Partida Rol por web

La llegada sucesiva de los cuatro agentes de la Ley pilló a los Watson por sorpresa, pues no esperaban tener actividad durante la sobremesa de aquel tórrido sábado de junio. No obstante, Sue Ellen y Julius se afanaron por encargarse de enviar la ropa de Adele Lewis y Scott Bennet a la tintorería, preparar un almuerzo a deshora y despejar una de las salas del hotel para acondicionarla como oficina improvisada. Todo ello sin perder la sonrisa y el buen humor, aunque en algunas ocasiones parecieron un poco confusos por el ajetreo. De todas formas, nadie nuevo había venido a alojarse ese día y la recepción estaba tranquila.

Finalmente Julius Watson les dejó algunas botellas de agua y cerró la estancia, dejando a los cuatro terminando de colocar todos sus documentos, material informático y pruebas. Con un par de ajustes la agente Lewis aseguró la conexión de red del ordenador portátil de Moira Greenwrim, de modo que pudieran conectarse con la intranet del FBI en Nueva Orleáns.

Moira había sido la primera en llegar al hotel al estar desde hace horas en su habitación. Había aprovechado ese “tiempo libre” para redactar el informe con todo lo que habían reunido hasta la fecha, sobre todo los últimos descubrimientos, impresiones suyas en un apartado aparte y los próximos datos que tenía intención de dar antes de enviarlo, quedándose ella una copia en el portátil y otra en el correo de su compañero.

Después de eso, queriendo desconectar un poco del día y recargar fuerzas, se dio un baño para disfrutar de su estancia en el hotel y terminar de sacar la ropa de la maleta para colocarla perfectamente en el armario, además de terminar de doblar aquellas prendas que hubiera lavado en esos días. Por último, tras saber que sus compañeros habían llegado y aprovechando que debían tomarse un descanso para reponerse mientras preparaban las cosas, decidió encender el teléfono y llamar a Kurt para terminar así su parada de emergencia.

Cuando todos ya estaban reunidos en la habitación, estaba preparada para un nuevo round.

La agente se agenció una de las botellas de agua, olvidando durante unos segundos de que tenía un vaso al lado para desenroscarla y beber a morro antes de poner la contraseña de sesión del portátil, cediéndoselo después a Adele o quien quisiera usarlo.

Podéis leer si queréis el informe que he redactado, allí viene toda la información que he logrado reunir en la mañana.*- Adelantándose, abrió en una ventana aparte el informe para tenerlo a mano, volviendo a cederles el portátil.- Tuve acceso a los expedientes de los nueve desaparecidos en Marion, aunque los datos que había en comparación con el resto eran escasos.

Aparte, encontré a la madre de Carlos Díaz, el chico autista acusado de la desaparición de Deborah Johnson.- Se giró hacia su compañero Scott, creyendo que iría a recriminarle que hubiera investigado o interrogado sola a las familias.- Fue de casualidad, trabaja en un restaurante familiar frente a la comisaría. En cualquier caso ha accedido a reunirse conmigo mañana a la hora del almuerzo.

Scott se había dado una ducha nada más llegar al Excelsior. No porque quisiera relajarse y desconectar unos minutos, sino porque tenía medio cuerpo prácticamente cubierto de barro. La ducha desde luego le vino de perlas, pues además le ayudó a despejar sus ideas, dándole vueltas al hecho de haber encontrado un collar con el extraño símbolo, así como el embarcadero donde ese mismo símbolo se repetía. Era un culto de alguna religión pagana, no podía tratarse de un maníaco actuando solo, de eso estaba seguro.

Después de la ducha, Scott se acicaló y arregló con otro de sus trajes, y se dirigió a la sala que los Watson habían preparado para que los cuatro agentes se reunieran. Escuchó a Moira indicar que había redactado un informe con toda la información que había conseguido reunir durante la mañana. Por supuesto, Bennet lo terminaría leyendo, pero posiblemente en aquella reunión, donde todos debían exponer lo que habían encontrado, no fuera el mejor momento para detenerse a leer.

-Nosotros encontramos un colgante con un símbolo de lo más peculiar. Es una especie de runa de protección -comenzó a decir Scott, dirigiéndole una mirada a Adele para que mostrase las fotografías o el propio colgante en la bolsita de pruebas-. Estábamos rastreando la zona por la que debieron llevarse a Theresa O'Hara cuando hallamos el colgante tirado en el suelo. Puede que el secuestrador lo perdiese en medio de un forcejeo con la niña y que ella se lo arrancase del cuello o simplemente el secuestrador se enganchase con una rama y perdiese el colgante en la huida. En cualquier caso, después de eso, visitams a la señora Preston y esta nos confirmó que sus perros únicamente ladraron una sola vez esa tarde, por lo que el secuestrador tan solo pudo pasar una vez junto a su casa.

Bennet miró a Lewis por si ella quería añadir algo más al respecto, y después añadió:

-Nos dirigimos a la parte trasera del jardín de Preston y, desde allí, seguimos caminando. Encontramos un embarcadero en el que también había un símbolo idéntico al del colgante. Puede que sea pronto para asegurarlo, pero estoy convencido de que se trata de un culto o algún tipo de secta pagana -aventuró a decir el ranger, aunque aún no muy seguro de dónde procedía el símbolo-. Puede que sea celta, nórdica o similar. La cuestión es que, además, en el embarcadero encontramos una zapatilla idéntica a la que llevaba Olegario Fuentes cuando desapareció. Es decir, O'Hara y Fuentes fueron llevados al mismo lugar luego de ser raptados. Mi teoría es que hay al menos dos personas actuando juntas: uno es el que secuestra a los chiquillos y los lleva al embarcadero, mientras que el otro aguarda en el embarcadero con una lancha o barca, listo para marcharse en cuanto llegue su compinche. De un modo u otro, incluso si solo fuera un solo secuestrador, se trataría de alguien con una excelente forma física. El trayecto desde la casa de los O'Hara a la casa de Preston y llegar después al embarcadero es un tramo realmente difícil. Una persona que no esté acostumbrada al esfuerzo físico se agotaría a mitad de camino y tendría que detenerse a tomar aliento. Teniendo en cuenta que la señora Preston se asomó desde su casa, es poco probable que el secuestrador se detuviera hasta llegar al embarcadero. -Dirigió una nueva mirada a Lewis y luego de eso, añadió-: Aún es pronto para aventurar nada, pero creo que no perderemos el tiempo si ponemos ya el ojo sobre los hermanos Pickett, los guardaespaldas de Eliah W. McKnight III. Son dos hombres bien dotados físicamente, lo suficientemente fuertes como para recorrer un terreno cenagoso en una carrera sin agotarse, y además hombres de confianza de McKnight, el jefe del padrastro de Rose Bamford.

Aún teniendo el permiso de Max de usar la bañera de su habitación, Adele prefirió darse la ducha en su propio cuarto de baño. Aún quedaba mucho día por delante, por lo que no iba a poder disfrutar de un baño apropiado para lo que sería imprescindible una bañera. Se masajeó varias veces el tobillo, esperando que no se le inflamara, y una vez salió se calzó zapatos cómodos. Estaba limpia, lo que le quitaba un estrés de encima. Ahora era momento de poner todo lo que tenían sobre la mesa.

Bennet fue quien se encargó de dar el parte sobre lo que había sucedido del lado de ellos, al tiempo que Adele preparaba la portatil de la agente Greenwrim para subir las imágenes y que pudieran verlas mejor. -La explicación más lógica respecto al ladrido de los perros de la señora Preston es que el secuestrador sólo haya pasado por allí de salida, por lo que tuvo que acercarse a la casa de los O'Hara desde otro ángulo. Puesto que nadie hizo mención de haber visto alguna persona extraña aquel día, ni hubo coches abandonados o estacionados en el lugar, es probable que se trate de alguien que sea familiar en la zona, alguien que sería común verle en el lugar.- Mostró el collar y la foto del mismo símbolo hecho en madera. -No me gusta cuando hay "voodoo" metido en un caso, pero es claro que el o los responsables tienen alguna creencia poco ortodoxa. Como dice Bennet, algún tipo de secta. El agente Jordan ya estaba sobre la pista de que las fechas en que ocurrieron los secuestros podrían estar relacionadas de algún modo.- Miró hacia Max por si quería ampliar la teoría que le había explicado al Sheriff Taylor hacía dos días.

Colocó también el zapato en su bolsa precintada. -Agente Jordan, comuníquese apenas terminemos aquí con Rebbeca Davis para ver si trabajará hoy u mañana. De ser posible me gustaría que uno de nosotros le llevara lo que hemos encontrado hasta el momento para adelantar toda la información posible.- Se giró para mirar entonces al agente Bennet con curiosidad. -¿En qué basaría su teoría de que esos hombres pudieran estar involucrados? Me parece una conexión un poco lejana basados sólo en el físico y en su remota conexión con Rose Bamford.- Miró también a la agente Greenwrim. -¿Quiere llevar la conversación con la señora Díaz por su cuenta, agente? ¿O le parece bien que le acompañe?-

Jordan comió algo antes de regresar con los demás. Un corto SMS le avisaba de la reunión del "equipo". Con los papeles impresos con doble copia, se presentó en el local cuando ya estaban todos reunidos y esperándole.

- Lamento el retraso. - Se disculpó escuetamente sin dar más explicaciones. El aire acondicionado del vehículo y del local le salvaban de apestar, aún así necesitaba una ducha para espabilarme un poco.

Guardó silencio entre las palabras de los demás, tomando algunas notas sobre lo que iban hablando. Miró a Moira cuando dijo lo de los chicos desaparecidos y vio que había acertado con ella, aunque por desgracia también se equivocó. Pero Adele no quería más conflictos y no los iba a tener. No por su parte al menos.

A Max le había quedado claro que le tocaba asumir el rol de sumiso donde cualquiera podría golpearle y no podía defenderse porque de lo contrario sería el malo. Lo vio en la cena y fue suficiente para él.

Llegado su turno, habló escuetamente. - Visité al señor McAllan, el periodista. Me facilitó todos los datos que tenía sobre los chicos desaparecidos en esta localidad. Los meses concuerdan con los que predije. - Indicó sacando de la carpeta que se había agenciado algunos folios, dos copias. Una se la entregó a Adele, la otra la dejó sobre la mesa para que la cogieran los Rangers, cerca de los mismos. Omitió su charla con el juez Cornan. Quería verle a él y era problema del FBI.

- McAllan ya no está en la ciudad. Levantó ampollas en lo más alto de la cúspide del lugar y salió en defensa del sheriff Smith el juez, quien le amenazó por lo publicado en su periódico. - Dejó el mismo sobre la mesa, por si no lo habían visto.

Los ojos de Max brillaron con el tema de rituales paganos y sacrificios. - Comprobé los días de la semana en cada fecha de secuestro y las fases lunares, buscando un patrón... Pero ahora que dicen eso, todo coincide. No hay patrón en lo que busqué... Pero todo coincide con los solsticios y equinoccios. Así que la idea de que sean sacrificios y más aún cuando se encontró a Theresa cubierta con aquella tela, no es tan descabellada. - Explicó el agente bastante más animado. Sobre todo cuando Adele mencionó a Becca.

- Tiene libre hasta el lunes, pero no tengo problema en hablar con ella. - De hecho lo estaba deseando. - Yo le llevaré las pruebas el lunes. - Y ahí fue cuando Jordan contó lo de la reunión con el juez.

