Partida Rol por web

Historias de Horror I.

Diálogos.

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10/06/2017, 03:48
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH
(Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor

Como ya parecía totalmente calmado, liberé la presa de las piernas y me eché hacia atrás para tener espacio para ponerme en pie. Busqué mi capa y se la ofrecí. Estaba bastante malograda y no tenía ya mucha utilidad, pero al menos podría atársela a la cintura y taparse, si es que sentía algún pudor.

Recogí el atizador y me acerqué a la chimenea con la esperanza de poder avivar el fuego y calentar de nuevo la estancia.

- No es una maldición. - Comencé a decir mientras removía las brasas. - Los dioses te han dado un don. Lo que debes hacer es aceptarlo, y aprender a controlarlo. Puedo ayudarte. Fumar opio no es suficiente. - Caminé despacio hasta su lado y me senté en el suelo frente a él. - Conozco métodos más eficaces. Por cierto, siento... Bueno, sé que masticado es muy amargo y el efecto es fuerte. Si es la primera vez, es posible que despiertes con dolor de cabeza. - Me atreví a volver a acercarme, esta vez a un lado, y a abrazarle de forma que pudiera apoyar de nuevo la cabeza sobre mi pecho si lo deseaba. - No te preocupes. Encontraremos la forma. Será un honor ayudarte, si me dejas. Pero ahora tienes que descansar. ¿Quieres ir a dormir?

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10/06/2017, 20:03
(CC) Konrad Mykephoros.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH
(Primer Florecimiento).

- Estoy bien.- Rechazó la capa que le tendía Sascha. La desnudez no le incomodaba en absoluto y tenía calor, mucho calor, aunque sonara extraño. Volvió a moverse, esta vez sólo para acomodarse un poco en el suelo, sabiendo ya que la pierna la tenía herida. Vio a Sascha con el atizador y supuso qué había pasado.- Me has dado fuerte.- No sonaba a que estuviera recriminándole nada, ni mucho menos.- Me alegro de que sepas defenderte.- Konrad arrugó el ceño y negó con la cabeza en un gesto casi imperceptible. La mujer no sabía de qué estaba hablando. ¿Un don?- ¿Acaso no tienes miedo de mí? ¿De que pueda volver a pasarme?- Konrad tomó aire llenando completamente los pulmones para luego soltar el aire con suavidad. Ahora mismo se encontraba en la gloria. Como decía Sascha, aún sentía un fuerte amargor en la boca, pero se sentía flotar, como en una nube de algodón.- Es la primera vez...quiero decir, la primera que no lo fumo. No me cabe en la cabeza que quieras ayudar a alguien como yo.

Debes estar loca, loca de remate.- No le apetecía irse a dormir. No quería estar solo. Sin embargo, entendía que no podía quedarse allí. En cualquier momento el profesor podría encontrales desnudos en medio de todo aquel desorden.

- Jijiji.- Rompió a reír con una risa traviesa e incontrolable.- No sé qué le voy a contar al profesor. Tendré que darle una explicación. Pero eso ya mañana.-Hasta él mismo se sorprendió de la idea que se le vino a la mente pero, ya fuera por efecto del opio, o por tentar más aún a la suerte, se envalentonó a expresarla en alto.- ¿Puedo dormir con vosotros?-¿Tenía o no miedo Sascha? Quizá no temiera por su vida pero sí por la de su hermano.

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11/06/2017, 14:12
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor

Cuando el noble volvió a moverse, le dejé libre del abrazo, y aproveché para volver a ponerme en pie.

- Lo siento. - Dije disculpándome por el golpe aunque en su frase no había reproche. - Yo jamás te golpearía para hacerte daño o de forma peligrosa. Sólo necesitaba tirarte al suelo. Se te pasará, aunque quizás deje marca unos días.

