Partida Rol por web

La Torre Infinita

La Entrada a la Torre

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10/08/2019, 14:30
Druth

Druth observó aquella gran piscina con una profunda desconfianza. Ya estaba más que acostumbrado a los numerosos desafíos de la Torre Infinita, por lo que esperaba el peligro en cada esquina. Armado con su enorme hacha de doble filo, el grandullón pelirrojo dirigió una mirada desconfiada a su alrededor mientras comenzaba a avanzar, a la cabeza del trío de héroes.

Entonces, ante sus ojos, la piscina comenzó a burbujear y pronto la piscina se convirtió en una gran olla. Druth gruñó de dolor y, de pronto, divisó a aquellas criaturas frente a él. Cienos. Aquellas horribles criaturas gelatinosas a las que, por desgracia, ya había visto con anterioridad.

Sujetando el hacha con ambas manos, se abalanzó sobre el primero de los cienos. Necesitarían acabar cuanto antes con aquellos seres si querían tener una sola oportunidad de escapar con vida de la olla.

- Tiradas (1)
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11/08/2019, 03:45
Theodore

El agua lo volvía mucho más lento y le provocaba un gran peso en la armadura. A medida que avanzaba siguiendo a sus compañeros. Todo fue a peor, cuando,sin previo aviso, unas extrañas burbujas comenzaron a emerger y más tarde gran cantidad de criaturas los rodeaban.

observó como su compañero se lanzó al ataque y lo imitó, levantando su espada, a pesar de la dificultad que el agua le proporcionaba. 

- Tiradas (1)
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11/08/2019, 23:45
Syrid

El calor y la humedad se hicieron insoportables para Syrid que, vestida con ropa más apropiada para su fría tierra que para darse un baño en una piscina de aguas calientes, sentía cómo se ahogaba. Pero eso no era lo peor, como todo lo que sucedía en aquella maldita torre. Lo peor era comprobar lo difícil que era avanzar por aquella piscina y el dolor que le causaba cada paso que daba.

Para rematar la difícil situación en la que se encontraban, aparecieron aquellos viscosos seres tan parecidos a los que habían conseguido derrotar en las escaleras. Sabedora de que el arco en aquella condiciones no le serviría para nada, la norteña cogió la espada dispuesta a acabar con esos repugnantes seres al igual que había hecho con los anteriores que se habían encontrado.

Con rabia y hastío ya que empezaba a estar cansada de aquella endiablada torre y quería acabar con ella y todos sus habitantes cuanto antes, comenzó a dar espadazos a cualquier cosa que se moviera y que no fueran sus compañeros, abriéndose paso de esa forma hacia la puerta que podían percibir más adelante.

- Tiradas (1)

Notas de juego

No estoy muy segura, pero creo que es la primera vez que en RyF me explota el dado.

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12/08/2019, 09:09
Director

Notas de juego

¡Os voy comentando!

1º: El combate

Todos habéis podido salir airosos del combate sin recibir daño (aunque vuestras tiradas hayan sido reguleras, vuestro equipo os ha salvado). Syrid, podrá narrar una masacre "limística", porque con ese crítico ha sido una auténtica berserker XD

Sin embargo, los limos tienen un problema: su ácido habrá roto alguna pieza de vuestro equipo (como siempre, sois libres de elegir el qué). Eso os habrá dado un -1

2º La huída de "La Olla".

Después tendréis que narrar vuestra salida de la piscina ahora que ya no hay limos a vuestro alcance, debéis hacer la tirada de 

¡Mucha suerte!

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14/08/2019, 12:19
Druth

Druth observó con horror cómo uno de los cienos conseguía envolver con su cuerpo el yelmo que portaba en la cabeza. Entre gritos, el pelirrojo logró quitárselo de la cabeza antes de que el cieno contra el que se enfrentaba procediera a comenzar a masticarlo y deshacerlo en el interior de su cuerpo. Había perdido su yelmo, aunque por suerte había conseguido salvar su vida contra aquellas criaturas que estaban debilitándolo más y más.

