Partida Rol por web

Davo Morales soltó una carcajada divertida y negó con la cabeza.

- ¿Estás segura, joven aprendiz de matasanos? Cuando este "alcornoque" lleve las riendas del asentamiento, mi venganza será terrible- era evidente que buena parte de la frase era una broma pero la seriedad volvió a sus gestos- Esperamos no necesitarte a la vuelta. Ni echarte de menos en el viaje. Cuida a todos en mi ausencia y ve a ver a mi padre cuando tengas un momento. Cuéntale todo lo que te he comentado, y dile donde estoy y con quien, ¿de acuerdo?- tras esas palabras se giró al resto del variopinto grupo- Lo lamento. La matasanos prefiere llenarse de mierda y patear mutarachas a asumir la necesaria obligación de obediencia a sus líderes- dijo nuevamente con un tono lleno de ironía.- En marcha, pues. 

Maddy alzó el pulgar hacia las palabras de Clara Oscura.

-Bueno me llevan a mi, que también se hacer algún apaño; el doc me enseñó.- Dijo hacia Clara Oscura, sonriendo confiada en sus habilidades de “CIENCIA Y MEDICINA”, antes de que esta volviera al Refugio Luego se volvió hacia Davo. –No seas tan duro Davo, salir al yermo es peligrosísimo. Algunos prefieren la seguridad de un agujero…-Suspiró aburrida por ser la más joven que fuera en ese grupo tan variopinto. Clara Oscura habría venido genial, porque al menos era otra conocida más.

El gruñido de Kath no le pareció raro, al contrario, de lo más lógico viniendo de ella, cosa que no hizo que apartase su sonrisa de sus labios. También la mantuvo ante aquella mujer, Clara Oscura, que parecía burlarse de Davo alegremente.

Nyx se mantuvo a la espera, su perro se mantenía a su lado pendiente de la marcha. Le hizo un gesto de despedida con la cabeza a la muchacha, de forma desenfadada, fijándose en como se le iba el humor una vez cruzó la puerta. Sus ojos regresaron al grupo en seguida, estrechando la mirada.

Cuando Davo dio la indicación de ponerse en marcha, ella simplemente, comenzó a caminar.

Vault City, noche del 23 de Octubre de 2291

La vuelta había sido tranquila, aunque tuvisteis que avanzar por la noche el último tramo vuestras luces no atrajeron compañías indeseadas. Una vez dentro de los muros de Vault City quedaba ver donde pernoctar, los que ya vivíais allí era sencillo, pero los forasteros os ibais a tener que hospedar en el Motel Happy Noises. El nombre era irónico, ya que se encontraba cerca de la depuradora de agua de la ciudad, por lo que el sonido permanente de su maquinaría era un repetitivo mantra para los que allí intentaban dormir. Desde luego, el que hubiera tenido la feliz idea de poner ese sitio se había lucido.

Quedaría descansar y prepararse para la jornada siguiente, iba a ser un viaje algo más largo que el hecho durante ese día, pero, al menos, parecía prometer una mejor recompensa que la comisaría.

Vault City, noche del 23 de Octubre de 2291

- Nos vemos mañana a primera hora. Descansad- señaló Davo antes de desaparecer.

Kath miró a Michael al llegar y asintió.

- Debemos reponer provisiones, ver si podemos sacar algunas chapas y dormiremos al raso, como acostumbramos a hacer cuando exploramos el yermo. ¿No? Porque no creo que podamos pagar por el alojamiento para nosotros cuatro. Y bueno, ya veremos de divertirnos... 

Claramente estaba incluyendo a ambos perros, llevando consigo la armadura que había cambiado. 

-Duh bueno…-Maddy se sorprendió con la repentina desaparición de Davo.

-¿Nos vemos al amanecer, no?- Preguntó a los demás.- Yo ire a casa, tengo algo en lo que trabajar…Y aguantar la charla de mi madre.- Maddy se miró con aquella armadura, seguro que la hacia muchas preguntas, y añadía el “¿pero tú sabes dónde puede haber estado esa armadura?”. Suspiró. – Creo que uno o una se puede venir, pero los perros no me dejaran meterlos…

—Entonces... nos vemos aquí mismo mañana, vale. —confirmó según ojeaba los alrededores— ¿Conocéis algún lugar donde ofrezcan provisiones que se conserven bien? —inquirió de manera distraída según valoraba sus siguientes pasos. En el peor de los casos tendría que hacer algún encargo al Atomic Cakes.

