Partida Rol por web

Rain sale de su escondite al escuchar las palabras de William, -que hace el aquí, claramente le dije que esperara a que saliera el tipo de la casa - Rain pensaba que lo había hecho prisionero aquel sicario, y lo mas probable es que ahora los mataría a los dos. La chica oculta las cuerdas entre sus manos, pasa con dificultad hasta el asiento del copiloto y encara al que ha metido la cabeza por la ventanilla.

- ¿quien eres tu? - le pregunta con el ceño fruncido. La chica lleva pijamas de color claro, la parte de abajo del pantalon esta llena de fango y lleva unas zapatillas deportivas sin agujetas, el cabello recogido en una coleta improvisada y encima una chaqueta que le va un tanto grande. Abre la puerta del copiloto y sale del auto, sin cerrar la puerta mira a ambos evaluando la situación.

Enarco una ceja al ver a Rain en el coche. Un rápido vistazo a su anatomía me informa de que ha sufrido al menos un ataque. El fango residual de su ropa y que vaya vestida con un pijama dibuja un escenario de escapar a trompicones de alguna situación de peligro. La miro a los ojos tras el examen preliminar.
-Jules, Jules Sullivan. -Añado con toda normalidad.
El agua de la lluvia me mojaba ya todo el cuerpo, mi pelo goteaba a la misma velocidad que caía el agua, la ropa estaba calada y, aunque protegido por una chaqueta, el cuello, las manos y los zapatos empezaban a encharcarse...
-No tenemos mucho tiempo, no se lo que es ese cubo que anda buscando tu amigo, pero en cuanto llegue Quiko deberíamos pensar en irnos a algún sitio seguro... creo que tienes información para ponerme un poco al día... tu casa está vacía, no hay nadie. Podemos acomodarnos allí hasta que llegue, que no creo que le tome demasiado.

-¿Viste ese coche? Creo que son ellos. Será mejor dar un rodeo e intentar ir por detrás. Vamos. Creo que no nos han visto-dijo Quico a su acompañante a la vez que giraba entre dos chalets para dirigirse a la parte trasera de la vivienda a la espera de que por allí no hubiese vigilancia. Se acercó hasta la puerta trasera de la vivienda y miró a través de ella o de las ventanas de la planta baja. 
 

Mierda, el cubo... - esperadme aquí, voy a la casa a por el cubo, enseguida vuelvo.

Dicho lo cual salgo corriendo de vuelta a la casa sin esperar que Rain abra y sin darle oportunidad al agente de hacer nada.

Regresas a la vivienda con la idea de búsqueda. Aquel supuesto cubo debería encontrarse entre las cosas de Rain. ¿Sera real? Es un pensamiento que asalta tu mente ya que el objeto se encontraba dentro de Estado Alfa, precisamente en la ultima escena antes de salir del experimento. De todas formas si la muchacha tiene la seguridad que el objeto existe y se encuentra en su casa por algo sera.

En el salón principal encuentras algunas cajas sin desempacar y por lo tanto comienzas desde ahí. Dentro de ellas hay algo de ropa, libros y elementos personales pero en la penúltima caja encuentras algo envuelto en un paño de gamuza. Tiene forma de cubo. En ese preciso momento escuchas una voz que llega desde atrás de ti.

- Quieto, lentamente deja el cubo en el suelo y luego túmbate. Haz alguna estupidez y te volare los sesos. - escuchas el sonido de un arma lista para disparar.

La casa de Rain pertenece a un plan de viviendas suburbanas en donde el principal accionista es una empresa satélite de Mobius Corp, o al menos eso dicen los programas amarillistas de la tele. La construcción es bastante simplona pero cuenta con todos los servicios y comodidades. Dos habitaciones, un baño, una cocina, un garaje, un salón comedor y un amplio patio trasero con un desván a estrenar.
Llegan hasta el lateral de la casa y desde allí descubren la puerta trasera de la vivienda que por suerte se encuentra cerrada sin llave. Con tan solo girar el picaporte logran entrar…

La lluvia golpea las ventanas inundando de sonido el interior de la casa de Rain. Por fortuna la tormenta es útil en tapar todos los sonidos porque pronto se encuentran en la cocina de la casa. Todo se encuentra en penumbras…
Sobre la mesada junto a las hornallas del anafe hay algunas cosas todavía en sus bolsas de supermercado junto a sus respectivos tickets de compra.

