Partida Rol por web

Expedición al castillo de Ravenloft

3 de diciembre del año 750

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06/11/2016, 10:22
Ludovico

Ludovico se puso a guardar todas sus compras en la parte de atrás del carro. Cuando terminó, sacó una lanza de punta de plata.

Ten, espero que sea suficiente para mantenerte con vida a ti y a tu hijo. También quiero hacerle un regalo al pueblo. Toma esta caja, Helene. Es mágica. Una caja de raciones de campaña. Proporciona suficiente comida para quince personas. Sé que no es suficiente, pero espero que ayude.

El gitano se quedó con la maza, y la coló por debajo de su cinto, para que quedara colgando siempre a mano, por si acaso. Después se puso a desenganchar los caballos del carromato.

No me gusta la compañía de Urik, así que voy a dejar que se adelante unos minutos. ¿July?-golpeó el carro, como quien llama a la puerta-July, querida, voy a encoger el carro. No puedes quedarte dentro.

Un destello de luz salió volando del interior, tras lo cual se volvió invisible. Entonces Ludovico lanzó un conjuro, y el carro empezó a reducir sus proporciones hasta las que tenía la primera vez que Helene vió el vehículo. Enganchándole dos correas a la parte baja del carro, Ludovico lo convirtió en una especie de mochila.

Suerte, Helene. Esperemos por el bien de ambos que vivamos lo suficiente para volver a vernos. Cuida de tu madre, Vjelkus.

El joven Ternero se puso firme, en pose militar, y asintió. Ludovico se puso el carro a las espaldas y tiró de las riendas de los dos caballos, alejándose por el camino hacia las montañas...

Veinte minutos después, con el sol en lo más alto, Helene vió llegar por la orilla del río a una elfa flanqueada por dos licántropos en su forma bípeda...

Mientras, desde el norte, un murciélago se aproximó revoloteando hacia el puente. En un pequeño estallido, el murciélago cambió de forma, y se convirtió en la odiosa Sasha Ivliskova. Con la vampiresa en un extremo, y los licántropos elfos en el otro, Helene y Vjelkus quedaron atrapados en el centro del puente.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Esconderse de Rafail

Tirada: 1d20

Resultado: 17(+10)=27

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06/11/2016, 10:58
1-Estado de los personajes

Unos minutos después de haberse alejado del puente, en pleno camino entre bosque frondoso y con el sol brillando en lo alto, una figura translúcida y fantasmal se les apareció de la nada. Merquo Iluminador venía a dar su parte diario.

Saludos, Herr Urik de Teudeldorf. Veo que vuestro grupo no para de menguar.
Espero que no hayáis lamentado más muertes en vuestras filas. He rezado para
que el ataque de los licántropos no acabase con el pueblo de Barovia.

Pero hay mucha información pendiente... Nuestros adivinos han localizado una
sima en el valle que lleva al infierno. La sima se encuentra en el interior de una
cueva, tras una cascada, y sería un buen lugar para encontrar una veta de hierro
frío. El hierro frío os servirá contra las hadas malvadas y algunos demonios.
Si encontráis la sima, extraed algo de hierro frío y llevadlo a un herrero.

En cuanto al rito en la colina de Lysaga, nuestros adivinos se reafirman en que fue
frustrado. Para confirmarlo, han preguntado a los dioses cuántos demonios hay en el
valle, y de que tipo. Lo que encontramos ha sido esto:

-Chernovog no está en el valle, sigue en su plano de origen.

-Existen dos demonios babau en la colina de Lysaga.

El resto de demonios del valle se concentran en el castillo de Strahd, seguramente
sirviéndole fielmente. Son:

-Un demonio de la sombra, débil a las armas mágicas.

-Dos bar-lgura, débiles al hierro frío.

-Dos babaus, débiles al hierro frío.

-Un rutterkin, débil a la plata.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Brujas de Lysaga, esconderse

Tirada: 1d20

Resultado: 1

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06/11/2016, 11:41
1-Estado de los personajes

Un ruido a la izquierda del camino, tras unos arbustos, interrumpió la exposición...