Instintivamente llevó las manos a los bolsillos, sabiendo que no podría permitirse gastar más de la cuenta y deseando que los alimentos irradiados nole dieran mayor tembleque del necesario.

—No me importaría tomar el ofrecimiento. —sonrió de manera ténue a Maddy— Aunque antes de ir a descansar pensaba merodear por la zona. Apenas llegué sucedió todo esto... así que quería ver qué negocios están asentados por aquí. Si voy a actuar por la zona tendré que buscarme una fuente de ingresos más estable que los saqueos.

Después de escuchar lo que todos decían, los rumbos que esa noche iban a tomar, Nyx suspiró, relajando los hombros. El ofrecimiento de Maddy era tentador, pero no podía llevarse a Torx. Mejor que fuera Katya.

- Yo me iré al Motel "Ruidos Felices" - Miró a Kath y Michael. - Si no puedo dormir, me voy al raso también, para no perder costumbre. - Esbozó una sonrisa. - Pero al menos voy a intentar descansar el cuerpo. - Hizo crujir los huesos de sus nudillos y luego su cuello.

- Suerte con la inspección. - Le dijo a Katya. - Si vais a algún sitio divertido, avisadme. Igualmente, nos vemos al amanecer. - Dijo mirando a Maddy y finalmente a JJ, que no sabía si también iba a dormir en una esquina cual perro callejero, o en el Motel.

El vagaparamos observó al grupo mientras decidían que hacer para pasar la noche, su plan era buscar un rinconcito cómodo, seguro y principalmente gratuito donde pasar la noche, escondido de cualquiera que quisiese aprovecharse de su descanso, durmiendo siempre con el arma sin amartillar y un ojo abierto, como el Yermo le había enseñado. – Que descanséis. – Dijo a los que ya se retiraban.

“El mambo de Davo” era el invitado del grupo que debía estar más resguardado, lo que suscitó la duda en JJ de qué hacer con él. – Madelaine ¿Qué harás con el protectron? No es un perro, no come, no huele y no debería de ser una molestia para tus padres. – Hizo una pregunta que en realidad afirmaba a Maddy que debería llevarse al robot con ella. – A donde voy, solo hay hueco para uno, así que nos vemos mañana. – Dijo al grupo despidiéndose, esperando descansar un poco esa noche.

Vault City, mañana del 24 de Octubre de 2291

De un modo u otro habíais podido encontrar sitio para descansar. Tanto Maddy como Davo estaban en casa, por lo que ese problema lo tenían cubierto, Katya terminó en casa de Maddy que, a cambio, la tuvo escuchar disertar acerca de las mil y una posibilidades que cotejaba para el Protectrón recuperado en la comisaría en ruinas. Por su lado, el grupo de los cancerberos encontraron habitaciones en el motel Happy Noises a cuenta de Michael, y, a juzgar por los ruidos felices que se escuchaban de la habitación que Kath y Michael compartían, el motel hacía honor a su nombre. Finalmente JJ encontró un buen rincón donde dormir al raso, al fin y al cabo estaba acostumbrado a esas situaciones, pero era casi un lujo saberse descansar intramuros de un asentamiento.

Al amanecer el grupo se encontró enfrente del Atomic Cakes, prestos a proseguir con su viaje. El se había levantado gris, había una tormenta de lluvia radioactiva que peinaba todas las Rocosas al oeste, pero al este, donde tenían planeado ir, parecía despejado.

Vault City, mañana del 24 de Octubre de 2291

A primera hora apareció Davo con el gesto tranquilo y bastante descansado. Al ver a sus compañeros asintió y les explicó el resultado de sus pesquisas.