- Creo que está metido en esto, ¿quien mejor para tener acceso a los datos de todas esas familias que él o el sheriff? Debe estar encubriendo a alguien más, por eso se resiste a que se investigue nada. Querrá saber que sabemos, así que quiero venderle humo, pero se me da muy mal mentir. - Max miró a Adele. - Tenemos mañana para conseguir todas las pruebas que podamos y tienes que hablar con los jefes, a ver si pueden quitarnos a Cornan de encima. Puesto que el lunes lo mismo nos dejan fuera del condado hasta que se resuelva todo. Así que nos toca rebuscar aquí antes que en otro sitio.

Puede venir quien quiera, por supuesto.- Respondió de forma escueta a Adele antes de centrarse en el resto de datos que tenían en común, aunque fue la intervención de Jordan la que recabó toda su atención, o mejor dicho la mención del juez Corman.

Cuando fui a hablar esta mañana con la secretaria de Smith, me reveló algunos datos que puede interesarnos.- Cruzó los brazos mientras se acomodaba en la silla, queriendo ordenar bien los datos en su cabeza aunque también estuvieran escritos en su informe.- El Sheriff no es un gran tipo que digamos, lo mismo por sus ayudantes, pero obedece ciegamente al Juez Corman. Ambos ignoraron la petición de colaboración con Harrison y archivaron casos, además, por lo que he leído y comprobado amenazaron tanto a los periódicos como a alguna de las familias con sacar su mierda si hablaban más de la cuenta.

Un ejemplo lo tenemos en Bárbara Sawson. Está por la segunda página.- Indicó a Adele, quien tenía el portátil, por si quería leerlo a la par que lo mencionaba en voz alta.- Siguiendo el mismo patrón que llevamos hasta ahora, ambos padres eran drogadictos. La diferencia es que se rehabilitaron en un centro de desintoxicación en Louisiana, una Iglesia que pertenece al alcalde Ralph Fallon, Rumsfeld y Eliah W. McKnight.- Sonrió al nombrar el último de ellos, empezando a ver coincidencias.- El nombre más desconocido podría ser el de Rumsfeld, un pastor de Smithland que casualmente también lo nombran en el expediente de Tanya Washington. Su padre se reformó gracias a Rumsfeld y le consiguió un trabajo en un banco creo recordar.

También hay otros casos que quiero mencionar, como el de David Smith que directamente el Juez Corman se involucró para negar la declaración de un testigo o el de Deborah Johnson, donde acusaron a un adolescente autista. No puedo descartar que el Sheriff haya metido ahí su mano, porque si leéis sus notas en el expediente parece que quisiera acusar a la familia por puro racismo.

Y una última cosa que me gustaría recordar, esta vez sobre Rose Bamford. Acusaron a Matteis de abusar de la chica y después del secuestro del resto de chicos aunque vimos que era imposible, sin embargo la chica sí fue abusada.- Recordaba que el FBI no estaba convencido de que la parte de Rose fuera relevante, pero para Moira había más donde rascar.- Está claro que su padrastro, empleado de Eliah W. McKnight, quiso cubrir el abuso de la chica dando otro nombre.

-McKnight está tan metido en esto como el sheriff Smith o el juez Corman -le indicó Bennet a Lewis, después de que Moira expusiera algunos de los hechos en los que estaba implicado el magnate-. El padrastro de Bamford trabaja para él. Y ahora mismo, lo que más lógica tiene para mí es que McKnight le pidiera a Frank Macklin que dijera a su hijastra que se inventase toda esa historia sobre el abuso de Matteis. La chica ha sufrido abusos, pero no de Matteis. Y por otro lado, Macklin y su pareja no ganan nada aireando un caso de abuso sexual que les puede explotar en la cara, a menos que tengan la certeza de que la justicia va a estar de su lado, y ahí entran Smith y Corman para cubrir a Macklin. El profesor es la cabeza de turco que "el culto", suponiendo que exista, necesita en este momento.

El ranger estaba convencido de que iban sobre la pista correcta, aunque apenas había comenzado a desgranar lo que había tras las desapariciones.

-Si aceptamos que McKnight está implicado en esto, lo más probable es que su círculo de confianza también esté relacionado con las desapariciones. Y los Pickett, siendo sus guardaespaldas, tienen todas las papeletas de estar al tanto de sus chanchullos. Ya vio lo difícil que nos fue recorrer todo ese camino desde casa de los O'Hara hasta el embarcadero, Lewis. Quien se llevó a Theresa O'Hara está en buena forma física. No digo que los secuestradores tengan que ser por fuerza los Pickett, pero encajan en el perfil que estamos buscando.

Adele se mesó un poco las sienes. -Esto no me está gustando ni un pelo.- Ya se lo había advertido el sheriff Taylor, pero sólo en ese momento comenzaba a ver mucho más claro hasta donde tendrían que embarrarse. Quizás incluso poner en peligros sus carreras si comenzaban a lanzar acusaciones contra un juez y un millonario. -Vamos a necesitar pruebas más sólidas para intentar investigar a estos personajes sin terminar fuera del caso.- Miró hacia Greenwirm respecto a lo dicho sobre Rose Banford, haciendo una mueca. -Entonces: es posible que intentaran acusar a Matteis al ser sospechoso en el caso de Deborah, pero el sheriff Smith intenta protegerlo. ¿No le sería más fácil entregarlo como chivo expiatorio, si es que el sheriff está tan involucrado como Corman y McKnight?- Hizo una pausa y continuó. -Se me ocurre que Matteis puede saber más de lo que aparenta.-

La confirmación de que las fechas tuvieran relación con festividades paganas sacó un suspiro cansado en Lewis. -Buen trabajo, agente Jordan. Ahora me gustaría saber si realmente se trata de un culto, o si lo están haciendo pasar por un culto. Preferiría que no hubiera nada de mumbo jumbo[*] en este caso, pero es lo que hay.- Resopló. Asintió a lo de que Max llevara las pruebas el día lunes, esperaba que pudieran tener más cosas con las cuales la chica pudiera trabajar.

