Partida Rol por web

Hilos invisibles

Capítulo 1: Tú ya no eres sólo tú (Devendra)

Cargando editor
27/05/2016, 22:22
Narrador

La expresión de tu suegro no oculta su poca convicción con respecto a tus palabras. No parece que las crea falsas, sino más bien que no siente que le estés respondiendo a lo que ha dicho. Aún así te deja ir con un último gesto de despedida y deseándote una buena noche.

El camino hacia la casa de tus padres es accidentado, pero nada que no puedas sortear sin dificultad yendo un poco más despacio de lo habitual. El sonido de la moto probablemente llame la atención a todos los que viven en las casas de alrededor y conforme atraviesas el pueblo es inevitable sentir la presencia del tiempo en todo lo que te rodea.

Para cuando llegas a la casa de tus padres ha pasado la medianoche. Las luces están apagadas y el aroma de lo que siempre fue tu hogar llega hasta el centro de tu cerebro trayéndote todo tipo de recuerdos.

Pero en el momento en que te quitas el casco ya no estás ahí. Todo a tu alrededor ha cambiado y lo primero que te llama la atención es la fuerte luz artificial en contraste con la que veías hace un instante.

Poco a poco vas percibiendo el resto de la habitación. Se trata de un despacho de unos quince metros cuadrados con las paredes pintadas de blanco. Al otro lado de la mesa de madera clara, tras el ordenador, hay un hombre de alrededor de cuarenta años, con el pelo castaño claro bien recortado y peinado hacia atrás. Sus entradas son prominentes y lleva un bigote rubio, ligeramente más claro que sus cabellos. Sus ojos son fríos y de color miel. Tú estás sentado en una silla al otro lado de la mesa junto a dos jóvenes de apariencia oriental. Ambos parecen preocupados.

El más cercano a ti parece más mayor no sólo físicamente, sino también en alma. Debe tener tu edad, pero todos sus gestos parecen cargados de un miedo que sientes de una manera tan clara como si fuera tuyo. No es algo momentáneo, sino un lastre con el que carga día tras día. Su pelo es corto y va sin duda bien vestido.

Es extraño estar allí, pero al mismo tiempo tienes la sensación de estar exactamente donde debes estar. Te sientes cómodo en ese lugar, compartiendo con ese hombre lo que quiera que le esté pasando. No se te escapa que entre él y su acompañante hay confianza y complicidad: probablemente sean familia. 

En el momento en que vuestras miradas se encuentran algo en tu cerebro y en tu pecho parece conectar con él tal y como ya te había pasado antes. Es como si lo conocieses de siempre, a pesar de no haberlo visto nunca. Sabes que podrías ponerte en sus manos y no tendrías nada que temer. De nuevo un hilo invisible se ata, uniéndoos de una forma que tu mente no puede racionalizar ni explicar, pero que sientes de una forma tan innegable como inexorable. 

 

Notas de juego

Seguimos en Capítulo 1: Tú ya no eres sólo tú (Hyun)

Cargando editor
25/06/2016, 22:46
Narrador

Sucede en apenas un instante. Parece que en un momento estés en aquel despacho, con Hyun, y un parpadeo más tarde estés de vuelta delante de la casa de tus padres. A dos pasos de ti tu moto descansa, apagada y un poco más fría que antes de irte y al frente tienes la vivienda en la que creciste. Las luces siguen apagadas y aunque esa sensación de amarga soledad que ya conoces está presente en tu pecho los sonidos y recuerdos que te rodean ayudan a mitigarla.

 

Notas de juego

Venimos de: Capítulo 1: Tú ya no eres sólo tú (Hyun).

Cargando editor
27/06/2016, 21:58
Devendra Balabhadra

Es bastante frustrante haber tenido una experiencia tan increíble como aquella y son embargo no haber podido ayudar en aquella especie de llamada de auxilio.

Ojalá hubiera podido convencer a ese canalla.

- Bueno... - suspiro frente a la casa de mis padres.

Estoy en una nube ahora mismo, es una mezcla de sensaciones muy extraña. Agridulce, eufórico, contento por ser especial pero preocupado por las obligaciones que me atan a mi vida. En especial estoy impaciente por el extorsionador y las palabras de mis padres.

Quizá sea una chorrada pero ahora que me estoy jugando tanto prefiero absorber cada detalle del paisaje, del aire, de todo.

Camino hasta la puerta y antes de picar paso la mano por el cabello para estar presentable. Tengo tanto sueño... Una conversación más y podré descansar antes de confesar...