Walter había ido callado y observando la mayor parte del tiempo, salvo cuando daba alguna indicación. Al llegar a la casa de Rain no se mostró mucho más locuaz. Una vez dentro, miró alrededor tratando de asegurarse en la medida de lo posible que estaban solos, y buscó pisadas mojadas en el suelo. Sólo hacía un rato que llovía, por lo que eso podría dar pistas.

Cogió su propio teléfono y empezó a llamar a emergencias, como habían planeado. Si Quick0 no le detenía, hablaría con la operadora, casi en susurros, como si tuviera mucho miedo.
¿Operadora…? Hay un loco en la calle, le he visto disparar a dos personas con un arma… una pistola, con silenciador, y luego los metía en un coche y se metía en una casa, yo estoy escondido en la de una vecina y…. ¡Oh! Fuego, se está quemando la casa!

Tras buscar durante un rato, encuentro por fin lo que buscaba, lo sopeso en mis manos un instante, ahora a ver si hay analgésicos en algún lado. Antes de que pueda iniciar mi nueva búsqueda, una voz a mi espalda hace que se me ericen los pelos de la nuca.

Comienzo a respirar mas rápido al tiempo que mi corazón comienza a bombear mas rápido, puedo sentir también el pómulo roto palpitando. ¿Es él?, no tengo claro si me habla la voz del teléfono, pero sujeto el cubo con mas fuerza, va a matarme, si le entrego el cubo, me matará, y sino, también, tengo que escapar, llegar al coche, avisar a Rain, darle al menos una oportunidad a ella, y con suerte, yo también saldré con vida... no quiero morir, no aquí, no de esta manera.

Siento como mis músculos se tensan y con el cubo sujeto salgo corriendo tratando de llegar al coche.

Apenas comienzo a correr y tropiezo sin saber con que, cayendo al suelo. Justo en ese instante, escucho el sonido atronador de lo que supongo es un disparo, puedo sentir una ráfaga de aire pasar por encima de mi cabeza, joder, joder, el cubo cae de mis manos alejándose un par de metros. Antes de que consiga levantarme, con la cara aún pegada al suelo un nuevo sonido hace retumbar toda la estancia mientras se ilumina el salón, joder, ¿qué ha sido eso?. Me levanto corriendo y agarro el cubo mientras avanzo por el pasillo durante la carrera me voy chocando con las paredes, ya queda menos, pienso cuando veo la puerta principal de la vivienda.

Venga vamos adentro - le dice al no encontrar ninguna amenaza ni tensión en la voz de Jules.

¿Jules? ¿pero que no Jules era una chica? - piensa y trata de recordar los anteriores escenarios, mientras los recuerdos van y vienen en la mente de Rain ambos personajes buscan refugio en la casa de la chica, Rain entra y va directo a su cuarto - Espera un momento, tengo que cambiar mi ropa primero - le dice a Jules al momento de entrar.

Rain recordaba a Jules como una chica de edad adulta, inquietantemente introvertida y con gustos extraños, en alguna ocasión la vio curar a alguien pero ahora le paresia demasiado sospechoso el que un hombre se presentara con su nombre, y peor aun era que no tenia forma de comprobar si realmente era ella, o él, poco recordaba sobre aquel personaje, poco y nada que le dijera la verdad, estado alfa le jugaba otro truco y no sabia que pensar. Un arma necesito un arma, el cubo podría servir - se dijo a si misma - por lo menos conoce a Quic0, ¡¿y si es el asesino que a citado a Quic0 aquí para ganar su confianza y luego matarnos a ambos?!- poco a poco se sentía mas nerviosa. Inmediatamente comenzó a buscar el cubo.

