Partida Rol por web

Knights Code [+18]

Capítulo 5: El Dolor del Caballero

Cargando editor
05/10/2021, 21:56
Faith Edrielle

Con todo dicho y expresado, ya tan solo hacía falta saber cual era el plan de Samael, que tampoco tardó demasiado en revelarlo. Mirandolo con cierta inquietud que pasó levemente, asentí con algo más de tranquilidad - Parece mucho trabajo para ti pero... Si no podemos serte de ayuda, estará bien - y por supuesto confirmé ante aquello y pues a la pregunta que hacía mi hermano - Así supongo que... podemos disfrutar un poco más de nuestro hogar ¿no? - intentando así sonreirle de medio lado.

Y bien era mejor intentar disfrutar, pues en cuanto se fue Samael suspiré alicaida. No sabía porque todo aquello me olía extremadamente mal. Aún así miré a Muramasa y mi hermano cuando planteó este último la posibilidad de que hacer - Supongo que... Hablar con nuestras hermanas... y con mama... No creo poder perdonarla... Aún no... Pero tampoco fue correcto lo que hice. - Por supuesto volví a suspirar, aunque esta vez era por aquella amargura que supondría hablar de forma seria con nuestra madre... Seguía sin saber como mirarla, pero por algún lado habría que empezar

-¿Tu que prefieres Muramasa?

Notas de juego

No se me ocurre que más poner

Cargando editor
15/10/2021, 04:20
Glaius

 Tu risa no provocaría ninguna reacción en el nigromante, quién ya parecía preparado para una reacción como esa, aunque realmente no era muy expresivo en general.

 -Sabía que podía contar contigo... -concluyó, desviando la mirada hacia otra parte. -. Se que eres una de las mayores amenazas para el linaje Aztora, y sabes que soy una de las mayores amenazas para cumplir tu objetivo, pero más allá de eso somos los únicos dispuestos a hacer todo a nuestro alcance por un objetivo... -tras guardar silencio durante unos segundos, proseguiría. -. El código de los caballeros está lleno de muchas limitaciones: leyes, honor, ética... Si me fui del castillo una vez no fue por cuidar su imagen, sino porqué ya no podía trabajar libremente sin ser juzgado, pero ahora el reino se encuentra en una situación en la que no puede ser exigente... -entonces, su mirada rojiza se clavaría sobre ti. -. ¿Quierés tu reino? Adelante, lucha por él, y quita de en medio a todo el que se opongan... Haré la vista gorda si con eso Aztora queda fuera de juego -dichas aquellas palabras, Glaius se daría la vuelta. -. Haz lo que quieras con eso que te acabo de decir, pero ahora debemos bajar a reunirnos con el resto, hay muchas cosas que explicar...

 Sin esperar respuesta por tu parte, el hombre empezaría a caminar. Podrías estar o no de su lado, tal vez podrías aprovecharte de su propuesta y luego traicionarle para castigarle por todos los problemas que te había dado, pero tomases la decisión que tomases realmente ahora no tenías muchas opciones más allá de seguirle, pues ni siquiera tenías la remota idea de donde podía estar escondida la princesa como para irla a buscar, y por más que tuvieses seguridad de que tendrías tu trono algo en tu interior te decía que no era buena idea ir ahora a reclamarlo con Aztora jugando en el castillo, por lo que más pronto que tarde acabarías caminando detrás del nigromante...

Cargando editor
15/10/2021, 05:44
Director

-Bueno, oficialmente no tengo ningún titulo que me haga autoridad de la frontera, pero estoy trabajando en recuperar uno que me de autoridad en todo el reino -declaró sin corte alguno, con un tono de seguridad y honestidad. -. Verás, esté idiota -levantó el cuerpo inconsciente del sujeto sujetándolo del cabello. -. Era un "noble" que no fue capaz de defender sus tierras: le di amablemente la opción de abandona el territorio para no seguir manchando el nombre de los dragones, pero veo que no me hizo caso...

-¿Defender sus tierras... de quién? -preguntó Arthas, en una mezcla de curiosidad y temor por la respuesta que podría recibir.

