tomas el telefono puedes sentir tu firmeza al hacerlo. Tu criado se aparta, marcas el número como es usual y cuando te lo pones en el oido escuchas.

Creess que eres importanteee,

Tienes dinero y no eres nada,

Basuraaa

Basuraaa

Un gesto de rabía se  muestra en tu rostro, y en ese momento "sientes" que el telefono te ha mordido la oreja. Reaccionas con horror y furia. Puedes sentir que el espiritu te ha mordido.

Conozco todosss tus secretos

Puedo destruirte de desearlo..

Una risa invade tu cabeza..

En un gesto de rabia cuelga el teléfono, cogiendolo todo de una vez y lanzandolo a la pared. Se toma la oreja comprobando si hay herida

- ¡DEJADME EN PAZ! - grita sujetandose la cabeza con las manos, como si fuera a estallar.

Fue un error, yo no sabía que era inocente, fue un error...

- ... ¡NO TENGO LA CULPA! - alza la cabeza, intentando hacer huir a sus propios demonios.

Se deja caer sobre una pared, golpeandola con los puños cerrados. Las lágrimas empiezan a aflorar de sus ojos, mientras sigue golpeando con los puños y con la cabeza la pared. Tal vez así se callaran todas esas voces que querían llevarlo al infierno

Conozco todosss tus secretos

Puedo destruirte de desearlo..

jajajajajjajjajjajajajajajjajajaj

 La voz no se apaga a pesar de que te golpeas, sientes como tu vitae sale de tus puños, y la  pared se salpica con tu vitae.

El dinero no comprara tu perdón...

Estaremos siempre a tu lado...

No hay salida...

Un terrible mareo te envuelve.

Los golpes son cada vez más leves, a medida que se deja caer al suelo. No le importa el modo, tan solo quiere quedarse dormido, incosciente, lo que sea.

- Dejadme... - exhala en un sollozo

Solo quiero descansar...

Se entrega a su suerte, aunque todavía se debate en su interior con aquellas voces. Cansado de luchar, pero aún así... quiere vivir

Las voces  te resuenan en tu interior de manera  automatica. Te tapas los oidos, no callan. En algun momento te sientas en el piso tapandote los oidos y gritando que paren, que paren esas voces.

¿porqué te persiguen?, ¿porqué no te dejan en paz?

¿Señor?...  miro a mi amo en el suelo en pánico, el vinculo que me une a él me hace sentir la angustia que el siente... No se preocupe, aquí estoy, ¿necesita algo?, esta todo bien, ¿señor?

Me acerco hacia él y trato de tocarle para que reaccione, espero que no me castigue por esto.

En cuanto se percata de la presencia de Noah, se agarra a él como si le fuera la vida.

- ¡QUIERO VIVIR! - grita con verdadera sensación de pánico. Lo mira pero no lo ve, intenta encontrar en él una respuesta que no posee. Todo un gesto inútil, pero irresistible para expresar.

- ¡¿QUÉ QUERÉIS DE MÍ?! - sigue preguntando al vacío real, a las voces que no callan en su cabeza - ¡TOMAD MI CORDURA, PERO DEJADME EN PAZ!

Perdónadme... por favor... perdóname...

Noah se muestra impactado por tu repentina búsqueda de protección, algo tan contrario a lo que eres, un amo buscando protección en sus inferiores, pero es así, y es lo más adecuado en ese momento. Tu criado nota que estas pasando una crisis, y de manera algo previsiva le grita  a esos demonios que te persiguen y les dicen que te dejen en paz. El vínculo de sangre  propio de un ghoul lo hacen sensible a tus sentimientos, y como un acto de autoprotección también cuida de ti.

Las voces continúan, una y otra vez. Te tapas los oídos aferrado a tu criado y de repente todo se vuelve negro.

Abres los ojos.

Estás en tu cama. El olor de tu propia vitae inunda tu habitación. Haz sudado sangre de manera alarmante, las sabanas y tus ropas están empapadas.

