Partida Rol por web

La última de los vuestros

Castillo: Habitaciones

Cargando editor
16/05/2015, 14:02
Benjamin Foster

Accedemos a mi antigua habitación, la que abandoné cuando Elizabeth y yo tomamos oficialmente la decisión de convertir la suya en nuestra. Oficialmente, porque en realidad esta habitación sólo fue mía formalmente, nunca llegué a dormir aquí. Desde la primera noche, aunque mis cosas estaban aquí, fue en el cuarto de Liz donde pasé todo el tiempo que pude, donde compartimos tiempo, confidencias y cariño.

Ahora, apenas la reconozco. Está llena de polvo, descolorida, con los muebles envejecidos. Aunque la disposición es la misma. Recostamos a T.J. boca abajo en la cama, sacudiendo el polvo de almohada y colcha. Al menos, las sábanas estarán decentes, pues el polvo se habrá acumulado sobre la colcha y no habrá entrado.

¿Con Erik? Pues... -Me encojo de hombros, recordando con un escalofrío las palabras de Himiko- No lo tengo claro, ni siquiera se cómo se tomará la decisión. Pero está claro que algo hay que hacer... -O lo hará Himiko. En cualquier caso, el marrón es para Makoto. Yo haré la parte que crea que me corresponde para ayudar al grupo, pero no espero que cuenten conmigo para nada. Ya no- Nuestra habitación es la de al lado. No creo que podamos hacer gran cosa hasta que pase la tormenta, aparte de recuperar fuerzas. Me gustaría hablar con Himiko a solas, más tarde, cuando se de la ocasión, pero hasta entonces... -Hay algo que no ha dicho, y creo que es importante. Nos estamos centrando tanto en la última que nos hemos olvidado del verdadero propósito de este viaje.

Cargando editor
16/05/2015, 15:00
Elizabeth Freeman

Mientras preparaban la cama y colocaban a T.J. sobre esta, eché un vistazo por la habitación, dándome cuenta de que todo estaba prácticamente igual, aunque tremendamente lleno de polvo. Abrí el armario, que años atrás, ayer para Ben y para mí, guardaba multitud de ropa; pero ahora no quedaban más que algunos retazos de tela de todo aquello.

Cogí algo de tela, para usarlo a modo de trapo, y pasé uno de mis dedos por encima del escritorio, comprobando nuevamente la gran cantidad de polvo que se había acumulado.

-S-será mejor que no tratemos de limpiar esto aún, al menos hasta que T.J. esté mejor; no conviene remover el polvo, con esta tormenta ni siquiera podemos airear la habitación… - dije mirando un segundo por la ventana, antes de dirigirme al baño.

Los chicos hablaban sobre qué era lo que haríamos con Erik, mientras yo comprobaba abriendo el grifo del lavabo que había agua corriente. Dejé la puerta abierta para escucharles, pero tampoco creí preciso intervenir, a fin de cuentas, no tenía ni idea de qué deberíamos hacer con el cocinero.

Por suerte había jabón aún, así que cogí el improvisado trapo y lo mojé, ayudándome del jabón para limpiar el retrete y el lavabo; lo imprescindible de momento. Aclaré el trapo, para darle también un aclarado a todo lo aseado, y dejé el trapo donde pude, tras lo que limpié mis manos y salí.

Al hacerlo vi a Victoria en una pose que demostraba como mínimo agobio, y es que era normal que al situación la superara. Conmigo ya lo hacía, y eso que había tenido cinco días para asumir que el mundo no era tal y como lo conocíamos. Deslicé mi mano suavemente por la espalda de la chica, tratando de reconfortarla.

Ben le informó de que nos encontraríamos cerca y de que tendríamos que esperar a que pasara la tormenta.

-Buscaremos la manera. - le dije, tratando de transmitirle seguridad, y volviendo a retirar mi mano para no agobiarla más. – Comer y descansar, y si pasa lo que sea avísanos, por favor… - añadí mirando a T.J., el cual necesitaba recuperarse más que nadie.