-Irónicamente, de mi -respondió el rubio, con una sonrisa de orgullo. -. Verán, han pasado muchas cosas desde la última vez que pisé estas tierras, y no hay tiempo que perder cuando se trata de devolver a los dragones su antigua gloria. No hay lugar para los débiles aquí, eso es algo que me he esforzado en dejar claro durante los días que llevo despierto -explicó. -. Al principio muchos se negaban a escuchar, pero ahora no veo a nadie quejándose... -añadió, mirando a su alrededor donde, efectivamente, no habían más que espectadores en silencio, regresando entonces su atención a ti. -. ¿No es mágnifico? Primero los nobles tontos, luego la realeza inmerecedora de un trono, ¡ha, ha, ha! -si bien pudiste imaginárlo riendo cual villano sacado de las profundidades de la oscuridad, su risa fue más bien de gracia y alegría, como quién acababa de contar un chiste, algo de lo que tal vez él mismo se percataría pues pronto se llevaría la mano libre al rostro mientras su sonrisa se iba borrando. -. Tsk... Ya empieza a ser desagradable está mierda... -comentó por lo bajo, con un tono más serio antes de soltar el cuerpo inconsciente del noble y apartarse la mano de la cara, observando entonces al príncipe encapuchado durante unos segundos antes de volver a verte a ti. -. Te conozco, eres la Cromwell al servicio del reino humano... Debo admitir que fue entretenido despertar y enfrentarme a un rival tan interesante, pero no pienses que tendrás las misma posibilidades... -en ese momento, estiraría un poco uno de sus brazos, trayéndote recuerdos del dragón que atacó al castillo y el ser que salió de él tras su derrota. -. Dudo que estés aquí de paseo: o vienes por mi, o huyes de un problema aún mayor, y dado que no me has atacado en todo lo que llevo hablando... -su mirada se dirigiría momentáneamente al príncipe. -. No estás en condiciones de pelea libremente... -soltando un suspiro de decepción, miraría hacia otra parte. -. Vengan conmigo: les daré un lugar donde quedarse, buenas comida y, principalmente, no los mataré. A cambio, espero que puedan contarme que es lo que trajo a una de las mejores guerreras del reino humano al territorio de los gigantes: quiero estar preparado...

Cargando editor
15/10/2021, 23:33
Jonathan Santa

 -Bueno, y un poco de la ciudad también... -comentó por lo bajo cuando mencionaste lo de haber destruido el castillo, desviando la mirada incomodamente dándose cuenta de que tal vez no era el mejor momento para añadir detalles. -. Desconozco exactamente como funciona la espada, pero escuché un vago rumor que dice que por cada rey, la espada selecciona un portador. Zedron sirvió como portador desde Aztora, por lo que con él muerto no seria extraño que, si bien seguía siendo el dueño de la espada, está ya no le protegiese: debía pasarla tarde o temprano a un nuevo protector de la corona... -un tanto pensativo, se llevaría una mano a la barbilla. -. Aunque es raro que la hayas despertado ahora: ¿no tendría sentido que fuese ANTES de la muerte del rey? Si no hay rey, ¿significa que fuiste seleccionada como protectora de uno de los príncipes, incluso antes de que tomasen el trono? -en ese punto parecía estar sacando teorías por no quedarse callado, pero no es como si alguno tuviese alguna manera de confirmar nada.

  Si bien se esperaba alguna reacción por tu parte, aquella pregunta ante el hecho de tenerte vigilada provocó que el chico agachase la cabeza, apenado.

 -Era muy obvio... -aceptó.

 Por su parte, el chico tampoco hablaría de ustedes a Marshall, el cual no indagaría más antes de centrarse en lo importante.

 -De momento no puedes ver a la princesa, por su propia seguridad, pero puedes confiar en mi al decir que está en buenas manos -aseguró el mayordomo. -. Y estamos en la base principal de Jonathan: la taberna cerrará sus puertas a los clientes temporalmente, y en general todos los bajos fondos están con la guardia alta para proteger este lugar. Básicamente toda la ciudad está al tanto de que algo sucedió en el castillo, y todos aguardan a ver que sucede ahora...

  Una vez el mayordomo se dispuso a caminar fuera de la habitación, Jonathan te tendió una mano por si necesitabas ayuda para levantarte de la cama, más en cualquier caso empezaría a caminar luego detrás del mayordomo, siendo que tu también lo acabarías haciendo: no es que tuvieses más opciones...

Notas de juego

 

Cargando editor
17/10/2021, 21:03
Director

 Los pasillos de madera conectarían con unas escaleras en forma de caracol que llevaban a la platan baja de la estructura donde se encontraban. Una sala común que no podía recordar más al interior de una taberna es lo que les esperaría allí, con una barra a un lado tras la cual se exhibían distintos licores de bajo coste, varias mesas a las que no les vendría mal un descanso, y conjuntos de cajas y barriles en las esquinas. Las ventanas se encontraban cubiertas por cortinas negras, y las puertas eran cuidadas por dos hombres de complexión media que usaban ropajes de mala calidad.

 Glaius desendería de las escaleras siendo acompañado por Baeric para encontrarse a varias personas presentes en el lugar, varias de ellas que no eran más que habitantes de los bajos fondos de la ciudad, pero habían otras caras que valían la pena destacar.