Paseé despacio por la habitación mirando los objetos caídos, viendo si alguno no había llegado a romperse. No es que aquellos adornos que no servían más que para sobrecargar la estancia me importaran lo más mínimo, pero me habían acogido en aquella casa y lo mínimo que podía hacer era intentar mantener el orden. Me alegré al ver que una figurita que parecía de madera maciza con forma de búho había caído sobre la alfombra y se había librado. Recordaba haberla visto sobre la chimenea, así que me acerqué a la repisa con intención de dejarla en su sitio, pero antes la observé unos instantes mientras Konrad seguía hablando.

- No, no tengo miedo. Tú mismo lo has dicho, sé defenderme. Además... - continúo hablando con tono triste - ha sido culpa mía. No debería haberte provocado, ni puesto nervioso, pero es otra cosa más que sé y que puedo evitar.

Si él supiera la cantidad de horrores que he visto, y que no he podido hacer nada para evitarlos, vería que su problema no es tan grave.

Dejé la figura en su lugar y miré al hombre con culpabilidad. No podía evitar pensar que había sido yo quien lo había estropeado todo, quizás por ser demasiado directa. Quizás era demasiado pronto. Yo sabía que la primera vez los hombres siempre estaban más ansiosos y puede que aquella noche, con todo lo que había sucedido con los aldeanos no era la más adecuada.

- Creo que es fácil entender por qué quiero ayudarte. No se tienen muchas oportunidades de conocer a alguien como tú, - y al decir eso había cierto tono de admiración en mi voz, - y sobre todo, porque le has salvado la vida a mi hermano. - Omití deliberadamente decir que también a mí, como si no le diera tanta importancia. - Sería un honor estar a tu lado, servirte. Pero si no quieres... comprendo que personas como Gruñido y como yo tan sólo te traerían problemas, y más después de lo que ha ocurrido en la plaza.

Posé los ojos en el cuerpo de Konrad y en su desnudez, y de nuevo, quizás por el efecto del opio, sólo vi un hombre con el que me lo podría haber pasado bien, pero sin dejar de lado el hecho de que para mí era lo más cercano a un Dios encarnado que hasta ahora había conocido. Tenía que aceptar que algunos Dioses eran más de sangre que de sexo, y que el único cuerpo de mujer que les atraía como ofrenda, era el de un cadáver destripado.

Viendo que no podía hacer mucho más por el lugar, regresé al lado de Konrad y comencé a recoger lo que antes habían sido sus ropas y las mías, siendo ahora las mías irónicamente más funcionales que las suyas. Recuperé la daga y las correas, y le tendí una mano por si quería ayuda para levantarse.

- Bueno, me ha parecido notar que tienen gato. - Añadí como intento de dar explicación si es que el noble no quería decir la verdad. - Claro, vamos. En la habitación vi dos camas, y yo estoy acostumbrada a dormir en el suelo.

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11/06/2017, 18:27
(CC) Konrad Mykephoros.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor

- ¿Problemas?- Preguntó extrañado ante las palabras de la mujer. - Todo lo contrario. Estaría encantado de...de que formarais parte de mi servicio.- Se le había pasado por la cabeza acoger al niño a su cargo, para darle un oficio y una educación que lo librara de una vida errante y sin objetivo alguno. Pero, lo que no se había esperado para nada, era que la mujer salvaje quisiera servirlo.- Os pagaré, claro. Tú...tú...- Se quedó un momento pensando qué servicio podría prestarle la mujer, al menos de cara a la galería.-...tú podrías ejercer de ama de llaves.- No pudo más que sonreír ante la idea. ¿Qué cara pondrían sus conocidos al regresar a Alabustriel con semejante ama de llaves? Era un disparate, pero uno de los que hacían que la vida fuera más estimulante.- Por supuesto te dejaré libertad total para que hagas tus cosas. Será interesante. Y hoy me ha abandonado un cochero. Necesito uno nuevo. Quizá Gruñido pueda aprender el oficio, si no te niegas a ello.- Se ayudó de la pared para ponerse en pie y echar un rápido vistazo a la habitación. - Ese maldito gato, ja, ja. Nunca le he gustado, ni él a mí.- Así que no le importaba que le cargaran la culpa de los destrozos.