-De acuerdo, ¿a alguno se le ocurre alguna idea de cómo investigar a los hermanos Pickett sin levantar sospechas? Por otro lado quiero ver a esa tal Bruja del Árbol, quizás pueda hablarnos del símbolo que encontramos y su significado. Mañana iré con la agente Greenwrim a vernos con la madre de Carlos. Aún quiero hablar con los Tillman y con la señora Eloise. ¿Qué otros hilos ven para ir tirando?- Miró de nuevo hacia Max. -¿Que sabes de los O'Hara? ¿Cómo está Juliette, dejaron a Violetta a cargo de Gregor?- 

Intenté averiguar un poco sobre la Bruja del Árbol cuando estuve en la biblioteca. No encontré nada escrito, pero la chica de la recepción comentó que es una especie de “vidente” que vive en el bayou.- Usó los dedos para entrecomillar la palabra “vidente” al dudar de su veracidad.- Aparte sabemos que los padres de O’Hara y Tillman la visitaron, imagino que pensaban que podría ayudarlos.

En su visita mañanera a la comisaría, más concretamente la “apacible” charla con la secretaria, había descubierto que el fanatismo religioso estaba a la orden del día, sobre todo por la cantidad de templos para procesar su religión. Tal vez estaban frente a algún tipo de ritual que no conocían. Demasiado confuso, mejor ir a lo seguro.

Intuyo que los hermanos Pickett estarán protegidos también por McKnight.- Se quedó pensativa unos segundos, debatiéndose entre las teorías que tenía en la cabeza.- Creo que para llegar a ellos tenemos que ir escalando. Me refiero.- Se incorporó en la silla, usando las botellas para representar la escena que quería.- Ahora mismo a quién podemos acceder es a Rose Bamford y a Matteis.- Señaló su propia botella antes de acercar una más a ese punto.- Ella es la hijastra de un empleado de McKnight, así que debe de saber algo, aunque sea que escuchara una charla. Después de eso ir a hablar con la familia de McKnight.- Señaló a otra botella.- Tiene mujer e hijo de siete años creo recordar, así que tal vez esté preocupada por las desapariciones de niños, podemos jugar con eso.- Por último señaló la última botella.- Y con ellos es evidente que estarán los gemelos Pickett. No creo que dejen a la familia sola con nosotros merodeando y haciendo preguntas.

Por supuesto hay otra opción.- Y una que no le gustaba, siendo evidente al dejarla para el final.- Si Smith está metido en el ajo con el Juez Corman, está claro que sus ayudantes saben algo. Son tres tíos, Skinner, Bush y Mommsen, y ninguno parece tener en demasiado aprecio al Sheriff aunque les teme.- Se giró para mirar a su compañero Scott durante un breve periodo de tiempo antes de suspirar.- Creo que es buena idea intentar sacarle información a uno de ellos, pero no será fácil.

-Con suerte, la Bruja del Árbol sepa qué significa este símbolo -comentó Bennet, pensativo, mientras intentaba hacer memoria por si había visto un símbolo similar en el pasado-. Estoy seguro de que se trata de un símbolo de protección. Entendería que lo llevase el secuestrado, pero, ¿por qué trazarlo también en el embarcadero? -Eso acentuaba más que se tratase de un culto, más que de un maníaco actuando por su propia cuenta y riesgo-. Si le parece bien, Lewis, mañana podríamos visitar a los Tillman e informarnos sobre dónde vive la Bruja del Árbol para ir directos a ver a esa mujer. Y si ella no supiese qué es este símbolo, siempre puedo preguntarle a un colega, Devereaux. Siempre le interesaron las religiones paganas...

Greenwrim había comenzado a hablar sobre McKnight, sugiriendo ir a hablar con la familia de este. Si el millonario se hallaba involucrado, aquello sería como mínimo contraproducente.

-No. Demasiado directo -indicó, en tono cortante-. Ir a ver a McKnight es meternos en la boca del lobo demasiado pronto. Si él está implicado, los suyos van a ponerse en alerta desde el momento en que le visitemos. Además, su hijo no encaja en el perfil de los niños desaparecidos -Todos los pequeños provenían de familias marginales y desestructuradas. Cualquiera notaría que el hijo de los McKnight no tenía mucho en común con los desaparecidos, más allá de la franja de edad-. No tomemos a McKnight por tonto. No, es mejor que sigan pensando que no sabemos nada sobre la relación Smith-Corman-McKnight. Primero debemos ir a por Rose Bamford y Frank Macklin. -Bennet recordaba que Matteis ya les había advertido sobre el padrastro de Rose en el interrogatorio-. ¿Recuerda lo que nos dijo Matteis cuando hablamos con él, Greenwrim? Nos dijo que todo su colegio sabía la clase de bastardo que era Macklin, que tenía antecedentes penales y que Smith nos informase de ello. Vayamos primero a por el pez pequeño, Macklin. Averigüemos cuáles son sus antecedentes y si vemos alguna conexión con el caso. Dejemos la visita a McKnight para después. Al fin y al cabo, Macklin es su empleado, por lo que la mejor opción es que le terminemos visitando para hablar sobre Macklin. -Respiró hondo, pues desde luego sabía que Smith no iba a ayudarles ni a exponer nada sobre Macklin. Se dirigió hacia su compañera-. Greenwrim, ¿se ve usted capaz de sacarle información sobre Macklin a uno de los ayudantes de Smith? No es el mejor sitio al que enviarla, desde luego, pero si esos tres idiotas temen a Smith y no le tienen mucho aprecio, quizá podamos aprovechar eso en nuestro favor.

