Partida Rol por web

-A la orden teniente, esos bichos ya son historia .... ESCUADRON!!!! - digo al escuchar al teniente Brown - Vamos muchachos desplegaos por el muro, nos atacan por todo el perímetro, todos arriba del muro formando una linea equilibrada. Graves, Casas moved el culo aqui arriba enseguida, el teniente se encargará de esos gusanos. Sargento vuelva a su posición, Bell si tienes a tiro a algunos de esos bichos dispara, Campbell baja hasta la posición de la derriger y da cobertura a McNealy si la necesita, O'Connor donde diablos estás? ve a tu posición al sur de Bell, infante(el que queda) apunte y dispare a los arácnidos que tenga más a tiro. El que tenga ocasión que dispare, no quiero que ninguna cucaracha se acerque al muro, ENTENDIDO!!!!

El caos y la paralizacion de sus musculos , habia desaparecido, depronto el sargento sintio de nuevo que volvia del placido mundo donde habia permanecido todo este tiempo.

Miro sus manos y se dio cuenta que estaba desarmado ,asi que corrio lo que puedo en direccion a sus armas ,

El cabo parecia haberse hecho cargo de la situacion y mientras el sargento corria por el muro , el cabo daba ordenes a sus hombres, habian eliminado a un tanker y despejado el lado sur , perfecto para poder correr hacia sus armas

En cuestión de instantes todo se había complicado enormemente. La mayoría de soldados nunca recuerdan haber tenido una consciencia muy profunda durante un combate, pues andas demasiado ocupad corriendo y disparando, pero en este caso estaban saliendo tantos problemas que era difícil evitar pensar como saldrían vivos de aquí.

Al caer había tenido suerte, prácticamente acertó el centro del patio como si el fuerte se tratase de una diana. Otros habían caído fuera del muro, en un tejado o a demasiada velocidad como para considerarse a salvo.
Al principio se había encontrado a pocos metros del pozo con el Sargento del escuadrón Fox, el cual lo ignoro deliberadamente, y el que ahora ya era menos que cadáver, el teniente Osher.

"El teniente Osher ha muerto...hay gusanos dentro del patio...se acerca una nueva oleada desde todo el perim- ¡Mierda! ¡Y ahora estamos a dos velas!"

De repente las ordenes llegan por radio despojando el cerebro de cualquier idea que no sea cumplirlas cuanto antes mejor.

-¡Estoy aquí cabo! ¡Ya llego!- Me pongo a esprintar de forma autómata cuando un dolor sordo en el pecho hace que de un traspié y me quede clavado -¡Ah! Enseguida llego.-

Antes de dar los últimos pasos y asomarme al muro necesito unas curitas, de manera que llega la hora de apañárselas con el kit médico del cuchillo. No es mucho pero, recostado en el gélido parapeto del muro puedo ponerme unos puntos a un feo tajo.
Hace tanto frio que las manos me tiemblan, la piel parece de mármol y que suturar la herida no resulta muy placentero a pesar de que sangra mucho menos de lo que esperaba.

Cuando vuelvo a ordenar el kit dentro del cuchillo me fijo por casualidad en la capsula de cianuro. Una muerte rápida siempre resulta mas solícita que ser alcanzado por la horda de bichos y agradezco que nos la incluyan como equipo básico. Me entristece saber que llegado el momento, si la flota y los refuerzos no llegan a tiempo este será mi pequeño ultimo consuelo.

Un poco más recompuesto me apresuro a llegar al este del muro para sumarme a la defensa contrarreloj, la oscuridad repentina me pone de los nervios.

-¿¡No hay nadie tratando de arreglar la luz!?-

Si los infantes creían que las cosas no podrían empeorar mas estaban equivocados, ellos sabían que un grupo de bichos obreros por mas que fueran decenas, no implicaban una amenaza letal; sin embargo, lo que ahora surgía en sus alrededores si lo era.
Varias estelas de luz surcaban los cielos rumbo al espacio, los bichos se defendían con proyectiles de plasma contra las recién llegadas fuerzas de la flota. Si lograban repeler a la flota sin duda estarían condenados a una muerte heroica pero olvidada e inservible.
Pero estos proyectiles de plasma no solo surgían como una fuerza antiorbital sino también de artillería, el ángulo de impacto de varios de estos era un claro indicio de que el fuerte estaba por ser atacado con todo el poder de fuego de los arácnidos.
Por suerte para la infantería móvil, el enemigo aun estaba ajustando su puntería y por tanto solo uno de estos proyectiles parecía que impactaría de forma segura sobre el extremo oeste del fuerte.
Mientras esto se desencadenaba, en los alrededores del fuerte los bichos obreros se apresuraban a sortear la distancia que los separaba del fuerte. Los infantes intentaban mantenerlos a raya con fuego supresivo pero el éxito era muy bajo hasta el momento. La amenaza que estos bichos representaban realmente estaba en la vulnerabilidad de los muros; si estos caían, aun cuado pudieran detener a los obreros, seria imposible a detener a guerreros o incluso a un solo tanque.
Pero no todo era malo al parecer, el capitán Tsumina había informado que tras exigir ayuda a la Sirius Beta, esta había aceptado brindar apoyo orbital con su único cañón de batalla con el que contaba capaz de bombardear los alrededores del fuerte.
El fin estaba cerca, los infantes podían sentirlo próximo, para bien o para mal, se enfrentaban ahora a momentos decisivos en la batalla; y por si aun estaban fríos, un grito desgarrador les llego desde el norte del fuerte helado, al parecer otro infante había caído.