El pelirrojo dirigió una mirada a su alrededor y advirtió que sus dos compañeros estaban encargándose de los otros cienos, en especial en el caso de Syrid. La norteña había dado muerte a la gran mayoría de las ácidas criaturas, logrando que sus dos compañeros salieran completamente ilesos del combate.

Aunque los problemas no habían terminado. Aún tenían que salir de aquella piscina que, para desgracia de Druth, estaba mermando demasiado sus fuerzas. El guerrero se sentía cansado y tenía la impresión de que terminaría pereciendo en el interior de aquella olla, pero desde luego no iba a dejarse vencer tan fácilmente. Haciendo acopio de todas las fuerzas que le quedaban, Druth hizo un esfuerzo para intentar salir de la Olla, tratando de hacer caso omiso al fuerte dolor que estaba comenzando a sentir en su cuerpo.

- Tiradas (1)
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14/08/2019, 17:01
Theodore

Poco a poco la cantidad de criaturas disminuía. Theodore respiró aliviado al ver que sus compañeros las vencían de igual manera. Quedó sorprendido ante la destreza de su compañera norteña.

Cuando ya casi no quedaban enemigos notó que su cuerpo se sentía ligeramente más liviano y echándose un fugaz vistazo se percató de que sus hombreras ya o eran más que simples trozos de metal.

Algo decepcionado trató de salir del lugar utilizando las fueras que le quedaban luego del combate.

- Tiradas (1)
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15/08/2019, 12:42
Syrid

Toda la rabia que sentía salió a relucir en cada uno de los golpes de su espada. Cualquiera que la observara desde fuera podría ver a una mujer con la cara enrojecida por el esfuerzo, el ceño fruncido por la ira y los ojos brillantes de emoción cada vez que conseguía acabar con uno de aquellos asquerosos seres. Imbuida de una fuerza salvaje y ancestral, la norteña fue abriendo un mortal camino para sus compañeros y para ella misma.

Pero aún no habían salido de aquella especie de piscina que estaba minando su ánimo y, una vez conseguido acabar junto a sus compañeros con todos aquellos seres viscosos, el cansancio fue presa en ella así como una debilidad en todos sus músculos. Además, pudo comprobar como sus brazales de cuero, en especial aquel que protegía su brazo cada vez que disparaba su arco, habían desaparecido por culpa del ácido de las medusas.

Estaban cerca de la salida de aquel horrible lugar, pero aún tenía que hacer un último esfuerzo para alcanzar su meta.

- Tiradas (1)
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16/08/2019, 07:34
Director

Atrás queda el carrito orquesta cuya música aún os acompaña como un eco lejano, un murmullo, cuando subís las escaleras hacia el siguiente piso; la demonio cuyo cuerpo impío se encuentra tirado sobre su cama ahora teñida del rojo carmesí de su sangre y atrás queda la maldita piscina demoníaca, donde vuestra piel arrancada por el agua hirviente queda flotando para alimentar a los futuros limos que en ella crecerán. Lo que está por venir podría ser peor que lo ya pasado, así que aún tenéis tiempo de pensarlo y daros la vuelta, o tomar el puesto de los monstruos que habéis matado. El Duque tiene buen ojo para el talento, y sabrá recompensaros.

En algún nivel superior, el barón demoníaco Fu-Sei aprieta sus puños en silencio enseñando sus colmillos a la bola de cristal, con un falso temple, tratando de aparentar que es un guerrero disciplinado cuando puede verse la furia en el temblor de sus manos. No le apasionaba estar a las órdenes del Duque, pero mucho menos que unos mortales de occidente le humillen así.  No saldréis con vida de esta torre

Notas de juego

¡Enhorabuena!

Habéis superado la torre del Barón Fu-Sei, fantásticamente diseñada por Pyaray.

Ahora debéis narrar vuestro avance, un confuso camino teniendo en cuenta que habéis derrotado a los Barones ¿qué os deparará después?

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16/08/2019, 07:41
Director

Notas de juego

Ya queda poquito  :D

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16/08/2019, 12:54
Druth

Una vez que salió de la piscina y comenzó a ascender por las escaleras del siguiente piso, Druth se preguntó qué nuevos desafíos le depararía la Torre Infinita. El guerrero de rojizos cabellos se encontraba agotado, con el cuerpo cubierto de heridas y con la certeza de que en cualquier momento podrían enfrentarse con un peligro mucho mayor que los otros a los que habían hecho frente.