     

 En una mesa estaba la buitre mercantil, acompañada por un hombre joven de cuerpo delgado y cabello recogido en una coleta, con aquel hombre de avanzada edad parado junto a ambos: Marshall. El jefe de mayordomos aún llevaba su uniforme, así como varios otros mayordomos que atendían a otras personas presentes, ya fuese llevándoles comida o atendiendo las heridas que pudiesen tener, aunque para ese punto básicamente todos ya estaban tratados, como era el caso de Cytla, que se podía dar el lujo de comer.

 

 Ambos hombres llegarían desde la segunda planta, siendo Glaius quién caminaría directamente a la mesa donde se encontrab la pelirroja, en la cual aún quedaba bastante comida para el grupo.

 -Toma asiento, Baeric, en cuanto más rápido expliqué lo que sucede, más rápido podremos pensar en algo -explicó el nigromante.

Cargando editor
17/10/2021, 21:13
Samael

 -Exacto -respondió el hada a la pregunta de Fío, antes de asentir también a Faith. -. Irónicamente, la clave del hechizo es la anti-magia, por lo que ustedes no podrían hacer nada: y en todo caso, lo mejor es que estén en optimas condiciones para el momento de hacer todo -añadió, dedicándoles una última sonrisa de confianza antes de retirarse.

 Habían quedado solos con el samurai, preguntándose que hacer para matar el tiempo hasta el momento de traer de vuelta a Lily, ante lo cual Muramasa opinaría luego de que Faith le preguntase.

 -No creo que deban hablar con la reina hada ahora: ella sabía lo que hizo, y necesitará tiempo para procesar que finalmente lo sepan, aunque si quieres aclarar las cosas igual puedes escribirle una carta... Por otro lado, hablar con las demás hadas no es mala idea: después de todo, todas participarán en la resurección de su hermana... -opinó Muramasa, mirando su calabaza. -. Ya de paso, veré si venden en alguna parte algo para recargar...

  De ese momento, regresarían al palacio de las hadas donde, convenientemente, estaban reunidas todas sus hermanas en la entrada.

 -Oh, ¡Faith, Fío! -les saludó Edén con un energético gesto de mano. -. Qué bueno que estén de vuelta. Con todo el asunto, pensamos en intentar distraernos y aprovechar que estamos reunidos. ¿Qué tal si damos un paseo por la ciudad hasta que caiga la noche? -comentó con ese carisma natural que le caracterizaba, casi como si ignorase completamente todo lo sucedido.

Cargando editor
18/10/2021, 00:47
Baeric Griffith

Al llegar a aquella Sala Baeric no pudo evitar fruncir el ceño y apretar los puños. Maravilloso... Otra reunión sin sentido y encima con los sospechosos habituales. 

El caballero halcón que de normal tenía un aspecto radiante y lleno de vida parecía casi abatido, con un rostro cargado de molestia y incomodidad, incluso sus ojos de normal vivos y atentos parecían fríos como el hielo.

Aquel no era el sitio donde quería estar.  A pesar de todo, tras escuchar a Glaius decirle que tomara asiento, el caballero cumplió, dejándose caer pesadamente en una silla, ni siquiera centró la vista en la comida, su mirada seguía clavada en el nigromante. 

-¿A que esperas, una invitación?, habla de una vez nigromante. -Gruño, deseaba terminar con aquella farsa de una maldita vez. 

Cargando editor
19/10/2021, 00:35
Cytla Calatia

Cuando escuché lo de que también destruí parte de la ciudad... desde luego contenta no me puse, y tal vez si más arrepentida... pero sería mejor no quedarse pensando en eso ahora. Sobre las palabras de Jonathan sobre la Rompetormentas y sus teorías, tampoco es que yo pudiera añadir algo a lo que dijo él... simplemente por una razón -Estás tan perdido como yo...- le dije suspirando levemente... pues seguramente ninguno de los dos sabía bien como funciona la espada por muchos que ambos nos beneficiásemos normalmente de los rumores que tuviéramos -No tengo ni idea... pero supongo que... mientras no me haya podido controlar el que lo intentó, me conformo...- terminé diciendo al final.

Sobre su respuesta a mi pregunta... -Si, bastante...- le comenté con respecto a que se veía bastante obvio. En fin... luego de eso, miré a Marshall... no pudiendo evitar sentirme un poco incómoda de no poder visitar a la princesa por su propia seguridad... pero supongo que tendría que hacerlo, asintiendo entonces. Al decirme que estábamos en la taberna de Jonathan... miré a mi alrededor y al cuarto -Hmmm... hiciste reformas, ¿no?- pregunté simplemente a Jon por el hecho de no haber reconocido el lugar de primeras... Pero bueno, eso no era importante. Miré durante unos segundos la mano de Jon para ayudarme a levantarme... por lo que al final se la tomé, cogiendo mis cosas, entre ellas Rompetormentas... y con eso seguimos a Marshall -Después de la charla quiero ver a mi madre y a Lilith...- le dije al final a Jon, por si ella sabía donde estaban y ya luego de lo que sea que tengamos que hablar pueda verlas.

