Partida Rol por web

El primer día, al poco de llegar al barco, dejé a Akemi en una de las camas que hubiese para enfermos. Al poco de que Nero dejase también a Phryne, a quién sostuve un poco la mano, llegó Mary y me fui con ella, volviendo ya sin el rifle de francotirador.

Volví a revisar el estado de Phryne, que parecía casi muerta si no fuese porque notaba su corazón latir. Suelto un suspiro, me dolía no poder hacer nada, así que simplemente dije:

- Me voy un rato, voy a hablar con varias personas a ver si me entero de ciertas cosas... No tardaré mucho, cuida a Phryne mientras tanto, por favor. -pedí a Nero.

En efecto, 15 o 20 minutos más tarde regresé y me senté al lado de Phryne, comenzando a curarme con Nen como hice con Mary en la sala. Si veo que Nakamura vuelve a atender a Akemi con su poder tras nuestra conversación, libero la fase más básica de Hades y comienzo a usar mi técnica también en ella por si le ayuda a sobrellevar el dolor.

Como era de esperar, salvo momentos en los que deba ir a hablar con alguien o similar, permanezco al lado de Phryne en todo momento e incluso duermo ahí cuando caigo rendido.

Compongo una sonrisa triste ante sus primeras palabras, escuchando después la continuación y replicando:

- Esa consideración seguiría vigente aún si el sacerdote estuviese muerto. -no lo digo a tono de acusación, sino para que vea que he escuchado toda clase de medias verdades al respecto, por lo que mi trato significa algo más- Quiero hablar con él para que intente evitar esa forma de sacar provecho del Loratismo. Me interesa más eso que convertirlo en un "la gente que odia esa religión lo mató durante la prueba". -explico- Y perdona si te ofende que tema un ataque de ti con lo poco que te conozco... Mira hacia el examen. El 90% de la gente que participa está dispuesta a sacarle las tripas al resto para avanzar. Yo he ayudado a bastantes personas tocadas, y aún así tengo una voz dentro que me incita a matar a prácticamente todo el que me tosa. Llámalo "piensa mal y acertarás" o "el ladrón cree que todos son de su condición". Toma. -recojo el rifle con cuidado y se lo tiendo, dándole a continuación el cargador que llevo en mi bolsillo izquierdo- Te voy a decir algo que me sorprende que no me preguntes... Sabes los motivos por los que te ataqué, pero no por los que te perdoné y sané,
¿verdad? Alguien confiaba en ti a pesar de todo, suficiente como para meterse cuando luchabas contra algo de poder desconocido, y no atacaste hasta que no creíste que iba a dañar a alguien más que a tí. Muchas veces peleando se pueden entender cosas de una persona. -concluyo con cierta tristeza porque no me hubiese quedado más alternativa que esa por sus mentiras, pero me alegro de que al menos no haya terminado tan mal.

Durmió, durmió demasiado tiempo y divagó entre sueños tontos, nada que lograra recordar cuando despertara como tampoco recordaría el dolor que había sentido tras el ataque de aquella chiquilla de ojos rojos y que deseaba cobrarse luego, cuando lograra abrir los ojos y salir de este supor tan pesado en el cual había caído. Lo necesitaba, cuando tu mente trabajaba tan rápidamente, no puedes llegar y apagarla, no es posible, por eso no siempre dormía bien, por eso, quizás, a veces perdería la razón. 

Ya era de noche cuando logró abrir los ojos, estaba despierta, más despierta que nunca antes en su vida, y rápidamente se sentó en la cama, haciendo que la manta que la cubría cayera hasta quedar en su regazo. Su mano derecha fue a su frente  para inclinarse hacia delante haciendo que los mechones de su cabello cubrieran su rostro, pero ese segundo de meditación fue interrumpido al sentir a una persona a su lado, era Gin, que estaba dormido, se movió hacia el chico y colocó su mano en la mejilla de chico.

— hola... — susurró, ahora colocando su otra mano en la otra mejilla de su amigo y besando su mejilla — ¿cuanto ha pasado? — preguntó, volviendo a quedar sentada en la cama, sobre sus pantorrillas, desviando su mirada a su manos, se sentía extraña, — mejor dicho, ¿qué me pasó? —, esos ojos rojos brillaron ante la duda. 

¿Qué clase de heroína era ella? ¿Qué clase de persona tenía que ser para actuar de esta forma? Su pensamiento se vió interrumpido ante la situación, circunstancia, no, ante la realidad frente suyo, al observarla declarar aquello y confesar la razón real del asunto. Al final la que necesitaba más ser salvada y a su vez guardada del mal y del dolor era ella y él fue insensible al ignorarlo, pero ya no sintió pena ni pesar, no por sí mismo, sino empatía por ella, seriedad que se vió marcada al por fin haber obtenido sus palabras.

- Akemi... Nosotros hicimos una promesa. ¿Recuerdas? Prometimos, yo, tú y él que pasaríamos el examen juntos. -Declaró y casi confrontó a la joven mujer, sintiendo sus lágrimas ya secas en aquel momento.- Fue mi culpa por hacerte atacar a esa niña aquella, ya lo hablé con Ginnei, fue una situación estúpida por culpa de un estúpido. -Bajó la vista un poco, tapando sus ojos con sus mechones, apelando a ser "dicho estúpido", sin embargo la miró, serio de nuevo, pero apenado.- Sin embargo no te voy a perdonar si buscas sacrificarte. ¿Entiendes? Aún cuando estén saliendo más y más usuarios de Nen, aún cuando muchos me odien como hacían antes de tener Nen yo, aún cuando exista el "484", yo...

Tomó aire entonces y se confesó él mismo.

- Yo no soy tan débil. Te protegeré tanto como pueda, como sé que puedes protegerte a tí misma, pero debes protegerte igualmente. Te agradezco por cuidarme entonces, por todo, pero tenemos que cumplir la promesa. ¿Sí?

Trató de darle, no, buscó darle un gesto sincero entonces y entrelazó su dedo meñique con el de ella para luego, con su otra mano, ya hubiendo recuperado ambas, abrazándola, firmemente, agachándose muy como estuvieron en el piso retorciéndose ese día en la enfermería con Sakura. Al envolverla entre sus brazos pronunció.

- Asobijikan, Hora del Juego. Aquella mano que envuelve gentilmente y guarda un momento en el tiempo, salva a una persona en el mundo. Save Hand.

Pareció ser como si la mano que los envolvía entonces de Nen fuese una que los tapaba a ambos, pero en realidad era otra mano, como una tercera mano, de alguien ajeno a ese momento, alguien que ambos conocían muy bien y en quién basó e inspiró esta misma técnica, muy como Akemi hizo con su técnica del Hilo Rojo. A medida que buscaba sanar a la chica del dolor, pronunció.