Abrí una de las latas de comida y se la dejé a los chicos en la mesilla, junto a algunos cubiertos.

-G-gracias. – le dije a la chica tímidamente, antes de volver a tomar la mano de Ben y dirigirnos hacia la puerta. - ¿Qué es eso de hablar con Himiko? – le susurré a mi novio, antes de abrir la puerta para salir.

Cargando editor
16/05/2015, 18:39
Benjamin Foster

Notas de juego

Elizabeth y Ben salen de la habitación donde están T.J. y Victoria y entran en su antigua habitación.

Cargando editor
16/05/2015, 18:43
Victoria 'Vicky' Silva

 -Claro.- Asentí cansada, echando un vistazo a T.J.. -Gracias-  Contesté a los chicos ante su ayuda y su disposición, dirigiendo una mirada a Liz, agradecida por su amable gesto, y luego a Ben, carente por completo de miedo hacia él por primera vez desde que lo conocí en la cueva tras haber contado con su ayuda, olvidándome de todo lo demás, tratando incluso de forzar una leve sonrisa a la vez que bufaba un poco de aire.

 Volví a ponerme seria en apenas unos segundos y me apoyé en las rodillas para levantarme y cruzarme de brazos, más para mantener el calor que como gesto serio.

 -Yo... Me ocuparé de él como pueda, pero estaría bien tener a Rina localizada.- Apunté.- Gracias... De verdad. - Repetí cabizbaja.- Me habría vuelto loca si no fuera por...- Negué con la cabeza antes de volver a levantar la mirada con un leve suspiro y mirarlos seria.- Gracias - Dije por tercera vez antes de que se marcharan. -Avisadme si encontráis algo de ayuda, o... - Hice una pausa, pensando en Erik y lo que harían con él. - O si pasara algo que tuviera que saber... Yo... estaré aquí.- Terminé de hablar y sin más demora ni despedirme con ningún tipo de formalidad me dirigí hacia el armario del que había visto que Liz había sacado aquel trapo, para rebuscar entre las telas carcomidas con el tiempo alguna lo suficientemente larga como para improvisar un vendaje sobre el chico que ayudara a que la herida se mantuviera cerrada y pudiera cicatrizar apropiadamente. No tenía ni idea de cómo aplicar un vendaje, pero ya me preocuparía de eso cuando encontrara lo que buscaba. Con rodear la zona afectada con la tela aplicando la suficiente presión tendría que bastar, así que no debería ser muy difícil, ¿No?.

Cargando editor
16/05/2015, 18:46
Director

Tras un rato mirando y con un poco de dificultad la chi a es capaz de distinguir una figura de una chica se fija un poco mas y puede ver que cerca de la puerta esta Rina agachada parece que habla con algo pequeño y no muy lejos esta Katz observando

Cargando editor
16/05/2015, 18:51
Benjamin Foster

Entramos en nuestra antigua habitación, lo que, a pesar de la capa de polvo y el desgaste del tiempo, despierta en mí todo tipo de recuerdos agradables. Abro la puerta y cedo el paso a Elizabeth con una sonrisa, esperando a estar dentro para explicar lo que me ha preguntado hace un momento, al salir del otro cuarto.

Creo que Himiko tiene más que contarnos, si es que accede a ello... -Me encojo de hombros, pensando en lo esquiva que parece- Me parece que hemos olvidado el verdadero objetivo de venir aquí. Tenemos que encontrar a esa mujer, y cada vez está mas claro que sólo ella puede hacernos volver. Pero, si volvemos, ¿qué habremos conseguido? -Camino por la habitación hasta la ventana, viendo a través de los cristales sucios cómo se desarrolla la tormenta fuera- Nada, en realidad. Tenemos que descubrir lo que pasó, lo que pasará, cómo se destruyen los castillos y se extermina a los nuestros, para poder evitarlo. Y Himiko seguramente sabe algo sobre eso...