Habían atravesado con éxito los dominios del Barón Archeon, más tarde los de Nalnwalme y después los del Coleccionista. Ahora acababan de superar los desafíos del Barón Fu Sei, por lo que el héroe del Oeste ignoraba qué encontrarían a continuación. ¿Tal vez el Duque en persona les aguardaba más adelante? ¿Quedaría atravesar los dominios de algún otro Barón de quien no habían escuchado rumor alguno?

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18/08/2019, 03:59
Theodore

Una vez pudo salir de la infernal piscina, Theodore buscó a sus compañeros con la mirada y pudo respirar aliviado cuando los vio a ambos bien.

¿Qué reto se presentaría a continuación?, los barones fueron derrotados, pero algo le intrigaba. El camino había sido largo y agotador, al comienzo eran cuatro, aún creía que el mago los traicionó de alguna forma, y ahora solo continuaban 3. En lo personal sufrió graves heridas y estuvo al borde de la muerte. ¿Cuál será el próximo desafío de la torre? solo existía una forma de averiguarlo, seguir avanzando.

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19/08/2019, 23:53
Syrid

Habían conseguido escapar de ese nivel y, aunque por fortuna lo habían hecho con vida, las heridas sería un recuerdo perpetuo durante el resto del tiempo que les quedara, pero en esa ocasión el Barón Fu-Sei no había dado señales de vida ni había salido a su encuentro para enfrentarse directamente contra ellos. Desconfiada como era Syrid, y más desde que había entrado en esa Torre, la norteña se imaginaba que el barón estaría esperándolos agazapado en algún nivel superior, quizás como última defensa antes de su definitivo y crucial encuentro con el Duque.

Los tres habían conseguido salir de todos los peligros que habían encontrado en su camino, pero la mujer sabía que aún quedaban más delante de ellos antes de poder salir victoriosos de aquella Torre, pero confiaba en poder conseguirlo. Mientras subía las escaleras hacia un destino incierto, no pudo evitar pensar en el dicharachero mago que los había acompañado un tramo del camino pero que, por desgracia, no había tenido la misma fortuna que ellos.

—¿Creéis que lo conseguiremos? —preguntó a sus compañeros mientras se acercaban a los últimos tramos de la escalera.

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21/08/2019, 18:30
Director

Cuando finalmente terminasteis de subir las escaleras que os hacían alejaros de las instalaciones del anterior barón, accedisteis a un lugar cuyo olor marcaba una diferencia. La luz resplandecía por diversas vidrieras y ventanas, donde los más curiosos al alejarse percibirían como las vistas desde casi lo más alto de la torre eran espectaculares.

¿Cuánto tiempo llevaban los héroes superando mazmorra tras mazmorra? ¿Habían pasado horas? ¿días quizás? la percepción del tiempo es un lujo solo para unos pocos, puesto que los misterios de la torre están destinados a engañar a los sentidos y precisamente así es como os sentíais ahora.

El elegante suelo de mármol por el que caminabais ahora os hacía pensar que vuestra idea sobre "el final" de la torre sería distinto. Esperabais algo siniestro, horripilante, algo sacado de las pesadillas ya que a fin de cuentas los desafíos que se han superado han sido sacados del averno... pero allí se respiraba calma, se respiraba paz.

Por primera vez desde que estabais en los alto de la torre no os sentíais observados. El pasillo era largo pero no infinito, puesto que podíais notar que existía una pared al fondo, aunque aún debíais andar bastante más para alcanzarla.

¿Estaríais a punto de encontraros con el mismísimo Duque? ¿O era una trampa más a la que estabais llegando directamente?

Había un mal que erradicar, el mundo necesitaba librarse del influjo de la torre y ustedes erais los elegidos ¡las respuestas estaban más cerca que nunca!

Notas de juego

¡Llegamos al tramo final de la partida amigos/as!

Que los héroes narren sus impresiones mientras andan por los lujosos pasillos del tramo final de la torre.