Tus ojos revisan cada esquina de la habitación. Tu estado de ánimo ha cambiado. Cuando inició la noche estabas exaltado, sentías que eras capaz de hacer cualquier cosa, pero ahora, justo ahora, sientes que te han drenado la energía, no tienes ganas de moverte. Has pasado de un estado inicial de excitación y soberanía a la miseria personal. Estas tan deprimido que  no quieres hacer nada.

No puedes dejar de pensar en el pasado, tus lágrimas recorren tus mejillas.

Gira la cabeza de lado para observar la habitación, casi desprovisto de toda emoción que no sea el pesar. Quisiera levantarse y explorar esa habitación desconocida, pero los ánimos le fallan.

Al menos se han callado... Ojalá no vuelvan...

Intenta recordar lo último sucedido, pero el desagrado que le provoca le hace gemir y llevarse las manos a la cara, quitándose la sangre sudada. Noah había estado con él, ¿dónde estaba ahora?

- ... ¿Hay alguien ahí? - pregunta con voz ahogada

Un hueco en el pecho. Es lo que sientes.

Como sí tu cuerpo inerte se hubiera quedado sin corazón. Quisieras quedarte ahí acostado y esperar que la existencia pare. Una ventana abierta mientras esperas la luz del sol, una muerte repentina.

Te sientes desamparado...

Ves que tu criado se acerca a tí, con un baso de vitae, pero tu no tienes ganas de beber, no tienes deseos de alimentarte.

Hace tanto que mi señor no se comportaba así, es lo peor  que le ha ocurrido en años, la peor de las crisis... 

Siento su dolor, debe ser el vinculo de sangre, sin embargo no creo llevar mucho tiempo a su servicio para merecer su sentir. Lo escucho quejarse,  y me acerco con una copa de vitae para que beba..

Señor, estoy acá. Esta situación me pone con los nervios de punta.

- Ahora no, Noah... - contesta al ofrecimiento de la vitae

En cambio, le toma la mano, sin mirarle, buscando un consuelo incosciente. Un temor creciente se desarrolla en su interior, viendose indefenso a aquellas voces ¿Y si nunca desaparecían? Aquel pensamiento le hizo temblar y desear durante unos segundos intensamente la Muerte Definitiva.

Mira al techo intentando olvidar, y entonces vuelve la cuestión que también le acosa

- ... ¿Dónde estamos?

Esta en casa, señor. Noto como mi amo esta literalmente confundido, creo que debo buscarle ayuda, pero ¿quien va ayudarle?. Dejo la copa de vitae en una mini nevera que esta en el cuarto. Señor, digo con total temor, creo que necesita un médico, alguién que le ayude.

Lo mira largamente, sopesando y asimilando lo dicho.

¿Un médico? ¿Qué clase de médico puede curar las heridas del alma?

Hace el gesto muy humano de suspirar, para descargar el pesar que lleva en su corazón. En la vida humana funcionaba, pero en aquel entonces no llevaba la carga de una muerte sobre sus hombros. ¿Cuantas almas más estararían sobre él, exigiendo venganza?

- Sé directo, Noah - dice mientras se reincorpora en la cama - ¿En qué estabas pensando? - intenta sonar lo más normalizado posible, realmente tiene curiosidad. No hay ira en su voz, tampoco confusión. Está demasiado cansado como para reflejar otro sentimiento.

Me siento algo incomodo. Señor, le digo en voz baja. Hace dos años, usted recordará, invito a su mansión al ya difunto  Gordon Pinkertonn. Mi amo le invito como acto de amabilidad propia de su clan hace más o menos un año, y en ese momento sonrio. Usted recordara su criada, eh, la señorita Sofía.

Bueno ella me comentó que su amo, había tenido una gran crisis como la suya señor, y que un médico en el Caribe le había atendido, y el mejoró mucho.

Tiemblo al pensar su reacción. El doctor, es un psiquiatra que atiende con total confidencialidad a sus pacientes, es más, asegura este hecho.

Sofía me comento esto en una conversación privada, este aspecto nunca lo revele, hasta ahora señor.