- Pensamos lo mismo, después de todo. Él nos acompaña, ¿lo ves? Nuestro sol aquí en la oscuridad, allá arriba, nos mira y sonríe, tú sabes que sí. -Pronunció entre sollozos, apenas. ¿Se había hecho más fuerte, más humano, más maduro? No sabía.- Su mano nos acompaña siempre. Nuestro lazo, nuestro hilo con él no desaparecerá. Anda, no sufras más, te lo suplico. Pasemos este juego... No, esta prueba.

Por fin le dijo "prueba", por primera vez en toda dicha. Aguardó a que el efecto la sanase de su dolor, acariciando su cabello entonces y queriendo acercarse, pero sin atreverse. Ahora mismo su lazo con Akemi era superior a cualquier amor o romance mero, era algo más, algo que apreciaba. Su gesto infantil pero amable le acompañó hasta confirmar que estuviese sanada.

Una vez pasase eso y la mano simbólica de Kairen y el sol al que miraría hacia arriba junto con ella, como si fuese uno de los ojos del mismo joven al que ambos tributaban en sus corazones, buscaría levantarse con ella entonces.

- Trataré de enseñarle Nen a la niña aquella que salvé. Ah, también salvé a Hiro, si quieres le enseñamos juntos los dos. Por otro lado, busquemos un grupo distinto en la tercera prueba, para variar un poco.

Rió entonces tras decir eso, buscando propagar su optimismo a la chica indicándole sus intenciones.

Así, pretendería seguir con el camino ya establecido, sin apurarse ni tampoco detenerse.

"Seguro que si vamos al norte encontraremos un Inn o algo..."

Duermo, como últimamente por las pruebas, con la espada envainada sujeta en las manos, una mala costumbre que estoy adquiriendo fruto de la tensión del examen. Mi vida desde lo que pasó con mis padres fue tensa bastante a menudo, pero nunca tanto. Nunca tanta gente obtenía un beneficio claro de dañarnos a mí o a mis amigos.

No obstante, a pesar de que un despertar repentino suele ser bastante más vehemente, sólo sujeto la hoja en posición vertical por instinto, como para desenvainarla, pero sin apenas rozar el mango con la diestra. Lo que atenúa tanto esta reacción es que instantes antes ya notaba un cambio aún en mis sueños, fruto del vínculo que comparto con Phryne y Nero. El cambio, de su mala situación hasta estabilizarse, había sido suficiente para hacer que pasara a un estado de sueño algo menos profundo, por lo que cuando su mano me despertó ya sabía que era ella.

Con gesto aliviado, miro cálidamente a los ojos de Phryne mientras apoyo mi mano derecha sobre la suya y me incorporo lo justo para darle un abrazo. Claramente ella ya me ha tenido que ver varias veces con heridas severas por unas u otras cosas, pero quizás por tener yo una mente más frágil o porque se hubiese repetido menos la escena, haberla visto en esa situación sin saber si despertaría y cómo es algo que me ha causado auténtico terror.

- Hola, pequeña... -le digo, y entonces le dedico una sonrisa tan parecida pero tan distinta a las que dedico a la mayoría, pues esa sonrisa se refleja en mis ojos también, una sonrisa de auténtica alegría al verla recuperada- Despacio, no te apresures. Una sensación interesante, ¿no? -le digo, hablando en voz baja para no despertar a la gente, si bien algo me dice que Akemi debe de estar consciente o a punto, por ese dichoso hilo rojo que las une. Ahora que caigo en ello, quizás es un buen punto para explicarle- Llevas un día inconsciente, más o menos. Mira. -señalo el "hilo rojo" que sale de su pecho en dirección a la cama de la otra chica. Sumado eso, ahora que puede ver mi aura, formo una pelota de Nen que se mantiene flotando entre mis manos y la hago moverse arriba, abajo y hacia los lados con la mente, para luego volver a reunirse al resto del aura que rodea mi cuerpo, como todos los demás- Ese hilo es una técnica de Nen, que es lo que te acabo de enseñar, control del aura que todos tenemos, diré como un resumen. Ella te lanzó ese hilo, por eso me asusté tanto y ella también lo pareció al darse cuenta. Al usar el Nen sobre alguien que no lo tiene, provocas que despierte su capacidad de usar Nen, aunque viene con un alto riesgo de dañar gravemente o matar a aquel contra quien lo usas. Existen formas menos arriesgadas de iniciarse, aunque yo no se hacerlo... Por eso me dio tanto miedo cuando lo hizo. -concluyo sobre la explicación- También debes saber que está prohibido intentar matarnos en esta entrefase, como en la anterior. -añado, sabiendo que le va a sentar muy mal lo que dijo y temiendo que haga algo contra Akemi...  mientras está "prohibido", al menos.

Si después quería vengarse era otra cuestión, pero con todo lo que ha pasado prefiero no arriesgarme. Pudiendo defenderse aquí está relativamente segura, mientras que si se lograba cargar a Akemi ahora, lo que de por sí sería un hito, supondría que pusieran a la policía a custodiarla y demás, lo que luego era un problema para tratar de rescatarla.

Suelto una pequeña risa tras su primer comentario.- Puede ser, pero... ¿Considerarías a eso mentir?. Es broma, es broma.- Digo agitando la mano antes de ver su reacción.

Cuando empieza a hablar y menciona la ayuda durante el combate tuerzo el gesto.- No debió intentar ayudar. Tampoco hice algo que mereciese su ayuda. Dejarle que tuviese mi arma para defenderse cuando su amiga acababa de morir... bueno o eso pensábamos.- Doy un suspiro, realmente le había dejado el arma porque había visto verdaderas ganas en sus ojos de vengar a su compañera. Quizá una parte de mi había admirado la determinación que había tenido la pequeña en ese momento.

De todas formas... "El ladrón que piensa que todos son de su condición..." ¿Quien te dice que no actué en ese momento para que dudaras de tus acciones?. -Deje un momento de silencio y sacudí la cabeza.- Cuando todo empezó había dos formas de acabar ese combate, o convenciéndote que no quería dañar a nadie o cortando el collar que tienes al cuello e intentando que no te trasformaras. La mas lógica era la segunda, pero dude. Un ataque al cuello nunca sabes como puede acabar.- Dije seria. Todo aquello era cierto, lo había pensado pero no lo había hecho para no correr el riesgo de cortarle algún punto vital.

-Y todo para acabar siendo ensartada.- Digo llevándome la mano al pecho.- Joder, espero que esa mierda que usaste para curarme no deje cicatriz, no podre volver a lucir figura.- Digo mientras me rio, era obvio que me importaba mas bien poco lo que la gente pensara de mi aspecto.

-Entonces hay tregua.- Finalizo algo mas seria.- Por mi no tendrás problema, pero deberías cuidarte de el resto de los que estuvieron en el grupo. No creo que pervertido y el otro te den problemas, pero el risitas y la Kurata son otro tema. No se como se posicionara Hiro.- En ese momento me quedo callada un momento.- Que demonios, si de verdad puedes darme información de Donnoban cuando acabe el examen... seguramente si estaré apuntándote durante el examen, pero para cubrir a tu grupo desde la distancia. Aunque...- Me acerco durante un momento a Ginnei para susurrarle.- _{No creo que mate a alguien si intentan atacaros, lo incapacitare, del resto tendrás que encargarte tu. Ah, y actua como si siguieras queriendome matar, quiza eso tambien te ayude a ver como son el resto de las personas que te rodean.-} Me separo y miro hacia el resto de la gente del examen.- Por dios, que sea un espacio abierto, ese castillo no me ha gustado nada.