Cargando editor
19/10/2021, 02:48
Cytla Calatia

Andaba concentrada en comer, obviamente después de todo aquello andaba bastante hambrienta y sentía que mi cuerpo necesitaba esa energía... cuando entonces, pude ver que Glaius llegaba al fin, acompañado de Baeric. No pude evitar mirarlo con cierta suspicacia -Este si es el Baeric de verdad, ¿no?- pregunté... aunque vamos, sería evidente que este tendría que ser el de verdad... pero por si acaso. Además que ya simplemente de vernos parecía con ganas de pegarnos y mandarnos a la horca por traiciones inventadas.

Al sentarse Baeric... -Quizás espera a que te calmes y dejes de mirarnos a todos como si fueramos tus enemigos, idiota... Joder, que recibimiento más cálido el tuyo... y si, es ironía- le dije con seriedad al caballero halcón con molestia por su actitud tan borde. Luego de eso, miré al nigromante con seriedad, pero sin gruñidos ni nada, esperando que respondiese y empezara rápidamente con el resumen... pues sin duda era evidente que todos teníamos muchas dudas de lo sucedido.

Cargando editor
19/10/2021, 06:10
Alanís Cromwell
Sólo para el director

Alanís sostuvo la mirada en silencio. No estar en condiciones de pelear libremente era exactamente lo que definía ahora mismo su situación. Realmente no tenía demasiadas opciones en ese momento, más allá de presionar al príncipe a continuar sin descanso ni comida, lo que inevitablemene lo llevaría a colapsar.

Pudo verse en su mirada como evaluaba sus opciones. Era muy posible que las noticias aún no hubiesen llegado ahí, o si. También había chance de que hubiese gente que pudiera saltar a la oportunidad, si hacían aloroto y se relevaba quien estaba presente.

-...muy bien. -la respuesta vino con un tono frio y hostil, debajo de la formalidad usual. No tener una opción segura a la que recurrir era algo que le llenaba de tensión. Pero tanto continuar sin descanso y tratar de ignorar a esta persona como el acompañarle, se le hacían malas opciones. Solo le quedaba tratar de discernir la menos dañina, y estar preparada para resolver emergencias.

Mientras Arthas esté bien, el reino está ganando, se repitió.

Cargando editor
24/10/2021, 21:26
Fío Edrielle

Oh… Vale… Entonces, dejaremos que te ocupes tú, Samael… —dijo Fío con tono algo decaído. Le habría gustado poder hacer más. Pero parecía que solo podía dejárselo todo a su hermano y esperar.

Cuando Faith mencionó la posibilidad de ir a hablar con su madre, Fío tragó saliva, y sus alas se agacharon ligeramente. Sabía el estado en que se encontraba la reina.

Es… mejor que no hables con ella ahora. Después de lo de antes, se quedó muy… afectada —susurró con voz trémula, apartando la mirada.

¿Todas participarán? —Fío torció un poco las cejas—. No sabía eso… Espero que, si sale algo mal, no les pase nada malo… —Aleteó las alas de forma rápida y fugaz, casi imperceptible—. Bueno… sí. Creo que sería buena idea ir a hablar con ellas. Lo mejor es que nos relajemos un poco antes de mañana…

Una vez de vuelta en el palacio, fueron recibidas por todas sus hermanas. Edén les saludó, alegre como siempre, como si nada hubiese pasado.

Eh… Sí, creo que estaría bien dar un paseo. Necesitamos un momento de tranquilidad antes de lo de… mañana. —Agitó las alas, levitando de forma irregular a pocos centímetros del suelo. Dirigió su mirada a Faith—. ¿Te parece bien, hermana?

Cargando editor
26/10/2021, 02:43
Jonathan Santa

 -Un poco, ya sabes, para que los clientes no se quejasen de los agujeros en las paredes -respondió el chico con cierto tono bromista antes de ayudarte a levantar, y finalmente ponerse en marcha a la salida, escuchando también tu petición. -. Seguramente puedas verlas pronto -aseguró.

Cargando editor
26/10/2021, 02:53
Director

  La duda soltada por Cytla sería respondida por el nigromante con un asentimiento de cabeza, quién no reaccionaría en lo más mínimo a las demandas hechas por el caballero grifo.

 -Si le pides algo como eso es porque claramente no has logrado deducir nada... -cortó el nigromante al comentario irónico de Cytla, tomando asiento en la mesa mientras el resto de presentes guardaban completo silencio. -. Empezaré desde el inicio para que puedan ir atando piezas: cuando acabe podrán golpear a quién quieran. -añadió, pasando su mirada por los de la mesa durante unos últimos segundos de silencio antes de empezar a explicar lo sucedido.

