Partida Rol por web

La Venganza de los Cicatrices Blancas y otros relatos

Capítulo I - Noche de tormenta

Cargando editor
25/06/2019, 11:10
Director

Notas de juego

Puedes y debes.

Narra tu uso de Detectar magia y las tiradas de Arcana/Percepción que quieras emplear. Tendrán premio... ^^

No olvides especificar para qué quieres usarlas ;)

Cargando editor
25/06/2019, 11:46
Jorge Wilbur Nitales

Sintiendo el Ozono en la zona, la electricidad estática y el hecho de que, en mis ultimos segundos de semi-consciencia vi como usaban un portal, decido que es el momento. Me he estado conteniendo, si, pero ahora es el momento de que esperabamos: El momento de usar El Poder.

"Sabed una cosa, voy a usar EL PODER"
"Porque ¡Yo tengo El Poder!"

"Me refiero a El Poder de Detectar Magia, y esas cosas"

 

Y dicho eso, uso el hechizo. Concentrandome todo el tiempo que haga falta y sea posible (Es decir, 10 minutos) y rebusco cada aura mágica, buscando pistas, y tratando de discernir todo lo que en ella haya.

 

Saco una lupita, un bloc de notas, unas pinzitas y empiezo a buscar, y rebuscar, y requetebuscar...

"Levanta el pie del suelo, pequeño Bellamy. Ese pie no, el otro pie. Ese tampoco, EL OTRO PIE"

- Tiradas (2)
Cargando editor
25/06/2019, 17:10
Patrick Bellamy

"Levanta el pie del suelo, pequeño Bellamy. Ese pie no, el otro pie. Ese tampoco, EL OTRO PIE"

-No sé a qué demonios te refieres con "pie", Wilfred. En mi familia decimos "piese". ¿Te refieres a esto?-, agita alegremente su pie descalzo con una mata de pelo rojo, apartándose de la trayectoria del súbito afán investigador del clérigo enano. -Esto, amigo mío, es un piese de bailarín de los Bellamy de toda la vida. Eh, Wilfred... ¿Me estás escuchando? Ni caso... ¿Qué haces olfateando el suelo? Wilfred... Ejem... Levanta. Te están mirando todos con gesto de perplejidad y me estás haciendo sentir incómodo... Señores, no se alarmen. Le... Le golpearon la cabeza y... Le golpearon MUY fuerte y... ¡WILFRED! ¡TIENES DIGNIDAD! ¡RECUÉRDALO! ¡DEJA DE OLISQUEAR LA COLCHA DE LA CAMA DE LA SEMIORCA! ¡AHÍ NO VAS A ENCONTRAR PISTAS! ¿QUÉ ESTÁS CANTANDO AHORA MISMO? Dios, cuando pone los ojos en blanco y entra en trance me dan escalofríos...-. 

Cargando editor
25/06/2019, 17:19
Director

1) Hay un penetrante hedor en la estancia. Magia negra, con toda probabilidad. Es un olor muy penetrante, difícil de olvidar. No te costaría demasiado seguirlo incluso a través de la tormenta. No proviene del portal.

2) El conjuro empleado para abrir el portal es un medio de transporte bastante socorrido por magos y hechiceros. Cuando el conjuro se emplea por un practicante de la magia que lo ha memorizado, puede transportarte hasta 5 kilómetros a la redonda. Si se emplea en pergaminos pierde potencia, pudiendo transportarte entre 1 y 2 kilómetros. Podrías deducir, por tanto, que Kendra debe estar en alguna parte en un radio de 2 kilómetros de vuestra posición como mucho.

3) La hoz no tiene ningún significado para ti, más allá de ser el arma ornamental de un asesino. Provengan de donde provengan, los asesinos son bastante peligrosos, lo que te plantea dos dudas lógicas:

3.1) ¿Qué ha podido hacer Kendra para atraer su atención?

3.2) Tales profesionales deben carísimos. Asesinos de reyes y nobles. ¿Quién puede permitirse semejante despliegue de dinero para atrapar a una mediana...? Aunque claro, Kendra no es CUALQUIER mediana, ¿verdad? ^^

Notas de juego

Las tiradas son lo suficientemente buenas como para hacer una buena exhibición detectivesca.

Cargando editor
25/06/2019, 17:45
Jorge Wilbur Nitales

No todo el mundo lo sabe (Porque no todo el mundo usa pergaminos) Pero los de peor calidad, al usarlos, arden y dejan una montañita de restos.

Y esto es una de las cosas que he buscado, arrastrandome como un cerdito que busca trufas (¿Que? Creiais que iba a decir como un sabueso? ¡Anda ya! ¡Las trufas estan mejor!

"¡Lo tengo!" digo levantando un trocito de pergamino "Escrito en piel de ratón ¡Que cutres!"
"Normalmente, puedes usar pergaminos con gran nivel de poder, pero con la piel de una rata, apenas les ha llegado para un gran hechizo. Se han teleportado a algun lugar en menos de dos Km. a la redonda, lo que significa que siguen en Tilford. La Divina-Divina Kendra es lo bastante astuta, sabia y capaz como para no dejarse sacar de la ciudad sin que la noten"

 

"Por otro lado... he encontrado un rastro de magia negra. Más negra que el culete de el famoso Negro del Whatsapp" (A todas luces, la fama de semejante individuo ha llegado incluso hasta aquí) "No viene del pergamino, así que creo que no son las hueyas "Que salen de aqui", sino mas bien "Las que vinieron". Creo que... hay algo ¿Podeis seguirme?"

Dicho esto, agarro mi Bastón de la Paz.  (Un Palo que como te acierte en la cocorota, de seguro descansas en paz) y procedo a guiar al resto, siguiendo el rastro de magia Negra, NEGRA.

Notas de juego

El master es racista con tanto de magia NEGRA.

¡Racista!

Cargando editor
25/06/2019, 18:34
Ulus Siannodel
Sólo para el director

Se estaba yendo todo al traste, su intención de ir a las montañas se retrasaría más de lo esperado, con aquellos dos en la carcel, si bien tenía por seguro que realizando la misión para pagar su condena, obtendrían el favor del pueblo. Pero mira por dónde, se habían marchado un rato de la maldita taberna y se habían encontrado con el humano-enano casi muerto de no ser por el dracónido y la mediana desaparecida, con un rastro de sangre y cadaveres de guardias y un portal mágico como firma y rastro.

Jarlimor, no le había dado plazo pero esperaba no meterse en tantas molestias. Quizá si hubiera partido sólo hacia las montañas hubiera resuelto el mandado más rápido. Pero no, tenía que infiltrarse entre la gente con aquel maldito colgante que le transformaba en un puto elfo de los bosques, de esos cantarines y saltarines. Los que más odiaba.

Por lo menos, hasta ahora se había dado a valer y se había ganado parcialmente la confianza del pesado del capitán, ese de los relatos aburridos, y que por lo menos tenía un fuerte control sobre los acólitos y Pierre que le ayudaría y ahí estaba el otro tema. El puto del Padre Pierre podía haber muerto antes de poder vengarse y asesinarlo en silencio, tenía que ser rápido y averiguar que había sido de él mientras disimulaba y buscaba a la problemática mediana.

Su sorpresa fue mayúscula al descubrir el pastel. El puto Padre Pierre era un puto asesino que había jugado con ellos, dividido al grupo y conseguido su objetivo casi sin despeinarse. La humillación en estos momentos era doble pública y personal. Era él el que jugaba con las personas, no jugaban con él. Quien quiera que fuera aquel pútrido impostor, había tenido tiempo de estudiar la zona, sus gentes o directamente había accedido a toda la información a base de torturar y mutilar al verdadero Pierre y sus acólitos. Sin duda, casi admiraba su trabajo, tanto que tenía que eliminar a ese hijo de puta bastardo. Kendra, en ese momento le importaba una mierda, y su misión había quedado parcialmente detenida, ahora debía de encontrar a ese hijo de su puta madre, humillarlo y matarlo y matarlo.

