Partida Rol por web

Las sombras del pasado (+18)

02. El juicio de Fuller.

Cargando editor
06/06/2017, 13:43
Lady Selyse

 

Lady Selyse se levantó de nuevo.  Acomodó sus manos encima de su falda de bordado impecable y dijo:  Yo, por mi parte, me opondría a un juicio por combate.   No es una situación de "su palabra contra la de ella"  (que era lo que había dado origen a esa tradición nobiliaria).  Creo que tenemos evidencia suficiente para afirmar que se trató de un claro intento de violación, con la violencia previa ejercida ya sobre la dama Vanesha en una situación de ira y furia descontrolada.   Si por alguna extraña razón del destino, este despreciable ser llamado Fuller lograra triunfar en armas sobre el campeón de Vanesha, doble afrenta haríamos frente a la Justicia, al decir, al menos formalmente, que no fue culpable cuando realmente lo es. 

Reitero mi sugerencia de castigo ante nuestro Lord Kevan: Muro; siempre hecha ésta sugerencia en deferencia hacia su estamento y siempre leal ante el Rey -diciendo esto por las miradas que había recibido anteriormente.  Que las leyes y conjunto de derechos que aspiramos a que nos rigan deberán en principio provenir de la autoridad de estos, en diálogo con la gente de Poniente, pues de no hacerlo está el riesgo de socavarnos nuestra base actual de orden y estabilidad.  

La mujer había estado leyendo demasiado sobre el pacto social que regía a las "Ciudades Libres" y sus gobiernos extraños, y algunas cosas no sabía bien como decirlas, pero pues al menos lo intentaba a su mejor saber y entender.

 

Cargando editor
06/06/2017, 17:30
Vanesha

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Algo le estaba ocurriendo a Lady Selyse. Cuanto más hablaba, más ponía en entredicho al Lord. Ya había decantado el veredicto y disfrazado de petición la sentencia. Privilegio aquello exclusivamente del señor de las tierras, del lord. Seguramente muchos lores se dejasen aconsejar por sus más allegados o consejeros de más confianza. Pero de cara a la galería, debía ser algo privado, de desconocimiento o poco evidente ante la plebe. Un lord frágil de carácter, que atendía al consejo de su esposa o consejeros de una manera tan evidente podía interpretarse como debilidad. Las señoras, de hablar, solían hacerlo después del Lord, para reafirmar sus palabras  y mostrar unidad, o simplemente callar.

La posible reacción de Lord Kevan era todo un misterio para ella. No sabía tampoco como interpretar los susurros que habían intercambiado el Lord de la casa con los padres de su señora esposa. Sin duda aquella variable, aquel proceder de Lady Selyse durante el juicio, no había pasado por la mente de Vanesha, por más que hubiese tratado de discernir todas las posibilidades.

Pero tampoco había nada más que pudiese hacer al respecto, más que esperar atónita al desenlace como hasta el momento, en silencio.

No sabía si quizás Lady Selyse clamaba más protagonismo dentro de las decisiones que atañían a la casa. Eso parecía al menos. Pero de ser así, Vanesha pensaba que no podía estar haciéndolo peor. La tradiciones eran un enemigo muy poderoso. Lo que estaba haciendo sería como tratar de derribar el Muro a cabezazos. Y lo peor es que todo el mundo estaba observando...

Cargando editor
06/06/2017, 22:23
Lord Kevan Falcon

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Lord Kevan después de intercambiar una mirada con Berta y obtener su asentimiento mostrando la copa que lleva ahora en las manos, se gira hacía su esposa.

Selyse, – el tono es tan cortante como el mandoble ancestral que esta depositado delante suyo, – ¿te escuchas lo que dices? Te opones al juicio por combate como si estuviéramos en Dorne y yo fuera solamente tu consorte. Al instante siguiente dices que me tratas con la deferencia a mi estamento para acabar de hablar de lealtad al Rey. – Entrecerrando los ojos. – No, tu no eres la Selyce con la que me case, tengo que coincidir con tus padres. ¿Que te ha pasado? Bebiste demasiado acaso en la celebración de tu día del nombre.