- Disculpad que me marchara tan pronto. No quería retrasar nuestra nueva expedición y he estado indagando los precios de lo que tenemos con comerciantes de la ciudad. Por supuesto, podéis confirmarlos. Pero dudo que los encontréis mejores- hace una pausa y continúa- Por obvias razones no he tenido en cuenta el precio del Protectrón, pero sí de todo lo demás que hemos localizado. También he considerado que es mejor que en su caso lo que ya nos pertenece lo vendamos personalmente. Salvo que alguien del grupo quiera comprarlo, claro. Lo digo, Kath, porque pienso que es mejor que vendas en su caso tu armadura de cuero sobrante. No tengo problema en acompañarte a alguna de las tiendas, a fin que consigas el mejor precio posible. Pero en fin... os comento mis cuentas. Lo que hemos obtenido de este par de excursiones es:

Un cuchillo con perfil de Cuchillo de combate, valorando en 25 chapas, que se quedó Katya; 5 balas de calibre 38 que se valoran en 5 chapas, una cada bala; un paño que sería otra chapa; una botella de agua irradiada que son cinco chapas;  7 balas de 5.56mm, que son 14 chapas, a 2 la unidad; una armadura de saqueador que son 30 chapas; dos raciones de agua purificada que son cuarenta chapas, a veinte la unidad; un corcho, que se valora en una chapa; un revolver de tubo de calibre .45 que son 25 chapas; una armadura de combate que son 135 chapas; una armadura de metal templado que son 245 y una armadura de cuero endurecido que se valora en 90 chapas. Todo eso implica que a cada uno de nosotros le corresponderían 88 chapas. Por tanto Kath tiene lo que le corresponde, sin perjuicio de reiterar mi oferta de acompañarle a alguna tienda para que venda su armadura de cuero; resta por asignar a Katya bienes o chapas por valor de 63 chapas; resta asignar a Michael bienes o chapas por valor de 86 chapas; y resta por asignar a JJ, y restan por asignar bienes o chapas por valor de 88 chapas a JJ, Nyx y Davo. En cuanto a Maddy... Me temo que la armadura de combate o la de metal templado son demasiado caras, Maddy. ¿No prefieres la de saqueador? El resto, ¿elegimos bienes, lo vendemos y nos repartimos las chapas?

Vault City, mañana del 24 de Octubre de 2291

Tras una de esas noches de diversión y desestrés con Michael Kath salió bastante relajada y con más ganas de seguir recorriendo el yermo, acomodándose para escuchar a Davo y así, cuando éste terminó lo miró con calma y habló.

- Creo que aquellos objetos que nos puedan ser útiles en el yermo deberíamos mantenerlos... Como pueda ser el agua y las balas. En cuanto a la armadura no tengo problema en venderla y añadirla al "bote", después de todo si nadie la quiere es más chapas para poder conseguir material para el yermo. Creo que también le presté una de mis armas a Nyx, ¿no? No tengo problema en compartir cosas que nos permitan sobrevivir ahí fuera... El resto, decidir. También dispongo de una armadura de saqueador por si la necesitara alguien. 

Vault City, mañana del 24 de Octubre de 2291

Poco habituada a dormir bajo un techo seguro desde que había abandonado su asentamiento, Katya se habría mostrado agradecida con Maddison y el resto de los Pearce, a fin de cuentas independientemente de las comodidades que pudiera ofrecerles su hogar ya estaban muy por encima de lo que le habría esperado de no acudir.

Cuando finalmente se reunió con el resto del grupo atendió al reparto, asintiendo ligeramente a los artículos mencionados y la cantidad que pertocaba a cada uno. Luego observó a Kath.

—Estoy de acuerdo con ella, ah, y si alguien cree poder darle mejor uso al cuchillo puedo cedérselo. No me interesa tanto por su uso como arma, sino como herramienta. —se tomó una mano con la otra— Por otro lado me va a tocar destinar mi parte a comprar provisiones, así que si lo consideráis necesario puedo quedarme con alguna de las raciones de agua y menos chapas.

Por su parte portaba una armadura de saqueador, aunque ya la traía consigo la primera vez que se vieron. No mostró gran interés en la protección siendo que no morirse de hambre le resultaba prioritario en aquellos momentos.

Vault City, mañana del 24 de Octubre de 2291

Davo miró unos segundos a Kath con curiosidad. Al fin y al cabo no olvidaba que había sido la más reticente, solo un día antes, a realizar una partida conjunta. Pero en todo caso eran buenas opiniones.