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22/08/2019, 18:09
Syrid

Syrid quedó con la boca abierta cuando, una vez subida toda la escalera, se encontraron con una nueva estancia que, al contrario de lo que ella había pensado que debía ser ese lugar, no parecía estar impregnado de maldad, ni era tétrico ni oscuro sino todo lo contrario. La luz entraba a raudales por unas hermosas vidrieras y el suelo de mármol reflejaba esa misma luz y, en lugar de respirarse una atmósfera de terror o peligro, transmitía paz y calma que tranquilizaba el espíritu de la norteña.

Durante todo el recorrido por las estancias de los distintos barones, Syrid no pensó nunca en el tiempo que llevaban allí dentro. No había sentido sueño, aunque sí cansancio, ni había tenido hambre y eso la llevaba a pensar que apenas llevarían unas horas allí dentro pero eso le parecía una locura ya que ella hubiera opinado que llevaba allí media vida.

Comenzó a caminar por un pasillo que terminaba en una pared, detrás de la cual quizás se escondiera el Duque al que debían derrotar de una vez por todas y, a pesar de que ese pasillo era largo, no dudó ni un segundo en que una vez recorrido se encontrarían con la prueba final, la que determinaría si salvarían al mundo de la maléfica influencia del Duque o, por el contrario, morían en el intento.

Hemos superado muchos contratiempos —comentó a los que ya había empezado a considerar más que compañeros amigos— y ahora nos vamos a encontrar con final de esta aventura. Podemos conseguirlo, estoy convencida de ello pero, en el supuesto de que caiga en nuestra lucha final contra el Duque, quería deciros que ha sido un privilegio haber peleado a vuestro lado —no era muy dada a ese tipo de comentarios, incluso se podría decir que le daba vergüenza pronunciar esas palabras pues la mujer no había dejado ni un momento de caminar mientras las decía, pero necesitaba que sus compañeros lo supieran.

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23/08/2019, 12:51
Druth

-Lo creo -respondió Druth, secamente a la pregunta que le había formulado Syrid instantes atrás.

El héroe pelirrojo estaba convencido de que iban a lograrlo. Incluso en el caso de que uno o dos de ellos perecieran durante el enfrentamiento, estaba seguro de que el resto conseguirían derrotar al Duque y lograrían regresar de la Torre Infinita.

A Druth le sorprendió que el nuevo lugar al que habían accedido resultaba resplandeciente, lleno de vidrieras y ventanas y con un aspecto luminoso que en nada se parecía al que habían visto en las dependencias de los Barones. No le pasó desapercibido aquel detalle. Era como si la muerte y la corrupción no se hubieran extendido a los dominios del Duque. ¿Dónde estaba el Duque? ¿Dónde estaban las trampas, los monstruos...? Druth sostenía en sus manos su enorme hacha de doble filo, como si esperase que fueran a ser atacados de un momento a otro.

-Opino lo mismo -dijo el pelirrojo, endureciendo el tono de su aguda voz al oír las palabras de Syrid. El hombretón tenía una voz demasiado aguda para su tamaño, por lo que solía forzar un tono casi ronco para hablar-. Ha sido un honor poder luchar a vuestro lado, amigos míos.

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23/08/2019, 13:07
Theodore

Theodore quedó sorprendido ante la habitación. Los lujos y los decorados eran dignos de un noble. ¿Era aquí donde el Duque se encontraba?, ¿se enfrentarían a él?

Habían pasado muchas cosas desde que ingresaron a la torre. ¿Cuántos pisos subieron? Según los cálculos de Theodore no era posible encontrarse en el último piso, sin embargo, la torre era misteriosa y mágica, así que podía esperar cualquier cosa.

La primera en romper el silencio fue su compañera dando palabras de aliento, luego fue su compañero pelirrojo. Theodore, tan comunicador como siempre, solo asintió a aquellas palabras. Luego hincó su rodilla y junto las manos, realizando un extraño ritual, preparándose para la muerte en caso de tener que luchar contra el Duque.

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23/08/2019, 20:25
El Duque

El silencio del lugar se rompió por completo ante el sonido de unos aplausos lentos pero firmes que provenían justo del final del pasillo. A simple vista no parecía haber nada ni nadie allí, pero tan solo hizo falta entrecerrar un poco los ojos para comprobar que una figura comenzaba a materializarse frente a ustedes como si fuese una especie de espíritu.

