Ashlyn y Haiayel aparecieron cuando estaba examinando el portón principal. Una vez dio con lo que buscaba, asió el aldabón y lo golpeó con fuerza contra la puerta para hacer notar su presencia. Alerta esperó respuesta o una invitación para entrar.
Me congratula que el grupo con el que hayamos decidido ir cuente con un caballero, un monje y un extraño cazador, pero esa mirada lupina... esa no estoy contento de que nos acompañe.
-¿Habéis conseguido algo? - Pregunto de forma directa cuando nos juntamos todos, no pienso andarme con rodeos.
- Hace apenas un momento que llegamos, si hubiéramos sabido que veníais os hubiéramos esperado - señaló Igor en respuesta a la pregunta del iluminado. - Acabo de llamar a la puerta- añadió completando la información.
Ashlyn se dejó sonreir por un momento, mejor acompañados que solos... Y así se lo hizo saber a los otros en baja voz...
Bien hallados, compañeros, disculpad nuestra demora...
Pensaba escuchar y esperar en esta primera decisión... el explorador seguía siendo un misterio para ella y no sabía como tratar con él.
-No tiene importancia, apenas si habíamos llegado. Estábamos pensando qué hacer en este instante. Ibamos a llamar a la puerta principal para ver si nos recibían. Voy yo..
Avanzo unos cuantos pasos hasta la puerta y busco con la mirada algún mecanismo de llamada. Al no encontrarlo grito con todas mis fuerzas.
-¿HOLA? ¿HAY ALGUIEN AHI?
Tras la llamada de Igor y el último de los gritos de Leo de Stelion, la puerta pareció abrirse. Un chirrido inundó la estancia a la que se daba paso y las voces de vuestro compañero aún se oían retumbar entre las paredes de su interior. La puerta terminó de abrirse sola, sin duda el propio Castillo os estaba invitando a entrar. Lo que desconocíais es si aquello era una buena señal...
Ahora, con la puerta abierta, no podéis evitar echar un vistazo a la antecámara que se ha abierto ante vosotros, la sala está iluminada por el fuego que parpadea en las fauces de dos dragones de piedra enroscados, que forman una arcada en el extremo opuesto de la sala. Sus bocas dirigen la luz en vuestra dirección, sumiendo en la oscuridad la habitación que hay tras ellos.
Pruebas de Avistar, por favor :)
Sumido en la desconfianza, camino hacia el interior de la sala buscando con la mirada cualquier indicio de peligro.
-¿Veis algo?.-Pregunto a mis compañeros.-La verdad es que un poco de luz no iria mal.
Motivo: avistar
Tirada: 1d20
Resultado: 1(+2)=3
Me quedo unos segundos mirando al interior, no veo bien lo que hay al otro lado.
Motivo: Avistar
Tirada: 1d20
Resultado: 6(+3)=9
La puerta se abrió aunque no precisamente de la forma que él hubiera esperado. Al menos tenía la certeza de que ningún no muerto estaba acechándoles. Las palabras de Leo hicieron eco en el salón que se abría ante ellos.
Miró no obstante al interior antes de dar el primer paso, luego a sus compañeros y por último a su fiel compañero no fuera a ser que hubiera percibido algo.
*Tras ello avanzó tranquilamente al interior del castillo. - ¿Me acompañáis? - preguntó al ver que el resto parecía quedarse parado.
Motivo: Avistar
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+10)=25
Motivo: Avistar Ocaso
Tirada: 1d20
Resultado: 3
* Condicionado a si veo algo o no veo nada. Si no hay nada avanzaría.
Luz? sin problema.Digo antes de una luz brillante me rodeé y comienze a irradiar desde mi persona eliminando la oscuridad .Como ya dije antes compañeros Pellor me bendijo con ese don.
luz brillante 10' y 20' penumbra
Como sierva de Pelor sabía que no tenía dudas, pero aquel castillo y las premoniciones de la harpía bruja le hacían temer por su vida y su misión...
Viendolos a todos entrar los siguió con cautela, cuando Fisteus empezó a brillar se alejó un poco de él, le parecía excesivo la luz que emitía, sentía que eran el fácil blanco de cualquier mirada... no obstante agradecía la luz. Así que lanzó un gesto de afirmación al explorador y se adentró en la sala...
Motivo: Avistar
Tirada: 1d20
Resultado: 5(+2)=7
Te das cuenta de que las dos estatuas de dragón que hay flanqueando la entrada han movido por un solo instante los ojos. Aquellos dos dragones de piedra estaban completamente vivos y para acceder a la siguiente sala tendrías que pasar entre ellos dos. Pero de pronto...
De pronto el fuego que estaba en el interior de las fauces de los dragones se apaga. Ambas estatuas han cerrado sus bocas y comienzan a moverse. Por un segundo se estiran y tras haceros un gruñido a modo de amenaza retroceden unos pasos adentrándose en la siguiente habitación.
O bien aquellas criaturas estaban asustadas, o bien habían decidido tomar posiciones de combate en la siguiente habitación, o simplemente eran los guardianes de la sala y pretendían avisar de vuestra llegada.
¡Ojo con Igor, que no es capaz de localizar a Strahd porque es imposible saber donde está y advertirle! Por mucho poder que tenga de detección.
Igor, ajeno al gruñido de las pétreas bestias avanzó al interior. - ¡HA DEL CASTILLO!.- vociferó una vez dentro del enorme salón tras ver que el movimiento de los dragones de piedra les dejaba libre el acceso. - ¡SOY IGOR OLIVERO, SÚBDITO EN ESTAS TIERRAS Y GUARDIÁN DE SUS BOSQUES. VENGO A HABLAR CON EL SEÑOR! ¿SE PUEDE? - preguntó ya en medio de la sala, mientras se giraba con los brazos abiertos y mostrando las palmas de las manos en señal de paz contemplando la estancia en toda su magnitud.
Al ver como los dragones abandonan su puesto, llevo la mano al pomo de la espada de forma instintiva y me aferro a mi escudo. No me gusta ver segun que cosas en lugares como este, pero debemos confiar en las buenas intenciones de nuestro anfitrion.
Me adelanto un poco , sin entrar en la sieguiente pieza , para iluminar más la zona y hacernos un idea un poco mas clara del lugar en el que hemos entrado.Curiosos habitantes tiene este castillo .digo dirigiendo la mirada hacia la zona por la que han desaparecido las dos estatuas.
Tal y como estoy acostumbrado, me mantengo de forma constante junto a la paladina con el escudo alzado y el arma agarrada con fuerza.
-Pelor ilumina nuestro camino, no hay nada que temer.
La paladin estaba totalmente ajena a lo que fuera que habian visto sus compañeros porque ambos habían llevado las manos a las armas, observó hacia donde los ojos de aquellos apuntaban pero nada llamó su atención... Decid de que hablais Fisteus, quien mora esta fortaleza????
No se mas que vosotros ,yo me refería a esas dos estatuas que de repente se han puesto a caminar.Respondo con la vista todavía clavada en la oscuridad.Pero visto lo visto debemos de esperar lo inesperado.