Quico levanta el pulgar en señal de aprobación mientras sigue andando por la casa con cuidado. 

Como quiera que finalmente no consiguieron el táser y no tiene nada parecido a un arma, se acerca hasta la cocina y coge el cuchillo más grande que encuentra tras lo cual va revisando la casa con cuidado. Primero la planta baja y luego el piso superior. Tiene la tentación de llamar para advertir a Jules y Rain que son ellos, pero ni siquiera puede estar seguro que de haber alguien en la casa, sean sus compañeros. Solo esperaba que no le acabasen pegando un tiro confundiéndole con uno de los chicos malos. 

¿Operadora…? Hay un loco en la calle, le he visto disparar a dos personas con un arma… una pistola, con silenciador, y luego los metía en un coche y se metía en una casa, yo estoy escondido en la de una vecina y…. ¡Oh! Fuego, se está quemando la casa!

Del otro lado de la llamada una mujer responde con calma y eficiencia. – ¿aló? Por favor no se preocupe, mientras hablamos la ayuda va en camino. Profesor Turner todo está en orden. ¿Verdad? – algunos segundos de silencio llenan el hueco mientras Edward observa a Quick0 extrañado ante la respuesta de la operadora.

La tormenta arrecia por momentos con vientos huracanados y sus peligros. Tejas, ramas, cables y decoraciones de jardín vuelan sin control por la calle a causa del viento. Una tormenta como jamás se haya visto en los años siguientes a la gran guerra.

Los truenos también decoran la ciudad pero un sonido fuerte y seco nace desde las entrañas de la vivienda de Rain. Lo que parece el golpe de un gigantesco martillo contra el yunque de los dioses finalmente para los oídos entrenados significa el disparo de un arma de fuego. Tan solo un segundo después otro disparo es acompañado por el sonido de una ventana estallando y el portazo de la puerta principal.

Los disparos proceden de la parte frontal de la casa en donde se encuentran y en ese preciso momento lamentan no haber conseguido crear los tasers. Por suerte Quick0 tiene en su poder una cuchilla de cocina pero ante un arma de fuego no hay mucho que hacer. Mirando a hurtadillas por el pasillo en dirección al salón principal de la casa pueden ver la ventana destruida y la puerta de entrada a medio cerrar. La chamusquina y el olor de la pólvora llegan hasta ustedes. El próximo movimiento será decisivo pero el sonido del teléfono móvil del profesor Turner podría delatarlos.

Armado con su cuchillo, Quico se esconde detrás de un sofá. Contando conque el que reventó la puerta principal entrará en la vivienda para asaltarla, esperaría a que pasase por su lado para atacarle por la espalda rebanándole la oreja. Gracias al informe de Turner, sabe qué aspecto tiene Jules. Por supuesto si lo reconoce o si reconociese a alguno de sus compañeros, no lo atacaría.

¿Eres William?

Eres el único superviviente de la misión. Corres sin mirar atrás con el objetivo en brazos mientras escapas de las explosiones que te pisan los talones a través de la tierra de nadie en aquel planeta desconocido para ti. Solo sería una misión simple te repites apara ti mismo. Solo sería una misión simple.

En tus brazos aquel extraño artefacto parece latir y emitir una tenue luz. ¿Tiene forma de cubo o es que cambia cada vez que lo miras?

No es momento para tales preguntas. Debes correr, correr como nunca. El oxigeno escasea dentro de tu casco y gran parte de el escapa hacia la enrarecida atmosfera. Aquel cielo rojizo guarda sus secretos.

William aparece por la puerta frontal de la casa de Rain. Corre a toda prisa hacia el auto de Jules como si el mismísimo diablo lo estuviera persiguiendo. Seguramente los disparos iban dirigidos para él y quien los haya hecho pronto podría aparecer.