Konrad, ahora sí, tomó sus destartaladas ropas para ver si podía aún usarse algo y tapar sus vergüenzas. Él no pensaba dormir en otro sitio que no fuera una cama así que, si Sascha no dormía con él, tendría que dormir en el suelo. ¡Menuda mujer!

- Mañana será otro día. Si consigo recuperarme del dolor de cabeza os acompañaré a por el Rakhan ese. ¿Crees que querrá formar también parte de mi servicio?- Aunque primero tendría que conocerlo y evaluarlo.- ¡Ah! Y no se me olvida que ibas a mostrarle lo que era la brujería.- No sabía si era el efecto del opio o que, por primera vez, alguien no se saliera corriendo después de haber visto al monstruo que llevara dentro. Un pequeño haz de luz se colaba en la oscura estancia donde llevaba habitando años. ¿Podría controlar a la maldición en vez de que ésta controlara su vida?

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11/06/2017, 20:18
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor

¿Ama de llaves? ¿Qué demonios era eso?

Bueno, qué más me da.

- Seguro que a Gruñido también le gusta la idea. Pero Rhakan... Bueno, Rhakan me sirve a mí, así que por supuesto está a tu servicio. Quizás, más que ninguno. Cuando lo veas, lo entenderás.

No, eso de decir que símplemente era un hacha no iba conmigo. No era correcto. No para mí. Y no iba a mentir a Konrad ni con eso.

- ¿Quieres ir mañana mismo? Perfecto.

De nuevo tendí la mano por si necesitaba ayuda para subir las escaleras.

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11/06/2017, 20:24
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor

Abrí la puerta de la habitación en la que había dejado a Gruñido durmiendo girando el pomo muy despacio para no despertarle, aunque sabía que podía ser inútil. El semiorco, al igual que yo, estaba acostumbrado a dormir alerta, pero esperaba que en aquel lugar seguro y en una cama cómoda el niño consiguiera descansar.

Dejé que Konrad se acomodara en la otra cama. Eché capa y ropa al suelo, en el hueco entre ambos lechos, y me tendí boca arriba sobre las telas, dejando la daga cerca.

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11/06/2017, 20:58
(CC) Konrad Mykephoros.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor

Esta vez sí, Konrad tomó la mano que le tendía Sascha para subir las escaleras. Aunque cojeando, iba contento. Le daba igual todo. Ni siquiera estaba angustiado porque, en cualquier momento, el Profesor Lorrimor saliera de sus aposentos y les pillara semidesnudos subiendo las escaleras. O peor aún, su pequeña hija, Kendra.

O el gato...

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11/06/2017, 21:02
(CC) Konrad Mykephoros.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor

Konrad se dejó caer con suavidad en la confortable cama observando, entre curioso y divertido, el extraño proceder de la salvaje.

Hablaba en serio...- Konrad se reclinó sobre el costado que daba al espacio entre las camas, donde Sascha había tendido una capa para tumbarse, y la observó unos instantes en silencio, tratando de comprender su comportamiento. No le pasó desapercibido el brillo de una daga en la oscuridad pero, sin saber porqué, aunque fuera una total desconocida, no estaba asustado.

- El suelo tiene que estar muy duro y frío.- Susurró dibujando una medio sonrisa en su rostro oculto por la penumbra. No sería un caballero si dejara a una mujer dormir en el suelo mientras había camas libres. Quizá debiera irse al cuarto que el profesor amablemente había dispuesto para él. Sin embargo, en vez de levantarse, pues se encontraba extenuado después de lo ocurrido, palmeó el colchón un par de veces con la mano para llamar la atención de Sascha.- No hace falta que hagas guardia, ni nada. - Dijo esperando que así dejara a esa daga descansar en paz durante la noche.-Vente aquí conmigo. Después de todo, soy yo quién más atención requiere esta noche. Es...- No sabía si la mujer, acostumbrada a otra vida aislada de la sociedad, captaba muy bien las bromas.- ...es una orden.- Estaba tan cansado que no le importaba que no tuvieran mucho espacio. Se había sentido a gusto en los brazos de la mujer y Konrad no era una persona acostumbrada a refrenar sus caprichos.