El cielo iluminado por estelas azules, mierda atacan con artillería a la flota no tardarán en dispararnos a nosotros, sin ellos no podremos salir de aquí. Cuando las cosas se ponen un poco mejor, la flota va a darnos apoyo con sus cañones, la cosa cambia un infante cae por fuego amigo, y un grito de otro se escucha por el norte, uno de los recién llegados ha caído.

- Casas! Casas! - grito de impotencia, mientras veo su cuerpo atravesado por los dientes de ese horrible monstruo, trago saliva para mantener la compostura, no tiene salvación, he vuelto a fallar. Sin tener noticias del sargento, empiezo a gritar al resto -Graves, sal de ahí ya! corre hacia el sur para subir al muro!, O'Connor corre hacia la posición al sur de Bell.- no puedo perder a otro más, otro más no, así no ,.. el teniente se encargará de ese gusano, si no lo ha reventado ya Mcnealy, -¡Escuadrón! Centrad los disparos sobre los obreros que llegan, apuntad y disparad no quiero que ningún bicho se acerque, tendremos apoyo aéreo pero confiad en lo que vuestras moritas pueden hacer. Kilder, Campbell, Becerra encargaos de los que vienen por el noreste hacia vuestra posición, Dragonstone centrate en los que vienen de frente hasta que esté a punto la Derringer, Bell tu y el infante disparad a los que vienen por el sureste. El resto a vuestras posiciones!!
Empiezo a mirar la Derringer que al parecer se ha atascado, mientras empiezo a mirar el percutor, empiezo a decir por el comunicador -Bell, comunica con los demás escuadrones para saber cual es su estado, y con la Fox para que sepamos el estado de ese bicho nuevo que divisaron. ,
Empiezo a urgar en el arma montada, saco el pequeño estuche de herramientas, con el pequeño destornillador hago palanca y consigo hacer que la Derringer esté lista para escupir balas de nuevo. Empiezo a divisar el horizonte calculando una posición optima para el disparo de la Sirius. Bell, comunique al capitán Tsumina las coordenadas objetivo

- le Copio Gawain, Heat Despliega Fuego Pesado Sobre la Posicion del Gusano... Repito Salgan del Area de fuego del gusano -

- CT´s Posibilidades de Derribar el Cañon de Plasma del muro Oeste sin uso de la Artilleria orbital, Prioridad de Respuesta Maxima -

Nathan se siente terriblemente aliviado al escuchar las ordenes del cabo, si tuviera que enfrentarse al gusano sus posibilidades de supervivencia eran mínimas. Casas no tuvo tanta suerte. En aquel momento hubiera podido ser cualquiera de los dos, por alguna razón el gusano no ataco a Nathan y se escabullo para atacar desde el suelo al otro infante. Ya no había nada que pudieran hacer por él, pero la vida del infante Graves debía ser preservada.

- ¡A la orden! -gritó el soldado corriendo en dirección contraria al gusano para subir a la parte sur del muro. Cada segundo que gaste corriendo en vez de disparando en un bicho que se acerca al muro a matarnos, ¡no puedo perder más el tiempo!

A oscuras, me cruzo a toda prisa con los soldados del escuadrón Fox. Se les ve ocupados defendiendo su perímetro del muro cuando, durante un instante, los disparos de sus moritas iluminan los compungidos rostros ante la situación que nos vemos obligados a compartir.

Creo que todos sabemos que en cuestión de poco todo terminará para bien o para mal. Tal vez...tal vez consigamos mantener a ralla los bichos si la Sirius Beta afina la puntería y sus bombardeos de plasma no nos alcanzan de lleno.

Recuero haber leído en alguna parte que, cierto escalador famoso decía como, en situaciones extremas en las cumbres heladas avanzar proponiéndose pequeños retos de forma continua centra la mente y la aparta de la verdadera preocupación que es morir solo y congelado.

Me gustaría ver a alguien que no crea que va a morir ahora, pero ya puestos, si cuando morimos he conseguido defender el muro este añadiré algún consuelo a la desesperada caída del fuerte.