Pero estaba en desventaja, no disponía de los servicios de Kylorien para desplegarlos, mientras que aquel miserable disponía de todos los suyos. Y ni se le ocurría meter en esto a Nathyra en todo esto. Ante la multitud se mantenía estoico pero cualquiera que hubiera leído su mente hubiera notado lo irritado que estaba. 

Se disponía a pasar hacia la taberna cuando a través de la esquina de una casa pudo ver a Gorsha. Pero que cojones, hacía allí y de seguro la mestiza y el saco de pulgas estaban con él, pero visto con perspectiva, su huida del calabozo le servía para enfrentarse al maldito hijo de puta que el había tomado el pelo.

De la misma el oportuno de Bellamy preguntó por los presos y Ulus sonrió y aprovechó para decírselo también al capitán.*

 

Notas de juego

Es una pena que Kendra no pueda leer esto xD porque se desvelaría que sigue siendo un elfo oscuro, pero creo que le molaría jajajajaja.

Se verá en el siguiente post público.

Cargando editor
25/06/2019, 18:56
Ulus Siannodel

El puñetero del Padre Pierre había acabado siendo un puto asesino, aquello hizo que Ulus se quedara pensando mientras seguía escuchando a Bellamy. La situación era muy complicada pero el capitán había aceptado que le acompañara a investigar, por suerte. Cuando se disponía a entrar a al taberna, sus sentidos captaron en una esquina de un edificio a Gorsha, e imagino que si ella estaba allí, la mestiza y el saco de huesos estaban con él, y que aquella mestiza no debía de ser la primera vez que había estado en aquel calabozo. Justo en ese momento Bellamy le preguntó por ellos y Ulus no pudo más que sonreir sarcasticamente.

- Señor Rothgar, acérquese un momento. Bellamy me ha preguntado por los presos. Le iba a contestar que se encuentran presos en el calabozo. Pues bien, si tiene sus pertenencias a mano, manda a un par de guardias con sus pertenencias en aquella dirección. Sé lo que el dracónido y yo hemos firmado y si hace falta lo haremos por nuestra cuenta sin contar con esos locos. Pero en este momento y tras el relato de Bellamy, sólo espero que les tienda sus pertenencias como le he indicado y que por favor nos ayuden a encontrar a esos asesinos. Después ya ajustaremos cuentas con ellos, sobretodo después de saber que ha ocurrido con el pobre Gary. Tras decir esto señalo a la esquina en la que estaban aún en pelotas y volvió hacia el interior de la taberna. - Te seguimos mediano, veo que te preocupa mucho tu "prima Kendra".

Los parroquianos estaban bien alterados y entre ellos mientras pasaba buscó de reojo, alguno que no mostrara tanto nerviosismo y sin embargo estuviera vigilante. Si eran tan buenos como parecían, además de ser capaces de alterar su apariencia, de seguro habrían dejado a alguno atrás para vigilar lo que sucedía e informar en caso de que su misión estuviera en peligro. Ese falso Pierre era muy astuto pero no sabía que el elfo era más astuto de lo que parecía. Podía haber utilizado su magia para detectar magia de alteración de aspecto pero el tiempo era vital y se la reservaba para detectar el rastro del portal.

Cuando avanzan por el piso de las habitaciones el rastro de sangre es visible y los cuerpos de los guardias, el hedor de la muerte está en el ambiente junto a un ligero olor metálico del uso de la magia mezclado a la sangre, pero sentía que había un olor más que dejaría para después. Y si el olor no era suficiente el ambiente estaba cargado de una alteración del tejido mágico, quizá a causa del portal, quizá a algo superior. Sólo había cadáveres de los guardias pero no había ninguno de los hombres que habían mencionado abatir.

- Mediano, habías dicho que habías acabado con dos. Vistes como se los llevaban en el portal o cuando sacaste el cuerpo del enanón dejaste atrás sus cadáveres? Puesto que si es esto último, los que marcharon a través del portal no eran los únicos asesinos en el lugar. Es importante que lo recuerdes. Además, sería interesante si supieras decirme que razas, pesos o alturas podrían tener cada uno de los asesinos pues las huellas trazan un ligero baile de un lugar a otro y me cuesta diferenciarlas. Le urgió. Con la información que le dio Bellamy en su mente y viendo el rastro de las pisadas y las salpicaduras de la sangre, Ulus fue rehaciendo la escena en su mente. Los guardias sorprendidos. Una rápida rencilla y vistas las pequeñas huellas dirigirse hacia un punto donde otras huellas más grandes desaparecían. Todas al mismo punto. Con el foco del portal encontrado, revisó un poco más la habitación encontrandose con un arma poco común. Una hoz de extraño diseño. Con su daga partió un gran trozo de la sabana manchada de sangre y la recogió sin tocarla con sus manos. La examinó muy coincienzudamente pues sabía que no era un arma común entre asesinos pues su manejo no era sencillo para asesinar. Un minuto estuvo revisandola hasta que la envolvió con la sabana y se la entregó al Capitán. - Que guarden esto con mucho mimo sus hombres. Quizá la persona que regente el bazar pueda decirnos más de su origen. ¿No crees?

Finalmente cuando sacó su libro y comenzó a realizar un ritual mágico que le permitiría inspeccionar los auras mágicos del lugar, que a su vez, el enanón también se puso a hacer lo mismo. No estaba demás que lo hicieran ambos aunque no confiaba en el juicio de un humano que decía ser enano.

Ambos acabaron el conjuro más o menos a la vez y se pusieron a investigar. El enanón de una forma un poco peculiar, destrozando todo rastro de pruebas posible, aunque por suerte ya había grabado todo en su mente y había sacado lo más importante. El elfo por su parte examinó el lugar dónde debía de haber estado el portal y gracias a su magia pudo identificar perfectamente las corrientes de la magia no estaban lejos. El enanón comenzó a recitar las mismas conclusiones a las que había llegado ya. No hacía falta encontrar el pergamino chamuscado para saber que lo habían utilizado. Sólo con ver la masacre y habilidad que habían tenido hasta el momento era clave para saber que para el secuestro de la mediana que les estaba causando tantas molestias habían gastado una suma de oro muy grande.

Se intentó concentrar entonces en el rastro, aquello que había notado antes mezclado en el ambiente. Pero le fue imposible, maldito enanón no paraba de hablar, moverse, estropear pruebas, en fin, le estaba sacando de quicio. Pero pese a todo, fue este el que pareció encontrar un rastro, que no dudó en seguir. - Sigamosle. Le dijo a Bellamy y el capitán. - Esperemos que los que debieran de estar presos estén ya preparados para unirse a nosotros y seguir a aquellos que han perturbado el lugar y además les enviaron a la carcel injustamente. Pues hablaban en nombre de otros.

Al volver a bajar a la taberna, volvió a fijarse de nuevo, pero esta vez con su conjuro de detectar magia aún activado. Si alguien le había llamado la atención antes un poco esta vez podría saber si estaba alterado mágicamente y apresarle. Si Wilbur no había dado bien con el rastro, teniendo a uno de ellos apresado, les podría guiar hasta la guarida.

- Tiradas (6)

Notas de juego

Persuasión para que les devuelvan la equipación, un poco floja :S, pero la situación espero que lo enmende.

Investigación 1 + Percepción pasiva (la investigación pasiva que da la dote no la entiendo por eso hice la tirada) para buscar entre los parroquianos a alguien que su comportamiento resulte sospechoso en cuanto a que está más vigilante que alterado o finge alteración pero sus ojos le delatan intentando no perder un detalle. Si descubriera algo le susurraría al Capitán para que mande a los guardias a detenerlo.

Investigación 2 + Historia para la hoz. Ulus, seguramente, podría saber algo de ella.

Arcana+Percepción fallida+Detectar magia para saber de que va el tema. Menos mal que el enanón va a poder seguir el rastro con su tirada. Digamos que ha distraído a Ulus con tanta exuberancia de movimientos y gestos.