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12/06/2017, 00:12
(CC) Gruñido.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor.

Una de sus orejas aleteó suavemente ante el ruido extraño de la puerta, más su respiración siguió siendo lenta y acompasada, como negándose a abandonar el cómodo sueño. Gañancito no había dormido nunca en un lecho tan acogedor y la reciente experiencia lo había dejado físicamente agotado.

- ¡Brrrrrrrrrrttt, Brrrrrrrrrrrrrrrrrrrttt! -

Parecía que el haber estado tan cerca de la muerte, el paseo nocturno, la posterior ingestión de chuches y el confortable lecho, habían hecho a quedar a Gañancito tan a gusto que una sostenida y sonora ventosidad se escuchó cuando Sascha se tendía entre ambas camas. Aquí la parte de orco del chiquillo parecía patente debido al intenso y resistente a la dispersión aroma. El joven rezongó en sueños, sin duda aliviado.

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12/06/2017, 13:43
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor.

Ya había cerrado los ojos cuando escuché a Konrad decir una obviedad.

Claro que está duro, y frío. Es un suelo.

Claro que el suelo de hojarasca y hierba del bosque era más cómodo que aquel. Y los sencillos camastros de la cabaña, también eran más cómodos que aquel suelo, duro y frío. Pero aún así dudé cuando me dijo que subiera a la cama con él. Al menos hasta que dijo que era una orden. Entonces me levanté, dejando las telas en el suelo, busqué un lugar donde poder seguir teniendo la daga cerca, y me tumbé en la pequeña cama, dándole la espalda a Konrad para poder mirar hacia afuera, porque si debía levantarme rápidamente, así era más fácil. Además así podía velar también el sueño de Gruñido, que parecía estar siendo muy placentero.

Me resultó curioso que a pesar de todo, el cuerpo de Konrad seguía irradiando bastante calor. Y era agradable, aunque yo acostumbraba más al frío.

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12/06/2017, 22:26
(CC) Konrad Mykephoros.

EQUINOCCIO DE PRIMAVERA DEL AÑO 4702.

DÍA 12 DEL MES DE FARASTO, DÍA DE GOZREH (Primer Florecimiento).

Por la noche, en la casa del Profesor Petros Lorrimor.

Angeluco...- El niño semiorco dormía como un bebé, tan relajado estaba, nunca mejor dicho. Konrad se cubrió disimuladamente boca y nariz con el extremo de las sábanas para no respirar el aire contaminado con la ventosidad. Cuando Sascha finalmente subió a la cama y tomó postura para dormir, Konrad la rodeó con un brazo, aunque dejando algo de espacio entre su pene, ya flácido, y el voluptuoso trasero del ama de llaves. No quería más problemas. Ahora estaba rendido, ya vería por la mañana, aunque con el niño delante seguro que la salvaje era más reticente, aunque vete a saber. No quiso pensar más en el asunto, que su mente, de hombre que ha vivido mucho, formaba en su cabeza rocambolescas escenas. Se quedó dormido enseguida, con una sonrisa dibujada en la boca pensando en la reacción del profesor Lorrimor al ver que su cama estaba sin deshacer.

No se va a creer que me la hice yo mismo.

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13/06/2017, 22:20
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

DURANTE LA TARDE. BIBLIOTECA DE LA CASA DE LA FAMILIA LORRIMOR EN RANVEGRO

Cuando todos estaban más relajados y parecía que teníamos algo de tiempo libre antes de la cena, minutos después de que Gruñido se dirigiera a la cochera a cuidar de los animales pedí permiso a Konrad para acompañar al semiorco, y pasé por al lado de Velkan.

- Voy a hacer compañía a Gruñido. ¿Vienes?

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13/06/2017, 23:08
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

MEDIADOS DE LA TARDE. EXTERIOR DE LA CASA DE KENDRA.