- Estoy convencido que todos los objetos de interés habrá alguien que le interese. Dudo que cosas como balas o agua no vayan a tener a algún interesado. Sin embargo, mantengo mi opinión que debemos repartirlos, o convertirlos en chapas. Al fin y al cabo, como se mencionó, no dejamos de ser un grupo que pudiera ser temporal. ¿Qué sentido tiene ir acumulando bienes en una especie de fondo común que no se reparta? Por otro lado, en cuanto a tu armadura de cuero, no me refería, Kath, a sumar su valor al fondo común. Me refería a que podía acompañarte a una tienda para que la vendas. Para tu dinero. Era tuya, y sigue siendo tuya, faltaría más.

Tras esas palabras asintió a las palabras de Katya y le entregó una de las botellas de agua no irradiada.

- Con esto son veinte chapas más. Por lo que sumadas al cuchillo te quedan para lo que vendamos 43 chapas. ¿Alguien más quiere los bienes que hay por aquí? Maddy, como dije, no hay dinero para que te quedes con esa armadura. Salvo que tengas dinero propio o vendas cosas como para llegar a esa cantidad. ¿No prefieres una armadura de saqueador? Sin duda, es menos cara, y más cómoda.

Vault City, mañana del 24 de Octubre de 2291

Para Nyx la noche no había sido nada vigorizante para el día que le esperaba al día siguiente. Es cierto que había podido descansar en el sentido de, acicalarse, quitarse la ropa, acomodarse... había veces, que pasaba tanto tiempo fuera que eso debía hacerlo de otras maneras. ¿Pero dormir? ¿Con Kath y Michael al otro lado? No... imposible. Claro que no les iba a reprochar su noche de diversión con mal humor, por supuesto que no, pero si había algo que podía asegurar, es que ese motel tenía las paredes de papel, y los ruidos eran para todos. No les dijo nada malo, aparte de algún comentario del palo "Si seguís dándole tan fuerte os vais a romper" o "Lo llego a saber, y me uno a la fiesta" siempre en tono divertido.

A pesar de todo aquello, había descansado, aunque en malas posturas así que llegó al Atomic Cakes tronándose los huesos de medio cuerpo. Saludó al grupo con una sonrisa. En cuanto Davo comentó la lista de cosas que habían adquirido, escuchó con atención la conversación, sobre todo con Kath, que tenía alto interés en la armadura.

Cuando Kath comentó lo de las armas, Nyx giró la cabeza, dudosa. - ¿Ah si? ¿Cuál? - Eso podía parecer como hermanas que se prestaban la ropa, y ya no sabía qué cosa era de cada una. - Estoy de acuerdo con Kath también, debemos conservar lo que no sea útil allá fuera. - Yo también tengo armadura de saqueador, así que por esa parte estoy servida.

Miró Davo al volver a hablar, ella solo había hecho pequeños incisos. - Todos los bienes que sean para sobrevivir, hay que mantenerlos. Las chapas que me toquen, las cambiaré por provisiones, en eso estoy con Katya. Por lo demás, lo que creáis correcto, estaré de acuerdo.

-Boooooh.- La noticia de la armadura llegó como un jarro de agua fria para la muchacha, que dejó el casco sobre una de las mesas del exterior.- Demasiado bonito para ser verdad. Pero oye lo del saqueador me gusta tambien; a ver que tal me queda.- Hizo el gesto de la cornamenta y se fue a probarse esa armadura de saqueador, que eran piezas de cuero y cosas así; al final salió con algo mas ligero puesto encima; lo cierto es que la armadura la tenia que llevar algo abierta mostrando algo de canalillo y dejaba parte de los muslos al descubierto.

-¡Fua...Demonio de carretera!- Dijo haciendo el simbolo de los cuernos con la mano que llevaba un mitón puesto.- ¡Vamonos tronquis, a quemar el puto yermo!-Dijo intentando sonar como una saqueadora de verdad. O al menos las de los comics que habia leido.- Ya podeis quedaros con esa mierda armadura del ejercito, que pesa un quintal y estorba mas que un...un yo que sé.-Se echó una pequeña risa, restandole seriedad a su actuación en un solo plumazo, si es que esta tenia alguna.