Partida Rol por web

El grandilocuente dracónido, luego de su fallido intento de convencer al Capitán de darle algo más que la libertad de los desconocidos, se sintió apenado por haber mostrado una avaricia tan pérfida. Ser un dorado no le hacía bien a su gusto por los bienes, pues siempre los acababa justificando con su necesidad por materiales para sus obras, pero eso último sin embargo, sí lo había hecho sentir mal. 

-Sí, perdónenme ustedes por mi prueba de codicia, yo...Equivoqué nuestros motivos, a la próxima seré más justo con lo que trate de exigir-Comentó el gigante con un tono que lo hacía ver más pequeño de lo que era, claramente avergonzado, asintiendo a las palabras del Elfo, pero sin dejar de creer que los convictos de la prisión no eran precisamente su mayor interés-De todas formas, hay maneras más eficaces de demostrar la verdad de aquel hombre, sin intervenir en los asuntos de los demás. Pero mientras tanto, son una buena baza a tener en cuenta. 

Y con ello, sin dar comentarios extra a cerca de preocupaciones que podría o no tener con el contrato, firmó el papel con una letra sumamente delicada y trabajada, a pesar de firmar con sus enormes dedos, que utilizaba con un talento anormal. Luego de eso, estaba listo para partir a su contrato cuanto antes, y pasar a por recursos a la extraña tienda del hombre de la magia del lugar que, hasta ahora recordaba gracias a Ulus, se le había visto de extraña manera por la madrugada de la tormenta, pero sin recordar haber visto la figura alada que mencionaba. No le encontraba mucho sentido a ello, pero le resultaba fascinante lo que podría o no significar. Estaban a punto de partir, hasta que el pobre soldado llegó fatigado a relatar la barbarie que había ocurrido en el bar, cosa que alteró el sentido de clemencia del Dracónido, y cierta furia contra el desprecio a la vida se apoderó de sí, y si se enteraba de que una de las bajas habría sido el mismísimo Padre, igual le habría dolido no haberlo podido castigar, y que su fin hubiera sido uno tan mundano. 

Nos dirigimos a toda prisa al sitio de los hechos, aún a pesar de la tormenta que seguía con su asombrosa fuerza, acompañados por la reducida fuerza policial de la aldea. Una vez allí, y luego de escuchar el testimonio del mediano que recordó haber visto anoche, su extraño cuento de exaspero y su notable dolor, decidió comenzar a tomar cartas en el asunto, pues tal crimen ya comenzaría a ponerse sobre su jurisdicción divina. 

¡Es completamente inaceptable que algo así ocurra!-Impuso su palabra en tono estremecedor, traicionando a sus comentarios anteriores de no involucrarse con lo que ocurriese-No debemos demorar, necesitaremos más detalles de quiénes fueron los que los asaltaron, cada detalle será crucial para cazarlos como cerdos y recuperar a la mediana secuestrada. Algo me dice que sus intenciones no son buenas, más aún con tan viles métodos...¿Dijiste que usaron un portal? Magia así de poderosa no tendrá en ningún sentido buenos motivos-Comentó con un orgullo arrasador, completamente ofendido por lo que ocurrió, hasta fijarse en el maltrecho estado del...¿Enano? Su cuerpo estaba herido, pero un seguro de vida podría sacarlo de semejante aprieto. 

Si antes el camino era incomodo pues la lluvia comenzaba a transformar la hierba en barro, para cuando volvieron a la taberna se iban hundiendo sus botas en el barro y salpicándose completamente pues volvieron corriendo dada la posible urgencia de la situación. La descripción de los hechos por parte del guardia dejaba mucho que desear y no resolvía el puzzle de lo ocurrido. Maldito Padre Pierre, no podía haber muerto no aún y si lo había echo no podría hacer más que escupir sobre su rígido cadáver.

Cuando llegaron allí vieron al humano-enano medio muerto en una carretilla tirada por el mediano tuerto que en cuanto el Capitán lo pidió se puso a hablar. No le pasó desapercibido que intentó ocultarle al capitán su relación con la mediana. Escuchó con atención lo que Bellamy decía. 

Desde dónde estaba intentó ver el interior de la taberna para hacerse una idea de lo ocurrido pues aún no entendía lo sucedido.