Cargando editor
01/07/2016, 23:10
Gavan Balabhadra

Al principio cuando llamas no sucede nada. La casa permanece a oscuras y en silencio. Pero tras algunos segundos se enciende una pequeña luz en la planta superior, donde sabes que está el dormitorio de tus padres. Ves cómo una sombra se acerca a la ventana y mira por ella hacia fuera y entonces reconoces a tu padre que no tarda en dejarla para entrar de nuevo.

Pasan sólo unos segundos antes de que la puerta se abra y por ella asome tu padre, vestido con su ropa de dormir y con el sueño todavía pegado a sus pestañas. Te mira de arriba a abajo, con cierta incredulidad ante tu presencia allí, pero finalmente sus labios se curvan en una sonrisa.

¡Devendra! ¿Pero qué haces aquí tan tarde, hijo? ¿Estás bien? ¿Cómo no has avisado de que vendrías? —Mientras habla, se acerca a ti para darte un abrazo breve pero fuerte. No llega a separar una de sus manos de tu espalda y con ella te invita a entrar en la casa. —Pasa dentro. ¿Has cenado ya? Tu madre se está poniendo presentable, pero ahora bajará a recibirte.

Cargando editor
04/07/2016, 20:21
Devendra Balabhadra

Vuelta otra vez a lo mismo

Es duro tener que decirle algo así a un padre, pero más triste es tener que continuar mintiéndole supongo. Sabía que había venido a hacer aquí, si hubiera aceptado el dinero del padre de Asliha me habría ahorrado todo este follón.

- Hola papá - digo con un tono alegre pero mi rostro evidentemente no refleja la misma emoción, no es para menos. Él me abraza una vez pero después de que me invite a entrar soy yo quien le da un largo abrazo, y es que a lo mejor no vuelvo a hacerlo en mucho tiempo. - Si, ya he cenado... Vengo de casa de Alisha - menciono la cena.

Me sorprende que mi madre tenga que ponerse "presentable", después de todo soy su hijo. Pero bueno, no seré yo quien la juzgue...

- Ha sido todo muy repentino, también es una larga historia al mismo tiempo y... - al llegar a su altura me planto un instante para mirarle fijamente - Tenemos que hablar de algo muy serio... 

Cargando editor
15/08/2016, 12:46
Gavan Balabhadra

Es difícil saber si tu padre ha notado o no tu falta de alegría. Parece demasiado sorprendido y entusiasmado con la idea de tenerte en casa por sorpresa. Devuelve tu nuevo abrazo, disfrutando de él con gusto y en cuanto le dices haber cenado ya en casa de tu prometida asiente, tomándolo como algo natural a pesar de que puede ser la primera vez que os encontráis en esta situación. Después de todo pronto vais a casaros, es normal que tengáis que veros para hablar de los preparativos.

Sin embargo cuando dices tener una larga historia y algo serio que hablar al mismo tiempo su ceño se frunce con un deje de preocupación. Vuelve a hacer un gesto hacia la casa, insistiendo en que paséis, y su actitud se torna un poco menos alegre.

—¿Quieres que esperemos a tu madre? —pregunta, aunque es evidente que él quiere saber de qué se trata cuanto antes—. Si habéis roto vuestro compromiso, no te preocupes: lo arreglaréis —asegura, aunque no tarda en fruncir un poco el ceño y probar otra teoría—. ¿No estará esperando, verdad? —te dice. A pesar de lo mal visto que estaría que no hubierais esperado al matrimonio es evidente que ser abuelo sería una satisfacción para tu padre.

Cargando editor
15/08/2016, 13:12
Dakshesh Balabhadra

Tu madre no tarda más que unos minutos en unirse a vosotros. Va vestida con un sari de colores amarillo y rojo, y en cuanto su mirada se cruza con la tuya sus pupilas se llenan de empatía.

—Buenas noches, hijo —te saluda como si nunca te hubieras ido. Entonces se dirige directamente a la cocina para preparar té para los tres.

Poco después ya estáis todos sentados alrededor de la mesa. Es una mesa cuadrada y pequeña, pero aún así tus padres han optado por sentarse uno al lado del otro. Tu madre guarda sobre sus rodillas, entre sus dedos, una de las manos de tu padre, y este tiene la otra apoyada sobre la mesa. Ambos esperan a que relates tu historia.

Cargando editor
15/08/2016, 22:53
Devendra Balabhadra

- No, no... No se trata de nada de eso - niego rotundamente a ambas, aunque inmediatamente aquello me da que pensar en que podría llegar a ocurrir. De hecho, era lo más probable si me arrestaban.

Giro mi rostro para responder a mi madre que se presentaba - Hola mama - comento con una sonrisa y alzando la mano para saludar con un poco de efusividad.

