Partida Rol por web

Las heridas de Grundar son reestablecidas, al menos en gran parte, gracias al hechizo del clérigo, que aprovechó alejándose de la batalla con el hobgoblin. Por fortuna, los ataques del dinosaurio invocado por el druida y después el flechazo de Froug, dieron la puntilla para acabar con su enemigo.

En el otro lado de la sala, el pozo anteriormente conjurado por la hechicera del grupo se desvanece, dejando vía libre al nuevo enemigo que en el se encontraba. Anacteia no pierde el tiempo y le lanza uno de sus hechizos de sueño que parece que esta vez acabará en buen puerto.

Grundar avanza mientras se coloca a la derecha de Froug para dejarle un tiro limpio si el hobgoblin no se duerme.

- Rendir estupido, morir si no hacer, le dice al hobgoblin en orco para ver si entra en razón

El último hobgoblin en pie se avalanza contra el contrincante más cercano, que no es otro que el veloriraptor conjurado por Grundar. Trata de darle un tajo con su espada larga, pero el sueño hace presa en el y tras fallar el golpe cae de rodillas y se queda dormido en el suelo.

"No perdamos tiempo, compañeros"
"¡Debemos de perseguir a Anreip mientras podamos!"

SHAUN MICHAELS sacude a la pícara para despertarla, quizá ella nos de una respuesta. Pero no cejará en correr.

Grundar indico al velocirraptor que siguiese a toda velocidad al malvado frenemigo de Shaun, se acercó al hobgoblin que estaba dormido con su baston, no poder dejar vivos a espalda, dijo a sus compañeros mientras aplastaba con su baston la cabeza del hobgoblin

Anacteia se limpió la mejilla de la negra sangre que Grundar le salpicó cuando reventó la cabeza del primer hobgoblin dormido. Aun quedaba otro y así se lo señaló al monstruoso semiorco. Y asintió conforme al grandullón: no podían dejar enemigos detrás. Ni a ser posible delante.

- Antes de correr como locos tras él más nos vale estar curados y ver que Sheela se encuentra bien - dijo agachándose para observar a su compañera inerte. Parecía en un sueño profundo, pero vivía. Aliviada, la hechicera echó un vistazo alrededor y no pudo evitar susurrar unas palabras arcanas que hicieron que sus ojos brillaran con cierto tono violaceo. Acto seguido examinó los cadáveres enemigos.

Grundar no se lo piensa dos veces y da el golpe de gracia al hobgoblin que yace a sus pies, invitando al resto a avanzar. Anacteia por su parte, revisa el equipo de los caídos en combate para ver que puede ser de utilidad. En el proceso detecta varias armas y armaduras con una pequeña aura mágica, cosa que comunica al grupo. En ese momento, Sheela abre un poco los ojos y comienza a hablar.

- Mmmm... ¿Estáis aquí? Debéis detener a Anreip... Mmmm... - Murmura con pocas fuerzas.

En ese momento, Froug se acerca a la mujer y le sostiene la cabeza mientras le da una de sus pociones, para revitalizar a la mujer.

- Id tras Anreip. Froug quedar cuidando mujer. ¡Rápido, no tiempo! - Dice el semiorco al resto.

Por fin, sin más dilación, seguís la dirección que tomó vuestro némesis, cruzando un pequeño puentecillo natural sobre un lago subterráneo, pues notáis el sonido que produce el agua subterránea al caer. Llegáis a una pequeña cámara semicircular, que tiene una bóveda abierta en el techo por donde se mete la luz del sol. Bajo la luz del sol, algo extraña, pues se trata de un eclipse, veis un altar, pero nada ni nadie sobre el. Al momento, Anreip aparece de entre las sombras, frente a vosotros, al otro lado de la sala.

- ¡Idiotas! ¡Por vuestra culpa no he podido llevar a cabo el ritual! ¡Estaba todo casi listo! - De pronto calla, pero no más de 3 segundos. - No importa, puede que halláis ganado esta batalla, pero no conseguiréis detenerme. ¡Ja, ja, ja, ja! - Ríe a carcajadas desde el otro extremo, dejando distancia entre vosotros y su persona.

Anacteia, velozmente, echó mano de los frasquitos ignorando el resto de las cosas brillantes que portaban los hobos muertos. Acto seguido las metió en su morral y echó a correr detrás de sus compañeros, persiguiendo a Anreip.

Al poco lo encontraron en una cámara excavada, con su altar en medio, su agujero con eclipse en el techo y su Anreip saliendo de las sombras y riéndose como un maniaco, convencido aun de su victoria.

La hechicera parpadeó incrédula ante la puesta de escena y ante el hecho de que no había víctima propiciatoria en el altar.

Pues como no te eches tu mismo ahí vas fresco, pensó la joven.

- Oye, Anreip, ¿Por qué no dejas de dar pena, te rindes, devuelves todo lo que has robado y te sometes a un juicio por tus crímenes que sin duda terminará en ejecución? Tendrás derecho a elegir el menú de tu última cena y al menos en eso lograrás con éxito tu propósito - le sugirió mientras su mano se metió dentro de su morral, buscó y finalmente encontró con el tacto cierta figurilla metálica que guardaba para ocasiones como esa, aunque no la mostró aun.

"Haz caso a la Bruja Negra, Hillary" insiste llamándole por su estúpido nombre natal "No tienes a donde ir. Tus esbirros han mordido el polvo, tus trucos se acaban..."

"Te diría Jaque Mate, pero no eres ningun rey" le dice amenadoramente, enseñando la enseña del escudo. Con la marca de feronia, rodeado de las letras -en lenguaje latino- GCPD.

- ¡Ja, ja, ja, ja, ja! No saben nada... - Reía socarronamente Anreip.

Aquella fue la única respuesta que obtuvieron de su archienemigo, que seguía frente a ellos con los brazos cruzados sobre el pecho, mirándolos sin más.

"Es una trampa" dice claramente

"VEN!" le ordena

Grundar iba a lanzar al velociraptor en contra del Anreip pero esperó la reacción al escuchar la orden de Shaun

Vuestro enemigo sigue impasible ante lo que hacéis. El conjuro de Shaun parece que no surte efecto, pues no ha movido un ápice el semblante.

SHAUN MICHAELS mira a su alrededor.

"¡Es un Quimerismo 3! ¡Una ilusión!"

Anacteia, advertida de aquello, lanza un hechizo y mira fijamente a la figura de Anreip, observando si brilla mágicamente, algo muy probable, pero si su aura pertenece a la escuela de ilusión, algo inusual y que confirmaría lo que dice Shaun.