 -Antes de que existiese Danhir, y todo lo demás, solo existía un taller en medio de la nada, un sitio donde alguien excéntrico y con sed de emociones podía hacer experimentos a su antojo. Esa persona creó nuestro reino, nuestro mundo, y todos los demás que hay más allá del cielo. El nombre de este individuo era Aztora, y su único deseo era ser testigo de una "gran historia" -hizo una momentánea pausa para asegurarse de que todos le estaban siguiendo, aunque era claro que muchos no lo habían logrado. -. "Dios" creó todas las cosas, y les dio libertad para seguir desarrollando la historia del mundo sin su intervención, pero con el paso del tiempo su vida como espectador se volvió monótona y aburrida: fue así como decidió empezar a intervenir en la vida de los mortales con sus "tratos", ofreciéndoles cosas que deseaban a cambio de pagos abstractos que solo él podía entender, y que para cuando las personas que estrechaban su mano se daban cuenta ya era demasiado tarde -en ese momento, la mirada de Glaius se desvió de manera obvia hacia el caballero grifo, Baeric -. Baeric fue uno de esos ingenuos, y yo en su momento también lo fui -reveló, regresando su atención a la mesa en general, como si aquel dato realmente no significase nada. -. Su mentalidad es retorcida e incompresible para nosotros, por lo que no hay motivo lógico que podamos encontrar para explicar su deseo de finalmente acabar con todo. Tal vez sea ponernos a prueba, tal vez sea solo porque le parecemos débiles: el caso es que ha tomado el castillo, y eso solo significa que tiene planeado tomar todo Danhir. Ha corrompido a campesinos, caballeros, nobles... Ninguna parte del reino es segura a excepción de este sector: lo protegí contra su corrupción, pero con tanta gente refugiándose no podremos quedarnos mucho.

 -Espera, espera, espera -le paró en seco Jonathan, el chico junto a Cytla, extendiendo sus manos hacia él con las palmas abiertas. -. No entiendo: ¿Aztora no es el Rey Supremo?

 -Una mera coincidencia: con tanta gente que vive y ha vivido en Danhir no es raro que los nombres se repitan -aseguró. -. Jonathan también es un nombre común, no como el apellido Santa...

  En esos momentos Jonathan alzaría una ceja, mientras Marshall permanecía pensativo y observador en completo silencio, siendo que el nigromante proseguiría.

 -Entre los planes de Aztora estaba el alejar a la princesa del castillo y así apartar a toda la familia real del trono. Mientras Baeric se encargaba de proteger a Artanis, Alanís hizo lo mismo con Arthas: tras explicarle vagamente la situación crítica en la que estábamos, partió con él a su reino natal. Para este momento ya debieron haber cruzado la frontera -aseguró. -. Con la reina indispuesta, y seguramente ahora capturada por él, solo quedaba Artanis en medio, y fue por eso que intentó apartarla, pero Baeric hizo un buen trabajo protegiéndola: las intenciones de Aztora eran dar el trono a un falso Baeric, pero Cytla acabó con él y... Supongo que intentó corromperla por la fuerza a ella, sin un trato de por medio, lo que acabó despertando la rompetormentas... -señaló entonces la espada bastarda que la pelirroja llevaba enfundada. -. Solo podría describir el poder de Aztora como algo divino, algo que le permite manejar incluso el caos a voluntad, pero la rompetormentas es capaz de enfrentar ese poder debido a su naturaleza: fue forjada con materiales únicos que ni los forjadores pudieron identificar, pero que todos aseguraron eran los indicados para hacer un arma capaz de matar a un Dios... -nuevamente, haría una pausa para que nadie se perdiese. -. El problema es que el arma solo responde a ciertas personas, personas que darían su vida ciegamente por un miembro de la familia real de nuestro reino... Cytla despertó su poder, y eso la hace automáticamente capaz de tomar el rango de Gran Caballero Real, pero en esta situación los rangos ya no importan...

 -Conque Gran Caballero Real... -en ese momento, Jonathan se mostró verdaderamente sorprendido, pero rápidamente su expresión cambio por una sonrisa de orgullo que dedicaría a la pelirroja. -. Siempre supe que te volverías alguien importante...