Berta aparecé al lado de Lady Selyce tendiéndole una copa, detrás de ella esta Anna con Evelyn y Janet.

Continua con su voz autoritaria pero un ligera sombra de pesar. – Bebe la medicina y haremos todo lo posible para que te restablezcas.

Cargando editor
06/06/2017, 23:29
Normand Ferragut

Toda esta situación estaba tentando a la buena voluntad de los Dioses. Su juramento, hecho apenas el día de ayer, por más formalidad que fuera, significaba que apoyarían a Lady Selyse pasara lo que pasara, y en ese momento, parecía estar necesitando apoyo. Pero él no podía hacer nada, al menos no sin la venia de su padre. Lo miró desde su asiento. El gesto que hizo con la cabeza, hacia Lady Selyse, intentaba que pudiera expresar algo de todos los pensamientos que estaba teniendo el Heredero. Si llegaba a asentir, él tendría que dar algunas palabras en apoyo de su hermana. No sólo por el lazo de sangre que los uniría por siempre, sino también por el juramento que habían realizado.

Si él lo hacía, no quedaría mal su padre, mientras que a su vez, estaría el apoyo prometido. Ojalá pudiera expresarle todo esto a su padre, pero esperaba que la situación fuera lo suficientemente elocuente como para que aquel simple gesto con la cabeza pudiera ser interpretado. Elevó una corta plegaria a los Antiguos Dioses.

Cargando editor
07/06/2017, 00:06
Vanesha

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Al ver a Berta con aquella copa, Vanesha creyó hacerse a la idea de lo que podía haber ocurrido. Seguramente aquel recipiente contuviese una mezcla con hierbas de Berta que adormecerían o atontarían a la señora para que así pusiese fin a aquel recital que nunca debía haber salido, de tener que salir, del ámbito privado. El cambio de pesar a firmeza de Lady Nancy cuando Lord Kevan susurró algo tanto a ella como a Lord Steven, no hacía más que reforzar su creencia. Anna y las sirvientas se encontraban ahí, casi con total seguridad, para llevar a Lady Selyse a su alcoba, en el momento que la medicina de Berta hiciese efecto. 

De ser como Vanesha pensaba, aunque un poco justo, suficiente para colocar a cada uno donde debía estar y apaciguar rumores y malas lenguas... Al menos de los poco avispados o intuitivos. El que no parecía tampoco muy sobrado de intuición era el heredero y padre de Joanna. Aquel gesto visible hacia Lord Steven y expresión después, como la de un perro de caza que espera que su amo le de la señal para ir a recoger la pieza, mostraban su afán contenido por intervenir de alguna forma. Y no precisamente para apaciguar aquello, aunque seguramente su intención lo fuese. 

-¿De verdad no se está dando cuenta de lo que está ocurriendo y de que sus padres y Lord Kevan ya están tratando de mitigar lo ocurrido?- Pensó para sí misma, al principio con cierta incredulidad. Aunque casi al instante, ya fue capaz de sacar la parte positiva de aquello. Si él no se había dado cuenta, puede que muchos otros no lo hubieran hecho. Y aquello era lo importante. Ni la historia pasada de la Casa , ni la situación en el Valle, eran lo más adecuadas en aquel momento para que aquellas ideas y actos fuesen aireados.

Cargando editor
08/06/2017, 12:57
Lady Selyse

 

Mi Lord Falcon, nunca me cruzaría el pensamiento de que nadie tuviera más autoridad aquí que usted en esta sala.  Eso no sería enfermedad, sería locura.  Usted solicitó nuestra opinión, y fue lo que humildemente le he dado, con toda mi sabiduría acumulada gracias a estarlo acompañando a usted tantos años.   -Agradeció y rechazó la copa traída con un gesto amable.  