Por supuesto que soy capaz, pero ya sabes que tampoco soy bienvenida allí.- De alguna forma sus pasos siempre acababan retornando hacia la comisaría y los hombres que allí habitaban, como si fuese un imán que atraía su vena masoquista. Sin embargo echar un rápido vistazo a la mesa le hizo ver que era la única que podía sacar esa información.

Ya había visto la vena racista que tenían por lo que ni siquiera se tomarían en serio la presencia de Adele. ¿Scott? Tenía la misma dialéctica que un oso de peluche y Max formaba parte del FBI, un cargo que ya escuchó mascullar entre dientes al Sheriff. Todo lo que hago es por el caso. Suspiró, asimilando que debía volver antes de asentir con la cabeza.

Lo haré. Ya tuve hoy dos encuentros con ellos, puedo aguantar un tercero.- En el fondo, muy en el fondo, quería ser ella la que se encargara de la comisaría. Enfrentarse a ellos era una prueba constante donde quería demostrarse a sí misma su propia fortaleza o también un castigo que se infligía por estar lejos de su familia y su casa, un pensamiento que la atormentaba cada noche en los sueños.

Sin duda este caso, el calor y el continuo cansancio empezaba a afectarle también en la cabeza.

Max miraba a unos a otros, procesando la información y ordenando datos en su cabeza. - No se olviden de el alcalde Ralph Fallon. Según McAllan el juez Cornan no tiene amigos, pero el artículo del periódico estropeó la mañana de pesca del juez, del sheriff y del alcalde, el cual quiere presentarse a gobernador, lo que quiere decir que tiene muchos contactos y amigos influyentes. Y en cuanto al temor hacia Cornan, según McAllan e incluso el sheriff Taylor, quien se interpone en su camino acaba marchándose lejos, muy lejos de aquí, puesto que su influencia sale de su propio condado. - Jordan miró a los presentes. - No podemos dejar que vean lo que tenemos y menos aún que sospechamos de ellos, no porque buscarán nuestros puntos débiles y los explotaran en caso de que no puedan detenernos de manera legal.

» Nadie va a hablar por las buenas. Corman se ha labrado una reputación que le hace temible. Nadie hablará en contra de él o de alguno de sus protegidos. El profesor Matteis no creo que hable con facilidad. Creo que es consciente de que si lo hace, formularán la falsa acusación de abuso de una menor y será el mismo Cornan quien le juzgue y sentencie. Y creo que preguntar o intentar hacer que los ayudantes de Smith hablen... va a ser poner en alerta a todos. Pero yo no voy a decir que deben o no hacer. - Menos aún cuando Adele quería ir con Moira el domingo y Scott con Adele. Por primera vez se sentía el pringado de la clase. Pero no dijo nada al respecto. Quería atrapar a ese cabrón o más bien cabrones, pero por otro lado tenía ganas de dejar el caso tirado viendo como iban las cosas.

Jordan estaba de acuerdo con la opinión de Scott sobre McKnight. - Creo que deberíamos buscar o más bien, que desde el FBI intervengan los ordenadores del juez y del sheriff, que busquen en ellos sus correos, sus búsquedas sobre familias con problemas con la ley e hijos y obtener una lista de objetivos. El próximo día 21 será el solsticio de verano y si su macabro ritual lo ejecutarán ese día, se nos acaba el tiempo para encontrar al próximo niño. Además, queda claro que es un ritual, pues los huesos de Theresa fueron encontrados en una especie de sudario. Soy más partidario de hacer toda esta operación de manera encubierta, sin que sepan lo que tenemos, que piensen que estamos dando palos de ciego y que somos estúpidos antes de levantar sospechas y que cambien de zona de acción.

Al menos Jordan se quedó tranquilo cuando Adele asintió a su propuesta de ser él quien llevase las pruebas. Necesitaba salir de aquel ambiente que le perturbaba la mente. Ver a Becca le haría bien y de paso podría pasarse por casa, para ver si la loca de Lisa había hecho alguna de las suyas y traerse su portátil, el cual no cogió pues era Adele quien siempre lo llevaba con ella.

Jordan clavó la mirada en Moira. - A partir de ahora, ese portátil ha de estar siempre vigilado y protegido. Si algún involucrado en el caso se entera de su existencia, tenga seguro que se lo robaran y acabarán accediendo a su disco duro y obtendrán la misma información que tenemos nosotros. Así que procure tenerlo siempre a buen recaudo y no se fíe de nadie de este lugar. Ni del amable matrimonio dueño del hotel. Algo me dice que si Smith les pide las llaves de nuestras habitaciones, estos se las darán sin hacer preguntas. - Advertí a todos después de ver el temor que generaban Corman e incluso Smith en aquel lugar.

Que Moira fuera sola a la comisaría de Smith no era probablemente lo más prudente que pudieran decidir, pero la joven ranger lo había querido así y se veía confiada, quizá más de lo conveniente, pero Bennet no objetó nada a su decisión.

-Coincido con Jordan -dijo Scott, fríamente, dirigiendo una mirada a su compañera-. El portátil debe estar vigilado en todo momento y, a ser posible, debemos encargarnos de tener una copia de seguridad. O directamente enviársela a alguien de nuestra confianza con quien no nos puedan relacionar directamente. -Aunque sabía que pecaría de egoísta, no iba a implicar a su familia. El caso era bastante turbio como para que Scott intuyera que Corman, Smith o el alcalde no iban a poner ningún límite para tratar de silenciarlos-. Si nos lo robasen, ellos ganan.