Ante ustedes estaba una figura envejecida, casi decrépita y cuyos ojos estaban encerrados en magia, podíais notarlo. Su sonrisa era afable, de aprobación e incluso de respeto. El Duque había revelado por fin su apariencia y estaba justo delante.

- Excelente... excelente queridos héroes de la rosa de los vientos - dijo mientras iba aminorando el ritmo de sus aplausos.

- Una parte de mi sabía que alguien llegaría con vida hasta este lugar, que podría mirar a los ojos a quienes osan desafiar esta torre... - os examinó detenidamente.

- Estáis cansados... aún hay una chispa de valor y coraje pero no es la misma que cuando entrasteis en mis dominios. Es por eso que debéis saber la verdad y tendréis que tomar una decisión que cambiará vuestras vidas - no tardó en sonreír casi de manera simpática.

- No sois los primeros en llegar ante mi, aunque ya casi había olvidado el recuerdo de esta sensación... es tan añeja - suspiró.

- Al igual que ustedes, mis Barones fueron héroes de la rosa de los vientos que alcanzaron la cumbre con éxito a pesar de haber perdido a compañeros y amigos. Ésto ha sucedido a diferentes ritmos... algunos alcanzaron la meta hará años, otros décadas e incluso algún barón lleva conmigo más de medio siglo - se frotó las manos.

- Ahora tenéis ante ustedes la oportunidad de formar parte de esta gran familia. El mundo va a seguir sumado en el caos y en la destrucción, nadie va a poder impedirlo y eso en el fondo de vuestros corazones debéis de saberlo - dio un par de pasos para acercarse más a ustedes.

- Os doy la oportunidad de que os convirtáis en Barones, no seréis súbditos sino aliados. Os daré poder, riquezas, ejércitos, paisajes... lo que necesitéis mientras vuestra última voluntad sea mantener esta torre intacta conmigo - aquella era una oferta que jamás olvidaríais.

- ¿Y bien? ¿Qué tenéis que decir al respecto? - echó sus manos tras la espalda y esperó paciente vuestro veredicto.

Notas de juego

¡Debéis tomar la decisión más importante de vuestras vidas! No estáis obligados a elegir la misma opción.

 Aceptar la oferta. 

 Declinar la oferta. 

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24/08/2019, 17:28
Syrid

Por fin apareció ante ellos. Al final habían encontrado al Duque, o más bien él había salido a su encuentro. Syrid observó cómo el hombre, ya entrado en años, se materializaba ante ellos y se acercaba, por un momento se sintió sorprendida al comprobar que no erar como ella se lo había imaginado. En su mente se había hecho una imagen del Duque que distaba mucho de lo que veían sus ojos ya que siempre lo había imaginado como una especie de monstruo, de bestia sedienta de sangre que irradiaba maldad por los cuatro costados. Pero aquel hombre no era así, incluso parecía un anciano venerable, sabio y tranquilo.

Sin embargo Syrid sabía que no se debía dejar embaucar por aquella imagen de aparente afabilidad a pesar de las palabras que les dedicó. Escuchó la propuesta que el Duque les estaba ofreciendo, muy tentadora eso tenía que reconocerlo, y por unos instantes la norteña se quedó pensativa, evaluando con cuidado la proposición. Pero no era la ambición lo que la había llevado a embarcarse en aquella aventura, ni la fama ni los honores, eran sus creencias, su deseo de ver ese mundo libre de opresión y maldad aunque en el fondo sabía que eso era un sueño muy difícil de cumplir. Había llegado hasta allí a costa de la vida de otros, a base de tesón y valentía y no iba a tirarlo todo por la borda en el último segundo por mucho que el Duque le ofreciera. No había nada que el hombre que estaba frente a ella pudiera darle que no tuviera ya, y la seguridad de los suyos y el resto del mundo era lo único que deseaba.

Y si tenía que caer en el intento de ver por fin aquella Torre destruida, lo haría con gusto sabiendo que se había mantenido fiel a sus principios y, sobre todo, a lo que su gente esperaba de ella.