-¡No me empujez!

-Yo no-no-no-no... te empujjjj...

-¡Chssst! Una palabra más, y os defenestro la cocorota.

-Empezozozo ella.

-¡Mentiroza!

Eran las voces inconfundibles de los "frutos rojos", las sacerdotisas de capucha roja que servían a Baba Zelenna en las ruinas del monasterio de la Santa Ecaterina, en lo alto de la colina de Lysaga.

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06/11/2016, 13:05
Ivalic Yannof

El niño asintió a las palabras de Ludovico y se resignó a no aprender más hechizos por el momento. Tras eso siguió camino junto a Herr Urik y su amigo Parriwimple.
No tuvieron que esperar mucho para encontrar un motivo para detenerse pues Merquio Iluminador se les apareció.

-¡La cueva tras la cascada! ¡La hemos visto! ¡La hemos visto! ¡Sabemos donde está! A que sí Herr Urik. Creo que podremos ir a por ese hierro frío.
-Luego vinieron las malas noticias, Ivalic comenzó a contar los demonios que había en las cercanías.- ¡Ocho demonios! ¿Vosotros creéis que podremos con ellos?

Iba a ponerse a hacer más preguntas a Herr Urik, Parriwimple y a Merquo Iluminador cuando unos ruidos tras unos arbustos llamaron su atención. Reconoció las voces de las simpáticas sacerdotisas que les habían ofrecido de merendar.

-¡Eh! ¡Hola! ¡Soy Ivalic! ¡Estoy aquí con Parriwimple y Herr Urik! ¿Que hacéis por aquí? ¿Estáis jugando al escondite? Nosotros no podemos, tenemos prisa. Salir a saludarnos.

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06/11/2016, 16:27
Herr Urik von Teudeldorf

Me despido de Ludovico con un fuerte apretón de manos y dándole una palmadita en la espalda. Ha demostrado hasta ahora ser nuestro más fiable aliado.

En el camino del bosque, minutos después, nos sorprende la imagen de Merquo Iluminador, el superior de la difunta paladina Frau Ashlyn, de cuya espada soy el actual portador.

- "Herr Iluminador, Frau Helene y su hijo están bien. Han acudido a una reunión entre licántropos y vampiros, tal vez estén forjando una tregua o acuerdo de paz tras los recientes ataques. Anoche ardió toda Barovica en un ataque de licántropos. Por suerte, la mitad de la población se salvó, al estar bajo nuestra protección en las cuevas bajo el cementerio.

Sabemos donde está la cueva a la que os referís, aunque temo que esté protegida por al menos varios lobos huargos y otro tipo de cánido más peligroso aún, tal vez un sabueso infernal." -

Entonces se produce la interrupción de los frutos rojos. Le hago una señal a Herr Parriwimple para coordinarnos los dos para agarrarlas y sacarlas por sorpresa de los matorrales entre los que se esconden.

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06/11/2016, 20:38
Helene

-Confío en ello -dijo en referencia a la lanza y antes de recibir el inesperado regalo para el pueblo-. Suficiente o no, es un acto de gran generosidad y de un valor incalculable. Puede salvar vidas o hacerlas más sencillas y eso es algo grande, Ludovico. Grande.

En silencio y emocionada por aquel gesto, les vio partir, un brazo sobre el hombro de Vjelkus, aún firme como un palo.

-Un buen hombre, Vjelkus. Tenlo en cuenta. Si algún día te ves en la necesidad de pedir ayuda, si algo me ocurriera, acude a él. Te ayudará. No lo dudes -dijo a su hijo cuando ya habían desaparecido por una curva.

El resto del tiempo pasó tranquilo, el sol sobre sus caras, un tiempo que aprovechó para leer las primeras páginas del diario de Danovich. El sonido de unos pasos más allá, hicieron que alzara la mirada. Una elfa y dos licántropos se acercaban y poco después, como una sombra de mak agüero, Sasha. Suspiró quedamente.