 -Aún me queda algo por explicar... -intervino el nigromante. -. Con el ataque de la rompetormentas la princesa Artanis quedó en mal estado: se recuperará, pero necesitará algo de tiempo, pero eso no significa que no tengamos a alguien adecuado para el trono... Realmente el Rey Artorias no fue tan bueno como su padre: definitivamente no era un villano, pero tenía sus... crueldades... Y una de ellas la cometió desde muy joven, cuando su padre aún seguía vivo -reveló. -. Cuando aún no tenía compromiso alguno con la actual reina, el en ese entonces príncipe era muy... aventurero, y de una de esas aventuras salió un embarazo -como si todo lo que había dicho hasta ahora no tuviese suficiente peso, Glaius demostraría aún tener mucho guardado... -. Un príncipe no podía tener una relación seria con una prostituta, mucho menos cuando se estaban preparando los tratados de paz y todo apuntaba a que su boda sería arreglada. Fue por eso que, desesperado, me ordenó que acabase con ella y con cualquiera que supiese... Por supuesto, informé a Aztora, el rey, antes de hacer nada... Se habló con la mujer para que no dijese nunca quién era el padre, y se le dejó dar a luz al niño y criarlo durante un par de años: luego dirigí su asesinato, el de ella y de cualquier otro involucrado a excepción del niño. El rey tenía una misión especial para mí respecto a él: debía protegerlo, tanto de su futuro como de su pasado, lo que incluía hacer desaparecer a cualquiera que investigase de más... Y debo admitir que Cytla me lo puso complicado -concluyó.

 En ese momento, los ojos de Jonathan se abrieron como platos. Parecía que él ya había conectado las partes que faltaban en su cabeza, y por la manera en la que Marshall cruzaba los brazos también lo había hecho, o ya lo sabía desde antes...

 -Mi rey dijo que ese niño era importante, y que solo debería revelar su identidad cuando llegase el momento adecuado, y todo apunta a que es ahora -en ese momento, Glaius se puso de pie, colocando una mano sobre la mesa mientras miraba a Jonathan.

Aztora no intentó corromper a Cytla solo por destruir a la copia de Baeric, lo hizo por qué sabía que estaba destinada a cargar la rompetormentas...

La rompetormentas no la escogió por salvar a la princesa, o estar dispuesta a salvar a los príncipes o la reina, lo hizo porque está dispuesta a dar la vida por Jonathan.

¡Arthas nunca fue el heredero directo al trono, siempre lo fuiste tú, Jonathan!

 Si bien para muchos aquello podría haber congelado el tiempo debido a la fuerza de la noticia, y cualquiera podría alegrarse de saber que no era un pobre de los bajos fondos, sino un futuro rey, la expresión de Jonathan se venía tiñendo de rabia desde que el nigromante empezó a hablar de silenciar gente, y no fue hasta ahora que saltó sobre la mesa para acercarse a Glaius y propinarle un brutal puñetazo en el rostro que lanzó al hombre hacia atrás, tirándole en el suelo.

 -¡Maldito! -le gritaba, saltando entonces sobre él para poder continuar golpeándole. -. ¡Fuiste tú todo este tiempo! ¡Tú...! ¡Tú...! ¡Me obligaste a hacerle daño a Cytla!

Notas de juego

¡TRAGAD LORE!

Cargando editor
26/10/2021, 03:57
Director

 -Bien pensado -asintió el rubio con cierta sonrisa de satisfacción, empezando a caminar hacia la salida del establecimiento. -. Espero que puedan seguirme el paso...

  Una vez afuera, las piernas de Yurrax empezarían a desprender un aura oscura, así como una serie de escamas negras empezarían a subir por su torso hasta cubrir poco más de su estómago. Luego de flexionar un poco las piernas, el suelo se agrietaría motivo de la fuerza que ejerció contra este al tomar impulso, y emprendió su viaje con un gran salto que en cuestión de segundos lo sacó de la ciudad, volando en forma humana hacia una montaña a unos quince minutos a caballo.

 -¿C-Crees que podamos confiar en él...? -preguntó Arthas, quién si bien no parecía tenerle confianza a aquel hombre, sí que confiaría en tu decisión, y es que no tenías dudas de que tendrías que seguirle el juego si querías evitar que fuese a por ti y el príncipe, algo que por lo que acababa de demostrar no le sería muy complicado...

 Harían el último recorrido a caballo hacia la montaña, siendo la subida la parte más difícil hasta que finalmente llegaron a una cueva a unos treinta metros de altura. De su interior salía una luz proveniente de una fogata, sobre la cual se asaban varias piezas gruesas de carne atravesadas por huesos: junto a esta, Yurrax sentado sobre una piedra, similares a otras que había en el lugar y que podían mover para acomodarse.

 -Pueden servirse lo que quieran -les invitó, sin ofrecer platos ni tenedores, haciendo una demostración él mismo al tomar uno de los trozos de carne al tomarla del hueso para luego llevársela a la boca y arrancar un pedazo, masticando y tragando a pesar de lo caliente que podía estar en ese momento. -. Si son esos de "no como carne", también tengo allí un saco de manzanas, aunque creo que les vendrían mejor a tu caballo -añadió, señalando en una esquina un saco que, efectivamente, estaba lleno de manzanas, algunas zanahorias y papas. -. ¿Y bien? Puedes comenzar cuando quieras.

