Partida Rol por web

 El valletano mirando la gravedad de su herida aprieta la mandíbula.

 - Dispara!!- Susurra y hace un gesto imperativo ha Minsk para que dispare a los trasgos que van hacia nuesta zona.

 Cuando vayan a por él, los podré atacar por la espalda, emboscándolos, tendremos que darnos prisa antes no vengan los demás...

Minsk, no duda un instante ante la declaración de su compañero. Sigue apoyado en el tronco, se deja descubrir lo justo para que tengo libertad de movimiento a la hora de soltar su flecha. Después vuelve a agazaparse en el árbol, ofreciédole cobertura.

-Ten cuidado, amigo- Pensó seguro de si.

Querelar, salió del sendero para pegarse al Torreón. Allí ingerió el líquido mágico que contenía la poción, sin embargo esta poción debería de estar pasado por que no le sentó demasiado bien. Seguro de si, se pega al muro, pero lo mas probable es que le hayan visto dirigirse hacia allí.

El elfo, asiente a su compañero, y suelta la felcha. La felcha dibuja una línea recta, y finalmente perfora la cabeza del Goblin. El Goblin, cae en tierra, sin vida.

Su acompañante le vió caer. Vió venir la dirección de la flecha, y de refilón también vio como una silueta corría hacia el Torreón. -Allí ¡detrás de la Torre! ¡rápido!. Yo me encargo de avistar entre los árboles..-

Con su espada en la mano, cruzó la maleza y finalmente se topó con el elfo. -¡Aquí estas, asquerosa rata!- Se relame la lengua al ver al elfo.

Los dos Trasgos que trataron de esconderse, siguen su camino, pegados al muro del Torreón. Sin embargo, esta vez sus movimientos son demasiado torpes para pasar desapercibidos. Y cualquier ser que tenga mas de un ojo, les verá con facilidad.

Esta criatura, que a simple vista, parece que tiene los rasgos mas definidos, se aleja de la fogata para introducirse en el interior de la Torre. -Tengo que avisar al jefe, quizá este demasiado entretenido abriendo el botín, o quizá este durmiendo el muy holgazán..-

Con arma en mano, se pierde por el interior de los restos del Torreón.

Todos conscientes de la presencia enemiga. Que empiece el combate, solo uno de los dos bandos podrá llevarse el botín. El elfo, no se ve sorprendido en absoluto por el Goblin que aparece entre los árboles, por detrás de él. Es su oportunidad para quitarle del medio.

 Querelar avanza raudo en pos del trasgo que se ha percatado de la ubicación de Minsk, dispuesto a dar cuenta de él. Pero esta vez es más cautelso, poniendo sus sentidos en protegerse.

 - Rehúnete con tus ancestros criatura vil!- susurra el guerrero.

El elfo, no se soprende al ver la criatura detras de él. Es más, estaba siguiendo sus pasos. Cuando aparece con su arma en mano, Minsk, echa unos pasos hacia tras hasta coger una mas que decente posición para atacar con su arco.

Como buen arquero, tensa su flecha con dos de sus dedos y suelta.. -Sabandija asquerosa, no vuelvas a llamarme rata ¿lo has entendido?- Susurra entre dientes.

Los Goblins, que rodeaban la Torre, salen a la luz y atacan a Querelar los dos en manada. Sus espadas cortas, dañan gravemente al humano. Por otro lado, el Trasgo que intentaba sorprender al elfo, se encuentra con una flecha que perfora su pecho. Este siente aún mas odio y se lanza a por él, tras gastar sus últimas fuerzas cae al suelo, moribundo. (-1)

Las dos criaturas, que rodean a Querelar, se relamen la lengua. -Carrrrne fresjkaaa-

Este Trasgo, se coló en el interior de la Torre. Y no se sabe cuales son sus intenciones...

El elfo arrojó un nuevo proyectil. La flecha voló rápida, buscando su objetivo, y no traicionó a Minsk. La criatura fué dañada de gravedad, sin embargo aún tuvo fuerzas para hacer su última carrera y su último ataque antes de caer tendido al suelo. El ataque del Goblin, era bastante bueno, pero también lo era el aventurero, capaz de esquivar golpes que parece que vayan a darle en un último instante.