- Thormund, si no le importa me gustaría investigar también pues soy ducho en las artes arcanas y me gustaría que el mediano se quedara para describir exactamente lo ocurrido y me muestre el lugar donde se abrió el portal cuanto antes lleguemos, quizá podamos discernir algo. Un conjuro para transportar personas requiere de un gran poder mágico por lo que si eran asesinos debían llevar algún artefacto que abriera el portal. le dijo mientras pensaba cómo podían haber abierto aquel portal. - Que lleven otros al herido al médico, Bellamy también es importante saber de dónde salieron estos asesinos. ¿Desde el mismo portal o estaban ya en el interior de la taberna?

Junto con la semielfa y el humano, Gorsha había empezado a caminar por la prisión buscando una salida. Y resulta que Dhalarinn tenía razón, no había un alma por allí que les impidiera el paso. Claro, que eso no importaba especialmente, porque la semiorca estaba dándole vueltas a lo que habían estado diciendo Daron y la semielfa. ¿En serio Juancho era el arco de Daron? ¡Pero si eso era nombre de mascota? A los arcos se les ponía nombres como Céfiro, Buscacorazones o Sir Lanzaflechington Tercero. En fin, mejor no darle más vueltas a ese asunto. Los humanos eran raros de narices.

Lo que ya no era tan raro eran esas voces que empezaron a escucharse. Eso sólo podía sigfnificar una cosa: que habían llegado a la parte habitada de la cárcel. O eso o que se había vuelto loca de remate de repente y sin previo aviso. Nah, era lo primero, Dhalarinn y Daron también habían dado muestras de escucharlo. Se llevó un deod a los labios para indicar silencio absoluto mientras se ponía a caminar de puntillas para evitar alertar a quien fuera que estuviera al otro lado de la pared. Sin embargo, la técnica de sigilo de Gorsha era tremendamente contraproducente, ya que a pesar de los esfuerzos de la semiorca por caminar en silencio, su postura de puntillas hacía que le crujieran los tendones, los músculos e incluso el propio suelo, montando una buena escandalera que cualquiera con el oído avizor podría escuchar.

El preocupado y colosal caballero, intranquilo al ver aquel hombre a punto de cruzar el umbral de la existencia a un olvido perpetuo (quizás lo estaba exagerando, quizás no), se puso al frente del cuerpo con un impulso imparable, extendió sus manos apretando los músculos con más fuerza de lo normal, abrió sus palmas y tocó el moribundo cuerpo del hombre malherido, mientras que sus manos adquirían una tonalidad brillante que liberaba ciertas partículas doradas. En un momento, las heridas del hombre/enano deberían estar completamente curadas. 

Desde la inconsciencial, la dolorida inconsciencia, Wilbur empieza a recuperarse poco a poco.

Normalmente no tiene ocasión de dormir en un sitio tan cómodo como un frio suelo de piedra (Sus padres le hacian dormir encima de cantos afilados, o de piedras irregulares. Los monjes por contra solian dormir encima de sartenes al fuego, lechos con pinchos, o leyendo D&D 4º edición)

Así que, en este agradable lecho, simplemente se acurruca, se chupa un poquito el dedo y gimotea

"Un ratito más, por favor.... ZZZzzzZZZ"

@Gorsha: -Me confunde tu actitud, humano.

¿No preferías quedarte encerrado?

Si es libertad lo que realmente ansías.

Tal vez puedas unirte a nuestras correrías.

 -Listo, con esto encerrado ya no estás.

Nosotras nos vamos a ir ya a la posada.

Echo de menos a mi hermosa espada.

Así que date prisa o te dejamos atrás.

-Querer quedarme encerrado?
lo que quería era salir callado.
Ahora ya no me queda de otra,
que seguirte dando ostias.
Al menos dejen al carcelero tranquilo,
No añadamos más crímenes al registro
Esto último lo dice señalando a Gary, era mejor que quede vivo y diga que no le hicieron nada, a que lo encuentren despedazado y les echen la culpa por la fuga.

De muy mala gana Daron acompaña a las dos mujeres en la escapada forzosa, realmente lo que quería era poder salir de ahí sin que siquiera se enterasen que se había ido, pero ya que armaron el jaleo rompiendo las celdas, además de amenazar al bueno de Gary, y más encima me roban las llaves, Daron se lleva una mano al rostro sin poder hacer nada más que adaptarse al plan de las locas por la sangre.