-Bien, bien, vamos a organizarnos entonces.- Dijo Adele, tratando de poner en orden las ideas. -Aún quedan unas horas de tarde, quiero aprovecharlas para comenzar a llamar a los jefes en la oficina para ver qué podemos hacer respecto a Cormac y que no lo tengamos respirándonos en el cuello. Buscaré preparar un buen dossier que puedas presentarle el lunes a primera hora al juez, agente Jordan. Sé que prefieres hacer esto solo, pero creo que si nos mostramos como un frente sólido tú y yo tendrá menos de donde agarrarse. Lo dejo a tu decisión.-

Miró al resto. -Mi idea es ir mañana a ver a los Tillman y a Eloise Smith, pero...- Dudó un momento, mirando a los ranger y luego a su compañero. Se contuvo de soltar un suspiro. -Greenwrim, ¿puedes acompañar tú a Bennet en la mañana? Jordan y yo iríamos con el padre de Will Jefferson.- Volvió a mirar a Max. -Por lo que hemos averiguado, es un tipo un poco peligroso y preferiría que no fueras a verlo solo.- Explicó, para que entendiera el por qué de su sugerencia. -Al mediodia, Greenwrim y yo iremos a entrevistarnos con la madre de Carlos. ¿Bennet, Jordan, algo que quieran hacer en esas horas?-

Les dejó que lo pensaran antes de seguir. -Sugiero que durante la tarde del domingo vayan dos a visitar a la Bruja del Árbol, diría que Bennet y Jordan. Pero como no quiero que se reinicien las rencillas, mi sugerencia es que vaya Bennet ya que tiene un contacto que pudiera darle una segunda opinión respecto al símbolo de protección. Para esa hora espero que tengamos la opinión de los Tillman respecto a esa supuesta bruja. ¿Greenwrim, irías a la comisaría esta tarde? ¿Bennet, Jordan, sugerencias para esta tarde?-

Por último pensó en lo que decían de la portatil. -Si Greenwrim está de acuerdo, puedo encargarme de cuidar la portátil esta tarde. Jordan, ¿crees que Sam pudiera custoriar una copia de todo lo que tenemos a la mano hasta este momento?-

Será mejor que la comisaría lo deje para mañana. Hoy ya he estado dos veces y una tercera visita en el mismo día sólo hará que terminen de cortarme la cabeza.- No le importaba tensar la cuerda del sheriff y los ayudantes, pero sabía que era ahora un hilo tan fino que el simple hecho de mirar fijamente la puerta de la comisaría lo haría romperse. Necesitaba calmar primero los propios ánimos de esos hombres antes de un nuevo intento.- Había pensado esta tarde llamar al Sheriff Taylor para intentar entablar una entrevista con Rose y su tutor legal, al fin y al cabo fue él quien se ocupó de su interrogatorio.- En pocas palabras quería dejar esa tarde para encargarse de reunir toda la información posible antes de ir directamente al quid, no queriendo que nada les pille desprevenidos.- También podría buscar en la biblioteca o en los archivos algún documento sobre rituales. Puede que el símbolo signifique algo.

Con eso por la tarde, creo que lo mejor es que mañana a primera hora vuelva a ir a la comisaría. Necesito tiempo para hablar con los ayudantes y creo que puedo intuir sus horarios por la visita de hoy.- Necesitaba hablar con uno la cuestión era, ¿con quién? Primero tenía que ver si estaban predispuestos a dar información.- Y aprovechando que el restaurante está al lado de la comisaría, a mediodía ir con la madre de Carlos.

Si me queda la tarde del domingo libre, puedo ir con Bennet a visitar a la Bruja del árbol.- Miró de reojo a su portátil sabiendo la importancia de los datos que había dentro.- Lo tendré cerca no os preocupéis, casi puede decirse que duermo con el. Igualmente agradezco la ayuda para custodiarlo cuando no esté.

- La reunión con el juez, me es indiferente. - Respondió a Adele complacido por una vez con que al menos uno de los rangers estuviese de acuerdo con él en algo, como la importancia del portátil. - Quiero decir, que pretendo ir con evasivas, no darle ni un dato sobre el caso. Sin duda alguna sabe lo que estamos buscando y nos pondrá trabajas. Mi idea es ver, oír y callar. Ya me ha insultado y  faltado al respeto esta mañana, podré soportarlo de nuevo y con responderle que yo sólo soy un agente especial, que se ponga en contacto con mis superiores y que solucionen sus problemas de jurisdicción entre ellos y que nos dejen hacer nuestro trabajo, espero que baste. Además, si tan inútil me considera, no debería tener problemas por dejarme husmear en su "reino".

» Si quiere venir, agente Lewis, no se lo impediré, pero por lo que está quedando claro, ese hombre a parte de ser un maldito cabrón, es racista hasta la médula. Puede que se vuelque en usted antes que en mí para sacarla de sus casillas. Y sabe que si alguien se mete con usted, lo hace conmigo y puede que esa noche la pase durmiendo entre rejas, porque el puñetazo en la boca se lo llevará. Me citó a mí sólo, pero por mí como si vamos los cuatro, eso sí, teniendo claro que la pelota se la pasamos a los jefes y que se pelee con ellos y sin soltar prenda de lo que sabemos. - Le indicó a su compañera, para luego añadir a los demás, recordándole así que él siempre estaba a su lado y que daba igual la amenaza, pues él estaría allí como sabía que ella estaría allí por él.

- Cuando acabe la ilustre charla con el juez, regresaré a Nueva Orleans y llevaré las pruebas a la central del FBI. Y sí, Sam puede custodiar una tercera copia de todo. Tiene una caja fuerte en su casa. Ya no sólo por el arma, sino porque no es la primera vez que recurro a él para que me guarde algo y a la inversa... ¿Por qué cree que me cuesta tanto cambiar el cuadro tan horrible de mi dormitorio? Porque no encuentro otro que me guste con las mismas dimensiones que ese y que oculte una caja fuerte. Pero en mi piso no estarán seguros... y menos con Lisa cerca. - Suspiró tomando aire después. Al menos el lunes ya estaba organizado para él y sólo quedaba esa tarde y el domingo entero.