Se que tomará en cuenta mi opinión, y la de todos, para tomar en su momento su mejor y más ponderada decisión.  Negarle mi aporte sería desobedecerlo y quitarle algo que quizá le fuera útil.  

Por eso lo dije.  Se que en el juicio de combate se mezclan dos deseos, uno bueno, que es dejar que los dioses hablen por medio de su apoyo a los hombres, y otro perverso, que es el insano placer que produce ver una lucha a muerte desde la segura comodidad de una silla donde uno no está en peligro.  Si eso ya lo está tomando en cuenta, como estoy segura que lo hace, no debo más decir.  -Se sentó, mirando a todos con serenidad, para que la vieran que efectivamente estaba en posesión de sus 5 sentidos. 

 

Cargando editor
13/06/2017, 18:20
Alia

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Lady Selise comprendo vuestra postura y vuestra preocupación porque por alguna casualidad esta rata ganase al campeón de Lord Kevan, pero si mandamos al acusado al muro o simplemente le ejecutamos siempre quedara en duda la honra de Vanesha por eso me veo obligada a insistir en mi sugerencia de un juicio por combate pero como tan bien sabemos ambas usted y yo, esta decisión recae en Lord Kevan y sea cual sea esta se ha de respetar.

Cargando editor
13/06/2017, 22:56
Lord Kevan Falcon

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

El Maestre Gilbert hace intención de levantarse y rápidamente es ayudado por Berta y la doncella Janet. Poco a poco va avanzando sostenida por ellas en dirección a Lord Kevan. Una vez llega a su lado habla unos minutos con Lord Kevan en susurros.

Después de hablar con su maestre Lord kevan alterna las miradas de Segadora el mandoble ancestral de la Casa Falcon y Fuller esas miradas parecen hacer reaccionar a Fuller.

Cargando editor
13/06/2017, 23:04
Fuller

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Fuller comienza a intentar hablar pero no logra ningún resultado inteligible. – Mi, mi m… señ… yo,yo… tengo de…

Comienza a frotarse las manos por la car completamente nervioso mientras hace ostensibles intentos de calmarse. Lagrimas de desesperación comienzan a resbalar por sus mejillas.

Cuando los soldados comienzan a sujetarlo pensando que caería para sorpresa para todos se logra rehacer comenzando a hablar de forma clara.

Lord Kevan, no quiero un juicio por combate. No puedo comparame a Cedrkic con el arma que elegiría él. – Incluso añade un tono de desprecio.

Mirando a Lord Kevan. – Milord desde hacé milenios los condenados pueden elegir ser enviados al Muro. Expreso aquí y ahora que se me envié.

- Tiradas (2)
Cargando editor
13/06/2017, 23:25
Fuller

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Fuller comienza a intentar hablar pero no logra ningún resultado inteligible. – Mi, mi m… señ… yo,yo… tengo de…

Comienza a frotarse las manos por la car completamente nervioso mientras hace ostensibles intentos de calmarse. Lagrimas de desesperación comienzan a resbalar por sus mejillas.

Cuando los soldados comienzan a sujetarlo pensando que caería para sorpresa para todos se logra rehacer comenzando a hablar de forma clara.

Lord Kevan, no quiero un juicio por combate. No puedo comparame a Cedrkic con el arma que elegiría él. – Incluso añade un tono de desprecio.

Mirando a Lord Kevan. – Milord desde hacé milenios los condenados pueden elegir ser enviados al Muro. Expreso aquí y ahora que se me envié.

Tras decirlo mira con satisfacción a Vanesha como si hubiera logrado ganarla.

Cargando editor
14/06/2017, 03:26
Vanesha

Vanesha alisó su faldón tras la intervención de Fuller y lo miró con calma. Rodeada de sus seres queridos y de aquellos dispuestos a protegerla.

-Debo entender, señor Fuller, al igual que los presentes, logro imaginar, que por vuestras palabras no solo despreciáis la ley sino la fe de los Siete, del que mana el derecho a un juicio por combate, y del que son testigo los dioses.- 

Aclaró con de forma despectiva hacia Fuller, que cada vez que emitía un sonido era para mostrar con más convicción la clase de ser que era.