-No te apartes de mí en ningún caso, hijo. Permaneceremos en la mitad del puente, que es donde nos corresponde -le susurró-. Buenos días a todos -saludó a los recién llegados.

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07/11/2016, 13:16
Ida

¡Cuidado, vienen pa'cá!

Las tres chicas salieron corriendo, asomando sus nucas encapuchadas por encima de los arbustos. Una de ellas se arremangó la túnica roja, mostrando unas piernas insectoides. Otra se agarró a la de las piernas insectoides y se alejaron en grandes zancadas.

¡Espepepepe...! Esp.. ¡Esperadme!

La más rezagada se pisó la túnica y cayó hacia delante. Parriwimple la agarró y la puso en pie, no estaba claro si pretendía ayudarla caballerosamente o había entendido el gesto de Urik. Ida forcejeó, por lo menos al principio, hasta que se dió cuenta de que quién la sujetaba era Parriwimple. Se puso colorada, y cesó todo movimiento, agachando la cabeza de modo sumiso.

¡Habían conseguido una prisionera que interrogar!

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07/11/2016, 13:27
Vjelkus

Sí, mamá...

Vjelkus se quedó muy quieto, abrazado a Helene por la cintura. La mujer a penas había tenido tiempo de encontrar la página en la que lo había dejado, y leer un par de desvaríos confusos. Necesitaría más tiempo para leer el diario con calma.

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07/11/2016, 13:29
Sasha Ivliskova

Saludos... La humana se llama Helene, si mal no recuerdo. El niño... no tengo la menor idea-presentó-. Seré breve. El Amo Strahd desea que los perros volváis a los bosques. No solo habéis atacado al pueblo, también perseguisteis a los hombres y mujeres que se resguardaron en el castillo, y vosotros intentasteis entrar sin ser invitados...

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07/11/2016, 13:34
Valanthe

¡Muchos de los nuestros perecieron en ese asalto! Me llamo Valanthe, y hablo en nombre de mi comunidad... y en el mío propio, como madre que soy. Mi hijo murió en el pueblo, ¡y exigimos Justicia!

Uno de los licántropos que flanqueaban a Valanthe sacudió la cabeza, como mareado.

Notas de juego

Helene: tirada de sabiduría.

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07/11/2016, 14:02
Herr Urik von Teudeldorf

- "Buenos días, señorita. Puede que ya le conozcáis, pero os lo presento de nuevo: Este es el señor Parriwimple Indirovich, Burgomaestre de Barovia. Es probable que se pregunte qué hacían unas mozalbetas como vosotras escondidas en esos arbustos..." - Miro a Parriwimple y le guiño un ojo, en señal de que debe ponerse serio y preguntar algo.

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07/11/2016, 14:19
Ivalic Yannof

Ivalic se acercó detrás de sus dos amigos y señaló a la chica que al remangarse la túnica mostró unas piernas de aspecto insectoide.

-¡Mirar que piernas tiene! Herr Urik ¿Como es posible?

Aquella y otra de las chicas lograron escapar, las piernas le permitían dar grandes zancadas y alejarse muy rápido, pero una de ellas, algo más torpe, tropezó con su túnica y se calló al suelo donde Parriwimple la levantó.

-Y yo soy Ivalic. ¿Te acuerdas de mi? ¿Te llamabas Ida verdad? Soy muy bueno recordando gente. Herr Urik, creo que estaban jugando al escondite o al pilla pilla, debieron pensar que las íbamos a descubrir, pero Ida se fue al suelo. ¿Te hiciste daño? ¿Porqué tu amiga tiene las piernas así? ¿Está enferma? ¿Tu también las tienes así? ¡Te has puesto roja como un tomate! No te preocupes, no le diremos a nadie que te atrapamos tan fácil y si quieres nos la podemos quedar nosotros otra vez. ¿Que dice Herr Urik?

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07/11/2016, 17:03
Helene

Helene asistió al raudo intercambio de palabras con la sorpresa de quien ve caer sobre él una lluvia de flechas frente a las cuales no tiene opción de protegerse. Era evidente la vieja enemistad entre vampiros y licántropos y era ignorante de las razones de aquella. Pero lo que ahora vivía no era sino un nuevo asalto de una guerra que olía a ancestral.