Me preocupa saber cómo podra reaccionar mi padre, solo espero que la cosa no se acabe desmadrando.

- Hace tiempo os pude haber hablado de la muerte de mi compañero Yamir - empiezo a explicar cruzando las manos y adoptando una postura relajada. Estoy sentado con la espalda recta y tratando de mantener una respiración lenta. - Un compañero de trabajo que trabajaba en el mismo rodaje que yo, ¿lo hice? - pregunto sin acabar de recordar si lo hice o no.

- El caso es... Que desgraciadamente yo soy culpable de su muerte. Yo causé que se precipitara accidentalmente desde muchos metros de altura, no tenía que haber sucedido nada... Nunca hubiera esperado algo así - explico lentamente. - He mantenido este secreto con Alisha todo este tiempo. He sido atormentado tanto tiempo que he... enfermado de alguna forma... le veo a veces, siempre está presente.

Notas de juego

Si necesitáis que concentre todo lo sucedido en un solo post para no ralentizar lo hago!

Cargando editor
28/09/2016, 00:30
Gavan Balabhadra

Tanto tu padre como tu madre parecen expectantes y aunque no llegan a estar incómodos sí les notas ligeramente nerviosos hasta que comienzas. En cuanto hablas de la muerte de Yamir tu madre hace un asentimiento leve, simplemente demostrando que te comprende, y este se repite acompañando a uno mayor de tu padre cuando les preguntas si les hablaste de aquello.

El silencio que se crea acto seguido, justo antes de que empiece tu relato, es un poco más denso que el anterior. El paso que estás a punto de dar es sin duda importante, y por su actitud dirías que tus padres lo intuyen.

Conforme hablas puedes ver cómo cambia el rostro de tu padre, palideciendo un poco. Sus labios se abren ligeramente, pero no llega a decir nada. A su lado, mientras tanto, su esposa permanece estoica. No es que no le haya afectado lo que has dicho, sino que siempre ha sido más espiritual. Aquello no debe parecerle demasiado grave, sino una parte más de la vida.

—Bueno, pero... —empieza a hablar tu padre, intentando forzar una sonrisa y llevando su mano a tu hombro por un instante de una manera que intenta ser afable—. Tú ya has dicho que fue un accidente. Esas cosas pasan. No... No lo hiciste intencionadamente, y eso es lo que importa.

Cargando editor
28/09/2016, 00:49
Dakshesh Balabhadra

Mientras tu padre puedes ver cómo tu madre, paciente, acaricia con suavidad la mano que aún sostiene. Al final ella cierra los ojos un instante y asiente con la cabeza, demostrando una vez más que te ha entendido.

—Claro que siempre está presente —asiente—. Él es ahora una parte de ti, como tú lo eres de nosotros —afirma antes de guardar un instante de silencio—. ¿Has hablado con él? ¿Te has ganado su perdón?

Cargando editor
29/09/2016, 22:14
Devendra Balabhadra

No acabo de saber si mis padres realmente han entendido la situación, o eso o es que yo quizá le estoy dando más bombo del que merece. Aun así me alivia saber que no me desprecian, eso es por encima de todo lo que más me satisface ahora mismo. Durante un segundo soy capaz de ver un atisbo de esperanza en todo aquel asunto.

Mi padre como siempre es tranquilizador y pragmático, pero a veces pienso que vivir tan aisladamente le hace olvidar que las leyes existen. Por otro lado mi madre parece ir más allá con aquella afirmación, ¿cómo le digo que las visiones son fruto de una locura más terrenal?

- Mamá, no... - empiezo con una sonrisa que consigue arrancarme ella al ser tan maja. - Le veo, pero todo parece ser producto de un trauma, y sobretodo la culpa mamá... Durante un tiempo pensé que realmente era él castigándome pero después tuve que acudir a la consulta de un psiquiatra. Con su ayuda dejo de verle en ocasiones... 

Niego un poco tratando de hacerle entender.

Cambio el peso de la postura de una pierna a otra ya que a pesar de estar sentado estoy inclinado y cabizbajo. 

- No me perdona, solo... eso, solo me castiga - explico siendo suave y rezando para no tener que volver a vivir aquella experiencia.

Poco a poco empiezo a sentir una oleada de alivio y calor familiar, es enternecedor ver cómo me tratan y no me condenan. Es increíble que ya haya contado ese secreto, después de tocar fondo uno no puede hacer más que ir hacia arriba. Ya no tenía que esconderme. 