@Gary: -N-No-no sé si el Capitán apreciará el cambio de mobiliario...-
-¡Eh, tú! ¡Una moneda de cobre por el bollito mugriento! ¡Mi última oferta!-.

-Agradece que el mal humor ya lo pagó conmigo, mira que si no... UFFF! Seguro le tocaría cambio de carcelero- le dice Daron a Gary de muy buena fe, para que deje de intentar tentar a la orca.
-Eh, no gracias, no tengo tanta hambre, mejor dásela a tu nuevo compañero de celda para que no te coma a ti jejeje, y más te vale no intentar seguirnos- le dice al momento que cierra el cerrojo de la celda encerrando a Gary, -Ya el capitán vendrá por ti y le contarás lo que pasó, "que la semielfa y la semiorca casi te matan y yo te salvé encerrándote aquí, que conste que yo me quería quedar"- le susurra al oído antes de alejarse e irse con las salvajes.

Entonces las sigue y ve los cuerpos despedazados de los guardias de madera, unos títeres nada más, ya va, "entonces que sigilo ni que nada? el único guardia es Gary? Al menos no le pasó nada" piensa mientras camina siguiendo a la elfa por los pasillos de las mazmorras.

@Dhalarinn: -El que faltaba... Un cazador que le pone Juancho a su arco merece tener una muerte horrible y cruel. Tu mal gusto traspasa la frontera de la ropa interior, qué duda cabe. Quiero que sepas que no apruebo la conducta de mi compañera de fuga, aquí presente. Pero verla descabezar a un guardia de madera de un puñetazo me ha dejado en una especie de shock impropio de mí. En cuanto me recupere pensaré cómo vengarme de ti por rozarme con tu colita, puerco sarnoso. No creas que lo he olvidado.-

-Oye, oye, que si existen los legendarios Juan Pancho Monk Fists, puede existir el Juancho Hunter Longbow, no?- dice haciendo gala de su mala retención de nombres, que ni las armas legendarias si salvan, mucho menos las personas a su alrededor. -Y vamos, lo pasado pisado, ya no nos queda de otra que salir dando piñas a los títeres, no hace falta vengarte, que mira que me han dejado sin desayuno y no les guardo rencor :D- dice con una sonrisa muy amable pero obviamente nada creíble, y eso que Daron pensaba compartir desayuno si se esperaban un ratito más.

@Dhalarinn: -Y por cierto, el último que me llamó Darla está enterrado en un pozo de aguas negras. Prueba suerte otra vez. Vamos, te animo.-.

Daron levanta las manos como en señal de "no me mates porfis" -Bueno, bueno... Daniela? Dianell? Todo sería más fácil si tuvieras el nombre flotando sobre tu cabeza, mi nombre es más fácil "Da-Ron" ves? y si me dices Daniel no me enojo... gruñona- murmura al final rogando que no lo escuchara y le sigue sin hacer más ruido que el de sus pies desnudos tocando el piso frío hasta que por fin consiguen sus cosas -JUANCHO!!!- emocionado agarra su arco y le da un beso -Ahora si, ropita seca, calentita, y cómoda- dice mientras se viste rápidamente y se equipa todas sus cosas antes de salir de ahí. -Vaya que conoces muy bien este lugar, cuantas veces has estado en prisión?- le pregunta a Dhalarinn como para tratar de romper el hielo y que no haya tanta tensión mientras caminan fuera del lugar.

Ya una vez fuera se van hacia la posada, el camino era fácil, ya lo habían recorrido de ida y ahora solo tocaba de vuelta, pero por si acaso mejor irse por los pasajes y buscando hacer el menor ruído, no vaya a ser que en la ciudad si que estén los verdaderos guardias, y llegan a una escena un tanto... desconcertante?