Al bajar, percepción pasiva y detectar magia para hacer la misma jugada de antes pero esta vez con la ayuda de la magia.


He ido leyendo poco a poco mientras escribía el Wilbur ya ha echo lo que iba a hacer yo, aún así, dejo también mis tiradas como habíamos comentado y supervisa que el enanón sabe lo que hace. Por cierto en quinta no existe lo de elegir.

Que paliza de tarde escribir todo esto y pensar un rato.

Cargando editor
25/06/2019, 20:14
Ser Sobek Cearcall

Con un gesto caritativo y comprensivo, el Dracónido asiente con la cabeza a la gratitud que le sirven los dos desesperados. Se sentía tranquilo luego de haber salvado una vida, después de todo sus habilidades debían de servir en algún momento, para las medidas desesperadas que fuesen surgiendo. 

-No hay problema, la benevolencia de mi señor Bahamut siempre estará a disposición del más necesitado, inclusive para las razas de menor dureza-Comenta con un tono algo más terco y orgulloso que de costumbre, pues su genética le forzaban a la superioridad, aunque no la tuviera-Ser Sobek Cearcall a su servicio buen señor, Paladín de la Santa Cruzada de Bahamut y ferviente herrero de la Orden de los Artesanos. 

Luego de acabar con los rituales de cortesía, se dirigió a la zona de la masacre, el sitio donde justamente anoche había descansado de la jerga y de su enorme borrachera. Pasando por el cuarto, manchado de sangre a borbotones y con rastros lascivos de muerte y maldad, el gigante levemente se tapó la nariz, pues el hedor le estaba llegando al cerebro, más allá de lo que los demás pudieran sentir. Mientras que el grupo perceptivo lograba analizar con sumo detalle los hechos de la escena, Sobek se mantenía observando pacientemente, pues sus habilidades perceptivas se limitaban a las herramientas y poco más. Sin embargo, su mirada se quedó perdida cuando levantaron la guadaña de debajo de la cama, cosa que admiró con cierta curiosidad que le picaba en las manos. Algo habría de saber, y algo tendría por aprender de aquella forma. Era el más indicado para ello, después de todo. 

-¡Espera, espera!-Interrumpió el tosco herrero cuando el Elfo fue a entregar el arma, interponiéndose en el camino-Excúsenme por mi intromisión, pero creo que podría hallar cosas interesantes de esta arma. Soy herrero, después de todo, quién más para desvelar los secretos de un arma que quien las forja-Dijo con ansiedad, pues le ardía el pecho en deseo de saber de qué estaba hecha aquella arma y qué podría aprender de su composición-Con algo de tiempo y herramientas, podría decirles de qué metal proviene, y con un guía geográfico, rastrear su origen. 

Una vez hizo su declaración, el caballero comenzó a sentir con más fuerza cierto hedor que había ignorado hasta ahora, y que luego del testimonio del mediano y los resultados de tanto el Elfo como el ¿enano?, la tesis que tenía sobre la peste que lo jalaba a cierto sitio más allá de la lluvia se volvió más clara, más concisa y esperanzadora. Si la mediana perdida era tan importante para aquellos hombres, pues también lo sería para el buen herrero. Con encontrarla, ya tendría una razón para dejar caer sobre el pecaminoso Pierre toda la furia de su señor a modo de castigo de hierro. 

-¡Yo también tengo una pista vital!-Explotó en ánimos el dracónido mientras armaban la reyerta-Al principio pensé que eran problemas de mi nariz, pero conforme relataron sus pruebas sé que lo que huelo es lo que estamos buscando. Tengo el sentido para oler el pútrido hedor del mal, y creo que puedo seguirlo fuera del Ernie's, quizás con más exactitud que los mapas arcanos que están usando. Que me corten el brazo si el hedor tan penetrante que siento no es el mismo infundido en toda la habitación, fuera de aquí y dentro del mismo Tilford, tal como testifican nuestros detectives. 

 

 

Notas de juego

Vale, me gustaría quedarme con esa hoz pa'aplicarle un buen arquímedes y saber de qué esta hecha, que creo que debería poder xD. Y ahora voy a tratar de concentrarme en el olor maligno, van a tener al sabueso de caza Sobek para guiarlos xD. 

Cargando editor
26/06/2019, 15:54
Director

Notas de juego

Algunas notas sobre los hallazgos de Wilbur, Sobek y Ulus.

1) La hoz es, a efectos de juego, una prueba del crimen. Con esto quiero decir que vuestros PJs saben que quedarse la hoz es poco menos que imposible ahora mismo estando el Capitán Rothgar de cuerpo presente. En todo caso, la información que podéis sacar de la misma es lo que ya os he comentado: arma bastante turbia, de acero de buena calidad -herrero bastante competente el que la hizo- y muy extraña para el armamento habitual de la zona. Parece la pieza de un arma más compleja, pero esto no podéis asegurarlo. Parece que la hoja quedó separada de algún tipo de empuñadura o algo similar. En este punto merece la pena destacar que Wilbur recuerda que al menos dos asesinos usaban dos parejas de éstas.

Es IMPOSIBLE que sepáis de dónde viene. Sólo un 20 natural en un dado D20 en una prueba de Ocultismo os lo permitiría.

Wilbur haciendo tirada en 3... 2... 1... XDDDD

Ahora en serio. No tenéis ni idea de dónde proviene este arma, pero lo que sí es seguro es que tiene un filo capaz de hacer heridas especialmente complicadas de cerrar con la medicina convencional.

2) Tanto Wilbur, como Sobek y Ulus -efecto combo- son capaces de asistirse mutuamente para seguir el rastro que persiste en el ambiente. Hago mención especial de nuevo a que no proviene del portal. No vais a necesitar más tiradas para seguirlo. Que lleguéis hasta el final es otra historia, ahora vamos con ella.

3) No hay nadie sospechoso en la taberna. Esto lo digo para todos, pero lo adecuado es que el único que podría reflexionar sobre este aspecto sería Ulus por su naturaleza taimada. Podéis concluir dos cosas:

3.1) O bien no hay nadie sospechoso allí, algo bastante probable dado el ambiente de alteración general.

3.2) O bien hay alguien sospechoso MUY bien escondido.

Sea como sea, no tenéis manera de saberlo.

Cargando editor
26/06/2019, 16:08
Thormund Rothgar

-¡Espera, espera!-Interrumpió el tosco herrero cuando el Elfo fue a entregar el arma, interponiéndose en el camino-Excúsenme por mi intromisión, pero creo que podría hallar cosas interesantes de esta arma. Soy herrero, después de todo, quién más para desvelar los secretos de un arma que quien las forja-Dijo con ansiedad, pues le ardía el pecho en deseo de saber de qué estaba hecha aquella arma y qué podría aprender de su composición-Con algo de tiempo y herramientas, podría decirles de qué metal proviene, y con un guía geográfico, rastrear su origen. 

-Alto ahí, señor paladín. Estamos hablando de una pieza de convicción. Esa hoz extraña queda bajo custodia de la guardia de Tilford. Aquí ha pasado algo bastante más gordo de lo que yo pensaba en un inicio...-, el capitán os sorprende con su vocabulario técnico-jurídico. Sin duda, además de blandir la espada, la formación de ese hombre debe haber sido bastante completa, comparada con el resto del cuerpo de guardia.

- Señor Rothgar, acérquese un momento. Bellamy me ha preguntado por los presos. Le iba a contestar que se encuentran presos en el calabozo. Pues bien, si tiene sus pertenencias a mano, manda a un par de guardias con sus pertenencias en aquella dirección. Sé lo que el dracónido y yo hemos firmado y si hace falta lo haremos por nuestra cuenta sin contar con esos locos. Pero en este momento y tras el relato de Bellamy, sólo espero que les tienda sus pertenencias como le he indicado y que por favor nos ayuden a encontrar a esos asesinos. Después ya ajustaremos cuentas con ellos, sobretodo después de saber que ha ocurrido con el pobre Gary. Tras decir esto señalo a la esquina en la que estaban aún en pelotas y volvió hacia el interior de la taberna. - Te seguimos mediano, veo que te preocupa mucho tu "prima Kendra".