Sigo corriendo. El aire helado se me cuela en los pulmones hasta que llega a dolerme todo el cuello y el pecho parece que vaya a estallar. Resoplando como un perro jadeante, me apoyo en una mala posición de tiro en el extremo del muro, cerca de Bell.

-Ya...Ya e-...¡Ya estoy aquí Cabo!-

Templando el pulso, observo la oscura periferia del fuerte encima el parapeto este. Entre las tinieblas hay infinidad de arácnidos acortando la distancia y de mi depende que lleguen al muro los menos posibles.

-Atención todos los escuadrones, prepárense para una fuerte explosión. He minado el pozo con explosivos térmicos de alto poder, no podemos esperar mas para detonarlo, percibo un sonido tenue de pequeñas hormigas que avanzan por el túnel, pronto estarán sobre nosotros.-

-Sargento Corbec, necesito ya esas coordenadas para el bombardeo orbital, no tenemos tiempo para hacer planeaciones.-

- Capitan Tsumina transmitiendo coordenadas "BI-104" -

Me apoyo en el muro aun dolorido por las quemaduras y la vergüenza.

El cadáver de mi compañero reposa cerca mio reordándome lo que me podría suceder, y decido apostar por una jugada un poco arriesgada...

Lio la cincha de mi fusil en mi brazo, y me concentro en la mirilla mirando el horizonte, iba a pasar un rato apuntando a todos los bichos que se movían en la lejanía...

Qué bien, todo a mi alrededor moría, y solo permanecía atacando un gusano que se tragaba a otro de nosotros, y unos bichos asaltando el muro muy cerca a mí, quisiera ayudar al desafortunado infante.... deseo correr hasta sus posición, pero el pobre es engullido en una de las edificaciones interiores, me tomaría demasiado tiempo, y en el instante en que me resuelvo si vale la pena llega mi cabo. El hombre desencasquilla magistralmente la derringer, lo que me permite obedecer la orden de apuntar hacia el horizonte a la maraunta de bichos y matar lo que se venga encima....

SEÑOR NECESITO UN OBJETIVO!!!! Le exclamo a mi cabo al momento de darme la señal de listo.

Todo esta demasiado tranquilo en el muro, veo a los infantes correr por dentro del fuerte, y por el muro. Y a lo lejos están esos malditos monstruos, activo el comunicador. Casas donde estás! responde! - sin contestación, Kilder, Campbell, buscad a Casas su ultima posición era cerca de las escaleras de la parte norte al lado de vosotros, quiero que lo traigais. Despejad la zona si fuera necesario.

Escucho a McNealy deseando hacer bailar la derringer, Bien McNealy enséñame que sabes hacer con esta preciosidad a esos de allí- digo señalando al horizonte- Becerra, Dragonstone nuevo objetivo disparad a los que llegan por el noreste ............ ¡NO ESCUCHO A LAS MORITAS CANTAR! ¡¡DISPARADDD!!

Las ordenes fueron impartidas no hay tiempo de mas, parar al enemigo disparar y rogar por qué no lleguen al interior por radio escucho al Ct de la Fox Pidiendo soporte con los Gusanos dentro del fuerte, pero la comunicación del Capitan Alexei es Primada – Heat prepárense Para una Gran Explosión, el Pozo será detonado, por las inminentes Visitas a través del túnel – Con el arma en la mano descarga balas hacia las criaturas tratando de mermar su avance

el sargento , corria entre el caos por una lado gusanos dentro y por otro bichos fuera y sonido de los disparos, el sargento se concentro en correr en silencio hasta su arma y dejar al cabo que siguiera dando las ordenes, el estaba demasiado ocupado y no podria correr de un lado al otro del muro gritando las ordenes recien incorporado y parecia que stone se encargaba de la situacion. Se alegro de tener un cabo eficaz mientras seguia con su carrera

Tras comprobar en la distancia que Kilder seguramente puede necesitar cuidados para continuar el combate.

Compañero, como te encuentras puedes continuar?? - Le grita Becerra a Kilder mientras toma posición en el muro para afrontar la nueva envestida de enemigos.

Mi ultima ráfaga no fue muy buena con el caos y los nervios al maximo dentro del fuerte a pesar que acabe con la amenaza del tanker una duda rompe mi concentración pues tras la ráfaga escuche un grito y vi la silueta de uno de los infantes ligeros caer, la culpa me carcome y no me puedo concentrar

realmente acabe con la vida de ese hombre?

intento despejar mi cabeza no pensar en eso sin embargo  la imagen de una corte marcial me hace poner la piel de gallina eso me asusta mas que un grupo de tankers

–al menos contra los bichos tengo como defenderme –

en medio de la marea de pensamientos  escucho las ordenes del cabo , apunto al noreste , unos segundos pasan y no logro ver nada , sin embargo un momento después logro divisar algunas siluetas que se mueven y hacia allí dirijo mi disparo