Permaneció muda y quieta, expectante, fijándose en ambos bandos, cada uno a un lado del puente. No le pasó por alto el cabeceo de uno de los hombres lobos pero no supo dilucidar a qué podía deberse. Pero tenía una seguridad. Aquella reunión no progresaría en la buena dirección, estando ambas partes enrocadas y sin aparente deseo de ceder. Y si aquello era una negociación, ambas partes deberían ser flexibles, algo casi antunatura en ellos por lo que parecía.

La palabra justicia le hizo apretar la mandíbula. ¿Dónde estaba la justicia para los hombres? ¿Quién se preocupaba por ellos? Y entonces supo que ella era la elegida para hablar por ellos.

-Justicia es una hermosa palabra, pero ¿de qué justicia se habla? -Helene miró a una y a otra mujer, pues en el fondo, de un modo u otro, ambas lo eran. Y humanas, por más que su naturaleza se hubiera transformado de aquel original ya relegado a la sombra del olvido-. Como bien ha mencionado ella, me llamo Helene, Helene Maurgen. Y él es mi hijo, Vjelkus Maurgen. Representamos a los humanos y acudo en nombre de Herr Parriwimple -puntualizó utilizando el título que Urik daba al gigante-. Como humana, como madre, como mujer. Y ambas representáis a vuestras respectivas comunidades, para las cuales los humanos no representamos gran cosa en la mejor de las interpretaciones. Pero habéis acudido aquí con el fin de poner fin a un conflicto, de negociar una tregua y quizá un fin de hostilidades. Y para ello, deberéis hablar. Y conciliar. Con los dioses por testigos.

- Tiradas (1)

Motivo: Sabiduría

Tirada: 1d20

Resultado: 1(+3)=4

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09/11/2016, 01:44
Ida

¡No! ¡Mis pipipiernas son nonononormales! Ella tiene un injerto dededesde peq... pequeña. Baba Zelenna le cocosió piernas ra... raras. ¡Mis pipipiernas son normales!-repitió.

Ida se quedó muda, apartando la mirada. No sabía qué podía decir y qué no, y además, le daba vergüenza con su tartamudeo hablar delante de Parriwimple y quedar como una tonta.

Anoche una mumujer le cortó la cabebeza a una cocompañeee... ñera. Baba Zelenna nos ordenó bubuscar una sustitutituta. Vivigilábamos el camino esperando que p... pasase alguna chica. No hacíamos nada mal... malo.

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09/11/2016, 02:02
Valanthe

Todo ibaaaa... perfectamente bien. Helene no tenía porqué preocuparse por nada.

¡Cállate! Para tí es fácil hablar-recriminó la elfa-, pues tu hijo sigue vivo. Cuando los niños de Barovia se pierden en el bosque, no nos los comemos, pero mi niño, llevado por el frenesí de la transformación, entra por error en territorio humano, y lo matáis. ¡Asesinos!

Y la cosa ha ido a peor... Seguimos el rastro de los humanos hasta el castillo de Strahd, y algunos de los nuestros hallaron la muerte con los poderes mágicos de ese sucio vampiro.

Sasha enarcó una ceja, como si le molestase ese modo de dirigirse a su Amo.

Y un retén, que dejamos atrás para vigilar el pueblo vacío, no volvió al campamento elfo.

Helene sabía a quién se refería. Encontró su cadáver quemado en el patio de la casa de Gulpika.

Está muerto, ¿no es cierto? Son muchas muertes, y todas de nuestro bando. ¿Qué haríais los vampiros si matásemos a todos los humanos? ¿De dónde sacaríais la sangre cuando eso ocurriese?

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09/11/2016, 02:16
Sasha Ivliskova

Tenemos humanos en el castillo. De sobra para alimentarnos. No te preocupes por los míos, preocupaos por los vuestros. ¿Qué pasaría si Strahd, con su magia, quemase el bosque? Los animales de los que os alimentáis huirían hacia las Brumas, las Brumas que os rechazan, y que no podríais atravesar para seguir a vuestras presas.