  Yurrax parecía básicamente ignorar al príncipe, quién esperaría tu aprobación para intentar tomar un trozo de carne o siquiera sentarse, siendo que ni siquiera antes de perder la memoria estaría preparado para una situación como esa...

Cargando editor
26/10/2021, 11:11
Baeric Griffith

Baeric soltó un gruñido y dedicó a Cytla una mirada que parecía decir “no te pases que no estoy de humor para tonterías”. Pero aquel tema quedó atrás, ya que finalmente el nigromante comenzó a hablar y a explicar semejante historia y verborrea.

Baeric apenas prestaba atención, se mantenía con la mirada fija en la mesa, cavilando. Posiblemente pensaba en la princesa, el rey, Aztora…¿en que otras cosas si no?. Pero cuando el nigromante comenzó a hablar de sus tratos, de un falso Baeric, de Cytla, del rompetormentas…todo era tan bizarro y extraño…apenas entendía la mitad de las cosas de las que hablaban o de lo que había ocurrido.

Y entonces soltaron una bomba, Arthas no era el hijo del rey, el legitimo hijo era ese tal Jonathan que se encontraba frente a ellos. Baeric no pudo evitar tensarse y apretó los dientes con fuerza, engañado nuevamente, siempre era engañado, como si fuera un peón en todos los juegos de dioses, hechiceros o reyes.

Cuando el nigromante cayó, Baeric tenía ganas de acercarse, de patearle el rostro…pero se limitó a ponerse de pie .-Ya he escuchado todo lo que teníais que decir. No pienso participar en idioteces y menos para ayudar a bastardos, vendedores de humo y traidores.-El caballero halcón escupió sobre la mesa y se dirigió a Marshall.

-¿Dónde está la salida?

Cargando editor
30/10/2021, 22:18
Faith Edrielle

-Está bien... Ten cuidado Samael... - No las tenía todas conmigo, pero si solo podiamos dejar que el fuera el que preparara todo para traer a Lily de vuelta... Deberiamos fiarnos de su palabra por ahora. Aún así tenía mi espinita clavada sobre si confiar en el del todo o no.

Viendo pues que tanto uno como otro opinaban de forma negativa ante la idea de aclarar las cosas con mi madre, bajé las alas, como quien suele decir, alicaida, mostrando que era un poco de bajón lo que sentía al ver que no podría hacer aquello. Obviamente ella también estaría afectada pero... No me comporté exactamente bien y quería redimirme... Pero supongo que ese momento tardará en llegar

-Pues... supongo que iremos a ver como están nuestras hermanas... - No quedaba otra opción. Sea como fuere, nos separariamos del espadachin quien se alejaría a buscar... alcohol lo más probable. Durante el trayecto me mantendría un poco más callada de lo habitual mirando al suelo, pero en algún momento del camino de vuelta detendría a Fio por un momento - Se que no pero... ¿Que pasaría si saliera mal? Algo dentro de mi dice que algo va a salir mal... No sé si Samael, lo que está preparando o... Lo que ocurra al revivir a Lily... Pero... No quiero que ocurra nada malo - Buscaba realmente protección, o más bien apoyo de las palabras de mi hermanito que dieran lugar a que pudiera confiar más en la situación, no obstante deberían venir de el...

Ya con las demás, me quedé unos pasos atrás mientras Fio aportaba su opinión antes de preguntarme. Por supuesto asentí con la cabeza pero cambié de tema muy drastricamente - Yo... Siento haberme comportado así durante la reunión... Simplemente no pude aguantarlo y... exploté. No debí haberlo hecho, lo siento hermanas - Aunque estuvieran más que justificadas mis acciones, había miles de formas de hacerlo y no pensaba que la mia fuera la correcta.

Cargando editor
31/10/2021, 17:52
Alanís Cromwell
Sólo para el director

Alanis tomó un momento para elegir dos piezas de un costado, no las más cercanas a ellos, y probo primero una por su cuenta. Al menos estaba bien condimentado y honestamente era de su agrado tremendamente, pero tomo un momento examinando el gusto y si sentía algo chistoso, antes de dar una pieza más pequeña al príncipe.

-Debería estar más fría, pero si no solo sostenía lejos del fuego un poco y debería perder temperatura rápidamente.

Lamentaba que no fuera nada más refinado, pero ciertamente era llenador. Tras esto, se dedicó a dar mordiscos con naturalidad y apetito. De hecho, había algo especial en tanta carne hecha de forma rústica, y sin necesitar pedir en específico una pieza grande como en el castillo. 

Aún así, preferiría estar de vuelta donde estaban antes del problema de hoy.

-Antes de eso...te ves diferente de esa vez. ¿Cual es tu problema con el reino?