-Y por otro lado voy a permitirme la licencia de corregiros. Desde hace milenios, los condenados NO pueden elegir ser enviados al Muro. Pueden solicitar la clemencia al señor para poder ser enviados allí, como muestra de misericordia, normalmente precedida de alguna, aunque sea alguna, muestra de arrepentimiento.-  Dejó un instante de silencio. Obviamente durante el juicio, ni un solo amago de una actitud parecida al arrepentimiento se había visto. Nerviosismo y lágrimas ante una inminente sentencia sí.

-Pero en cualquier casosi Lord Kevan tuviese a bien otorgaros dicha clemencia, bien recibido será por mi parte, pues al menos sabré que estaréis muy lejos. Y con suerte, las gélidas temperaturas o un salvaje de más allá del Muro acabará con vuestra existencia.- Expresó sin miramiento.

-Y sabed también señor Fuller, que no sería descabellado pensar que durante vuestro trayecto al Muro, intentáseis escapar, pues sería lógico viniendo de alguien tan indigno, carente de honor y despreciable como sois. Seguramente os ayudarían vuestros compañeros y compañeras fugados, pues de la misma calaña son. Pero aún así satisfecha me quedaría, pues habría certeza de que tendríais que pasar el resto de vuestros días viviendo como un animal, un fugitivo escondiéndose entre maleza y barro. Pues cualquier señor o caballero, de veros, colgaría vuestra cabeza en lo alto de una pica para ser devorada por las alimañas.-

Asintió con convencimiento, para volver a hacer un gesto de saludo a Lord Kevan. Tal vez disculpa por tan abrupta intervención.

 

Cargando editor
14/06/2017, 17:33
Lord Kevan Falcon

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Lord Kevan miro con una mirada aun mas gélida si cabe a Fuller mientras le decía. – Te ratificas en pedir ser enviadlo al Muro como creo que te debió proponer Lady Selyse. – La mirada a su esposa aun es mas gélida si cabe.

Fuller esta vez no tiene problemas para articular las palabras. – Si mi señor, pido ser enviado al Muro. – Las palabras denotan cada vez mas confianza.

Lord Kevan sonríe, una cosa que prácticamente nadie le ha visto hacer desde que ocupo el cargo de Lord. – ¡Thomas! – Ordena con su voz de mando mientras cierra su mano derecha como si sujetara alguna cosa. Este asiente y aferra con sus brazos a Fuller para inmovilizarlo y los dos soldados que flanquean al preso inmediatamente después lo agarran de los brazos también.

Un murmullo de extrañeza por la acción de los soldados en cumplimiento de la orden de Lord Kevan se extiende por toda la sala. Finalmente tiene que ser el mismo Lord Kevan quién, golpeando en la mesa con su puño, lo acalle. Poco a poco vuelve el silencio aunque se ve forzado a mirar fijamente a varios de los mas locuaces.

Una todos en silencio Lord Kevan dicta su sentencia. – Fuller, los dos sabemos perfectamente y todos los presentes, puede que con una única excepción, que has deshonrado a la Casa Falcon con tu actitud al intentar abusar de Vanesha. No estoy dispuesto a consentir que vuelvas a hacerlo y tomaré las medidas necesarias para hacerlo aunque primero se te privara del arma de la cual acabas de mostrarte tan jactancioso.

Un sudor frio comienza a recorrer a Fuller que mira a Lady Selyse como única esperanza al rehuir su mirada otros a los que acaba de requerir ayuda.

Después perderás la lengua así no podrás inventar historias para conseguir jarras de cerveza mientras difamas nuestros nombres allí en el Muro.

Lord Kevan se levanta empuñando Podadora todavía en su funda mirando alternativamente a todos los asistentes. – Si hay alguien que quiera compartir su destino sólo tiene que pedirlo o proclamar su inocencia. Si por cuestión de su sexo no puede ser enviada al Muro lo será a las Hermanas Silenciosas pero sin lengua para que no tenga dificultades para superar la prueba del silencio.