Cargando editor
16/05/2015, 18:56
¿?

Un intenso pero breve dolor de cabeza apenas unos segundos pero lo suficiente para molestarles horrorosamente y una voz ya familiar que les habla

Marchaos no me engañaréis no se como lo hacéis pero no puedo seguir con vosotros no quedan mas

Es entonces cuando sienten un escalofrío y ven a la chica de la canoa en medio de una aldea arrodillada llorando impotente a su alrededor todo esta destruido, hay cadáveres por todas partes, de personas que visten como ella y militares, de nuevo un intenso dolor y la imagen se desvanece

Cargando editor
16/05/2015, 20:57
Victoria 'Vicky' Silva

 Agarré un largo trozo de tela que encontré en buen estado, además de uno más pequeño, y me dirigí primero al baño, donde sacudí todo el polvo y la suciedad de éstos antes de mojar parte del pequeño bajo el grifo, para luego escurrirlo y dejarlo humedecido, dejando el otro doblado sobre mi hombro.

 Volví junto a T.J. y sostuve en mi puño la parte húmeda del trapo para limpiar su herida con sumo cuidado, y secarla luego con la parte que no había mojado. Luego cogí la tela larga y le rodeé el tronco con ésta, pasando la tela por debajo de su tronco para agarrarla desde el otro lado y dejarla tirante para que no quedara holgada, además de que presionara la herida, y tuviera más facilidad para mantenerse cerrada y cicatrizar, dando todas las vueltas que pude sobre éste que la tela permitía hasta acabar el improvisado vendaje en un nudo con los dos extremos de la tela.

 Tapé al chico con la ropa que hasta hace nada le descubría la herida, y lo arropé con la colcha que anteriormente había sacudido de polvo. Luego salí de la habitación, y volví en unos pocos minutos arrastrando un colchón que había cogido de otra habitación, cuya almohada y colcha había sacudido previamente antes de traerlo y dejarlo sobre el suelo, junto a la cama de T.J., y cerrar la puerta tras de mí.

 Tras mirar un rato por la ventana, contemplando pensativa y seria la tormenta, cogí una tela más y entré al baño para hacer mis cosas y darme una ducha tras dejar el agua correr un rato. Me escurrí el pelo para que no chorreara, me sequé y me vestí con la misma ropa que llevaba cuando terminé.

 Salí del baño y cogí la lata de comida que había dejado Liz, de la que apenas comí con desgana la mitad sentada sobre mi colchón antes de dejarla junto a este con el cubierto dentro, en el lado que compartía con la cama de T.J..

 Eché una última mirada a T.J. antes de tumbarme de lado sobre el colchón, que parecía que tirara de mi hacia abajo, y luchar por tratar de dormir un poco. Sumida en mis pensamientos, sabía que no sería nada fácil a deshora y tras tanta tensión, incluso cuando el sueño en la cueva fue malo e insuficiente, pero finalmente me venció el cansancio y aunque poco, y despertando a ratos que aprovechaba para echar vistazos al americano y la tormenta, conseguí dormir un poco. 

- Tiradas (1)

Motivo: Vendar (Medicina)

Dificultad: 0

Habilidad: 7

Tirada: 1 3 4

Total: 1 +7 = 8 Éxito

Cargando editor
16/05/2015, 21:26
Elizabeth Freeman

Cuando entramos en nuestra habitación, Ben comenzó a explicarme qué es lo que quería hablar con Himiko, diciéndome que habíamos olvidado nuestro verdadero objetivo, acercándose cada vez más al asunto verdaderamente importante. Al girarse y comenzar a caminar hacia la ventana sonreí. ¿Olvidar nuestro objetivo? Yo, ni por un segundo, pero era consciente de que enfocar el asunto como la forma de volver a casa era la única manera de que la mayoría de los chicos nuevos colaboraran.

¿Ahora también es su objetivo?