-Miren, ese no es George en mi carretilla? Y el mediano que bailaba con Karla?- ve como Sobek lo cura con un hechizo de sanación rápidamente y Daron vuelve a respirar un poco más relajado al saber que su compañero seguía con vida, que por las manchas de sangre y el ojo salido no se le ocurrió que fuera la bebida, seguro le cayeron a testarazos. -No creen que... debamos acercarnos a ver que sucede? pero... Ahí están los guardias, mejor quedarnos por aquí a ver que sucede- susurra solo para sus dos compañeras pelirrojas -Donde está la niña pelirroja?-

@Ulus: - Thormund, si no le importa me gustaría investigar también pues soy ducho en las artes arcanas y me gustaría que el mediano se quedara para describir exactamente lo ocurrido y me muestre el lugar donde se abrió el portal cuanto antes lleguemos, quizá podamos discernir algo. Un conjuro para transportar personas requiere de un gran poder mágico por lo que si eran asesinos debían llevar algún artefacto que abriera el portal. le dijo mientras pensaba cómo podían haber abierto aquel portal. - Que lleven otros al herido al médico, Bellamy también es importante saber de dónde salieron estos asesinos. ¿Desde el mismo portal o estaban ya en el interior de la taberna?

-Va, adelante. Tengo un mal presentimiento sobre todo este fregao. Percy, date brío, muchacho. Guíanos a la escena del crimen. Muchachos, ojos bien abiertos. Maldita tormenta... Buscar rastros con esta lluvia es imposible. Tendremos que confiar en sus habilidades, señor elfo.

El destacamento de la guardia local está al completo tras el capitán. Son poco más de una veintena de hombres armados hasta los dientes con ballestas y espadas. Un buen número de ellos es bastante joven y no pueden disimular la tiritera en la fría e inhóspita noche.

Conforme te aventuras en el interior de la taberna, te percatas de que la inconfundible e hipermusculada figura de Gorsha sobresale sin demasiada cautela por la esquina de una casa cercana al Ernie's.

Sería lógico preguntarse ¿¡QUÉ DEMONIOS HACE AHÍ LA SEMIORCA?!

Antes de dirigirse al interior de la taberna, Bellamy observa con evidente asombro la manifestación de poder divino de Ser Sobek sobre el inminente cadáver de Wilbur. La luz sagrada que emanan las manos del dracónido parecen sanar gran parte de las heridas del enano, o al menos las más graves. Ahora los estertores se intercambian por ronquidos apacibles.

-Fiuuuuuu... Tu intervención ha sido providencial, amigo.-, dice el mediano sonriendo al paladín. -Ya me veía negociando con el chalado de Meliador para que le suturase a cambio de su bazo... o algo peor...-. Bellamy se rasca la cabeza mientras sonríe.

-Hora de despertar al larguirucho este... ¡¡¡WIIIIIILFREEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEHHHHHHHH!!!-, Bellamy se desgañita lanzando un ataque sónico en la cepa de la oreja de Wilbur. -¡Despierta, haragán! ¡Sé que no estás muerto!-. Bellamy empieza a meterle el dedo en la napia al clérigo, pero sólo fugazmente, pues en una de sus incursiones su índice regresa con premio. -¡Puaj...! ¡Qué poco higiénico...! ¡WILFRED, DESPIERTA YAAAA! ¡¡Kendra nos necesita!!

Ante el carraspeo del Capitán y de Ulus, el mediano finge una tos nerviosa y aclara su garganta mientras les acompaña a la habitación de la planta superior donde aconteció la refriega.

-Ehm, sí. Verán, todo fue muy rápido. Había aquí unos sacerdotes reunidos. El cabecilla del grupo, un tal Pierre, preguntaba y preguntaba cosas sobre Gorsha y Daron. Los supuestos alborotadores, vaya. Pues bien... ¡No eran sacerdotes! Eran asesinos entrenados. Me atrevería a decir que verdaderos profesionales. Menuda impresión cuando el gordito retaco se convirtió en un asesino imponente... Wilfred y yo logramos abatir a dos con bastante esfuerzo, pero durante la refriega abrieron un portal en la habitación en la que sucedió todo y se llevaron a Kendra, la mediana, con ellos. Creo que usaron un pergamino. Al menos, eso me pareció a mí. Dijeron algo de un "admirador". Creo que Kendra puede estar en serio peligro...-. Estas últimas palabras las pronuncia con visible tensión en el rostro.

-Eh, Ulus... ¿Sabes dónde están Gorsha la bárdaba y Tigretón? Tengo sus... tos, tos, armas... a buen recaudo...-, susurra al elfo el astuto Bellamy sin que se percaten el Capitán o sus guardias.

Como brujo, tus conocimientos te resultan especialmente útiles en este momento.