Al otro lado del combate, Querelar, se enfrentaba solo a dos de esas temibles criaturas. Se abalanzaron sobre él, y le dañaron de gravedad, pero el Valletano, no se dió por vendido, y aprovechó su pericia para salir adelante en este duro combate. Su cimitirra, dibujó un bonito ataque, y el acero dañó al Goblin (-5pg), pero sigue con vida, a pesar de tener todo el cuerpo ensangrentado con sucia sangre oscura.

El Trasgo, que iba a sus anchas, se introdució en el interior del Torreón..

El elfo, ve a su compañero en problemas, y se apresura hacia él -¡¡QUERELAR!!. ¡Hazte a un lado, voy a disparar!- Cogiendo una buena posición, tensa una nueva flecha y disparo. Al ver como la flecha no toma rumbo el que querían sus ojos, alerta a su compañero.

-¡Acercaté a mí. ¡Rápido!, yo me encargo de ellos..-

Una de estas dos criaturas, se encuentra casi en estado crítico, su cuerpo esta manchado de su propia sangre, por mas que intenta atacar, su ataque no es mas que un fracaso, al ver que su adversario está mejor, decide retroceder un ligero paso. El otro, que no deja de relamerse, también falla su ataque, pero eso no parece importarle demasiado, ya que no deja de rugir y sacar carcajadas alocadas al mismo tiempo.

-AjhahajjJAjajha..ishhh-

-¡Por aquí jefe, rápido!-

El Trasgo ha alertado a su jefe. Los fuertes gritos se escuchan desde el interior del Torreón. -Venga, ¡sólo son dos sucias y asquerosas ratas!- El Trasgo corre hacia la salida, y apunta con su ballesta, posicionándose detrás de un muro caído.

El jefe, o quien quiera que sea, no aparece. Quizá solo sea un pequeña trampa de estos Goblins, o quizá no. Quizá el jefe es tan grande y fuerte, que sus pasos son demasiado lentos..

 Querelar, malherido realiza una maniobra de evasión, acercándose haca su compañero, rocurando apartarse de la trayectoria de ss disparos. Mientras se aparta envain de nuevo su arma.

Querelar, aprovecha el fallo de los Trasgos para retirarse del combate, y apresurarse hacia su compañero. Allí Minsk le espera.

Al otro lado del combate, los Trasgos sigue empuñando sus armas, el Goblin que se fué a alertar a su jefe, se ha posicionado detrás de un muro para coger toda la cobertura posible y descargar su virote al mismo tiempo.

Minsk, al ver que su compañero se acerca, lleva su mano a su cinto y extrae un frasco con contenido mágico. -Engulleló, ¡aprisa!- Le tiende la poción y da un ligero paso, para cubrir a su compañero y que le de tiempo a ingerir el líquido.

Ya por delante de Querelar, apunta al Trasgo que está mas herido con su flecha.

El Trasgo que estaba cubierto por su propia sangre, cae al suelo, debido a la potencia que llevaba la flecha del elfo. La flecha perfora el pecho de la criatura y yace en el suelo sin vida. La otra criatura, no parece importarle que su compañero haya muerto, ya que carga con tanta furia hacia Minsk.

Sin embargo su intento de ataque no es mas que un fracaso, y el ágil elfo esquiva la embestida.

El Trasgo, apoya su ballesta en el muro y aprieta al gatillo. El virote se dirige hacia los aventureros, pero por suerte termina clavándose en el tronco del propio árbol. El trasgo maldice, y después se agacha para obtener cobertura completa gracias al muro.

Esta criatura tiene el aspecto de un humano primitivo, con piel verdosa y cabello aspero y largo, que sale por debajo de su yelmo. Tiene la postura recta, la frente bajo y rostros porcinos con unos promitentes caninos inferiores que parecen los colmillos de un verraco.

-¡Gusano! ¿Dónde están esas sucias ratas de las que me hablas? Le dice al que está escondido detrás de los muros con una ballesta. Sal de ahí cobarde, y trae mi montura. Se van a enterar esos dos..-

Con pasos sonoros, sale del interior de la Torre, para dar ordenes a sus plebeyos.