Max miró a Moira cuando dijo lo de buscar el símbolo en la biblioteca. O sabía muy bien que buscar o se volvería loca. - Creo que lo mejor es acercarle una imagen del símbolo a la bruja esa y que ella nos guíe por donde buscar. Acortaremos mucho más así. Hay libros de brujería que datan de siglos, como el de San Cipriano, brujo que fue nombrado santo cuando reunció a la brujería y al satanismo y se reconvirtió al cristianismo, pero dejó su libro de brujería por ahí suelto. Además, debería mirar también en sectas... y eso no sale en los libros. Quizás los ordenadores del FBI den mejores resulados con eso. Pero primero preguntaría a esa mujer, quizás nos oriente un poco. - Dijo al quedarle claro que estaba fuera de aquello. No sabía que miedo tenía Adele. No era la primera vez que lidiaba con alguien como Bennet y con no hablarle hasta que fuese absolutamente necesario no habría problema. Pero si ella consideraba que Scott no se controlaría, no iba a decir nada al respecto. A fin de cuentas era su jefa. - Luego buscaría en la biblioteca, con datos más concretos. Así que quizás, la visita a esa mujer se debería adelantar a esta tarde y ver si mañana tenemos acceso a la biblioteca. Allí no vamos a discutir, básicamente porque hay que mantener silencio y da igual quien vaya con quien.

» En cuanto al tipo de la AK-47, sabe perfectamente que me muero de ganas de hablar con él desde que descubrimos su existencia, agente Lewis, así que iré a verle con quien sea, pero por supuesto prefiero que sea usted quien me acompañe. - Le dijo claramente a su superior, compañera de fatigas y amiga.

Con eso la tarde del sábado quedaba para husmear sobre el símbolo con la vieja bruja para unos, Adele hacer las gestiones con los superiores y otro... a saber donde acabaría Max. El domigo por la mañana, Max y Adele verían al loco del AK-47, Moira a sus amigos de la oficina del sheriff y Bennett podía empezar a buscar en la biblioteca. De no encontrar nada, se harían los relevos pertinentes en la biblioteca y cada uno acabaría visitando a alguien mientras que otros, seguramente Max, seguiría rebuscando entre libros y más libros e incluso en internet.

-Coincido en que hay que visitar cuanto antes a la Bruja del Árbol -dijo Bennet, en tono frío, mientras dirigía una mirada a los dos agentes federales-. Pero primero hay que averiguar dónde vive y, antes de que demos palos de ciego, lo más adecuado sería visitar a los Tillman. Al fin y al cabo, ellos y los O'Hara consultaron a la Bruja del Árbol, por lo que pueden decirnos donde vive o incluso su número de teléfono, si es que tiene... -A esas alturas y estando en la América profunda, donde una mujer como Adele Lewis ponía haberse llevado un escopetazo ese mismo día, no estaba del todo seguro de que la mencionada bruja fuera a tener teléfono-. Lo ideal sería visitar mañana en la mañana a los Tillman y después ir a donde viva la bruja -coincidió con la planificación que había hecho Lewis, aunque se dispuso a añadir-: Pero no veo necesidad de que la agente Greenwrim me acompañe mañana. Podría ser de más utilidad si ella se ocupase de hablar con Eloise Smith.

Scott arqueó una ceja al escuchar que Lewis les preguntaba acerca de sugerencias sobre qué hacer esa misma tarde.

-Visitar a Rose Bamford. Es otro de los puntos que veo más inmediatos y podríamos hacerlo hoy mismo -expresó el ranger, clavando sus ojos en Moira en esta ocasión-. Greenwrim y yo. Creo que al haber interrogado a Matteis y haber visto el vídeo de su declaración, somos los que podemos desenvolvernos mejor para interrogar a la muchacha. -De nuevo asentía a Max cuando este indicó que lo mejor era enseñarle una imagen del símbolo a la bruja-. Puedo enviarle una fotografía del símbolo a mi compañero del club de lectores para ir ya directos a los Tillman y a la bruja con una primera opinión sobre qué es dicho símbolo. No creo que este tipo de información sobre cultos paganos pueda encontrarse en una biblioteca municipal -le indicó a Greenwrim, coincidiendo nuevamente con Jordan en que o bien la pelirroja sabía donde buscar o solo daría palos de ciegos-. No es el mejor sitio en el que buscar. Pero si supiéramos a qué pertenece el símbolo, tendríamos más opciones...

A pesar de la manera en que había empezado el día, Adele comenzaba a ver una mayor colaboración entre todos en comparación con lo que había sido el encuentro durante la noche anterior. Aquello le aliviaba un poco el dolor tenso de la espalda, y hasta se permitió una sonrisa. -Excelente, Jordan. Ponte en contacto con Sam para que sepa que le harás entrega de algo el lunes, pero sin contar nada más. Respecto a lo de verte con Corman, de acuerdo. Lo dejo en tus manos, pero me aseguraré de que en los altos mandos estén enterados y sepan como lidiar con el juez para que no nos complique las cosas.-