Hay una corriente de energía mágica en el ambiente en la habitación a la que os dirige Percy, la que corresponde con el dormitorio de Gorsha. Lo que os cuenta Bellamy sobre el portal es tan cierto como cree el mediano. Los asesinos han abierto una puerta hacia un lugar que os es imposible de conocer con certeza, si bien los portales de entrada y salida no pueden estar a más de unos 1.000 metros, 2.000 metros como mucho. Un hechicero poderoso podría abrir un portal a más distancia, pero un pergamino no puede permitir despliegues de magia tan asombrosos. El radio de búsqueda, por tanto, no es desmesurado.

Por otra parte, hay un hedor en la habitación, aparentemente sólo perceptible para ti. Es bastante fuerte y te perfora la nariz como una fragancia ácida y algo cargante, bastante repulsiva. Crees firmemente que, si te concentras, podrías seguir el olor de la habitación en la tormenta...

Como Paladín, tus habilidades son especialmente útiles en este momento.

Mientras inspeccionas con Ulus la escena del crimen, te percatas de que hay un hedor en la habitación, al parecer sólo perceptible para ti. Es bastante fuerte y te perfora la nariz como una fragancia ácida y algo cargante, bastante repulsiva. Crees firmemente que, si te concentras, podrías seguir el olor de la habitación en el exterior, a pesar de la tormenta...

-De acuerdo, esto pinta francamente mal. Una veintena de guardias rodeando la taberna e inspeccionándolo todo. Si queremos recuperar vuestras armas...-, Dhalarinn hace un silencio. Luego mira a Daron con gesto hosco. -O a Juanchito, el arco de tejo peor bautizado de la historia, vamos a necesitar una maniobra de distracción de leyenda.

-Hermana, ¿se te ocurre algo que no implique la decapitación a puñetazos de un regimiento de guardias? Tú, calladito. Tengo una flecha que lleva tu nombre. Recuérdalo. Ahora hablamos las pelirrojas.- Dhalarinn señala con un afilado dedo a Daron mientras le gruñe con una mueca animal.

El Ernie's está bastante alterado tras el crimen. Sin embargo, os llama la atención que la totalidad de los parroquianos aseguran no haber oído nada de nada durante la supuesta reyerta, y ello a pesar de que Bellamy la describe como una lucha encarnizada.

El tabernero está especialmente afectado porque le han secuestrado a una cliente, le han cosido a puñaladas a otro, han matado a dos guardias y la habitación que antes ocupó Gorsha está cubierta de sangre. Y él tampoco se ha enterado de nada. Pobre Ernie.

Los cadáveres de los guardias muestran signos de haber sido apuñalados por sorpresa. Uno de ellos está junto a la escalera, justo al subir a la planta superior del Ernie's. Le hundieron una daga por la espalda. El otro, degollado, yace inerte en el dormitorio de Gorsha.

La habitación parece un campo de batalla a juzgar por la sangre vertida. Llama la  atención que no hay más cadáveres que el del guardia degollado. Bellamy mencionó que abatieron Wilbur y él a dos asesinos, pero no hay rastro de sus cadáveres. Sí encontráis bajo la cama lo que parece una hoz con una forma aterradora. Parece un arma de los asesinos. La empuñadura parece rota. Con todo, demasiado exótica para las tierras del Valle. Es una pieza de artesanía, no os cabe duda. Ha sido diseñada para sobrepasar los escudos y abrir heridas muy difíciles de cerrar. El arma de un sádico. (*)

Otro detalle: La atmósfera del local está cargada de electricidad estática. La habitación ha sido testigo del empleo de magia poderosa.

Quienquiera que esté detrás del secuestro de Kendra, son verdaderos profesionales. 

Kendra siente que la cabeza le da vueltas cuando toda la habitación se distorsiona y cambia para mostrar su verdadera realidad, la de un sótano oscuro y tenebroso. Aunque una parte de ella se siente en algún recóndito lugar del subconsciente aliviada ya que esto encaja mejor con lo que había imaginado, la inquietud empieza a crecer exponencialmente en su corazón al percibir la eficacia del artificio usado por el siniestro personaje que se encuentra con ella. Parece que no podrá confiar en nada, ni siquiera en sus sentidos...

Lamento deciros que eso no era empanada de pollo. Es un truco que adoro, lo admito...