No se trata de alimento, esa parte está fuera de esta negociación. Se trata de equilibrio. De orden. Y de que os comportéis como perros buenos. Tenemos una aliada en común: Valicia. Ella custodia para Strahd el Santuario del Pantano. No sé qué asuntos tratáis con ella, pero por el motivo que sea es escuchada por vuestra manada. ¿Es vuestra ama, quizás?

Valanthe, manteniendo su forma élfica, gruñó enseñando los colmillos, ofendida. Era obvio el odio mútuo que se tenían. Nunca lograrían firmar ninguna paz ni hallar un punto de encuentro por sí mismas.

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09/11/2016, 07:43
Herr Urik von Teudeldorf

- "No sé como algo así puede ser posible, Ivalic, me temo que escapa a mi comprensión y a mi conocimiento." -

Después escucho las palabras de la joven tartamuda Ida y entrecierro los ojos con sospecha.

- "¿Una mujer le cortó la cabeza a una compañera? ¿Esa mujer se llama Jacqueline Montarri?" -

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09/11/2016, 10:35
Parriwimple Indirovich

Parriwimple miraba a Ida y escuchaba las palabras de sus compañeros, algo perplejo. Era evidente (incluso para alguien tan estúpido como el amable gigantón) que la chica le pasaba algo. Parriwimple no sabía lo que era y pensó, erroneamente, que debía tenerle miedo.

Parriwimple no querer hacer daño a joven chica guapa. Parriwimple creer ella robar anillo Parriwimple cuando estar junto Parriwimple en monasterio, pero no estar enfadado, aunque anillo ser regalo de tio Bidrath y querer devolver- explica con torpeza- ¿Chica querer invocar demonio con otras chicas? ¿por qué chica querer hacer cosas malas? Demonios- continúa hablando Parriwimple- hacer cosas malas. Chica tener que informar Parriwimple para que no se invoquen cosas malas, porque Parriwimple querer proteger gente aldea.

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09/11/2016, 11:33
Ivalic Yannof

Ivalic intentó aguantarse la risa por la forma de hablar de Ida, sabía que no estaba bien burlarse de la gente con problemas, pero aún así al niño le hacía mucha gracia.

-Vaya... Baba Zelenna debe ser una gran sanadora si pudo hacer eso, deberíamos tenerlo en cuenta si necesitamos unas piernas nuevas.

Miró con suspicacia al fruto rojo, sin saber muy bien si estaba siendo sincera o simplemente le daba verguenza enseñarles las piernas. Mientras dejaba que los adultos hablaran Ivalic se agachó a atarse un cordón de sus zapatos, solo que no tenía ninguno desatado, solo quería mirar si era cierto que Ida tenía las piernas normales.

¡Mecachis! Esa túnica es demasiado larga y tan solo le veo el calzado.

Resignado ante su fracaso Ivalic volvió a ponerse en pie y asintió ante las palabras de Herr Urik.

-¡Sí! ¡Tiene que ser ella! Tiene pocas cabezas y las necesita para sobrevivir. ¿Que os parece si nos ayudáis a encontrarla y a vencerla? Engañó a mi madre y además es una mujer muy mala que quiere matarnos. Si recuperamos la cabeza de la chica puede que Baba Zelenna pueda cosérsela otra vez al cuerpo ¿No crees Ida? Es mejor que esté haciendo eso y no invocando demonios. Ya escuchas a Parriwimple, los demonios son muy malos, no podéis invocar a ninguno. Hazle caso a Parriwimple porque nunca miente. A que no Parriwimple.

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09/11/2016, 17:42
Herr Urik von Teudeldorf

- "Ivalic, no podemos afrontar a Madame Montarri y a Baba Zelenna sin la ayuda de Frau Helene... Por no hablar de dos demonios babau, y de aquellos "frutos rojos" que estuvieran dispuestas a luchar por su señora y el culto al demonio del Verdor..." -