Tras la lectura del testamento, Gheorghe decidió que era un buen momento para entrenar con su escudero. Un brazo fuerte y hábil es la mejor manera de mantener el mal a raya, y es algo que solo se consigue practicando. La repetición de movimientos y el manejo de la espada era fundamental, movimientos lentos y seguros, que luego repetir en combate a mayor velocidad. 

Por supuesto, no terminaba de aprobar el arma que su escudero elegía usar. La espada larga era un arma más noble y recta en su propósito, y sin duda podría manejarla. Incluso el mandoble tenía cierto aire caballeresco. La cimitarra casi parecía más propia de bandidos. 

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13/06/2017, 23:12
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

AVANZADA LA TARDE. HABITACIÓN DE LA CASA DE LA FAMILIA LORRIMOR EN RAVENGRO ASIGNADA A GHEORGHE Y KONRAD.

Gheorghe, ya sin armadura, estaba sentado en silencio en su cama, afilando con gesto decidido la espada larga, y revisando que el arma no mostrara rastros de óxido o daño alguno. Con todo lo hablado y ocurrido, tenía el negro presentimiento de que tendría que hacer uso del arma más de una vez, y más valía que estuviera en perfectas condiciones. 

Enfrascado en ese ritual estaba cuando su hermano entró en la habitación. Un leve asentimiento sin apartar la mirada de la hoja fue lo que recibió como saludo, demasiado concentrado en el mantenimiento del equipo. 

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14/06/2017, 05:02
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

MEDIADOS DE LA TARDE. EXTERIOR DE LA CASA DE KENDRA.

La hora de entrenar con mi maestro llega y sé que es bueno pues no existe manera efectiva de luchar contra las sombras que no sea apoyándose en un brazo fuerte. Siempre elegí el camino armado de la iglesia pues no me contento con ver como otros luchan y rezar por ellos a distancia. Lo mío es luchar sin piedad contra las fuerzas del mal, especialmente contra los no-muertos que tanto odia Sarenrae.

Antes de comenzar, veo la mirada de mi maestro posándose sobre mi arma. Conozco esa mirada, así como conozco lo que significa, por lo que le reprocho:

 - "Maestro, sé que usted piensa que la cimitarra es de extranjero y bandidos, pero no es así. Los puñales y espadas cortas son armas de ilegales. La cimitarra, con su filo curvo, representa al sol y su corte progresivo representa el amanecer, suave en un principio pero intenso al terminar. Mi arma es el símbolo de la luz y la purificación, así como la espada larga es la representación de la nobleza y la gallardía."

Me encojo un poco de hombros antes de añadir:

 - "Supongo que admiro más al sol que a la nobleza."

Lo que quizás es extraño pues soy de familia noble y su dinero me ha asegurado equipo que otros solo pueden soñar, pero siempre he sido extraño incluso para los míos. Ha de ser que mi devoción por Sarenrae y mi odio por los no-muertos es mucho más trascendental para mí que mantener unos estándares que siento vacíos sin el pragmatismo de los actos que los fundamenten. De nada sirve ser recto y justo si no se empuña el poder para castigar al mal, el que proviene solo de los dioses, como mi adorada Sarenrae.

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14/06/2017, 12:37
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

MEDIADOS DE LA TARDE. EXTERIOR DE LA CASA DE KENDRA.

-No sabía que esos incursores de las arenas en Osirion nos atacaron con soles-replicó el paladín, con una leve sonrisa y cierta sorna en su voz, aunque no hasta el punto de sonar ofensivo. Sabía que había cosas en las que nunca se pondrían de acuerdo, y no tenía sentido crear conflictos simplemente por una leve diferencia en algunas opiniones estéticas. Sin embargo, otros...

