Ciudad de Nueca york un sitio donde hay mil posibilidades donde se dice que se cumple el sueño americano, ahora estais alli en un banco normal y corriente, donde todo parece indicar que sera un dia aburrido.
-Hola- digo a mi vecino de banco, mirando a un señor de enfrente, que da de comer a las palomas.
Klaus mira al chico que le habla, parece algo menor que él, aunque no demasiado.- Hola. - Klaus no dice nada mas, solo le mira esperando ver si quería algo o simplemente le hablaba sin ningún motivo.
Parece que hoy no va a ser un gran dia...
-¡Qué rara coincidencia! - empiezo - eso es lo que digo simpre que estoy en un banco - pienso en voz alta.
- No veo ninguna coincidencia...- Klaus niega con la cabeza y mira hacia el frente. - Pero si te hace ilusión decir esas cosas...- Parece que solo busca una conversación sin sentido, eso podría traerle problemas...
-¿Hacer ilusión? - pregunto, sin darme cuenta de estar hablando en voz alta.
Klaus se encoge de hombros. - Nada, déjalo, son solo tonterías. - Podría ser entretenido... A Klaus se le pasa una idea por la cabeza. - Te apetece ir a tomar algo? el día pinta aburrido, tu podrías entretenerme un rato, o almenas me podre tomar algo mientras observo a la gente. - Así podre robar después a quien me plazca.
-No sé... - digo pensativo, aunque la verdad no tengo nada que hacer - ¿por qué no?
Pues entonces podríamos ir a algún lado. - Klaus se levanta del banco. - ¿Algún lugar en particular? ¿O cualquier lugar sirve? - Klaus se queda parado mirando al chico, a ver si le daba respuesta. La verdad, no sé por qué hablo con él, pero parece que no es un cualquiera, si no ya le habría ignorado.
-Cualquier lugar me sirve... - digo, y aunque no me apetece nada ir me apetece menos quedarme mirando palomas.
hay una cafeteria cerca que tiene buen aspecto y sobre todo buenas vistas de la calle
Klaus observa la cafetería. Podría servir… - Que te parece si entramos en esta cafetería? Podríamos tomar algo aquí. – Sin esperar respuesta Klaus se dirige hacia la cafetería para entrar.
-Cómo quieras... - digo siguiéndolo.
entra en la cafeteria y se sienta lo mas cerca de la ventana que puede, asi podria observar a la gente pasar. Se queda esperando a que la camarera le atienda y les sirva
Me siento enfrente del desconocido y con lka pared a mi espalda, me gusta sentarme esquinado en los locales cerrados.
la cafeteria es normal, no veis nada fuera de lo comun, camareros heromasas, clientes disfrutando de un caffe o alguna otra cosa no esta muy concurrido y la persona mas destacable de alli es un chico que esta ocupando 2 mesas el solo con cientos de papeles desperdigados en ellas y parece estar buscando algo.
Que hombre mas trabajador... no se como no se aburre... Klaus llama a una camarera con la mano para que le atienda, cuando le hace caso y se hacerca le pide. - Me gustaria tomar un cafe con leche. - Mira al otro joven. - ¿Tu quieres algo?
-Una coca-cola no estaría mal, gracias - digo mirando un momento a la camarera, antes de volver a fijarme en el chico trabajador.
- Aqui teneis- digo dan doles loque han pedido, no puedo mas que fijarme en que esos 2 no parecen tener nada en comun, no entiendo que hacen juntos
- Muchas gracias guapa. – Klaus le guiña un ojo a la camarera, después se vuelve al otro chico. – Ya que hemos empezado una conversación por qué no me dices tu nombre? Podría ser útil que lo sepa. – Le ofrece la mano al joven. – Mi nombre es Klaus.