Inmediatamente sus ojos fueron al hilo que salía de su vientre e intentó tomarlo, pero sus manos lo traspasaban, rodó los ojos e intentó seguir la explicación de Ginnei, aunque no mirando la esfera de den que estaba creando, el chico ya tenía mayor manejo con la técnica, aunque era tan extraño poder ver aquella aura que se  manifestaba.

— en mis investigaciones, me tomé con antecedentes de personas excepcionales que tenían capacidades que eran más allá de lo humano y — levantó la mirada y torció el gesto, ya había visto aquel hilo, entornando los ojos por unos segundos — no la mataré, no de momento, esa idiota de los ojos rojos me las pagará de otra manera, maniática demente... es un peligro con esos poderes — rodó los ojos y miró a todos lados —¿y mi computadora?— bajó la manos y comenzó a gatear por la cama hasta dar con su chaqueta de cuero negra — cuando tenga la licencia, me las cobraré de esa demente, — era obvio porque estaba ahí, se había dado cuenta de que la única forma de pasar a las ligas mayores en el hackeo sería consiguiendo la licencia y conseguir entrar al sistema de los cazadores. 

— ya... no importa — volvió donde Ginnei y le jaló de una de las mejillas — odio que me llames pequeña, — la siguió jalando hasta que creyó que ya se sentía resarcida en la ofensa que le había dicho — ¿mi hermano, sabes donde está? — miró hacia la puerta  y puso su mano sobre su vientre — ¿y cómo deshacernos esto?, ¿debo ir con esa maniaca? — no estaba prohibido hacerla sufrir pensó, sin saber que lo que sintiera una o le pasara, la otra también lo sentiría — ¿ahora me puedes explica que mierda te pasaba con esa rubia tetona? porque eso de clavarle una espada en el pecho estuvo bastante violento o... ¿fue una demostración de lo que querías hacerle?... travieso — sonrió y le pegó en las costillas suspirando y apoyándose en el hombro de Ginnei, con los ojos cerrados. — no sabía que tenías esos gustos tan sádicos — susurró, mordiéndose el labio inferior, y moviéndose para quedar cerca del rostro del chico, mirándolo a los ojos, con aquella tibia sonrisa que no le daba a nadie más aparte de su hermano. 

Recibo el golpe de lleno, el impacto y dolor es demaciado para mi ya que termino vomitando por el impacto recibido.Pese a eso intento auto-controlarme para no gritar no en estos momentos,ya que no queria llamar mas la atencion,en su deber espero que venga el joven y dija su palabras magicas para que yo pueda gritar sin molestar a nadie.Y como esperaba no sale ningun sonido de mi boca, nada de nada solo un absoluto silencio sobrenatural acompañado de un intenso dolor.

¡Pero que ilusiorio era ese dolor! el golpe del la momia era doloroso si lo era.Pero nada en comparacion con lo siguiente que empezo a ocurrirme a mi cuerpo.

Quizas estaba alucinando en esos momentos o quizas no, ya que veo como unas mariposas azules aparecen en mi rango de vision, revoteando ellas por mi cuerpo hermosas y puras al verlas mi dolor subitamente se habia detenido y la mariposa se posa en todo mi cuerpo cubriendome como si ella estuviera dandome un calido abrazo si esque se podria llamar abrazo a eso, pero en unos momentos ellas se desintegraron dandome un bello expectaculo de su muerte y vida en tan poco tiempo y cuando sucedio eso veo como empieza a salia una energia blanca de mi cuerpo, tranquila limpia sin ninguna malicia en ello. O eso parecia ser, ya que mi cuerpo empieza a convulcionar entre mas energia empezaba a salir por mi cuerpo, dandome un profundo dolor y retorcimiento que nunca habia creido que mi cuerpo seria capaz de hacer. La convuciones solo aumentaba y aumentaba asi como el dolor, parecia como si dentro de mi cuerpo hubiera huevos de gusanos y estos se encontrara madurando, creciendo y comiendo cada centimentro de la carne de mi cuerpo desgararando todo a su camino, hueso,carnes y tendoles en su intensa busqueda hacia la salida.La salidad que era mi piel para poder vivir en este cruel mundo.

Asi de desagradable era el dolor que simplemente queria oirme mis gritos, escuchar mi dolor escucharlo para asi evitar pensar en solo el dolor. Pero nada de eso solo un silencio me envuelve, hastas mis pensamientos son opacados por la gravedad de la situacion.

Realmente era un infierno ¿Yo lo merecia ? ¿ Merecia todo este dolor por mis pecados ? ¿ O realmente merecia yo experimentar este dolor por los pecados que no son de mi culpa ? Quiza yo buscaba ser castigado, quizas hasta queria esto, si moria al menos sentiria que pude purificarme por medio del dolor. Quizas en el fondo yo era un pequeño sadomasoquista que queria recibir su merecido, o simplemente el dolor me habia echo perder la cordura por unos leve instantes.

El tiempo no existe para mi, no en estos momento.Cada segundo se siente eterno cada minuto se siente como una horrible pesadilla que nunca acabara.Solo estoy yo completamente denegado a esta inmensa soledad sin fin.
Morir, oh si morir seria un gran acto de piedad digna para ganarse el titulo de "SANTO PERDON".

Ahora no solo el dolor aumenta, si no que el ambiente cambia, todo cambia.Como si fuera pintura de un lienzo y este se estuviera derritiendose veo todo asi.Todo se derrite con suma piedad la terrible cara del la momia, la cara de mi hijo adoptivo Garou el techo y el piso todo se desaparece.Y solo deja un rastro de algo nuevo, algo que desafia la ley de la logica.Todo es reemplazado por una habitacion pequeña.Con un sencillo bombillo en el techo y yo sentado en el sofa tranquilo mirando ahora una television.

Lo que veia era de toda clase, la historia del libro de mi abuelo, la historia de mi vida.La vida y muerte de animales,humanos inclusos atomos y quizas estrellas solo eso veia hay con intenso dolor.Pero un sonido cambio todo un "click" y el canal cambio ahora vei mi gente, mi propia gente que seguia mis ideales, pero de forma que yo nunca esperaba verlo.

La venta de organos legales, extrañas costumbre retorcidas, hasta algunos constumbrs que legalizaba toda clase de ilegalidad..Era como ver una sinfonia una horrible sinfonia compuesta por el mismisimo diablo.Y lo peor esque todo eso que veo, todo eso lo veo y proceso con un gran sentimiendo de "normalidad" Yo la lo conocia, lo habia presenciado en primera mano.Nada de eso era nuevo para mi.Ya que el gran santo Ruud como me llamaban a veces lo sabia desde hace mucho tiempo, como odiaba ese apodo "santo".