Mantuve la sonrisa mientras caminaba hacia él, escuchando como explicaba cuál era el objetivo real de todo esto, orgullosa al verle tan implicado. Posé mis manos suavemente sobre sus hombros, dispuesta a besar su cuello, cuando tuve que apartarme de repente y llevé las manos a mi cabeza.

Un intenso dolor que duraría unos segundos había invadido mi cabeza, escuchando en esta una voz que me resultaba ya familiar.

La última.

Sin embargo esto no fue todo, tras ello sentí un escalofrío que precedió a unas imágenes, unas imágenes que no había visto antes, pero que sin embargo me recordaron a algo ya acontecido. El dolor regresó, tan intenso como antes, y la imagen se desvaneció.

Volví en mí, agitada, asustada.

-Kyoto… - dije levantando la mirada, encontrándome a Ben de frente.

Cargando editor
16/05/2015, 22:13
Benjamin Foster

Estoy terminando de exponer mi idea, con la mirada perdida en la tormenta del exterior, cuando noto el suave contacto de las manos amorosas de Liz sobre mis hombros. Su simple tacto es suficiente para alejar las preocupaciones de mi cabeza, todas las discusiones, las diferencias, los peligros. Elizabeth es un faro en medio de la noche, una dirección para llegar a buen puerto.

Me giro, dispuesto a abrazarla, pero al volverme la encuentro reculando y llevándose las manos a la cabeza. Instintivamente, antes siquiera de comprender qué sucede, me abalanzo hacia ella, sujetándola por los hombros para evitar que pueda caerse si lo que sea que le pasa va a más, preocupado. Siento cómo la sacude un escalofrío, y la abrazo con fuerza sin saber qué hacer ni qué decir, hasta que la noto sacudir la cabeza, asustada, volviendo en sí de nuevo. Diciendo una sola palabra.

Kyoto.

¿L-Liz? ¿Qué te pasa? ¿Qué... qué ha sido eso?

Cargando editor
16/05/2015, 22:54
Elizabeth Freeman

En seguida me encontré con un Ben confuso, preguntándome qué me pasaba, qué era lo que había ocurrido. Ojalá lo supiera. No lo había considerado nunca como una habilidad como tal, ya que simplemente sucedía, sin que yo lo buscara, pero ya eran varias las veces que había visto y oído cosas que otros no podían.

Los sueños con Rina y la última, escuchar los pensamientos de la japonesa, ver y escuchar a su otro yo y los planes de esta, y ahora, de nuevo volvía a ver y a oír a la última.

-E-estoy bien… - dije en primer lugar, posando mis manos sobre sus brazos, tratando de tranquilizarle. – E-es la última, la he oído, la he visto. – miré hacia abajo un segundo, y levanté la vista para continuar. – Otra vez decía que nos marcháramos, que no la engañáramos. Decía no saber cómo lo hacíamos, pero que no podía seguir con nosotros, que no quedaban más. No comprendo bien a qué se refiere… - solté sus brazos con cuidado, apesadumbrada. – Y después…  La ví, de rodillas, llorando en medio de lo que parecía una aldea, pero todo estaba… D-destruído, y había… T-todo el mundo estaba muerto a su alrededor. Gente vestida con pieles, pero también… Militares…

Esta vez fui yo quien desvió la mirada y me acerqué a la ventana, observado la tormenta.

-M-me recordó a lo de Kyoto… Le dije a Beni que mi intención era ayudar a que algo así no se repitiera, y dijo que algo se avecinaba… I-igual suena a locura, pero… - comencé aún más nerviosa. – S-siempre que he visto algo así, de f-forma espontánea… H-ha sido con Rina o la última. Y-y ahora una situación similar… ¿P-podrían tener ambas algo que ver? – me giré para mirarle, visiblemente asustada. - ¿O tendrá Rina razón y todos nos vamos a descontrolar?