Cargando editor
31/10/2021, 18:57
Director

 -Bueno, eso fue lo que entendí: Ustedes serán las bases del hechizo, Samael el catalizador y el resto dará su poder para potenciarlo todo -resumió Muramasa respecto a que el resto de hadas elementales también participarían, acariciándose la barbilla pensativo para asegurarse de no haberse equivocado al ir procesando la información.

 Ya reunidos con el resto de hadas, Edén asentiría al comentario de Fío antes de fijarse, al igual que el resto, en la disculpa de Faith, siendo el hermano mayor quién negaría con la cabeza.

 -No tienes que disculparte de nada, a todos nos afectó lo sucedido -aseguró, colocando una mano sobre el hombro de la chica. -. Lo importante es que pronto estaremos todos juntos de nuevo, y podremos recuperar el tiempo perdido... -y con una de sus mejores sonrisas, Edén abrazó a Faith, cosa que llevo al resto de hermanas hadas a unirse para demostrar que, a pesar de todo, entendían a Faith.

 Así, intentando olvidarse momentáneamente del momento de traer de vuelta a Lily, se unieron a su grupo de hermanas hadas en un viaje por su ciudad natal, visitando viejos lugares donde solían pasarlo bien y pasándose por otros nuevos. Claramente era imposible olvidarse de lo sucedido, pero cada quién hacía su esfuerzo por no dejar que le abrumase, y así mismo apoyar al resto para que también se mantuviesen en pie.

 Practicar magia, contar un poco sobre lo que hicieron mientras no estaban en contacto, ir a comer, intentar llevar a Fío al barrio rojo... A pesar de todo, en la naturaleza de las hadas estaba el buscar la manera de dar vida a su día, por lo que incluso con tantas preocupaciones encima nada podría haber manchado aquellos buenos momentos que pasaron ahora que finalmente se habían reunido... Pero el tiempo seguía corriendo, y caída la noche no debían quedar más de un par de horas antes de que Samael fuese a buscarles, momento en el que el grupo empezaría a separarse para cada quién pasar el tiempo .

 -Tal vez quieran descansar un poco. Yo iré a los baños termales: el agua de este bosque hace milagros con el cuerpo -explicó Muramasa, quién se había reunido con ustedes poco después de la comida, siendo que tomaría un último trago de su calabaza antes de disponerse a retirarse, siendo que si no le detenían quedarían a solas finalmente.

Cargando editor
31/10/2021, 20:27
Yurrax

 Luego de verte probar la comida, y no parecer tener ninguna preocupación al respecto, el príncipe aceptó la pieza que le ofreciste y empezó a comerla lentamente, de una manera más tranquila y "elegante" en comparación a ustedes, aunque claramente apetito no le faltaba, siendo que masticaba rápido para poder llevarse otro mordisco a la boca.

 -Es complicado... Básicamente el nigromante que me trajo de vuelta no consiguió todas mis partes, así que tuvo que improvisar con las de otras personas -explicó. -. Es desagradable como sus almas se mezclan con la mía, pero no es nada de lo que deba preocuparme: el nigromante escogió a personas fuertes, pero de mentes débiles -aseguró, antes de dar otro mordisco a su trozo de carne. -. Mi problema es... La debilidad: antes los dragones éramos temidos y respetados, grandes ejércitos cayeron ante mí sin hacerme sudar, pero tan pronto como apareció alguien que fue capaz de derrotarme todos los demás se acobardaron y aceptaron una rendición camuflada como un tratado de paz... Y el reino de Aztora promueve la costumbre a la debilidad, a no enfrentar conflictos, a buscar lo mejor para todos... En el mundo real eso es imposible, siempre habrá quién quiera algo, y yo he llegado para demostrarlo -concluyó, dando otro gran mordisco a su porción de carne antes de declarar. -. Acabaré con todos los reyes débiles, y promoveré un mundo donde solo los fuertes sean dignos de gobernar.

Cargando editor
31/10/2021, 21:51
Alanís Cromwell
Sólo para el director

-Este reino sigue siendo respetado -dijo con calma- Pero que haya paz es beneficioso para todos los demás reinos. Si alguien quiere algo, puede pagarlo o negociar con ello. 

Cerró los ojos, pensativa.

-Tomar sin más por medio de violencia es algo que los animales hacen. ¿Realmente quieres que los demás reinos vuelvan a ver a los dragones como animales violentos? -abrió los ojos para observarle con atención con los párpados bajos- Si eres fuerte y quieres vivir para ti mismo, es algo que nadie puede objetar. Pero si quieres desafíos, entonces usa tu fuerza para que aquellos que no son tan fuertes puedan vivir. Te aseguro que siempre hay alguien con su propia agenda para enfrentar. Fuera de eso, quizá deberías reconsiderar tus prioridades si "hacer un punto" o "ansia de sangre" son tus motivos para llevar a cabo algo como lo que describes.