-¿Extraño no es asi ? Usualmente la gente niega la verdad, la destesta y huye de ella y se refugia en mentiras y ilusiones para vivir su vida sin complicaciones, sin temor de aceptar lo que uno niega de si mismo.Ni siquiera toman el suficiente valor para enfrentarlo o vivir con ello.Pero tu Ruud Cess, no lo niegas.La has aceptado no huyes de ella ni te ocultas bajos falsedades.Si no que aceptaste mi beso, mi verdad como si fuera el calido abrazo de una madre que da hacia su hijo.

Volteo hacia el origen de aquella voz, esa voz la conocia era mi esposa.Y hay lo veo, veo esa cosa.Estaba a lado mio, su colua negra me enrollaba todo mi cuerpo y su apariencia era retorcida y cruel.Como si fuera una mala broma de los dioses,un ser con un caparazon negro con miles de caras gritando en su pecho-caparazon,sus 4 brazos sostenia diversos objetos brillantes y relucientes como si fuera de oro y su rostro si esque se logria llamar rostro a algo tan parecido a un insecto, no tenia ojos, nada de ojos solo una gran boca lleno de dientes y dentro de esa boca estaba la cara de mi agresor aquel ser que habia atacado de muerte en el pre-examen pero su rostro es raro.Es una mascara enrealidad esta se destruye y ahora ve la rubia, si la rubia que me habia disparado la tal famosa mary.Pero es solo otra mascara mas,igual que la anterior esta se destruye y ahora veo sin ninguna equivocacion o sentimiento de ser una mascara el rostro de mi hijo Albert con su semblante tan tranquilo y tan sereno.Como si fuera ajeno a la mezquinidades de este mundo.O por lo menos eso yo pensaba de el.

-¿Dime Ruud que ves ? ¿Vez algo que tu no esperabas ver o ves algo que te es familiar ? La verdad no tiene forma fisica, tu solo veras lo que tu mente quiere ver..... y no solo eso si no a la persona que mas amas en este mundo.Asi que Ruud ¿cual es esa persona que mas amas ? El amor ha veces es peculiar, uno puede amar a la persona que mas odia o la que menos piensa.Ya que no puede haber amor sin odio como a su vez no puede existir odio sin amor.Son las cara de la misma moneda Ruud.

¿le respondo ? no se, quizas "la verdad" ya conocia la respuesta y solo se estaba burlando de mi ligeramente.Ahora "la verdad" se me acerca me sujeta y me lleva hacia su boca, con esa sonrisa adentro me besa, ¡la cara de mi hijo me besa de boca!.

Horrible y desagradable es el beso, ¡por dios es mi hijo! Si fuera mi esposa estaria bien, todo bien normal pero no. !La jodida ironia me estaba atacando ahora¡.

Ahora me aleja el incomodo beso ha terminado.Estoy agradecido por eso.Nada es mas incomodo que un asalto sexual bajo la cara de tu hijo.

"La verda" mueve de nuevo sus brazos y me sujete, ahora me lleva hacia donde la television, no protesto no hago nada.Se lo que significa otros de su besos otro de sus verdades.Entro a la television con la compresion que ya mi mente no puede partirse mas de lo que estes despues de su 1 beso. que habia experimentado hace mucho tiempo, cuando vi ese fatidico documental sobre mi vida.

Y dentro de la television, todo se detiene ya no hay mas dolores,ya no mas infierno.Solo un sentimiento de felicidad mesclado con tristezaY y entre muchas otras emociones mas.En esos breves instante yo pense que habia finalmente muerto, y que ahora tendria que cruzar el rio de lo muerte para ir donde mi alma tendria que reposar.Cielo o infierno hasta quizas reercanacion podria pasar a mi alma.

Pero ese destino mio, no lo sabre yo en estos momentos ha sido propuesto para un momento del futuro que esta velado para mi.

Abro los ojos todabia estoy aqui en la habitacion con la momia y Garou.La energia todabia sigue saliendo en mi cuerpo, pero esta vez esta mas tranquila mas serena, ya no me provoca dolor.Siento como si pudiera controlarla que yo ahora domina esa energia.

Oh como rei con ese ultimo pensamiento, rei como un demente y con la risita mas clara y sonora que yo habia escuchado.Por supuesto nadie escuhara esa risa,nadie mas que yo, ya que solo me rio solo para mi mente,para que mas nadie logre escuchar mi felicidad interna.

Habia tenido exito,me arriesgue y ahora tengo la rescompensa de mi apuesta.

El dichoso Nen.

Lo habia recibido lo habia dominado.Pero un precio, siempre hay un precio.Quiza era el dolor el precio o quiza algo mas no lo se.Ahora estoy vivo es lo que importar ahora.Asi que miro a Garou miro a ver si el sigue vivo todabia si habia logrado superar esta dificil iniciacion.Y hay veo sus pobres intento de levantarme para volver caer al suelo y volver a repetir este mimos proceso, pero al menos estaba vivo como yo.

Los 2 sobrevivimos AJAJAJAJAJAJA ambos logramos nuestro objetivos Garou, con nuestra estupidez camuflada con valentia lo logramos.Que gran logro y que gran falta de auto-preservacion la nuestra querido Garou.

Su primer comentario me hace dudar si se está tomando en serio todo esto. Al parecer que la mentira de hace menos de una hora, en el examen, le haya supuesto terminar con casi medio metro de acero entre pecho y espalda aún puede dar pie a bromas. Igualmente, prefiero descartarlo como tal. Quizás no sea perfecta, pero tampoco podría decir que es genuinamente malvada.

Al mencionar a Miki escucho con clara curiosidad el por qué alguien realizaría un acto tan estúpido como desafiar a Hades sólo por un gesto tan nimio. Bueno, es una de las conversaciones que tengo planeadas para el barco, de hecho pretendía tenerla antes que esta, pero los planes raramente salen tan perfectos.

- Extraño. -respondo solamente, aunque hay algo en las palabras de Mary que no me termina de convencer del todo.

¿Está tergiversando las cosas otra vez o es sólo mi propia desconfianza? Igualmente, existen pocos motivos que impliquen tanto agradecimiento por recibir un arma, quizás una combinación de varias cosas... Bueno, da igual, dudo que un acto tan pequeño fuese una apuesta a largo plazo.

Casi me interesa más su explicación sobre el combate, que me genera una sonrisa con cierto tono de ironía en su explicación, pero tampoco me molesto en aclarar por qué es mi gesto.

- Dudo que fuese una simple actuación. Acababas de dar una mentira más posible y te la había cazado, y después te encontraste cara a cara con Hades. Arriesgarte a no golpear mientras Hades genera un vórtice de Nen a tu alrededor es un farol que sólo alguien que no tuviese nada que temer de él llevaría a cabo. 484 podría. Rellik también, quizás. Pero no muchos más y no creo que esperases estar TAN por encima mía sabiendo que ese tipo había despertado mi Nen. -concluyo con bastante seguridad.