Kendra nota un sabor desagradable en la boca y observa con asco el moho de lo que parecía una jugosa empanadilla de pollo. Reprime una arcada lo mejor que puede y se aleja de la mesa con precaución. Su vena optimista no puede evitar pensar que podría haber sido peor vista la cantidad de opciones asquerosas que tenía a su disposición...Al menos las cartas empiezan a ponerse sobre la mesa...Su cabeza empieza a funcionar a mil por hora, intentando captar los detalles del lugar en que se encuentra, del violinista, de cada una de sus palabras. La Hermandad Invisible...¿He oído alguna vez hablar de ellos? Está claro que son alguna clase de asesinos profesionales. ¿Contratados por quién? ¿Quién puede guardarme semejante clase de rencor y tener los medios suficientes para montar aquel espectáculo? Así que me tendieron una trampa para que acabara en Tilford...Alguien se está tomando muchas molestias para torturarme...Porque de eso va todo esto...Quieren jugar conmigo. Que sufra antes de morir. Creo que estoy metida en un buen lío esta vez...Si tengo que morir no lo haré como una cobarde, no les daré esa satisfacción...

Aprovechando el silencio del violinista mientras guarda su instrumento se dirige a él, consciente de la crueldad que demuestra lo mucho que está disfrutando con la situación. Así que tú eres la carta de presentación de tan elaborado plan de venganza...La verdad es que eres efectista - dice Kendra con una media sonrisa mientras observa la mesa. Tienes que reconocer que visto lo visto la empanadilla no fue tan mala elección... Por cierto, gracias por la canción de antes. Un regalo inesperado de manos del verdugo. La recordaré y no será con rencor..." - y lo dice con sinceridad. Los maravillosos recuerdos aún siguen grabados en su retina con una intensidad inusitada y espera que le den fuerzas para lo que está por venir. 

Ahora, milady...Hay una persona que arde, literalmente, en deseos de hablar con vos. No le reconoceréis, pero no temáis. Eso no hace sino dar más intriga a la situación. Una confesión: adoro el suspense. Hasta siempre, milady. El placer ha sido mío. 

Kendra se pone en guardia. Todos sus músculos se tensan mientras la habitación empieza a quedar a oscuras. El silencio es total y se le clava en el alma como un cuchillo afilado. Al menos parece que por fin conocerá a la persona que está detrás de todo. Yo que nunca le he hecho mal a nadie... Bueno, es verdad que a veces he robado, pero nunca a nadie que no pudiera permitírselo...Y aquella vez que le prendí fuego sin querer a la cocina de Ruperto Valdruetegui, pero ¿a quién se le ocurre guardar el curry INFERNO junto a la reserva de carbón? También vendí el remedio milagroso para calvos, pero ¿cómo iba a saber yo que era temporal? ¿De verdad puede generar tanto odio la calvicie en una persona?  No lo tengo del todo claro...aunque no se me ocurre ni remotamente otra razón por la que alguien pudiera querer matarme...Al menos ya no tengo hambre...

En estas divagaciones se encuentra cuando la puerta se abre con lo que a Kendra se le antoja un efecto especial sonoro de historia de terror de serie B contada a la luz de una hoguera. No se ve una mierda...Parece un señor viejo...Kendra se esfuerza por percibir algún destello luminoso que ponga de manifiesto su calva reluciente. 

¿Me...me reconoces...?

 - Ehh...Ya que parece que hemos empezado con mal pie, voy a serle brutalmente sincera...No, no le reconozco. Aunque no debería tomárselo como una ofensa, es que aquí no se ve un higo..."

Hmmmm, aquello no le gustaba nada a la semiorca, que entrecerró los ojos mirando suspicazmente toda la escena. Estaba claro que necesitaban un buen plan, ya que sus habilidades de sigilo tenían un límite, el límite de la visibilidad. Porque o encontraba la manera de volver sus 146 kilos de bárbara completamente invisibles o les iban a descubrir sí o sí. No, ahí la fuerza bruta desgraciadamente no servía de nada. Bueno, sí que servía, pero no para lo que pretendía Gorsha, que era recuperar su equipo y seguir respirando.

Así que no le quedaba otra que hacer lo que peor se le daba: pensar una estrategia. Y no una cualquiera, sino una que funcionase correctamente. Hmmmmm... Cómo odiaba tener que usar la cabeza para pensar tanto en vez de para romper cosas.