Una propuesta muy tentadora y difícil de rechazar —comenzó a decir. Por su parte había tomado su decisión y, aunque no sabía que iban a hacer sus compañeros, ella estaba dispuesta a no echarse atrás aunque la muerte fuera su final, al fin y al cabo todos tenían que morir en un momento dado—. Pero no he pasado todo este sufrimiento, todas estas penurias, todos los peligros a los que nos hemos enfrentado para rendirme ahora —preparó su arco dispuesta a disparar aunque dudaba que una de sus flechas pudieran llegar a hacer algún daño al Duque—. Yo no acepto, no voy a traicionar a todos los que han depositado su confianza en mí.

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25/08/2019, 12:33
Druth

Druth observó al anciano Duque. Durante largo tiempo, había intentado ponerle cara, tratar de imaginar cómo sería. Había pensado en él como un individuo grande, enérgico, fornido, y sin embargo lo que tenía ante él era un anciano de aspecto débil que incluso les sonreía de manera afable. No obstante, el pelirrojo no lo subestimó. Si había sido capaz de construir la Torre Infinita, no cabía duda de que debía de tratarse de un hechicero realmente poderoso.

Escuchó las palabras del Duque, sorprendido de que el anciano les estuviese dando la oportunidad de convertirse en Barones, aunque aún más sorprendido de saber que no eran los primeros Héroes de la Rosa de los Vientos que lograban llegar hasta la cima de la Torre, solo que quienes lo hicieron antes habían terminado escogiendo unirse al Duque. Archeon, Nalnwalme, El Coleccionista... ¿Hubo un tiempo en el que ellos habían sido también héroes?

Una expresión amarga se reflejó en el rostro de Druth al oír al Duque decir que, hicieran lo que hicieran, el mundo seguiría sumido en caos y destrucción. Y supo que tenía razón. Solo era un héroe. Incluso en el caso de que pudieran derrotar al Duque, ¿qué haría después? Las guerras siempre existirían y no había nada que pudiera hacer para impedirlo. Como Barón, en cambio, tenía la oportunidad de marcar la diferencia. Dispondría de ejércitos, riquezas, tierras y podría llevar la paz al Oeste. Se imaginó a caballo, admirando un bello paisaje desde una colina mientras sus tropas cargaban contra un ejército enemigo. Pero entonces pensó en los otros Barones. ¿Y si ellos también habían comenzado siendo altruistas? ¿Y si acababa convirtiéndose en un sádico Barón no muy distinto a los que ya había enfrentado?

Druth había tomado su decisión. Se llevó una mano al zurrón de su cintura, donde reposaban sus pociones y se bebió la última que le quedaba. Al terminarla, dejó caer el frasco vacío al suelo, donde se hizo añicos.

-Vine aquí con un propósito -dijo, forzando su voz para que sonara acerada-. No me iré sin cumplirlo.

Notas de juego

Druth declina la oferta del Duque

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25/08/2019, 13:16
Theodore

El Duque resultó muy distinto a como se lo imaginaba, un ser tan poderoso con una apariencia tan frágil y débil. Notaba en el ambiente una extraña sensación, muy similar a la de su compañero desaparecido. Sin embargo, si algo aprendió en la torre fue que las apariencias engañan y los sentidos no son de fiar.

¿Qué no eran los primeros? Aquellas palabras llamaron su atención, si eso era verdad, entonces ¿Por qué seguía con vida el Duque?¿Esos hombres y mujeres aceptaron el trato y lo dejaron vivir? El Duque les proponía algo imprevisto, convertirse en un Barón, era, sin dudas, algo que pensar. Si aceptaba, traicionaría a la orden, pues su encargo era matar, en lo posible, al Duque mismo. Pero, por otro lado, convertirse en un Barón le daría el suficiente poder y dinero como para fundar una  orden propia, cosa que siempre añoró.

Por las palabras de sus compañeros dedujo que ellos no aceptaron. Respiró algo aliviado, descartando la idea de enfrentarse a ellos.

Desenfundo su espada y adoptó una posición de combate, listo para atacar en cuanto la situación así lo dispusiera. 

Notas de juego

  Declina la oferta.