¿Es posible que tenga tanta sangre fría? Quizás, pero es algo que no me entra en la cabeza si no está totalmente segura de poder machacarme. Compongo una pequeña sonrisa de disculpa y respondo:

- La verdad, ni idea. -replico- Parece que te preocupas de tu aspecto*, aunque creo que una cicatriz como esa sería más interesante que otra cosa. -a fin de cuentas, ¿cuánta gente tiene la marca de una espada que la atraviese de lado a lado?- Al menos para mí. A la mayoría de las personas que se quejan de que se toma a las mujeres por objetos, al final lo que les gusta ver es una muñeca de porcelana de ojos claros y que ha vivido entre algodones... ¿Y por qué cuernos te estoy diciendo todo esto? -pregunto, más para mí que para ella.

Sacudo la cabeza para apartarla de temas como ese. Quizás Hades no mintió al decir eso de "la rubia que te pone cachondo" aunque al final incluso la hubiese atacado de una manera tan agresiva.

Sus últimas palabras me hacen quedarme algo pensativo y finalmente niego con la cabeza.

- No se qué será la prueba, pero dudo que, a menos que vayamos en equipo, puedas tomarte la molestia de cubrir a otros. Mejor intenta no morir por el camino. -respondo- Dudo que forme equipo con Nakamura y aún más con Akemi. Hiro... Es un poco más tonto e inocente de lo que debería para cómo es el mundo, pero al menos intenta hacer las cosas bien. Es probable que si se puede lo lleve, si Nero y Phryne no tienen nada en contra, aunque sea para que no termine... peor. -concluyo, sea lo que sea a lo que me refiero con "peor".

Claramente mis dudas sobre Mary no están 100% despejadas, pero dado que se nota claramente que no miento sobre la información y la posible ayuda, espero que en verdad cumpla y no trate de vengarse... Que después de lo caro y difícil que me ha resultado salvarla en el examen, aunque no lo sepa bien (bastante lógico, no es como si me fuese a quejar de lo caro que me sale algo cuando cumplo mi objetivo y el resultado final es de lo mejor que podría ser), sería algo tremendamente irónico.

Asiento al escuchar que ha investigado sobre cosas "sobrehumanas"... yo también había leído algo, aunque seguro que mucho más especulativo y menos fiable que lo que Phryne hubiese podido hallar. No era un absoluto inepto en temas de ordenadores, pero seguro que estaba por debajo con respecto a la media de mi generación. Si yo encontré esa clase de temas fue por mi búsqueda sobre Hades.

No reacciono a favor ni en contra de que quiera putear a Akemi, me parece algo muy lógico y la chica ya no tiene mayor relevancia para mí. Si a Phryne le hubiese pasado algo malo con este despertar, ahí sí que se hubiese podido dar por jodida, dado que no era mentira mi amenaza sobre devolverle el doble: si Phryne se hubiese quedado tuerta, pensaba arrancarle ambos ojos, si hubiese perdido un brazo, más le valía aprender a comer con los pies. Pero por fortuna para todos no ha sucedido nada de eso.

Mientras pienso en estas cosas, sonrío al ver que Phryne se chincha al llamarla pequeña, una sonrisa que termina de una forma bastante irregular al tironearme de un moflete. Duele un poco, pero me hace feliz verla tan enérgica como para molestarse.

- Lo she, lo she, phero esh grashiosho. -replico ante su pellizco¹.

Entonces viene la parte de las explicaciones y ahí me pongo serio. Phryne y Nero son dos personas a quien nunca miento sobre los motivos de algo, ni siquiera por omisión de información. Igualmente compongo una sonrisa cuando menciona lo de si era lo que quería hacerle.

- Claro, como no se si tú me vas a dejar atarte con cadenas, que mi poder ha tomado esa forma por lo pervertido y nada más, pues me busco otras chicas que me dejan y les lanzo la indirecta de "clavar" con un metro de acero en el pecho. -replico siguiendo la broma- Lo cierto es que es bastante atractiva, no te voy a mentir. -me encojo de hombros- Pero lo que pasó fue... bueno, ya sabes que además de esa afición estúpida de dármelas de héroe, tiendo a terminar riñendo con quien putea al resto, especialmente si somos uno de nosotros tres. -ahora sí hablo en serio- Ella disparó a Ruud antes de iniciar el examen, dándome una explicación bastante mala al respecto, pero por cómo se comportó después le permití venir con nosotros en grupo. -señalo a Nero, que parece dormido, a unos metros de nosotros- Eso en la prueba de los lobos... y cuando teníamos tres lobos, cogió uno y se quedó atrás, adrede, dejándonos jodidos² porque sin contarla éramos ocho con dos lobos. Así que ahí pasó lo que viste, le pregunté los motivos, me mintió... Y cuando tú llamaste mi atención, como no esperaba que vinieses, me sorprendí mucho y Hades lo aprovechó. Probablemente sólo le hubiese cortado un brazo si no. Por cierto, ya que lo menciono... -achico los ojos y ahora soy yo quien engancha a Phryne por una oreja en mi caso- ¿Cómo se te ocurre meterte aquí a nuestras espaldas? -sí, bueno, la respuesta obvia es que a la cara no la íbamos a dejar meterse en un embolado como este, pero aparte de eso.

Nero dormía más allá, parecía un niño, aunque ella nunca lo vio siendo uno, sin embargo el no haber crecido juntos no fue impedimento para quererse como tal, y actuar como hermanos, era verdad eso de que la sangre tira y más cuando has pasado gran parte de tu vida sola y sin nadie que te cuide desinteresadamente, y ahora estaba Ginnei a pesar de que la relación de él con Phryne no fuera del todo clara y que cuyos límites parecían diluirse en medio del cariño y la cotidianidad, lo que era divertido, pues ninguno de los dos estaba dispuesto a asumir aquella verdad y se lanzaban bromas para camuflar aquella confusión. 

— comprendo, entonces quieres practicar con milf antes de ir por mí, me halagas, pero ¿sabes que no debes hacerlo, no? que siento un torpe, igual te aceptaría — no es posible saber si lo decía en serio o era broma, o ambas cosas, por la convicción que le imprimió a aquellas palabras, pero luego se rió, echando la cabeza hacia atrás, y picando su frente con su dedo índice, Ginnei compartía una parte de esa personalidad que era graciosa y divertida, afortunadamente nunca había conocido el otro lado frío y desarmado que sólo sus enemigos lograban ver. 