-Ajá...-, el Capitán escudriña en dirección al callejón donde Gorsha y Daron están ocultos tramando el plan, sin saber que acaban de ser delatados por el astuto silvano, que se esfuerza por revertir su situación legal sobre la marcha.

-Sargento.-. Rothgar habla con serenidad y tono grave. -Maniobra envolvente. Tres fugados a las dos y diez.-.

Observáis cómo algunos de los guardias apostados afuera del Ernie's inician un despliegue sigiloso con sorprendente eficacia, rodeando a Gorsha, a Daron y a Dhalarinn...

Cargando editor
26/06/2019, 16:16
Dhalarinn

-¡GORSHA! ¡REACCIONA! Maldición... La hemos perdido. Se ha colapsado pensando...-, Dhalarinn maldice en élfico mientras observa el inquietante gesto de Gorsha entornando y abriendo los ojos de forma alternativa mientras emite sospechosos "Hummmmmmmmmmmmm's". -Hemos dejado caer una gran carga sobre sus hombros, profanador de tigres.-. La mestiza parece bastante nerviosa.

En ese momento la semielfa se percata de que os rodean seis guardias que aparecen a coro de ninguna parte gritando "¡ARTO! ¡LA LEY!".

-Empiezo a detectar una tendencia... Y suele darse cuando estoy a tu lado... Grrrr...-. Dhalarinn fulmina con sus ojos animales a Daron.

Cargando editor
26/06/2019, 16:24
Thormund Rothgar

-Seré breve. ¿Sigo conservando las puertas de las celdas? Me basta unos cautos puntos suspensivos. ¿Habéis matado a Gary? Decidme que no... Es un muchacho muy inocente. Y un pésimo carcelero.-. El capitán chasquea la lengua con gesto de disgusto.

-Tenemos un buen problema aquí. Normalmente, yo os acusaría de fuga con violencia, os volvería a mandar al trullo, colocaría diez guardias dedicados a vosotros y, por la mañana, os mandaría a las minas a sacar hierro hasta que os deslomárais a mayor gloria de Lord Raelthorne. Pero...-, el capitán mira de reojo al elfo silvano y frunce el ceño. -Pero... Vuestros amigos y abogados han firmado un contrato conmigo y vais a evitar la cárcel porque necesito unos cuantos brazos fuertes para una detención urgente AHORA MISMO. Esta es mi aldea. Y nadie mata a dos de mis hombres y secuestra a una huésped de Ernie bajo mi guardia. Así pues, vosotros dos, vestíos con algo, por Tyr. Y agarrad algún arma preferiblemente roma. Como os dé por fugaros, os perseguiré hasta debajo de la mismísima Tierra y os ensartaré con Imperiosa. Y no lo haré con cariño, ¿entendéis?-, el hombre echa mano a la empuñadura de su espada. 

-Sargento, estos tres están ahora en servicio comunitario. Dadles sus pertenencias (*). Mañana les recogeremos testimonio de lo que ocurrió aquí. Y tú, Stormwalker... Vergüenza debería darte... Niña, ¿es que no puedes dejar de meterte en problemas una sola noche? Va, señores, todos armas en mano y a seguir al larguirucho ese. ¡Eh! ¡¿A dónde va?! ¡Vamos, seguidle! ¡Todos alerta!

Notas de juego

(*) Gorsha, Daron, recuperáis vuestro inventario. Lo que os ha costado... XDDDDD. Agilizo un poco la entrega del armamento, que estaba, por cierto, en la carretilla XD.

Cargando editor
26/06/2019, 16:38
Dhalarinn

-Pfffff... Imperiosa... ¿Es que nadie sabe bautizar a su arma?-, masculla Dhalarinn mientra entorna los ojos. Luego observa el reencuentro entre Daron y su fiel Juancho y logra reprimir con dificultad una arcada. -Oooooooh... Por favor... Dime que lo mataremos juntas mañana. ¡Júramelo!-, suplica a Gorsha.

-Trabajos comunitarios... Esta es la séptima vez que me castigan con esta modalidad.-. La mestiza observa a Ulus intercambiar algunas palabras con Bellamy y en cierto momento sus miradas se cruzan. -Te... estaré... vigilando...-. Musita muy despacio llevándose dos dedos a sus ojos y luego apuntando al silvano.

Antes de ponerse en marcha, la semielfa contempla la figura acorazada de Ser Sober, que parece olisquear nervioso el aire.

-Rrrrrrr... en armadura es aún más imponente, ¿no te parece?-, comenta entre ronroneos a Gorsha antes de iniciar la marcha.

Cargando editor
26/06/2019, 16:44
Patrick Bellamy

- Mediano, habías dicho que habías acabado con dos. Vistes como se los llevaban en el portal o cuando sacaste el cuerpo del enanón dejaste atrás sus cadáveres? Puesto que si es esto último, los que marcharon a través del portal no eran los únicos asesinos en el lugar. Es importante que lo recuerdes. Además, sería interesante si supieras decirme que razas, pesos o alturas podrían tener cada uno de los asesinos pues las huellas trazan un ligero baile de un lugar a otro y me cuesta diferenciarlas.

Bellamy se rasca la cabeza y mira a ambos lados, como queriendo que la conversación quede en privado entre Ulus y él.

-Estoy seguro de que se los llevaron con ellos. Ensarté a uno hasta la empuñadura y no se quejó. No gritó de dolor. No dijo nada. Wilfred logró aplastarle el cráneo a uno de ellos y apenas si dijo un tímido "Urgh". Casi se cargan a Wilfred y a mí me cosieron a puñaladas. Peleaban como una manada de lobos. Nos habrían matado si Kendra no llega a rendirse ante el cabecilla... Creo que está en serio peligro. Recuerdo que, por complexión, parecían humanos... Aunque iban cubiertos de pies a cabeza. Usaban máscaras. ¡Ah! Un momento... Había un mestizo. Un semiorco. Muy grande. MUCHO. Dijeron algo. Algo como... Yaher... Yuah... Yahar... Sí, Yahar... ¿Gul? ¿Te suena de algo? Igual me lo he inventado... (*).-. Bellamy no parece disponer de más información.

-Eh, Ulus. Me alegro de que estés con nosotros. Creo que estás algo amargado, pero no eres mal tipo.-. Bellamy lanza un tímido puñetazo contra la cadera del elfo en gesto de camaradería. -Trataré de cubrirte. Aunque...-, el mediano queda pensativo. -No sé quién va a cubrirles a ellos... No saben a lo que nos enfrentamos.-, Bellamy lanza una mirada melancólica a los guardias que marchan junto a su capitán tras Wilbur, que olfatea el camino como si fuera un basset hound.

Notas de juego

(*) Ya te avanzo que no tienes ni la más remota de lo que significa. Puede ser una consigna, pero el significado es algo completamente desconocido para ti.

Cargando editor
26/06/2019, 17:14
Director

El grupo inicia la marcha con el fanático Wilbur tras la pista de un rastro que puede conducir a la boca del lobo, pero en la mente del clérigo enano eso no importa. Sólo tiene una misión en su mente y ésa es salvar a su deidad mediana.

El capitán Rothgar marcha tras Wilbur flanqueado por Ulus y Ser Sobek. A unos cuantos pasos por detrás, sus hombres con Bellamy al frente. ¡Quién iba a decir que el mediano era integrante de la guardia local!

Y en retaguardia, vigilados por guardias de ojos congestionados por el frío de la noche, Gorsha, Daron y Dhalarinn marchan en servicio comunitario, si bien la búsqueda de Kendra incentiva sus pasos pues, al fin y al cabo, la mediana les había resultado simpática desde el principio.