Ya tenían algo más establecido en cuanto a qué hacer. -Bien, entonces. Esta tarde Bennet y Greenwrim se entrevistarán con Rose y su tutor, yo me quedaré para hablar con los jefes y revisar en la red del FBI si hay algún caso donde se haya visto algún símbolo como el que nos atañe. Jordan, ¿irías esta tarde a ver el estado de Juliette O'Hara? Me preocupa sobretodo la niña, hay que recordar que los secuestradores siguen allí afuera, estamos en los días en que estarán planeando hacerlo, y Violetta se encuentra en este momento con una madre que ha intentado suicidarse y un padre que no está del todo bien de la cabeza. Aunque estoy segura que los secuestradores planearán sus víctimas con tiempo de antelación, esa niña es una candidata tan posible como cualquier otro.-

Esperó confirmación antes de seguir. -Mañana en la mañana, Jordan y yo iremos con Jefferson, Greenwrim a la comisaría y Bennet con los Tillman. Escucho lo que dices, Bennet, pero ¿te parecería ir al mediodía con el agente Jordan a ver a Eloise?- Propuso. Ahora que estaba viendo como ambos opinaban parecido en ciertas cosas, dejó la idea para ver si la tomaban. -Luego en la tarde Bennet con la bruja. Greenwrim pudiera quedarse en la biblioteca y esperar que Bennet le de algo por donde empezar. Jordan y yo podemos ir a ver a Gina Rimbaud. ¿Opiniones?-

Bennet parecía haberse centrado en el caso y no en Jordan y eso era de agradecer para el agente del FBI. Esperaba que siguiera así duranto mucho tiempo, puesto que ya tenía bastantes datos sobre él y Max no necesitaba más terapia, sino atrapar a quienes estaban haciendo todo aquello puesto que ya había quedado claro que se trataba todo de algún tipo de secta con gente adinerada y poderosa. No era un simple pedófilo, había mucho más detrás de todo aquello.

Jordan miró a Scott y asintió con la cabeza. - Si conoce a alguien más que pueda identificar ese símbolo, me parece buena idea que se lo mande. Así ganaremos tiempo si su amigo lo sabe. - Luego respondió a Adele.

- Quise ver a la señora O'Hara cuando estuve con el sheriff Taylor antes de venir y él mismo me negó las dos veces la visita. De hecho le llegué a decir la verdad, que quería hablar con ella de víctima a víctima y siguió negándose a ello. No se si es que no se da cuenta de que tras un intento de suicidio, sin nadie que verdaderamente esté limpio y la respalde, lo más fácil y normal es que acabe en psiquiatría una temporada, asuntos sociales meta las narices en el ambiente familiar, vea a Gregor borracho y les quiten a Violette por seguridad hacia la menor.

» Pero el sheriff Taylor se equivocaba en una cosa. Juliette no se mantenía en pie por Violette. Se mantenía en pie por la esperanza de recuperar a Theresa sana y salva. De pensar realmente en su hija pequeña, jamás la habría tenido como la tiene ni se hubiese intentado quitar la vida, dejando a la niña sin su familia biológica y, para ser sinceros, no se si es bueno para esa pequeña que siga viviendo con un borracho maltratador y una mujer que realmente no quiere a su hija pequeña, sólo a la perdida. - Dijo Max con cierta dureza, pero planteando una realidad bastane clara de como veía a esa familia y lo que les pasaría.

- En cuanto a Sam, no se preocupe agente Lewis, nunca nos decimos lo que hay en los sobres que nos pasamos de vez en cuando. Unos son casos de la policía y otros del FBI. Y ambos sabemos que si algo le ocurre a quien su sobre está siendo custodiado, debemos comenzar a investigar que ha pasado y ver a quien se le pueden entregar esos datos y que sea de confianza. En este caso, Sam me buscaría a mí y a ver a quien entregarle la información que guarda, porque sin duda, si me ocurriese algo sería por esos papeles. - Dijo para tranquilizar a todos, aunque la verdad es que nadie preguntó quien era Sam ni hasta que punto podían confiar en él. - De hecho, como le envié una copia digital al FBI de los artículos de McAllan, creo que le dejaré el CD en custodia a Sam también. En su correo tiene una copia, agente Lewis. Esos datos no se perderán con facilidad.

» Y sí, Violette es ahora un blanco perfecto... salvo que se la lleve asuntos sociales por el ambiente en el cual vive. Así que si se la quieren llevar, tendrá que ser este mismo fin de semana, antes de que emitan una evaluación sobre su madre. Con ese giro inesperado, es más fácil que tengan otro blanco que no sea Violette. Ahora esa pequeña tiene los ojos del sheriff Taylor sobre ella. Aunque siempre se puede solicitar tener una custodia temporal de la niña por nuestra parte, me refiero a vigilarla nosotros, durmiendo en el hotel y pasando el resto del fin de semana en nuestra compañía. Gregor no descargaría su fustración contra la pequeña y asuntos sociales no se la podría llevar al no tener prueba de maltrato y estar bajo custodia y protección federal. - Dijo encogiéndose de hombros. Era una locura, pero era lo único que se le ocurría en aquel momento para ayudar a la niña. Alejarla del padre y tenerla siempre vigilada, como el portátil de Moira.

- Por el resto, usted manda, agente Lewis. Ya sabe que cumpliré con lo que me mande. - Le gustase o no, así sería y sabiendo que el lunes vería a Becca, todo era distinto para él en ese momento.

-Cuente con ello -le respondió Bennet a Lewis a la pregunta que le había realizado-. Ahora si me disculpan, voy a contactar con mi compañero. Si reconoce el símbolo, al menos tendremos algo más sólido para tratar con la Bruja y saber qué buscar en la biblioteca.

Scott se incorporó de la mesa y, tomando el teléfono móvil, decidió enviar una fotografía con el símbolo que él y la agente federal había encontrado dos veces en el bayou. Envió la fotografía a Devereaux, su compañero del club de escritores, junto con un pequeño mensaje:

Hola, Peter!

Tengo que hacerte una consulta. ¿Has visto alguna vez este símbolo con anterioridad o sabes qué significa?