— entonces... ¿todo eso fue por culpa de ese viejo miserable? — rodó los ojos, poniéndose nuevamente seria — sé que debes proteger a todos... y que es patológico, pero... vamos Ginnei, no necesitas librar todas las batallas, además, no se me hace que esa mujer lo haya hecho por mero gusto, y no eres juez para determinar el valor de sus acciones, — chasqueo la lengua y se cruzó de brazos, sentada a lo indio en la cama — y sobre lo segundo, ¿ves?, de nuevo, esa necesidad de confiar en la gente, en fin, ya está hecho y menos mal que no la mataste — cerró los ojos, hace algún tiempo, Phry le había confesado que estaba segura que Hades no era un ser del todo independiente de Ginnei, sino que era la manifestación de su ello más profundo, la materialización de sus deseos y violencia, la bestia que todos tenemos dentro, pero que por alguna razón, en él se manifestaba de manera física. 

— imagino que ahora no irás detrás de esa Milf, ¿no? — ladeó su cabeza, y sus labios se torcieron un poco, intentando eludir la pregunta que le había hecho, pero al final debió responder, rodó los ojos y  miró al cielo unos segundos — es la única forma de superarme — respondió simplemente, no iba a hablar de Neko, ni del Orbe Negro ni del hecho que podría transformarse en una de las hackers más peligrosas del mundo, ni mucho menos que necesitaba los permisos especiales de los cazadores para dar con su verdadero padre además de robar a grandes transnacionales y perseguir el crimen financiero, en partes iguales — no sé porqué te sorprende tanto, no tengo porqué contarles a los dos cada uno de mis pasos —, concluyó fingiendo molestia. La estrategia de molestarse el doble era la mejor en casos así. 

La situación de nosotros tres siempre ha sido en cierto modo complicada, aunque desde un tiempo después de que me "adoptaran", por decirlo en cierto modo, nunca ha habido tanta tranquilidad como para llegar a algo... o quizás sea algo más complejo que todo eso. Hay tantas opciones para explicar la situación como estrellas, por suerte o desgracia.

Cuando me recogieron, yo no era más que una sombra. Ni siquiera lloraba, el 90% del tiempo estaba con una mirada perdida. Como ya sabían, siempre fui alguien social, aunque las únicas personas que en verdad me conocían eran mis padres. El resto, una máscara, humo y espejos, reflejos de una personalidad prestada. Eso en cierta forma era también parecido a Hades: la otra cara de la moneda, una cara de odio y sadismo.

Y desde que tomé confianza con ellos, fue cuando las cosas comenzaron a volverse difusas con Phryne. Me había acostado con decenas de chicas distintas: ese aire "cool" y "peligroso" de un chico que siempre había estado entre pandillas, mezclado con una cara amable y esa reputación que me estaba ganando de "héroe" en mi barrio, mezclado con el agradecimiento de algunas de ellas... bueno, en ese aspecto había sido muy buena época para ser yo, así que era difícil que me tomasen por tímido. No obstante, con ella era distinto, ¿quizás puede ser miedo a que las cosas se tuerzan y perder a alguien que me importa tanto ahora mismo?¿Me preocupa quizás cómo reaccione Nero si hago una avance?¿Quizás una de mis razones para haber estado junto al señor Yamada y haber aceptado venir al examen sin Phryne (o eso creía) es evitar un "período de paz" y tener que afrontar la situación? Como dice arriba, miles de opciones equiprobables.

Así pues, me rasco la mejilla y evito esos ojos rojizos que tanto me gustan mirando a un lado, tras lo que vuelvo a mirarla con una sonrisa.

- Quizás sea querer desfogarme un poco para no ser demasiado para ti, ¿no te parece? -replico con picardía.

Igualmente, el tema deriva hacia los actos de Mary, especialmente el disparo a Ruud, a lo que replico:

- A ver, había un tipo tratando de apuñalar al sacerdote cuando ella le disparó en la rodilla... y cuando vino a mí me dijo que en verdad habían sido dos balas, que había parecido un solo disparo por disparar muy rápido, y que había disparado a ambas rodillas para terminar el combate pero que había fallado en la del atacante. -le explico, y sabiendo que es lista, ya casi seguro sabe por dónde voy, pero igualmente explico- Si me hubiese dicho que le disparó pretendiendo que muriera aparte de darme su razón, que al parecer perdió una hija por cosas del marido, la Mafia y el loratismo, quizás no me hubiese importado. Pero la forma en que lo planteó... o era una mentira tratando de quedar bien, o era una cagada que le estaba costando la vida a alguien por su indiferencia de después, y eso me molesta. Ya sabes la frase de mi padre. -"lo malo no es que los malos sean malos, sino que los que se consideran buenos ignoren los actos malos mientras no les afectan". Sí, mi padre adoptivo no era hombre de letras, pero el significado de la frase perduraba en mí- Me jode que la gente intente parecer santa cuando no lo es. -pequeña muestra de hipocresía para terminar la exposición, si bien es cierto que mi caso es ligeramente más complejo desde mi punto de vista, por lo que yo no me veo como hipócrita.

Si les hiciese caso y no actuase como "juez", todo sería más sencillo, sin duda... pero precisamente por eso tenía mi historia con la mafia. Lo que hacía me parecía malo, así que como bien podía actuaba para joderles en mi limitado ámbito de actuación. Así me había pasado al final.

La discusión con respecto a lo que era Hades suponía mil teorías. Para mí, tener ese collar de plata que no me puedo quitar significa que tiene que ser algo más, pero para ella es distinto. En fin, son meditaciones que no llevan a nada al final.

Con respecto a sus últimas palabras, me encojo de hombros sobre lo de Mary, "ir detrás" es mucho decir, pero si cae, cae. Igualmente asiento ante sus motivos, pero le digo:

- Sí, quizás no debas darnos explicaciones, pero sabes por qué no queríamos que vinieses. Sabes que esto es muy peligroso, y este año quizás más... -replico, negando con la cabeza al pensar en la que se está montando- Pero bueno, ya estás aquí y te las has apañado para pasar dos pruebas sin meterte en líos, parece, además de que por mala que sea la forma has logrado despertar el Nen... supongo que ya no hay vuelta atrás. -concluyo mirándola con franqueza.

Sí, quizás sea un tanto despótico el tema de no querer permitirle que se juegue la vida en algo como esto, o tal vez más correcto sería decir injusto por no querer permitirlo mientras nosotros lo hacemos, pero nos juega esa mala pasada las ganas de protegerla.

- Akemi... Nosotros hicimos una promesa. ¿Recuerdas? Prometimos, yo, tú y él que pasaríamos el examen juntos.

Giró su cabeza al oír tus palabras, se quedó mirándote, esperando tus palabras

 Fue mi culpa por hacerte atacar a esa niña aquella, ya lo hablé con Ginnei, fue una situación estúpida por culpa de un estúpido. -Bajó la vista un poco, tapando sus ojos con sus mechones, apelando a ser "dicho estúpido", sin embargo la miró, serio de nuevo, pero apenado.- Sin embargo no te voy a perdonar si buscas sacrificarte. ¿Entiendes? Aún cuando estén saliendo más y más usuarios de Nen, aún cuando muchos me odien como hacían antes de tener Nen yo, aún cuando exista el "484", yo...