- Papá, mamá, me alegro de haber venido - explico. - Debí hacerlo hace mucho tiempo, no habría tenido que guardar un secreto así, os lo agradezco de corazón. Estaré eternamente en deuda con vosotros debido a vuestro amor, os quiero - explico con una sonrisa más amplia si es posible y sintiendo como los ojos se me enrojecen.

Notas de juego

Yo voy a seguir dando conversación, cuando queráis cerrar el día acelero un poco...

Cargando editor
30/09/2016, 21:18
Dakshesh Balabhadra

La mano de tu padre que había buscado tu hombro desciende hasta posarse cerca de él mientras sigues hablando. Tanto él como tu madre te escuchan atentos, y cuando aclaras que tus visiones no están más que en tu cabeza puedes ver el ceño de ella fruncirse un poco, disconforme. Reconoces esa expresión de otras veces: es la que pone cuando está a punto de decir algo con lo que no está de acuerdo. Sin embargo cuando hablas de castigo ese gesto desaparece y en cambio sus ojos se llenan de empatía.

—Nosotros hemos recibido de ti más de lo que nunca podremos darte —te dice hablando lentamente—. Y lo importante no es lo que has tardado en venir. Lo importante es que lo has hecho.

Después de esas palabras la mujer que te ha dado la vida permanece un segundo en silencio, observándote. Al final termina por liberar una de sus manos y con ella buscar la tuya sobre la mesa.

—Hijo mío —enuncia con un tono lleno de comprensión—. Estamos aquí para todo lo que necesites. Si quieres volver a casa puedo preparar tu cuarto. Seguro que Alisha estaría encantada de que estuvieras más cerca —En ese momento vuelve a quedarse callada, y cuando sigue hablando lo hace con un suspiro—. Mi pequeño... Qué mal lo has tenido que pasar. ¿Cómo supiste que no se trataba de él?

Cargando editor
02/10/2016, 22:45
Devendra Balabhadra

- Necesito creer que Yamir no me haría algo así, si lo creyera entonces... - niego con cierta tristeza. - Adopta su forma pero me aterra con miedos que solo yo conozco, es complicado de explicar, pero no puedo decir que haya sentido un contacto con su verdadero ser. 

- Madre te contaré todo cuanto sé, quizá tus consejos sean lo que realmente me hace falta para superar esto - explico antes de precipitarme a explicar el resto de la historia, la que me había traído hasta mi pueblo natal.

- Pero, hay algo más que tengo que explicaros: alguien se ha enterado de lo que hice - comento intercalando la mirada entre ambos. - Un hombre vino a verme este medio día al salir de la grabación. Sabía lo que había hecho y amenazaba con revelarlo si no le hacía un pago... Una cifra que poco me interesa ya, no voy a pagarle. El caso es... Que mañana todo será distinto para mi, para Alisha.

Cargando editor
04/10/2016, 23:47
Dakshesh Balabhadra

Tu madre no deja de acariciar tu mano mientras sigues hablando, pero puedes notar cómo incluso su normalmente inalterable calma se tensa un poco con tus últimas palabras. Su ceño se frunce un poco y ladea el rostro mientras te contempla.

—¿Qué quieres decir con eso, hijo? ¿Qué es lo que va a cambiar?

Cargando editor
05/10/2016, 01:08
Gavan Balabhadra

Tu padre, sin embargo, parece comprender mejor las implicaciones de la situación que describes. Su posición en la silla cambia, echándose un poco hacia delante, y cruza los dedos de ambas manos sobre sus rodillas.

—¿Qué tiene ese hombre contra ti y qué puede hacer, Devendra? ¿No le has dicho que fue un accidente? Los accidentes ocurren y no se puede hacer nada. No debes seguir torturándote, hijo. Además... Seguramente en tu trabajo tendrán algún tipo de seguro que se encargue de estas cosas, ¿no? —pregunta, buscando tu mirada como para que le confirmes algo de lo que él no tiene mucha idea—. ¿Cuánto dinero te han pedido? Dinos qué necesitas.

Cargando editor
06/10/2016, 21:02
Devendra Balabhadra

 - Me exige quinientas-mil rupias, pero da igual porque no voy a pagarle - respondo a mi padre con la idea que había venido, iba a ser firme. - Si le pago nada le impide que vuelva a venir para pedir más - digo tomando un poco de aire profundamente. 

- Sobre el seguro, no lo sé. - Pienso en la posibilidad de que mi trabajo cubriera los daños y perjuicios de ocultar el homicidio. Probablemente me echarían y así se quitarían de problemas, es mucho más limpio. Por otro lado soy demasiado bueno como para que el director quisiera desprenderse de mi así como así. Vaya si soy bueno, de hecho considero que nadie en el rodaje es capaz de sustituirme.

