Partida Rol por web

Gys no tuvo mucha suerte con su investigación, por lo menos, no encontró la información que necesitata, sin embargo, sus pezquisas han dado otro resultado.

Tierras Sombrias:

Recursos A

- Comida x 2

Frustrado tras no haber encontrado nada de interés, recojo una ración de comida guardándola en la pequeña mochila en la que llevo mis pocas pertenencias.

Al no escuchar respuesta por parte del comerciante, tomo una de las raciones que encuentran.

Mía.

Digo sin dudar mientras comienzo a comerla.

Me fijo en los recién llegados.

Bueno, poco fruto estamos sacando por aquí.

Muevo las orejas ante los recién llegados y sin dejar de prestarles atención busco para encontrar un rumbo que seguir.

- La verdad es que no hemos sacado mucho en claro y ya llevamos unos cuantos días - respondo a Raenhmi girando mi cabeza hacia Zorin preguntándole - ¿Cuanto nos queda para llegar?

Tras eso me doy cuenta de la llegada de cuatro personas hasta donde nos encontramos, a simple vista parecen todos guerreros pero a saber quienes son y cuales son sus intenciones, pero toca estar alerta.

- Buenas a tod@s, sean bienvenidos a este jodido y yermo lugar que son las tierras sombrías. ¿Podemos hacer algo por vosotros, viajeros? 

Llegamos a las tierras sombrías y lo primero que nos encontramos fue a un grupo variopinto de gente. -Somos miembros de la Hermandad de la Luz y estamos aquí para investigar que está pasando. La verdadera pregunta es ¿Qué hacéis vosotros aquí? -Uno de los presentes se parecía a la oscura elfa que nos había querido asesinar. ¿Tendrán algo que ver?

Mi nombre es Cassandra Evert y como bien ha dicho mi compañero Palandras, formamos parte de la Orden de la Luz...

Cassandra detuvo de repente su charla y miró, confundida, a su alrededor. Después se dirigió a Korina y Palandras con semblante serio.

¿Donde está Mardodia? Se supone que venía con nosotros...

Demasiada gente para lo que estaba acostumbrado, y encima miembros de la orden de la luz, como aquel joven incompetente. Lo extraño es que aquella Orca no le hubiera seguido como había hablado antes.

No había signos de maldad, ni de sombras peligrosas, en principio estaba a salvo. Voy a dar una vuelta a ver si veo a la orca. Sin prestar mucha atención a los presentes me marche a investigar.

Alzo mi ceja al escuchar la contestación de uno de los "autodenominados" miembros de la hermandad de la luz.

Venga no me jodas, que me va a tocar aguantar a un fantoche.

- Amigo empiezas con buen pie - comienzo a decir sonriendo levemente - Si quieres empezar una competición para ver quien la tiene mas larga, conmigo lo llevas jodido, seas lo que seas. Si estoy aquí es porque alguien ha solicitado mis servicios y sinceramente no llevo vivo tantos años confiando mis secretos y mis ordenes a la primera persona que se cruza en mi camino, solo lo hago cuando demuestra que esta de mi lado, con saber que sirvo a la guardia, ya tienes bastante información. No es nada personal. Eso si, me presentare - miro a Cassandra, la mujer que ha mostrado algo de cortesía - Soy Gys Laraer, y aunque no soy un distinguido miembro de la hermandad de la luz aún conservo cierta educación y modales - termino diciendo con la mano diestra apoyada con suavidad en la empuñadura de mi arma con rostro relajado.

Gys saca su especie de mapa raro mientras todos intentan presentarse y mostrar sus atributos guerreros a todos y sobre todo, intentar descubrir que hace cada uno y cual es la razón para estar perdidos en el Yermo Sombrío de estas tierras. El hombre se da cuenta que el promontorio que habían visto hace unas horas en la encrucijada está cerca de dónde marca la X de su mapa. Los demás realizan pequeñas investigaciones que no llegan a dar ninguna conclusión, por lo menos alguna fiable...

Y en ese momento...

Día 3 Turno de día - EVENTO ESPECIAL

...el ambiente comienza a llenarse de una preocupante neblina y todo parece estar mas oscuro a pesar de ser de día. Escucháis los gritos de la gente pero no les veis, tan solo estáis vosotros, rodeados de sombras. Pero no os atacan. De entre ellas surge una figura mas imponente, un caballero oscuro.

Su arma emite un brillo que jamás habías visto. Sin duda, su estocada podría ser mortal. No hay preguntas, no hay conversación, el tiene un propósito y vosotros buscáis la supervivencia. No hay mas que decir.

Sin dudarlo, se lanza contra Z con fiereza, ante la impotente mirada del resto.