Cargando editor
17/05/2015, 09:08
Benjamin Foster

No lo creo. -Respondo de forma tajante ante los miedos de Elizabeth. Me niego a creer que todo el mundo con una naturaleza sobrenatural vaya a descontrolarse. En primer lugar, porque si eso formara parte de nuestra naturaleza hubiera sido imposible ocultar la existencia de gente como nosotros durante tanto tiempo. Pero, sobre todo, porque pase lo que pase no me pienso rendir- Seguro que hay otra explicación.

Me acerco a Liz nuevamente, tras separarse de mí para mirar por la ventana, y me sitúo a su espalda rodeándola con mis brazos por la cintura. Mi rostro busca su cuello para darle un suave beso, y me quedo mirando la ventana con ella.

Puede que lo que Rina y esa otra mujer tengan en común sea el sufrimiento extremo. -Conjeturo, desapasionadamente- Tus poderes están relacionados con los sentimientos, puede que seas sensible a un sentimiento demasiado profundo y eso te provoque estas visiones. Para Rina fue traumático lo que pasó en Kyoto, y para la última... tiene pinta de que también. -Le doy otro beso en el cuello, seguido de uno en la cara, y dejo mi rostro pegado al suyo- Preguntaremos a Himiko por esa aldea, también. Cuando pase la tormenta, parece un buen sitio para empezar a buscar...

Cargando editor
17/05/2015, 10:22
Nyara Rosseau

-Ohm, mira, tu polluela la doramas está hablando con algo- entrecerró los ojos-¿Y la pavisosa está espiándola? ¿Qué cara..?¡AH!- se llevó una mano a la cara, presionándola contra la frente al tiempo que se dejaba caer sobre el suelo apretando los dientes intentando así soportar el dolor.

DÉJATE DE DRAMAS TÚ TAMBIÉN, MALDITA SEA, pensó en una respuesta inconsciente a la vocecilla de la última.

-ME CAGO EN LA LECHE, YA, OSTIAS- gritó en una mezcla de dolor y rabia ante el remanente de dolor que dejó la imagen a modo de despedida. -... ¿Kya?- dijo jadeando intentando enfocar algo en el cuarto que no fuesen puntitos blancos.

Cargando editor
17/05/2015, 12:11
Kyara Rosseau

Kyara estaba algo cansada e hizo caso a su hermana, iba a tumbarse en esa cama desastrada mientras que ella se asomaba por la ventana- Me parece bien lo de ir a por Himiko, pero voy a darla cuartelillo porque si ha entrado la manada con energía puede que esté alimentándose o algo así.

Estaba bostezando, ligeramente aburrida de estar encerrada en ese lugar cuando Nya empezó a hablar de nuevo- Vaya, estará entretenida con algo raro, ¿y la espían? pffffffffffffff, menudo estilazo que tendrá, madre mía -comentaba antes de recibir ese mazazo en la cabeza.

-Me está empezando a hinchar las pelotas -dijo con un quejido tras ese asalto mental de nuevo- si ella llega, puede que yo también -dijo, y en ese momento intentó centrarse de nuevo, aunque con pocas esperanzas.

No quiero engañarte, no pienso engañarte, pero creo que te podemos ayudar. ¿No te fías de mí? Bien, eso es bueno, yo tampoco me fío de tí; pero tienes que tener en cuenta una cosa. Ahora mismo, ya no eres la última, pues somos muchos más los que estamos aquí.

Se puso en pie y se sacudió el chaquetón- Voy a ver si pillo a Himiko o algo, ¿donde crees que puede estar? -y luego alzó un dedo- si vamos a buscar a la última, no llevemos este uniforme, no sea que nos tome por esos soldados rarunos.

Cargando editor
17/05/2015, 12:30
Nyara Rosseau

-...En la entrada ya te digo yo que no está, fuera solo está la polluela Doramas- abrió y cerró los ojos con fuerza a ver si se espabilaba- ¿Dónde estarías tú teniendo un cuarto para ti sola? Quizá en la zona de recreativos, o en el comedor intentando matarles a todos... o su cuarto o no sé. ¿Vas a buscarla ahora? Puedo ir al comedor a ir a recoger más botellitas de agua para la excursión mientras la tormenta dura.