Mirando a la mayordoma. – Anna dar las ordenes oportunas para que se monte una mesa con maderas viejas un palmo dentro del agua en la playa donde Berta se ocupara de ejecutar esta parte de la sentencia, no quisiera que muriera desangrado o por una infección. Su sangre no mancillara las tierras de nuestra Casa ni las del Valle y las maderas serán quemadas a continuación.

Después busca un nuevo rostro en la mesa antes de continuar. – Capitán Paterson, mientras Berta dictamina que Fuller esta en condiciones de viajar alistar vuestro navío la Sharra, para transportarlo hasta Guardiaoriente del Mar. Llevaréis también provisiones para la Guardia de la Noche como compensación por tener que quedarse a Fuller.

Vuelve a pasear su mirada por la sala sin soltar su mandoble ancestral en busca de muestras de discrepancia con él y apoyo a Fuller entre los presentes.

Los que huyeron al conocer lo ocurrido desde este momento quedan sentenciados a cien latigazos ademas de su destierro de nuestras tierras. Las posesiones que tengan pasaran a ser de quién los entregue que también podrá quedarse sus ropas siempre que los cubra con alguna pieza para preservar la moral.

Fuller desencajado de terror se queda mirando a Lady Selyse. – He hecho lo que me habéis pedido y os he servido siempre lealmente. ¡Os lo imploro dejarme seguiros sirviendoós! Siem...uggg.

Heidi acalla sus palabras con un pañuelo una vez ya dictara la sentencia tras recibir una mirada aprobatoria de Lord Kevan.

Cargando editor
17/06/2017, 22:26
Lady Selyse

Lady Selyse miró de una forma aprobatoria a su marido.  Había escuchado sus palabras, y luego las de otros, y había decidido en el justo medio, tanto justo como medio.  Su reputación como líder fuerte, defensor de la gente de sus tierras, implacable con los que les hacen daño, cuidando que no difamen, que no dañen más los criminales, a la vez que apoyando la defensa del Norte y el resto de los reinos con poblar el Muro.  Asintió, reconociéndole fuerza y sabiduría.  Y, al llamar a la curandera, un toque de compasión y sentido común.   Era el hombre del que se había enamorado, cambiado por el tiempo y las circunstancias y responsabilidades, si, pero sus líneas esenciales eran las mismas, Selyse lo veía.  Seguiría con él, de verdad con él, no como las parejas que se distancian pero las normas y ventajas los hacen seguir juntos, sino verdaderamente con él. 

Un juicio justo.  -dijo para que la gente oyera su aprobación y respaldo además de verlo en su mirada.  Se quedaría acompañando a Lord Kevan mientras la sentencia se llevaba a cabo y las formas fueran correctas.   

Al final, su mirada fue hacia Vanesha.  Y como tú, todas las mujeres han de estar seguras en nuestras tierras.  Nuestra promesa va en ello. 

Miró con orgullo a Lord Kevan.  Él era el respaldo de esa promesa.  Sus hijos deberán crecer y ser como el.  

Cargando editor
19/06/2017, 15:38
Vanesha

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Vanesha atendió al veredicto de Lord Kevan y al comentario de su esposa. Se mantuvo neutra cual espectador a ambos mensajes, o al menos lo intentó. Y de guardarse alguna emoción, como dictaba la etiqueta, era más probable que fuese de agrado que disconformidad.  Observó y escuchó, las últimas palabras de Fuller, las cuales fueron ahogadas en tela, para volver a dirigir su mirada hacia Lord Kevan, aún expectante a sus palabras o a una posible conclusión del juicio.

Cargando editor
19/06/2017, 18:03
Lord Kevan Falcon

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Ha medida que pasa el tiempo aunque casi nadie abandona la sala los murmullos van aumentando lo que nunca le ha gustado y menos en los días como hoy.