-Sin embargo, aunque admires al sol, debes ser noble y comportarte con rectitud, Janos-dijo, algo más serio-sé que te lo he dicho antes, pero me gustaría explayarme. Esos campesinos no eran enemigos, no realmente al menos. Solo gente asustada, con la que se puede razonar, y con la que ahora vamos a convivir un tiempo. Si desistieron de su intento de echarnos del cementerio y echaron a correr, se les debía garantizar cuartel. Del mismo modo que se debía haber intentado con más ahínco el diálogo, aunque me temo que la actitud de los salvajes fastidió mis palabras. 

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14/06/2017, 20:48
(CC) Velkan Matacambiantes.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

DURANTE LA TARDE. BIBLIOTECA DE LA CASA DE LA FAMILIA LORRIMOR EN RANVEGRO

Estaba concentrado en su banjo, no tocaba pero se cercioraba de que su instrumento estuviera en perfecto estado después de la caída, pero levantó la cabeza al escuchar a Sascha que le habló al pasar. Tardó en responder un rato y cuando lo hizo tampoco fue elocuente en exceso, su respuesta se limitó a un simple.

Vale.

Elevó su cuerpo tan alto como era y comenzó a andar detrás de la mujer pelirroja, como en los viejos tiempos.

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15/06/2017, 00:31
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

MEDIADOS DE LA TARDE. EXTERIOR DE LA CASA DE KENDRA.

El recuerdo de aquellos incursores de las arenas fue un excelente contraargumento, pero también tenía una forma de ser rebatido:

 - "Punto para usted, pero juzgar así la cimitarra por ser blandida por bárbaros, me haría creer que el líder de los bandidos al sureste de Illmarsh era un noble caballero."

Es el mismo punto, que algo signifique una cosa, no descarta un uso inapropiado y no todos ven los simbolismos de la misma manera.

Luego, me reprocha por lo sucedido en el camposanto, por lo que bajo la cabeza, sumiso, mientra expone su punto. Cuando termina, le respondo:

 - "Yo también esperaba que aquello se solucionase con palabras. Solo difiero de usted en que unos tipos que atacan así a otros no pueden ser considerados buenas personas. Eso es agresión y es grave. ¿Qué hubiese sucedido si nos hubiesen derrotado? ¿Cree usted que hubiesen tenido con nosotros la misma piedad que usted esperaba de mí? Esa gente estaba enajenada y más allá de la razón, solo les di lo que se merecían. Tampoco es como que hubiese intentado hacerles daño real, no los dañé más que usted o el resto. Solo me regaña por no bajar los brazos cuando comenzaron a irse, pero solo fue para asustar a su líder y evitar así que vuelvan a desear molestarnos. Se iba sin haber pagado el precio de su incitación y yo solo brindé justa retribución."

No siento que sea algo tan terrible. Ellos nos golpearon con fuerza y sin control y solo les respondí, Asustando así a su líder, no solo ganaba esta lucha, sino las siguientes pues ya no tendría ganas de venir por más. Si hubiese salido completamente ileso, seguiría haciendo lo mismo, cada vez con nuevas personas pues no habría sentido las consecuencias de sus actos. Ese es un aspecto de la justicia y, por brindarla, puedo considerarme justo.

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15/06/2017, 12:32
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

MEDIADOS DE LA TARDE. EXTERIOR DE LA CASA DE KENDRA.

Puede que fuera por el desahogo del entrenamiento, pero Gheorghe se permitió soltar una leve risa ante el contraargumento del bandido.

-Touche. Aunque seguramente aquel canalla robo ese arma tan noble de alguien más digno-replicó. Las siguientes palabras no le hicieron tanta gracia, y el hombre negó suavemente con la cabeza.

-Puede que no sean santos, sus actos no les avalan, por supuesto... Pero tampoco eran el mal. Eran gentes normales y asustadas, Janos. Y el miedo, junto con la ignorancia, puede llevar a hacer muchas tonterías. Me preguntas si ellos habrían tenido con nosotros la misma piedad, y esa es una pregunta peligrosa. ¿Acaso piensas actuar en función de lo que harían tus enemigos, menos rectos y puros, cuando no directamente malvados? Que el mal se dedicara a acabar con cada inocente que se cruce a su paso no te obliga a ti a hacer lo mismo, Janos.