Estoy un poco confundido pero lo mejor es no hacerse esperanzas.

- Mañana iré a trabajar con normalidad, y al salir estará esperándome seguramente - explico imaginando la situación. - No sé si será violento, o si la policía estará esperándome. Antes de marcharme de los estudios haré la confesión pública, hablaré con la dirección e iré a comisaría si nada lo impide - digo con una sonrisa un tanto forzada, al mismo tiempo siento como el rubor me invade presa de los nervios.

- Por eso cambiará, mamá. Lo más probable es que termine en prisión - confieso.

Cargando editor
07/10/2016, 22:20
Gavan Balabhadra

En cuanto pronuncias la cifra que aquel hombre te pide tu padre abre los ojos, sorprendido. Tu madre por su parte no reacciona más que con un leve asentimiento: se nota que para ella ese número o cualquier otro no importan tanto como el hecho en sí. Luego ambos continúan escuchando, aunque es evidente en su actitud que no les gusta la perspectiva de que ese hombre pueda volver a por más dinero.

Luego, cuando prosigues con tu explicación, tu padre parece confundido. Cambia su postura y mira un instante a su esposa, como si no comprendiese algo. Al hablar lo hace despacio, hilando poco a poco las palabras según va encontrando el sentido a lo que has dicho.

—Pero, hijo... —enuncia—. ¿No le has dicho nada a la policía hasta ahora? —pregunta como si eso no le cupiera en la cabeza—. ¿No lo investigaron? ¿Y su familia, de quién creen que fue la culpa?

Cargando editor
07/10/2016, 23:25
Dakshesh Balabhadra

La extrañeza de tu padre no se ve reflejada en los ojos de tu madre. Quizá por tu manera de hablar, quizá por cómo te conoce, ella ya parecía dar por hecho que cuando hablabas del secreto que Alisha y tú habíais guardado era un secreto también para las autoridades. Sin embargo no se sobresalta, ni mucho menos. En lugar de eso se toma las cosas con calma y cuando expones aquel plan ella no dice nada al respecto. Parece tomarse un momento para meditar y tomar su postura de una forma más razonada.

Al escuchar las preguntas de su marido ella permanece atenta a tu respuesta, pero aún así no tarda en añadir algunas palabras más.

—Si acudes a la policía asegúrate también de denunciar a ese hombre —sugiere—. No es una buena persona.

Por un momento parece a punto de decir algo más. Algo en su rostro cambia entonces, como si acabase de decidir que es mejor guardarlo para sí.

—Si eso es lo que crees que debes hacer, cariño, tienes nuestro apoyo —asegura—. Siempre seremos tus padres. Siempre estaremos ahí para ti.

Cargando editor
10/10/2016, 12:02
Devendra Balabhadra

Asiento con la cabeza un par de veces - Lo investigaron pero al no tener más pistas supongo que cerraron el caso, era un accidente así que no hicieron más preguntas - comento tratando de pensar en aquellos días. - La policía cierra casos rápidamente, no creo que le dieran más vueltas o quizá no les importase. 

- Y sobre su familia... Cree que fue un accidente, papá, no hablé con ellos pero es lo más probable - confieso. - Si lo hubiera hecho no habría podido mentir, no... no podría, me pongo muy nervioso cuando miento, habrían sabido que yo estuve involucrado en su muerte.

Giro el rostro hacia mi madre para continuar la explicación. - Si, es lo que haré, voy a denunciar a la policía a ese tipo, porque es que además me robó el teléfono móvil. Pero esto del teléfono es lo de menos ahora mismo...

- Eso es todo lo malo que tenía que contaros, me espera un día largo pero lo lograré - digo con ánimos para intentar no preocuparlos más, aunque sé que es difícil. Hay sin embargo algo que me ha sucedido recientemente y que es bueno, casi milagroso. Lo que estoy a punto de contaros ahora podría parecer una auténtica locura pero os pido que hagáis el esfuerzo por creer en mi.

Cargando editor
11/10/2016, 23:11
Gavan Balabhadra

Tu padre se echa un poco hacia atrás, recolocándose en una postura pensativa con tus explicaciones. Su ceño se frunce suavemente y algo parece estar rondándole, algo que sin duda le desasosiega.

Cuando terminas de hablar, todavía tarda un instante en intervenir, volviendo a enderezar su espalda.

—Pero Devendra... —empieza, con sus ojos en los tuyos—. No comprendo por qué mentiste entonces. Si había sido un accidente... ¿por qué no contar la verdad? Todo sería más fácil ahora y seguramente no lo habrías pasado tan mal este tiempo.