Lord Kevan corta el incremento de los murmullos golpeando la mesa con el pomo de su arma. – Silencio, el juicio a finalizado y cuando este todo listo Berta procederá a hacer su parte de la sentencia. Podéis abandonar ya la sala.

Esta se va vaciando rápidamente mientras Thomas con sus hombres rodean a Fuller para evitar que nadie se ponga en contacto con él o le clave alguna hoja envenenada. Cuando han salido prácticamente todos lo sacan pero ahora en lugar de su actitud a la entrada se mueve espasmódicamente intentando soltarse de los soldados. De las cocinas aparece corriendo Janet con una cuerda con la que le atan los pies lo que facilita su traslado ya que no tienen que ir esquivando sus patadas.

Cargando editor
19/06/2017, 21:29
Joana Ferragut

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Intentando averiguar si la sentencia es o no, de su agrado, Joana se agarró al brazo de su hermano, medio ida por la impresión causada por el juicio y su resultado. Sharra, la gatasombra, les seguía muy cerca, girando de vez en cuando la cabeza para mirar en la dirección del reo, aunque claramente más calmada y tranquila, que cuando el juicio se celebraba.

Reposando su cabeza sobre el hombro de su hermano, se dejó llevar fuera del salón. Le susurró algo a su hermano al oído.

Cargando editor
19/06/2017, 21:34
Joana Ferragut

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Intentando averiguar si la sentencia es o no, de su agrado, Joana se agarró al brazo de su hermano, medio ida por la impresión causada por el juicio y su resultado. Sharra, la gatasombra, les seguía muy cerca, girando de vez en cuando la cabeza para mirar en la dirección del reo, aunque claramente más calmada y tranquila, que cuando el juicio se celebraba.

Reposando su cabeza sobre el hombro de su hermano, se dejó llevar fuera del salón. Le susurró algo a su hermano al oído.

—¿Os importaría venirme a buscar antes de que se lleve a cabo el castigo de Fuller? Creo que necesito asimilar todo esto un momento, y quizás cambiarme de ropas para el evento.—

Cargando editor
19/06/2017, 21:59
Stuart Ferragut

Tarde del día 19 del octavo mes del año 298.

Stuart te sujeta sin ninguna objeción pasando su brazo por por debajo del tuyo para sostenerte disimuladamente si hacé falta. Siempre habéis estado muy unidos y os habéis apoyado mutuamente.

Claro que si, te recomiendo una capa con capucha por la humedad. – Sonriéndote afectuosamente. – Es eso lo que te preocupa, ¿no?

Cargando editor
19/06/2017, 22:01
Derek Falcon

el juicio por fin ha terminado, aunque para mí la condena fue muy blanda, parece que preferian que fuera al muro a morir lentamente, la gente parece que por fin se pone en marcha y empieza a salir, con la mirada busco al jefe de cazadores, a los pocos segundos lo veo y me acerco tranquilamente donde esta él. hola, buenas me gustaría hablar contigo un momento quisiera preguntarte algunas cosas, pero mejor salgamos fuera

Cargando editor
19/06/2017, 22:35
Normand Ferragut

Normand reprimió una leve sonrisa. Su cuñado, una vez más, demostraba una gran labia, autoridad y justicia. Era un orgullo tener a ese hombre como señor. Escuchó atentamente cada palabra, y cuando la gente comenzó a dispersarse por orden de Lord Kevan, él también lo hizo dándole el brazo a su esposa para que caminaran juntos.

Delante de ellos salían sus dos hijos. Joana parecía cabizbaja, pero su hermano siempre había sido un sostén para ella. Sólo esperaba que si él no estuviese, pudiera confiar no sólo en sus padres, sino también en sí misma.

-Creo que ha hecho bien...- le dijo Normand a su esposa -Ha sido lo más justo. Si lo deseas, puedes retirarte, no es una obligación que seas testigo de su castigo- no estaba realmente seguro de si ella querría o no asistir, pero deseaba dejarle en claro que él apoyaría su decisión.