Tras eso hizo una pequeña pausa para beber agua, antes de continuar.

-Al final serán tus actos los que te distinguirán, o te acercarán, a aquello que quieres combatir. Piedad, Janos. La clave es la piedad. Si los equivocados, los asustados, los descreídos y, en definitiva, aquellos que no están más allá de la salvación, comprueban que los campeones del bien son magnánimos en la victoria y piadosos, puede que comprendan lo erróneo de sus actos y se enderecen. Y cada hombre o mujer apartado del camino del mal y devuelto a la senda del bien vale más que diez enemigos muertos. 

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15/06/2017, 21:05
(CC) Konrad Mykephoros.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 3 DE ABADIO.

AVANZADA LA TARDE. HABITACIÓN DE LA CASA DE LA FAMILIA LORRIMOR EN RAVENGRO ASIGNADA A GHEORGHE Y KONRAD.

- ¡Oh, estás aquí!- Acostumbrado a vivir solo se sorprendió de encontrar a alguien en su habitación, pero claro, eran muchos invitados al funeral y la pobre y modesta Kendra había dicho que tenían que compartir habitaciones. Podía haber mandado a Gruñido y Sascha a dormir a los establos, o incluso al carruaje, y así haber tenido todo el espacio para él, pero tenía intención de mantener una conversación con su hermano, por lo que finalmente le había venido bien. 

Pero, ¿cómo empezar...?- Durante años había postergado aquella conversación. No era algo que pudiera decirse por carta. Además, la correspondencia con su hermano había sido siempre en un tono gélido y con una frecuencia que había decaído con el tiempo, hasta hacerse inexistente.- Ehm...- Quiso iniciar un diálogo con algún tema banal y superficial pero después dudó al ver a su hermano tan concentrado. Finalmente calló de nuevo y se quedó observando a su hermano reclinado desde la cama. Cuando éste acabó de afilar su arma, Konrad botó sobre el colchón de la cama para probarlo. Los muelles chirriaron bajo su peso.- Echaré de menos mi cama de Alabustriel. Estos colchones son viejos. Dudo que los haya cambiado desde la última vez que estuve aquí. Mañana le diré a Sascha que al menos le de la vuelta.- Se quejaba así el noble de las condiciones en las que alojaban a los invitados, acostumbrado a un lujo que un Profesor como Lorrimor no podría costear.- Bueno, hermanito, parece que te van bien las cosas. Poco tiempo para escribir a la familia, ¿eh? Jeje. No te culpo. Yo también he estado liado, ¿sabes? He reflexionado mucho los últimos años...sobre nuestra familia. - Buscó con la mirada algo con lo que pudiera refrescarse el gaznate. Estaba siendo tan difícil como se esperaba y, la pasividad de su hermano, no ayudaba. Pero había varias cosas que empujaban a Konrad a no achantarse esta vez. La primera la muerte del Profesor, un amigo que tanto le había ayudado con el asunto que se traía entre manos, y que había propiciado, con su funeral, el encuentro entre los dos hermanastros. Otra era la herencia que les había dejado. Todo parecía indicar que tendrían que investigar ciertos asuntos y aquello conllevaba sus riesgos. Por último, el incidente con los pueblerinos enfurecidos. Había estado cerca de delatar a Konrad y no sabía si su hermano podría soportar presenciarlo, así de golpe, sin haberle prevenido de antemano.- Hay cosas de Padre que desconoces...- Dijo tratando de hacerle entender por dónde iban los tiros.-  Algo que como primogénito que soy he cargado sobre mis espaldas todo este tiempo.- Se quedó mirando a Gheorghe pendiente de sus reacciones. Su rostro impertérrito no creía que le dijera nada pero necesitaba hacer una pausa para controlarse, respirar hondo, y evitar que los rencores y resentimientos le nublaran la mente. Quizá su hermano pensara que su vida había sido fácil pero bien que Konrad se hubiera cambiado por el segundón de la familia.