Te observó al principio, con una sonrisa cálida... Se nota que no te culpaba, ella atacó porque así lo quiso, no porque fuera tu culpa, pero cuando te llamaste estúpido se movió apenas para regañarte por haberte llamado así, pero seguiste hablando, sobre no perdonarla si se sacrificaba... Se volvió a sentar y fue ella quien ahora agachó la cabeza... Se sintió algo mal, sí... Pero se sintió bien que alguien le dijera "no quiero que mueras" de una forma codificada. Al nombrar al 484 un escalofrío la despertó de sus pensamientos, te observó atenta, como si fingiera haber estado escuchando todo, sin divagar por su mente con tus palabras, era una atención fingida, evidente, pero al menos ahora ya estaba atenta, pues, lo que ibas a decir era importante

- Yo no soy tan débil. Te protegeré tanto como pueda, como sé que puedes protegerte a tí misma, pero debes protegerte igualmente. Te agradezco por cuidarme entonces, por todo, pero tenemos que cumplir la promesa. ¿Sí?

Roja. Sus ojos se abrieron como nunca ante lo que dijiste. Nunca nadie le había dicho que la protegería... se sonrojó por completo y volvió a bajar la vista. Por lo bajo soltó un _-S-Si...- mientras seguía tratando de recuperar sus colores

- Pensamos lo mismo, después de todo. Él nos acompaña, ¿lo ves? Nuestro sol aquí en la oscuridad, allá arriba, nos mira y sonríe, tú sabes que sí. -Pronunció entre sollozos, apenas. ¿Se había hecho más fuerte, más humano, más maduro? No sabía.- Su mano nos acompaña siempre. Nuestro lazo, nuestro hilo con él no desaparecerá. Anda, no sufras más, te lo suplico. Pasemos este juego... No, esta prueba.

Con tu abrazo se relajó, se quedó abrazada a ti y se quedó relajada... Cuando comentaste lo de Kairen se apretó con fuerza a tu pecho, como abrazándolo a él también. Cuando dijiste que no sufra más, asintió entonces, y tras la primera vez que dijiste "Prueba" volvió a mirarte, con una cara de sorpresa enorme, su color rojo desapareció con rapidez tras su sorpresa, pero una enorme sonrisa apareció reemplazándolo. -SI! Aunque... No sé que nos depare este tercer examen...- Soltó entonces pensativa.

Se quedó pensando otro rato, un poco abrazada a ti, otro poco tratando de no ponerse nerviosa por el examen, que desconocía y que no comprendía en absoluto, pero tratando de que no se note, como de costumbre, aunque era imposible que el observador de Takuro no lo notara. 

Soltó un gran suspiro y le volvió a dar unos golpecitos en la frente de su amigo, a veces pensaba que él debería ser más como ella, tan despreocupada, mientras ella debería ser como él, con ese espíritu de justicia, aunque de seguro terminaría muerta, de la misma manera en que peligraba Ginnei y que ella detestaba, por eso intentaba desalentar en sus intentos de justicia.

— vuelves a ponerte en la posición de juez,  y no solo de juez, sino, de acusador, además, no estas aquí entre geste normal, sino que hay asesinos, criminales, sociopatas a los que no se les aplican las reglas de la ética como al resto, — arregló su cabello detrás de su oreja — ese hombre tiene a muchos que lo desean muerto, lo culpan de todo lo que ha pasado y creo que tienen razón, y sinceramente no me interesa mover un dedo para evitar que él coseche lo que ha sembrado o ha dejado que otros hagan en su nombre — ahora esos ojos rojos estaban fijos en los ojos de Gin — aunque claro, no intentaré matarlo, tampoco me interesa hacerlo, pero si muere, le hará un bien a este mundo — apretó un poco su puño derecho —  puede ser que él no ha hecho los actos tan terribles de su mugrosa religión, pero tampoco ha hecho nada para evitarlo, y eso lo hace tan autor como cualquier otro, así que si alguien desea su muerte y la ejecuta, no es mi problema — sus labios se fruncieron y miraron hacia donde roncaba Nero.

— no eres nadie para estar exigiendo razones y juzgarlas, Gin, en este minuto, no eres nadie y deberías recordarlo cuando desatas a Hades, porque al hacerlo, no te haces muy distinto a Mary y su acción, además, creo que esa chica es una asesina simplemente y buscará cualquier momento para acabar con la vida de cualquiera, no es tan misterioso la forma de actuar, tampoco es que vaya y enfrente de frente, aunque si lo pienso, debió haberle disparado a la cabeza — ladeo su cabeza — a menos que hubiera fallado, uff... esta gente demente, cree que evitando una pelea es pegándole más fuerte al otro, — rodó los ojos — cuando tenga la credencial, lo primero que le haré a esa chica de los ojos rojos será robarle su vida, — divagó un poco, aún quedaba la conversación sobre sus razones de estar ahí. 

— Tú y Nero deben aprender que soy tan capaz como ustedes, aunque no tenga a algo como Hades, no quiere decir que no sepa defenderme —, mojó sus labios — ahora debo ver como aprenderé a usar el nen, sino, será completamente inútil, ¿no? —.

Tomo aire por la boca y lo suelto por la nariz, con gesto pensativo. Hablar con Phryne siempre me hace pensar, supongo que eso es bueno, aunque quizás no lo es tanto cuando estoy recién despierto a mitad de sueño tras pasar dos días en los que no he dormido nada.

- Sí, bueno, puede que esa gente tenga razón. Sabes que yo mismo tendría razones para querer matarlo si lo considerase culpable de lo que pasó en mi barrio. Las cosas no siempre salen como queremos, mañana hablaré con él... -le digo, cruzando los brazos sobre el torso- Pero sabes que no podía dejarlo morir sin más. De hecho, en ese momento, creo que no tenía elección, antes de verlo hacer el capullo había tomado la decisión de ayudarlo y luego vino la carnicería que montó 484... eso me puso tan tenso que sólo pude pensar en terminar lo que había iniciado.

Las palabras sobre que aquí "no soy nadie" me tocan en el ego un poco, pero aún más viniendo de ella. Cruzo los brazos sobre el pecho y frunzo ligeramente el ceño mientras respondo.

- Sí, tienes razón, es probable que aquí no sea nadie y que la mayor parte de esta gente sean sólo unos psicópatas y demás gentuza. Pero, ¿sabes qué? No inmiscuirse es la forma de dejar que los hijos de puta ganen. Así es como va el mundo, y lo sabes. Pedófilos, asesinos, corruptos, podridos de dinero y con amiguitos igual de desgraciados que se encargan de que no les toquen un pelo. Los únicos que les suelen toser son gente más cabrona que ellos mismos si se meten en su camino, pero donde uno caiga por ese medio otro se alzará, y al final quienes pierden son los que no saben defenderse, los que sólo quieren vivir su vida y tratar de lograr algo mejor por sí mismos. -replico con convicción- Oh, y hablé esta mañana con Mary, así que conozco sus razones. Le he devuelto el rifle de francotirador, espero que no me haga matarla... Pero lo más interesante es que tuvo que ver con un trasplante para un hijo de un jefe de la mafia. -relajo los brazos a los lados, sabiendo que esto podía sorprenderla tanto como a mí.