Wilbur conduce al regimiento entre la tormenta para asombro de los guardias. Bellamy se permite soltar un tajante "UN HOMBRE CON UNA MISIÓN ES UN SER IMPARABLE", convencido de la fuerza de espíritu del clérigo enano. Ser Sobek asiente con gesto aprobador cuando el sacerdote duda, pues sus sentidos también le permiten seguir el profundo hedor de la magia negra en el ambiente. Y en caso de indecisión, el sagaz Ulus razona con ellos para determinar el curso a seguir.

Sea como sea, el destacamento, conformado por nuestros héroes, el valiente Bellamy, el capitán Rothgar y al menos quince guardias locales, detienen sus pasos ante la colina situada en las afueras de la aldea, donde domina la vista un antiguo y lúgubre edificio aislado: la Iglesia de Tyr.

Aquí termina el rastro.

La construcción es una imponente cruz de piedra a la que se accede por medio de una enorme puerta de robusta madera de roble. Sobre el marco de la puerta, la estatua erosionada del dios Tyr luce sosteniendo una espada con la punta orientada hacia abajo en signo de descanso, de meditación.

El viento gélido y la incesante lluvia os invita a cruzar la puerta. Mas una razonable duda pesa sobre vuestras cabezas...

¿Seréis invitados inesperados?

Entonces, una música llega a vuestros oídos, cargada de recuerdos. Algunos felices. Otros melancólicos. Son recuerdos de vuestra vida. (*)

Un violín resuena en alguna parte.

 

La melodía del violín (*):

 

Notas de juego

Indicad qué hacéis a continuación. Ahora mismo estáis los cinco justo delante de la puerta de la iglesia. Es un edificio bastante grande. Explorarlo completamente os puede llevar un tiempo considerable. Tenedlo en cuenta. Ahora es cuando quiero ver vuestra química de grupo y agradeceré mucho que se erijan líderes.

Todos: narrad un recuerdo de vuestro PJ, o unos cuantos, como veáis. Que sean felices o tristes dependen enteramente de vosotros. Sí quiero que sea un recuerdo potente, algo importante para vuestros PJs. Tomaos tiempo en pensar qué vais a narrar, es importante.

(*) Técnicamente no es un violín, pero confío en que apreciaréis el suspense del momento ^^

Cargando editor
26/06/2019, 17:37
El desconocido

El hombre, impertérrito en el umbral, suelta un graznido. Su figura al trasluz resulta escalofriante.

-Veo que tu falta de conciencia no ha perturbado tu sueño... Kendra Raspberry...-. Pronuncia tu nombre como el que deja caer un martillo a un suelo de madera podrida.

-No me recuerdas... Bien, deja que refresque tu memoria: Hairy Tale. El pueblo de la felicidad. ¿Recuerdas ahora? No. Aún no. Claro que no. Por aquel entonces, yo conservaba el pelo... y la juventud.-, los ojos del hombre emiten un fulgor hostil, un brillo de rabia primigenia. Se clavan en ti como dos zafiros estelares.

-Todos los ladrones... TODOS, sin excepción, sois ignorantes. Robáis cosas por el mero placer de quitarle algo a alguien. No es por el valor de lo robado. No... Si fuese así, robaríais sólo para vivir. Pero no os basta. Tenéis que vivir robando. Lo necesitáis. Es por el sentimiento que os produce coger lo que no es vuestro. Infringir la ley... Romper las normas... Alterar el equilibrio...-. El hombre hace un visible esfuerzo por mantener la calma.

-Cuando... profanaste el manantial, Hairy Tale se corrompió. Tú te largaste dispuesta a traficar con el agua sagrada. Supe que te fue bien... Muy bien, incluso. En tu ignorancia, mancillaste lo que hacía de Hairy Tale lo que era: una aldea maravillosa en la que vivir.-, las lágrimas manan de los ojos del hombre. Su voz se mantiene firme.

-Cuando llegaron los primeros colonos, hubo un enfrentamiento con el Círculo de Druidas. Al parecer, el manantial era sagrado para ellos y edificar cerca era considerado un acto impío por los druidas. En aquella época, mi padre, otrora el primer alcalde de Hairy Tale, negoció con los druidas para rendir tributo al manantial, algo que los druidas aceptaron de buen grado. A cambio de nuestra protección al manantial, nos permitieron vivir allí. Todos éramos felices. Las aguas nos dieron juventud más allá de la que correspondería a nuestros cuerpos por su edad. Las aguas nos dieron salud y nos dieron cosechas fértiles. Nos dieron hijos sanos y una promesa de un futuro esperanzador. Y todo eso se fue... cuando profanaste el manantial. El poder del manantial se basaba en la honradez de sus guardianes. Cuando tú nos robaste el agua para lucrarte con ella, corrompiste el manantial sagrado. Cuando tú robaste el agua... Nos robaste Hairy Tale...-.

El hombre da un paso al frente y saca una cuerda de la manga de su túnica. La cuerda tiene anudada una soga.

-Tuve una hija... Una linda y preciosa hija. Tenía una melena preciosa. De un color rojo, como la tuya. Se llamaba Hope. Se llamaba... Cuando tú te largaste con tu botín, empezamos a enfermar. Perdimos el pelo. Perdimos el vigor. Quedamos decrépitos. Nuestras tierras quedaron estériles. Y nuestros hijos... Se desvanecieron, como lágrimas en la lluvia. Busqué a Hope durante treinta largos días y treinta largas noches. Nunca más la vi. A la mañana del trigésimo primer día, regresé al poblado, marchito por dentro. Me habían arrebatado a mi pequeña. Mi esposa se había ahorcado. No pudo soportar la pena...-. El hombre cierra los ojos y su llanto es lo único que resuena en la habitación.

-Debo... Debo de tener más de 200 años. Mi final se aproxima. Puedo sentirlo. Pero no moriré aún. Escuché hablar de la Hermandad Invisible y les invoqué. Les pagué con todo lo que tenía, y más.-, el hombre adopta un gesto aterrador. -Y ahora, por fin, me cobraré mi venganza... Aunque sea lo último que haga... Kendra Raspberry...-.

Notas de juego

Cargando editor
27/06/2019, 19:48
Ulus Siannodel

Entendió por completo el recelo del Capitán y por eso el mismo le había querido entregar el arma y no se la había guardado. Si acaso ya se la pediría más tarde para estudiarla más pero el arma la debían tener las autoridades, no ellos.

- Ya tendremos tiempo de estudiarla más a fondo señor Sobek, es mejor que la guarden ellos por el momento. le dijo tras habersela entregado cuando se lo había pedido.

Una sonrisa leve se dibujó en el rostro de Ulus pues la reacción del capitán le divirtió cuando mandó a varios guardias a detener a los transfugas, entendía que aquello era un aviso para que no volvieran a hacerlo y finalmente les dejaría ir como el había pedido a cambio de que se unieran a ellos en el rescate. Su mirada directamente con el de la mestiza que le miraba con odio. Acababa de salvarla el culo por su huida pero sus gestos y su mirada eran de puro odio, tras realizar ella los gestos Ulus no les hizo ni caso y siguió hablando con Bellamy.

Todo lo que le dijo era interesante. Sin duda magia de alteración para transformar a un fornido semioorco en un humano raquítico. Pero las palabras Yahar Gul no le sonaban de nada así negó con la cabeza mientras estaba pensativo y seguía escuchándole. - Una serie de suertes nos han cruzado en nuestros caminos para colaborar pero los caminos del futuro son inciertos. Por el momento estamos del mismo lado, aunque rodeados de incompetentes. Dijo mirando al saco de huesos que ya se vestía y a la mestiza.

Al pasar de nuevo por la planta baja de la taberna volvió a comprobar  si alguien era sospechoso haciendo uso de su magia pero al igual que cuando había pasado antes no vio nada, ni magia de alteración ni nadie mirando de más. Si realmente había alguien vigilandoles era muy habilidoso.