Guardó unos minutos de silencio.

-¿Imaginas que la última es la que ha desatado la tormenta?- frunció el ceño- menuda forma de decirnos que nos larguémonos... aislándonos- negó con la cabeza y se cruzó de brazos- ¿Dónde vas a buscarla tú? Para ir yo a otro lado y te aviso por radiorrizo.

Cargando editor
17/05/2015, 12:52
Elizabeth Freeman

La firmeza en las palabras de Ben al negar mi conjetura consiguió tranquilizarme, al menos en parte. La verdad es que el que todos fuéramos a descontrolarnos podía no tener demasiado sentido en realidad, ya que de lo contrario la gente del castillo no nos hubiera dado la opción de volver a nuestras casas; pero ya había pasado con Rina, si bien era cierto que me habían dicho que su número de colas era algo inusual, siendo más poderosa de lo que debería a estas alturas.

Ben rodeó mi cintura y besó mi cuello, continuando con su explicación, y volviendo a besarme, en cuello y cara, antes de pegar su rostro al mío. Agarré sus brazos con los míos y cerré los ojos, mientras le oía decir que tendríamos que preguntar a Himiko por esa aldea, ya que podía ser un lugar por el que empezar.

Lo que decía sobre Rina y la última tenía sentido. Si yo era especialmente sensible a los sentimientos, y ambas estaban viviendo algo de aquella magnitud… No sería raro que lo percibiera. Sin embargo, ambas situaciones se me antojaban similares, aunque podría simplemente tratarse de los efectos del desbordamiento de poder.

Volví a abrir los ojos antes de comenzar a hablar.

-Sí, con esta tormenta no podemos ir a ningún sitio, sería demasiado arriesgado… Aun sin tormenta lo será, puede que lo que haya visto sucediera, o aún esté por suceder…

Giré mi cara para besar su mejilla, para después girarme por entero dentro de su abrazo, rodeando su cuello con mis brazos.

-Voy a hablar con Makoto. – le dije de pronto, mirándole a los ojos, pillándole seguramente por sorpresa. – H-he quedado con él a la hora de la cena… L-los dos solos. – concreté algo nerviosa, y es que cabía la posibilidad de que a Benjamin no le hiciera demasiada gracia aquello, después de la discusión que habían tenido; pero era algo que debía hacer.

Cargando editor
17/05/2015, 13:21
Benjamin Foster

Siento la caricia de sus manos sobre las mías, mientras habla del peligro al que nos enfrentamos. Estoy a punto de responderle, de recordarle que no nos metimos en este asunto sin saber del peligro que entrañaba, que precisamente por eso, con más motivo, estoy aquí con ella. Que no voy a permitir que nada malo le pase.

Pero entonces se da la vuelta, fundiéndonos en un abrazo, para cambiar radicalmente de tema.

Makoto...

¿H-has... quedado? -Pregunto, confuso, recordando que cruzó unas palabras con él antes de marcharnos del comedor- A solas... -Digo con cierta desgana, casi con decepción. ¿Qué tema necesita de tanto secretismo? En fin, no creo que yo mismo sea demasiado objetivo ahora mismo en nada que sea referente a ese tío, después de todo lo que ha pasado. Pero sí, me molesta que mi novia tenga que quedar con él para hablar nada a solas- Bueno, como veas... -Digo tras soltar un suspiro, visiblemente molesto con la situación, apartando la mirada a un lado.

Cargando editor
17/05/2015, 16:03
Elizabeth Freeman

Tal y como había considerado que podía pasar, a Ben no le gustó mucho lo que acababa de decirle. Pude notarlo en sus primeras palabras, al preguntar y repetir que habíamos quedado solos, pero también en sus ojos. Sin embargo, incluso me negó la visión de estos tras suspirar, apartando su mirada tras dejar caer que hiciera lo que considerara.

