Partida Rol por web

dejo aqui mi tirada de iniciativa!

¡¡¡BERNAT CUIDADO!!! grita Aurea al ver los animales dispuestos a atacar al arquero y mientras tanto sale corriendo espada en mano para tratar de ayudar a su compañero de viaje.

Atraviesa el espacio que separa la cabaña de la duna en la que está su amigo y trata de llegar a tiempo antes de que le puedan herir.

Conforme llega levanta su espada y asesta un golpe al primer dingo que se le pone por delante, dejando al animal herido del espadazo.

 Aurea toma la iniciativa iendo hacia donde se encuentra Bernat que esta siendo atacapo por los Dingos... ¡¡¡ Vayamos en su ayuda !!!... digo mientras sigo de cerca a Aurea preparando mi escudo y mi arma para atacar y defenderme simultaneamente.

Cuando llego al lugar, veo como Aurea arremete contra uno de los animales, matandolo en el acto. Me dirigo a uno de los 4 Dingos restantes, y alzando mi espada, arremeto contra uno de ellos asestandole un certero golpe en su cuello.

hecho una furia por ver en peligro a mis compañeros, me abalanzo sobre el primer dingo que encuentro cual bestia indomable, y cojo al perro con una de mis manos mientras con la otra asesto un terrible golpe capaz de estremecer a los mismisimos cimientos de la tierra

 Veo a mi alrededor como mis compañeros uno a uno van matando a aquellos endiablados animales que habian atacado a Bernat y se habian comido a uno de nuestros animales de transporte.

¡¡¡ Seguid asi compañeros !!! ¡¡¡ Acabemos con ellos !!!

La reina corrió junto a Agrael en busca de Bernat para hacerle frente a los dingos que estaban atacando al arquero. Todos los demás se sumaron al instante a la batalla.

Al ser tantos y ella no estar acostumbrada a un combate tan estrecho, dudó unos instantes si utilizar la magia o recurrir a la espada. Estando todos tan juntos, una bola de fuego podría lastimar a sus compañeros así que no lo dudó más. En este caso, debería echar mano a la espada.

Con gracia y arrojo se trabó con uno de los animales al que le asestó un buen tajo. Al parecer, su manejo del arma estaba mejorando desde sus días en Linfa. Sin embargo el tajo no había sido suficiente para acabar con él.

Ahora viene la parte dura. El animal enfurecido intentará vengarse por lo que le he hecho. A esperar el ataque.

Es por la mañana y tras vuestro ataque a los dingos conseguís matar a tres de ellos, dejar otro muy mal herido y el último de ellos intacto. Estos dos últimos al ver que sois un grupo numeroso y comprobar que Bernat no estaba solo, deciden salir huyendo dejando abandonados a sus congéneres muertos.

Por otro lado, Bernat está tendido en el suelo con bastantes heridas por todo el cuerpo de arañazos y mordicos, sangrando abundantemente.

Los 5 camellos que quedan vivos siguen muertos de miedo al lado de la cabaña haciendo una piña entre ellos.

La lucha terminó pronto para suerte de la compañía. Sin embargo Bernat lo había pasado muy mal. Su cuerpo mostraba mucho daño, era urgente poder brindarle auxilio o quien sabe si sobreviviría.

La reina élfica dejó a un lado su arma y se acercó al arquero caído. Aún no había probado todos sus trucos con sus habilidades recientemente adquiridas, pero creía que una de las pociones que llevaba con ella podrían ayudar.

Con delicadeza tomó la cabeza de Bernat y llevó el frasquito hasta los labios del caído. De a poco, Brenat bebió y con satisfacción para Tyaeda, comenzó a cobrar color y a cerrar sus heridas.