Con Wilbur con el rastro en sus napias, Ulus verificando el camino junto a Sobek que había reconocido algo familiar. No miro atrás hacia los presos en ningún momento, no le daría la satisfacción a la mestiza de burlarse de él. Por fin parece que llegaron al origen del rastro que le pareció un tanto extraña. - Capitán, Bellamy. Antes de entrar podéis decirnos que es esto, para qué servía, si alguna vez habéis estado en el interior y lo más importante, quién habitaba aquí. Si conocéis el lugar es probable que nos ahorréis mucho trabajo pues no se encontrarán a plena vista en el interior, quizá en alguna localización oculta, como catacumbas o panteón de este lugar que parece dedicado al dios Tyr. Yo por mi parte volveré a gastar un tiempo precioso e importante en lanzar de nuevo mi conjuro. Si abrís la puerta hacedlo con cuidado pues estos hombres no han reparado en gastos y es probable que el lugar esté repleto de trampas tanto mágicas como arcanas. Mientras sacaba el libro se puso a inspeccionar la puerta buscando en la cerradura y en los bordes algún tipo de mecanismo, además de si hay indicios de que ha sido utilizada recientemente.

- Con todo lo que llueve será difícil encontrar algún rastro pero por lo que has hablado de la hija de StormWalker sería interesante que la mandarais rastrear la zona en busca de rastros quizá pueda acompañarle el torpe de los calzoncillos sin estilo creo que la podría apoyar y entre los dos cubrir más terreno del exterior del edificio. Bellamy nos ha contado lo profesionales que son así pues antes de verificar el interior lo mejor sera que veamos si existen otras entradas por las que pudieran huir cuando estemos en el interior. Toda precaución es poca. Miró entonces al enanón y al draconido. Os tiene que estar reventando que esta gentuza esté en un templo dedicado a Tyr. Creo que es el mejor sitio para que Sobek vuelvas a hacer lo mismo de antes y Señor Nitales si puede hacer de nuevo el hechizo de detección conmigo. Recorreremos más espacio en poco tiempo buscando rastros de magia en el interior del edificio que nos puedan llevar hasta la mediana. Y no estaría demás que Gorsha estuviera protegiéndonos mientras realizamos nuestro ritual mágico, en ese momento seremos vulnerables y si nos están espiando ahora sabrán que es el momento de atacar ¿Capitán? dijo y mientras esperaba que les dieran las órdenes al grano en el culo y la mestiza para explorar los alrededores y a Gorsha para que fuera a protegerlos, les diera un briefing del lugar y Bellamy pudiera hablar también del lugar o quizá alguno de los soldados, si llevaba mucho tiempo abandonado de jóvenes seguro que se habían adentrado en el lugar para hacer travesuras o contar historias de miedo.

Mientras comenzaba a realizar el ritual una música comenzó a sonar y sus mente se dejó llevar por los recuerdos mientras la magia fluía a través de él.

Volvía a estar entre su gente, toda su familia miraba mientras padre le tendía dos espadas de madera cortas y el cogía otras dos para si mismo. Había llegado a la temprana edad en la que todos los niños debían hacerse diestros en las armas. Su primera experiencia con el combate. Su padre era bueno con las espadas, una leyenda entre su gente en algún momento de su juventud pero en una expedición que había realizado se había encontrado una bestia que a pesar de haber podido acabar con ella le dejó una terrible herida en la espalda que le hizo retirarse del combate mucho antes de tiempo de lo que solían hacerlo los hombres. Aúnque no pudiera moverse como antaño era un gran profesor pues la habilidad de los infantes era prácticamente nula y sus conocimientos podrían crecer rápido con su experiencia.

En su primer día no hizo más que recibir golpes. Uno y otro. Las espadas le pesaban, apenas si podía levantarlas y arremeter y estaba tan centrado en dar una estocada que no evitó ninguno de los golpes. Acabó tumbado, lleno de moratones y muy dolorido. Apenas si se había acercado a su contrincante cuando este le había dado por todos los lados. Y aquí llego su primer y mejor consejo que habría recibido nunca. - Si quieres ganar un combate tienes que ser más listo que tu adversario y moverte más rápido que él. Y si no te ve mejor. Te he visto jugar al escondite muchas veces y ningún niño es capaz de encontrarte. Te mueves entre las sombras de un lado a otro haciendo de este tu hogar tu escondite y no te quedas en un solo lugar como el resto de ellos. Utiliza esas ventajas. Te mueves como nadie. Recuerdalo y úsalo en tu provecho.

Aquel día había sido horrible para él su primera experiencia con las armas la había tomado de forma totalmente opuesta a lo que tenía que haber sido, usó la fuerza sobre su habilidad y rapidez como había visto antes en otras confrontaciones pero no entendía que cada elfo era diferente y cada uno luchaba de forma que le favoreciera. Aquella lección le valió para afrontar el resto de los entrenamiento, en los que recibía menos golpes y era capaz de asestar algún que otro golpe. De pronto otro recuerdo volvió a él, su primera sangre.

Había pasado dos años perfeccionandose en el arte del combate y el sigilo y aunque a pesar de que en los combates de entrenamiento no podía usar el sigilo sus movimientos de pies y su agilidad le daban ventaja sobre su mentor. Pero esta vez, no lucharía contra su mentor sino contra uno de sus amigos que también había sido adiestrado. El chaval a diferencia de él llevaba una maza y escudo de madera, cosa que le sorprendió. Estaba tan habituado a sus dos espadas que no se imaginaba la posibilidad de luchar de otra forma por lo que tuvo que redirigir su estrategia para poder superar el escudo y evitar la maza. 

Ambos infantes estaba bien preparados para la batalla y estudiaban al otro para intentar atravesar sus defensas. Ulus no era capaz de atravesar el escudo pero tampoco el otro niño podía con la rapidez y habilidad de Ulus pues o bien no estaba en el lugar al que llegaba la maza o paraba con una de las espadas el ataque. El combate se alargo durante diez minutos sin conseguir que ninguno de los dos atravesara la defensa pero la ventaja llego para el otro niño cuando al parar Ulus el ataque de la maza con su espada derecha, su arma se astillo y partió por la mitad. Desesperado Ulus dio un salto atrás y se puso a la defensiva durante la siguientes arremetidas del chaval esquivando todas pero sabía que de seguir así el cansancio podría con él como ya lo estaba haciendo en el otro infante.

Fue entonces cuando los ojos de Ulus se iluminaron y lanzó una finta alta que el niño intentó parar pero sólo había sido un ardid y con el cansancio que tenía y no viendo a Ulus por haber puesto el escudo enfrente para cuando lo quiso bajar Ulus ya no estaba enfrente de él y en ese momento sintió una punzada en la columna vertebral. El arma astillada había atravesado su espalda llegando a la columna por lo que el infante cayó de inmediato al suelo inconsciente y sin hacerse esperar dos clérigas llegaron hasta el niño para sanarle. Ulus miraba con una sonrisa como su arma astillada chorreaba sangre y lo que había disfrutado con su movimiento.

 

- Tiradas (2)

Notas de juego

Investigación + Percepción pasiva para ver indicios de uso y trampas en la puerta. Si encuentra algo les dice a todos que esperen, pues también quiere asegurarse de que no haya trampas mágicas mientras Dhalarinn y Daron obedecen las órdenes que les dé el capitán. 

Listo el post.

Cargando editor
29/06/2019, 14:29
Gorsha

Al final, con tanto pensar planes y estrategias, el tiempo y los guardias se les habían echado encima. Para cuando Gorsha dejó de pensar entrecerrando los ojos y emitiendo "hmmmmm"s, tenía su equipamiento en las manos y estaba delante del capitán de la guardia de Tilford con el elfo y el dracónido de la posada. ¿Tanto había pensado? Afortunadamente había recuperado el uso de sus sentidos justo a tiempo para poder contestar las preguntas del capitán.

 -Gary se encuentra en perfecto estado.

Pero la puerta de la celda se ha dañado.

Era lo que había que hacer para escapar.

Con el mínimo de daños a la propiedad.