¿Será un nuevo pequeño Belfort?

- Oh, y no me digas que no soy quién para decidir esas cosas. Ella me traicionó directamente, y también me mintió. La "ojos rojos" ha puesto tu vida en riesgo, y diría que la suya también, aunque no quisiera matarte... Y llevas hablando de cómo destruirla desde entonces. -replico- Si vas a joderle la vida por lo que podría haber sido, no quiero que te metas en cómo juzgo a la gente... Mierda, hasta hay gente pidiendo que le hagan eso mismo aún sabiendo que hay riesgo de morir, hasta he pensado en ofrecérselo a Nero para que no tenga que enfrentarse a usuarios del Nen sin serlo durante la prueba, pero me asusta. -confieso- A ver si puedo hablar con el capitán de una dichosa vez* para ver si puede despertarlo de la manera "segura". Supongo que será él, el cazador a cargo de esta prueba, quien os entrene, si no te ayudaré yo... -concluyo finalmente.

Gin había comenzado a hablar demasiado, realmente demasiado, cuestionado cada una de las cosas eu Phry le había dicho, y si bien la chica pudo dejarlo pasar o incluso, debatir, no iban a llegar a ningún lado, Gin era Gin, y ella, era un ser demasiado ambiguo moralmente, en el sentido clásico del bien o el mal, que era imposible determinar un patrón de comportamiento, así que le sonrió, y cuando por fin terminó de hablar, se movió lo suficientemente rápido como para robarle un beso de los labios, un rápido e infantil beso en la boca y volver a sentarse en sus pantorrillas, mirando sobre el hombro a Nero, para ver si había despertado o no. Esa era la mejor manera para callarlo, siempre. 

— eres mucho mejor persona que yo, no deberíais usarme como paradigma en de actuación... además, quizás lo olvide y no le haga nada, o quizás sí, quien sabe, pero matarla, no, no me interesa su sangre en mis manos — mojó sus labios, sintiendo el cosquilleo que Gin le produjo en ellos, a veces, lo molestaba de esa manera, era parte de esa ambigüedad que existía en su relación, que no parecía aún decidirse a dar un paso más arriesgado, pero tampoco pretendía ser solo amigos — y ya calla de una vez, sólo te digo que aquí, nadie es una inocente paloma, no estas en las calles donde hay gente oprimida por los más fuertes, aquí no, y si la hubiera, ya debe estar muerta — se fue tendiendo en la cama — es mejor que durmamos, mañana hablaré con ese capitán para iniciar el entrenamiento, Nero aún no sabemos si logrará despertarlo — un vacío se le hizo en pecho, de pensar que Nero podría terminar muerto a causa de ese despertar tan violento — por otro lado, si no lo despierta, creo que es mejor que no esté en la tercera etapa, hay gente demasiado loca y descontrolada con nen como para que esté, en dos o tres años, podría regresar, cuando haya manejado la técnica, pero aquí, ahora, podría morir, de una manera estúpida, igual como yo pude hacerlo — se puso de costado, con el cabello en la cara.  

— deberíamos hablarlo con él, de seguro no querrá dejarme aquí, pero... temo que en la tercera etapa, personas como la idiota de los ojos rojos, no sepa controlarse y terminemos con él muerto, y ninguno de los dos lo soportaría — miraba a su hermano, dormido, estaba hablando bajo, para no perturbar su sueño.

— ¿quieres dormir conmigo, Gin-senpai? — le pregunta con aquella jocosidad en su voz, era una broma, pero viniendo de ella, era imposible determinar sus intensiones. 

Tras terminar la "charla" en la que para variar estaba hablando de más, me encuentro con que Phryne demuestra sus habilidades de hacker al reiniciarme.

Ginnei:/ shutdown - r

Al darme repentinamente un beso en los labios, me quedo un momento estático, mirándola con una suave sonrisa repentina. Aunque puede haber tantas cosas que complican el estar juntos, eso no quita que desee a la muchacha, así que hacer eso básicamente causa que me deje un poco alelado (vamos, más bobo de lo que habitualmente me pueda considerar con esa cabeza prodigiosa que ella tiene.

Asiento ante todas sus palabras, quizás no estoy 100% de acuerdo con algunas (que considere que soy mejor que ella... ya sabe que no lo creo así), pero tampoco puedo replicar claramente salvo a una cosa.

- Sí... no creo que se vaya sin ti. -respondo ante sus palabras, puesto que yo tampoco sería capaz, tuviese que enfrentarme a lo que tuviese que enfrentarme.

La última parte podía o no ser una broma, pero ni siquiera lo consideré claramente (o quizás lo hice muy rápido antes de asentir). A fin de cuentas, aunque nunca hubiésemos llegado "más allá", tampoco sería la primera vez que estamos juntos en la cama... Así que me acuesto a su lado y la abrazo con mi brazo derecho, usando el otro como almohada. Hay algo en el calor y la piel de Phryne que me calma y me atrae... quizás como la paz que se que nunca voy a alcanzar.

Solo espero que no sea igual de imposible... Pienso justo antes de besarle el pelo y decirle:

- Intenta descansar... Mañana resolveremos cosas. -replico manteniéndola rodeada con afecto.

Por ahora, sólo quiero estar aquí junto a ella.

Si Phryne era consciente o no del efecto que producía en Ginne era un misterio, aunque quizás se debía más al hecho que le funcionaba y su amigo por fin se callaba, pero otro lado, Phry era demasiado reservada con las muestras de afecto o cariño, y no se hacía lógico que un beso en los labios fuera sólo por un fin funcional y no por una intensión más profunda. Era imposible saberlo, más ahora que se acomodaba en el brazo de Gin, con sus ojos cerrados y siendo abrazada por el joven.

Se calmó, su respiración se adelgazó ante el cansancio, y si bien había dormido suficiente y no debería tener sueño, seguía cansada, solo deseaba que ahora que iba a volver a dormir, no fuera con pesadillas, como generalmente le sucedía, pero estaría Gin ahí, y su hermano, que roncaba más allá. ¿Se enojaría si los viera dormir juntos?, no estaba segura y aunque le molestara, a ella le era indiferente su molestia. 

— eres un creído... era solo una broma el dormir juntos, pero ya que estas aquí, quédate, hace frío — se ríe, y se mueve para besar su mejilla y volver a acomodarse sobre su pecho. Volvió a quedar callada, con los ojos a medio cerrar, estaba cansada, pero que él mencionara que resolverían muchas cosas, la puso inquieta lo que le espantó el sueño en esos instantes — ¿resolveremos?... debo aprender a usar este poder — levantó su mano y comenzó a verla — háblame sobre sus principios, sé que recibiste las primeras instrucciones — se volvió a sentar en la cama, esa energía parecía estar descontrolada dentro de ella, y por lo mismo, era débil, casi inservible.