-Y-yo… - comencé a decir, entre nerviosa y entristecida, soltando su cuello. – E-estoy enfada por lo que hizo, pero también preocupada, por Rina y por él… Quería hablar con Makoto sin ella delante… - me expliqué, agachando la cabeza. – S-sabía que podía no gustarte, pero… Tenía que decírtelo.

Di un paso atrás, deshaciéndome de su abrazo.

-L-lo siento. – dije volviendo a mirarle.

Siento ser la segunda persona que te decepciona hoy. ¿Quizás no soy lo que esperabas?

-Deberías comer algo. - sugerí, haciendo el amago de ir a acariciar su rostro, pero deteniéndome a medio camino, temiendo que me rechazara. – Voy a ver si limpio un poco esto mientras… - concluí, mirando hacia un lado.

Cargando editor
17/05/2015, 16:38
Benjamin Foster

Elizabeth me suelta, tratando de explicarse entre nervios y tristeza. Vuelvo a mirarla, y verla así hace que me sienta profundamente culpable. A fin de cuentas, enfadarse y marcar distancias es la respuesta más sencilla. Ella, en cambio, a pesar de estar también enfadada, sigue preocupándose y tratando de aportar su grano de arena por que todos estén bien.

Es mucho mejor que yo, siempre lo he dicho...

Me pide disculpas, algo que me hace sentir aún peor. ¿En qué me convierte que deba pedirme perdón por hacer lo que es más correcto? Hace el amago de acercar su mano a mi cara, pero se detiene. Todo transcurre en medio segundo, el que siento que se me parte el corazón al ver el miedo en sus ojos, el temor al rechazo. Agarro su mano antes de que la retire, firme y suavemente, acercándola a mi cara y besando su palma con ternura.

No, Liz, YO lo siento. -Admito con tristeza- Haces lo que debes, no es culpa tuya...

Yo soy el que ha acumulado motivos de enfado que no lo serían con otra persona. Ni siquiera Makoto tiene culpa de eso. Creí que Makoto era de otra forma, de no haberlo creído todo esto no me afectaría en absoluto. Y ahora, soy yo quien se aisla y mantiene la distancia, y tú no tienes por qué sufrir eso.

Vamos, c-cariño, te ayudo a limpiar. -Le digo sin soltar su mano, acariciando su rostro con la otra- Y luego comemos algo juntos, ¿vale?

Cargando editor
17/05/2015, 17:47
Elizabeth Freeman

Mis ojos se abrieron aún más al sentir su mano atrapando la mía, y vi como terminaba lo que segundos antes había tratado de hacer, llevando mi mano a su cara y besando delicadamente mi palma.

Aún más me sorprendieron sus palabras, sobretodo que comprendiera que era algo que debía hacer. Había estado muy tenso desde que nos enteráramos de lo de Makoto, y entendía que mi intención de querer hablar con él no fuera de su agrado; sin embargo, aquí estaba, comprendiendo mi decisión, aunque probablemente no la compartiera.

Antes de que pudiera responder, se ofreció a ayudarme a limpiar, acariciando mi rostro con su otra mano, y diciéndome que comeríamos juntos después. Asentí con una sonrisa, cerrando mis ojos un momento para concentrarme en sus caricias. Pronto volví a acercarme a él, abrazándole con suavidad.

-No hay nada que sentir… - susurré, apoyando mi cara en su pecho, permaneciendo así algunos segundos, hasta que me separé de él para mirarle, aún sin soltarle. – Limpiemos, así podremos descansar un rato.

Sonreí antes de soltarle, y me dirigí al armario, dispuesta a hacerme con algunos trapos, y poder así acondicionar la habitación. Nos dedicamos a limpiar la habitación y el baño entre los dos con los poco que podíamos contar. No tardamos demasiado, y al terminar volví a por aquella lata de comida, abriéndola y cogiendo dos cubiertos, antes de sentarme sobre la cama.

-Toma. – le dije a Ben con una sonrisa, tendiéndole un tenedor.