La verdad era que ahora que había recuperado la espada de sus antepasados, Gorsha estaba mucho más tranquila. Aceptaría el trabajo comunitario sin oponer demasiada resistencia. Especialmente cuando dicho trabajo implicaba hacer lo que mejor se le daba: partir fisionomías. Dhalarinn no parecía estar nada contenta con todo aquello y persistía con sus ansias de querer matar a Daron.

 -De momento nos puede ser de utilidad.

Así que olvídate de poderlo asesinar.

Concentra esas ansias de matanza.

Para la tarea que hay en lontananza.

Aunque en una cosa te doy la razón.

Con armadura es interesante el lagartón.

Daron no le caía especialmente bien, pero tampoco especialmente mal. Matarlo le parecía innecesario, especialmente ahora que necesitaban toda la ayuda posible para rescatar a Kendra. Porque la mediana SÍ que le había caído bien. Ya fuera por su encanto infantil que le parecía tierno o por el desparpajo que tenía que le hacia gracia, la cuestión era que no podía permitir que la secuestrara una especie de secta de asesinos o lo que fuera que había atacado la posada.

Así que, tras reequiparse rápidamente, Gorsha siguió al destacamento liderado por Wilbur, Ulus, Sobek y el capitán. El olfato del clérigo les llevó a la puerta de una iglesia desde la que empezó a surgir una extraña música. Era una melodía de violín, cautivadora y atrayente, que hizo que Gorsha no pudiera evitar viajar por su memoria, reviviendo partes de su pasado que creía olvidadas. Ahora lo veía como si lo estuviera viviendo. Su padre y su madre, de pie a su lado, entregando a una pequeña Gorsha, que acababa de cumplir los 10 años, su primera hacha de guerra.

Recordó la batalla, el metálico sabor de la sangre de sus enemigos que salpicaba su rostro, los chillidos de agonía, los cadáveres apilándose... Sí, fue un día memorable. El día en que puso a prueba sus habilidades de combate exterminando a una plaga de ratas enormes que habían infestado el almacén del pueblo. Para celebrarlo su madre le regaló el amuleto de garras de oso que nunca jamás dejó de llevar a todas partes y su gente preparó el mayor festín de rata asada que había visto en su vida. Fue un día tan feliz... Un día en el que se la juzgó sólo por su fuerza y no por su maldición. El día en el que supo que tenía que convertirse en la líder ruda y violenta que los suyos necesitaban.

El tiempo avanzó, cambiando de la Gorsha de 10 años a la de apenas 20. El día en el que recibió las bendiciones de sus padres antes de partir del pueblo para encontrar una solución al mal que la atormentaba. Cálidos abrazos compartidos entre ella y sus progenitores a la hora de despedirse la arroparon mientras rememoraba la sensación de orgullo que la invadió al recibir la espada familiar. "Lleva la cabeza bien alta, hija mía. Y recuerda que como el tótem que te protege, tu padre y yo estaremos siempre a tu lado". Las únicas lágrimas que Gorsha Urgak derramó en toda su vida fueron vertidas en ese momento. Y por un momento la guerrera tuvo que llevarse las manos a las mejillas, convencida de que habían vuelto a brotar de sus ojos para bañar su rostro. Separarse de su familia, abandonar su hogar... Había sido la decisión más dura de su vida. Pero no se arrepentía. Tenía que volver victoriosa, con la maldición derrotada y con la experiencia suficiente como para convertirse en líder guerrera de su pueblo. Por sus padres.

Cargando editor
30/06/2019, 00:31
Daron

 

Daron escucha e detenidamente el plan trazado y no le queda de otra que asentir a las órdenes de la guardia de Tilford y a las ideas de Ulus, parece que el destino de Kendra está ligado a una masacre en el pueblo y la mejor opción es moverse antes de que se pierda el rastro. Daron en ningún momento pensó en dejar atrás a ninguno de sus compañeros, después de todo si salían juntos tenían que volver juntos, así que simplemente se ajusta al plan.

-Gracias por el apoyo querida compañera,
Aunque no es necesario que me defiendas
Darlarin se cree una muy fría guerrera
Pero se que en el fondo algo le acompleja.-

Responde calmadamente Daron ante las amenazas de la elfa y el apoyo de Gorsha -No me odies tanto, que al fin y al cabo no te hice gran cosa, solo fue un accidente desafortunado, si hubieras sido más bajita te pasaba por encima, o que tuvieras mejores reflejos, no se, digo yo... Agacharse es fácil si tienes un par de rodillas- complemente de manera un tanto arrogante ante la arrogancia de Dhalarinn, ahora respondiendo más tranquilamente a sabiendas que estabamos rodeados de tantos guardias y el grupo completo, no creo que fuese tan imperiosa como para dejarse llevar por una leve provocación, pero quien sabe, igual Daron anda prevenido sin quitarle el ojo. Vaya como le gusta el peligro a este pobre sujeto.

Entonces llegan a una increible construcción con forma de cruz -Oh, miren, han de ser los Teen Titans crecidos, digo, por ese palito que sube arriba de la T, no? Ah! que es una cruz... Y ese a que es el salvador Nórdico Talos, cierto? Algo se de el- dice agarrando su mentón y mostrando su gran ignorancia ante temas religiosos o históricos mientras que Ulus y Jorge (que Daron aún no tiene la habilidad de ver los nombres sobre las fichas como para saber que se llama Wilbur) inspeccionan la zona y Ulus haciéndoselas de líder traza un plan bastante aceptable, buscar posibles entradas o salidas traseras -Yo no tengo problemas en rodear la construcción esa, pero mejor me voy por el otro lado lejitos del peligro- acota refiriéndose a Dhalarinn -Además, ojos cazadores cubren más área si se separan más que mantenerlos juntos, que ella vaya por allá- entonces se separa afilando sus sentidos para intentar percibir algo que les sirva para complementar la poca información que tienen del lugar, al menos hasta que el capitán de la guardia les cuente algun dato más.

Entonces la cabeza de Daron comenzó a apaciguarse un poco, lentamente su ansiedad y perspicacia mermaron al punto en que simplemente comenzaba a soñar despierto, recordando su vida pasada, antes de ser un viajero vivía plácidamente en la aldea con sus padres, una humilde cabaña pero bien acomodada, no les hacía falta nada, si tenían hambre solo tenían que ir a cazar algo a las afueras y con las pieles compraban verduras y arroz, y la carne la comían. Pero la comida más sabrosa que ha probado nunca en su vida fue el día que llenó su estómago no con carne, ni con arroz, ni con verduras, sino que con satisfacción y realización.

Su padre y el salieron temprano a una de sus lecciones de cacería, pero ésta vez su padre en lugar de darle técnicas le dio su arco largo y le dijo -Seguro que es pesado, hijo; pero has crecido sano y fuerte y es momento que te inicies, y no permitiré que tu primer presa sea con un simple arco de entrenamiento, así que toma mi arco, hoy día seré yo quien te observe- en ese momento los ojos de Daron, Dagoberto por aquel entonces, se iluminaron de incredulidad mientras acercaba su mano para coger el arco de hueso de su padre, pero su incredulidad se transformó en algo mágico cuando se dió cuenta que no era una broma de su padre y no quitó el arco en el último momento y efectivamente le permitió cogerlo, probar su flexibilidad, estirar la cuerda de piel trenzada y notó que era más dura de lo que pensaba, unas diez veces más difícil de tensar que su pequeño arco corto de madera -Le cambié la cuerda por una un poco más flexible hoy día, para que lo pudieras usar hasta que tengas la fuerza necesaria- le dijo su padre mientras obsevaba como Dagoberto realizaba la inspección reglamentaria antes de la cacería. Con una sonrisa en el rostro que no le permitía ocultar sus dientes aunque quisiera se puso en posición y rastreó toda la zona hasta que divisó a lo lejos un jabalí, sin decir nada preparó una flecha, uso todas sus fuerzas para tensar la cuerda y mantener el arco fijo y apuntar de frente al cuello donde no habían costillas ni huesos para ensartar directo al corazón, porque si apuntaba al cuerpo seguro que el animal escapaba, herido, sufriendo, pero vivo, y Dagoberto no quería decepcionar a su padre, ni tampoco llenar de huecos la piel del lomo de aquel animal. Entonces dejó ir la flecha sin cerrar los ojos, un chorro de energía recorrió su cuerpo como si el arco estuviera vivo y absorbiera su energía y la transmitiera directamente a la flecha justo antes de lanzarla y esta voló, girando y bailando en el aire en cámara lenta atravesando el aire hasta que se ensartó justo donde el joven Dagoberto había puesto el ojo -ONE SHOT!!!- exclamó jubiloso el padre al ver que la flecha había dado sin duda en un punto vital a la criatura y ésta solo rumió un último aliento levantándose en las patas traseras por el impacto hasta caer muerto de espaldas -Juancho?- preguntó Dagoberto siendo aun joven y no haber viajado ni estudiado otras lenguas -Si hijo mio, así se llama ésto- dijo orgullosamente el padre explicando la hazaña que había logrado su hijo en la primera cacería pero claramente lo entendió mal y solamente sonrió rebautizando sin saberlo el arco de su padre, que algún día éste le heredaría en vida antes de decidir irse de casa.