No me había alejado mucho del grupo, pues quería estar seguro de que ellos no hicieran algún movimiento en mi contra o incluso poder escuchar algo sobre sus conversaciones para ver si sacaba algo en claro de ellas.

Poco a poco un niebla inundaba el ambiente, incluso podía ver como si aparecieran sombras por todos los lugares que nos rodeaban, me acerque hacia el grupo para avisarles de que debían estar alerta, cuando un caballero de armadura negra me ataco de entre la niebla blandiendo un arma que jamas había visto.

¿Quien er......? no había terminado de realizar mi pregunta cuando su ataque acertó de lleno en mí.

El caballero oscuro sonríe.

Se sabe ganador.

Carga contra Z sin que nadie pueda hacer nada y levantando su espada por encima de la cabeza, corta el aire y al aventurero de arriba abajo, haciendo que la punta de la espada marque, corte y al mismo tiempo por el calor, cicatrice un terrible corte que va desde por encima de la ceja de Z hasta su barbilla.

Acto seguido, Z cae inerte al suelo mientras el Caballero Oscuro desaparece entre gritos de socorro y risas terribles.

Z parece muerto, sin embargo, tras unos segundos, comienza a respirar de nuevo. Está muy herido, pero por lo menos, la espada al cortar cauterizó la herida y eso hace que no sangre por la misma. Pero si no recibe ayuda pronto, morirá.

Bueno parece ser que estamos cerca por fin una buena noticia, por los dioses que ganas tengo de abandonar este maldito yermo y llegar a unas tierras civilizadas.

- Estamos cerca de llegar a nuestro destino y dar caza a ese cabrón – digo al resto señalándoles con el índice en el mapa el promontorio y deslizarse por el hasta llegar a la X que no esta lejos.

Sonrío guardando el mapa entre los pliegues de mi ropa, dispuesto a seguir nuestro camino. Si la suerte nos sonríe, mañana por la mañana estará todo solucionado.

Entonces todo se complica, las sombras de las que oí hablar el día anterior hacen acto de presencia. Mal asunto. Y por si no fuese suficiente aparece un heraldo del señor oscuro, un caballero oscuro...

- Pero, que cojones ...- desenvainando el arma, listo para hacerle frente, pero no soy su objetivo, es el guerrero de cabello blanco. Me limito a observar mi alrededor listo para defenderme de las sombras si se deciden a atacarnos esperando que el guerrero sea capaz de hacer frente al caballero oscuro.

Sorprendido por lo que acaba de ocurrir, voy a cubierto mientras trato de entender qué está pasando o percibir algo que me hagas saber quién es o cómo enfrentarnos a él

Las sombras no nos atacan, pero el caballero oscuro descarga un brutal golpe contra el guerrero humano haciendo que caiga al suelo como un fardo, para desaparecer llevándose a las sombras con él. Envaino el arma y me dirijo hasta donde se encuentra, esperándome lo peor.

Al llegar noto que aún respira, pero esta muy jodido, a unos pasos de la muerte.

- Maldita sea, ¿Alguno de vosotros tiene algún conocimiento sobre primeros auxilios? - pregunto mientras los recuerdos de las batallas pasadas golpean sin piedad mi mente. Vamos, aguanta, aún tienes que devolverle el golpe a ese cabrón - digo a Z agarrando su mano - Joder, ¡daros prisa!

- Puedo preparar una poción curativa... Rápido, necesito: 

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Iba a contestar a aquel anormal para ponerlo en su sitio cuando aquella abominación hizo su acto de presencia, hiriendo al hombre que se había ido sin ni siquiera saludar. Joder... está claro el lugar en el que estamos.

Sin mediar palabra enarbolé mi lanza en actitud claramente agresiva y me coloqué junto a mis compañeros, preparado para atacar a lo primero que se nos acercara. -Creo que aquí vamos a investigar poco...

El caballero oscuro ha atacado y ha desaparecido. Sólo vino para atacar a alguien al azar con todas sus fuerzas y una vez cumplida su misión, ha desaparecido. Z está vivo de milagro, aunque está al borde de la muerte, un golpe, por mínimo que sea podría matarlo. Aún así, el humano resiste con entereza, y pese a estar herido, puede caminar con algo de dificultad.

Zorin no entiende que está pasando, su gran cerebro no logra comprender lo que acaba de pasar, sin embargo, rápidamente se recompone y comienza a mirar por el lugar en busca de algún tipo de hierbajos o ingredientes para elaborar una poción que pueda darle un poco más de vida al aventurero herido.

Zorin busca por la zona ingredientes para ver qué poción puede hacer que ayude al hombre herido.