-No tenemos muchas oportunidades.

Ese ejército es numeroso.

Pero si somos cautelosos.

Superaremos las adversidades.

Yo voto por un plan de directa aproximación.

Acercarnos a los guardias allí apostados.

Y mentirles sobre cómo fuimos liberados.

Para que nos crean aliados en esta cuestión.

No era la idea más brillante, pero era una idea. Idea que sólo funcionaría si se enfrentaban a los guardias, sin más participantes o testigos presentes. Porque mentir sobre una posible decisión tomada por el capitán estando él presente... Pues como que no iba a salir bien.

 -Y si ese plan no os causa satisfacción.

Siempre podemos recurrir a la clásica distracción.

Un cebo visual o sonoro en la dirección adecuada.

Hará que todo el mundo vaya hacia allí en manada.
 

Después de haber delirado un poco, y vestirse con ropas imaginarias por el hambre que llevaba y alucinar con que recuperaba su arco, se da cuenta en la tormenta con el frío que seguía desnudo, sin su armadura, recordando que efectivamente estaban en la taberna y nunca habían llevado las cosas como evidencia, que mala organización por parte de los guardias, a ver si después se le envía una carta a Gary para que le diga a su superior, seguro que el si hace las cosas administrativas bien hechas, que vamos... algo bien deberá hacer el pobre muchacho.

Una vez viendo la cantidad de guardias cubriendo la zonna alrededor del Ernie's se agacha un poco más para tratar de evitar ser descubierto.

-Hermana, ¿se te ocurre algo que no implique la decapitación a puñetazos de un regimiento de guardias? Tú, calladito. Tengo una flecha que lleva tu nombre. Recuérdalo. Ahora hablamos las pelirrojas.-

-Yo opino... que mejor escucho sus planes- dice Daron callándose mejor cuando recibe tremenda amenaza -No voy a opinar nada, pero quizás, algún local conozca alguna puerta trasera al Ernie's, que uno de nosotros, el más calladito se escabulla, y agarre todas las cosas, y luego salga como rata por los rincones y voilá, pero no no no... ese plan no lo dije yo, solo lo estoy pensando en voz alta... igual, ni siquiera se si haya una puerta trasera, ni tampoco conozco a nadie que conozca la zona y pueda conseguir una "puerta" trasera oculta...- dice Daron a fin de cuentas en un tono un tanto sarcástico para la semielfa. Entonces escuchó la idea de su compañera Orca:

 @Gorsha: -Y si ese plan no os causa satisfacción.

Siempre podemos recurrir a la clásica distracción.

Un cebo visual o sonoro en la dirección adecuada.

Hará que todo el mundo vaya hacia allí en manada.

-Oye eso suena como un buen plan,
y decías que se te daba mal pensar-

Responde apoyando realmente la idea 
-Una flecha a una campanada,
y seguro que se van en manada-

Cita:

Ante la llamada de su nombre yo, el bueno de Jorge, o Wilbur, o Willfred, o SantiAbasK, o como le quieras llamar, me despierto de un salto

"¡Si, amo! ¡Enseguida me pongo a hacer el desayuno para los 500 miembros del templ... eh... esto..."
"Q... ¿Que ha pasado? Lo último que recuerdo era que estaba hablando con DOC, y antes de eso... antes..."

Entonces los recuerdos vienen a mi

"Oh, pequeño ¿Estas bien? ¿Y como está la excelsa Kendra?"

Tras ver que un paladin draconiano (Algo de moda ultimamente) y mis heridas suturadas, no ver a Kendra por ninguna parte, y que el Mediano está triste, entonces mi mágicamente mejorada inteligencia (Y sobre todo mi habilidad de ver más allá de la 4ª pared) me hacen ver el percal.

"Creo que os debo la vida, Señor Paladín" le digo con una reverencia. "Soy Jorg... esto... Wilbur Nitales, Sacerdote al servicio de DOC, el guardian y señor del tiempo. Pero me temo que por el momento, mi atención está con el secuestro de la inocente Kendra"

Y se me vienen a la cabeza las palabras de Doc "Necesitaras Aliados ¡Aliadooooooooos"

"Mi señor Paladin, y señores aventureros ¿Me ayudarían a intentar liberar a una inocente, de una horda de asesinos y maleantes?