No sobra decir que el recuerdo de aquel momento aun sabe a la cena de ese día, cerdo al vino con patatas doradas aderezado con adrenalina, orgullo, satisfacción y realización personal, al fin era un cazador, y como había sido el quien llevó la comida a la mesa ese día se permitió decir lo que su padre siempre decía al comer -El que encuentre la punta de flecha lava los platos!- la pequeña familia rió y una pequeña lagrima de nostalgia recorrió su mejilla mientras las babas se le caían al pensar en tan suculento banquete sin haber desayunado aun.

- Tiradas (1)
Cargando editor
30/06/2019, 04:25
Ser Sobek Cearcall

El dracónido ya se había resignado a tener en sus manos aquella preciosa figura de metal asesina, su dulce y extraño hierro no le pertenecerían para disolver, así que habría hallado otro motivo para perseguir a los asesinos; quería una pieza de su exótico armamento. Caminaros con el sentido de búsqueda de los rastreadores: La percepción del mal del paladín y el rastro arcano que seguían el curioso clérigo y el elfo, hasta llegar a una enorme estructura que tenía toda la pinta de ser una iglesia abandonada por la erosión de las eras, cuya arquitectura era básicamente una cruz gigante hecha de fina madera, recurso que quizás en tiempos pasados pudo haber sido una preciosa empuñadura, pensó el obsesionado herrero, y también pensó fugazmente en todas las profesiones que acababa englobando su persona. Con una lánguida jocosidad que se le pasó al momento, escuchó el plan del elfo y las anotaciones del pequeño humano, quienes se adelantaron a trazar los inicios de su invasión al edificio. 

-Me da la sensación de que este edificio debe estar infestado de ese ácido olor maligno que huelo desde el Ernie's-Comenta con un tono de enfado creciente, cayendo en cuenta que un lugar sagrado había sido profanado de aquella manera-Es una blasfemia, y les confirmaré en momentos que lo que pienso es cierto, todo el edificio debe de oler a villanía, pero el olor deberá de estar concentrado en donde estén los impuros a los que buscamos. 

Habiendo declarado sus intenciones, se acercó con la postura facial de un perro y comenzó a olfatear concentrándose en el hedor característico de la taberna, recordando su sensación y ahora tratando de hallarla dentro del edificio mancillado. Abrió la puerta ligeramente, tratando de no hacerlo en su totalidad, un pequeño resquicio lo suficientemente amplio como para que el hedor escapara de la jaula en donde estaba, y fue abriendo más y más la puerta, con la misma delicadeza hasta que pudiera sentir un rastro exacto que despertara la peste que buscaba. Mientras la abría, recordó cómo no solía ser demasiado explícito con sus palabras, que sus acciones grupales se limitaban a la ayuda, pero que el camino solitario le solía hacer sentir un poco más cómodo en lo que hacía. 

Sin caer en cuenta de la dulce música que sonaba, fue cayendo más y más rápido en su gusto adquirido por el camino de un solo hombre, y lo mucho que lo había practicado durante toda su vida, su larga vida. Recordó la primera vez que despertó su furia sagrada, el primer momento en el que el santo poder de su Dios Bahamut lo envolvió en fuego sagrado, y lo mucho que le ardieron los ojos luego de haber acabado su canalización. Había sido cosa de una década y algunos años más, un encargo que le habían encomendado extrañamente parecido al que estaba viviendo en la realidad; Cazar a un repudiado hombre que hacía rituales impuros en las ruinas de un antiguo templo de otra generación, y que según informes había estado usando una daga ritual de un metal de varios colores. Sobek aceptó el encargo por el simple hecho de que aquel acero le estaba llamando la atención, pues en esas épocas los mandatos divinos que sentía se limitaban a la forja, y no más allá de la bondad o el respeto, cosa que había cambiado con los años a base de agrias experiencias. 

Fue pues a cazar a aquel hombre, cuyo nombre había perdido culpa de uno de sus rituales, en medio de una noche de luna llena, que se rumoreaba era cuando se comenzaban a escuchar los gritos de desesperación de sus víctimas más allá de la estructura desvencijada. Entró sin demasiados problemas, pues los métodos de defensa del lunático consistían en figuras talladas repulsivas y carteles pintados con sangre de cordero, nada que hiciera un obstáculo lo suficientemente digno de ser aplastado por su martillo. Cuando llegó al corazón del templo, el demente cultista estaba en medio de uno de sus rituales, tratando de engendrar gritos de dolor con las cortadas de su daga a una pobre campesina perdida, cuya voz se trastornaba por la brujería empleada. Estaba tratando de llamar a una entidad a través del pánico de la mujer, cosa que no había horrorizado lo suficiente al dracónido como para despertar su enfado, hasta que vio la pila de cuerpos al lado del altar, todos maltratados del mismo modo, con la misma expresión fallida de dolor sin resultados.

Aquel energúmeno había estado intentado el mismo ritual desde hacía ya varios ciclos lunares, y creía que su fervorosa insistencia haría que "algo" le hablara por medio de su inepto ritual. El enfado del dracónido explotó al ver los pocos escrúpulos del adefecio de piel pálida, seguramente convertida así por su contacto con los ritos prohibidos. Sin dilatación alguna, el Paladín arremetió con una furia que jamás había sentido antes, encendiendo su martillo y sus ojos en un resplandor fulgurante, que atravesaba las rendijas de la piedra fragmentada, de las cuencas negras del cultista, quien lo último que vio fue a una figura enorme, escamada y brillante reducirlo a polvo con un castigo fatídico, sin tiempo de arrepentirse. 

Esa noche no quedó rastro en el mundo del vil monstruo, pues hasta su daga (que era enrealidad de un color oscuro, y brillaba de colores con el pánico de sus víctimas) había sido aplastada y reducida a menos que cenizas. La pila de cuerpos fue incinerada en fuego santo exhalado desde la garganta de Sobek, en pos de darles un descanso purificado luego de haber sufrido tales atrocidades físicas y espirituales. El convertido dracónido no volvió al monasterio donde le habían encomendado la tarea, su mente había cambiado radicalmente ese día, había conocido al odio y a la furia por primera vez. No creía que un par de monedas dejaran satisfecha su consciencia, sus ojos no podrían limpiarse ni con la flama divina que lo había poseído, y su sentido de la justicia se había expandido como una hoja de metal al someterse a la salvaje llama de su corazón impactado. Había cambiado de ser un entusiasta metalúrgico a un protector del deber, la justicia y la meta de que aquella arma que le había encomendado su Señor, fuera para eliminar del mundo a los paganos, a los sucios que esparcían el dolor por el mundo. 

 

 

 

Notas de juego

Pues eso, tiro detectar mal, que si no leí mal no tengo que tirar nada xD.